Nos dieron una paliza y después nos obligaron a tirarnos al Riachuelo

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La Plata, miércoles 8 de septiembre de 2004
Los dos chicos estaban con
Ezequiel Demonty la noche en que
sucedió todo. Y sus testimonios fueron coincidentes: contaron que fueron golpeados por policías de la comisaría 34ª y luego obligados a tirarse a
las aguas del Riachuelo.
Bien temprano, Julio Ismael Paz reveló ante el Tribunal que lleva adelante el juicio oral por la muerte de Ezequiel, que pudo salvar su vida al agarrarse de una rama. “Nos dieron una
paliza y nos obligaron a tirarnos al
agua”, aseguró en su relato.
El joven acusó a los policías en
una dramática declaración. “Le dieron un culatazo, lo amenazaron y lo
empujaron”, explicó. “Negro, metete
porque te mato”, fue la frase que le
escuchó decir a uno de los efectivos
antes de obligar a Demonty a tirarse
al Riachuelo.
Además, dijo que al ser detenidos
había “cerca de una docena” de policías, aunque no vio bien porque tenía
“un miedo bárbaro”.
Paz añadió que cuando los policías los hicieron subir a los patrulleros
y se los llevaron pensó que se trataba de “una joda”, y que “jamás” imaginó que iba a suceder lo que final-
CASO DEMONTY: EL JUICIO
”Nos dieron una paliza
y después nos obligaron
a tirarnos al Riachuelo”
Los dos chicos que estaban con Ezequiel cuando se ahogó, complicaron la situación
procesal de los nueve efectivos acusados. “Lo empujaron dos policías”, acusó uno de ellos
binspector Gastón Somohano, los
sargentos Luis Antonio Gutiérrez y
José Luis Martínez, el cabo primero
Luis Emilio Funes, el cabo Sandro
Esteban Granado y los agentes Jorge
Ramón Solís, Maximiliano Gastón
Pata y Alfredo Ricardo Fornasari.
Los tres chicos fueron detenidos en
la madrugada del 14 de setiembre de
2002. Venían de bailar. Y estaban
frente a una remisería de avenida
Cruz y el pasaje La Constancia.
En ese momento llegaron los policías. “Bajaron y nos empezaron a pegar. Yo tenía un miedo bárbaro”, recordó Paz sobre el momento en que
comenzó el drama.
Por la tarde, fue el turno de Claudio
Maciel, otro de los chicos que fue detenido esa noche. El joven dijo que
Ezequiel “fue empujado al agua por
dos policías”. Y contó que también fue
obligado a tirarse al Riachuelo, pero
se salvó porque sabía nadar.
El adolescente -que tenía 14 años el
día del hecho-, recordó que dentro del
patrullero en el que lo trasladaban a
él, uno de los policías le dijo: “Ahora
van a aprender a nadar. Ahora van a
aprender qué es ser hombre, negros de
mierda”.
”Hicieron una ronda,
nos dieron una paliza
y después, uno por
uno, nos obligaron
a tirarnos al agua”
“Ahora van a aprender
a nadar, a aprender
qué es ser hombre,
negros de m...”, les
habría dicho un policía
mente ocurrió.
Luego contó qué hicieron los policías al llegar al Riachuelo: “Hicieron
una ronda, nos dieron una repaliza y
después, uno por uno, nos obligaron
a tirarnos al agua”, manifestó.
De acuerdo con el relato de los sobrevivientes, primero arrojaron a Demonty, luego al menor y por último a
Paz, apodado “El Pelado”.
Paz aseguró que él salvó su vida al
tomarse de una rama que había en el
Riachuelo, pero Ezequiel murió
porque no sabía nadar.
El relato se tornó por momentos
tenso, a punto tal que el tribunal resolvió pasar a un cuarto intermedio
cuando Paz reconoció que estaba
“muy nervioso” por lo que estaba
contando.
A un costado estaban todos los imputados por el crimen de Ezequiel: el
inspector Gabriel Barrionuevo, el su-
“Nos hicieron bajar (los policías),
formaron una ronda, nos pusieron en
el centro a los tres y nos empezaron a
pegar y patear. No hubo tiros pero todos sacaban sus armas y nos golpeaban con ellas en la cabeza y nadie se
opuso a ello”, recordó el chico. Luego
afirmó que dos policías tomaron a Demonty, lo llevaron hasta la orilla del
Riachuelo y lo empujaron al agua,
donde lo vio por última vez mientras
“nadaba para atrás, de espalda, hacia
el puente”.
“A mí me agarraron de los hombros,
me llevaron a la barranca y me empujaron”, dijo sobre cómo fue arrojado por
los policías, a quienes escuchó gritar:
“Nadá porque si no, te vamos a matar”.
Al declarar como testigo en el juicio, Maciel coincidió con lo que había
dicho más temprano Julio Ismael Paz,
acusando a los policías por la muerte
de Ezequiel.
Buenas noticias. El testimonio de los amigos de Ezequiel fue considerado “clave“ por la querella
Mañana declara un testigo clave
El juicio por el
crimen de Ezequiel
Demonty continuará
mañana con una
serie de testigos,
entre ellos, un policía
que en la causa
declaró que en la
comisaría 34ª escuchó
a sus compañeros
al regresar del
operativo en el que
detuvieron al joven y
dos amigos que les
habían enseñado a
nadar.
Somohano
cree en su hijo
El ex jefe de la policía
bonaerense, comisario general retirado Osvaldo
Somohano,
aseguró durante el juicio que
su hijo, uno de los imputados
por el hecho, es inocente y
víctima de una interna dentro de la seccional para la
que trabajaba. “Es una locura
todo esto. Mi hijo no tuvo
nada que ver, también es víctima de una mala instrucción“, dijo.
Crimen por sobredosis en el albergue
Cinco policías, un conserje y una
mucama declararon ayer en la primera jornada del inédito juicio oral
en el que se juzga por tercera vez,
en el fuero federal platense, a un
presunto narcotraficante acusado
por el crimen de una adolescente de
16 años que falleció -en octubre de
1997-, por una supuesta sobredosis
de droga en un hotel alojamiento.
En primer término, prestaron
testimonio los policías que participaron del procedimiento en el
hotel, donde se sospecha que el im-
putado Gabriel Lobato (35) habría
suministrado cocaína y whisky a la
menor.
Los efectivos señalaron que cuando llegaron al hotel el acusado no se
encontraba, al parecer porque había
trasladado a la chica a una sala médica. La víctima falleció a poco
de ser derivada, producto de una
“intoxicación masiva”.
Los policías dijeron que en la habitación no había rastros de estupefacientes ni signos de violencia.
Aunque hallaron restos de whisky
en una petaca de vidrio, una lata de
cerveza y una de coca cola.
Luego declararon la mucama del
albergue que indicó -al igual que el
conserje-, que Lobato y la chica estuvieron diez minutos en la habitación y que la joven aparentaba unos
20 años de edad.
El juicio que se realiza por tercera
vez en los tribunales de 8 y 50, continuará hoy a las 8,30 con el relato
de los peritos que intervinieron en
la causa. A cargo del debate está el
Tribunal federal II integrado por
Horacio Isaurralde, Jorge Micelli y
Julio Román Frondizi por la secretaría de Sergio Franco. Por la fiscalía interviene el Dr. Marcelo Molina,
mientras que Lobato es defendido
por Fabián Améndola y Fernando
Burlando.
Lobato fue sometido en el año
2000 a un debate que se suspendió, mientras que en el 2002 fue
nuevamente juzgado y condenado
a 17 años de prisión, fallo que luego fue anulado por la Cámara de
Casación.
DOS MUJERES ACUSADAS
Muerte en el
cabaré: alegatos
El fiscal y la defensa darán a conocer hoy los alegatos en el juicio
oral que se sigue en el fuero penal
de 8 y 57, a dos mujeres por la
muerte de Juan Patricio Muñoz,
cuyo cuerpo apareció con un en la
sien izquierda el 26 de febrero de
1996 en el interior del cabaré
Tiempo de 122 y 42. Ambas partes
coincidirían en solicitar que se
inicie una investigación contra
el hermano de la víctima por falso
testimonio y por su presunta
participación en el homicidio.
Los forenses aseguraron que el
cadáver fue movido de su posición
original para aparentar un suicidio.