1ª SESIÓN (19/02): Introducción: ¿Qué cabe entender por filosofía medieval? El encuentro entre la filosofía griega y la religión cristiana: fe y razón. El debate actual sobre la filosofía católica medieval. ¿Puede realmente fundirse la filosofía griega con la fe cristiana? La posibilidad de una filosofía cristiana 1.- ¿Qué cabe entender por filosofía medieval? NUEVO TESTAMENTO (San Juan I, 1-14): “Έν αρχή ήν ό Λογος, καί ό λόγος ην πρός τόν θεόν, και θεός ήν ό Λογος. Ουτος ήν εν αρΧη προς τόν θεόν. Παντα δι αυτου εγενετο, και Χωρις αυτου εγενετο ουδε εν ου γεγονεν. Εν αυτω ζωη ην, και η ζωη ην το φως των ανθρωπων. Και το φως εν τη σκοτια φαινει, και η σκοτια αυτο ου κατελαβεν… Кαι ο Λογος σαρξ εγενετο και εσκηνωσεν εν ημιν” (En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba cabe Dios, y el Verbo era Dios. Este estaba en el principio cabe Dios. Todas las cosa fueron hechas por él; y sin él nada se hizo de cuanto ha sido hecho. En él había vida, y la vida era la luz de los hombres, y la luz en las tinieblas brilla, y las tinieblas no la acogieron… El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros.) (I Cor., I, 18-25) «Pues la palabra de la cruz, para los que perecen, es una insensatez; mas para los que se salvan, para nosotros, es una fuerza de Dios. Porque escrito está: “arruinaré la sabiduría de los sabios, y la inteligencia de los inteligentes anularé (Is 29, 14) ¿Dónde está el sabio? ¿Dónde el escriba? ¿Dónde el disputador de este mundo? Que, pues en la sabiduría de Dios no conoció el mundo a Dios por el camino de la sabiduría, tuvo a bien Dios por la necedad de la predicación salvar a los creyentes. Puesto que los judíos por su parte demandan señales, y los griegos por la suya buscan sabiduría; más nosotros predicamos un Cristo crucificado: para los judíos escándalo; para los gentiles necedad; mas para los mismos que han sido llamados, así judíos como griegos, un Cristo fuerza de Dios y sabiduría de Dios, pues llo necio de Dios es más sabio que los hombres, y lo flaco de Dios, más fuerte que los hombres» (Romanos 1, 19-21) «Pues, lo que se conoce de Dios se halla claro en ellos, ya que Dios se lo manifestó. Porque los atributos invisibles de Dios resultan visibles por la creación del mundo, al ser percibidos por la inteligencia en sus hechuras: tanto su eterna potencia como su divinidad que son inexcusables» 1 E. GILSON, La Filosofía en la Edad Media (13-) «[En el principio del Evangelio de San Juan] se ve aparecer toda una serie de términos y de nociones cuyas resonancias filosóficas son innegables, y en primer lugar la del Logos o Verbo (…) Esta noción griega de Logos es manifiestamente de origen filosófico, principalmente estoico, y había sido ya utilizada por Filón de Alejandría (muerto hacia el 40 después de C.) (…) una noción filosófica viene a ocupar aquí el lugar del Dios cristiano, imponiendo así al Dios cristiano una desviación primitiva que ya nunca será capaz de enderezar. El momento es, pues, decisivo; Helenismo y Cristianismo están desde entonces en contacto. ¿Cuál de ellos ha absorbido al otro? Supongamos que el Helenismo hubiera triunfado entonces (… en ese caso) una filosofía del Logos, que explica la formación del mundo por la acción de ese supremo inteligible, y que quizá incluso ve en él un principio de liberación y salvación, encuentra una secta judía que predica un Mesías, absorbe a ese Mesías y hace de él una manifestación del Verbo [es el caso del gnosticismo; por ello el cristianismo…] se negará firmemente a confundirse con ellos [… en el Evangelio de San Juan pasa exactamente lo contrario] Partiendo de la persona completa de Jesús, objeto de la fe cristiana, Juan se vuelve hacia los filósofos para decirles que lo que ellos llamaban Logos se ha hecho carne y que ha habitado entre nosotros, de tal modo que —escándalo intolerable para espíritus en busca de una explicación puramente especulativa del mundo— nosotros lo hemos visto. Decir que Cristo es el Logos no era una afirmación filosófica sino religiosa (…) la revelación cristiana misma, con anterioridad a toda especulación teológica y filosófica, no solamente legitimaba, sino que imponía semejantes apropiaciones. Esta es la razón por la cual necesariamente debía resultar de ello una especulación teológica y filosófica (…) y lo mismo es válido de las Epístolas de San Pablo (…) este alegato contra la sabiduría griega no era, sin embargo, una condenación de la razón. Subordinado a la fe, el conocimiento natural no queda excluido. Por el contrario (…en Romanos I, 19-21) San Pablo afirma que los hombres tienen de Dios un conocimiento natural suficiente para justificar la severidad eterna para con ellos (…) La tesis no era nueva, ya que se encuentra explícitamente afirmada en el Libro de la Sabiduría (XIII, 5-9), pero, gracias a San Pablo, desde ahora, impondrá a todo filósofo cristiano el deber de admitir que es posible para la razón humana adquirir un cierto conocimiento de Dios, a partir del mundo exterior» PADRE DE LA IGLESIA1 = todos los escritores eclesiásticos antiguos muertos en la fe cristiana y en comunión con la Iglesia PADRE DE LA IGLESIA2 = en sentido estricto un Padre de la Iglesia debe presentar cuatro caracteres: 1) ortodoxia doctrinal; 2) santidad de vida; 3) aprobación de la Iglesia, 4) antigüedad relativa (hasta el fin del siglo III aprox.). Cuando falta la nota d antigüedad, si el escritor ha representado de forma eminente la doctrina de la Iglesia, recibe el título de Doctor de la Iglesia. Diversos papas han ido incluyendo entre los Padres de la Iglesia a otros santos escritores hasta San Buenaventura. El Doctor de la Iglesia no es infalible ESCRITOR ECLESIÁSTICO = menor autoridad doctrinal y ortodoxia no necesariamente irreprochable 2 W. JAEGER, Cristianismo primitivo y paedeia griega [Texto 1: W. Jaeger, el primer encuentro; en: “Cristianismo primitivo y paideia griega 1961] (10-14)«Originalmente el cristianismo fue un producto de la vida religiosa del judaísmo posterior (…) el kerygma cristiano no se detuvo en el Mar, ni en la frontera de Judea, sino que superó su exclusividad y su aislamiento local y penetró en el mundo circundante, dominado por la civilización y lengua griegas [… como percibió G. Droysen] sin la evolución postclásica de la cultura griega habría sido imposible el surgimiento de una religión cristiana mundial […se produjo simultáneamente] la cristianización del mundo de habla griega… y la helenización del cristianismo (…) Con el uso del griego penetra en el pensamiento cristiano todo un mundo de conceptos, categorías intelectuales, metáforas heredadas y sutiles connotaciones [… ¿Por qué asimiló el cristianismo tan rápidamente l griego? Porque:] 1) el cristianismo era un movimiento judío y los judíos estaban ya helenizados en tiempos de San Pablo (…) 2) fue hacia esta porción del pueblo judío hacia la que se volvieron en primer lugar los misioneros cristianos. Fue esa parte de la comunidad apostólica de Jerusalén llamada “helenistas” en el cap. VI de Los Hechos de los Apóstoles, la que tras el martirio de su jefe, Esteban, se dispersó por toda Palestina e inició las actividades misionales (…) todos llevaban nombres griegos (…) Con el uso del griego penetra en el pensamiento cristiano todo un mundo de conceptos, categorías intelectuales, metáforas heredadas y sutiles connotaciones. La explicación obvia de la rápida asimilación de su ambiente que efectúan las primeras generaciones cristianas es, desde luego: 1) el que el cristianismo era un movimiento judío y los judíos estaban ya helenizados en tiempos de San Pablo; no sólo los judíos de la Diáspora sino también, en gran medida, los de Palestina misma; y 2) el que fuera precisamente esta porción helenizada del pueblo judío hacia la que se volvieran en primer lugar los misioneros cristianos. Fue esa parte de la comunidad apostólica de Jerusalén llamada “helenista” en el capítulo VI de los Hechos de los apóstoles, la que, tras el martirio de su jefe, Esteban, se dispersó por toda Palestina e inició las actividades misionales de la generación siguiente. Al igual que el propio Esteban (Stephanos), todos llevaban claros nombres griegos: Felipe (Philippos), Nicanor, Prócoro, Timón, Pármenas, Nicolás (Nikolaos), y en su mayoría pertenecían a familias que habían sido helenizadas hacía una generación o más El autor de los Hechos lo vio claramente cuando relata la visita del apóstol Pablo a Atenas (…) y su sermón en el Areópago ante un auditorio de filósofos estoicos y epicúreos (Hechos XVII, 17 y ss.)» - El uso que hace San Clemente Romano a finales del siglo I de la tradición griega de defensa de la Homonoia (concordia) para aleccionar sobre la necesaria unidad en la Iglesia. (30) «ekklesia, término que significaba originalmente la asamblea de ciudadanos de una polis griega» Fue muy bien acogida por el individualismo griego la doctrina de Pablo (1 Corintos XII 7) según la cual es Espíritu Santo se derrama en cada individuo según pluralidad de carismas para el bien común de la Iglesia. (31-39) «Del importante documento histórico de San Clemente surge ya todo un sistema de virtudes cristianas ; su concepto de cristianismo está más cercano a la moralidad 3 estoica que el espíritu de San Pablo en su Carta a los Romanos (…) en la Carta clementina hay una concepción de la Iglesia que está en el polo opuesto de la de los Corintios (…revela) la convicción fundamental de que la religión cristiana —si quiere formar una verdadera comunidad— requiere una disciplina semejante a la de los ciudadanos de un Estado bien organizado, penetrados por un mismo espíritu común a todos (…) se da por supuesto en la carta que la anarquía de los corintios requiere tal amonestación pública, pero también se da por supuesto que sólo la Iglesia de Roma tiene, dentro del mundo cristiano, la autoridad y el derecho a actuar como voz pública en tal caso (…) Pero, puesto que los corintios son, cunado menso en parte, personas cultas y poseen la paideia griega, San Clemente da a su hincapié en el orden cívico dentro de la politeia cristiana un doble trasfondo filosófico: el de la experiencia política y la ética social reunidas y el de la filosofía cosmológica. La paideia griega había hecho lo mismo, pues siempre hacía derivar sus reglas sobre la conducta humana y social de las leyes divinas del universo, a las que daba el nombre de naturaleza (physis)… La concepción orgánica de la sociedad adquiere en sus manos un sentido casi místico al ser interpretada a la manera cristiana como unidad en el cuerpo de Cristo. Esta idea, que procede de San Pablo, es completada por San Clemente mediante la sabiduría de la experiencia y la especulación políticas de Grecia (…) San Clemente se vuelve a la tragedia griega: … los grandes no pueden existir sin los pequeños […entre las distintas clases tiene que haber yuxtaposición, kraxis, synkraxis, sympnoia de las partes] mutua penetración… fusión … En otras palabras, la unidad de la Iglesia en la que piensa San Clemente y que defiende corresponde a ese ideal griego … si bien la religión cristiana da al antiguo concepto n nuevo espíritu enteramente propio… la herencia clásica es incorporada a la estructura del pensamiento cristiano. Esta herencia entra en la mente cristiana más tarde como algo más que como un elemento de la teología dogmática; en realidad está ya en ella desde el principio mismo en una forma muy práctica, inseparable de la vida misma (…) todo estaba permeado por el pneuma vivificador de acuerdo con la teoría estoica de la physis. La simpnoia de las partes, que los médicos habían afirmado con respecto al cuerpo del hombre, se convirtió ahora en principio del universo vivo y se convirtió en simpnoia panton. Podemos trazar la historia de esta idea desde la cosmología estoica, a través de la filosofía neoplatónica, hasta llegar a Leibniz. Y este es el concepto que usa San Clemente para ilustrar su ideal acerca de la unidad espiritual de la Iglesia (…) el ideal de un ordo Christianus … Hay un lugar y una función especial para el sumo sacerdote y su servicio, y otro para los sacerdotes, otro para los levitas y diáconos y otro para el laico» Paul VIGNAUX, El pensamiento en la Edad Media (8-) «[Para adentrase en la peculiaridad del pensamiento medieval hay que] prestar atención a la técnica de las obras de pensamiento (…y) darse cuenta de la importancia, no siempre reconocida de, de ciertos aspectos de la vida intelectual de la Edad Media: la formación de las inteligencias por la gramática y la lógica, disciplinas bastante próximas una de otra; el uso, como instrumento universal del saber , de la dialéctica, identificada con la razón misma; la aparición, por dos veces, de movimientos nominalistas. El nominalismo medieval consiste en una manera de pensar, en una estructura mental, en un cierto ritmo de descomposición del espíritu y de lo real. El nominalismo del siglo XIV es un hermoso ejemplo, un caso extremo de tecnicismo. Bajo el ropaje abstracto de las fórmulas escolásticas, bajo el común lenguaje aristotélico (… se podrá captar que) cuando los espíritus se oponían sobre la interpretación de textos aristotélicos particularmente oscuros, se encontraban en juego 4 graves problemas en la división de los intelectos: se trata unas veces de las relaciones de la criatura intelectual con su Creador, otras, del carácter pasivo, receptivo del pensamiento humano con respecto a los objetos sensibles, o, por el contrario, de la espontaneidad, de la trascendencia del alma con relación al mundo de los sentidos; o aún de la manera en que, saliendo del principio divino, nuestro ser espiritual, intelectual, se encuentra por este hecho mismo, del todo listo para volver a él [… a pesar de lo que se cree, la Edad Media nos parece] no tan alejada, y casi podríamos decir, muy próxima a nosotros; ha sido costumbre imaginársela como perfectamente orgánica, puramente armoniosa y un poco estereotipada, pero, en el fondo de su vida intelectual, encontraremos movimiento, choques, división; conflictos del orden profano con lo sagrado, un diálogo de lo humano con lo divino. Desde semejante punto de vista es desde donde percibiremos la profundidad del humanismo medieval» 2.- El debate actual sobre la filosofía católica medieval. ¿Puede realmente fundirse la filosofía griega con la fe cristiana? La posibilidad de una filosofía cristiana Heidegger [Texto 1: “Tarea y presente de la filosofía de la religión”; en GW. Bd. 60 Phänomenologie des religiösen Lebens] Son textos de lecciones de 1920/21 [la traducción es siempre mía] (75)«Si admitimos delimitarnos a la religiosidad del cristianismo primitivo, hay que constatar que se trata de un Facttum histórico. Si concebimos la estructura filosófica como un ámbito preciso y delimitado —por ejemplo, como conciencia—, entonces el factum de la religiosidad del cristianismo primitivo se convierte en caso particular, esto es, en ejemplo dentro de una esfera de posibilidades, de tipos de posibles formas de religiosidad (…) De este modo los tipos religiosos históricos son situados en una multiplicidad de posibilidades. Constituyen un material a partir del cual se crea; constituyen así una multiplicidad supratemporal (…) La actual filosofía de la religión en su planteamiento del problema hace los siguientes presupuestos, que a ella misma no le son claros: 1) la religión es un caso o un ejemplo de una legalidad supratemporal; 2) de la religión e aprehende únicamente lo que tiene carácter de conciencia §18 Fenomenología de la religión y historia de la religión (…) ¿Alcanza el modo de plantear el problema la historia de la religión el auténtico objeto de la religiosidad misma? (…) ¿Es utilizable para la fenomenología de la religión el material de la historia de la religión?... si la historia de la religión aclara la religiosidad a partir del contexto religioso, como por ejemplo a partir de la historia [Zeitgeschichte], ¿cómo se le va a reprochar que no alcanza su objeto? Lo alcanzaría en tanto que ciencia objetiva, libre de presupuestos y prejuicios, sobre la base de ese material de sentido que ofrecen las fuentes contemporáneas de todas las tendencias del presente (…) Hay que señalar también que todos los motivos para la comprensión 5 histórica son siempre despertados por la experiencia vital fáctica. La ciencia histórica tiene finalmente la tarea de aplicarlo de una manera formal y estrictamente metódica (…pero) la “exactitud del método” no ofrece por sí mismo ninguna garantía para la comprensión correcta. El aparato científico metódico —crítica de las fuentes según un método filológico exacto, etc.— puede estar perfectamente intacto, y sin embargo, la precomprensión conductora puede errar el objeto auténtico. A pesar de todo la historia moderna de la religión ofrece mucho a la fenomenología si se somete a una Destruktion fenomenológica. Sólo entonces puede la historia de la religión ser considerada por la fenomenología (…) §19 Determinaciones fundamentales de la religiosidad del cristianismo primitivo (…) Como determinaciones fundamentales introducimos en primer lugar dos: 1) La religiosidad del cristianismo primitivo reside en la experiencia vital de los primeros cristianos y es exclusiva suya; 2) La experiencia vital fáctica es histórica. La religiosidad cristiana vive la temporalidad [Zeitlichkeit] en tanto que tal §21 Presupuestos de la contemplación (…) en la comprensión fenomenológica se tiene que hacer un presupuesto [Ansatz/Vorgrieff]. Tal principio no es posible para todo contemplador ni para todo fenómeno, debe ser extraído del trato asiduo con el fenómeno (…) En este sentido, para la determinación de la religiosidad del cristianismo primitivo hemos presupuesto [los dos principios expresados antes] Estas tesis no pueden ser demostradas, sino que atestiguarse en la experiencia fenomenológica misma. Esto es algo diferente a la experiencia empírica. Las determinaciones fundamentales son, pues, hipotéticas: “si son válidas, entonces se dará para el fenómeno tal o cual cosa”… §22 El esquema de la explicación fenomenológica (…) Esquemáticamente los pasos para la explicación fenomenológica son los siguientes: 1) Puesto que el fenómeno fundamental es la experiencia vital fáctica y ésta es histórica, entonces lo primero es determinar la conexión fenomenológica como situación histórica en el modo de objetividad histórica prefenomenológica y en todo caso a partir de motivos prefenomenológicos. 2) Hay que alcanzar la realización de la situación histórica del fenómeno. Y para ello hay que: a) caracterizar la multiplicidad que tiene lugar en la situación, sin que se deicida sobre la verdadera conexión (articulación de la multiplicidad-situación); b) alcanzar la precisa situación de la multiplicidad; c) sacar a la luz el sentido primario o arcóntico (dominante); d) a partir de ahí alcanzar la conexión fenoménica. Y a todo esto hay que añadir: 1) el comportamiento fundamental de la experiencia vital personal del contemplador (fenomenólogo) debe ser desconectado. 2) La contemplación se dirige al fenómeno histórico, pero no deja en ello lo decisivo. La explicación sube progresivamente de nivel, cada vez se hace más individual, cada vez se aproxima más a la auténtica facticidad histórica (…) Tres dificultades: A) Exposición mediante le lenguaje: El lenguaje de la contemplación objetiva [Sachbetrachtung] no es originario. Hay ya en la experiencia vital fáctica una conceptualizad más originaria, sólo a partir de la cual tiene su procedencia la conceptualidad objetiva que nos es habitual (…) Simplemente no es posible alcanzar conceptos autoevidentes. (La pregunta acerca de los conceptos filosóficos ya no se ha vuelto a plantear desde Sócrates) (..) Y no se puede, sin embargo, tildar la vida de “irracional”, sin haberse aclarado sobre le sentido de irracionalidad. No se comprende ningún explicando hasta que no se ha completado su señalada conexión de sentido. Y esta complexión misma pertenece al concepto del fenómeno. El concepto filosófico tiene una estructura que es incomparable con la del concepto de cosa. B) Intrafección de una situación: … La endopatía acontece en la experiencia fáctica de la vida, es decir, se trata de un fenómeno originariamente histórico, que no puede 6 resolverse en sentido originario sin el fenómeno de la tradición. El contexto de Pablo es para nosotros hoy completamente extraño. No se trata del carácter objetivo, de la adecuación a la representación para nosotros de su circunstancia (Umwelt). Este momento no tiene en absoluto éxito, la circunstancia sólo se alcanza a partir de la comprensión de la situación de su sentido. C) La cuestión de la explicación misma: … lo propio de la abstracción teorética según actitud es que se aprehende lo abstraído como momento de una región objetiva de modo que así se gana la determinación fundamental de la región. Lo abstraído se sigue considerando al margen de aquello de lo que es abstraído; el fundamento de la abstracción es indiferente. La abstracción en tanto que tal, el tránsito del fundamentum abstractionis al abstraer no llega a una empatía [Mit-erfahrung]. De manera distinta ocurre en la explicación: cuando en la explicación se explicitan determinados momentos, aquellos momentos de sentido a los que no alcanza la explicación, no son simplemente echados a un lado, sino que el “cómo” de su penetración en lo ahora explicitado o en la dirección de sentido comprendida en la explicación está también codeterminada por la explicación misma. Y aquí cabría preguntar: ¿es posible considerar con el sentido de referencia [Bezugsinn] simultáneamente el “qué” (el contenido), aquél al que se refiere, y a la vez el cómo de la realización? Esta objeción es comprensible. Se comprenden las tres direcciones de sentido. La realización de la explicación no es ninguna consecuencia sedimentada de actos, de determinaciones aprehensivas. Tan sólo debe alcanzarse en una conexión vital concreta. Así se conllevan también “direcciones de sentido “no vistas”» Zubiri [Los problemas fundamentales de la metafísica occidental] (13-) <<Nos limitamos a lo que es Occidente respecto a este Oriente, a saber: Europa... Grecia es el oriente de Europa. Y el Occidente es justamente lo que viene en Europa después de Grecia (…) Grecia constituye permanentemente y todavía hoy la posibilidad misma de la filosofía occidental... Grecia pertenece a las posibilidades internas de la filosofía occidental (…) las ideas del mundo griego, el elenco de conceptos que el mundo griego nos ha otorgado como posibilidades intelectuales, se va a utilizar para resolver problemas completamente ajenos a la mente griega (…) [El Cristianismo ha engendrado Europa occidental aportando una nueva idea del hombre y del mundo, y esto es:] lo que los pensadores occidentales van a tratar de resolver, o por lo menos de estudiar con el elenco de conceptos recibidos del mundo griego. Grecia es el organon intelectual con el que Occidente entendió sus problemas propios. De ahí la ambivalencia radical de la filosofía occidental. De un lado tiene una situación propia. Pero de otro se piensa en buena medida a la griega [... salvo algunas excepciones (Z. cita el concepto de persona y el de existencia)] el pensamiento occidental vive del elenco de conceptos recibidos del mundo griego. De ahí que sea un problema, primero referirse a Grecia y, segundo, descubrir las modificaciones esenciales que los conceptos griegos sufren en la nueva reiteración occidental>> Benedicto XVI [Ratisbona: una invitación a la apertura de la razón] (2) <<Pienso que en este punto se manifiesta la profunda concordancia entre aquello que es griego en el mejor sentido y aquello que es fe en Dios sobre el fundamento de la Biblia [... y cita el comienzo del Evangelio de Juan] “Al principio era el logos”... 7 “Logos” significa tanto razón como palabra, una razón que es creadora y capaz de comunicarse, pero como razón [este comienzo del Evangelio de Juan es, según el Pap, “la palabra conclusiva sobre el concepto bíblico de Dios”] En principio era el “logos” y el “logos” es Dios [...y por esta razón, continúa Benedicto XVI] El encuentro entre el mensaje bíblico y el pensamiento griego no era una simple casualidad. La visión de San Pablo, ante quien se habían cerrado los caminos de Asia y que, en sueños, vio un macedonio y escuchó su súplica: “¡Ven a Macedonia y ayúdanos!” —Hechos 16, 610—, puede ser interpretada como una “condensación” de la necesidad intrínseca de un acercamiento entre la Biblia y la filosofía griega.>> (3) <<... no es sorprendente que el cristianismo, no obstante su origen e importante desarrollo en Oriente, haya encontrado su huella históricamente decisiva en Europa. Podemos expresarlo también al contrario: este encuentro, al que se une sucesivamente el patrimonio de Roma, ha creado Europa...>> (3) << La metafísica se presenta como un presupuesto derivado de otra fuente, de la que tiene que liberarse la fe para hacer que vuelva a ser ella misma.>> 8