Discurso Alumno Licenciatura Promoción 2008. Palabras pronunciadas por la alumna egresada de 4º año medio Srta. Rocío López Arévalo, durante la Licenciatura de la Promoción 2008 de Colegio CREP. Buenas tardes directivos del Colegio, profesores, familiares, invitados presentes y los más importantes, mis compañeros. Hoy marca el fin de una etapa esperada por todos nosotros, pero también el anhelado futuro, de poder realizar muchos de nuestros sueños. No importa el camino que cada uno decida tomar de aquí en adelante, pues estoy segura que cada momento vivido será recordado como intacto en nuestras memorias y en nuestros corazones. Todos estos años cada uno de nosotros escribió su propia historia mirada desde su propio punto de vista, pero todas estas historias estuvieron llenas de risas, tristezas y momentos inolvidables que hoy nos hacen ser lo que somos. Logramos querernos, entendernos y hasta soportarnos, pero siempre buscando el bien común. Y aunque todos tenemos nuestras diferencias, sí considero que somos una familia que, como todas, con defectos y virtudes, con discusiones y momentos de alegría y manifestación absoluta en el que sólo nosotros nos entendíamos y comprendíamos. Causa conmoción darse cuenta de cómo en estos años nuestros cuerpos y nuestras mentes cambiaron tanto, lo que ayer era una niñez inofensiva hoy se transforma en una realidad perturbadora llena de dificultades y de desafíos a los que no estamos acostumbrados a derribar. Lo importante es mantenernos firmes con nuestros ideales y convicciones, y aunque la sociedad y todas las autoridades del planeta nos digan que no se puede, sabemos que con esfuerzo y perseverancia todos nuestros sueños serán posibles si en nuestros corazones está la pasión con la que se deben hacer todas las cosas. Desde la persona que nos recibía en la entrada del colegio, hasta quien nos guiaba en la sala de clases, los profesores, a todos ellos agradecemos. Por enseñarnos y soportarnos cada semana, por su cariño y comprensión, y por sus mismos retos y malas caras. Sabemos que en adelante, cuando las salas estén en silencio escucharán el eco de nuestros gritos insoportables. Profesores: a cada uno de ustedes les agradecemos por su entrega profesional y por brindarnos la confianza necesaria para verter nuestros problemas y confusiones en ustedes. Pero no sólo el colegio ha sido parte importante en nuestro desarrollo, sino también nuestros padres, quienes nos han formado y se han preocupado cada uno a su manera de que no nos falte nada y de que no dejemos de soñar en la vida. Gracias por contribuir a nuestros sueños y darnos el apoyo que quizás ustedes no tuvieron: poder ser más que un profesional o un ciudadano cualquiera, ser el futuro, el verdadero futuro, no como el de hoy sino mucho mejor, aprendiendo de los errores que en la historia ya se han cometido. Y a todos mis queridos compañeros, les digo que sigan siempre lo que creen o piensan que es lo mejor para sus vidas, luchando hasta el final para alcanzar sus anheladas metas. Confíen en ustedes, porque como pude comprobar, son seres grandes que entregan mucho y que no merecen ser apagados por malos momentos o malos deseos, a lo largo de este año aprendimos más de lo que hicimos, y aunque para mucho de nosotros se manchó con enemistad, hoy que es nuestro último día podemos decir con convicción que son etapas superadas y perdonadas. Las diferencias terminaron y aunque no todos recordarán este tiempo como bueno, quiero decirles que las puertas de la felicidad están en sus corazones y en la disposición que tengan para hacer de sus vidas y de este mundo uno lleno de amor y de paz. Pues todo al final trae su recompensa, y la mía en estos años fue haberles conocido. Lo único que les puedo aconsejar es que cada etapa la miren con optimismo, y sin temer a caer, temamos no tener a nadie que nos recoja. Hoy esta etapa termina, para involucrarnos en una más complicada, con más desafíos, más responsabilidades y más entusiasmo para tener la madurez necesaria para responder a nuestra sociedad y a nuestros seres queridos. No cometamos los mismos errores, recordemos nuestro pasado para mantenernos firmes en nuestro presente. Tomemos responsabilidades y a conciencia entendiendo que cada acto tiene su fruto, así como hoy estamos recibiendo el fruto de 13 años de enseñanza. Fuerza y éxito. Los quiero mucho odiosos 2008. Muchas gracias.