ABRIENDO CANALES DESDE LA CIRUGÍA MÁS INNOVADORA HACIA LA ATENCIÓN PRIMARIA Personas que participan Dra. Mª Pilar Vela Orús, Servicio de Angiología y Cirugía Vascular. Dra. Alicia Cortazar Galarza, Servicio de Endocrinología. Dra. Concepción Múgica Samperio, Servicio de Rehabilitación. Dra. Elena Bereciartua Bastarrica, Unidad de Infecciosas. Dr. Andima Basterretxea Ozamiz, Servicio de Hospitalización a Domicilio. Dra. Ainara Larrazabal Arbaiza, Servicio de Hospitalización a Domicilio. Dra. Leire Cortón Corral, Servicio de Urgencias. Dra. Eunate Arana Arri, Unidad de Epidemiología Clínica. Dra. Begoña Vilar Achabal, Servicio de Microbiología. Comisión Unidad del Pie Diabético Dra. Isabel Ferreiro González, Subdirección Médica. Dr. Juan Luis Fonseca Legrand, Jefe de Sº de A. y Cirugía Vascular. Dra. Sonia Gaztambide Sáenz, Jefa de Sº de Endocrinología Dra. Mª Dolores de Damborenea González, Jefa de Sº de HaD. Dra. Mª Esther Pacheco Boiso, Jefa de Sº de Rehabilitación. Dr. Miguel Montejo Baranda, Jefe de la Unidad de Infecciosas. Dr. Gabriel Gutiérrez Herrador, Jefe de Sº de Urgencias. Dª Rosa Blanco Zapata, Subdirección de Enfermería. D. Alexander Zubiaur Barrenengoa, Comarca Uribe. Dª Begoña Echeguren Solachi, Comarca Uribe. D. Juan Luis Juez Senovilla, Comarca Ezkerraldea-Enkarterri. D. José Luis Domínguez Aurrecoechea, Comarca Ezkerraldea-Enkarterri. 1.- RAZONES DE INTERES QUE JUSTIFIQUEN EL PROYECTO/TRABAJO La OMS (Ginebra, 1994) define el pie diabético como: “La presencia de ulceración, infección y/o gangrena del pie asociada a la neuropatía diabética y diferentes grados de enfermedad vascular periférica, resultados de la interacción compleja de diferentes factores inducidos por una hiperglucemia mantenida”. La diabetes es la causa más frecuente de amputación no traumática de las extremidades inferiores tanto en Europa como en EEUU. Se estima que al menos un 25% de los diabéticos padecerá a lo largo de su vida alguna úlcera con gran impacto en su calidad de vida y que alrededor del 85% de los pacientes que sufren amputaciones las han padecido previamente. Las infecciones del pie son la causa más frecuente de hospitalización en estos pacientes (25%) siendo esta a menudo de larga 1 estancia. Tras la amputación de una extremidad inferior, la incidencia de una nueva úlcera o amputación contralateral a los 2 y 5 años se estima en el 50%, siempre que el paciente no haya muerto antes por complicaciones derivadas de su enfermedad. El 66% de los ancianos amputados no recuperará su vida autónoma. Pero, ¿podemos hacer algo más que estar abrumados por las cifras y compadecernos de los pacientes? Antes de la publicación de los resultados del estudio Eurodiale (año 2007) se creía que la mayoría de úlceras diabéticas eran neuropáticas, pero en este estudio se demostró que: más del 50% de las úlceras en los pies eran neuroisquémicas y más del 50% de los pacientes con úlceras tenían signos de infección. En 2005 se publicó el ensayo multicéntrico BASIL (Bypass versus Angioplasty in Severe Ischaemia of the Leg) en el que se igualaban los resultados a medio plazo de la cirugía y de la angioplastia en pacientes con isquemia crítica por patología infrainguinal. Esto, supuso una verdadera revolución en el planteamiento del tratamiento revascularizador de los miembros inferiores. Hasta entonces solo podíamos ofrecer cirugía para salvar la extremidad si teníamos vasos distales de salida y material protésico autólogo (vena safena) para realizar un bypass. Pero ahora, éramos capaces de recanalizar arterias crónicamente obstruidas. Dentro de nuestra población con isquemia crítica se estima que los pacientes diabéticos representan en torno al 60%-70%. Suelen ser pacientes ancianos con mucha comorbilidad asociada, muy alto riesgo para cirugía abierta convencional y patología sobretodo infrainguinal e infrapoplítea. La estrategia de crónicos de la CAPV pone especial énfasis en la coordinación interniveles, el empoderamiento de la enfermería, la concienciación del paciente sobre su propio problema crónico y el manejo de la enfermedad crónica en equipos multidisciplinares. La diabetes por su carga de enfermedad y sus consecuencias en los países del primer mundo, entre los que se encuadra, la CAPV, así como una de sus consecuencias fundamentales el pie 2 diabético, parecen ser candidatos idóneos para implementar dichas estrategias. Estos procesos deben ser medidos (validez interna) y deben poderse generalizar (validez externa). Por sus características el presente proyecto pretende aunar la experiencia en la práctica habitual y por su carácter eminentemente práctico, su generalización a entornos asimilables. 2.- OBJETIVOS En nuestro centro se ha planteado como prioridad estandarizar el proceso de prevención, diagnóstico y tratamiento del pie diabético agudo de forma multidisciplinar (atención integral). Se ha demostrado que implementando este tipo de Unidades que facilitan la derivación rápida al hospital, de los enfermos que lo precisan, se puede disminuir el número de amputaciones mayores por esta causa de un 82% a un 62%. Por todo ello se pretende implantar una Unidad de Pie diabético para priorizar y estandarizar el proceso de educación y prevención, diagnóstico y tratamiento del pie diabético de forma multidisciplinar, desde un paradigma de atención integral, con el fin de mejorar la calidad y la eficiencia (coste-efectividad) de la asistencia mediante la disminución del número de ingresos a través de urgencias, número de amputaciones, la estancia media; y la mejora de la calidad de vida de los pacientes. El paciente será el centro del sistema sobre el cual pivotará la asistencia. 3.- METODOLOGÍA Y ESPECIALIDADES IMPLICADAS Consideramos un equipo multidisciplinar como un conjunto de personas, con diferentes formaciones académicas y experiencias profesionales, que operan en conjunto, durante un tiempo determinado, abocados a resolver un problema complejo, es decir tienen un objetivo común. Cada individuo es consciente de su papel y del papel de los demás, y todos trabajan en conjunto bajo la dirección de un coordinador. Por otro lado entendemos por campo 3 interdisciplinario el campo de estudio que cruza los límites tradicionales entre varias disciplinas académicas o entre varias escuelas de pensamiento, por el surgimiento de nuevas necesidades o el afloramiento de nuevas profesiones. El pie diabético se trata de una patología importante, frecuente y de no fácil manejo unidisciplinar. Mediante la creación e implantación de una Unidad de Pie Diabético, con un equipo multidisciplinar e interdisciplinar (con la implicación de diferentes profesionales sanitarios) en el Hospital de Cruces, se pretende mejorar su gestión, desde el entendimiento y la colaboración entre ellos. Para ello, se ha realizado un importante trabajo en: a) la coordinación y consenso de un protocolo multidisciplinar (Anexo II), y b) su implementación integral desde la atención terciaria hasta la primaria, implicando a las Comarcas adscritas al propio hospital (Comarca Uribe y Ezkerraldea/Enkarterri). Esta coordinación pretende mejorar el manejo de estos pacientes, sobre la base fundamental de la derivación temprana y la prevención. El soporte de las actuaciones continuadas de cuidados se basa en un núcleo central organizativo multidisciplinar y multicéntrico de profesionales en red. Este núcleo central está formado por los Servicios de: Endocrinología, Rehabilitación, Urgencias, Infecciosas, Microbiología, Cirugía Vascular y Hospitalización a Domicilio. Para conseguir la integración del proceso en la práctica habitual se han impartido talleres formativos (Anexo III) tanto intra como extrahospitalarios “en racimo” (estos últimos en las áreas sanitarias que dependen de nuestro hospital). Igualmente se cuenta con una línea de atención directa continuada con los profesionales sanitarios implicados, tanto dentro del hospital como desde la Atención Primaria. Finalmente se han realizado sesiones para presentar el protocolo de manejo en los distintos servicios implicados y en los centros de salud de la comarcas pertenecientes al área de referencia, tanto a profesionales de la medicina y enfermería como a los residentes. 4 3.1.- ENDOCRINOLOGÍA: Primera línea de trabajo junto con la Atención Primaria dedicada a la educación, prevención, detección y tratamiento del pie diabético en riesgo. Las úlceras del pie diabético se pueden prevenir con una adecuada estrategia que comprende cribado, clasificación del riesgo y medidas efectivas de prevención y tratamiento. En el Hospital de Día de Endocrinología, y centros de Atención Primaria, se realiza: historia clínica y control de los factores de riesgo, cartografía del pie y exploración de una posible neuropatía y vasculopatía y se imparte educación sanitaria podológica a los pacientes para la prevención de las úlceras (Anexo IV). Métodos para identificar a los pacientes de riesgo 1. Inspección visual cuidadosa del pie, para identificar deformidades, hiperqueratosis, calzado no adecuado o presencia de amputaciones previas. 2. Evaluación de la neuropatía sensorial mediante el test de monofilamento (opcionalmente bio-tensiómetro). 3. Evaluación de la arteriopatía: observación de la coloración de la piel, temperatura, presencia de pulsos, dolor al caminar, determinación del índice tobillo-brazo. Protocolo de actuación en el pie diabético: 1. Educación diabetológica: programa reglado sobre cuidados de los pies, dirigido a todos los diabéticos. Autoexploración y Autocuidados. 2. Derivación a Rehabilitación: pie deformado, mal apoyo plantar, úlcera o intervención previa en el pie. Pie amputado. Se considerarán medidas de descarga de presiones anómalas, y la necesidad de “calzado terapéutico” para la prevención secundaria de las úlceras. 3.2.- CIRUGIA VASCULAR: ¿Cuando derivar?, Unidad de “agudos” a.- Diabéticos con úlcera activa nueva o recurrente. 5 b.- Infección, celulitis y/o osteomielitis; que no responde a tratamiento médico en 710 días. c.- Toda úlcera en pie diabético que, aunque no complicada, se cronifica más de cuatro semanas y no es capaz de cerrar. d.- Pacientes con enfermedad vascular periférica y dolor en reposo +/- lesiones tróficas o pérdida de tejidos (grados III-IV). No se tratan úlceras en piernas. A efectos prácticos el pie comienza a nivel de los maléolos. Toda úlcera por encima de éstos no se considera subsidiaria de tratamiento en la Unidad de Pie Diabético. El primer paso es quirúrgico con desbridamiento de los tejidos desvitalizados si procede, drenaje de los abscesos profundos y revascularización precoz (en 48-72 horas tras el desbridamiento) si fuera precisa. Como ya se dispone de un preoperatorio básico se puede realizar una arteriografía selectiva de la extremidad bajo anestesia local. Si los hallazgos son susceptibles de tratamiento endovascular éste se lleva a cabo en el mismo acto, si no se programa al paciente para cirugía de bypass abierto. Además de lo expuesto anteriormente, el control de la glucemia, la descarga de la zona del pie afectado, la realización de las curas apropiadas y la toma de cultivos, de cara a revalorar el tratamiento antibiótico, desempeñan un papel principal. Para ello se elaboró un algoritmo de actuación en urgencias (Anexo V) y se consensuó la manera más apropiada para la toma de cultivos y el tratamiento antibiótico según las características de la infección y adaptado a nuestro entorno. En este paso juegan un papel fundamental los servicios de Microbiología y la Unidad de Enfermedades Infecciosas, siendo este último el servicio de ingreso de los procesos infecciosos de estos pacientes, no subsidarios de tratamiento quirúrgico (Anexo VI). 6 También se ha elaborado un documento de recomendaciones al alta para los pacientes derivados para seguimiento y tratamiento por su médico y enfermeras de atención primaria (Anexo VII). 3.3.- HOSPITALIZACION A DOMICILIO La Hospitalización a Domicilio (HAD) está destinada a acortar o evitar las estancias hospitalarias, ofreciendo un conjunto de cuidados médicos y de enfermería de rango hospitalario a los pacientes en su propio domicilio hasta el alta médica. Las características que la definen son la Transitoriedad, Complejidad e Intensidad de los cuidados. Grandes series de pacientes tratados avalan la seguridad y eficacia de esta modalidad asistencial con una reducción significativa de gastos a igualdad de complejidad de pacientes y todo ello con unas encuestas de satisfacción de los pacientes altamente positivas. DERIVACIÓN DE PACIENTES PARA EL SEGUIMIENTO POR HAD: realizar curas locales, administrar antibióticos intravenosos, gestionar las complicaciones del tratamiento y control analítico, enlace entre el Médico de Atención Primaria y el Hospital y la prevención secundaria de eventos relacionados con la diabetes. 3.4.- REHABILITACIÓN Se consideran los siguientes criterios de derivación a Rehabilitación: pie deformado, mal apoyo plantar, neuroartropatía de Charcot en todos sus estadios, úlcera que requiera descarga, úlcera o intervención previa en el pie y amputación total o parcial. 3.5.- ¿Qué pacientes son atendidos en la Unidad del Pie Diabético? Diabéticos con alguno de los siguientes criterios: Neuropatía periférica con deformidad grave, arteriopatía, isquemia grados III-IV, úlcera activa o recurrente y hospitalización previa por problemas en el pie. 7 Los pacientes pueden acceder a la Unidad desde Atención Primaria, en su mayoría si no es en fase aguda, desde Urgencias o desde otros Servicios. 4.- RECURSOS UTILIZADOS La Unidad de Pie Diabético del Hospital de Cruces cuenta con el equipo humano, así como con las instalaciones e instrumentación necesarios para llevar a cabo este proyecto. El equipo está integrado por personal con experiencia en el manejo integral e intensivo, así como preventivo, de los pacientes con Diabetes Mellitus, arteriopatía periférica crónica, ulceras crónicas y sus complicaciones infecciosas. El hospital ha dotado a la Unidad de una consulta especializada en el Servicio de Cirugía Cardiovascular para el manejo de estos pacientes. A la Unidad de Pie Diabético le avala el soporte y apoyo de la dirección médica del hospital y las direcciones médicas de las comarcas. 5.- RESULTADOS OBTENIDOS La unidad de pie diabético cuenta con una línea de atención continua por parte de los facultativos de Cirugía Vascular que resuelven dudas y manejos que requieren atención especializada. La unidad ha desarrollado e incorporado a su protocolo las recomendaciones de las guías de la práctica clínica de calidad (evaluadas mediante el instrumento AGREE II). Se han incorporado cuestionarios de calidad de vida para determinar la mejora en los pacientes y se está modelizando económicamente la actuación de la unidad para analizar su eficiencia. Los indicadores de proceso y resultados derivados de la actuación integral se han incluido en el Contrato programa de Calidad de 2011, obteniendo los siguientes indicadores de evaluación: 1.- Coordinación - Nº pacientes ingresados en total: 64 8 - Nº de ingresos: 99 (13 pacientes con 1 reingreso; 8 pacientes con 2 reingresos y 3 pacientes con 3 reingresos) - Nº (%) de ingresos desde urgencias: 53 (54%) (10 pacientes con 1 reingreso) Motivo: 36 (68%) por isquemia grado IV y 17 (32%) por infección - Estancia Media de Hospitalización: 14,3 días 2.- Resultados - Nº de amputaciones mayores: 8 - Calidad de vida (EuroQol-5D): 30 pacientes de los 43 ingresados desde la urgencia: valoración global media de 4,7 (escala sobre 10) La Unidad de Píe Diabético dispone de una consulta monográfica de tres horas semanales, asistida por la Dra. Vela (cirugía vascular), una enfermera formada por competencias para el correcto manejo del píe diabético y dos podólogas. Durante el periodo del 22/03/2011 al 15/11/2011, se han atendido 64 pacientes, derivados desde la Atención Primaria y el servicio de Urgencias, sin necesidad de ingreso en el hospital, con una media de visitas de 2,18 (rango: 1-12 visitas/paciente). La Unidad de Píe Diabético cuenta en la actualidad con el asesoramiento y apoyo de la Unidad de Epidemiología del Hospital, la cual ha desarrollado una base de datos, para realizar el seguimiento y análisis de los datos de los pacientes incluidos, semestralmente. Por otra parte en el mes de noviembre se ha impartido un curso a 25 médicos que han acudido de toda Europa (10 países) y de otras provincias españolas, considerando a la Unidad de Píe Diabético del Hospital de Cruces, centro de excelencia Europeo (Anexo VIII). 6.- CONCLUSIONES Mediante la creación e implantación de una Unidad de Pie Diabético, con un equipo multidisciplinar, con la implicación de diferentes profesionales sanitarios se pretende mejorar su 9 diagnóstico y tratamiento, y la cultura de atención integral centrada en el paciente como sujeto a empoderar. Se pretende como prioridad estandarizar el proceso de educación y prevención, diagnóstico y tratamiento del pie diabético de forma multidisciplinar con el objetivo de ofrecer el mejor tratamiento en cada momento según la mejor evidencia disponible, a nuestros pacientes. Para ello se tratará de mejorar la calidad de vida, disminuir el número de ingresos a través de urgencias, el número de amputaciones, la estancia media y que dicho proceso sea coste/efectivo. El núcleo central del la Unidad de Pie Diabético está formado por los Servicios de: Endocrinología, Rehabilitación, Cirugía Vascular y Hospitalización a Domicilio. Para la atención integral se precisa la colaboración de los Profesionales de Atención Primaria y de los Servicios de: Urgencias e Infecciosas y en ocasiones Cirugía Plástica y Traumatología, además de contar con una línea de atención continua por parte de los facultativos de Cirugía Vascular. Esta Unidad es un proyecto pionero en la red sanitaria vasca. Se pretende con su implantación y análisis de resultados la estandarización del proceso en otros hospitales y comarcas de Osakidetza, como ya se realiza desde hace años en otros países, demostrando la mejora en la calidad de vida de estos pacientes y su efectividad. Con todo ello se pretende la integración de la investigación y la acción para conseguir mejoras en la prevención, detección precoz de las complicaciones y gestión de la cronicidad integrando los tres niveles asistenciales (primaria, hospitalaria y domiciliaria). Los modelos de continuidad asistencial han mostrado su efectividad y eficiencia en la ruptura de las interfases estancas existentes entre la atención primaria, la especializada extrahospitalaria y la especializada intra-hospitalaria. La unidad que se presenta ha generado sinergias y alineado esfuerzos de los diferentes niveles asistenciales proponiendo un modelo asistencial de coordinación que asigna funciones específicas a cada nivel y elementos de interrelación siempre sobre la base del paciente y la calidad de la asistencia. 10 VALORACIÓN ECONÓMICA: Realizamos desde la Unidad de Epidemiología Clínica una consulta a la responsable de la convocatoria quien nos indicó que este apartado no había que cumplimentarlo. PERSONA DE CONTACTO: Pilar Vela Orús [email protected] [email protected] 11 ANEXO I: BIBLIOGRAFÍA 1. Marinel-lo J, Blanes JI, Escudero JR, et al. Consenso de la SEACV sobre pie diabético. Angiología 1997; 5: 193-230. 2. Internacional Working Group on the Diabetic Foot. International Consensus on the Diabetic Foot. The Nederlands, 1999. 3. Reiber GE, Boyko EJ, Smith DG. Lower extremity foot ulcers and amputations in diabetes. En: Harris MI, Cowie C, Stern MP (Eds.) Diabetes in America, 2nd ed. (NIH publ. no. 95-1468). U.S. Government Printing Office, Washington DC, 1995. 4. Pavicic T, Korting HC. Xerosis and callus formation as a key to the diabetic foot syndrome: Dermatologic view of the problem and its management. JDDG 2006; 4: 935-941. 5. Faris I. Mechanisms for the development of foot lesions. En: Faris I (Ed.) The management of the diabetic foot, 2nd ed. Churchill Livingstone, Edimburg 1991; 5-8. 6. Wagner FW. The dysvascular foot, a system for diagnostics and treatment. Foot Ankle 1981; 2: 64-122. 7. Hirsch AT, Criqui MH, Treat-Jacobson D, et al. Peripheral arterial disease detection, awareness, and treatment in primary care. JAMA 2001; 286: 1317-24. 8. Edmons ME, Foster AVM. Classification and management of neuropathic and neuroischemic ulcers. En: Boulton ME, Connor H, Cavanagh PR (Eds.). The foot in Diabetes, 2nd ed. Wiley and Sons, Chichester 1994: 109-120. 9. Kwolek CJ, Pomposelli FB, Tannenbaum GA et al. Peripheral vascular bypass in juvenile-onset diabetes mellitus: Are aggressive revascularization justified? J Vasc Surg 1992; 15: 394-401. 10. Edmonds ME. Special problems in diabetic patients. En : Dormandy JA, Stöck G (Eds.) Critical leg ischaemia. Its pathophysiology and management. Springer-Verlag, Berlin 1990: 158-161. 11. Frykberg RG, Armstrong DG, Giurini J et al. Diabetic foot disorders: A clinical practice guideline. J Foot Ankle Surg 2000; 39: S1-S60. 12. Lipsky BA. Medical treatment of diabetic foot infections. Clin Infect Dis 39 (Suppl 2): S104-S114, 2004. 13. Dormandy JA, Rutherford RB. Management of peripheral arterial disease. TASC Working Group. J Vasc Surg 2000; 31: S1-296. 14. Frykberg RG, Zgonis T, Armstrong DG, Driver VR et al. Diabetic foot disorders: a clinical practice guideline. J Foot Ankle Surg 2006; 45 Nº 5: S1-66. 15. Lipsky BA, Berendt AR, Deery HG, Embil JM et al. Diagnosis and treatment of diabetic foot infections. Clin Infect Dis 39: 885-910, 2004. 16. Documento de consenso sobre el tratamiento antimicrobiano de las infecciones en el pie diabético. Asociación Española de Cirujanos (AEC), Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular (SEACV), Sociedad española de Medicina Interna (SEMI) y Sociedad española de Quimioterapia (SEQ). Rev Esp Quimioterap, Marzo 2007; Vol. 20 (Nº 1): 77-92. 17. Vela P, Cortazar A, Múgica C, Bereciartúa E, Basterretxea A, Larrazabal A, Cortón L, Arana E y Vilar B. Unidad multidisciplinar para el tratamiento del píe diabético: estructura y funcionamiento. Osakidetza, Cruces, 2011. 12 ANEXO II: ESQUEMA DE LA UNIDAD DEL PIE DIABÉTICO Y PROTOCOLO 13 GURUTZETAKO OSPITALEA / HOSPITAL DE CRUCES UNIDAD MULTIDISCIPLINAR PARA EL TRATAMIENTO DEL PIE DIABÉTICO: ESTRUCTURA Y FUNCIONAMIENTO Servicios de: Endocrinología, Rehabilitación, Cirugía Vascular, Hospitalización a Domicilio, Infecciosas y Urgencias. Hospital de Cruces, Baracaldo, Vizcaya. Comarca Uribe y Ezkerraldea-Enkarterri AUTORES Pilar Vela Orús (Servicio de Cirugía Vascular) Alicia Cortazar Galarza (Servicio de Endocrinología) Concepción Múgica Samperio (Servicio de Rehabilitación) Elena Bereciartúa Bastarrica (Unidad de Enfermedades Infecciosas) Andima Basterretxea Ozamiz (Servicio de Hospitalización a Domicilio) Ainara Larrazabal Arbaiza (Servicio de Hospitalización a Domicilio) Leire Cortón Corral (Servicio de Urgencias) Eunate Arana Arri (Unidad de Investigación) Begoña Vilar Achabal (Servicio de Microbiología) COMISION UNIDAD PIE DIABETICO Isabel Ferreiro González (Subdirección Médica) Juan Luís Fonseca Legrand (Servicio de Cirugía Vascular) Sonia Gaztambide Sáenz (Servicio de Endocrinología) Mª Dolores de Damborenea González (Servicio de Hospitalización a Domicilio) Mª Esther Pacheco Boiso (Servicio de Rehabilitación) Miguel Montejo Baranda (Unidad de Enfermedades Infecciosas) Gabriel Gutiérrez Herrador (Servicio de Urgencias) Rosa Blanco Zapata (Subdirección de Enfermería) Alexander Zubiaur Barrenengoa (Comarca Uribe) Begoña Echeguren Solachi (Comarca Uribe) Juan Luís Juez Senovilla (Comarca Ezkerraldea-Enkarterri) José Luís Domínguez Aurrecoechea (Comarca Ezkerraldea-Enkarterri) 2 1.- INTRODUCCIÓN: La Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular define el pie diabético como una “entidad clínica de base etiopatogénica neuropática inducida por la hiperglucemia mantenida, en la que, con o sin coexistencia de isquemia y previo desencadenante traumático, se produce lesión y/o ulceración del pie” (1). Magnitud del Problema: Se estima que la Diabetes Mellitus, en pacientes mayores de 65 años, en los países desarrollados tiene una prevalencia del 11% (2). La presencia de úlceras de pie diabético en estos mismos países varía entre el 4% y 10%. Las infecciones del pie que interesan a la piel y los tejidos blandos, e incluso al hueso, con o sin repercusión sistémica, son la causa más frecuente de hospitalización en estos pacientes, 25%, a menudo de larga estancia (3). La diabetes es la causa más frecuente de amputación no traumática de la extremidad inferior en Europa y EEUU. La tasa de amputaciones oscila entre el 2,5 y 6/1000 pacientes/año y el riesgo para los diabéticos es de 8 a 15 veces mayor frente a los no diabéticos (4). Se ha calculado que al menos un 15% de los diabéticos padecerá a lo largo de su vida alguna úlcera y alrededor del 85% de los pacientes que sufren amputaciones las han padecido previamente (2). Tras la amputación de una extremidad inferior, la incidencia de una nueva úlcera o de amputación contralateral a los dos y cinco años es del 50% y la supervivencia de estos pacientes es significativamente menor que la del resto de la población (3). En nuestro centro se ha planteado como prioridad estandarizar el proceso de educación y prevención, diagnóstico y tratamiento del pie diabético de forma multidisciplinar con el ánimo de disminuir el número de ingresos a través de urgencias, el número de amputaciones, la estancia media, seguir las guías de la práctica clínica, que el proceso sea coste/efectivo y en definitiva, ofrecer el mejor tratamiento en cada momento, según la evidencia, a nuestros pacientes. 3 2.- UNIDAD MULTIDISCIPLINAR DEL PIE DIABÉTICO (UPD): El núcleo central esta formado por los Servicios de: Endocrinología, Rehabilitación, Cirugía Vascular, Urgencias y Hospitalización a Domicilio. Para dar continuidad y fluidez al trabajo precisamos la colaboración de los Médicos de Atención Primaria y de los Servicios de: Enfermedades Infecciosas, Microbiología y en ocasiones Cirugía Plástica y Traumatología, además de contar con una línea de atención continua por parte de los facultativos de Cirugía Vascular en los casos que requieran derivación urgente a la Unidad. Nucleo central Endocrinología Cirugía Vascular – Historia Clínica – Úlcera – Transitoriedad – Control Factores Rº – Infección – Complejidad – Cartografía del pie – Celulitis – Intensidad – Neuropatía – Osteomielitis – Curas Locales – Arteropatia – Arteriopatía III-IV – Antibióticos IV – Educación Sanitaria – Desbridamiento – Control Analítico – Pie en Riesgo – Tomar Cultivo – Coordinación AP – Rehabilitación – Antibióticos – Detectar Complicaciones – Podología – Revascularización – Educación Sanitaria – Ortopedia – Amputación – Rehabilitación 4 Hospital Domiciliario 2.1.- ENDOCRINOLOGÍA Primera línea de trabajo junto con Atención Primaria dedicada a la educación, prevención, detección y tratamiento del pie diabético en riesgo. Las úlceras del pie diabético se pueden evitar con una adecuada estrategia que comprenda cribado, clasificación del riesgo y medidas efectivas de prevención y tratamiento. En el Hospital de Día de Endocrino, que ya lleva en funcionamiento más de diez años en nuestro centro de una manera excelente, se realiza: historia clínica y control de los factores de riesgo, cartografía del pie (ver anexos 1 y 2) exploración de la posible neuropatía y vasculopatía y se imparte educación sanitaria podológica para la prevención de las úlceras. Es nuestro objetivo extender la exploración básica del pie a las consultas en Atención Primaria y Urgencias mediante talleres prácticos. Los factores de riesgo modificables asociados al desarrollo del pie diabético y sus consecuencias son: enfermedad vascular periférica, neuropatía, deformidades en el pie, presión plantar elevada, callos plantares o hábito tabáquico . Existen otros factores de riesgo de úlceras en el pie diabético: úlcera previa en el pie, amputación previa de la extremidad inferior, tiempo de evolución de la diabetes, mal control glucémico y mala agudeza visual. 2.1.1.- Métodos para evaluar el pie de riesgo Neuropatía: Monofilamento: El monofilamento identifica a pacientes con alto riesgo de ulceración con una sensibilidad de 66% a 91% y una especificidad de 34% a 86%, según los diferentes estudios realizados. Diapasón: Es un método simple y barato para medir la sensación vibratoria, pero presenta problemas de fiabilidad. Es más impreciso en la predicción de úlceras que el monofilamento. Puede ser una alternativa en caso de no disponer de este último. Se aconseja utilizar el diapasón calibrado. Biotensiómetro: El biotensiómetro supera las limitaciones de fiabilidad del diapasón al poder regular los diferentes umbrales vibratorios. Un umbral de vibración mayor de 25V tiene una sensibilidad del 83% y una especificidad del 63% para predecir aparición de úlcera en el pie a los cuatro años. En nuestro medio no es una técnica disponible de forma generalizada. Enfermedad arterial periférica: Los métodos más empleados en nuestro medio para su diagnóstico son: la exploración física y el índice tobillo-brazo (ITB) por Doppler. Un ITB de 0,90 o menor sugiere enfermedad arterial periférica, mientras que un ITB superior a 1,1 puede representar una presión falsamente elevada producida por calcificaciones arteriales. El test es fácil de realizar, objetivo y reproducible. 5 2.1.2.- Efectividad de los programas de cribado y prevención del pie diabético La guía NICE recomienda realizar el “screening”, en base a un ensayo clínico sobre un programa de cribado y protección del pie diabético realizado en 2001 pacientes ambulatorios con DM 2 que identificó a 192 pacientes de alto riesgo. Éstos fueron aleatorizados a recibir un programa de intervención (visitas semanales al podólogo e higiene de mantenimiento, calzado protector y educación sobre cuidado diario) frente a cuidados habituales. En el grupo de intervención se observó una tendencia no significativa a presentar menos úlceras y amputaciones menores y reducción significativa en amputaciones mayores a los dos años. Los pacientes que tenían úlceras evolucionaron a menos amputaciones. La intervención fue coste-efectiva. En un ensayo clínico realizado en centros de atención primaria, un programa estructurado con revisión anual, identificación y tratamiento de pacientes de alto riesgo, mejoró el conocimiento y actitudes de los pacientes y profesionales, y la utilización de los servicios (5). La medida más efectiva para prevenir las complicaciones del pie diabético son los programas estructurados de cribado y tratamiento del pie de riesgo. 2.1.3.- Métodos para identificar a los pacientes de riesgo a) Inspección visual cuidadosa del pie, para identificar deformidades, hiperqueratosis, calzado no adecuado o presencia de amputaciones previas. b) Evaluación de la neuropatía sensorial mediante el test de monofilamento (opcionalmente biotensiómetro). c) Evaluación de la arteriopatía: observación de la coloración de la piel, temperatura, presencia de pulsos, dolor al caminar (claudicación) y determinación del índice tobillo-brazo. Clasificación del riesgo de pie diabético. Frecuencia de inspección recomendada por la Sociedad Española de Diabetes (SED) y Asociación Americana de Diabetes (ADA): Riesgo (clasificación) Características Bajo riesgo Sensibilidad conservada, pulsos palpables Riesgo moderado Alto riesgo Pie ulcerado Neuropatía, ausencia de pulsos u otro factor de riesgo Frecuencia de inspección Anual Cada 3-6 meses (visitas de control) Neuropatía o pulsos ausentes junto a deformidad o cambios en Cada 1-3 meses la piel o úlcera previa Tratamiento individualizado, Derivación a Cirugía Vascular 6 2.1.4.- Protocolo de actuación en el pie diabético - Educación diabetológica: programa reglado sobre cuidados de los pies, dirigido a todos los diabéticos. Especial “cuidado” en pacientes con riesgo moderado o severo. - Derivación a Rehabilitación: pie deformado, mal apoyo plantar, úlcera que requiera descarga, úlcera o intervención previa en el pie. Se considerarán medidas de descarga de presiones anómalas, y la necesidad de “calzado terapéutico”, - Todo paciente diabético con ateriopatía distal, se considera un paciente de alto riesgo vascular, y será tratado con estatinas y antiagregación plaquetar, además de tratar de forma intensiva el resto de los factores de riesgo vascular que presente. 2.2.- CIRUGÍA VASCULAR: Cuándo derivar a la Unidad de “agudos” a.- Diabéticos con úlcera activa nueva o recurrente. b.- Úlceras de larga evolución no tratadas previamente en nuestra Unidad o tratadas hace mucho tiempo. c.- Diabéticos con infección en el pie que no responde adecuadamente al tratamiento en dos o tres días. d.- Aparición súbita de un pie o dedo, rojo, caliente, hinchado o deformado. e.- Pacientes con enfermedad vascular periférica y dolor en reposo, lesiones tróficas o pérdida de tejidos (isquemia grados III y IV). 7 Los puntos c, d y e se consideran de atención urgente, es decir el mismo día que se recibe el aviso. Mientras que en los casos a y b se les atenderá en un plazo no superior a 5-7 días. (Ver anexo 3: Formulario de derivación del paciente a C. Vascular) No tratamos úlceras en piernas. A efectos prácticos el pie comienza a nivel de los maléolos. Toda úlcera por encima de éstos no se considerará subsidiaria de tratamiento en la Unidad de Pie Diabético (UPD). Cuando el paciente llega a la Unidad de agudos debemos de intentar responder a ciertas preguntas: Preguntas Básicas • Esta infectado? En que grado? • Necesita Hospitalización • Debo cultivar la herida? Como? •Cuales serán los patógenos más habituales? • Necesita alguna otra prueba diagnóstica? • Como puedo diagnosticar osteomielitis? • Necesita algún procedimiento quirúrgico? • Debo prescribir antibióticos? Cuales? • Cuando y como debo modificar el tratamiento? • Cuanto tiempo lo debo tratar? • Cual será el resultado esperado? Lipsy BA et al. Clin Infect Dis. 2004, 39:885 -91D 2.2.1.- Pie diabético ulcerado La evaluación inicial ante toda úlcera sobre pie diabético debe ser sistemática, valorando: situación vascular y la existencia o no de infección y osteomielitis asociada. Debemos mencionar: la presunta etología de la úlcera, si nos parece neuropática o isquémica o neuroisquémica, el tamaño, la profundidad, el aspecto de los márgenes y de la base y la localización anatómica (9). Nuestro examen además debe incluir la exploración de la úlcera con sonda o torunda roma y estéril para detectar la existencia de trayectos fistulosos que la comuniquen con tendones, huesos o articulaciones. Si obtenemos una “prueba positiva” de que el hueso esta implicado casi seguro habrá osteomielitis aunque los falsos negativos reducen la sensibilidad de este sencillo test (“probing to bone”). Las características del olor y exudado, si existen, deben ser anotadas. Y tomaremos cultivo de aquellas que nos parezcan infectadas bien sea de tejidos profundos del fondo de la úlcera o del exudado por aspiración ya que otros tipos de muestras se han visto “insuficientes” para el diagnóstico (10). 2.2.1.a.- Clasificación de las úlceras: La clasificación de las observaciones facilita el tratamiento y nos ayuda a predecir el éxito o fracaso de éste. Tal vez la más simple sea clasificarlas en neuropáticas, o neuroisquémicas. Anotando además el tamaño, la profundidad y si asocia o no infección (11): Neuropática: Indolora, con pulsos presentes, aspecto en sacabocados, localizada en la planta del pie, existe callosidades, pérdida de sensibilidad reflejos y sentido vibratorio, flujo sanguíneo aumentado (shunts), venas dilatadas, pie seco y caliente, aspecto rojizo y deformidades óseas. 8 Neuroisquémica: Dolorosa, pulsos ausentes, márgenes irregulares, habitualmente localizada en los dedos, callosidades ausentes o poco frecuentes, hallazgos sensoriales inespecíficos, flujo sanguíneo disminuido, venas colapsadas, pie frío, aspecto pálido y cianótico, no deformidades óseas. Otra de las clasificaciones más comúnmente usadas es la de Wagner. En ésta las lesiones se dividen en seis grados según la profundidad de la herida y extensión de la necrosis pero no tiene en cuenta el papel que juega la infección o la isquemia y otras patologías asociadas. Otras: Clasificación de la Universidad de Texas; PEDIS; IDSA: Incluyen grado de infección e isquemia. Nosotros utilizaremos esta última (ver anexos). 2.2.1.b.- Exploración radiológica y osteoarticular: La radiografía postero-anterior y oblicua se debe realizar aún sin clínica añadida y tiene una sensibilidad del 63% y especificidad del 80% para identificar lesiones óseas en los grados clínicos 0 y 1 de la escala de Wagner. Sin embargo en los grados de 2 a 5 si la exploración radiológica no es concluyente y existe la sospecha de osteítis u osteomielitis se debe realizar TAC, RNM o gammagrafía. La sensibilidad y especificidad de la RNM para detectar lesiones precoces alcanza un 88% y 93% respectivamente pero el coste es mayor. Para el examen osteoarticular debemos valorar: el descenso del arco plantar, dedo en garra o en martillo, hiperqueratosis y deformidades. Además debemos evaluar la movilidad de las articulaciones metatarso-falángica, subastragalina y tibioperoneo-astragalina, anomalías de la marcha (por ejemplo, la dorsiflexión debe ser mayor de 10º para que la marcha sea normal). Etiología, Edmons Neuropáticas – Indolora – Pulsos presentes – Sacabocados – Planta del pie – Callosidades – Pie seco y caliente Neuroisquémicas – Dolorosa – Pulsos ausentes – Margen irregular – Dedos del pie – SIn callosidades – Pie frio, cianótico Clasificación de Wagner GRADO LESIÓN CARACTERÍSTICAS 0 Ninguna, Pie de Riesgo Callos gruesos, deformidades óseas, cabezas metatarsianos prominentes, dedos en garra. I Úlceras superficiales Destrucción del espesos total de la piel II Úlcera Profunda Penetra la piel, grasa, ligamentos pero sin afectar al hueso. Infectada III Úlcera profunda más absceso (osteomielitis) Extensa y profunda, secreción mal oliente. IV Gangrena limitada Necrosis de una parte del pie o de los dedos, talón o planta. V Gangrena extensa Todo el pie afectado, repercusión sistémica. 9 2.2.2- Pie diabético infectado Como ya hemos mencionado, las infecciones son la causa más frecuente de hospitalización entre los diabéticos y en muchos casos originan la pérdida de la extremidad (3). Debemos de recordar que en este caso la infección no es la causa de la úlcera sino su complicación. Podemos clasificar las infecciones de los tejidos blandos en: necrosantes y no necrosantes y también en aquellas que amenazan la extremidad o no. Necrosantes Celulitis Necrosante Fascitis Necrosante Mionecrosis No Necrosantes Erisipela Celulitis Absceso Clínicamente las infecciones que no amenazan la extremidad presentan una úlcera superficial sin isquemia grave, no afectan hueso ni articulaciones y la celulitis que la acompaña es de < de 2cm. Son pacientes estables médicamente y pueden ser tratados a domicilio con estricta vigilancia de la evolución. Aquellas infecciones que amenazan la extremidad presentan una celulitis de > de 2cm. Pueden verse acompañadas o no de: fiebre, edema, linfangitis, hiperglucemia, leucocitosis e isquemia. Si existe úlcera debemos probar si afecta al hueso o articulaciones mediante sonda lo cual es altamente sugestivo de osteomielitis y si se acompañan de isquemia serán estudiados para planear revascularización precoz. Así mismo, las infecciones muy graves pueden amenazar la vida del paciente. Deberemos de tratar la repercusión sistémica e inestabilidad metabólica para lo cual el paciente tendrá que ser hospitalizado y casi siempre asociar desbridamiento urgente (12). En 2004 la Infectious Disease Society of America (IDSA) desarrolló una guía para el diagnóstico y tratamiento de las infecciones del pie diabético que incorporaba parte de la clasificación PEDIS (13). Clasificación Clínica IDSA PEDIS SEVERIDAD EVIDENCIA INFECCIÓN 1 No Infectada Herida sin pus ni inflamación 2 Media Presencia de ≥2 signos de inflamación, pus, eritema, dolor, calor... Pero no se extiende más allá de de 2cm de la úlcera y la infección sólo afecta piel y subcutáneo. Sin complicaciones locales o sistemáticas. 3 Moderada Infección en paciente sistemática y metabólica-mente estable, pero con uno de los siguientes signos: celulitis más allña de los 2cm, reguero inflangítico, extencsión a fascia superficial, absceso profundo, gangrena, y afecta músculos, tendones, articulaciones o hueso. 4 Severa Infección en un paciente con repercusión sistémica o inestabilidad metabólica (fiebre, escalofrios, vómitos, taquicardia, hipotensión, confusión leucocitosis, severa hiperglucemia, acidosis o azotemia. Guia Clínica IDSA 2004 10 2.2.3- Etiología de la infección Los gérmenes que producen la infección del pie diabético proceden de la flora intestinal y cutánea del propio paciente (14). Etiología de la Infección INFECCIÓN MICROORGANISMOS S. aureus S. pyogenes Celulitis y Úlcera no tratada previamente con AB S. Aureus SAMR S. coagulasa negativos Streptococcus spp. Enterocuccus spp. Enterobacterias (BLEE) PS. Aeruginosa Candida spp. Corynebacterium spp. Otros BGN no fermentadores Úlcera tratada previemente con AB o de larga evolución Cocos gram+ aerobios Enterobacterias BGN no fermentadores Anaerobios Fascitis necrosante o mionecrosis Consenso Multidisciplinar Español, Marzo 2007 En las infecciones agudas superficiales y leves sin amenaza para el miembro, como la celulitis y la erisipela predominan S. aureus y estreptococos β hemolíticos. Mientras que las que afectan a estructuras profundas y amenazan la extremidad suelen ser polimicrobianas (cocos gram positivos como S. aureus y estreptococos, enterobacterias y anaerobios como Peptoestreptococos spp y Bacteroides spp). En las úlceras crónicas tratadas previamente con antibióticos o manipuladas quirúrgicamente y pacientes hospitalizados de larga evolución podemos encontrar: SARM, enterobacterias productoras de BLEE (β Lactamasas de Espectro Extendido), Pseudomonas aeruginosa, otros BGN no fermentadores, SCN y enterococos. S. aureus es el germen más frecuentemente aislado y Pseudomonas aeruginosa el más frecuente en úlceras exudativas o tratadas con curas húmedas. Respecto a la toma de cultivos sabemos que las muestras obtenidas con torunda de la superficie de la úlcera son de mala calidad, ya que pueden detectar solamente contaminantes de superficie y no reflejar el verdadero microorganismo que provoca la infección tisular, además, sólo permiten recoger una escasa cantidad de muestra que se deseca fácilmente por la deshidratación del medio. Es por ello, por lo que se recomienda realizar los cultivos mediante aspiración con jeringa de las lesiones supuradas y enviarlas al laboratorio en medios de crecimiento aerobio y anaerobio (si están disponibles en nuestro medio, sino con jeringa y tapón), o realizar el raspado o la biopsia del fondo de la úlcera enviando la muestra en recipiente estéril de boca ancha sobre una gasa humedecida en suero salino estéril. La técnica del cultivo no será correcta, si antes de proceder a la toma de la muestra no hemos limpiado “a chorro” con suero fisiológico estéril el lecho de la ulcera, y si no hemos procedido al desbridamiento de la lesión, si es necesario, eliminando el tejido necrótico y los tejidos desvitalizados. 2.2.4- Tratamiento El tratamiento de las infecciones del pie diabético ha de ser multidisciplinario incluyendo, a ser posible, un internista especializado en enfermedades infecciosas o un microbiólogo, cirujano vascular, endocrinólogo, personal de enfermería, ortopeda o rehabilitador, podólogo y médico de atención primaria. 11 Aunque el tratamiento antibiótico desempeña un papel muy importante el primer paso es quirúrgico con desbridamiento de los tejidos desvitalizados, drenaje de los abscesos profundos y revascularización precoz si fuera precisa. Además del control de la glucemia, la descarga de la zona del pie afectado, realización de las curas apropiadas y valoración y actuación frente a la osteomielitis si existe. 2.2.4.a.- Tratamiento Quirúrgico: cuando existen datos clínicos de infección grave, rápidamente progresiva, profunda o necrosante de tejidos blandos o con peligro para la vida, el tratamiento quirúrgico precoz es tanto diagnóstico ya que permite la obtención de muestras válidas para cultivo como terapéutico. El desbridamiento esta indicado en casi todas las úlceras del pie diabético ya que transforma una lesión crónica en aguda y dependiendo de la gravedad la realizaremos con anestesia local o loco-regional en quirófano. Según el estado vascular de la extremidad deberemos de programar la revascularización precoz de ésta. 2.2.4.b.- Tratamiento de la Osteomielitis: incluye drenaje adecuado, desbridamiento extenso del tejido necrótico, tratamiento del espacio muerto, cobertura con tejidos blandos y revascularización de la extremidad. La Asociación Americana de Diabetes (ADA) recomienda que se extirpe todo o la mayor parte del hueso infectado si no va a afectar la funcionalidad del pie. En todos los casos debe asociarse la administración de antibióticos, durante dos semanas si se extirpó todo el hueso y al menos cuatro semanas si se ha sido más conservador. El tratamiento antibiótico comienza de manera intravenosa y empírica y pasa luego a oral y según antibiograma. 2.2.4.c.- Descarga de la extremidad: en principio se recomienda reposo en cama y luego deambulación en descarga al menos dos semanas después de conseguir la curación completa. 2.2.4.d.- Apósitos: una vez realizado el desbridamiento se recomienda mantener un ambiente húmedo, utilizando el apósito adecuado a las características de la lesión se ha demostrado que el medio húmedo facilita la migración celular a través del lecho de la herida, promueve la angiogénesis y la síntesis de tejido conjuntivo. 2.2.4.e.- Tratamiento Antimicrobiano: está condicionado por la isquemia que dificulta la llegada de antibióticos al foco de infección, el deterioro de la función leucocitaria y la frecuente insuficiencia renal en estos pacientes. La respuesta ante la infección en los diabéticos se ve dificultada y aparecen empeoramientos rápidos (horas o días). Se aconseja el uso de antibióticos bactericidas a dosis máximas y evitar fármacos nefrotóxicos. En las úlceras crónicas sin datos añadidos de infección no esta indicado el tratamiento antibiótico aún con un cultivo positivo (13). Las infecciones superficiales y leves pueden ser tratadas fuera del hospital con antibióticos orales con buena biodisponibilidad y activos frente a cocos gram positivos aerobios (S. aureus y estreptococos). Por ejemplo: amoxicilina-ácido clavulánico; en caso de alergia a β lactámicos podemos usar levofloxacino o clindamicina y cotrimoxazol en caso de SARM (ver tabla de antibióticos adaptada a nuestro hospital). Debemos de mantener contacto con los pacientes a los pocos días para control de la evolución y la duración del tratamiento suele ser de 7 a 14 días. En las infecciones moderadas-graves que amenazan la extremidad, por ser polimicrobianas, se aconseja el tratamiento intravenoso de amplio espectro. Los antibióticos deben ser activos frente a: cocos gram positivos aerobios (estafilococos spp, estreptococos spp), bacilos gram negativos aerobios (enterobacterias) y anaerobios (Streptococcus spp, Peptoestreptococcuus spp y Bacteroides spp). Están indicados: carbapenem, una cefalosporina de tercera generación más metronidazol, amoxicilina-ácido clavulánico o piperacilina-tazobactam si sospechamos la presencia de Pseudomonas aeruginosa. 12 Entre los carbapenems el ertapenem ofrece varias ventajas: administración única diaria, se ajusta al espectro antimicrobiano incluyendo enterobacterias productoras de BLEE, buena penetración en los tejidos blandos y experiencia clínica favorable. El hecho de no cubrir Pseudomonas spp. que podría parecer una desventaja lo que nos ayuda es a no favorecer resistencias y ser mas selectivos a la hora de indicar antibióticos. La Pseudomonas aeruginosa y Enterococcus spp. habitualmente carecen de protagonismo patogénico, se comportan como colonizadores, por lo tanto no se precisa su cobertura antibiótica empírica en infecciones leves y moderadas. Excepto: cultivos monomicrobianos repetidos o pacientes inmunodeprimidos o úlceras que no responden a tratamientos sin cobertura de estos gérmenes. Debemos considerar añadir Linezolid o un glucopéptido (vancomicina o teicoplanina) cuando: aislemos SARM o el riesgo de aislarlo sea alto. Si la gravedad del paciente no permite errores en el tratamiento empírico debemos de cubrir además Pseudomonas spp. y otros patógenos menos habituales para lo que podemos emplear un β-lactámico antipseudomonas (imipenem, meropenem o piperacilina-tazobactam) asociado a linezolid, glucopéptido o daptomicina. En caso de alergia a los β-lactámicos es útil tigeciclina más fluoroquinolona (levofloxacino o ciprofloxacino) o a amikacina para cubrir Pseudomonas aeruginosa (14). El fracaso de un tratamiento antibiótico correcto puede deberse al desarrollo de resistencias, sobreinfección o extensión al hueso. Debemos de recordar que los enfermos hospitalizados y previamente tratados con antibióticos de amplio espectro durante tiempo prolongado suelen presentar bacterias resistentes como SARM o enterococos spp resistentes a glucopéptidos. Si bien antes SARM era casi siempre hospitalario cada vez son más frecuentes los hallazgos como infección en la comunidad. Tratamiento Antibiótico INFECCIÓN 1ª ELECCIÓN Leve Cocos gram + aerobios Amox-clavulánico v.o. Levofloxacino ó moxifloxacino v.o. Clindamicina v.o. Cotrimoxazol v.o. Moderada Grave (Polomicrob) Cocos gram + aerobios. Bacilos gram aerobios y anaerobios Ertapenem i.v. Piperacilina-Tazobactam i.v. ó Amox-clavilánicoi.v. ó Cefalosporina 3ª generación i.v. ó Fluoroquinolona + Metronidazol ó Clindamicina i.v./v.o. +/Linezolid i.v/v.o. Glucopéptido i.v. Muy Grave ALTERNATIVA +/Linezolid i.v/v.o. Glucopéptido i.v. Imipenem/Meropenem i.v. ó Piper-Tazobacta. i.v. Linezolid ó glucapép i.v. Tigeciclina i.v. +/Fluoroquinolona ó Arnikacina i.v. Consenso Multidisciplinar Español, Marzo 2007 Tto 1ª Elección INFECCIÓN LEVE Cefalexina 500 mg/8h VO o Amoxi-Clav. 875 mg/8h VO 13 Tto Alternativo o Alérgicos a Β-lactámicos o sospecha de SAMR Clindamicina 300 mg/8h VO o Levofloxacino 500 mg/24h VO + Septrim Forte® 1 c/12h VO Tto 1ª Elección INFECCIÓN MODERADA Ertapenem 1g/24h IV + Teicoplanina 400 mg/24h IV INFECCIÓN GRAVE Meropenem 1-2 g/8h IV + Linezolid 600 mg/12h IV o Daptomicina 6 mg/Kg/24h IV Tto Alternativo o Alérgicos a Β-lactámicos o sospecha de SAMR Levofloxacino 500 mg/24h VO/IV + Metronidazol 500 mg/8h VO/IV +/Linezolid 600 mg/12h VO/IV Tigeciclina: 100 mg/1ª dosis, después 50 mg/12h IV + Amikacina 15 mg/Kg /24h IV o Levofloxacino 500 mg/12h IV Uso racional de los antibióticos adaptado al Hospital de Cruces (Sº de Infecciosas): basado en las referencias bibliográficas 10-14-15-16 y el informe anual de resistencia a los antimicrobianos en el Hospital de cruces. 2.3.- REHABILITACION Entre los factores de riesgo de aparición de úlceras en el pie diabético, destacan las alteraciones biomecánicas como son las deformidades, la limitación articular y el aumento de la presión plantar, siendo habitualmente su origen la neuropatía periférica. La rehabilitación actúa sobre estos factores, mediante el tratamiento con calzado terapéutico, ortesis plantares y digitales, en casos más complejos, como el pie de Charcot con ortesis de descarga y contacto/inmovilización total y prótesis en las amputaciones, con el fin de realizar una distribución/ descarga de presiones, proteger/adaptar las deformidades, controlar la movilidad o sustituir/ compensar en caso de amputación. Varios estudios han demostrado un mayor riesgo de ulceración en las zonas con altas presiones, aún sin llegar a un acuerdo por los diferentes autores en los valores de riesgo, al influir tanto los aparatos empleados como las técnicas de exploración, Boulton et al ≥ 110 N/cm2 (21), Cavanagh ≥50 N/ cm2 (1992), Lavery et al ≥65 N/cm2 (22). No obstante el podoscopio y las plataformas de análisis de presiones nos ayudan a valorar las presiones y establecer un riesgo de ulceración y el tratamiento pertinente. En cuanto al calzado terapéutico, una Revisión Sistemática de la Cochrane (2000), valoró la eficacia de las intervenciones que disminuyen la presión plantar para la prevención y tratamiento del pie diabético y seleccionó 4 ECA: El ensayo de Valk encontró que el calzado terapéutico reducía la incidencia de ulceración (6). Mientras en el ensayo de Reiber (2002), realizado con 400 pacientes diabéticos y úlcera previa pero sin deformidades importantes en el pie, el calzado terapéutico no demostró reducir la recurrencia de úlceras, en comparación con el calzado convencional (7). Finalmente el estudio observacional de Busch (2003) demostró que, en pacientes con úlcera previa, el riesgo de recaída era menor si se utilizaba calzado terapéutico (8). Estos resultados tan variables junto con la revisión realizada por Singh (2005), sugieren que solamente los pacientes con neuropatía y deformidades se beneficiarían del calzado terapéutico, mientras que los pacientes de bajo riesgo sin deformidades importantes, podrían utilizar un calzado habitual, bien ajustado, de calidad y horma adecuada (23). Las ortesis de contacto total o la RCW modificada, ambas no removibles, han demostrado mayor eficacia que los vendajes tradicionales, las ortesis removibles, las medias plantillas o el calzado especial en la curación de las úlceras neuropáticas del pie no infectadas y no isquémicas, siendo las segundas una alternativa por su mayor facilidad de elaboración, menor coste, buenos resultados y mayor adherencia por parte del paciente (24). 14 Según todo lo expuesto, consideramos los siguientes criterios de derivación a Rehabilitación: – Pie deformado. – Mal apoyo plantar. – Neuroartropatía de Charcot en todos sus estadios. – Ulcera que requiera descarga, – Ulcera o intervención previa en el pie. – Amputación total o parcial. HOSPITALIZACION A DOMICILIO La Hospitalización a Domicilio (HaD) está destinada a acortar o evitar las estancias hospitalarias, ofreciendo un conjunto de cuidados médicos y de enfermería de rango hospitalario a los pacientes en su propio domicilio hasta el alta médica. Las características que la definen son la Transitoriedad, Complejidad e Intensidad de los cuidados. Pensamos que el domicilio puede ser un medio idóneo para la curación siempre y cuando la asistencia sea prestada por un equipo experto, de forma personalizada y que garantice la seguridad, con una comunicación y acceso inmediato por parte del equipo de HaD. Grandes series de pacientes tratados avalan la seguridad y eficacia de esta modalidad asistencial con una reducción significativa de gastos a igualdad de complejidad de pacientes y todo ello con unas encuestas de satisfacción de los pacientes altamente positivas. Condiciones de ingreso en HaD. • Solicitud por parte del médico responsable del paciente • Consentimiento del pacientes y/o familia • Aceptación por parte del Sº de HAD. Causas de rechazo: • Negativa del pacientes y/o familia • Problemas sociales • No necesitar asistencia especializada De la cartera de servicios propia de Hospitalización a Domicilio en relación al tratamiento del pie diabético destacaríamos las siguientes: 1.- Curas locales 2.- Tratamiento de las infecciones en el pie diabetico. (Antibioterapia endovenosa en el domicilio) 3.- Control analítico 4.- Deteccion de complicaciones y educacion sanitaria 1- CURAS TRATAMIENTO LOCAL DE LAS ÚLCERAS DEL PIE DIABETICO En los años 60 se plantea la cura en ambiente húmedo. Se trata de mantener la herida en condiciones de humedad óptimas que evite que el lecho esté seco, permitiendo que las células neoformadas puedan migrar en la herida acelerando el proceso fisiológico de cicatrización. Íntimamente a este concepto va ligado el de la gestión del exudado. Cuando se trata una ulceración en un pie diabético, debemos de tener en cuenta la fisiopatología subyacente (neuropática , neuroisquémica o isquémica), orientando el abordaje del tratamiento local según estas caracteristicas 15 El objetivo del tratamiento local es el abordaje de la herida para conseguir su cicatrización. Para ello es necesario preparar el lecho de la herida, que se hará teniendo en cuenta el acrónimo TIME: T (tissue): hace referencia al tejido no viable que ofrece las condiciones óptimas para el aumento de la carga bacteriana. Hay que realizar desbridamiento, que puede ser quirúrgico, cortante, enzimático o autolítico. En las úlceras neuropáticas, puede efectuarse un desbridamiento cortante agresivo para eliminar callos, escarificaciones, necrosis y tejido no viable. Sin embargo, aunque las úlceras neuroisquémicas se benefician de la eliminación de tejido no viable, deben desbridarse con muchísimo cuidado, con el fin de reducir el daño en el tejido viable. I (inflamación/infección): La corrección de la carga bacteriana reduce la posibilidad de infección. Los signos de inflamación e infección están ausentes o aparecen reducidos en muchos pacientes diabéticos. Además de los criterios clásicos debemos tener en cuenta cambios sutiles en la valoración de la ulcera como: aumento del exudado, decoloración de la superficie (tonos amarillos, verdes), aumento del olor, tejido de granulación friable, cavitaciones en la base de la herida, mayor molestia y sensibilidad en la lesión, cicatrización enlentecida. Debe examinarse la herida con frecuencia para detectar signos tempranos de infección, el control de la inflamación e infección puede evitar amputaciones. M (moisture=humedad): hace referencia a la “gestión del exudado”, intentando conseguir el equilibrio de humedad necesario en el lecho de la herida que favorezca la cicatrización evitando la maceración. Los apósitos existentes en el mercado que favorecen la cura en ambiente húmedo, nos ayudan a alcanzar este equilibrio. El control del exudado en la herida y a su alrededor es esencial y debe acompañar al plan de tratamiento general. E (Edge=bordes de la herida): Estimulación de los bordes epiteliales. Es importante que los bordes de las úlceras neuropáticas queden “redondeados” y que se desbride la totalidad de callos, exudado seco, escarificaciones acumuladas necrosis y restos celulares no viables, retirando las posibles barreras físicas que impidan el crecimiento del epitelio en el lecho de la úlcera y de esta manera que esos bordes progresen a la cicatrización. En el pie neuroisquémico, el objetivo es proteger los márgenes vulnerables del pie. Apósitos que favorecen la cura en ambiente húmedo Los requisitos que tiene que cumplir el apósito ideal son: - Proporcionar un medioambiente húmedo - Gestionar el exudado - Facilitar el intercambio gaseoso - Mantener Ttemperatura constante en el lecho de la herida - Proteger la herida de microorganismos, contaminaciones y traumatismos. En el pie diabético es útil que el apósito sea fácil de retirar, absorbente y permita acomodar las presiones de la marcha sin deshacerse. Existen actualmente en el mercado multitud de productos para el cuidado local de las heridas. Cada equipo sanitario escogerá los que considere mas adecuados. En las tabla 1 y 2 quedan reflejadas las características más importantes de los utilizados en nuestro medio. NORMAS GENERALES PARA EL TRATAMIENTO LOCAL Se utilizarán diferentes tratamientos en función del tipo de lesión según la clasificación de Wagner: GRADO 0: - Hiperqueratosis (callos o durezas) o grietas: crema hidratante (lanolina o urea) después de correcto lavado y secado de pies, 1 o 2 veces/día. En las fisuras se aplicarán antisépticos. La escisión de callosidades ha de hacerla el podólogo. - Deformidades (hallux valgus, dedos en martillo, pie cavo,…): valorar la posibilidad de prótesis de silicona o plantillas y preferiblemente cirugía ortopédica. - Uña incarnata: no se deben cortar las uñas, sino limarlas. Si es recidivante se realizará tratamiento quirúrgico. 16 - Micosis, pie de atleta: suele aparecer entre los dedos y en la planta como una zona enrojecida con maceración y ruptura de la piel. Tratamiento: antimicóticos tópicos y evitar humedad del pie. GRADO 1: Úlcera superficial: reposo de pie lesionado o descarga adecuada durante 3-4 semanas. Limpieza diaria con suero fisiológico y mantener medio húmedo. Valorar la lesión cada 2-3 días. Se han propuesto: soluciones antisépticas, factores de crecimiento, apósitos hidroactivos. GRADO 2: Úlcera profunda: reposo del pie lesionado o descarga adecuada. Debe sospecharse la posible existencia de infección por: celulitis, linfangitis, crepitación, afectación, ósea, exudado purulento, fetidez, profundidad, fístulas, gangrena,… Se realizará desbridamiento quirúrgico, eliminando tejidos necróticos así como la hiperqueratosis que cubre la herida. Para los esfacelos que no puedan ser retirados mediante bisturí se pueden utilizar enzimas proteolíticas o hidrogeles. Ante signos de infección utilizar compuestos a base de plata. Ante lesiones muy exudativas: alginatos o apósitos de hidrofibra de hidrolocoide y/o espumas. GRADO 3: Úlcera profunda con absceso (osteomielitis): desbridamiento quirúrgico y tratamiento antibiótico parenteral. GRADO 4: Gangrena de un dedo/dedos del pie: estudio de circulación periférica y valorar tratamiento quirúrgico. GRADO 5: Gangrena del pie: amputación. Tabla 1 CLASIFICACION DE POMADAS PRODUCTO / COMPOSICIÓN Povidona yodada CARACTERÍSTICAS INDICACIONES Antiséptico Desinfectante de piel Prevención de infección en heridas abiertas Quemaduras Heridas infectadas Nitrofural Antiséptico Sulfadiazina argéntica Antiséptico Favorece granulación y epitelización Desbridamiento enzimático Favorece granulación y epitelización Colagenasa Tejidos necrosados y esfacelados NOMBRE COMERCIAL BETADINE GEL FURACÍN SILVEDERMA IRUXOL Tabla 2: CLASIFICACIÓN DE APÓSITOS PRODUCTO CARACTERÍSTICAS INDICACIONES NOMBRE COMERCIAL Poliuretano Transparente Semioclusivo Favorece ambiente húmedo Heridas o úlceras superficiales en fase de epitelización. Protección de zonas de riesgo TEGADERM OP-SITE Espuma polimérica Semipermeable Alta capacidad de absorción Favorece ambiente húmedo Previene maceración Flexible No se descompone Úlceras grado II-IV con exudación media-alta ALEVÍN BIATAIN 17 PRODUCTO Hidrogel Hidrocoloide Alginato Hidrofibra de hidrocoloide Apósito combinado (Hidrocoloide + Hidrofibra + Espuma) Apósito Silicona INDICACIONES NOMBRE COMERCIAL Heridas y úlceras en cualquier estadio o fase evolutiva. NUGEL CARACTERÍSTICAS Transparente Favorece: . Ambiente húmedo . Desbridamiento autolítico . Granulación . Epitelización Absorbe y retiene el exudado. Forman gel, por lo que favorecen: . Ambiente húmedo . Desbridamiento . Granulación . Epitelización Gran capacidad de absorción Forma gel Hemostático y antibacteriano Reduce la maceración Gran capacidad de absorción Forma gel que favorece el ambiente húmedo Hemostático Reduce la maceración Gran capacidad de absorción Forma gel que favorece el ambiente húmedo Reduce la maceración Úlceras grado I a III CONFEEL Heridas y úlceras en cualquier estadio y fase evolutiva, muy exudativas, incluso infectadas. SEASORB Heridas y úlceras en cualquier estadio y fase evolutiva, con exudado abundante. AQUACEL Heridas y úlceras en cualquier estadio y fase evolutiva, con exudado escaso-moderado. VERSIVA Mocroadherencia selectiva Heridas en fase de granulación. Protege el tejido de granulación y el perilesional Heridas dolorosas. Permite el uso combinado con otros productos, sin Pieles frágiles cambiar el apósito Fijación de injertos Hidrocoloide + Vaselina MEPITEL URGOTUL Apósitos Carbón Absorción de microorganismos Eliminan malos olores Heridas exudativas, infectadas y con mal olor CARBONET Apósitos Plata Antimicrobiana o Bactericida Controlan exudado y mal olor Profilaxis y tratamiento de infección de heridas CONFEEL AG AQUACEL AG CURA CON SISTEMAS DE PRESION NEGATIVA Desde hace unos años se está planteando esta modalidad de tratamiento, siendo en estos momentos una terapia útil para tratar úlceras complejas o crónicas. Además supone una terapia adyuvante en el tratamiento de heridas abiertas tras desbridamiento quirúrgico. La terapia con presión negativa tópica es un sistema de cicatrización no invasivo y activo que utiliza una presión negativa localizada y controlada para estimular la curación de heridas agudas y crónicas. Este tipo de cura precisa de un sistema de vacío y material para sellado de la herida. La presión negativa (subatmosférica) es distribuida de igual forma a toda la herida, eliminando todo el exudado de la misma. 18 VENTAJAS • Estimula el flujo sanguíneo. • Aplica presión negativa para tensar uniformemente una herida. • Eliminación continua del fluido retenido (entorno húmedo). • Crecimiento del tejido de granulación. • Reduce la carga bacteriana y mejora la resistencia del tejido a la infección. • Facilita el intercambio gaseoso (microorganismos anaerobios). • Disminuye la contaminación externa. • Estimula la proliferación de tejidos adyacentes a la herida.. INDICACIÓN EN EL PIE DIABÉTICO: Se ha demostrado que tarda menos tiempo en comenzar a curar de forma favorable y en cerrar la úlcera. Está asociado con menos tiempo de hospitalización, menos complicaciones y menos costes. Probablemente todo esté relacionado con la aceleración en la formación de tejido de granulación. CONTRAINDICACIONES EN EL PIE DIABETICO • Desbridamiento incompleto • Exposición de vasos sanguíneos • Heridas malignas • Osteomielitis no tratada ALGORITMO DE ACTUACIÓN Úlcera en pie diabético Preparación del lecho de la herida Disminuir carga bacteriana. Tratamiento de la infección Desbridamiento Control del exudado Quirúrgico: bisturí Enzimático: colagenasa Autolítico: hidrogeles Apósitos de plata Sistema de presión negativa Heridas exudativas Apósitos de hidrofibra de hidrocolide Alginatos Sistema de presión negativa 19 CURAS Y CONTROL POSOPERATORIO TRAS CIRUGIA DE REVASCULARIZACION Y /O AMPUTACION Hospitalización a Domicilio se encargará del control postoperatorio de este tipo de pacientes. El tratamiento de heridas resultantes de un proceso de cirugía de revascularización, cubrición con injertos cutáneos o tras una amputación, seguirá el mismo esquema de tratamiento que el descrito previamente para las úlceras. Se realizará limpieza con suero fisiológico y cura con antiséptico (Povidona yodada) cada 24-48 horas. Se retirará sutura a los 15 días aproximadamente de la intervención quirúrgica. Si existiera dehiscencia de bordes de la herida quirúrgica se realizará la cura siguiendo los criterios previamente descritos. 2- ANTIBIOTERAPIA ENDOVENOSA EN DOMICILIO El tratamiento de la infección en el pie diabético, quedaría englobado en el programa de Antibioterapia Endovenosa Domiciliaria (TADE) Desde hace 30 años en que se publicaron los primeros casos de antibioterapia parenteral aplicada en el domicilio, multitud de trabajos han avalado la eficacia y seguridad de esta modalidad terapéutica en una amplia variedad de procesos infecciosos y así la administración de medicación intravenosa ha llegado a formar parte de las actividades primordiales de la Hospitalización a Domicilio. La comercialización de nuevos antimicrobianos para administración parenteral, con un espectro de acción amplio, menor incidencia de efectos adversos y mejor posología, ha ampliado el abanico de infecciones tratables en el domicilio y ha impulsado los programas de tratamiento antimicrobiano domiciliario endovenoso (TADE). En el Servicio de Hospitalización a Domicilio del Hospital de Cruces llevamos prácticamente una década infundiendo antibióticos en el domicilio llegando a tratar unos 700 episodios/año con un porcentaje de reingresos por fallo del tratamiento en torno al 5%. Para la administración de antibióticos endovenosos en domicilio, hemos de tener en cuenta los siguientes puntos: SELECCION DE LOS PACIENTES Hay que tener siempre presentes las circunstancias como son la situación de estabilidad clínica, las patologías concomitantes, el acceso venoso y calidad de vida, factores todos que influirían en la prescripción de la pauta terapéutica más adecuada. El domicilio debe reunir las condiciones de higiene más apropiadas. Es fundamental conocer el grado de colaboración que podamos tener del paciente y familia antes de iniciar la terapia en el domicilio. La explicación del tratamiento y el tipo de cuidados que se requieren, se dan por escrito. ELECCIÓN DEL ANTIBIOTICO Dentro de un programa TADE, la selección de los antimicrobianos constituye uno de los apartados de mayor relevancia ya que presenta algunas singularidades, respecto a la administración en las plantas del hospital, que el personal facultativo debe conocer. 1.- TIPO DE INFECCION. Aunque no existen trabajos específicamente relacionados con el tratamiento de infecciones en el pie diabético con TADE, se han descrito múltiples cuadros infecciosos subsidiarios de tratamiento domiciliario en relación a infecciones de piel y tejidos blandos y osteoarticulares. Se puede decir que cualquier infección es tratable en un programa TADE siempre que la situación clínica de estabilidad lo permita. El tratamiento en las formas leves y moderadas de las infecciones de pie diabético es asumible en HAD. En muchas ocasiones la prescripción se realiza de forma empírica 20 y es necesario tener en cuenta el microorganismo probablemente implicado en la infección, conociendo la frecuencia de aparición del mismo y el patrón de resistencias a los antimicrobianos que presente el hospital frente a los distintos gérmenes. Las infecciones producidas por microorganismos multirresistentes (SARM, enterobacterias productoras de BLEE, Pseudomonas…) constituyen un problema sanitario de creciente magnitud pues implican ingresos hospitalarios para antibioterapia endovenosa, aislamientos… En este sentido, los Servicios de HAD constituyen un recurso eficaz para el tratamiento de este tipo de infecciones, contribuyendo a minimizar su transmisión a nivel intrahospitalario evitando numerosas estancias hospitalarias 2.- CARACTERÍSTICAS DEL FÁRMACO. ACCESO VENOSO. Lo primero a tener en cuenta son las propiedades farmacodinámicas y farmacocinéticas del producto a infundir como son el pH, la osmolaridad y la capacidad irritante. La estabilidad del producto es el parámetro, y a su vez el limitante, más importante dentro de la TADE pues va a condicionar en muchos casos la adopción de alternativas a la administración de los antimicrobianos como podría ser la utilización de bombas de infusión o los programas de autoadministración. La semivida del producto condiciona la posología (dosis diarias a infundir), por lo que parecen idóneos para su utilización, aquellos fármacos que por su larga vida media puedan administrarse en dosis única diaria ya que reducen las cargas de trabajo, se minimizan las complicaciones (infección de catéter secundaria a la manipulación de los accesos venosos) y ocasiona menos interferencias en las actividades del paciente. En la Tabla 1 se presentan los antimicrobianos más comúnmente utilizados en TADE adaptados a las pautas seleccionadas para la Unidad de Pie Diabético de nuestro hospital, con las características más relevantes respecto del fármaco. Las características del fármaco van a condicionar el tipo de acceso venoso. En la Tabla 2 presentamos un esquema con los antimicrobianos de mayor uso, acerca de cómo seleccionar el tipo de vía venosa, en función de la duración del tratamiento y de la capacidad potencialmente irritante del fármaco a infundir. BOMBAS DE INFUSION Estos dispositivos electrónicos portátiles permiten la infusión de antibióticos y otras medicaciones a una dosificación y frecuencia variables con una programación previa. Aumentan las posibilidades terapéuticas permitiendo el mantenimiento de las pautas hospitalarias y fomentan la autonomía del enfermo. Su utilidad está limitada básicamente por la estabilidad del producto. Actualmente utilizamos, casi en exclusiva, el modelo Cadd Legacy Plus®. 3. MONITORIZACIÓN CLINICA Y ANALITICA •Existen en el mundo diferentes modelos organizativos destacando la autoadministración por parte del enfermo, programas basados en enfermería, o como es el caso en Hospitalización a Domicilio, controlado por un equipo de médicos y enfermeras, que garantiza una asistencia especializada. Todo ello encaminado a evitar efectos secundarios de un programa de este tipo, estimados en un 3-10 %. •Explicaremos el tipo de tratamiento y cuidados al paciente y a los cuidadores en la primera visita dentro del hospital y posteriormente en el domicilio, calibrando el grado de colaboración que podamos precisar por parte de ellos, completando un procedimiento de educación sanitaria. •Ciertas patologías exigen una monitorización más exhaustiva, así como también la administración de antibióticos como aminoglucósidos y vancomicina. •Por regla general realizamos como mínimo un control analítico semanal y los cuidados diarios de la vía. •La primera dosis debe de ser siempre supervisada y para determinados fármacos realizada en el hospital (Urgencias, Consultas Externas, Planta, Hospital de Día u Hospitalización a Domicilio). 21 TABLA 1 FÁRMACO AMIKACINA AMOXICLAVULÁNICO AMPICILINA CLINDAMICINA DAPTOMICINA ERTAPENEM IMIPENEM LEVOFLOXACINO LINEZOLID MEROPENEM METRONIDAZOL PIPERACILINA-TAZOBACTAM TEICOPLANINA TIGECICLINA VANCOMICINA CONCENTRACIÓN ADECUADA mg / ml TIEMPO DE INFUSIÓN 2,5 - 250 5 - 20 30 6 - 12 1-5 50 2,5 - 5 5 2 1 - 20 30’ - 60’ 30’ 30’ - 60’ 30’ 30’ 30’ 40’ - 60’ 30’ 30’ - 120’ 15’ - 20’ 1h 20’ - 30’ 3’-5’ (bolus) 30’ - 60’ mínimo 60’ 100 - 150 1 - 16 10 5 ESTABILIDAD NEVERA AMBIENTE 2 - 8 ºC 25 ºC 2 meses uso inmediato 48 h 7 días 48 h 24 h 24 h 24 h uso inmediato 8h 24 h 12 h 6h 4h 72 h uso inmediato uso inmediato 48 h 21 días uso inmediato 7 días 24 h 48 h uso inmediato 24 h TABLA 2 TIPO DE CATÉTER SEGÚN ACCESO Y DÍAS DE TRATAMIENTO < 1 semana 1 - 2 semanas 3 - 4 semanas > 4 semanas Bomba Manual Bomba Manual Bomba Manual Bomba Manual AMIKACINA CM CCO CM CM CM CM CC CC AMOXI-CLAVULÁNICO CCO CM CM CC AMPICILINA CM CM CC CC CLINDAMICINA CM CCO CM CM CM CM CC CC DAPTOMICINA CCO CM CM CC ERTAPENEM CCO CM CM CC IMIPENEM CCO CM CM CC LEVOFLOXACINO CCO CM CM CC LINEZOLID CM CCO CM CM CM CM MEROPENEM CCO CM CM CC METRONIDAZOL CM CCO CM CM CM CM CC CC PIPERACILINA-TAZOBACTAM CM CCO CM CM CM CM CC CC TEICOPLANINA CCO CM CM CC TIGECICLINA CCO CM CM CC VANCOMICINA CM CM CC CC CC CC CC CC FÁRMACO : No se usa este acceso CC: Catéter central; CCO: Catéter corto; CM: Catéter medio 22 3. DETECCION DE COMPLICACIONES Y EDUCACION SANITARIA Además de la realización de curas de heridas y el tratamiento de infecciones en el pie diabético en el seguimiento del paciente por parte de Hospitalización a Domicilio se realizará un control metabólico y clínico estrecho. Siendo el fin prioritario detectar complicaciones tanto a nivel de la vasculopatía ( empeoramiento de la isquemia de la extremidad) como la detección de una posible osteomielitis. La posibilidad de realizar exploraciones complementarias (ecografía doppler, RMN…) en régimen de ingreso hospitalario permitiría la detección precoz de dichas complicaciones. COORDINACION CON LA ATENCION PRIMARIA La HAD tiene que servir de puente entre la oferta del hospital y su área sanitaria, favoreciendo las relaciones con los distintos servicios hospitalarios. Supone un medio idóneo para coordinar el nivel primario y el hospitalario. Planta Hospitalaria C.Externas H. de Día Corta estancia A. Primaria Sº Urgencias 23 H. A Domicilio BIBLIOGRAFÍA: 1.Marinel-lo J, Blanes JI, Escudero JR, et al. Consenso de la SEACV sobre pie diabético. Angiología 1997; 5: 193-230. 2.Internacional Working Group on the Diabetic Foot. International Consensus on the Diabetic Foot. The Nederlands, 1999. 3.Reiber GE, Boyko EJ, Smith DG. Lower extremity foot ulcers and amputations in diabetes. En: Harris MI, Cowie C, Stern MP (Eds.) Diabetes in America, 2nd ed. (NIH publ. no. 95-1468). U.S. Government Printing Office, Washington DC, 1995. 4.Pavicic T, Korting HC. Xerosis and callus formation as a key to the diabetic foot syndrome: Dermatologic view of the problem and its management. JDDG 2006; 4: 935-941. 5.McCabe CJ, Stevenson RC, Dolan AM. Evaluation of a diabetic foot screening and protection programme. Diabet Med. 1998;15(1):80-4. 6.Valk GD, Kriegsman DM, Assendelft WJ. Patient education for preventing diabetic foot ulceration. Cochrane Database Syst Rev. 2005;(1):CD001488.]. 7.Reiber GE, Smith DG, Wallace C, Sullivan K, Hayes S, Vath C, et al. Effect of therapeutic footwear on foot reulceration in patients with diabetes: a randomized controlled trial. JAMA. 2002;287(19):2552-8. 8.Busch K, Chantelau E. Effectiveness of a new brand of stock ‘diabetic’ shoes to protect against diabetic foot ulcer relapse. A prospective cohort study. Diabet Med.2003;20(8):665-9. 9.Frykberg RG, Armstrong DG, Giurini J et al. Diabetic foot disorders: A clinical practice guideline. J Foot Ankle Surg 2000; 39: S1-S60. 10.Lipsky BA. Medical treatment of diabetic foot infections. Clin Infect Dis 39 (Suppl 2): S104-S114, 2004. 11.Dormandy JA, Rutherford RB. Management of peripheral arterial disease. TASC Working Group. J Vasc Surg 2000; 31: S1-296. 12.Frykberg RG, Zgonis T, Armstrong DG, Driver VR et al. Diabetic foot disorders: a clinical practice guideline. J Foot Ankle Surg 2006; 45 Nº 5: S1-66. 13.Lipsky BA, Berendt AR, Deery HG, Embil JM et al. Diagnosis and treatment of diabetic foot infections. Clin Infect Dis 39: 885-910, 2004. 14.Documento de consenso sobre el tratamiento antimicrobiano de las infecciones en el pie diabético. Asociación Española de Cirujanos (AEC), Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular (SEACV), Sociedad española de Medicina Interna (SEMI) y Sociedad española de Quimioterapia (SEQ). Rev Esp Quimioterap, Marzo 2007; Vol. 20 (Nº 1): 77-92. 15.Lipsky, BA, Berendt A. The diabetic foot. Essentials of managing infectious complicactions. 2008. 16.Rao N, Lipsky BA. Optimising antimicrobial therapy in diabetic foot infections. Drugs 2007; 67: 195- 214. 17.Trissel LA.Handbook on Inject. Drugs.Bethesda:Am.Soc.H. Sys.Pharm..14 th Ed. 2006 www.agemed.es 18.Practice Guidelines for OPAT. Clin Infec Dis 2004:38 (15 June). 1651 19.Tice AD. Outpatient intravenous antibiotic therapy. In: Mandell GL, Bennett JE, Dolin R eds. Principles and Practices of Infectious Diseases. 5 ed. Philadelphia: Churchill Livingston, Harcourt Health Sciences: 2000: 546-50. 20.Protocolos. Tratamiento Antimicrobiano Domiciliario Endovenoso (TADE). Sociedad Española de Medicina Interna. 21. Boulton AJ et al. Dynamic foot pressure and other studies as diagnostic and management aids in diabetic neuropathy. Diabetes Care 1983;6:26-33. 22. Lavery LA et al. Practical Criteria for screening patients at high risk for diabetic foot ulceration. Arch Intern Med 1998;158:157-62. 23. Sing N et al. Preventing foot ulcers in patients with diabetes. JAMA 2005;293:217-28. 24. Katz IA et al. A randomized trial of two irremovable off-loading devices in the management of plantar neuropathic diabetic foot ulcers. Diabetes Care 2005;28:555-9. 25. European Wound Management Association (EWMA). Position Document: Wound Bed Preparation in Practice. London: MEP Ltd, 2004. 24 ANEXO 1: Examen Básico del pie diabético Modificado de: Driver VR et al en Diabetes Care 28:248-253, 2005. - Historia clínica: antecedentes médico-quirúrgicos de interes e historia social - Evolución de su diabetes: Complicaciones, cirugías, control de la glucemia - Conocimiento de la enfermedad y percepción del riesgo por parte del paciente - Historia actual: motivo de consulta y HbA1c - Valorar el aspecto general del pie: piel, vello, uñas. callosidades, fisuras… - Examinar los zapatos y la habilidad del paciente para la auto-evaluación - Existencia de deformidades o no - Ha tenido problemas previos en el pie? - Valorar pérdida de sensibilidad: filamento de Semmes-Westein 10g - Exploración vascular: pulsos distales y doppler con ITB si es posible - Descripción de la úlcera si la hubiera Riesgo (clasificación) Características Bajo riesgo Sensibilidad conservada, pulsos palpables Neuropatía, ausencia de pulsos u otro factor de Riesgo moderado riesgo Neuropatía o pulsos ausentes junto a deformidad o Alto riesgo cambios en la piel o úlcera previa Pie ulcerado - Educación en diabetes y autocuidados del pie - Recomendaciones sobre calzado especifico (ortopedia) - Cuidado de uñas, piel y úlceras - Realización de pruebas diagnósticas si precisa. 25 Frecuencia de inspección Anual Cada 3-6 meses (visitas de control) Cada 1-3 meses Tratamiento individualizado, Derivación a Cirugía Vascular ANEXO 2: Unidad de pie diabético. Prevención AN EXO 2 Unidad de pie diabético. Prevención FECHA……………………………………………… Número Historia:…………………………………… Apellidos:…………………………………………… ……….................................................................. Nombre: …………………………………………..... Fecha Nacimiento:………………………………… Edad:………………………………………………... Sexo: Mujer Hombre Situación laboral: Activo/Jubilado/Discapacidad Situación familiar: Presente/Ausente Higiene Color Temperatura Piel distrofica Grietas talón Hiperqueratosis Vesiculas Uñas DERECHO NORMAL PATOLOGICO TIPO Diabetes: NID ID FECHA diagnóstico: TRATAMIENTO: HbA1c: IZQUIERDO NORMAL PATOLOGICO OTROS DATOS HTA NO SI DLP NO SI TABACO NO SI MICROANGIOPATIA SI: -No prolif. Retinopatía NO -Proliferativa SI: -Incipiente Nefropatia NO -Establecida MACROANGIOPATIA Cerebral NO SI Cardiaca NO SI Periférica NO SI Claudicación NO SI AMPUTACION PREVIA NO Menor Mayor Localización I D Dedos garra/martillo Hallus valgus Hallus rigidus Interdigitos Pie cavo Pie plano Charcot Atrofia muscular Ulcera Pulso pedio Pulso tibial post. ROT Sensibilidad. Monofilamento Biotensiómetro Podoscopio Doppler Arteriografia EMG RX PESO Otras exploraciones Podólogo Factor precipitante úlcera Ejercicio Calzado adecuado Riesgo (clasificación) o =callo • =ulcera TALLA NO NO NO NO SI SI SI SI Características Frecuencia controles Bajo riesgo Sensibilidad normal y pulsos palpables. Anual Riesgo moderado Neuropatía, ausencia de pulsos u otro factor de riesgo. Cada 3-6 meses Riesgo alto Neuropatía o ausencia de pulsos junto a deformidad o cambios en la piel o Cada 1-3 meses antecedente de úlcera. Tratamiento individualizado. Derivación a Cirugía Vascular Pie ulcerado EDUCACION REPOSO EJERCICIO REHABILITACION 26 TRATAMIENTO NO SI 27 ANEXO 3: Algoritmo de manejo en urgencias ANEXO 4: Tratamiento ambulatorio de la ulcera en el pie diabetico FECHA:_____________________________ PACIENTE:_________________________________________________________ 1. CUIDADO LOCAL DE LA ULCERA EN LE PIE DIABETICO: Tejido desvitalizado Control del exudado Control de la carga bacteriana Piel perilesional Tipos Tratamiento Cantidad Tratamiento Tipos Tratamiento Necrótico (Tejido presente en úlcera isquémica)* Momificación (povidona iodada) Abundante Hidrofibra y/o alginato y/ espuma Macerada Productos barrera (cremas Óxido de zinc) Esfacelar Desbridamiento cortante + enzimático + autolítico (colagenasa + hidrogel) Moderado Hidrofibra y/o espuma Hiper queratósica Decapaje mediante bisturí Fibrinoso Desbridamiento enzimático + autolítico (colagenasa + hidrogel) Escaso/ nulo Tej.epitelización: hidrocoloide Tej.necrótico* Eccematosa/ seca Hidratación (AGHO emulsión) APÓSITOS CON PLATA *No candidata a revascularización 2. PAUTAS DE SEGUIMIENTO: a. ¿El paciente, tiene un píe diabético infectado? ¿Qué grado de severidad tiene la infección? b. ¿Debo cultivar la herida? i. No se toman muestras de cultivo de heridas sin signos de infección ii. La recogida de muestras con torunda no es útil iii.Hemocultivos a pacientes con infección severa sistémica 28 c. ¿Cómo debo tomar las muestras? i. Limpieza de la úlcera ii.Aspirar exudado con jeringa + tapón/ aspirar desde zona de celulitis tras introducción de SSF + tapón/raspado con bisturí o biopsia del tejido del fondo de la úlcera en frasco estéril + SSF → a Microbiología d. Antibioterapia INFECCIÓN 1ª ELECCIÓN ALTERNATIVA LEVE CEFALEXIMA 500mg/8 v.o. o AMOXICILINA-CLAVULANICO 875mg/8h v.o. CLINDAMICINA 300mg/8h v.o. o LEVOFLOXACINO 500mg/día v.o. + SEPTRIM FORTE® 1c/12h v.o. MODERADA ERTAPENEM 1g/24h i.v. + TEICOPLANINA 1erdía 400 mg/12h, después 400mg/24h i.v. LEVOFLOXACINO 500mg/día v.o./i.v. + METRONIDAZOL 500mg/8h v.o./i.v. +/LINEZOLID 600mg/12h v.o./i.v. SEVERA MEROPENEM 1-2g/8h i.v. + LINEZOLID 600mg/12h i.v. o DAPTOMICINA 6mg/Kg/día i.v. TIGECICLINA 1ª dosis 100mg i.v. Luego 50mg/12h + AMIKACINA 15mg/Kg/día i.v. o LEVOFLOXACINO 500mg/12h i.v. 3. DERIVACIONES: a. Cuando derivar a la urgencia i. Úlcera requiere desbridamiento quirúrgico (pie infectado) ii. Signos de isquemia crítica: grados III-IV (Fontaine) b. Cuando derivar a la consulta de Cirugía Vascular (Unidad de Píe Diabético) i.Toda úlcera en pie diabético que no responde al tratamiento médico en Atención Primaria (según se ha especificado) en 7 o 10 días ii.Toda úlcera en pie diabético que, aunque no complicada, se cronifica más de cuatro semanas y no es capaz de cerrar (incluido “probing to bone” positivo) c. Cuando derivar a la consulta de rehabilitación (RHB) i.Todo pie diabético sin ulceración, con neuropatía confirmada y/o deformidad importante (pie de Charcot), mal apoyo plantar o amputación previa d. Cuando derivar a Hospitalización a Domicilio ii.Si se precisa curas de cierta complejidad (bien por frecuencia o por necesidad de terapia VAC) iii.Si se precisa antibioterapia endovenosa (en caso de una infección moderada o tras obtenerse cultivos positivos sin posibilidad de una alternativa oral) 4. GESTION DE LAS DERIVACIONES: i.Consulta de CCV-UPD (Dra. Vela) / RHB (Dra. Múgica): solicitar cita desde el centro de salud correspondiente, mediante el sistema informático de citas o mediante fax. ii. Hospitalización a domicilio: interconsulta electrónica. 29 ANEXO 5: Unidad del pie diabético Apellidos: ................................................................................................... Nombre: . .................................................................................................... Fecha Nacimiento: .................................................................................. Número Historia: ..................................................................................... Edad: ............................................................................................................ Sexo: . ........................................................................................................... EXPLORACIÓN Vasculopatía: si/no Etiología: NP/ Neuro-isq Infección: si/no Osteomielitis: si/no Inflamación >2cm: si/no Sondaje y desbridamiento Profundidad tejidos afectados Describir el exudado Tomar cultivos adecuados Clasificación IDSA MOTIVO DE CONSULTA Úlcera activa nueva Úlcera activa recurrente Úlcera de larga evolución Infección que no responde al tto habitual en 2-3 días Aparición reciente de un dedo o zona del pie edematosa, EURODIALE roja y caliente Isquemia grado III y IV, dolor en reposo y lesiones tróficas PEDIS SEVERIDAD 1 No Infectada 2 Media 3 Moderada 4 Severa Infeccion EVIDENCIA INFECCIÓN NO SI ----------------------------NO A B ----------------------------SI C D Herida sin pus ni inflamación Presencia de ≥2 signos de inflamación. Pero no se extiende más allá de 2cm CO-MORBIL Y FÁRMACOS de la úlcera y la infección solo afecta piel y subcutáneo. Diabetes ID Infección estable, pero con uno de los siguientes signos: NID celulitis más allá de los 2cm, reguero linfangítico, HTA extensión a fascia superficial, absceso profundo, DLP gangrena y afecta músculos, tendones, articulaciones Cardiopatía o hueso. AIT Infección en un paciente con repercusión sistémica Retinopatía o inestabilidad metabólica (fiebre, escalofríos, vómitos, IRC taquicardia, hipotensión, confusión, leucocitosis, severa IRC terminal hiperglucemia, acidosis o azotemia. Amputación previa 1ª elección Alérgicos β o SAMR Cefalexima 500mg/8 v.o o Amoxi-clav 875mg/8h v.o Clindamicina 300mg/8h v.o o Levofloxacino 500mg/día v.o + Septrim forte ® 1 c/12h v.o Moderada Grave (Polimicrob.) Cocos gram + aerobios. Bacilos gram-aerobios y anaerobios Ertapenem 1g/24h i.v + Teicoplanina 400mg/24h i.v Levofloxacino 500mg/ día v.o/i.v. + Metronidazol 500mg/8h v.o/i.v. +/Linezolid 600mg/12h v.o/i.v. Muy Grave Meropenem 1-2g/8h i.v + Linezolid 600mg/12h i.v o Daptomicina 6mg/Kg/día Tigeciclina 100mg 1ª dosis Luego 50mg/12h i.v + Amikacina 30mg/Kg/día o Levofloxacino 500mg/12h v.o Leve Cocos gram + aerobios ARTERIOP INFECCIÓN 30 VÍA RÁPIDA ISQUEMICOS Arteriografía en < de 48h Tto endovascular Tto cirugía abierta Técnicas mixtas Amputación Mayor/menor OBSERVACIONES ANEXO III: CRONOGRAMA TALLERES FORMATIVOS 9:00-9:15 9:15-9:30 Presentación de ponentes y participantes Test inicial de evaluación de conocimientos 9:30-9:50 Introducción a la Patología del Pie Diabético. Unidad de Pie Diabético del Hospital de Cruces. Criterios de Derivación a la Unidad 9:50-10:00 Ulcera neuropática vs neuroisquémica 10:00-10:30 10:30-11:00 11:00-11:15 11:15-11:45 Bloque práctico: Exploración vascular básica: pulsos arteriales en MMII. “Indice tobillo-brazo” Patología Infecciosa del Pie Diabético DESCANSO Bloque práctico: Toma de cultivos y transporte de muestras. Desbridamiento con prácticas de cirugía menor 11:45-12:00 Programa TADE (Tratamiento Antibiótico Domiciliario Endovenoso) 12:00-12:30 Protocolo de curas en el pie diabético 12:30-13:00 13:00- 13:15 Bloque práctico: Apósitos y productos en las curas del pie diabético. Terapia de presión negativa tópica (VAC®). Elección del acceso venoso. Sistemas de infusión de antimicrobianos Test final de evaluación de conocimientos. Evaluación del Curso En este apartado se plantea la problemática de la patología del pie diabético desde el punto de vista de la morbimortalidad y su impacto económico. Necesidad de crear una Unidad de Pie Diabético en nuestro hospital y descripción del circuito asistencial. Importancia de la diferenciación entre los dos tipos de úlceras de cara a realizar un diagnóstico preciso y elección del tratamiento más adecuado. En pequeños grupos se adiestra en la realización de una exploración vascular básica y utilización del doppler para obtener el índice tobillo-brazo. Exposición de los aspectos más relevantes del documento de consenso en relación a fisiopatología, microbiología y pautas de tratamiento antimicrobiano. Exposición de técnicas para la toma de cultivos y su trasporte Conocimientos sobre este tipo de programas debido a que parte importante del tratamiento se realizará en el domicilio del paciente. Cura en ambiente húmedo. Preparación del lecho de la herida. Apósitos y productos de cura en ambiente húmedo. Terapia de Presión Negativa Tópica. Exposición en grupos reducidos de apósitos y pomadas para curas. Presentación de los distintos sistemas de infusión de antimicrobianos y catéteres venosos. 1 ANEXO IV: PLANTILLAS PARA EL EXAMEN BASICO DEL PIE DIABÉTICO EN RIESGO Examen Básico del pie diabético Modificado de: Driver VR et al en Diabetes Care 28:248-253, 2005. - Historia clínica: antecedentes médico-quirúrgicos de interés e historia social - Evolución de su diabetes: Complicaciones, cirugías, control de la glucemia - Conocimiento de la enfermedad y percepción del riesgo por parte del paciente - Historia actual: motivo de consulta y HbA1c - Valorar el aspecto general del pie: piel, vello, unas. callosidades, fisuras… - Examinar los zapatos y la habilidad del paciente para la auto-evaluación - Existencia de deformidades o no - Ha tenido problemas previos en el pie? - Valorar pérdida de sensibilidad: filamento de Semmes-Westein 10g - Exploración vascular: pulsos distales y doppler con ITB si es posible - Descripción de la ulcera si la hubiera - Educación en diabetes y autocuidados del pie - Recomendaciones sobre calzado especifico (ortopedia) - Cuidado de unas, piel y ulceras - Realización de pruebas diagnosticas si precisa. 2 Unidad de pie diabético. Prevención FECHA…………………………………………….. Número Historia:…………………………………. Apellidos: ……………………………………………………... Nombre: …………………………………………... Fecha Nacimiento:……………………………….. Edad:………………………………………………. Sexo: Mujer Hombre Situación laboral Situación familiar DERECHO Color Temperatura Piel Uñas Dedos Hallus valgus Hallus rigidus Callos Ulcera Pulsos Sensibilidad ROT Podoscopio Biotensiómetro Doppler Arteriografia EMG RX PESO Otras exploraciones Podólogo Higiene TIPO Diabetes: Tratamiento FECHA diagnóstico: - HTA TRATAMIENTO: - HLP - Tabaco - HbA1c: Microangiopatía Retinopatía Nefropatía Neuropatía - Macroangiopatía: - Cerebral - Cardiaca - Periférica IZQUIERDO - Amputación previa I D TALLA ULCERA Riesgo (clasificación) Características Actitud Bajo riesgo Sensibilidad conservada, pulsos palpables. Revisión anual Riesgo moderado Neuropatía, ausencia de pulsos u otro factor de riesgo Educación cuidado de los pies. Vigilancia Riesgo alto Neuropatía o pulsos ausentes junto a deformidad o cambios en la piel o úlcera previa. Pie ulcerado Remitir a unidad pie diabético MOTIVO CONSULTA EN REHABILITACIÓN □ Pie deformado □ Mal apoyo plantar □ Úlcera actual que requiera descarga □ Úlcera previa □ Intervención previa en el pie □ Amputación TRATAMIENTO MÉDICO INDICADO: TRATAMIENTO Educación cuidado de los pies Ejercicio. Tratamiento en RHB: - Plantillas - Ortesis digitales - Otras ortesis - Calzado ortopédico - Otro 3 ANEXO V: MATERIALES DESARROLLADOS PARA EL MANEJO EN URGENCIAS Algoritmo de manejo Tríptico para el personal de la urgencia 4 Poster para el manejo del píe diabético en urgencias 5 ANEXO VI: TABLA DE ANTIBIOTICOS PARA EL TRATAMIENTO DEL PIE DIABETICO INFECTADO Infección 1ª elección Leve Cocos gram + aerobios Moderada Grave (Polimicrob.) Cocos gram + aerobios. Bacilos gram - aerobios y anaerobios Muy Grave Cefalexina 500mg/8 v.o. o Amoxi-clav 875mg/8h v.o. Ertapenem 1g/24h i.v. + Teicoplanina 400mg/24h i.v. Meropenem 1-2g/8h i.v. + Linezolid 600mg/12h i.v. o Daptomicina 6mg/Kg/día Alérgicos β o SAMR Clindamicina 300mg/8h v.o. o Levofloxacino 500mg/día v.o. + Septrim forte ® 1c/12h v.o. Levofloxacino 500mg/día v.o. + Metronidazol 500mg/8h v.o. +/Linezolid 600mg/12h v.o. Tigeciclina 100 mg 1ª dosis, luego 50mg/12h i.v. + Amikacina 30mg/Kg/día o Levofloxacino 500mg/12h v.o. Modificado por el Servicio de Infecciosas del Hospital de Cruces sobre el Consenso Multidisciplinar Español, Marzo 2007 6 ANEXO VII: TRATAMIENTO AMBULATORIO EN LA ULCERA DEL PIE DIABETICO 7 ANEXO VIII: PROGRAMA DEL CURSO 8 DFI: Diabetic Foot Infection Center of Excellence DAY ONE: Morning 08:30h Welcome & Introduction Dr. Ferreiro Dra. P. Vela 08:45h The Diabetic Foot patient –Special challenges posed to the clinician by these patients Dr. Vidales Dr. Cortazar (Endocrinologist) 09:30h A Multi-disciplinary approach to managing the Diabetic Foot patient to enhance outcomes Dra. P. Vela (Vascular Surgery) 10:15h The “Toe-Flow” concept addressing the biomechanical concerns of a diabetic foot ulcer C. Pesquera & T. Iglesias (Podiatrist) Dra. C. Mugica (RHB) 11:00h Break 11:15h Diabetes & Diabetic Foot Infection: A growing treatment challenge now and in future Dra. Corton (Emergency department) DFI: Diabetic Foot Infection Center of Excellence DAY ONE: Afternoon 12:00 Microbiology of DFI & epidemiology of antimicrobial resistance in diabetic foot infections APPROACHING ON INFECTION MANAGING N. Ortiz & S. Osma (Vascular nurses) Dr. García Gómez (Internal Medicine) 12:45 LUNCH 13:45 Management of DFI Dra. Bereciartua (Infectious disease) 14:30 Development of hospital Protocols in DFI management based on IDSA & Spanish Guidelines Dra. Bereciartua (Infectious disease) 15:15 Break 15:30 DFI Case Studies – Debridement / Off-loading Vascular diagnosis Infectious disease Dr. Quintana Rivera Dr. Ganzarain (Vascular Residents) 17:30 Wrap up Chairperson 20:00 Participants’ Group Dinner DFI: Diabetic Foot Infection Center of Excellence DAY TWO: morning & afternoon sessions 08:30 Review of Day 2 Agenda Dra. P. Vela 08:45 Outpatient Parenteral Antibiotic Treatment (OPAT) – in support of patient-centered care Dra. Larrazabal (Hospital at Home) Dr. Basterretxea (Hospital at Home) 09:45 A Multi-disciplinary approach to managing the DFI patient to enhance outcomes – from Challenge to Implementation Dra. Arana (Investigation department) 10:30 Break 10:45 Patient Rounds in surgical ward & rotation through other departments 12:45 Lunch 13:45 DFI Case Studies – European Physicians Diabetic vascular disease “Pull-up a chair in the OR and let’s discuss limb salvage” 16:15 Wrap up: Closing Comments Dra. P. Vela 16:30 Day 2 & Program Close European participants will depart for home after the program ends on the afternoon of the second day. For those needing to remain the night due to late/difficult flight connections, MSD will cover the cost of their hotel. Mª Pilar Vela Orús received her medical degree in 1987 from the University of Zaragoza, becoming a specialist in Vascular Surgery seven years later. In 2000, she passed the European Board of Surgery Qualification exam in Vascular Surgery and, from 2008 to 2010 completed a Master’s in Minimally Invasive and Endovascular Techniques at the University of Zaragoza. Pilar has been the Technical Coordinator of the Diabetic Foot Unit at Cruces Hospital in the Basque Country since 2009. Prior to this, in 2007, she and her team developed clinical pathways focusing on the infected and/or at-risk diabetic foot. Her major professional interest is obtaining a reduction in the number of major amputations in diabetic patients by implementing multidisciplinary Diabetic Foot Units. Currently she participates in meetings of the Working Group on the Diabetic Foot of Spanish Society for Vascular Surgery and she has been appointed as the Spanish representative at the European Society for Vascular Surgery from 2010 to 2013. Elena Bereciartua Bastarrica obtained her degree in 1993 from the University of Navarra, completing her specialization in Internal Medicine in 1998. Before her current position in the Infectious Diseases Unit of Cruces Hospital, she worked in the Internal Medicine Services of several different hospitals in the region. Since 2008, Elena has also been an associate professor at the University of the Basque Country. Her area of expertise is infectious diseases, her main professional interest being health care-related infectious diseases, while her research extends to diabetic foot infections. She participated in the development of guidelines for the Diabetic Foot Unit of Cruces Hospital, collaborating with the management of infectious complications of diabetic foot disorders. In addition, she has presented papers at numerous national and international conferences and has more than 20 publications in the field of infectious diseases. Eunate Arana-Arri, PhD, is a doctor in medicine and surgery (University of the Basque Country). A specialist in Emergencies and Primary Care, she holds a Master’s in Quality and Occupational Risk Protection (University of the Basque Country, USA). Eunate has over 10 years clinical experience in both Primary and Emergency care and over 5 years of experience in evaluative research, particularly in the fields of clinical epidemiology and health outcomes. In relation to this, she is currently a member of the Clinical Epidemiology and Research Unit of the largest tertiary public hospital in the Basque Country (Cruces Hospital). She has collaborated in a range of regional and national projects, commissioned research and successful competitive grant applications. Having extensive experience in data mining and managing, Dr Arana is currently in charge of the analysis of the Colorectal Cancer Screening Program in the Basque Country. She was contracted as a researcher by the Spanish Network on Infectious Diseases, a member of the Board of the Basque Society of Health Education and a member of the Advisory Committee for the new Research Institute BIO-Cruces. Leire Cortón Corral qualified in medicine in 1998 and completed her specialist training in Family Medicine in 2004. She has been a staff member of the Emergency Department at Cruces Hospital in the Basque Country since 2006. In 2010, she obtained Emergency Medicine Board Certification (SEMES) and she is regularly involved with teaching activities, as a Prehospital Trauma Life Support and Advanced Trauma Life Support Instructor. Leire is a member of the Spanish Family Medicine Society and the Emergency Medicine Society and has contributed as an independent advisor to medical journals in the fields of Advanced Medical Life Support (AMLS) and emergency and critical care ultrasound. Andima Basterretxea Ozamiz obtained his medical degree in 1990 from the University of the Basque Country, registering as a specialist in Family Medicine at Cruces Hospital in 1993. Currently working in the Hospital at Home Service at this hospital, he has been Head of Section since 1998 and is Coordinator of the Working Group on Parenteral Antibiotics at Home of the Spanish Society of Hospital at Home Services. Andima has been extensively involved in teaching activities, including palliative care courses and as a Basic and Advanced Cardiopulmonary Resuscitation instructor, as well as being a principal investigator in a range of research projects in his areas of interest, primarily related to the Hospital at Home Service. He has presented oral communications and posters as the first author at many national and international conferences. In particular, he has been a speaker at and moderator of several roundtables focused on hospital at home treatment, infectious disease, internal medicine and vascular surgery. Ainara Larrazabal graduated in Medicine from the University of the Basque Country in 2000. experience in this field. Subsequently, she specialized in family and community medicine at Cruces Hospital and has gained extensive experience in the Hospital at Home Service. Currently, as well as being involved in the management of this service, she participates in a working group on wound care and is a member of the Diabetic Foot Unit at Cruces. Her research focuses on new approaches to care and dressings for various types of wounds, in particular, diabetic foot ulcers. She teaches on courses for medical residents, and shares with them, as well as other colleagues, her wide Miriam Garcia obtained her degree in Medicine and Surgery in 2007 from the University of the Basque Country. She is currently specializing in Internal Medicine at Cruces Hospital. Now in the fourth year of her residency, Miriam is working in the Infectious Disease Unit of Cruces. In relation to this, she has become involved with the Diabetic Foot Unit at the hospital. Her professional interests are particularly focused on the area of infectious diseases and, indeed, she intends to move into this specialty in the future. Her research interests include autoimmune disorders, as well as infectious diseases, and she has already presented several papers at national conferences and scientific meetings in these fields.