La ley de Costas arrasa emblemáticos lugares de la playa levantina

Anuncio
La ley de Costas arrasa emblemáticos lugares de la playa
levantina
El conocido hotel Sidi Saler y la urbanización Casbah se ven amenazadas por el deslinde
legislativo.
E. Iranzo
Muchos vecinos han perdido ya
la esperanza de recuperar sus
casas o de al menos la
compensación
económica,
aunque hay otros que todavía
confían en la justicia, como
comenta uno de los vecinos
afectados:
“Esperamos
y
confiamos en que no sea así, en
que
nos
expropien
definitivamente
nuestros
hogares, pero en este país todo
es posible, ya que no existe la
separación
de
poderes
(legislativo, ejecutivo y judicial)
y funciona el clientelismo
político-judicial.”
Cuando en 1988 se aprobó la Ley
de Costas, nadie hizo mención de
que existía ningún problema en
la costa valenciana respecto al
hotel Sidi Saler y la urbanización
Casbah. Sin embargo, ya en su
día hubo quejas, especialmente
desde grupos ecologistas. Las
protestas de dichos grupos
surgieron al considerar ciertas
construcciones
demasiado
cercanas al mar.
Estas edificaciones, en su día
fueron legales, es decir, fueron
construidas con todos los
permisos y licencias de obras del
momento, y es que la clave está
en que la línea marítimo-terrestre
ha ido variando en el último
medio siglo en el litoral
mediterráneo, especialmente a
consecuencia de la destrucción o
ampliación de puertos. Por
ejemplo, en la costa este de
España la corriente marítima va
de norte a sur, con lo que al norte
de estas construcciones, el mar
retrocede y la distancia desde las
edificaciones y la línea litoral se
amplia. Al sur, por contra, el mar
avanza y se adentra en la tierra,
cosa
que
provoca
el
desplazamiento de la línea
marítimo-terrestre.
Si una vivienda está construida
legalmente, con el permiso de
obra municipal, una ley no puede
tener carácter retroactivo, tal y
como dice el artículo 9 de nuestra
Constitución, es decir, no puede
actuar en el pasado, ahora bien,
si hay causas mayores, como
puede ser en este caso, regenerar
una zona que por su riqueza
geomorfológica,
realmente
interese a la sociedad, la
situación puede ser otra, pero
nunca han de ser los particulares
los que acarren con las
consecuencias económicas.
Hotel Sidi Saler amenazado por la Ley de Costas.
El gobierno debe hacerse cargo
de indemnizar, acorde a la
tasación oficial que en su día se
exigió, a los dueños de ciertas
propiedades, que según los
datos oficiales de la Urbanización
Casbah fue construida bajo la
más estricta legalidad, en base al
Plan Parcial de Ordenación y al
Proyecto de Urbanización del
Monte de la Dehesa de la
Albufera, aprobado por la
Administración
del
Estado,
concretamente, por el Ministerio
de la Vivienda en 1965 y que
posteriormente se recogió en el
Plan General de Ordenación
Urbana del del año 1988.
Los afectados han creado una
plataforma contra los abusos del
Estado en la política de
deslindes, pero a su vez, no
tienen más remedio que acatar las
leyes.
“No
ofrecen
ninguna
indemnización, la única noticia
que
tenemos
es
que
posiblemente nos concedan una
concesión administrativa para
el uso de las viviendas durante
30 años.”
Afirma uno de los vecinos
implicados.
El caso por parte de todos los
afectados está recurrido ante la
Audiencia Nacional, pero saben
que este pleito terminará en el
Tribunal de los Derechos
Humanos, ya que vulnera el
derecho a la propiedad privada,
así como a la no retroactividad de
las leyes.
Esta situación ha arruinado
muchas familias, hay casos en los
que los propietarios siguen
pagando la hipoteca de sus
viviendas cuando
ya han pasado a concesión del
Interior del emblemático hotel.
estado, o no pueden reformar sus
casas, puesto que no se les
conceden licencias y no pueden
por ello rehabilitar. Así pues, han
de buscar otros lugares donde
vivir de los cuales pagarán otras
hipotecas o alquileres.
“Nos está arruinando, porque
estamos pagando una hipoteca
de una vivienda que no es
nuestra que además no podemos
reformar y por lo tanto, no
podemos vivir en ella, además de
todos los gastos en abogados y
procuradores por el litigio
iniciado
contra
la
Administración”.
Descargar