Historia de la Filosofía III-2 De Hegel a nuestros días 10 Existencialismo

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Materia: Historia de la Filosofía III-2 De Hegel a nuestros días
Clase: 10
Tema: Existencialismo
I
La filosofía de Nietzsche nos dejó un proyecto para llevar a cabo: la destrucción de
nuestro mundo moral, la transvaloración de lo establecido y la creación de nuevas
formas de vida, de voluntad, de poder. El filósofo alemán muere justo en el umbral del
siglo XX y este hecho deja a las generaciones inmediatas la elaboración de dicho
proyecto. Pero este no se realizará en el terreno de la filosofía, como se hubiera podido
esperar, será el arte quien tome la estafeta y, por medio de los movimientos de
vanguardia, se encargará de iniciar la transformación de nuestro mundo.
El término vanguardia proviene del francés avanti-garde, léxico militar que
designa a la parte más adelantada del ejercito, la “primera línea” que confrontará al
enemigo. Metafóricamente, en el terreno artístico, es la “primera línea” de creación, la
renovación radical en las formas y contenido para, al mismo tiempo que se sustituyen
las tendencias anteriores, enfrentarse con lo establecido.
Los movimientos vanguardistas abordan la renovación del arte, desplegando
discursos que quiebren o distorsionen los sistemas aceptados de representación en
teatro, pintura, literatura, cine y demás. “Vanguardia”, en este sentido, significaba
innovar o liberar la cantidad de reglas ya establecidas por movimientos anteriores, por
ello la única regla es no respetar las reglas. Así pues, las vanguardias emprenderán la
destrucción del edificio “moral” artístico y lo reconstruirán con base en nuevas reglas
que están sustentadas en la subjetividad, en el genio artístico y en lo dionisiaco, justo
como lo hubiera hecho Nietzsche.
Cronológicamente las vanguardias aparecen en el siguiente orden: cubismo
(1907), futurismo (1909), expresionismo (1911), dadaísmo (1916) y surrealismo (1924).
Si bien todos movimientos diferentes, entre ellos es común un impronta provocadora
contra lo antiguo.
En lo referente al Cubismo, su primer manifiesto aparece con la pintura del
español Pablo Picasso Las señoritas de Avignon y su figura principal en la poesía es
Guillaume Apollinare con su libro de poesía Caligramas publicado en 1918. Por lo que
toca al Futurismo, su principal representante fue el italiano Marinetti quien publicó el
primer Manifiesto Futurista. El Dadaísmo fue fundado por el francés Tristan Tzara, su
principal representante, el escritor alemán Hugo Ball, Jean Arp y otros intelectuales
suizos. El expresionismo inicia con las obras de Bertold Brecht (Madre coraje) y Franz
Kafka (El Proceso). También encontramos autores como Hermann Hesse (La ruta
interior) y el español Pío Baroja (Aurora roja). Con la aparición de la película El
gabinete del doctor Caligari, en 1919, Robert Wiene se convirtió en uno de los
primeros directores que introducía elementos claramente expresionistas en el cine. Y
finalmente el Surrealismo, quizá la más “escandalosa” de las vanguardias, fue iniciada
por el francés André Bretón y al que estuvieron unidos grandes artistas como Salvador
Dalí, Luis Buñuel, Max Ernest, Alberto Giacometti, Joan Miró, Rene Margaritte, entre
otros. Algunos consideran las obras de a Remedios Varo y Leonora Carrington como
surrealistas.
II
La filosofía inició la renovación del mundo moral con el existencialismo. Esta filosofía
se presentó como un horizonte teórico-práctico que buscaba devolverle al ser humano la
autonomía y el poder necesarios para re-construir su propia existencia y su entorno,
ambos devastados por la realidad.
El existencialismo tiene sus antecedentes en la filosofía del danés Sören
Kierkegaard. Su filosofía tiene como centro de reflexión su propia subjetividad y, al
hacer del ser humano un ente “singular”, único, hace a su “existencia” el centro de toda
reflexión y análisis. Así, la pregunta importante no es por el sentido de la historia o la
posibilidad del progreso, la pregunta importante es sobre la existencia y sus
posibilidades de ser, de hacer.
Por otro lado, el existencialismo también nace de un contexto histórico
determinado, nace de la coyuntura de las dos Guerras Mundiales y de las crisis
económicas, políticas y sociales. Luego de las atrocidades de estos acontecimientos, el
mundo dejó de ser un lugar apacible y el proyecto ilustrado de una sociedad juta y de
bienestar mostró su fracaso. El ser humano se percibió a sí mismo, como un ser
arrojado a un mundo sin seguridad, sin legitimidad, sin razón. Todo lo que tiene es su
existencia.
En este sentido, para el existencialista, la existencia es aquello que constituye la
esencia del ser humano, la existencia es la absoluta singularidad, es decir, es el ser
humano que se hace a sí mismo en total libertad. De ahí que Sartre haya afirmado que
“no hay más ontología que la fenomenología”, en otras palabras, no hay más ser que
aquel que se hace, que aquel que aparece. Lo que seamos como personas, lo que nos
defina, es los que hacemos, lo que aparecemos, como nos presentamos.
La existencia es, pues, el centro de reflexión de toda filosofía existencialista, a
partir del análisis que se haga de la misma se irán desprendiendo otros temas. Veamos
algunos de ellos.
III
Entre los más importantes encontramos:
a) La existencia como modo de ser propio del ser humano. Es en este punto
donde cobra sentido la frase de Sartre de “la existencia precede a la esencia”, pues lo
que existe es el ser humano y su hacer es lo que lo define. No hay una definición única o
una sustancia inamovible que defina al ser humano, el ser humano es su hacer, su
existir: su libertad.
b) Las cosas no existen, “son”. Esto significa que el ser humano establece el
sentido y el valor real de las cosas, estas no tienen un sentido propio más allá del que
cada uno de nosotros le otorguemos. En le terreno de los valores encontramos un
Subjetivismo, esto es, que cada persona, cada sociedad y cada época valorará como
bueno o malo, justo o injusto, bello o feo aquello que sea así considerado como persona
o sociedad particular.
c) Conciencia intencional. Para los existencialistas la conciencia humana es
siempre conciencia de algo. Toda conciencia se dirige siempre hacia un objeto u otra
conciencia, en este sentido, su actividad es, por tanto, siempre creadora, transformadora.
Si intenta conocerse a sí misma, se convierte en algo que no es: un objeto.
d) Existir es estar en el mundo. Al ser conciencia intencional, el “ser” es “ser-enel-mundo” (in-der-Welt-sein). Esto significa que el “ser” del ser humano es: actuar,
crear formas de ser, la existencia humana es un continuo “quehacer” pues en ello
encontrará su definición.
e) Posibilidad y elección. De ahí que el ser humano es la posibilidad total, es
decir, elección, libertad de ser o hacer uno o lo otro. Por ello Sartre afirmará que el ser
humano “está condenado a ser libre”, pues en todo momento ha de decidir y al hacerlo
se define, se conforma. Si esta elección no se hace en completa libertad se actúa de
mala fe, esto es, dejarse caer en las cosas como una más de ellas.
f) Angustia y nausea. La angustia nace del futuro indefinido, al abandonar todo
horizonte legitimador –como la religión o la filosofía misma- y asumiendo la tarea de
construirse a sí mismo a cada instante. Y la nausea surge de la falta de propósito y
finalidad y la incapacidad de tomar el curso de nuestro propio destino.
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