Significado del Sermón - Universidad Marcelino Champagnat

Los Sermones de Champagnat
Significado del Sermón
VARONA GREOGORIO, Mariano, fms. JESUCRISTO EN LA ESPIRITUALIDAD Y ESCRITOS DE MARCELLIN J.B.
CHAMPAGNAT. (1789-1840) a partir de las fuentes directas. Pág 99-111.
De todos los escritos de Champagnat son los sermones e instrucciones quienes menos
nos revelan su alma. Son ellos los que nos trasmiten su espiritualidad y doctrina. Sin
embargo, su lectura y estudio no es inútil. Muy por el contrario, pues además de iluminar
acerca de la formación teológico-moral-pastoral que los sacerdotes recibían en el
Seminario, entregan elementos interesantes que ayudan a captar mejor, globalmente, la
personalidad humana y religiosa de Champagnat.
En efecto, los Sermones nos hablan de sus pocos dotes intelectuales especulativas,
expresado en las incoherencias de lenguaje, ideas inacabadas, faltas de sintaxis y
ortografía, frases incorrectas, etc.
Por lo mismo, nos hablan, también de su independencia, aunque relativa, frente a las
principales corrientes del pensamiento religioso de la época y su incorporación a la
escuela de la vida, a través de la cual trasmite un mensaje más pastoral, adaptado a sus
características personales y a la realidad del pueblo con quien vive.
Aclaran, por otra parte, que sus líneas de fuerza religiosas nacieron no de refinamientos
teológicos o espirituales, sino que tuvieron su origen en la religión sencilla y sólida del
pueblo, alimentada de devociones y prácticas populares.
A través de ello, conocemos, de alguna manera, su capacidad de encarnación y
"abajamiento" al nivel del pueblo y de los oyentes a quienes comunicaba no sólo la
pobreza de sus razonamientos lógicos, sino sobre todo la vehemencia de su corazón, el
fervor apasionado de su sentido de Dios y de su amor a Jesucristo.
Análisis de los sermones desde una perspectiva cristológica
1.1. Hijo de una época y heredero de una escuela
La ausencia de sermones referidos directamente a Cristo y a la relación del alma con Él
llama la atención, a primera vista, sabiendo como sabemos el amor profundo que
Champagnat sentía por el Señor. A. Balko lo explica afirmando que, incapaz de trasmitir
por escrito la corriente afectiva y los sentimientos que le provocaba tal relación con
Jesucristo, lo hacía a través de improvisaciones fervorosas y prácticas, que eran
auténtica delicia para los oyentes.
De todas maneras, el tema cristológica no está ausente de los Sermones e
Instrucciones. De una u otra forma, con alusiones a citas evangélicas, proponiéndolo
como Salvador, modelo o juez, o en otras formas, Cristo aparece en 25 sermones.
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Basándose y apoyándose en textos modelos de Chevassu, Bonnardel, Cheminais,
Bourdaloue y Duquesne1, Champagnat se coloca en la siguiente perspectiva al
escribirlos: Para el hombre sólo existen dos caminos: el pecado que desemboca en la
condenación o la santidad que consiste en la unión con Cristo. Entre ambas, aparece el
hecho de la Redención de Cristo y la consiguiente posibilidad de conversión, que sitúa
de nuevo al hombre ante Dios. Los deberes cristianos dimanan del amor de Dios y
refuerzan más dicha unión. En este plan, María aparece más como intercesora que
modelo. Los santos, en cambio, son los modelos de la vida cristiana.
1.2. Hijo de una época...
Hijo de una época, Champagnat vivió en la corriente religiosa dominada "Terror
espiritual". En ella se pensaba que el fiel llegaba mejor a Dios a través del miedo al
castigo. Por ello, insistía en la presentación de los castigos del infierno y en la entrega de
la imagen de un Dios terrible y castigador.
La mayoría de los sermones de la sección GRANDES VERDADES corresponde a esta
escuela típica de la Restauración, donde se insistía mucho en un antropocentrismo (la
salvación es un asunto en el que hay que trabajar mucho y es importante asegurar su
feliz término) y se distraía la atención de lo fundamental, a saber, la misericordia de Dios
a través de Jesucristo.
La temática de ellos es más o menos la misma, lo mismo que el esquema.
Presentamos una síntesis apretada de las ideas más importantes que aparecen en ellos:
- La imagen que presentan de Cristo no es propiamente la de salvador, sino
más bien de la de juez todopoderoso e irritado, la de "hombre-Dios" lleno de
majestad que arrojará a la perdición a los pecadores:
- "J.C. d`une seule parole renversa les sodats qui venaient pour le saisir au
Jardin del Olives. Ah, si la majesté de I`Homme-Dieu fut si terrible dans un
temps, où il parassaìt comme Sauveur; que sera-ce, M.F, lorsqu`il paraìtra et
parlera en juge irrté et tout-puissant; et qu`il prononcera d`une voix plus
effrayante que les tonnerres ces redoutables paroles: "Discedite a me; retirez
vous de moi, je ne vous connais, puls: in ignem, retirez-vouz dans le feu, in
ignem oeternum; retirez-vouz dans le feu éternel".
- La condenación es entendida como el castigo de las malas las obras ("mais
comme tu n`as fait que des oeuvres de ténerbres, tu seras privé de ce bien")
como el castigo por no obedecer a Dios.
1
Cf. Balko A. Marcelino Champagnat a sua Missao. Publicación de las provincias Maristas del Brasil, 1979. En las
págs. 59-61 encontramos los siguientes datos Joseh Chevassu (1614 - 1753) es el autor que más utiliza Champagnat.
Su obra Missionaire Paroissial, Lyon 1753, fue la más consultada en los sermones sobre la Penitencia.
De la obra de Bonnardel, Cours d`Instruction Familière, saca elementos para los sermones sobre la muerte del
pecador, la Sma. Trinidad y la Asunción de María. En Cheminais de Montaigu se inspira para los sermones sobre la
impureza y la caída en el pecado.
Duquesne le proporciona las ideas obre la Purificación de María y Bourdalque le inspira la doctrina de las Fiestas de
Todos los Santos y del Perdón de las injurias.
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Dos motivos se proponen al alma para que evite el pecado o se convierta: la
pérdida bien fundamental para el que ha sido creado, que es Dios, y el castigo
del fuego eterno.
La imagen de Dios es la de alguien que castiga y emplea todo su poder y
fuerza en el castigo. Su juicio decide irrevocablemente nuestro destino: o para
el cielo o para el infierno.
La insistencia en no dejar la conversión para el mañana es siempre constante
y en dicho llamado se propone el ejemplo de los santos, mártires y almas
buenas. Se exagera tanto en la urgencia del momento presento que, a veces,
se cae en errores doctrinales, donde parece ser más importante el esfuerzo del
hombre que la misericordia de Dios.
1.3. Heredero de una escuela...
Al hablar del seminario, indicamos la fuerte influencia ejercida en Marcelino por parte de
la escuela sulpiciana. Matizada por las características intelectuales a que hemos hecho
ya referencia y por diversos rasgos de su personalidad, tal influencia se deja sentir, de
manera especial, en el contenido de los sermones.
Nos referiremos, concretamente, a cuatro aspectos de llama:
La imitación de Cristo, condición de perfección y santidad:
- en la meditación que hace a los hombros sobre el tema del fin del hombre, un
día de retiro, les dice: la perfección consiste en “une intime union avec Dieu.
Que faut-il faire pour établir cette intime union? Il faut copier trait pour trait
Jesús; Christ".
- Cristo es el camino, la meditación para alcanzar la unión con Dios, meta de
todo progreso espiritual cristiano.
- La concepción que Champagnat tiene sobre la perfección cristiana parece
calcada del pensamiento de M. Olier. En efecto, este fundador señalada que el
primer y último fin de su Instituto era "viviré summo Deo in Christo Jesu" y que
para responder a los planes de Dios, debía tal instituto inspirar a la juventud
los sentimientos y las virtudes de Jesucristo, de tal modo que se repitiera en
cada uno la experiencia del Apóstol cuando decía: "Vivo yo, mas no yo, es
Cristo quien viven en mí". Esta tarea de copiar rasgo por rasgo a Cristo
adquiere distintas formas:
- Supone la unión con Cristo: sin tal unidad, no es posible tener parte de la
redención, obtener el perdón de los pecados, hacer nada meritorio para el
cielo.
- Es imitación de la pobreza de Cristo reflejada en Belén, en la vida tanto pública
como privada y remata en la cruz. Una forma de esta pobreza es el
sufrimiento, del cual Cristo es modelo. Ambas son condiciones de seguimiento
del Señor y forma parte del ideario cristiano presentado en las
bienaventuranzas. Ambas son, además, expresiones concretas del
abajamiento del Verbo Encarnado, y quien quiera avanzar en la vida interior,
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debe comenzar por trabajar intensamente en la renuncia de sí mismo, de
modo que pueda nacer el hombre nuevo y de cabida al Espiritual.
En "Moyens de profiter des prières de 40 Heures" presenta a la mortificación y
al dolor como la segunda disposición necesaria para aprovechar la gracia de
tal ejercicio piadoso y en "la fin de I`homme" afirma que para salvar al hombre
es necesario que el mismo hombre le siga desde la cuna al Calvario.
La imitación de Cristo a través de la mortificación es necesaria para que el
alma se conforme con Él en su subida a Jerusalén, en su caminar hacia el
desprecio y la muerte. " Si el jefe tanto, ¿ Los miembros se lo pasarán en
delicias y alegría?.
El seguimiento de Cristo supone, pues, renuncia a sí mismo y a las pasiones,
dejar las diversiones y alegrías mundanas para unirse a sus sufrimientos. El
mandato del Maestro es claro: "Aquel que quiera venir en pos de Mí, que lleve
su cruz y me siga".
Es imitación de la obediencia de Cristo:
- "Lundi lére méditation, encorre sur I`obéssance de JC étant Dieu et á toute
sorte de personne d`autorité et en toute chose, jusqu`a la mort selon l`ordre de
son Pére." De lá, j`ai pris la résolution de l`imiter à l`avenir en tout par sa gràce
toute- puissante qui rend fort les faibles dans les occasions".
- El tema de la obediencia aparece en dos instrucciones más: "Instrucciones sur
le veo d`obéissance", con textos de la "Imitación de Cristo", y Obèissance,
incluida después en las primeras ediciones de la Regla.
- Marcelino había sido formado un tanto rigurosamente en esta virtud, después
del descalabro de la Revolución y quería que los hermanos se distinguiesen en
su práctica.
Es hacerse como niños:
En dos sermones predica sobre la humildad, abajo la perspectiva supliciana de
conformación con el abajamiento de Cristo. El mensaje central de ellos es que quien no
es humilde se aleja de Cristo y no puede entrar en el Reino.
La humildad es la virtud favorita y sobresaliente del hombre- Dios. Es la virtud de Cristo,
en expresión de S. Bernardo. Siendo Dios, se ha abajado (misterio de la Encarnación).
Su vida privada fue un excelente ejemplo de humildad. Desde Nazaret invita a sus
seguidores a amar ser ignorados, olvidados, tratados como nada.
El tema del abajamiento de Cristo le es muy querido y lo repite con cierta frecuencia. En
el sermón que predica con motivo de la fiesta de la purificación de María se detiene en
este misterio del Señor, quien siendo Redentor debe ser rescatado.
En este mismo sermón nos hace fijarnos en el modelo de la Sagrada Familia que camina
hacia Jerusalén "sin orgullo".
Esta expresión "sin orgullo" podría sugerir la presencia permanente de esta pasión en su
alma y la lucha que ha debido librar sin tregua a lo largo de toda la vida.
En "la comunion sacramentelle", el abajamiento de Cristo se llama presencia en un trozo
de pan.
Es perdonar las injurias: Cristo es no sólo el predicador, sino también el observante y
modelo.
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Supone practicar la dulzura en todo: Olier decía de ella que presuponía el
anonadamiento de sí mismo, de todo lo propio, la muerte a todo interés.
Esta virtud era una de las riquezas de Champagnat y un factor importante de su éxito
ministerial. Concluimos esta parte con la siguiente sentencia de Champagnat encontrada
en el sermón referente a fin del hombre:
"Il faut imiter Jésus-Christ. Vérite importante, vérité fondamentale. Impossible
d`obtenir le salut, sans cette imitation. Nous me pouvons obtenir L`entrés dans le Ciel
que par notre confromité avec JC. Notre divin modéle. Venit et sequere me".
El amor Cristo:
el mensaje que nos trasmite respecto al amor de Cristo lo podemos sintetizar en estos
tres puntos:
- Se hace víctima por amor: desarrollado, sobre todo, en el sermón de la fiesta
de la purificación: "Jesús- C. est porté au Temple; considérono ce tendre
agneau, porté de Li étable á l ` Autel, comme une victime, destinée á
l`inmolation"
- La eucaristía, prueba máxima de amor: hablando de Cristo eucarístico, el
día dela Trinidad, lo presenta como el Dios compasivo y misericordioso. El
amor de Cristo se asemeja al amor de padre más tierno. Sin embargo, no es
correspondido, sino que su amor es pagado con desamor y agravio. Cristo
goza acercándose a los hombres; éstos deben corresponder de la misma
manera.
- Es mediador de la gracia y generoso en el dar: la generosidad del Corazón
de Cristo debe estimular la correspondencia a la gracia y el empeño por
conseguir el reino prometido. El hombre es afortunado de poder trabajar para
un patrón con el que puede contar siempre y con le que no se pierde nada.
Amor apasionado a Cristo Jesús:
En los sermones percibimos el eco de lo que puedo ser la experiencia amorosa de
Champagnat hacia Cristo y encintramos algunas huellas de lo que fue la pasión de toda
su vida: anunciar a Jesucristo y hacerle amar.
Para Champagnat, el amor se debía manifestar en imitación, debía tener la tonalidad
eucarística de la adoración y el sacrificio: "Vous venez m`adorer au pied de ses autels,
votre pieté est louable; mais, si vous n`y venez dans un esprit de mortification et de
deoleur, cette pieté est inutile" y debía contemplar la dimensión reparadora.
El amor a Cristo Jesús es la forma concreta de nuestro amor a Dios2.
1.4. Cristo y María siempre unidos:
En los Sermones e Instrucciones encontramos una serie de referencias que presentan
a María íntimamente asociada a la misión de su hijo. Las resumimos en las siguientes:
- María intercesora ante Cristo:
2
Esta reflexión la hacía en el contexto de la emisión de los votos, al concluir el retiro. Cf. Champagnat M., "Plan
d`une retraite", Ecrits divers, 90 Bis.
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"Vierge, Refuge des pécheurs, priez votre adorable Fils, qu`il dispone les
coeurs de mes auditeurs".
Esta plegaria, Champagnat expresa su piedad y su mariología: María, virgen, madre de
Dios, llena de bondad maternal para con los pecadores, intercede ante el hijo.
1. Es el arca de la nueva alianza que Jesucristo, vencedor de la muerte y del infierno,
traslada desde el lugar poco digno de las humillaciones y sufrimientos, a la gloria del
cielo.
2. Los brazos de María son lugar de contemplación porque estrechan a Jesús: en el
sermón sobre la purificación de María, Champagnat revela su cálido y profundo amor
al Verbo encarnado, presente en los brazos de la Madre.
3. Revivir los misterios de Jesús en compañía de María: Así define al rosario, devoción
que honra a Jesucristo y a su madre.
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