Textos Básicos sobre Gibraltar

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Gibraltar, Textos Básicos
Datos generales de Gibraltar
Textos de la ONU
OSCE
Declaraciones y acuerdos entre el Estado español y Gran Bretaña
Datos Generales sobre Gibraltar
Gibraltar es una angosta península que sobresale longitudinalmente de la costa
sudoccidental de Andalucía, a la que está unida por un istmo de aproximadamente
1,6 kilómetros de longitud. El puerto andaluz de Algeciras está 8 kilómetros al
oeste, en el extremo opuesto de la bahía; al otro lado del Estrecho de Gibraltar, a
32 kilómetros de distancia, se encuentra el continente africano. La superficie de
Gibraltar es de 4,8 kilómetros cuadrados.
Con arreglo al último censo de Gibraltar, realizado el 14 de octubre de 1991, la
población civil ascendía a 28.074 personas en 1991, de las que 20.022 eran
gibraltareños, 5.182 súbditos británicos de otro origen, incluidos los familiares de
los militares británicos destinados en Gibraltar, pero excluidos éstos, y 2.870
extranjeros.
Gibraltar carece de recursos naturales y de tierras agrícolas. La industria, el
comercio y los servicios del Territorio se centran sobre todo en atender a las
necesidades de la población y del gran número de visitantes. La economía de
Gibraltar depende en gran medida del turismo y de los servicios financieros, tales
como los que prestan las entidades bancarias, de seguros, de transporte marítimo y
de gestión de carteras de inversiones.
Según la Potencia Administradora, en 1993/1994 el producto interno bruto per
cápita y el producto nacional bruto del Territorio ascendían a alrededor de 10.881 y
11.331 libras, respectivamente. En 1996 había en Gibraltar 13.000 personas
empleadas y 1.800 desempleadas; las cifras correspondientes a 1995 fueron
12.702 y 352, respectivamente.
El ingreso medio semanal en el Territorio era de 233,32 libras en 1995 y de 220,78
libras en 1994.
En 1996 las importaciones y exportaciones ascendieron a 500 millones y 200
millones de libras, respectivamente. Del Reino Unido procede más de la tercera
parte de las importaciones de Gibraltar, excluidos los combustibles. También se
importan productos de los Países Bajos, el Japón, Andalucía y España. Son
insignificantes las exportaciones de productos de origen local. Las exportaciones
consisten principalmente en la reexportación de petróleo y de productos petrolíferos
a empresas de transporte marítimo.
El número de turistas que llegaron al Territorio fue de 5,5 millones en 1995 y de
4,2 millones en 1994.
En 1995 las estancias en establecimientos hoteleros
aumentaron un 21% respecto de 1994.
El 16 de mayo de 1996 se celebraron elecciones generales en Gibraltar. Según la
Potencia Administradora, participó el 88% de los votantes censados. Según esa
misma fuente, los votos se distribuyeron de la manera siguiente: 52,2% para el
Partido Socialdemócrata de Gibraltar, 43% para el Partido Laboral Socialista de
Gibraltar y 4,7% para el Partido Nacional de Gibraltar. Por consiguiente, el Partido
Socialdemócrata de Gibraltar obtuvo ocho escaños en la Asamblea Legislativa del
Territorio, en tanto que el Partido Laboral Socialista de Gibraltar obtuvo siete
escaños. El Sr. Peter Caruana, que encabezaba el Partido Socialdemócrata de
Gibraltar, obtuvo 8.561 votos y fue nombrado Ministro Principal de Gibraltar.
Tratado de Utrecht
ARTICULO X DEL TRATADO DE UTRECHT (13 DE JULIO DE 1713)
El Rey Católico, por si y por sus herederos y sucesores, cede por este Tratado a la
Corona de la Gran Bretaña la plena y entera propiedad de la ciudad y castillo de
Gibraltar, juntamente con su puerto, defensas y fortaleza que le pertenecen, dando
la dicha propiedad absolutamente para que la tenga y goce con entero derecho y
para siempre, sin excepción ni impedimento alguno.
Pero, para evitar cualesquiera abusos y fraudes en la introducción de las
mercaderías. quiere el Rey Católico, y supone que así se ha de entender, que la
dicha propiedad se ceda a la Gran Bretaña sin jurisdicción alguna territorial y sin
comunicación alguna abierta con el país circunvecino por parte de tierra. Y como la
comunicación por mar con la costa de España no puede estar abierta y segura en
todos los tiempos, y de aquí puede resultar que los soldados de la guarnición de
Gibraltar y los vecinos de aquella ciudad se vean reducidos a grandes angustias,
siendo la mente del Rey Católico sólo impedir, como queda dicho arriba, la
introducción fraudulenta de mercaderías por la vía de tierra. se ha acordado que en
estos casos se pueda comprar a dinero de contado en tierra de España circunvecina
la provisión y demás cosas necesarias para el uso de las tropas del presidio, de los
vecinos y de las naves surtas en el puerto.
Pero si se aprehendieran algunas mercaderías introducidas por Gibraltar, ya para
permuta de víveres o ya para otro fin, se adjudicarían al fisco, y presentada queja
de esta contravención del presente Tratado serán castigados severamente los
culpados.
Y Su Majestad Británica. a instancia del Rey Católico consiente y conviene en que
no se permita por motivo alguno que judíos ni moros habiten ni tengan domicilio en
la dicha ciudad de Gibraltar, ni se de entrada ni acogida a las naves de guerra
moras en el puerto de aquella Ciudad, con lo que se puede cortar la comunicación
de España a Ceuta, o ser infestadas las costas españolas por el corso de los moros.
Y como hay tratados de amistad. libertad y frecuencia de comercio entre los
ingleses y algunas regiones de la costa de Africa. ha de entenderse siempre que no
se puede negar la entrada en el puerto de Gibraltar a los moros y sus naves, que
sólo vienen a comerciar.
Promete también Su Majestad la Reina de Gran Bretaña que a los habitantes de la
dicha Ciudad de Gibraltar se les concederá el uso libre de la Religión Católica
Romana.
Si en algún tiempo a la Corona de la Gran Bretaña le pareciere conveniente dar,
vender o enajenar, de cualquier modo la propiedad de la dicha Ciudad de Gibraltar,
se ha convenido y concordado por este Tratado que se dará a la Corona de España
la primera acción antes que a otros para redimirla.
Textos de las Naciones Unidas
Resolución 1514 (XV) de la Asamblea General de 14 de diciembre de 1960
La Asamblea General
Teniendo presente que los pueblos del mundo han proclamado en la Carta de las
Naciones Unidas que están resueltos a reafirmar la fe en los derechos
fundamentales del hombre, en la dignidad y el valor de la persona humana, en la
igualdad de derechos de hombres y mujeres y de las naciones grandes y pequeñas,
y a promover el progreso social y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto
más amplio de la libertad.
Consciente de la necesidad de crear condiciones de estabilidad y bienestar y
relaciones pacíficas y amistosas basadas en el respeto de los principios de la
igualdad de derechos y de la libre determinación de todos los pueblos, y de
asegurar el respeto universal de los derechos humanos y las libertades
fundamentales para todos, sin hacer distinciones de raza, sexo, idioma o religión, y
la efectividad de tales derechos y libertades.
Reconociendo el apasionado deseo de libertad que abrigan todos los pueblos
dependientes y el papel decisivo de dichos pueblos en el logro de su independencia.
Consciente de los crecientes conflictos que origina el hecho de negar la libertad a
esos pueblos o de impedirla, lo cual constituye una grave amenaza a la paz
mundial.
Considerando el importante papel que corresponde alas Naciones Unidas como
medio de favorecer el movimiento en pro de la independencia de los territorios en
fideicomiso y en los territorios no autónomos.
Reconociendo que los pueblos del mundo desean ardientemente el fin del
colonialismo en todas sus manifestaciones.
Convencida de que la continuación del colonialismo impide el desarrollo de la
cooperación económica internacional, entorpece el desarrollo social, cultural y
económico de lo pueblos dependientes y milita en contra del ideal de paz universal
de las Naciones Unidas.
Afirmando que los pueblos pueden, para sus propios fines, disponer libremente de
sus riquezas y recursos naturales, sin perjuicio de las obligaciones resultantes de la
cooperación económica internacional, basada en el principio del provecho mutuo, y
del Derecho Internacional.
Creyendo que el proceso de liberalización irresistible e irreversible y que, a fin de
evitar crisis graves, es preciso poner fin al colonialismo y a todas las prácticas de
segregación y discriminación que lo acompañan.
Celebrando que en los últimos años muchos territorios dependientes hayan
alcanzado la libertad y la independencia, y reconociendo las tendencias cada vez
más poderosas hacia la libertadque se manifiestan en los terrirorios que no han
obtenido aún la independencia.
Convencida de que todos los pueblos tienen un derecho inalienable a la libertad
absoluta, al ejercicio de su soberanía y a la integridad de su territorio nacional.
Proclama solemnemente la necesidad de poner fin rápida e incondicionalmente al
colonialismo en todas sus formas y manifestaciones.
Y a dicho efecto
Declara que:
La sujeción de pueblos a una subyagación, y explotación extranjeras constituye una
denegación de los derechos humanos fundamentales es contraria a la Carta de las
Naciones Unidas y compromete la causa de la paz y de la cooperación mundiales.
Todos los pueblos el derecho de libre determinación; en virtud de este derecho,
determinan libremente su condición política y persiguen libremente su desarrollo
económico, social y cultural.
La falta de preparación en el orden político, económico, social o educativo, no
deberá de servir nunca de pretexto para retrasar la independencia.
A fin de que los pueblos dependientes puedan pacífica y libremente su derecho a la
independencia completa, deberá cesar toda la acción armada o toda la medida
represiva de cualquier índole dirigida contra ellos, y deberá respetarse la integridad
de su territorio nacional.
En los territorios en fideicomiso y no autónomos y en todos los demás territorios
que no han logrado aún su independencia, deberán tomarse inmediatamente
medidas para traspasar todos los poderes a los pueblos de esos territorios, sin
condiciones ni reservas, en conformidad con su voluntad y sus deseos libremente
expresados, y sin distinción de raza, credo ni color, para permitirles gozar de una
libertad y una independiencia absolutas.
Todo intento encaminado a quebrantar total o parcialmente la unidad nacional y la
integridad territorial de un país es incompatible con los propósitos y principios de la
Carta de las Naciones Unidas.
Todos los Estados deberán fiel y estrictamente las disposiciones de la Carta de las
Naciones Unidas, de la Declaración Universal de Derechos Humanos y de la
presente Declaración sobre la base de la igualdad, de la no intervención en los
asuntos internos de los demás Estados y del respeto de los derechos soberanos de
todos los pueblos y de su integración territorial.
Resolucíón 1.654 (Creación del Comité especial de los 17)
(XVI) La situación respecto de la aplicación de la Declaración sobre la concesión de
la independencia a los países y pueblos coloniales
La Asamblea General,
Recordando la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y
pueblos coloniales, contenida en su resolución 1514 (XV) de 14 de diciembre de
1960,
Teniendo presentes los propósitos y principios de. dicha Declaración,
Recordando en particular el párrafo 5 de la Declaración, que dice:
"En los territorios en fideicomiso y no autónomos y en todos los demás territorios
que no han logrado aún su independencia deberán tomarse inmediatamente
medidas para traspasar todos los poderes a los pueblos de esos territorios, sin
condiciones ni reserva, en conformidad con su voluntad y sus deseos libremente
expresados, y sin distinción de raza, credo ni color, para permitirles gozar de una
libertad y una independencia absolutas".
Advirtiendo con pesar que, salvo contadas excepciones, las disposiciones del citado
párrafo de la Declaración no se han llevado a la práctica,
Advirtiendo que, contrariamente a lo dispuesto en el párrafo 4 de la Declaración, en
algunas regiones se sigue recurriendo en forma cada vez más despiadada a la
acción armada y a medidas represivas contra los pueblos dependientes, privándolos
así de su prerrogativa de ejercer pacífica y libremente el derecho a la
independencia absoluta,
Profundamente preocupada porque, contrariamente a lo dispuesto en el párrafo 6
de la Declaración, se siguen realizando actos encaminados a quebrantar total o
parcialmente la unidad nacional y la integridad territorial en algunos países donde
se está verificando la liquidación del régimen colonial.
Convencida de que todo nuevo retraso en la aplicación de la Declaración representa
una causa constante de conflicto y desacuerdo internacionales, entorpece
gravemente la cooperación internacional y está creando en muchas partes del
mundo una situación cada vez más peligrosa, que puede constituir una amenaza
para la paz y la seguridad internacionales,
Insistiendo en que la insuficiencia de la preparación política, económica, social o
educativa nunca debería pretexto para retardar la independencia,
1. Reitera y reafirma solemnemente los objetivos y principios incorporados a la
Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos
coloniales, contenida en su resolución 1514 (XV) de 14 de diciembre de 1960;
2. Invita a los Estados interesados a que tomen sin demora medidas con objeto de
aplicar y cumplir estrictamente la Declaración;
3. , Decide crear un Comité Especial de diecisiete miembros que serán designados
por el Presidente de la Asamblea General en el actual período de sesiones;
4. Pide al Comité Especial que examine la cuestión de la aplicación de la
Declaración, formule sugestiones y recomendaciones sobre los progresos realizados
y el alcance de la aplicación de dicha Declaración, e informe al respecto a la
Asamblea General en su decimoséptimo período de sesiones;
5. Encarga al Comité Especial que, para llevar a cabo su labor, utilice todos los
medios que tenga a su disposición, con arreglo a los procedimientos y normas que
determine para el buen desempeño de sus funciones;
6. Autoriza al Comité Especial para que celebre reuniones fuera de la Sede de las
Naciones Unidas, siempre y cuando esas reuniones sean necesarias para el eficaz
desempeño de sus funciones, en consulta con las, autoridades competentes;
7. Invita a las autoridades interesadas a que presten al Comité Especial la más
completa colaboración en el cumplimiento de su tarea;
8. Pide al Consejo de Administración Fiduciaria, a la Comisión para la Información
sobre Territorios noAutónomos y a los organismos especializados interesados que
ayuden al Comité Especial en su labor, dentro de sus respectivas esferas de
actividad;
9. Pide al Secretario General que facilite al Comité Especial todos los servicios y el
personal necesarios para el cumplimiento de la presente resolución.
1066a. Sesión Plenaria,
27 de noviembre de 19ól.
El Presidente de la Asamblea General, en cumplimiento de la resolución que
precede, designó a los miembros del Comité especial creado en virtud del párrafo 3
de esta resolución. En su 1094ª sesión plenaria, celebrada el 23 de enero de 1962,
la Asamblea General tomó nota de esa designación.
El Comité Especial se compone de los Estados miembros siguientes:
AUSTRALIA, CAMBOYA, EE.UU. DE AMÉRICA, ETIOPÍA, INDIA, ITALIA,
MADAGASCAR, MALÍ, POLONIA, REINO UNIDO DE GRAN BRETAÑA E IRLANDA DEL
NORTE, SIRIA, TANGAYICA, TÚNEZ, UNIÓN DE REPÚBLICAS SOCIALISTAS
SOVIÉTICAS, URUGUAY, VENEZUELA Y YUGOSLAVIA
Comité de los 24: Consenso de 16-10-64.
Consenso del "Comité de los Veinticuatro".
El 16 de Octubre de 1964, el Presidente del «Comité de los Veinticuatro»,
Embajador Coulibaly, proclamó solemnemente la decisión final del mismo en el
siguiente Consenso:
"El Comité Especial, después de haber examinado la situación en el territorio no
autónomo de Gibraltar y de haber escuchado las declaraciones hechas por el
representante de la Potencia Administradora y por el Representante de España,
afirma que las disposiciones de la Declaración sobre la concesión de independencia
a los países y a los pueblos coloniales se aplican íntegramente al territorio de
Gibraltar.
El exámen de estas declaraciones ha permitido al Comité Especial comprobar la
existencia de un desacuerdo, incluso de una disputa entre el Reino Unido y España
en lo que se refiere al "status" y a la situación del territorio de Gibraltar. En estas
condiciones, EL COMITÉ ESPECIAL INVITA AL REINO UNIDO Y A ESPAÑA A INICIAR
SIN DEMORA CONVERSACIONES A FIN DE ENCONTRAR, CONFORME A LOS
PRINCIPIOS DE LA CARTA DE LA ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS, UNA
SOLUCION NEGOCIADA, DE ACUERDO CON LAS DISPOSICIONES DE LA
RESOLUCION l.514 (XV) TENIENDO EN CUENTA DEBIDAMENTE LAS OPINIONES
EXPRESADAS POR LOS MIEMBROS DEL COMITÉ, ASI COMO LOS INTERESES DE
LOS HABITANTES DEL TERRITORIO.
Dentro del cuadro del mandato que le fue conferido por la Resolución 1.654 (XVI),
el Comité Especial pide al Reino Unido y a España que informen al Comité Especial
y a la Asamblea General del resultado de sus negociaciones".
Resolucíón 2.070(XX) de 16 de Diciembre de 1965
La Asamblea General,
Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar.
Habiendo estudiado los capítulos de los informes presentados por el Comité especial
encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración
sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales relativos a
Gibraltar.
Habiendo escuchado las declaraciones hechas en la "IV Comisión",
1. Invita a los Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del
Norte a iniciar sin demora las conversaciones previstas según los términos del
Consenso aprobado el 16 de Octubre de 1964 por el Comité Especial encargado de
examinar la situación con respecto a la aplicación d la Declaración sobre la
concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales".
2. Pide a ambos Gobiernos que informen sobre el resultado de sus negociaciones al
"Comité Especial" y a la Asamblea General en su vigésimo primer periodo de
sesiones.
Resolucíón 2.231 (XXI) de 20 de diciembre de 1966
La Asamblea General,
Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar, habiendo oído las declaraciones de la
Potencia administradora y del representante de España, y habiendo oído a los
peticionarios, recordando su Resolución 2.070 de 16 de diciembre de 1965, y el
Consenso, aprobado el 16 de octubre de 1964 por el "Comité Especial encargado de
examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la
concesión de independencia a los países y pueblos coloniales", recordando así
mismo su resolución 1.514, de 14 de diciembre de 1960, teniendo en cuenta la
manifiesta disposición de la Potencia administradora y del Gobierno español para
continuar las actuales negociaciones, lamentando que hayan ocurrido ciertos actos
que han perjudicado la buena marcha de esas negociaciones:
1. Lamenta la demora en el proceso de descolonización y en la aplicación de la
Resolución 1.514 (XV) de la Asamblea General a Gibraltar.
2. Invita a las partes a que continúen, sus negociaciones, teniendo en cuenta los
intereses de la población del territorio y pide a la Potencia administradora que
acciere sin ningún obstáculo, y en consulta con el Gobierno de España, la
descolonización de Gibraltar, y que presente al "Comité Especial encargado de
examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la
concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales", un informe lo
antes posible y, en cualquier caso, antes del vigésimo segundo periodo de sesiones
de la Asamblea General
3. Pido al Secretario General qua preste ayuda para la aplicación de la presente
Resolución.
Resolucíón 2.353 (XXII) de 8 de enero de 1968
La Asamblea General,
Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar,
Habiendo oído las declaraciones de la Potencia administradora y del representante
de España,
Recordando su resolución 1514 (XV) de 14 de diciembre de 1960,
Recordando además, la resolución adoptada por el Comité Especial encargado de
examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la
concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales el lº de septiembre
de 1967 (1), las resoluciones 2070 (XX) de 16 de diciembre de 1965 y 2231 (XXI)
de 20 de diciembre de 1966 de la Asamblea General y el consenso aprobado el 16
de octubre de 1564 por el Comité Especial (2).
Considerando que toda situación colonial que destruya parcial o totalmente la
unidad nacional y la integridad territorial de un país es incompatible con los
propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y específicamente con el
párrafo 6 de la resolución 1514 (XV) de la Asamblea General,
1. Lamenta la interrupción de las negociaciones recomendadas en las resoluciones
2070 (XX) y 2231 (XXI) de la Asamblea General;
2. Declara que la celebración por la Potencia administradora del referendum de 10
de septiembre de 1967 contraviene las disposiciones de la resolución 2231 (XXI) de
la Asamblea General y las de la resolución aprobada el 1º de septiembre de 1967
por el Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la
aplicación de la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y
pueblos coloniales;
3. Invita a los Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del
Norte a reanudar sin demora las negociaciones previstas en las resoluciones 2070
(XX) y 2231(XXI)de la Asamblea General, con miras a poner fin a la situación
colonial en Gibraltar y a salvaguardar los intereses de la población al término de
esa situación colonial;
4. Pide al Secretario General que preste ayuda a los Gobiernos de España y del
Reino Unido en el cumplimiento de la presente resolución y que informe al respecto
a la Asamblea General en su vigésimo tercer período de sesiones.
(1) A/6700/Add.9 párr. 215.
(2) Documentos Oficiales de la Asamblea Genertal, decimonoveno período de
sesiones, Anexos No. 8 (parteI) (A/5800/Rev.1), Cap. X, parr.209
Resolucíón 2.429 (XXIII) de 1 de diciembre de 1968
La Asamblea General,
Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar;
Habiendo oído las declaraciones de la Potencia administradora y del representante
de España (1).
Recordando su resolución 1514 (XV) de 14 de diciembre de 19609
Recordando igualmente su resolución 2353 (XXII) de 19 de diciembre de 1967,
1. Lamenta el incumplimiento por la Potencia administradora de la resolución 2353
(XXII) de la Asamblea General;
2. Declara que el mantenimiento de la situación colonial de Gibraltar es contrario a
los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y a los contenidos en
la resolución 1514 (XV) de la Asamblea General;
3. Pide a la Potencia administradora que ponga término a la situación colonial de
Gibraltar antes del 1º de octubre de 1969;
4. Requiere al Gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte para
que inicie sin demora las negociaciones previstas en la resolución 2353,` (XXII) con
el Gobierno de España;
5. Pide al Secretario General que preste toda la ayuda que los Gobiernos de España
y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte puedan requerir para el mejor
cumplimiento de la presente resolución y que informe al respecto a la Asamblea
General en su vigésimo cuarto período de sesiones.
1747a. sesión plenaria
(1) Véase A/C.4/SR.1799.
Resolucíón 3.163 (XXVIII) de 14 de diciembre de 1973
La Asamblea General después de haber considerado el Capítulo, del Informe del
Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de
la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos
coloniales referente a Gibraltar. Después de haber tomado nota de las
declaraciones formuladas en la Cuarta Comisión por los representantes del Reino
Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y de España con respecto a la cuestión
de Gibraltar., y teniendo en cuenta las resoluciones 1514 (XV) de 14 de diciembre
de 1960 y 2429 (XXIII) de 18 de diciembre de 1968 de la Asamblea General,
reitera la esperanza de que se reanudarán en breve, las negociaciones entre el
Reino Unido y España con miras a lograr la solución definitiva de este problema
teniendo en cuenta las resoluciones antes mencionadas y dentro del espíritu de la
Carta de las Naciones Unidas.
La Asamblea General profundamente preocupada de los efectos, potencialmente
perjudiciales, de la persistencia de este problema en las relaciones entre dos
Estados Miembros y plenamente consciente de la necesidad de poner fin a la causa
de desacuerdo entre ellos, insta a ambos Estados a no escatimar ningún esfuerzo
para llegar a una solución acorde con los principios de la Carta y a informar sobre el
resultado de esas negociaciones al Secretario General y a la Asamblea General en
su vigésimo noveno periodo de sesiones.
2202a. sesión plenaria
Resolucíón 3.286 (XXIX) de 21 de enero de 1975
La Asamblea General,
Habiendo examinado la cuestión de Gibraltar,
Habiendo examinado el capitulo pertinente del informe del Comité Especial
encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración
sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales (1),
Habiendo escuchado las declaraciones pertinentes hechas en la Cuarta Comisión (2)
1. Lamenta que las negociaciones a que se hace referencia en el párrafo 2 infra no
hayan sido todavía efectivamente iniciadas;
2. Urge a los Gobiernos del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y de
España a iniciar sin demora las negociaciones previstas según los términos del
consenso aprobado por la Asamblea General el 14 de diciembre de 1973 (3)
3. Pide a ambos Gobiernos que informen sobre el resultado de sus negociaciones al
Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de
la -Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos
coloniales y a la Asamblea General en su trigésimo período de sesiones.
(1) A/9623/Add.4 (parte 1I), cap. XIII.
(2) Véanse A/C.4/SR.2117 y 2124.
(3) Docunentos Oficiales de la Asamblea General, vigésimo octavo período de
sesiones, Suplemento No. 30 (A/9030), pág. 120.
Asamblea General: Consenso de 10 de noviembre de 1981.
La Asamblea General, tomando nota de que los Gobiernos de España y del Reino
Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte han firmado una declaración el 10 de
abril de 1980 en Lisboa (1) proponiéndose resolver el problema de Gibraltar de
acuerdo con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas, acordando con
este objeto iniciar negociaciones a fin de solucionar todas las diferencias sobre
Gibraltar, acordando asimismo el restablecimiento de comunicaciones directas en la
región, habiendo decidido el Gobierno español suspender la aplicación de las
medidas actualmente en vigor, acordando ambos Gobiernos basar su futura
cooperación en la reciprocidad y plena igualdad de derechos, insta a ambos
Gobiernos a que hagan posible el inicio de estas negociaciones previstas en el
consenso aprobado por la Asamblea General el 14 de diciembre de 1973(2), con
objeto de llegar a una solución permanente del problema de Gibraltar a la luz de las
resoluciones pertinentes de la Asamblea General y en el espíritu de la Carta de las
Naciones Unidas.
(1) Véase el documento A/AC.109/603 y Corr.l, párr. 13.
(2) Documentos Oficiales de la Asamblea General, vigésimo octavo período de
sesiones, Suplemento No. 30 (A/9030), pág. 120, tema 23.
Asamblea General: Consenso de 23 de noviembre de 1982.
37/412
En su 77a. sesión plenaria, celebrada el 23 de noviembre de 1982, la Asamblea
General, por recomendación de la Cuarta Comisión tomando nota de que los
Gobiernos de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte
firmaron en Lisboa. el 10 de abril de 1980. una declaración en la que se proponían
resolver el problema de Gibraltar de acuerdo con las resoluciones pertinentes de las
Naciones Unidas, acordando con este objeto iniciar negociaciones a fin de
solucionar todas sus diferencias sobre Gibraltar, acordando asimismo el
restablecimiento de comunicaciones directas en la región, habiendo decidido el
Gobierno español suspender la aplicación de las medidas actualmente en vigor, y
acordando ambos Gobiernos basar su futura cooperación en la reciprocidad y plena
igualdad de derechos, tomando nota de que ambos Gobiernos acordaron en
Londres, el 8 de entro de 1982. fijar la fecha de 20 de abril de 1982 para el pleno
cumplimiento de la Declaración de Lisboa, incluidas la iniciación de las
negociaciones y. Simultáneamente el restablecimiento de las comunicaciones
directas en la región. y tomando nota de que, cuando posteriormente se acordó
aplazar estos arreglos, los dos Gobiernos manifestaron que estaban decididos a
mantener abierto el proceso iniciado por la Declaración de Lisboa, en el espíritu de
las cartas canjeadas en Londres el 8 de enero de 1982. y que se proponían fijar una
nueva fecha para su cumplimiento, decidió instar a ambos Gobiernos a que hicieran
posible la iniciación de las negociaciones previstas en el consenso aprobado por la
Asamblea el 14 de diciembre de 1973 79, con objeto de llegar a un solución
duradera del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la
Asamblea y conforme al espíritu de la Carta de las Naciones Unidas.
Asamblea General: Consenso de 5 de diciembre de 1984.
39/410
En su 87a. sesión plenaria, celebrada el 5 de diciembre de 1984, la Asamblea
General, por recomendación de la Cuarta Comisión , aprobó el texto siguiente. que
expresaba el consenso de los miembros de la Asamblea:
"La Asamblea General, tomando nota de que los Gobiernos de España y del Reino
Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte firmaron en Lisboa, el 10 de abril de
1980 una declaración , en la que se proponía resolver el problema de Gibraltar de
acuerdo con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas, acordaban con ese
objeto iniciar negociaciones a fin de solucionar todas sus diferencias sobre
Gibraltar, acordaban asimismo el restablecimiento de comunicaciones directas en la
región, habiendo decidido el Gobierno español suspender la aplicación de las
medidas actualmente en vigor y convenían, ambos Gobiernos, en basar su futura
cooperación en la reciprocidad y plena igualdad de derechos, tomando nota de que
ambos Gobiernos acordaron en Londres, el 8 de enero de 1982, fijar la fecha de 20
de abril de 1982 para el pleno cumplimiento de la Declaración de Lisboa, inclusive
la iniciación de las negociaciones y, simultáneamente, el restablecimiento de las
comunicaciones directas en la región, tomando nota de que, cuando posteriormente
se acordó aplazar estos arreglos, los dos Gobiernos manifestaron que estaban
decididos a mantener abierto el proceso iniciado por la Declaración de Lisboa de
abril de 1980 y que se proponían fijar una nueva fecha para su cumplimiento, se
felicita de que ambos Gobiernos hayan acordado en una declaración conjunta
firmada el 27 de noviembre de 1984 en Bruselas que comenzarán a aplicar todas la
partes de la Declaración de Lisboa a más tardar el 15 de febrero de 1985 e insta a
ambos Gobiernos a que hagan posible la iniciación de las negociaciones previstas
en el consenso aprobado por la Asamblea el 14 de diciembre de 1973110, con
objeto de llegar a una solución duradera del problema de Gibraltar a la luz de las
resoluciones pertinentes de la Asamblea y conforme al espíritu de la Carta de las
Naciones Unidas."
Asamblea General: Consenso de 2 de diciembre de 1985.
40/413
En su 99a. sesión plenaria, celebrada el 2 de diciembre de 1985, la Asamblea
General, por recomendación de la Cuarta Comisión, aprobó el texto siguiente, que
representaba el consenso de los miembros de la Asamblea:
"La Asamblea General, tomando nota de que los Gobiernos de España y del Reino
Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte acordaron en Bruselas, el 27 de
noviembre de 1984 una Declaración por la que decidieron poner en práctica, antes
del 15 de febrero de 1985, la Declaración de Lisboa de 10 de abril de 1980, en
todos sus aspectos; tomando nota de que ello suponía, de manera simultánea, el
establecimiento de la igualdad y reciprocidad de derechos de los españoles en
Gibraltar y de los gibraltareños en España, el establecimiento del libre tránsito de
personas, vehículos y mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino, y el
establecimiento de un proceso negociador, y tomando nota de que, por lo que se
refiere a este último punto, la declaración de Bruselas dice así:
'c) El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación
en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medio ambiental. Ambas
Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969’,
acoge con satisfacción el hecho de que el 5 de febrero de 1985 quedara establecida
la igualdad y reciprocidad de derechos de los españoles en Gibraltar y de los
gibraltareños en España, así como el libre tránsito de personas, vehículos y
mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino; acoge con satisfacción
también el hecho de que ambos Gobiernos iniciaran en Ginebra, el mismo día 5 de
febrero de 1985136, el proceso negociador previsto en la declaración de Bruselas,
igualmente previsto en el consenso aprobado por la Asamblea el 14 de diciembre
de 1973; e insta a ambos Gobiernos a proseguir dichas negociaciones con objeto de
llegar a una solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones
pertinentes de la Asamblea y de conformidad con el espíritu de la Carta de las
Naciones Unidas."
Asamblea General: Consenso de 31 de octubre de 1986.
En su 52a. sesión plenaria, celebrada el 31 de octubre de 1986, la Asamblea
General, por recomendación de la Cuarta Comisión, aprobó el siguiente texto que
representaba el consenso de los miembros de la Asamblea:
"La Asamblea General tomando nota de que los Gobiernos de España y del Reino
Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte acordaron en Bruselas, el 27 de
noviembre de 1984, una Declaración 132 por la que decidieron poner en práctica,
antes del 15 de febrero de 1985, la Declaración de Lisboa de 10 de abril de 1980,
en todos sus aspectos; tomando nota de que ello suponía, de manera simultánea,
el establecimiento de la igualdad y reciprocidad de derechos de los españoles en
Gibraltar y de los gibraltareños en España, el establecimiento del libre tránsito de
personas, vehículos y mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino, y el
establecimiento de un proceso negociador; y tomando nota de que por lo que se
refiere a este último punto, la Declaración de Bruselas dispone lo siguiente:
'c) El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación
en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medio ambiental. Ambas
partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969;"
"Acoge con satisfacción el hecho de que el 5 de febrero de 1985 quedara
establecida la igualdad y reciprocidad de derechos de los españoles en Gibraltar y
de los gibraltareños en España, así como el libre tránsito de personas, vehículos y
mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino 134; acoge también con
satisfacción el hecho de que ambos Gobiernos iniciaran en Ginebra, el mismo día 5
de febrero de 1985, el proceso negociador previsto en la Declaración de Bruselas,
igualmente previsto en el consenso aprobado por la Asamblea el 14 de diciembre
de 1973; toma nota de que los Ministros de Asuntos Exteriores se reunieron en
Madrid los días 5 y 6 de diciembre de 1985 como parte de este proceso; e insta a
ambos Gobiernos a proseguir dichas negociaciones con objeto de llegar a una
solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes
de la Asamblea y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones
Unidas."
Asamblea General: Consenso de 4 de diciembre de 1987.
42/418
En su 92a. sesión plenaria, celebrada el 4 de diciembre de 1987, la Asamblea
General, por recomendación de La Cuarta Comisión aprobó el siguiente texto que
representa el consenso de los miembros de la Asamblea:
"La Asamblea General recordando su decisión 41/407, de 31 de octubre de 1986, y
recordando así mismo, que la declaración de Bruselas acordada el 27 de noviembre
de 1994 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda
del Norte, declara lo siguiente:
"c) El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar así como promover en beneficio mutuo la cooperación en
materia económica cultural turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas partes
acuerdan que en el marco de este proceso serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969.'
toma nota de que los Ministros de Asuntos Exteriores se reunieron en Madrid los
días 5 y 6 de diciembre de 1985 y en Londres los días 13 y 14 de enero de 1987
como parte de este proceso e insta a ambos Gobiernos a proseguir dichas
negociaciones, con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de
Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y de
conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas".Asamblea General: Consenso de 22 de noviembre de 1988.
43/411. Cuestión de Gibraltar
En su 59a. sesión plenaria, celebrada el 22 de noviembre de 1988, la Asamblea
General, por recomendación de la Cuarta Comisión, aprobó el siguiente texto, que
representa el consenso de los Miembros de la Asamblea:
"La Asamblea General, recordando su decisión 42/418, de 4 de diciembre de 1987,
recordando asimismo que la declaración de Brusclas, acordada el 27 de noviembre
de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda
del Norte, dispone, entre otras cosas, lo siguiente:
"El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación
en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas
partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respeta
los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969;'
"toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos
Exteriores se reunieron en Madrid los días 5 y 6 de diciembre de 1985, en Londres
los días 13 y 14 de enero de 1987, en Madrid los días 27 y 28 de noviembre de
1987 y en Londres el 2 de diciembre de 1987, alcanzando en esta última ocasión un
acuerdo sobre medidas para la cooperación sobre el uso del aeropuerto de Gibraltar
reanudación del servicio de transbordador entre Gibraltar y Algeciras, y mejora del
flujo del tráfico terrestre entre España y Gibraltar; lamenta que estas medidas no
hayan sido puestas en práctica todavía e insta a ambos Gobiernos a proseguir sus
negocia- ciones con objeto de llegar a una solución definitiva del problema de
Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la Asamblea y de conformidad
con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas."
Asamblea General: Consenso de 11 de diciembre de 1989.
44/426
En su 80ª sesión plenaria celebrada el 11 de diciembre de 1989, la Asamblea
General, por recomendación de la Cuarta Comisión, aprobó el texto siguiente que
representa el consenso de los miembros de la Asamblea:
"La Asamblea General, recordando su decisión 43/411, de 22 de noviembre de
1988, y recordando asimismo que la declaración, acordada el 27 de noviembre de
1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del
Norte, dispone, entre otras cosas, lo siguiente:
"El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación
en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas
Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969",
"torna nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos
Exteriores han celebrado reuniones anuales alternativamente en ambas capitales; e
insta a ambos Gobiernos a proseguir sus negociaciones con objeto de llegar a una
solución definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes
de la Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones
Unidas".
Asamblea General: Consenso de 20 de noviembre de 1990.
45/407
La Asamblea General, recordando su decisión 441426, de 11 de diciembre de 1989,
y recordando asimismo que la declaración de Bruselas, acordada el 27 de
noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña
e Irlanda del Norte 1/, dispone, entre otras cosas, lo siguiente:
"El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación
en materia económica, cultura¡, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas
Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal, como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969".
Toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores
han celebrado reuniones anuales alternativamente en ambas capitales; e insta a
ambos Gobiernos a proseguir sus negociaciones con objeto de llegar a una solución
definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la
Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones
Unidas.
Asamblea General: Consenso de 11 de diciembre de 1991.
La Asamblea General, recordando su decisión 45/407, de 20 de noviembre de
1990, y recordando asimismo que la Declaración de Bruselas, acordada el 27 de
noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña
e Irlanda del Norte 11, dispone, entre otras cosas, lo siguiente:
"El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación
en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas
Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal, como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969".
Toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores
han celebrado reuniones anuales alternativamente en ambas capitales; e insta a
ambos Gobiernos a proseguir sus negociaciones con objeto de llegar a una solución
definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la
Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones
Unidas.
Asamblea General: Consenso de 25 de noviembre de 1992.
La Asamblea General, recordando su decisión 46/420, de 11 de diciembre de 1991,
y recordando asimismo que la Declaración de Bruselas, acordada el 27 de
noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña
e Irlanda del Norte 1/, dispone, entre otras cosas, lo siguiente:
"El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación
en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas
Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal, como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969".
Toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores
han celebrado reuniones anuales alternativamente en ambas capitales; e insta a
ambos Gobiernos a proseguir sus negociaciones con objeto de llegar a una solución
definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la
Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones
Unidas.
Asamblea General: Consenso de 10 de diciembre de 1993.
(48/422)
La Asamblea General, recordando su decisión 47/411, de 25 de noviembre de
1992, y recordando asimismo que la declaración de Bruselas, acordada el 27 de
noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña
e Irlanda del Norte¡ dispone, entre otras cosas, lo siguiente:
"El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación
en materia económica, cultural, turística, aérea, militar medio ambiental. Ambas
partes acuerdan que, en el marco de este proceso serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la constitución
de 1969,"
toma nota de que, en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores
de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte celebran
reuniones anuales alternativamente en ambas capitales, la más reciente de las
cuales ha tenido lugar en Madrid el día 12 de marzo de 1993, e insta a ambos
Gobiernos a proseguir con sus negociaciones con objeto de llegar a una solución
definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la
Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones
Unidas.
Asamblea General: Consenso de 9 de diciembre de 1994.
49/420
La Asamblea General, recordando su decisión 48/422, de 10 de diciembre de 1993.
y recordando asimismo que la Declaración de Bruselas, acordada el 27 de
noviembre de 1984 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña
e Irlanda del Norte 1] dispone, entre cosas, lo siguiente:
"El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo. la cooperación
en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medioambiental. Ambas
Partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969",
toma nota de que en el marco de este proceso, los Ministros de Asuntos
Exteriores de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte
celebran reuniones anuales alternativamente en ambas capitales, la más reciente
de las cuales ha tenido lugar en Madrid el día 1 de marzo de 1993, e insta a ambos
Gobiernos a proseguir con sus negociaciones con objeto de llegar a una solución
definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la
Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones
Unidas.
Asamblea General: Consenso de 1995.
La Asamblea General, recordando su decisión 49/420, de 9 de diciembre de 1994, y
recordando asimismo que la Declaración de Bruselas, acordada el 27 de noviembre
de 19841 por los Gobiernos de España y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda
del Norte dispone, entre otras cosas, lo siguiente:
"El establecimiento de un proceso negociador a fin de solucionar todas sus
diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la cooperación
en materia económica, cultural, turística, aérea, militar y medio ambiental. Ambas
partes acuerdan que, en el marco de este proceso, serán tratadas las cuestiones de
soberanía. El Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal y como establece el preámbulo de la Constitución
de 1969,"
toma nota de que, en el marco de ese proceso, los Ministros de Asuntos Exteriores
de España y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte celebran
reuniones anuales alternativamente en ambas capitales, la más reciente de las
cuales tuvo lugar en Londres el día 20 de diciembre de 1994, e ¡nota a ambos
Gobiernos a proseguir con sus negociaciones con objeto de llegar a una solución
definitiva del problema de Gibraltar a la luz de las resoluciones pertinentes de la
Asamblea General y de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones
Unidas.
Organización para La Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE)
DECLARACION INTERPRETATIVA FORMULADA POR ESPAÑA
TRAS LA ADOPCION DE LA CARTA DE PARIS EN VIENA
(33.ª sesión plenaria de la Comisión encargada de preparar la reunión de París.
Viena, 17- de noviembre de 1990)
La delegación de España hizo la siguiente declaración:
"El Reino de España considera que en el espíritu de la nueva Europa que anima esta
Carta de París, debe inscribirse la superación de situaciones coloniales periclitadas y
que, de manera concreta, es necesario poner fin a la situación colonial de Gibraltar.
El modo más adecuado para alcanzar este objetivo es la prosecución del proceso
negociador establecido entre el Reino de España y el Reino Unido por la Declaración
de Bruselas de 27 de noviembre de 1984."
La delegación del Reino Unido hizo la siguiente declaración:
"Me veo obligado a responder a la declaración del representante de España.Rechazó
su descripción de la situación de Gibraltar como una situación colonial periclitada.
El Gobierno del Reino Unido ha expresado claramente muchas veces que los deseos
del pueblo de Gibraltar son primordiales para determinar su futuro. Esto es, por
supuesto, conforme con el principio de la autodeterminación que se reafirma, junto
con todos los demás principios del Acta Final de Helsinki en nuestra Carta para una
Nueva Europa.
Sin embargo, estoy enteramente de acuerdo en que el medio adecuado de tratar
las controversias sobre Gibraltar entre mi país y España es mediante la
continuación de las discusiones bilaterales entre ellos."
Derecho de réplica:
Se acordó que las declaraciones formuladas por España y el Reino Unido figuraran
en el Diario, de la manera siguiente:
España: "Mi delegación lamenta profundamente la extemporánea declaración del
delegado británico. En relación con ella quiere señalar a su atención tres puntos:
1- Mi delegación no puede sino mostrar su enorme sorpresa por el rechazo de la
calificación de Gibraltar como situación colonial periclitada. Estamos en 1990. El
proceso histórico de la descolonización está casi terminado en todo el mundo. Y
subrayo el casi, por que en Europa todavía se mantiene una situación colonial:
Gibraltar. La última colonia de Europa. Teniendo esto presente, convendrán
conmigo en que esta situación colonial no puede sino ser calificada de periclitada,
obsoleta, anacrónica.
2.- En cuanto a la cuestión de la autodeterminación, suscitada por el delegado
británico, mi delegación quiere recordar algo perfectamente conocido por todos,
pero que la delegación del Reino Unido parece haber olvidado momentáneamente:
que Gibraltar no es un problema de autodeterminación, sino de integridad
territorial. No ya el Acta Final, sino esta Carta de París para una nueva Europa, que
acabamos de adoptar señalan que la autodeterminación debe ejercitarse de
acuerdo con las normas relevantes del Derecho Internacional. En este sentido, la
doctrina de Naciones Unidas ha establecido reiteradamente que la cuestión de
Gibraltar lo es de integridad territorial, en ningún caso de autodeterminación.
3.- Finalmente, quiero llamar la atención sobre las últimas palabras del delegado
británico. En ellas, se ha mostrado de acuerdo con algo que, francamente, me deja
perplejo. Cito "I entirely agree that the appropriate way to handle disputes over
Gibraltar between my country and Spain is through continuation of bilateral
discussions between them". Sr. Presidente, yo no he dicho eso. Lo que he dicho es
"proceso negociador". Sólo así se puede resolver esta cuestión colonial que, insisto,
sólo puede ser calificada de periclitada.
Reino Unido: "En respuesta a la respuesta de la delegación de España declaro que
no veo la necesidad de exponer dicho tema en este foro. Mi rechazo se refiere al
empleo de la palabra periclitada, no al de la palabra colonial. Con respecto al
segundo punto de la delegación española, sólo puedo repetir que los deseos de los
habitantes de Gibraltar son primordiales. Con respecto al tercero, lo que yo quería
decir era que la cuestión de Gibraltar podría tratarse mejor bilateralmente entre
nosotros."
Proceso de Conversaciones entre el Estado español y
Gran Bretaña
DECLARACION DE LISBOA
(10 abril 1980)
El texto de la declaración firmada hoy en Lisboa por Marcelino Oreja y lord
Carrington es el siguiente:
1. Los Gobiernos británicos y español, en su deseo de reforzar sus relaciones
bilaterales y contribuir de esta manera a la solidaridad europea y occidental, se
proponen resolver el problema de Gibraltar en un espíritu de amistad y de acuerdo
con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas.
2. Los dos Gobiernos han acordado, en consecuencia, iniciar negociaciones a fin de
solucionar todas las diferencias sobre Gibraltar.
3. Los dos Gobiernos han acordado el restablecimiento de comunicaciones directas
en la región.
El Gobierno español
actualmente en vigor.
ha
decidido
suspender
la
aplicación
de
las
medidas
Ambos Gobiernos han acordado que la futura cooperación estará basada en la
reciprocidad y la plena igualdad de derechos. Valoran y contemplan con interés los
pasos que se irán adoptando por una y otra parte y que, a su juicio, abrirán el
camino hacia un entendimiento más estrecho entre aquéllos directamente afectados
en el área.
4. A estos efectos, los dos Gobiernos, que reconocen la necesidad de desarrollar
una cooperación práctica mutuamente beneficiosa, tomarán en consideración las
propuestas que formula cada uno de ellos.
5. El Gobierno español, al reafirmar su posición respecto al restablecimiento de la
integridad territorial de España, reitera su intención de que al término de las
negociaciones queden plenamente salvaguardados los intereses de los
gibraltareños.
Por su parte, el Gobierno británico mantendrá plenamente su compromiso de
respetar los deseos libre y democráticamente expresados de la población de
Gibraltar, tal y como se hallan recogidos en el preámbulo de la Constitución de
Gibraltar.
6. Funcionarios de ambas partes se reunirán tan pronto como sea posible para
preparar las medidas prácticas necesarias que permitan el cumplimiento de los
propósitos acordados en esta declaración. Se prevé que estos preparativos queden
ultimados antes del 1 de junio..
COMUNICADO CONJUNTO HISPANO-BRITANICO
(08-01-82)
El presidente del Gobierno español, Sr. Don Leopoldo Calvo-Sotelo, ha mantenido
conversaciones hoy en 10 Downing Street con la primer ministro británica,
Margaret Thatcher. La Sra. Thatcher estuvo acompañada por el secretario de
Estado para Asuntos Exteriores y de la Commonwealth Lord Carrigton. El Sr. CalvoSotelo estuvo acompañado por el ministro español de Asuntos Exteriores, don José
Pedro Pérez-Llorca. Este ha sido el primer encuentro de ambos presidentes del
Gobierno.
Las conversaciones abarcaron un amplio espectro de temas internacionales,
incluidos los de la OTAN, la Comunidad Económica Europea y las Relaciones EsteOeste. La primer ministro británica acogió calurosamente la perspectiva de la
entrada de España en la OTAN y su integración en la CEE.
También se pasó revista a las Relaciones 'Bilaterales incluido el tema de Gibraltar.
Ambos Gobiernos han acordado comenzar el 20 de abril de 1982 las negociaciones
previstas en la declaración de Lisboa, con el propósito de superar todas sus
diferencias sobre Gibraltar. En la misma fecha se restablecerán las comunicaciones
directas, de acuerdo con lo previsto en la declaración de Lisboa.
TEXTO DE LAS CARTAS CANJEADAS ENTRE ESPAÑA Y GRAN BRETAÑA SOBRE LAS
NEGOCIACIONES DEL PEÑON DE GIBRALTAR
8-1-82
El texto de la carta dirigida por el representante español, dice:
"Señor embajador:
Le expongo en relación con nuestras recientes conversaciones, lo que sigue:
El Gobierno español y el británico, decididos a llevar a la práctica, en todos sus
aspectos, la declaración de Lisboa mediante una política de aplicación concreta de
lo allí estipulado, han acordado lo que sigue:
1.- Iniciar el 20 de abril de 1982 las negociaciones previstas en dicha declaración a
fin de solucionar todas sus diferencias existentes sobre Gibraltar.
2.- En ese mismo día se restablecerán las comunicaciones, de acuerdo con lo
previsto igualmente en la declaración de Lisboa.
3.- El Gobierno español toma nota de que el nuevo régimen aplicable en Gibraltar,
que estará vigente en la fecha arriba indicada, modifica la situación existente antes
de 1969 al eliminar factores que a juicio de] Gobierno español eran discriminatorios
y que considera fundamentales. Concretamente queda asegurada la igualdad para
los españoles en Gibraltar en cuanto al derecho a pernoctar y en materia de
empleo, seguridad social, salarios y derecho a formar parte de sindicatos.
Paralelamente a la fase inicial de las negociaciones previstas en el punto 1, ambas
partes tratarán el resto de las cuestiones referentes a la situación de los españoles
en Gibraltar a efectos de determinar la aplicación concreta de los principios de
reciprocidad e igualdad de derechos establecidos en Lisboa. Las dos partes
reconocen que los acuerdos a los que se llegue deberán surtir efecto cuantos antes
mediante la adopción de las medidas necesarias incluyendo la introducción de
nueva legislación, si fuera preciso.
Carta de respuesta
Por su parte, la carta del representante británico manifiesta:
"Señor director general:
Agradezco su carta de 8 de enero que se refiere a la aplicación de la declaración de
Lisboa y que dice lo siguiente:
Señor embajador:
Le expongo, en relación con nuestras recientes conversaciones, lo que sigue:
El Gobierno español y el británico decididos a llevar a la práctica, en todos sus
aspectos, la declaración de Lisboa mediante una política de aplicación concreta de
lo allí estipulado han acordado lo que sigue:
1.- Iniciar el 20 de abril de 1982 las negociaciones previstas en dicha declaración a
fin de solucionar todas sus diferencias existentes sobre Gibraltar.
2.- En ese mismo día se restablecerán las comunicaciones, de acuerdo con lo
previsto igualmente en la declaración de Lisboa.
3.- El Gobierno español toma nota de que el nuevo régimen aplicable en Gibraltar,
que estará vigente en la fecha arriba indicada, modifica la situación existente antes
de 1969 al eliminar factores que a juicio del Gobierno español eran discriminatorios
y que considera fundamentales. Concretamente, queda asegurada la igualdad para
los españoles en Gibraltar en cuanto a derecho a pernoctar y en materia de empleo,
seguridad social, salarios y derecho a formar parte de sindicatos.
Paralelamente a la fase inicial de las negociaciones previstas en el punco 1 , ambas
partes tratarán el resto de las cuestiones referentes a la situación de los españoles
en Gibraltar a efectos de determinar la aplicación concreta
de los principios de reciprocidad e igualdad de derechos establecidos en Lisboa. Las
dos partes reconocen que los acuerdos a los que se llegue deberán surtir efecto
cuanto antes mediante la adopción de las medidas necesarias incluyendo la
introducción de nueva legislación, si fuera preciso".
Confirmo que mi Gobierno acepta lo anteriormente expuesto corno versión correcta
de los entendimientos alcanzados entre nosotros sobre los temas planteados por el
Gobierno español".
DECLARACIÓN DE BRUSELAS
(27-11-84)
"Los Ministros de Asuntos Exteriores del Reino Unido y España, Sir Geoffrey Howe y
Fernando Morán, han celebrado los días 26 y 27 de noviembre conversaciones en
Bruselas sobre la cuestión de Gibraltar. Dichas conversaciones han culminado el
proceso iniciado hace más de un año.
En el día de hoy han llegado a un acuerdo, en la forma de una declaración común.
Por este texto:
1º.- Se equilibran los derechos de españoles y gibraltareños. Sobre este punto la
Declaración de Lisboa de abril de 1980 había dado lugar a una interpretación
desequilibrada a favor de los segundos;
2º.- Ambos Gobiernos han decidido restablecer la libre circulación de personas,
vehículos y mercancías entre Gibraltar y el territorio circunvecino, así como
favorecer el tráfico aéreo;
3º.- Se establece un sistema para abordar y resolver todas las cuestiones respecto
a Gibraltar;
4º.- Por primera vez en la historia del contencioso, la partte británica admite
expresamente que se abordarán en este proceso las cuestiones de soberanía. La
expresión plural cubre los temas de la soberanía sobre el territorio al que se refiere
el Tratado de Utrecht, así como la soberanía sobre el istmo, nunca cedido a Gran
Bretaña.
El Gobierno español tiene la firme y fundada esperanza de que esta declaración sea
el pórtico de unas relaciones muy amistosas y cooperadoras con la Gran Bretaña".
(Comunicado hecho público por la Oficina de Información Diplomática el 27-11-84)
Intercambio de notas sobre Gibraltar
(13-06-85)
Nota de prensa
Con motivo de la firma del Tratado de adhesión de España a las Comunidades
Europeas, el ministro de Asuntos Exteriores de España, don Fernando Morán, y el
secretario de Estado de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth del Reino Unido,
Sir Geoffrey Howe, han intercambiado hoy, día 13, las siguientes notas sobre
Gibraltar:
Nota dirigida por Su Excelencia don Fernando Morán al Excmo. Sir Geoffrey Howe
Excelencia:
Siguiendo las instrucciones de mi Gobierno, tengo la honra de hacer constar, en
relación con la firma y posterior ratificación del Tratado relativo a la adhesión del
Reino de España a las Comunidades Europeas y la aplicación de la normativa
comunitaria al territorio de Gibraltar, en los términos convenidos en el Acta relativa
a las condiciones de adhesión, que dicha adhesión no implica por parte del Reino de
España ninguna modificación en su posición con respecto a Gibraltar y no afecta al
proceso negociador bilateral establecido de conformidad con lo dispuesto en el
comunicado conjunto acordado con Vuestra Excelencia en Bruselas el 27 de
noviembre de 1984.
Tengo la honra de proponerle que la presente nota y la respuesta de Vuestra
Excelencia dejen constancia de las posiciones de ambos Gobiernos.
Aprovecho esta oportunidad para reiterar a Vuestra Excelencia el testimonio de mi
más alta consideración.
Nota dirigida por Su Excelencia Sir Geoffrey Howe al Excmo. Sr. don Fernando
Morán
Excelencia:
Tengo el honor de acusar recibo de su nota de fecha de hoy cuya traducción dice lo
siguiente:
"Siguiendo las instrucciones de mi Gobierno, tengo la honra de hacer constar, en
relación con la firma y posterior ratificación del Tratado relativo a la adhesión del
Reino de España a las Comunidades Europeas y la aplicación de la normativa
comunitaria al territorio de Gibraltar, en los términos convenidos en el Acta relativa
a las condiciones de adhesión, que dicha adhesión no implica por parte del Reino de
España ninguna modificación en su posición con respecto a Gibraltar y no afecta al
proceso negociador bilateral establecido de conformidad con lo dispuesto en el
comunicado conjunto acordado con Vuestra Excelencia en Bruselas el 27 de
noviembre de 1984.
Tengo la honra de proponerle que la presente nota y la respuesta de Vuestra
Excelencia dejen constancia de las posiciones de ambos Gobiernos".
Tengo el honor de confirmar a Vuestra Excelencia que el Gobierno del Reino Unido
de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte, en relación con la firma y posterior
ratificación del Tratado relativo a la adhesión del Reino de España a las
Comunidades Europeas y la aplicación de la normativa comunitaria al territorio de
Gibraltar, en los términos convenidos en el Acta relativa a las condiciones de
adhesión, hace constar que la adhesión del Reino de España
no implica ninguna modificación de la posición del Reino Unido de Gran Bretaña con
respecto a Gibraltar y no afecta al proceso negociador bilateral establecido de
conformidad con lo dispuesto en el comunicado conjunto acordado con Vuestra
Excelencia en Bruselas el 27 de noviembre de 1984.
Aprovecho esta oportunidad para reiterar a Vuestra Excelencia el testimonio de mi
más alta consideración.
13 de junio de 1985
Comunicado conjunto hispano-británico.
(06-12-85)
La Oficina de información Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores, hizo
público el siguiente comunicado conjunto hispano-británico:
Los ministros de Asuntos Exteriores español y británico se han reunido en Madrid el
5 y 6 de diciembre, y han mantenido un útil intercambio de puntos de vista sobre
una serie de cuestiones internacionales y bilaterales, incluido Gibraltar. Esta
reunión forma parte del proceso negociador previsto en el acuerdo de Bruselas.
Los ministros han pasado revista a los avances realizados en diversas áreas en
relación con Gibraltar desde la reunión ministerial de Ginebra el 5 de febrero de
1985 y, en particular, han tomado nota con satisfacción del desarrollo de contactos
en beneficio mutuo en materias tales como el turismo. Han acordado como objetivo
común el desarrollo de la utilización civil del aeródromo de Gibraltar sobre la base
del beneficio mutuo, y han dispuesto que continúen los trabajos sobre los aspectos
prácticos para alcanzar ese objetivo. En materias laborales y sociales, Sir Geoffrey
Howe ha confirmado que los pensionistas españoles, con reclamaciones que
provienen de su anterior trabajo en Gibraltar, serían pagados al mismo nivel que
los gibraltareños, a partir del 1 de enero de 1986.
Tal y como dispone el acuerdo de Bruselas, los ministros han tratado a fondo las
cuestiones de soberanía. Han examinado las propuestas hechas por el Gobierno
español, en febrero de 1985, y han convenido que el estudio de las cuestiones de
soberanía debe proseguir por vía diplomática, teniendo en cuenta su común
objetivo de solucionar todas las diferencias entre los dos Gobiernos. Sir Geoffrey
Howe ha subrayado que el Gobierno británico mantendría plenamente su
compromiso de respetar los deseos de los gibraltareños tal y como establece el
preámbulo de la Constitución de 1969.
En lo tocante a cuestiones internacionales, los ministros han mantenido un útil
intercambio de puntos de vista sobre las relaciones Este-Oeste, Africa del Sur,
Oriente Medio y América Latina, así como sobre sus mutuos intereses dentro de las
Comunidades Europeas.
Los ministros han expresado su satisfacción por el hecho de que estarán en
estrecho y permanente contacto como miembros de las Comunidades Europeas, y
han acordado celebrar una nueva reunión bilateral en Londres en el curso de 1986.
DECLARACIÓN CONJUNTA SOBRE EL AEROPUERTO DE GIBRALTAR
"El ministro de Asuntos Exteriores del Reino de España, Excmo. Sr. don Francisco
Fernández Ordóñez, y el secretario para Relaciones Exteriores y la Commonwealth
del Reino Unido, honorable Sir Geoffrey Howe, reunidos en Londres el 2 de
diciembre de 1987.
Teniendo en cuenta el Comunicado Conjunto de Bruselas de 27 de noviembre de
1984 que estableció entre ambos países un proceso negociador a fin de solucionar
todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover, en beneficio mutuo, la
cooperación en una serie de materias, incluyendo la aviación.
Teniendo en cuenta asimismo las deliberaciones en el seno del Consejo de las
Comunidades Europeas sobre las propuestas de la Comisión Europea para la
Liberalización del Transporte Aéreo.
Entendiendo, por las conversaciones que han tenido lugar entre los dos ministros,
que ambos Gobiernos consideran que una mayor cooperación sobre el uso del
aeropuerto de Gibraltar será beneficiosa para ambos países y para la población de
Gibraltar y del Campo de Gibraltar.
Y en vista de que la aplicación de la política de transporte aéreo de la Comunidad
Europea al aeropuerto de Gibraltar se traducirá en una ampliación de su utilización
civil.
Han acordado el siguiente régimen:
1.-Las autoridades aeronáuticas de las dos partes mantendrán consultas regulares
acerca de todas las cuestiones relativas al desarrollo del uso civil del aeropuerto,
incluidas las relativas al establecimiento de nuevos servicios con terceros países.
Los permisos a las compañías aéreas españolas para efectuar servicios entre
aeropuertos del Reino de España y Gibraltar, a que se refiere el apartado -1. del
artículo 6 del Proyecto de Decisión de la CEE, sobre capacidad y acceso al mercado,
serán otorgados por las autoridades españolas.
2.-Las autoridades españolas construirán una nueva terminal en La Línea de la
Concepción, adyacente al lado norte de la verja existente. Los pasajeros que
utilicen esta terminal tendrán acceso directo al aeropuerto a través de una puerta
en la fachada sur de la terminal.
3.1 .-La terminal española será utilizada por las siguientes categorías de pasajeros:
- Pasajeros de cualquier país, volando en aviones de cualquier compañía y de
cualquier nacionalidad, que se dirijan al desembarcar, a cualquier punto del
territorio situado al norte de la verja.
- Pasajeros que, procedentes de cualquier punto del territorio situado al norte de la
verja, embarquen en aviones de cualquier compañía y de cualquier nacionalidad,
con destino a cualquier país del mundo.
3.2.-La terminal británica será utilizada por todos los demás pasajeros.
3.3.-Los pasajeros estarán sujetos, en su caso, a los controles de aduanas y de
inmigración en la correspondiente terminal.
4. 1-Se establecerá un comité para coordinar las actividades de transporte aéreo
civil de las terminales británica y española y su relación con los demás servicios del
aeropuerto. El comité se compondrá de un número igual de miembros designados
por cada Gobierno. Su mandato figura en el Anejo A.
4.2.-Lo establecido en el párrafo 4.1. será supervisado por el grupo de trabajo
sobre cuestiones de Aviación Civil establecido en 1985 bajo los auspicios de los
coordinadores hispano-británicos. El grupo de trabajo informará con regularidad a
los coordinadores. Los informes incluirán toda recomendación para ampliación de la
cooperación en el uso del aeropuerto de Gibraltar.
. 5.-Los Gobiernos británico y español asegurarán que se adopten medidas eficaces
en la terminal existente y en la nueva para controlar a los pasajeros y su equipaje
de mano, y para realizar comprobaciones adecuadas sobre las tripulaciones, carga
y bodegas de las aeronaves antes de y durante el embarque. Habrá una estrecha
colaboración de las dos terminales y entre ellas las autoridades responsables de
esas cuestiones en el resto del aeropuerto, con objeto de asegurar el
mantenimiento de los más altos niveles de seguridad.
6.-Continuarán las discusiones entre las dos partes con vistas al ulterior
fortalecimiento de las medidas de seguridad aérea y control de tráfico en la zona.
7.-El presente régimen y cualquier actividad o medida tomada en aplicación o como
consecuencia del mismo, se entienden sin perjuicio de las respectivas posiciones
jurídicas de España y del Reino Unido acerca de la controversia respecto de la
soberanía sobre el territorio en el que el aeropuerto se encuentra situado.
8.-El presente régimen comenzará a aplicarse cuando las autoridades británicas
hayan notificado a las autoridades españolas la entrada en vigor de la legislación
necesaria para llevar a efecto el punto 3.3. o cuando se haya terminado la
construcción de la terminal española, cualquiera que sea lo último en producirse, y
en todo caso no más tarde de un año desde la notificación arriba mencionada.
Londres, a 2 de diciembre de 1987
ANEJO A.
MANDATO DEL COMITE DE COORDINACION
"Se establecerá un comité para coordinar las actividades de transporte aéreo civil
de las terminales británica y española y para servir de enlace con las autoridades
competentes respecto de los requerimientos que las dos terminales impongan en
los otros servicios del aeropuerto. Sus funciones serán:
- Coordinar las disposiciones de reserva y facturación en las dos terminales.
- Asegurar la coordinación entre las dos terminales para las medidas relativas al
movimiento de los pasajeros hacia los aviones y desde ellos.
- Adoptar las medidas apropiadas respecto a los pasajeros retrasados y los
pasajeros en tránsito.
- Asegurar medidas coordinadas para manejo de los equipajes en las dos
terminales incluyendo la entrega en los aviones y su recogida de los mismos.
- Asegurar medidas coordinadas para maneje, despacho y almacenamiento de
correspondencia y carga.
- Servir de enlace con las líneas aéreas respecto a facilidades y servicios que
puedan serles suministrados comercialmente, en el momento presente o en el
futuro, tanto dentro de las terminales (por ejemplo, mostradores de información,
oficinas de billetes) como para las aeronaves (por ejemplo, limpieza y suministro de
alimentación).
- Coordinar las medidas de seguridad en las dos terminales respecto a pasajeros y
carga.
- Asegurar que no haya conflicto entre los requerimientos que impongan las dos
terminales en otros servicios del aeropuerto.
- Considerar las posibilidades de servicios compartidos (por ejemplo, servicios de
limpieza de la terminal, de primeros auxilios, etc.).
- Servir como foro para la consideración de cualquier problema que plantee la
ejecución de los servicios de transporte aéreo civil de las dos terminales."
DECLARACION CONJUNTA SOBRE SERVICIOS MARITIMOS Y COMUNICACIONES
TERRESTRES Y DE APARTADOS ADICIONALES DEL ARTICULO PRIMERO DEL
PROYECTO DE DECISION (CEE) DEL CONSEJO SOBRE REPARTO DE CAPACIDAD Y
ACCESO AL MERCADO.
DECLARACION CONJUNTA
"El ministro de Asuntos Exteriores del Reino de España, excelentísimo señor don
Francisco Fernández Ordóñez:, y el secretario para Relaciones Exteriores y la
Commonwealth del Reino Unido, honorable sir Geoffrey Howe, reunidos en Londres
el 2 de diciembre de 1987.
Teniendo en cuenta el Comunicado Conjunto de Bruselas de 27 de noviembre de
19S4 que estableció entre ambos países un proceso negociador a fin de solucionar
todas sus diferencias sobre Gibraltar, así como promover la cooperación en
beneficio mutuo.
Observando que empresas en España y Gibraltar han manifestado interés en
restablecer el servicio de transbordadores entre Algeciras y Gibraltar.
Han acordado lo siguiente:
El servicio de transbordador entre Algeciras y Gibraltar se restablecerá tan pronto
como sea posible para beneficio mutuo de España y de la población de Gibraltar y
del Campo de Gibraltar.
Se adoptarán medidas urgentes para mejora del flujo del tráfico terrestre (por
ejemplo, mediante la introducción de canales aduaneros rojo y verde). Ambas
partes cooperarán en un estudio a plazo más largo de otras posibles mejoras.
APARTADOS ADICIONALES AL ARTICULO 1 DEL PROYECTO DE DECISION (CEE)
DEL CONSEJO SOBRE REPARTO DE CAPACIDAD Y ACCESO AL MERCADO.
- 4 - La aplicación al aeropuerto de Gibraltar de la presente decisión se entiende sin
perjuicio de las respectivas posiciones jurídicas del Reino de España y del Reino
Unido acerca de la controversia respecto de la soberanía sobre el territorio en el
que el aeropuerto se encuentra situado.
- 5 - La aplicación de las disposiciones de esta decisión al aeropuerto de Gibraltar
quedará suspendida hasta que comience la aplicación del régimen contenido en la
Declaración Conjunta de los ministros de Asuntos Exteriores del Reino de España y
del Reino Unido de 2 de diciembre de 1987. Los Gobiernos del Reino de España y
del Reino Unido informarán en este sentido al Consejo en esa fecha."
Declaración efectuada por el ministro de Asuntos Exteriores, don Francisco
Fernández Ordóñez al término de las conversaciones mantenidas sobre
Gibraltar con el Secretario del Foreign Office, Douglas Hurd
(Madrid, 26-02-90)
Hoy es la primera vez que el señor Hurd viene a Madrid con objeto de mantener las
conversaciones periódicas entre los dos Gobiernos previstas en el marco del
proceso negociador de Bruselas. El programa ha incluido una audiencia con S.M. el
Rey y una entrevista con el Presidente del Gobierno.
El Sr. Hurd y yo hemos tenido una extensa conversación esta mañana sobre
Gibraltar y otros temas de actualidad internacional. .
Esta tarde las dos delegaciones se han reunido en sesión plenaria. Los dos hemos
expresado nuestras bien conocidas posturas sobre las cuestiones de soberanía.
El cuanto al Acuerdo de 1987 sobre el aeropuerto, he reiterado nuestro deseo de
verlo puesto en práctica cuanto antes. El señor Hurd ha subrayado que el gobierno
británico sigue apoyando este Acuerdo con firmeza, y ha dicho que él seguirá
instando a que se 'ponga en práctica lo más pronto posible. Ambas partes estamos
de acuerdo en que será muy beneficioso para la cooperación en la zona.
En la reunión de esta tarde hemos examinado diversos aspectos de la cooperación
de ámbito local. Se acordó que es susceptible de mejora en una serie de aspectos.
También hemos acordado que, teniendo en cuenta nuestras respectivas
responsabilidades en materia de aduanas y orden público en la zona reafirmamos
nuestro compromiso de combatir todas las formas de contrabando. A este fin se
extenderán a Gibraltar el Tratado bilateral de 1985 sobre Extradición y el Acuerdo
bilateral de 1989 sobre prevención y represión del tráfico ilícito y el uso indebido de
drogas. El gobierno británico incluirá además a Gibraltar en el ámbito del Convenio
de Nápoles de 1967 sobre Asistencia mutua entre Administraciones Aduaneras,
para proporcionar el marco necesario para la supresión efectiva del contrabando en
la zona.
Los dos Gobiernos desean fomentar una cooperación local más estrecha a este
respecto y han tomado nota de las medidas recientemente adoptadas en Gibraltar
como prueba de su compromiso.
CANJE de Notas constitutivo de acuerdo entre España 3, el Reino Unido de
Gran Bretaña e Irlanda del Norte para extender a Gibraltar el Tratado
Bilateral de Extradición de 22 de julio de 1985, realizado en Madrid el 1 de
febrero de 1991.
Excelencia:
Tengo el honor de hacer referencia a las conversaciones que mantuve con el
Secretario de Estado de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth del Reino Unido
de Gran Bretaña e Irlanda del Norte en Madrid el día 26 de febrero de 1990, en las
que se adoptó la decisión de extender a Gibraltar el Tratado de Extradición entre
nuestros dos países.
Este régimen y cualquier actividad o medida tomada en aplicación o como
consecuencia del mismo se entienden sin perjuicio de la posición jurídica del Reino
de España respecto de la controversia acerca de la soberanía sobre el Istmo.
Tengo el honor de proponer que la presente Nota acompañada de la respuesta de
vuestra excelencia constituyan un acuerdo entre nuestros dos Gobiernos para que
se extienda a Gibraltar el Tratado de Extradición entre nuestros dos países, firmado
en Londres el día 22 de julio de 1985. en conformidad con su articulo 21 (1) (a)
(ii). El presente acuerdo entrará en vigor en la fecha en que cada uno de los
Gobiernos haya notificado al otro que se han cumplido los trámites internos para
hacerlo efectivo.
Aprovecho esta oportunidad para reiterar a vuestra excelencia, el testimonio de mi
consideración más distinguida.
Madrid, 1 de febrero de 1991.-El Ministro de Asuntos Exteriores, Sir Patrick F. Fearn
KCMG, Embajador de Su Majestad Británica. Madrid.
EMBAJADA BRITÁNICA
(Traducción.) Madrid, 1 de febrero de 1991
Excelentísimo señor don Francisco Fernández Ordóñez, Ministro de Asuntos
Exteriores. Ministerio de Asuntos Exteriores, plaza de la Provincia, 1, 28012 Madrid.
Excelencia:
Tengo el honor de acusar recibo de su Nota (de fecha de hoy) que traducida dice lo
siguiente:
«Tengo el honor de hacer referencia a las conversaciones que mantuve con el
Secretario de Estado de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth del Reino Unido
de Gran Bretaña e Irlanda del Norte en Madrid el día 26 de febrero de 1990, en las
que se adoptó la decisión de extender a Gibraltar el Tratado de Extradición entre
nuestros dos países
Este régimen y cualquier actividad o medida tomada en aplicación o como
consecuencia del mismo se entienden sin perjuicio de la posición jurídica del Reino
de España respecto de la controversia acerca de la soberanía sobre el Istmo.
Tengo el honor de proponer que la presente Nota acompañada de la respuesta de
vuestra excelencia constituyan un acuerdo entre nuestros dos Gobiernos para que
se extienda a Gibraltar el Tratado de Extradición entre nuestros dos países firmado
en Londres el día 22 de julio de. 1985. en conformidad con su articulo 21 (1) (a)
(ii). El presente acuerdo entrará en vigor en la fecha en que cada uno de los
Gobiernos haya notificado al otro que se han cumplido los trámites internos para
hacerlo efectivo.
Aprovecho esta oportunidad para reiterar a vuestra excelencia el testimonio de mi
consideración más distinguida.»
En respuesta tengo el honor de confirmar que los términos y condiciones expuestos
en su Nota cuentan con la conformidad del Gobierno del Reino Unido de Gran
Bretaña e Irlanda del Norte, y que su nota, acompañada de la presente respuesta,
constituirán un acuerdo entre nuestros dos Gobiernos. que entrará en vigor en la
fecha en que cada uno de los Gobiernos haya notificado al otro que han sido
cumplidos los trámites internos para hacerlo efectivo.
Aprovecho esta oportunidad para reiterarle a su excelencia el testimonio de mi
consideración más distinguida.
Firmado: Sir Robin Fearn.
El presente canje de Notas constitutivo de acuerdo entró en vigor el 3 de mayo de
1991, fecha en que ambos Gobiernos se han notificado el cumplimiento de los
respectivos trámites internos necesarios, según se establece en el texto de las
notas.
Lo que se hace público para conocimiento general.
Madrid,- 17 de junio de 1991.-El Secretario general técnico en funciones, Aquilino
González Hernando.
(BOE, 27-6-91)
Comunicado Conjunto Hispano-Británico
(20-12-94)
En los términos del Acuerdo de Bruselas de 1984, el Ministro de Asuntos Exteriores
español Javier Solana, se reunió en Londres el 20 de Diciembre de 1994 con el
Secretario de Asuntos Exteriores británico, Douglas Hurd. Ambos reafirmaron su
compromiso con el Proceso de Bruselas. Se mostraron de acuerdo en la importancia
que para Gibraltar tiene el desarrollo de una economía viable. Reconocieron la
existencia de un problema de tráficos ilícitos, en particular drogas, en la zona de
Gibraltar y coincidieron en la necesidad de establecer un mecanismo efectivo, que
incluya a las autoridades locales competentes, para mejorar las consultas y la
cooperación. En el marco de la circulación normal y regular entre Gibraltar y el
territorio circunvecino, y con espíritu de cooperación, examinarán los progresos
realizados para la puesta en práctica de dicho mecanismo los primeros días del año.
XIª- SESION DEL PROCESO DE BRUSELAS
Londres, 10 de Diciembre de 1997
COMUNICADO CONJUNTO
Los Ministros de Asuntos Exteriores de España y el Reino Unido se reunieron en
Londres el 10 de Diciembre en la XIª Sesión formal del Proceso de Bruselas para
tratar de Gibraltar.
Las conversaciones se desarrollaron en una atmósfera cordial y constructiva. La
delegación española expuso sus ideas en torno al esbozo general de un marco
jurídico, político y económico para Gibraltar incluyendo en ello aspectos relativos a
la soberanía.
La delegación británica escuchó con atención y recordó su compromiso de respetar
los deseos de los gibraltareños tal y como quedan recogidos en el preámbulo de la
Constitución de Gibraltar de 1969. Se acordó que los coordinadores del Proceso de
Bruselas se volvieran a encontrar para avanzar en esta línea. Además de las ideas
españolas, los coordinadores discutirán cualquier otra propuesta procedente de los
gibraltareños, junto con propuestas británicas para una mayor cooperación en el
campo económico.
Comunicados de la O.I.D.
Madrid, 11 de abril de 1983
Con motivo de la anunciada visita de una flota británica a Gibraltar, la Oficina de
Información Diplomática, del Ministerio de Asuntos Exteriores, hace público el
siguiente comunicado:
"La televisión de Gibraltar ha anunciado que una flota de grandes dimensiones
visitará la Roca en los próximos días. Dicha información ha sido confirmada por la
vía diplomática.
Ante esta situación el Gobierno desea puntualizar:
1.- Que está dispuesto, como se ha hecho reiteradamente saber a la parte
británica, a cumplir la Declaración de Lisboa en su totalidad y con una lectura
inequívoca, que, evidentemente, comprende el tema de la soberanía y la igualdad
de derechos entre españoles y gibraltareños, así como la plena reciprocidad.
2.- Que reitera su atención a los legítimos intereses de la población de la Roca.
3.- Que ante la visita de la flota británica expresa su profunda preocupación y
disgusto por sus efectos sobre la opinión pública española en las circunstancias
actuales y actuando los precedentes que se dan a conocer. El Gobierno cuidará en
cualquier caso de que los derechos nacionales respecto a las aguas no sean
menoscabados y tomará a este efecto las medidas diplomáticas y políticas
oportunas. Previene a la parte británica de que tal acción no puede menos de
colocar el tema en una dimensión que el Gobierno español no desea y de cuyos
efectos sobre la opinión nacional española y la general es solamente responsable
quien ha planeado y decidido esta acción.
En efecto
1.- El 10 de abril de 1980 los ministros de Asuntos Exteriores británico y español
firmaron en Lisboa una declaración que preveía negociaciones entre el Reino Unido
y España sobre la cuestión de Gibraltar. La Declaración comprende seis párrafos y
su texto y alcance debe, naturalmente, ser interpretado y aplicado como un todo.
Desde aquella fecha y hasta el conflicto anglo-argentino en el Atlántico sur en abril
de 1982, la parte española tropezó con la dificultad para aplicar dicha declaración
de que las autoridades británicas interpretaban el texto parcial y unilateralmente,
centrándose, casi exclusivamente, en el tema de las medidas sobre las
comunicaciones entre Gibraltar y el territorio circunvecino. En concreto, la parte
española no obtuvo previsiones sobre el establecimiento de la igualdad de derechos
para los españoles en Gibraltar y respecto a la reciprocidad plena que la declaración
establece.
El conflicto de las Malvinas creó en Gran Bretaña un clima de nacionalismo, bien
conocido, que no ha favorecido las conversaciones.
2.- El Gobierno español formado el 4 de diciembre ha mantenido como punto
esencial de su acción exterior la reincorporación de Gibraltar al territorio nacional. A
la vez, ha pretendido no penalizar a la población cuyos intereses y cultura reconoce
y estima. En este sentido, el 15 de diciembre de 1982 restableció el paso peatonal
por el puesto de La Línea, medida que ha tenido efectos beneficiosos para la zona
del Campo de Gibraltar y para la misma población de la Roca.
3.- El día 9 de diciembre se entrevistaron en Bruselas los ministros de Asuntos
Exteriores de España y Gran Bretaña, señores Morán y Pym y decidieron hablar en
la primavera del tema de Gibraltar. Posteriormente, por la vía diplomática, la par te
británica intentó centrar el tema de futuras conversaciones en el levantamiento de
las medidas relativas al tránsito. Por parte española, se hizo saber que la aplicación
de la Declaración de Lisboa deber ser de todo el texto y principios, incluido el tema
de la soberanía y de la igualdad de derechos entre españoles y gibraltareños.
4) Los días 16 y 17 de marzo, el ministro de Asuntos Exteriores español realizó una
visita a Londres, de alcance y sentido semejante a las realizadas a otras capitales
europeas. Visita que se había convenido de antemano no tenía por tema el
cumplimiento de la Declaración de Lisboa, puesto que el alcance de la misma por
ambas partes no era aún coincidente.
El señor Morán se entrevistó con el señor Pym y con la primer ministro señora
Thatcher, a los que expresó claramente la posición española. La primer ministro
propuso al señor Morán nuevas entrevistas con su colega británico en un plazo de
uno a dos meses.
5) El embajador británico en Madrid ha sido convocado al Ministerio de Asuntos
Exteriores a estos efectos. El Gobierno reitera su voluntad de resolver el tema de
Gibraltar por la vía de la negociación, de acuerdo con las resoluciones pertinentes
de las Naciones Unidas, de manera de que al fin del proceso se alcance la
integridad territorial española, con respeto a los intereses de la población, y
expresa una vez mas, junto con su grave preocupación por los síntomas de tal
actitud británica, el deseo de mantener las mejores relaciones con el Reino Unido.
Madrid, 11 de junio de 1985
La Oficina de Información Diplomática hace público el siguiente comunicado:
La información relativa a una hipotética cesión de soberanía sobre el istmo de
Gibraltar a cambio de la utilización conjunta por España y el Reino Unido del
aeródromo de la referida colonia, que da pie a un comentario editorial del diario
"ABC" hoy, 11 de junio, es falsa.
España y el Reino Unido están manteniendo, de acuerdo con la Declaración de
Bruselas, conversaciones sobre aviación civil en relación con Gibraltar. En dichas
conversaciones, España ha hecho siempre una reserva formal, aceptada por la
parte británica, en el sentido de que, cualquiera que sea la futura organización de
las comunicaciones aéreas con Gibraltar, España mantiene su posición tradicional
sobre el istmo: es decir, considerar que el istmo no ha sido ni será objeto de cesión
al Reino Unido.
"La recuperación de la soberanía de Gibraltar es irrenunciable para España. Nuestra
reclamación se refiere tanto al Peñón cedido por el Tratado de Utrecht como al
istmo, ocupado ilegalmente por el Reino Unido y cuya ocupación España nunca ha
reconocido".
Nueva York, 19 de Junio de 2001
Intervención de la Representante de España, Ana Menéndez, ante el
Comité encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de
la declaración sobre la concesión de la independencia a los países y
pueblos coloniales.(Comité de los 24)
Señor Presidente,
En nombre de mis autoridades le agradezco a usted y a los miembros de este
Comité‚ el haber permitido a mi delegación intervenir ante ustedes. Como bien
saben los miembros de este Comité, España sigue con gran interés sus
deliberaciones. Creemos que la labor de este Comité ha sido y sigue siendo esencial
para terminar con el colonialismo de acuerdo con lo dispuesto en la Resolución
1514 (XV) de esta Organización. No puedo dejar de expresar, sin embargo, la
frustración del Gobierno español por el hecho de que cuando acabamos de entrar
en la Segunda Década para la erradicación del colonialismo sigan existiendo
situaciones coloniales entre otras, Gibraltar.
La recuperación de la soberanía de Gibraltar es irrenunciable para España. Nuestra
reclamación se refiere tanto al Peñón cedido por el Tratado de Utrecht como al
istmo, ocupado ilegalmente por el Reino Unido y cuya ocupación España nunca ha
reconocido.
Señor Presidente,
Las circunstancias de cada situación colonial han sido y continúan siendo distintas,
no existiendo una receta única para ponerlas fin. En el caso de Gibraltar se trata de
una colonia establecida en el territorio de otro Estado, por lo que al contrario de lo
que
sucede en la mayoría de los supuestos de Descolonización existe un conflicto de
soberanía entre dos Estados: el Reino Unido, como potencia colonial, y España al
estar establecida la colonia sobre territorio Español.
Sobre el contencioso de soberanía de Gibraltar existe desde hace tiempo una
doctrina clara, asentada e inequívoca basada en tres principios:
1. El Reino Unido debe poner fin a la presencia colonial en Gibraltar. La Resolución
2429 (XXIII) de 18.12.66. declaró que el mantenimiento de dicha situación era
contrario a la Carta e instó al Reino Unido a poner término a la misma.
2. La descolonización de Gibraltar debe realizarse siguiendo el principio de
integridad territorial y no el de autodeterminación.
- El párrafo sexto de la Resolución 1514 (XV) de 14.12.60 señala que “Todo intento
encaminado a quebrantar total o parcialmente la unidad nacional y la integridad
territorial de un país es incompatible con los propósitos y principios de la Carta de
las Naciones Unidas”. La mención a la integridad territorial es especialmente
relevante en los casos de Gibraltar o de las
Malvinas.
- Para la Resolución 2353 (XXII) de 19.12.67, la situación colonial de Gibraltar
destruye la unidad y la integridad territorial de España.
- En este mismo sentido también son de mencionar las Resoluciones 2625 (XXV) de
24.10.70 y 2429 (XXIII).
- De aquí que las Naciones Unidas condenaran sin paliativos el referéndum
organizado por la potencia administradora de la Colonia en 1967.
Así, el párrafo segundo de la citada Resolución 2353 (XXII) declara que la
celebración por la potencia administradora del referéndum de 10 de septiembre de
1967 contraviene las disposiciones de la Resolución 2231 (XXI) de la Asamblea
General y las de la Resolución aprobada el 1 de Septiembre de 1967 por el Comité
Especial de Descolonización.
3. La cuestión de Gibraltar debe ser resuelta mediante negociaciones entre España
y el Reino Unido, recomendadas por la ONU ininterrumpidamente desde 1964.Por
cierto que los gibraltareños han participado en el pasado en el proceso
bilateral,como parte de la delegaciòn britànica ,hasta que
decidieron
abandonarlo,automarginádose de esta manera.
A la luz de esta doctrina, la Asamblea General invita año tras año desde 1973 a los
gobiernos del Reino Unido y España a que celebren negociaciones bilaterales para
poner fin a esta situación colonial.Por cierto que los representantes de Gibraltar han
participado en el pasado en el proceso bilateral como oparte de la delegaciòn
británica hasta que decidieron abandonarlo,automarginandose de esta manera.
En este sentido, ambos países nos comprometimos, por la Declaración conjunta
firmada en Bruselas en 1984, a iniciar un proceso negociador acerca del futuro de
Gibraltar en el marco del cual serían tratadas las cuestiones de soberanía y
cooperación en beneficio mutuo. Lamentablemente el Proceso no ha ofrecido
resultados hasta la fecha, a pesar de la buena disposición y el Espíritu constructivo
que España ha demostrado en todo momento.
Señor Presidente,
El Gobierno de España sigue dispuesto a seguir trabajando con este Comité para
lograr el objetivo de conseguir un mundo libre de colonialismo. Esperamos y
confiamos asimismo que se dé cumplimiento a las resoluciones y decisiones de la
Asamblea General de esta Organización. Y. en el caso concreto de Gibraltar,
seguimos dispuestos a seguir haciendo del diálogo y la negociación con el Reino
Unido los medios para terminar con la situación colonial de Gibraltar, que rompe
la integridad territorial de España y su unidad nacional.
Muchas gracias.
Fuente: Misión de España en la ONU
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