Misa por los Abuelos

Misa por los Abuelos
Semana de la Familia
Viernes 11 de octubre de 2013
Motivación.
Queridos hermanos, con alegría nos reunimos en el día de hoy para dar gracias al Señor por
la vida de todos aquellos que han sido fundamento de las actuales generaciones, vale decir
nuestros abuelos que al entregarse por amor hicieron posible que hoy estemos reunidos en
torno a la Mesa del Altar.
Con espíritu agradecido queremos también recordar a quienes no están ya con
nosotros y sí en las manos de nuestro Dios a quien pedimos tenga misericordia de todos
ellos y les abra las puertas de su Reino. Que no tenga en cuenta sus faltas y pecados, sino el
amor que prodigaron en su paso por este mundo.
Queremos tener presente a tantos abuelos que hoy no son reconocidos por los suyo y
están abandonados y faltos de ese calor humano que la familia agradecida debe dar a
quienes les han precedido en esta vida. Hay tantos obligados a beber el cáliz del dolor al
encontrarse desvalidos, enfermos sin cuidados y faltos de ese amor humano que reconozca
su dignidad.
Pidamos a la Santísima Virgen sensibilice el corazón de tantos hijos que dejan de
lado a sus padres y no inculcan en sus propios hijos el respeto y consideración que merecen
los abuelos que son la raíz de su familia y un tesoro por la experiencia de vida que pueden
brindar a las generaciones más jóvenes.
Con un corazón arrepentido por lo que hemos dejado de hacer por nuestros abuelos,
agradecidos por el don de su vida y por la alegría que pueden compartir quienes los tienen
consigo, recibamos a quien preside esta celebración P. ……………………. Cantando
alegremente…………………………..
Saludo del Celebrante:
RITO DEL PERDÓN
Celebrante: Lo introduce
1. Tú que nos has amado hasta el extremo. Señor, ten piedad de nosotros.
2. Tú que has sido luz en nuestro caminar. Cristo, ten piedad de nosotros.
3. Tú que estás junto al Padre e intercedes por nosotros. Seño, ten piedad de nosotros.
Canto: De perdón
Oración colecta:
LITURGIA DE LA PALABRA
Animador: Abramos nuestro corazón y nuestra mente para escuchar al Señor que quiere
instruirnos a través de su Palabra.
En la primera lectura tomada del profeta Joel encontramos una invitación a la
penitencia y la oración porque nos hemos apartado de Dios y será Él quien en definitiva nos
juzgue. Debemos estar preparados.
Primera Lectura:
Jl 1, 13-15; 2, 1-2
Animador: Alabamos la Palabra de Dios respondiendo con el Salmo 9
Salmo 9, 2-3.6.16.8-9
Animador: En la segunda lectura tomada del Evangelio de San Lucas, vemos a quienes
rechazan el Reino acusando a Jesús de estar endemoniado. Pero Jesús no se deja intimidar y
responde diciendo: “El que no está conmigo, está contra mí; y el que no recoge conmigo,
desparrama.” Y advierte, a quienes le escuchan, del peligro que representa el alejarse del
demonio para luego dejarse estar, pues éste no descansa.
Canto: “Aleluya”
Evangelio:
Lc 11, 15-26
Homilía:
Oración universal:
Celebrante: La introduce
1.- Oremos por nuestra Iglesia, el Papa y los Pastores que tienen la misión de conducir al
pueblo de Dios, instruyéndole en lo tocante a la fe y enseñándole el comportamiento del
cristiano para realizar en el mundo el Plan Original de Dios para sus criaturas. Con María,
oremos al Señor.
R/ Escúchanos, Señor, te rogamos
2.- Oremos hermanos por nuestra Patria y quienes tienen la facultad de gobernar y legislar
conforme al dictamen constitucional. Que unos y otros tengan siempre presente el querer de
Dios para el hombre, paz, alegría, justicia, equidad y así construir una sociedad que vele
siempre por el Bien Común, respetando el matrimonio y la familia, instituciones divinas.
Con María, oremos al Señor.
R/ Escúchanos, Señor, te rogamos
3.- Oremos por todos los abuelos, los presentes y los que ya están con nosotros. Por los que
sufren abandono, falta de cuidado, no son respetados en su dignidad y están recluidos en
recintos que no les brindan lo que merecen en los últimos años de su vida. Que la presencia
del Señor los reconforte en su soledad y vierta en ellos el bálsamo de su amor.
Con María, oremos al Señor.
R/ Escúchanos, Señor, te rogamos
4.- Oremos también hermanos por lo abuelos jóvenes que no asumen su rol específico y se
dedican a criar nietos para sentirse útiles dejando de lado la riqueza de una vida que puede
orientar a las nuevas generaciones. Que al sentir el llamado del Señor respondan como
educadores de la fe en su propia familia y en la de aquellos con quienes se relacionan.
Con María, oremos al Señor.
R/ Escúchanos, Señor, te rogamos
5.- Oremos por las familias que cuentan con sus abuelos para que sepan valorarlos
aprendiendo de la sabiduría que los años transcurridos han depositado en ellos, de manera
que la nueva generación que surja del seno familiar se sustente en bases sólidas y no tenga
que estar sujeta a improvisaciones desperdiciando el don que Dios les brinda gratuitamente
Con María, oremos al Señor.
R/ Escúchanos, Señor, te rogamos
LITURGIA EUCARÍSTICA
Ofertorio:
Animador: Junto a las especies del Pan y el Vino, los abuelos presentes traen un cirio que
representa la vida de la gracia que ellos recibieron en su Bautismo y que está llamada a
iluminar la vida de todos cuantos compartan su vida. Cristo es la luz verdadera que rompe
las tinieblas y quienes han sido unidos a Él por el Bautismo son portadores de su luz
iluminando con su propia vida a sus descendientes y a todos cuantos han extraviado el
camino y se han alejado de Dios. Acompañamos este momento con el canto.
Santo: Cantamos
Consagración:
Padrenuestro:
Saludo de la Paz:
Cordero de Dios: Cantamos
Comunión:
Animador: Ha llegado el momento en que el Señor nos invita a recibirlo, como el Pan
Partido, el Pan de los hijos con que quiere alimentarnos y así seamos capaces de realizar en
nuestras vidas el Plan Original de Dios. Este es el Sacramento del Amor en el que el Señor
quiere vivamos como familia. Recibámoslo con fe. Cantamos:
Bendición Final:
Animador: Inclinamos nuestras cabezas para recibir la bendición de Dios.
Envío:
Animador: Agradecidos por este encuentro con el Señor, por el regalo de los abuelos y en
la esperanza que sean tratados conforme a su dignidad y la riqueza que en ellos el Buen Dios
nos ha brindado, nos despedimos cantando.
Canto Final: