Resignificando mi ser mujer madura y mi ser hombre maduro

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Ciclo de Conferencias y Talleres
Educar, Educándonos 2012
Resignificando mi ser mujer madura y mi ser hombre maduro
Por: Sofía Moreno
Apuntes de la conferencia “Resignificando mi ser mujer madura y mi ser hombre maduro” dictada por el Dr. Víctor Villa el
jueves 7 de junio en el marco del ciclo de conferencias Educar, Educándonos 2012.
Nunca es tarde, a cualquier edad, para iniciar un proceso de cambio de rumbo a nuestra vida. Darle un nuevo contexto,
una connotación positiva a lo que hasta hoy hemos vivido.
Si en este momento la vida te preguntara ¿Qué tanto eres lo que soñaste ser? Cómo te calificarías en la escala del 1 al
10… en dónde estás. Si la vida no ha sido lo que he querido hasta este momento, cómo me siento.
Aunque algunos piensen que su vida se está desmoronando en este momento, siempre hay maneras de darle ese giro
positivo a nuestra existencia. Siempre tenemos algo que aprender. La actitud que los seres humanos tenemos frente al
destino es lo que nos determina; porque primero es ser, después crecer y finalmente trascender.
Tres verdades:
La vida es sólo de paso. Todos nos vamos a ir algún día. Hoy tenemos que estar plenamente conscientes que tenemos
que aprovechar cada minuto porque la vida es de paso.
Nada es estacionario. Así que de mí depende qué voy a hacer; depende de mi acción, de cómo maneje mis temores y mi
ser.
Hay crisis evolutivas de la edad: de la adolescencia; entre los 30 y los 60 años; en la vejez y cada paso es doloroso. Cada
una nos debe enseñar que vamos caminando hacia el ser plenos.
En la edad adulta nos enfrentamos a innumerables pruebas que nos pondrá la vida y surgen preguntas fundamentales:
-Quiénes somos
-Para qué estoy aquí
-Hacia dónde voy
Todos somos dignos de ser amados. Nadie puede decirnos cuánto valemos, sólo nosotros sabemos lo mucho que
valemos; pero si nosotros no nos ponemos el valor que merecemos y reducimos nuestro valor, pues no esperemos que el
mundo nos valore. Para empezar a recibir en mi persona, primero tengo que aceptarme en mi belleza y la belleza está en
los ojos de quien mira.
Hay que empezar a reconocer aquello que hacemos y que no nos gusta para empezar a cambiarlo y por el contrario,
también reconocer lo que sí nos gusta y disfrutamos para mantenerlo en nuestra vida. El intelecto nos ayuda para actuar
en la resolución de los problemas; por ello las dificultades son benéficas para nosotros, porque hacen que activemos la
mente y la mantengamos activa. Es como cualquier músculo que necesita actividad física para evitar que se atrofie.
Es importante que nos mantengamos activos físicamente, que nos hagamos revisiones médicas periódicas. También es
muy importante desarrollar nuestra parte social porque las personas que no conviven socialmente es más fácil que
desarrollen un alzheimer. La amistad nos hace crecer como seres humanos. La parte espiritual también es fundamental,
saber que en cualquier momento nos podemos ir de esta vida y debemos estar en paz con nosotros mismos y con los que
nos rodean.
Tenemos que aprender a contactarnos con nosotros mismos y para ello necesitamos abrir el canal y permitirnos
escucharnos para conocer cuáles son nuestros verdaderos deseos. Es importante escucharnos para interesarnos más en
el ser que en el tener y el hacer al que nos empuja el consumismo.
Nuestra vida es como una carreta: la carreta es nuestro cuerpo; los caballos son nuestras emociones; el cochero es la
mente que con las correas van a controlar a los caballos, las emociones; el pasajero es el maestro interior que ahí va pero
nunca le hacemos caso; las maletas son el pasado y el camino, es la evolución. Los obstáculos que va encontrando la
carreta, son los problemas a los que las personas nos enfrentamos en el día a día, y eso es normal.
¿Cómo es tu carreta? ¿Cuántas maletas llevas cargando? ¿Crees que si te topaste con un obstáculo, ya serás un
fracasado el resto de tu vida? Cada carreta es diferente.
Tenemos que vivir en el presente, el pasado ha huido, el futuro está ausente y el presente es tuyo. Es lo único que
tenemos, el presente.
Los cinco pasos básicos para la reestructura son:
- Toma el control de tu existencia. Tengas la edad que tengas, ese control lo tienes tú.
- El arte de vivir. Lo tiene aquella persona que tiene contacto con su ser interior, ama la vida, tiene fuerza en sus
creencias religiosas, busca el arte, la naturaleza, tiene sentido del humor, alegría. El día en que aprendemos a valorar las
pequeñas cosas de la vida, estamos aprendiendo a amar la vida.
- Cuáles son mis herramientas. Puedo conectar con mi interior y así detectar mis necesidades. Qué quiere mi cuerpo; qué
me alegra, qué me pone triste; en qué circunstancias me cuesta trabajo adaptarme. Es comunicación y diálogo contigo y
también con los demás. Convivencia y buenas relaciones. Si mi salud mental y física no está bien, tengo que trabajar en
ello. Volvernos seres maduros, que podemos enfrentar cualquier problema con entereza.
- Nuevos ojos hacia nuestra vida. Descubrir todo lo magnífico que hay a nuestro alrededor. También descubrir cómo
pensamos, cuáles son mis paradigmas o formas de pensar. Analizar si son correctos pero si hay algo que no funciona
buscar nuevos caminos, nuevos proyectos, nuevas estructuras.
- Nuevas estrategias. Los sueños, la motivación, las ganas de cambiar son estrategias; tengo que vislumbrarme hacia
dónde y cómo voy. Tengo que saber qué camino voy a seguir, tomando en cuenta aspectos importantes como la
economía, el ejercicio físico y mental. Hay que detenernos a vigilar lo que pensamos, somos lo que pensamos; identificar
nuestros miedos, porque el miedo es el recuerdo del dolor proyectado hacia el futuro. El miedo se desbarata
incrementando la Fé.
Hay que trabajar las cuatro áreas para resignificarme: en mis capacidades, en mi inteligencia, en mis sentimientos y en mi
interior. Necesito creer en mí, saber de qué soy capaz, conocer mis cualidades y defectos; tener una actitud positiva,
amarme, saber hacia dónde voy. Darme el derecho de ser como soy, olvidarme de lo que los demás piensan de mí.
Esto nos lleva a un proyecto de vida. Esto es trazar un camino en pos de la trascendencia y se va forjando escuchando a
nuestra voz interior, respetando mis decisiones y no voltear a ver a los demás. Cada persona tiene un trabajo individual y
herramientas diferentes. Hay que mantener y aceptar nuestras responsabilidades.
Trascender es crear un camino para que otros lo sigan. Resignificar implica que tengo que aprender a servir a través del
amor.
Bibliografía sugerida por el Dr. Víctor Villa sobre el tema:
“Crea tu nueva vida”
Claudia Rainville
Editorial Sirio, 2011
“El poder del ahora”
Eckhart Tolle
Editorial Norma, 2008
“La vida, el tiempo y la muerte”
Fanny Blanck
Editorial La Ciencia, 1995
“Pensamientos para vencer el miedo”
Lilia Reyes Spindola
Editorial Grijalbo, 2010
“Cómo crecer cuando ya has crecido”
Nancy O´Connor
Editorial Sirio, 2010
“El hombre en busca de sentido”
Victor Frankl
Editorial Herder, 2004
“Un sueño posible”
Walter Dressel
Editorial Norma, 2008
“El camino de los sabios”
Walter Riso
Editorial Norma, 2008
Si te interesan estos temas, te invitamos a visitar www.educareducandonos.com para que conozcas el
calendario 2012 de las conferencias de Educar, Educándonos.
Ponemos a tu disposición el material grabado de conferencias anteriores. Están disponibles a la venta en el
área de ingreso al Auditorio el día de la conferencia. En otro día y horario, estamos a tus órdenes en el 3669
3434 extensiones 3703 y 3757. O en el correo [email protected]
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