Equidad de género378.03 KB

Anuncio
Equidad social, de género y generacional
Rubén Reyes Jirón
La equidad entre hombres y mujeres
El sistema patriarcal/machista que domina la sociedad nicaragüense, nos
coloca a lo hombres en un lugar de privilegio. Para mencionar dos ejemplos:
mientras a las mujeres se les plantea que tienen que ganarse su derecho a
participar en espacios de participación pública y política, no se plantea lo
mismo para los hombres, se supone que nos merecemos esos espacios sólo
por el hecho de ser hombres.
Otro ejemplo inevitable es que los hombres no nos preocupamos mucho de
cómo tener que organizar la vida familiar para poder participar en reuniones
y otras actividades. Quizá para venir a esta misma sesión, si hay mujeres
con hijos pequeños aquí, tuvieron que asegurar que alguien les diera de
cenar y les alistara para asistir a la escuela el día de mañana. Esta es una
preocupación menos común en los hombres porque se supone que el cuido de
los niños y niñas, es responsabilidad principalmente de las mujeres.
Algunos hombres son defensores militantes de los privilegios que nos otorga
el machismo. Pero ningún hombre que crea de corazón en la igualdad de
derechos puede defender tales privilegios porque no puede haber igualdad
donde unos somos “más iguales que otros” para usar una frase de Orwell.
El más importante desafío que la propuesta de igualdad representa para los
hombres es, entonces, el tener que renunciar a todos los privilegios que nos
otorga el machismo. Este es un gran desafío porque ya sabemos que quien
está en el poder no quiere renunciar voluntariamente a sus privilegios. Pero
si realmente queremos ser coherentes y consecuentes con los grandes
ideales que promulgamos, tales como la igualdad, la democracia y la justicia,
ninguno de ellos es posible sin la plena igualdad de derechos y oportunidades
entre hombres y mujeres.
Pero, además, yo creo que no es un asunto solamente de coherencia ética y
política, sino que renunciar a los privilegios del machismo nos conviene
también a los hombres.
1
Nos conviene porque el sistema machista no sólo genera privilegios sino
también costos para los hombres. Esto es lo que algunos llaman las
experiencias contradictorias del poder en los hombres.
Por ejemplo, el privilegio de asumir que somos líderes por ser hombres,
puede a su vez representar una gran responsabilidad. La responsabilidad de
tener que dirigir a otros, cuando puede haber situaciones en las que
nosotros mismos no sabemos qué hacer.
El privilegio de no hacer trabajo doméstico tiene el costo de que nos hace
dependientes de las mujeres porque no aprendemos a cuidar de nosotros
mismos. Por ejemplo, hay hombres que comen mal o prefieren no comer si no
hay mujeres a su alrededor que les cocinen.
El privilegio de no asumir la crianza y el cuido de hijos e hijas tiene el costo
de que, entonces, no aprendemos a cuidar de otros y no desarrollamos la
capacidad de cuidar, esto dificulta que podamos ser padres o adultos
responsables. Y ahora sabemos que la capacidad de cuido no solamente es
importante para nuestra vida privada sino también para el ejercicio del
liderazgo, pues qué es un o una líder sino alguien que tiene que cuidar de
otros. ¿Qué es la política sino el cuido del bien común?.
El privilegio de asumir que como hombres somos los proveedores únicos
puede ser una gran carga en tiempos de desempleo y de bajos salarios.
El privilegio de asumirnos valientes por ser hombres nos puede llevar a
poner nuestra vida en riesgo con más frecuencia e intensidad de lo
necesario.
El asumir que por ser hombres somos seres racionales con frecuencia nos
hace reprimir y negar ciertas emociones como el miedo, la tristeza, el dolor,
la ternura, etc. Hay estudios que vinculan esta dificultad de los hombres de
expresar sus emociones con el hecho de que el infarto como causa de
muerte es más común en los hombres que en las mujeres.
Y así podríamos seguir identificando los costos relacionados con los
privilegios derivados del machismo, el punto es que, entonces, el renunciar a
estos privilegios nos permitiría deshacernos también de estos costos.
Otra razón fundamental de por qué a los hombres nos conviene deshacernos
del machismo y construir relaciones de igualdad es porque el sistema
2
patriarcal/machista y capitalista no sólo se constituye en la jerarquización
de las relaciones entre hombres y mujeres, sino que jerarquiza también las
relaciones entre unos hombres y otros. Es decir que hay unos hombres más
privilegiados que otros. Hay un tipo de hombre que es colocado en la punta
de la pirámide: el hombre blanco o mestizo, adulto, profesional, clase mediaalta, urbano, heterosexual, sin discapacidad.
Al tratarse de un sistema piramidal, todos aquellos hombres que no reúnan
este conjunto de características, estarán excluidos de ciertos niveles de
poder. Quedarían excluidos, entonces: los hombres jóvenes, los hombres
iletrados o que tienen una baja escolaridad, los hombres pobres y en
extrema pobreza, los hombres indígenas y afro-descendientes, los hombres
rurales, los hombres con discapacidades, los hombres homosexuales, los
bisexuales, los trans y aquellos que se niegan a definir su sexualidad.
Pero, además, este sistema patriarcal y machista coloca un tipo de
masculinidad en la cumbre de la pirámide. Se coloca en la cumbre al hombre
que es: líder, héroe, proveedor, autosuficiente, autónomo, autor, actor
principal, racional, estratega, competitivo y, otra vez, heterosexual. Razón
por la cual se plantea que hay unos más hombres que otros.
Quedarían excluidos, entonces, todos aquellos que no cumplen con el
estereotipo de masculinidad dominante:
 Los que hacen trabajos tradicionalmente considerados femeninos: los
amos de casa, los cocineros, los bailarines, los enfermeros, los
maestros, etc.
 Los desempleados y los que trabajan en el sector informal
 Los afeminados, los homosexuales, los bisexuales, los trans
 Los tímidos, los no agresivos ni violentos
 Los hombres más bien sensibles y emocionales
 Los que tienen una sensibilidad más artística que práctica
 Los que se dejan liderar por mujeres y apoyan su liderazgo
En fin, habemos una gran cantidad de hombres que no calzamos en el
estereotipo de masculinidad dominante que promueve el machismo y por lo
tanto somos también excluidos en distintos niveles de los espacios de poder
y toma de decisiones.
A todos estos hombres nos conviene lograr una mayor igualdad entre
hombres y mujeres porque esto nos facilitaría el apostar también por una
mayor igualdad entre hombres. Es decir, que la apuesta sería no solamente
3
lograr una mayor igualdad de derechos y oportunidades entre hombres y
mujeres, sino una mayor igualdad entre todas las personas
independientemente de que ellas se definan o no como hombres o como
mujeres. Se trata entonces de una radicalización de la democracia, de
apostar a la igualdad entre personas de diversos sexos, géneros, etnias,
clases sociales, edades, condiciones físicas y de salud, etc.
Renunciar a los privilegios del machismo y replantearnos el ser hombres en
la construcción de igualdad de derechos con las mujeres entre personas
diversas en general es un gran desafío ¿Estamos los hombres dispuestos a
asumirlo? Si lo asumimos sin duda hay cosas que vamos a perder, pero
también hay muchas cosas que vamos a ganar.
4
Búsqueda y promoción
de la equidad
En nuestra sociedad persiste la INEQUIDAD
¿Qué es la EQUIDAD?
• Supone dar a cada quien lo que se merece según sus
méritos y condiciones, tomando en cuenta sus
necesidades y posibilidades
• Supone darle más al que está en situación de
desventaja, para que pueda igualar al que tiene
mayores oportunidades.
Supone compensar
• En Nicaragua, ¿quiénes están en situación de desventaja?
Pirámide social
Cúspide: HOMBRE
 Adulto (ni joven ni viejo)
 Blanco (ni negro ni indígena)
 Urbano (no rural, ni campesino)
 Rico (no pobre)
 Educado (alto nivel educativo)
 Sin discapacidad aparente
 Heterosexual (al menos en apariencia)
En el sitio más bajo de la pirámide
están otros hombres
SER HOMBRE PERO NO SER:
 Niño, joven o viejo
 Indígena o negro
 Campesino
 Pobre
 Analfabeta o con bajo nivel educativo
 Discapacitado
 Homosexual, bisexual o transexual
EN LA CUSPIDE SOCIAL DE
NICARAGUA SE ENCUENTRAN
LOS HOMBRES, PERO NO TODOS.
y las mujeres
MAYOR EXCLUSIÓN E
INEQUIDAD:
MUJER niña-adolescentejoven-vieja,
negra,indígena,campesina,
pobre, analfabeta,
discapacitada,
bisexual,
lesbiana o trans-sexual.
En el partido, la equidad de género se
manifiesta, entre otras cosas, por la
representatividad.
Participación de mujeres en la
JUNTA DIRECTIVA NACIONAL
DIRECTIVA NACIONAL
40%
MUJERES
HOMBRES
60%
Participación de Mujeres en las
JUNTAS DIRECTIVAS DEPARTAMENTALES
PRESIDENTES JD DEPARTAMENTALES (7)
12%
MUJERES PRESIDENTAS
JD DEPT
HOMBRES PRESIDENTES
JD DEPT
88%
Participación de Mujeres en las
JUNTAS DIRECTIVAS MUNICIPALES
Descargar