Nueve muertos en una explosión

24 POLICIALES
La Plata, sábado 12 de diciembre de 1998
TRAGEDIA EN UN GASODUCTO EN SALTA
Nueve muertos en una explosión
Iban en una Trafic para ver si existía una fuga de gas. Un operario sufrió graves quemaduras y otro todavía está desaparecido
ver si existía una fuga. Ahora investigan si existió una negligencia de
alguno de los trabajadores, o si el
estallido se originó en una falla del
sistema.
A la explosión siguió un incendio de pastizales que, sin embargo,
fue rápidamente controlado por
varias dotaciones de bomberos de
Algunos de ellos se encontraban
semienterrados entre los pastizales.
El único trabajador que sobrevivió, Ramón Enrique Dorado, se
encontraba a unos 100 metros de
sus compañeros, pero también fue
afectado por las llamas. En el hospital San Bernardo de la capital
salteña, donde Dorado permanece
Investigan si la tragedia se desencadenó por una negligencia de
un operario o por una falla en el sistema del gasoducto.
El incendio se propagó unos 150 metros, arrasando con todo lo
que encontró en su camino
General Güemes, que arribaron al
lugar. La camioneta Trafic en la que
circulaban los diez operarios, a
unos 50 metros de las instalaciones,
explotó y quedó envuelta en llamas
en cuestión segundos, al ser alcanzada por la onda expansiva.
Los investigadores estiman que
los cuerpos de los hombres salieron
despedidos del vehículo, debido a la
ubicación en que fueron hallados.
internado, precisaron que su estado
de salud es delicado debido a que
presenta quemaduras de tercer
grado en el 40 por ciento de su
cuerpo.
Peritos forenses intentaban
anoche establecer las identidades de
las víctimas fatales, aunque la tarea
se tornaba dificultosa a raíz de que
los cadáveres estaban totalmente
calcinados. La policía indicó que los
operarios serían residentes de la
localidad jujeña de San Pedro y que
prestaban habitualmente servicios
en la planta de bombeo de
Miraflores.
La potencia del estallido
provocó el desplazamiento involuntario y temblores a numerosos
automóviles que circulaban a esa
hora por la carretera 34, y
señalaron que el ruido de la
explosión fue escuchado a varios
kilómetros a la redonda.
Después de la deflagración, los
pocos árboles que hay en la zona
quedaron con sus copas y troncos
cubiertos de cenizas.
Peritos especializados en este
tipo de episodios, personal de la
brigada de Investigaciones, de la
comisaría de General Güemes y de
Campo Santo trabajan junto al juez
de instrucción, Roberto Sosa
Vallejos. El gerente general de
Transportadora de Gas del Norte
S.A. se trasladó también a la zona
para interiorizarse sobre los motivos
de la tragedia.
La explosión
más grave
n La explosión ocurrida ayer en
la provincia de Salta es la más
grave registrada en un gasoducto en los últimos años,
debido a la cantidad de víctimas y a la extensión que
alcanzó.
agosto de 1998
DYN
Nueve operarios murieron al
explotar e incendiarse un gasoducto como consecuencia de una pérdida de gas, en el departamento de
General Güemes, a 54 kilómetros al
sur de la capital salteña. Otro trabajador sufrió gravísimas quemaduras
y otro permanece desaparecido.
La empresa Transportadora de
Gas del Norte, adjudicataria del
gasoducto que provee el fluido
entre Campo Durán -a 300 kilómetros al norte de la capital salteña- y
Buenos Aires, dispuso la interrupción del servicio para evitar nuevas
explosiones. Peritos especializados
trabajaban anoche para determinar
si podría existir alguna otra pérdida
en los otros dos ductos, de mayores
dimensiones, que se encuentran en
la zona.
El accidente se produjo ayer
poco antes de las 11, a la altura del
paraje Las Mesitas, en General
Güemes, a unos 70 metros del
kilómetro 1.538 de la ruta nacional
34, y en una zona totalmente
deshabitada. Los operarios iban a
Un cráter de
diez metros
En el lugar de la explosión el
brazo conductor corre paralelo a
las vías del ferrocarril Belgrano
Norte y a la vera de la ruta
nacional 34.
El estallido produjo un cráter
de diez metros de diámetro,
donde quedaron sepultados dos
de los muertos, y un incendio
que se propagó 150 metros a la
redonda, afectando durmientes
del ferrocarril y a la banquina de
la ruta nacional 34, que en ese
tramo dista unos 75 metros del
lugar de la explosión.
El ducto es uno de los que
transporta el fluido al sur del
país, pero el suministro hacia esa
zona no se vio afectado debido a
que continuaron operando normalmente otros dos caños paralelos.
La arteria afectada es de 16
pulgadas, junto a la cual corre
un caño de similares características de 24 pulgadas y un poliducto de la empresa Refinol.
1992
n Explotó una instalación de
transporte de gas, ubicada en
la localidad bonaerense de
Sarandí, y si bien no se registraron víctimas, los bomberos
debieron trabajar varios días
para sofocar las llamas, que
alcanzaron los 10 metros de
altura.
1992
n Los bomberos debieron evacuar la localidad bonaerense
de Parque Barón, partido de
Lomas de Zamora, a raíz de
las emanaciones de gases tóxicos que provenían de un
gasoducto que pasa por la
zona. El temor de los vecinos
ante una eventual explosión,
hizo tomar medidas preventivas.
1987
Arboles chamuscados, un cráter de diez metros y el esqueleto de una Trafic, al lado de la ruta 34
Grupos ecologistas habían advertido las malas condiciones de seguridad
La diputada provincial por el
Movimiento Popular Jujeño,
Bárbara Andreussi, responsabilizó
directamente al Ente Nacional de
Regulación del Gas (ENARGAS)
por la explosión del gasoducto que
causó nueve muertes en el paraje
Las Mesitas, del departamento
salteño de General Güemes.
La legisladora denunció -al
igual que lo había hecho la entidad
ecologista Greenpeace- que el ente
regulador “jamás contestó las notas
de advertencia sobre las malas
n Estalló un tramo del gasoducto Neuba I, que transportaba fluido desde la
provincia de Neuquén hasta
Bahía Blanca, situado en la
localidad bonaerense de
Algarrobo, a 65 kilómetros al
suroeste de Bahía Blanca. Si
bien no se registraron víctimas, el siniestro ocasionó un
boquete de 10 metros de
largo, por 5 de ancho y 3 de
profundidad y arrojó gran
cantidad de tierra y piedras a
la ruta, que debió cerrarse
preventivamente.
condiciones de seguridad que
implicaba la construcción de los
gasoductos Norandino-TGN y
Atacama”. Acusó también a los
gobiernos de las provincias por
donde pasa el trazado del gasoducto de haber dado conformidad a la
ejecución de la obra y hacer “oídos
sordos a los constantes pedidos de
audiencia pública que debían convocar junto al ENARGAS”.
“Las obras no tenían las condiciones mínimas para ser realizadas,
ya que pasan por zonas sísmicas y, a
lo largo del trazado, carecen de los
detectores sísmicos que las normas
de prevención establecen”, enfatizó
la diputada, al insistir en que desde
marzo último se le envían, sin
éxito, notas al ENARGAS. Señaló, a
modo de ejemplo, que durante la
construcción del gasoducto
Atacama “no se tuvo en cuenta que
pasaba por un río aluvional que en
verano crece desproporcionadamente”.
La diputada advirtió que “estas
no son las únicas salvedades que se
hicieron. Las empresas se llevan
todo el gas para Chile, mientras la
mayoría de la gente donde pasa el
gasoducto no tiene acceso al gas”.
Tras sostener que “lo que
hicieron fue un desastre”,
Andreussi detalló que “no denunciaron los sitios arqueológicos
que encontraron, no le pagaron a
las comunidades aborígenes por
pasar por sus tierras, y tampoco
tuvieron en cuenta los destrozos
ambientales y ecológicos que
podían causar”.
n Estalló otro tramo del gasoducto Neuba I, en la provincia de Neuquén. El estallido
causó grandes daños materiales y desató una tragedia: a
raíz del siniestro murieron
tres personas y otras diez
resultaron con graves heridas.
1986
n En la provincia de Tucumán
debieron evacuarse las localidades de Benjamín Paz,
Unquillo,
Choromoro,
Simbolar y San Isidro, a raíz
de emanaciones gaseosas que
obligaron a las autoridades a
prohibir el encendido de
fuego por varios días, ante el
peligro de una inminente
explosión.
POLICIALES
La Plata, sábado 12 de diciembre de 1998
25
TABLADO PIDIO PERDON
“Sé que siento un dolor muy grande”
La fiscalía solicitó la prisión
perpetua de Fabián Tablado por el
delito de homicidio agravado con
ensañamiento y alevosía en perjuicio de su novia, Carolina Aló, a
quien hace dos años y medio le
aplicó 113 puñaladas.
El arrepentido
“Sé que siento un dolor muy
grande, no sólo por mí sino por mi
familia y la familia de Carolina”,
expresó Tablado. Con palabras
entrecortadas, el joven -de 21
años- hizo uso de su última oportunidad de defensa y, al concedérsele la palabra, se aproximó
al micrófono y expresó: “Sólo
quiero repetir que tengo un gran
dolor y que se me hace muy difícil
expresar mis sentimientos”.
Pidió disculpas por el homicidio, ocurrido el 27 de mayo de
1996 en el garage de su casa, en el
partido de Tigre, al norte del Gran
Buenos Aires, donde fue hallado el
cadáver de su novia de 17 años.
La situación de Tablado será
definida el lunes a las 14 por el
tribunal que lo juzga en San
Isidro, cuando se dará a conocer el
veredicto y la eventual condena
que se le imponga.
Sin mostrarse nervioso y vestido con un impecable traje gris, el
confeso asesino manifestó que
durante la etapa del juicio oral
-por el que desfilaron alrededor de
40 testigos- revivió “esos momentos”.
Al hacer uso de la palabra, el
joven no hizo mención a su participación en el crimen y en cambio
se refugió en su actual apego a la
religión evangelista, que comenzó
a profesar desde que quedó
detenido en la unidad penal 9 de
La Plata.
Acusación y gritos
La tercera jornada del juicio se
inició con la declaración de los dos
últimos testigos -sendos médicos
que avalaron la hipótesis de “inimputabilidad- y continuó con los
alegatos.
El primero en hacer uso de la
palabra fue el fiscal Julio Novo,
quien al efectuar el pedido de
prisión perpetua en base a la exis-
tencia de un homicidio calificado
agravado con alevosía y
ensañamiento, sostuvo que
“Tablado sabía lo que estaba
haciendo”.
Novo se basó en el relato de
Omar Vallejos, uno de los amigos
de Tablado, quien declaró en el
juicio que el acusado le había
avisado, días antes del crimen, que
iba a matar a su novia.
El representante del Ministerio
Público expresó que a Tablado “se
le practicaron varios estudios, resonancias magnéticas, y tuvo
audiencias con distintos peritos, y
todos indicaron que era normal”.
En ese momento el padre del
acusado, que seguía la audiencia
desde la primera fila, se levantó de
su silla y gritó que la argumentación del fiscal era “mentira”,
por lo que el presidente del tribunal, Fernando Mancini, tuvo
que hacerlo callar.
Como era de esperar, la querella, asumida por el abogado
Roberto Damboriana, también
pidió la prisión perpetua para
Tablado bajo los mismos cargos, al
considerar que hubo ensañamiento porque el joven no sólo tenía
intención de matar a Aló, sino
también la de “infligirle castigo”.
Damboriana adelantó además
que el lunes solicitará el procesamiento por falso testimonio de
cuatro compañeros de Tablado
-Carolina Cordero Arce, Daniel
Alberto Manonellas, José Follini y
Gastón Bialliaf- y del psiquiatra
Yako Román Adissi.
Personalidad enferma
La defensa, tal como se preveía,
solicitó que se considere el estado
de inimputabilidad del acusado,
aunque -quizás previendo que esto
no ocurra- pidió calificar el caso
como un homicidio cometido en
estado de emoción violenta o, en
su defecto, como un homicidio
simple.
Durante su alegato, uno de
los abogados defensores, Omar
Breglia Arias, argumentó el pedido de inimputabilidad de su
defendido, al sostener que
Tablado tiene “una personalidad
enferma”.
DYN
El asesino recordó a su familia y a la de su novia. El fiscal pidió perpetua; la defensa que lo declaren loco y lo internen
Fabián Tablado sube a un patrullero. Le pidió perdón a los padres de Carolina Aló
El homicida, horrorizado ante las fotos
“Cuando vi las fotos me horroricé”, confesó compungido Fabián
Tablado, al relatar que en un descuido de sus defensores revisó el
expediente en el que constan las fotografías de Carolina Aló.
El confeso homicida le pidió perdón a su familia y a la de Carolina
“por todo lo que les hice vivir”. Aclaró que “contra lo que se está
diciendo, a mí me afecta todo esto. Sé lo que está pasando, lo comprendo, y me causa un dolor tremendo. Lo que pasa es que se me hace
muy difícil hablar, expresar lo que siento, tal vez por eso se pensó que
no me importaba nada”, se justificó Tablado.
Finalmente, expresó que estaba muy afectado porque al escuchar
las instancias del juicio comenzó “a recordar cosas de las que me
había alejado desde que entré al Evangelio y comencé a hacer trabajos
en la Unidad Penitenciaria”.
“De no ser así debe considerarse una emoción violenta, porque el sujeto actuó ante una reacción y, en el último de los casos
que sean rechazadas las dos posibilidades anteriores, pedimos que
se trate de un homicidio simple,
porque no cabe duda de que no
hubo ensañamiento”, expresó
Breglia Arias.
En coincidencia con el codefensor, el abogado Adrián Tenca dijo
estar “convencido de la inimputabilidad de Tablado”, aunque
agregó: “Con esto no buscamos
que sea dejado en libertad; lo
que queremos es que Tablado sea
curado”.
“Sabemos que Tablado cometió
un aberrante hecho y si requiere
tratamiento psiquiátrico no se le
puede negar ese derecho”, dijo
Tenca, quien anticipó que en caso
de que el fallo sea adverso, los
defensores recurrirán a la Suprema
Corte de Justicia de la provincia de
Buenos Aires y al Tribunal de
Casación provincial.
Piden que lo trasladen desde la Unidad 9 a Romero
“Ante la duda sobre si Fabián
Tablado es un enfermo mental o no,
lo más justo es su derivación a un
neuropsiquiátrico”, dijo al tribunal
el codefensor Adrián Tenca.
El abogado del confeso asesino
afirmó que estaba convencido de
que su defendido es “un loco peligroso que debe estar alojado en el
Melchor Romero y no en la cárcel de
La Plata”, donde está detenido desde
que cometió el crimen.
“Si hay dudas sobre si realmente
es un `borderline` (fronterizo), lo
mejor es que lo internen, porque de
ser así en una cárcel no recibiría un
tratamiento que lo podría recupe-
rar”, precisó el letrado.
La Sala III decidirá entre si considera o no inimputable a Tablado, y
si aceptase que padece alguna
alteración mental deberá ordenar su
internación en algún neuropsiquiátrico.
Misticismo
“En la cárcel hablé con
Jesucristo y me dijo que me perdonó”, aseguró Fabián Tablado a
uno de los peritos psiquiátricos que
lo analizó en el marco de la investigación.
Desde que fue alojado en la
Unidad 9 de La Plata, Tablado se
convirtió al Evangelismo y trabaja
en el pabellón denominado en la
jerga carcelaria como “Los
Hermanitos”, convenciendo a los
otros presos.
Entre los detenidos con los que
pasa las horas orando se cuentan los
cuatro miembros de la denominada
Banda de Los Hornos (Sergio
Gustavo González, José Luis Auge,
Héctor Miguel Retana y Horacio
Anselmo Braga), acusada de asesinar
a José Luis Cabezas, junto al ex oficial Gustavo Prellezo.
“Está por encima del bien y del
mal, ya que se convirtió al evangelismo, es diácono del pastor de esa
prisión y realiza una profunda
incursión en la religión tratando de
cumplir con su misión evangelizadora con sus compañeros
detenidos”, dijo su defensor, Omar
Breglia Arias.
Para los científicos de la Suprema
Corte de Justicia bonaerense, “sobre
estas supuestas alucinaciones
visuales y auditivas místicas
podemos valorar que las mismas
carecen de sustento para ser consideradas como una alteración psicopatológica, pudiendo ser interpretadas únicamente desde la óptica
científica como la necesidad de convencer a terceros”.
Tensión
en la sala
El especialsita en neuropatología psiquiátrica, Juan
Carlos Goldar, provocó un
momento de tensión cuando le confirmó al fiscal Julio
Novo que Fabián Tablado
era capaz de atacarlo
mortalmente durante la
audiencia.
El perito convocado por la
defensa del asesino acababa
de explicar que por una
afección que sufría en la
parte inferior del cerebro,
Tablado podría reaccionar
violentamente si era acosado psíquicamente, cuando
el fiscal intentó poner un
ejemplo.
“Si cuando declare yo lo
interrogo provocándole
estrés,¿es capaz de clavarme
el micrófono 113 en el
corazón?, preguntó Novo
esperando una respuesta
negativa que desmorone los
fundamentos defensistas de
inimputabilidad.
“Y...puede que sí”,
respondió lacónicamente el
especialista en estudio de
cerebros de peligrosos
criminales.
“Entonces estamos corriendo un riesgo”, atinó a
ensayar como respuesta el
fiscal que, mirando al
público, no salía de su
asombro.
La defensa trató de
demostrar que un accidente
que sufrió Tablado con su
moto durante su adolescencia le dejó secuelas de
carácter irreversibles, al golpear su cabeza contra el
pavimento.