Música en Internet - Procuraduría Federal del Consumidor

Música en Internet
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“En verdad, si no fuera por la música, habría más razones para volverse loco” dijo
Tchaikovsky. Tal vez para algunos suene un poco radical este pensamiento, sin
embargo para otros escuchar música más que un placer es una necesidad.
De acuerdo con la Real Academia de la Lengua Española música es la combinación
de melodía, ritmo y armonía. En conjunto, estos elementos generan sentimientos
distintos, desde alegría hasta tristeza.
Considerada como un arte, la música se encuentra presente en muchos momentos de
la vida; no hay día en que no escuchemos música, ya sea en casa, un centro
comercial, la calle, la escuela, el trabajo o en el transporte. Estemos donde estemos, la
música se hace presente a través de diferentes estilos, ritmos y medios.
El reproductor de discos compactos o walkman para llevar y escuchar música poco a
poco se han reemplazado por el formato digital a través de dispositivos portátiles que
proporciona mayor disponibilidad de música en muy poco espacio.
El digital no es más que un formato de audio comprimido para música y voz con una
calidad muy semejante a la que se alcanza en las pistas incluidas en los CD’s cuyas
pistas tienen formato Windows Media Audio (WMA) de Microsoft, que comprime en
90% el tamaño de un WMA (una reducción de entre 10 y 12 veces el nivel de
almacenamiento). Cabe señalar que algunos sitios de Internet de música ofrecen
descargas musicales en MP3, WMA o ambos.
El MP3 (MPGE-1 Audio Layer 3) es considerado el estándar en formatos digitales y
fue desarrollado en 1987 por Karlheinz Brandenburg, director de tecnologías de
medios electrónicos del Instituto Fraunhofer IIS, red de centros de investigaciones de
Alemania.
Al comprimir la música se eliminan ciertas frecuencias imperceptibles para el oído
humano, por lo que el sonido es de muy buena calidad. Este tipo de formato se puede
almacenar y reproducir en una computadora (con un software apropiado para que
pueda reproducir la música), un dispositivo portátil, un celular o bien en un estereo
tradicional.
Interesante ¿verdad? Todo este desarrollo de la música digital ha convertido a Internet
en el mayor proveedor y distribuidor de música digital, debido a que por este medio se
pueden enviar o recibir archivos de música MP3 sin ningún problema.
Internet brinda la posibilidad de tener a tan sólo un clic la oportunidad de contar con un
catálogo extenso de música, ya sea a través de tiendas online (como Taraba y Beon
en México, iTunes,etc.); tecnología streaming que permite escuchar un archivo sin
necesidad de descargarlo en la computadora; programas con redes de usuarios peer
to peer ó P2P (como Kazaa, Limewire, etc.) y sitios web tipo wiki (que pueden ser
editados por varios usuarios).
“Las ventajas de la música digital es su simple adquisición, es decir, sin soporte físico
y sin salir de casa. Sin embargo, la calidad es menor y no es comparable con la que
ofrecen los discos compactos normales.” opinó para Brújula de compra el C. P.
Fernando Hernández, Director General de la Asociación Mexicana de Productores de
Fonogramas (Amprofon).
De acuerdo con la encuesta sobre Hábitos de los Usuarios de Internet en México de
2006, de la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI), la descarga de música es la
principal actividad realizada por los usuarios al conectarse a Internet, como puede
observarse en el siguiente gráfico.
La forma de escuchar música está cambiando
Y basta echar una mirada a las estadísticas para confirmarlo. De acuerdo con la
Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI), organización que
representa a la industria discográfica mundial con más de 1,400 miembros en más de
70 países, en su Reporte de música digital de 2007 revela que:
1. Las ventas de música digital casi duplicaron su participación en el total de
música comercializada (de todos los formatos) a escala mundial, al pasar de
5.5% en 2005 a 10% en 2006 y lograron alcanzar los 2 millones de dólares.
Para 2010 esperan que un cuarto del total de la música vendida en el mundo
sea digital.
2. En 2006 las descargas de música en Internet totalizaron 794 millones, 89% por
arriba de las registradas en 2005.
3. El número de canciones disponibles en Internet se ha duplicado por arriba de
los cuatro millones.
4. Mientras que en 40 países existen 498 tiendas de música en línea legítimas, en
México operan Beon y Tarabu.
5. Las ventas de dispositivos portátiles de música digital totalizaron cerca de 120
millones en 2006. Las personas que cuentan con este tipo de dispositivos
portátiles de música (como el Ipod) son más dadas a comprar música
legalmente que el resto de los usuarios de Internet.
En México, de acuerdo con estadísticas de Amprofon, en el primer trimestre de 2007 el
total de ventas digitales alcanzó más de seis millones de descargas de música digital
(con un valor de ventas de 66 millones de pesos), superando en cinco veces el
volumen registrado en el mismo periodo de 2006.
El peer to peer (P2P)
Sin duda lo que no cuesta en muchas ocasiones es lo más atractivo como la música
que se puede bajar a través de las redes de usuarios peer to peer (P2P), expresión
inglesa que se podría traducir como canal punto a punto o canal entre iguales. Este
sistema permite que los usuarios intercambien música entre sí de manera gratuita.
Según Amprofon cada sistema de intercambio P2P es distinto, aunque la forma en la
que actúan los usuarios es similar. Los usuarios descargan un software P2P a su
computadora, el cual crea un archivo que lo hace accesible a otros usuarios para
intercambiar fotos, videos, música y juegos.
Sin embargo, este tipo de programas intercambian, sin autorización, música grabada
para almacenarla o bajarla a un disco, lo que constituye una nueva forma de piratería
aseguró el representante de Amprofon.
El C.P. Hernández puntualizó que 99.9% de la música digital que se descarga en
México es ilegal. Los resultados de un estudio realizado por Amprofon en 2006 indican
que se descargaron más de 1,700 millones de archivos digitales en forma ilegal en
México, mientras que las ventas de sitios legales fueron mínimas.
El representante de Amprofon, con base en el estudio Ipsos-BIMSA de 2005, comentó
que “lo más perjudicial para la industria es que 83% de las personas que bajan música
en Internet son niños desde 12 años hasta adultos de 25 años de edad y lo
inaceptable es que 68% de esas personas pertenecen a niveles socioeconómicos con
suficiente poder adquisitivo para comprar discos regularmente o pagar por la música”.
La música digital ilegal afecta tanto las ventas de música digital como las ventas en
disco compacto. El C. P. Hernández afirmó que del total de la música en formato CD
que se venden en nuestro país 60% son ilegales.
Agregó que los programas P2P actúan sin autorización de los legítimos propietarios,
por lo que están fuera de la ley. Existe violación a los derechos de autor aunque se
haga sin fines de lucro porque los legítimos propietarios, autores, compositores y
productores no han otorgado alguna licencia.
“Si la música digital es con fines de lucro, el código penal lo identifica como piratería y
la penalización es de 3 a 10 años de cárcel sin derecho a fianza. Cuando no se hace
con fines de lucro, pero la música se baja de manera masiva, es violación a la Ley
Federal de Derechos de Autor y el delito se persigue por medio del Código Civil y la
penalización será de acuerdo con los daños y perjuicios que se demuestren” explicó el
representante de Amprofon.
Aunado a estas violaciones existen los siguientes riesgos inherentes a la práctica del
P2P:
1. Infección por virus: Un virus es un programa diseñado para eliminar o alterar
la información de una computadora sin la autorización o conocimiento del
usuario. Los efectos van desde la aparición de mensajes en la pantalla,
ocasionando una simple molestia al trabajar, hasta serios daños al equipo,
como formatear el disco duro, eliminar archivos, averiar el sector de arranque,
etc.
2. Instalación de spyware o espías: Son programas que se instalan en el disco
duro del equipo de cómputo. Estos captan información personal de usuario:
número de tarjetas de crédito, contraseñas e inclusive conocer con que
frecuencia y cuánto tiempo se conecta a Internet.
3. La posibilidad de ser demandado: De acuerdo con Amprofon, la gente que
constantemente comparte, intercambia y sube canciones a Internet corre un
mayor riesgo de ser detectado, demandado y multado.
Según datos de Amprofon, diariamente, cerca de un millón de canciones y/o videos
musicales, se descargan ilegalmente en los cibercafés del país, a través de las redes
de intercambio peer to peer.
Ante esta situación, el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y Amprofon
firmaron el 25 de Mayo de 2007 el Convenio de colaboración en contra de la piratería y
el intercambio ilegal de música vía Internet con el objetivo de realizar visitas de
inspección de oficio a cibercafés en el Distrito Federal y en la Zona Metropolitana de la
Ciudad de México, así como una campaña preventiva para combatir esta actividad.
Para esto se han realizado diferentes guías educativas entre las que se encuentra
Guía para cibercafés para concienciar sobre el daño de la piratería por Internet y cómo
proteger la música en cibercafés.
Sin problemas ¿Cómo comprar música legal?
Para analizar más de cerca cómo se efectúa la compra, la Dirección General de
Estudios sobre Consumo (DGEC) de Profeco realizó diferentes adquisiciones de
música en los sitios Beon y Tarabu, del 17 al 25 de septiembre de 2007. Los
resultados se muestran en el siguiente cuadro:
Proceso para comprar música legal
Formato
canción
Inicialmente se tienen que WMA
seguir un proceso de registro MP3
por parte del usuario.
El sitio no solicita la
instalación de software. Antes
de la compra es necesario
adquirir créditos ya sea a
través del pago con tarjeta de
crédito en línea o bien con
tarjetas de prepago.
Cada
archivo
puede
escucharse por 30 segundos
antes de la compra
Sitio de Internet Proceso de compra
Precio
www.beon.com
$13
$10
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
www.tarabu.com
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
Una vez elegida la canción o
el disco que se desea
comprar es necesario pagar
los créditos y se activa la
opción para bajar la música.
El proceso de descarga tarda
pocos minutos, y antes de
escuchar la canción se
solicita la confirmación de la
licencia a través del correo
electrónico y el pasword del
usuario.
Posteriormente se envían los
datos de la compra a la
cuenta de correo electrónico.
El sitio cumple con las
medidas de seguridad en
datos
personales
y
financieros.
Es
necesario
instalar WMA
gratuitamente el software de
Esmas Player.
Una
vez
instalado
el
programa se realiza el
proceso de registro, la
información que se solicita
es: nombre, email, dirección y
forma de pago (no se pudo
adquirir la tarjeta de prepago
para el ejercicio por lo que se
selecciono tarjeta de crédito)
La compra se realiza al elegir
ya sea un álbum completo o
por canción a través de las
categorías por género o
intérprete.
Cada
archivo
puede
escucharse por 30 segundos
antes de la compra.
A continuación aparece la
opción Pasar a caja en dónde
se especifica el monto total y
la opción pagar.
La descarga dura unos
segundos, de acuerdo con la
velocidad de conexión a
Internet.
Posteriormente se envían los
datos de la compra a la
cuenta de correo electrónico.
El sitio cumple con las
medidas de seguridad en
datos
personales
y
financieros.
$13
Fuente: Dirección General de Estudios sobre Consumo de la Profeco. Precios recabados del 17 y 25 de
septiembre de 2007.
Las descargas de música son en formato WMA y MP3 que ofrecen una calidad de
sonido aceptable. Estos formatos permiten a las disqueras proteger la música
utilizando DRM (Digital Rights Management), lo que significa que las descargas son
legales y seguras.
Si bien, la música se puede descargar en dispositivos portátiles que puedan reproducir
archivos MP3 y WMA, los reproductores iPod no son compatibles con este último tipo
de archivo.
Ambas tiendas ofrecen la opción de respaldar la música en dos computadoras
adicionales, para lo cual es necesario hacer copias de los archivos de música y
licencia.
Las formas de pago de las dos tiendas son a través de tarjeta de crédito o tarjetas de
prepago (en diferentes denominaciones $50, $100, $150, etc.).
La DGEC de Profeco realizó un ejercicio con el fin de conocer la diferencia de precios
en tiendas digitales y tiendas de discos. A continuación se presentan los resultados:
Precios en formato digital y disco compacto
Disco
Interprete
e
Formato
Tienda
Precio
Diferencia Diferencia de
de precios precios entre
entre
el más caro y
tiendas
el más barato
Beon
$169
0%
Tarabu
$169
9.5%
Mixup
$180
Disco compacto
2.8%
Sanborns $185
Beon
$124
Digital (WMA)
22.6%
Indeleble
Tarabu
$152
Alejandra
41.1%
Mixup
$175
Guzmán
Disco compacto
11.4%
Sanborns $155
Beon
$130
Digital (WMA)
15.4%
Tarabu
$150
Cocktail
82.9%
Belanova
Mixup
$82
Disco compacto
29.3%
Sanborns $106
Fuente: Precios recabados el 17 de septiembre y 3 de octubre de 200 por la Dirección General de
Estudios sobre Consumo de la Profeco.
Utopía
Belinda
Digital (WMA)
En este ejemplo existen diferencias de precios entre las tiendas de música digital de
0% hasta 22.6%, mientras que entre tiendas de discos es de 2.8% a 29.3%.
Ahora bien, las diferencias de precios entre formatos pueden ser de hasta 41.1% como
es el caso del disco Indeleble de Alejandra Guzmán pues en Beon tiene un costo de
$124 ($11.2 por canción) y en Mixup de $175 ($15.9 por canción). Lo anterior es
siempre y cuando se adquiera un disco completo, porque en Beon adquirir canción por
canción cuesta $13.
Por otro lado, el disco Cocktail de Belanova cuesta $82 en Mixup, mientras que en
Tarabu tiene un costo de $150 lo que equivale a una diferencia de 82.9%.
Como se puede observar, no existe un comportamiento de precios que indique que el
formato digital es más barato que el disco compacto o viceversa; sin embargo, es ahí
donde entran las preferencias de cada consumidor. La única diferencia importante
entre un formato y otro, si se quiere ver así, es la posibilidad que brinda el formato
digital de adquirir sólo las canciones preferidas por el usuario.
Tal y como se escucha, todo tiene su precio
Y no se refiere al precio que se debe pagar por escuchar la música preferida, sino más
bien a las consecuencias físicas, específicamente auditivas por escuchar música a
través de audífonos a altos volúmenes.
Según la organización internacional Hear it AISBL constituida por la Federación
Internacional de Personas con Problemas de Audición (IFHOH), la audición es vital
para tener una buena calidad de vida; sin embargo, la intensidad del sonido y el
tiempo de uso de auriculares son factores importantes que pueden ocasionar
problemas.
La IFHOH informó que el aumento del uso de reproductores portátiles han
incrementado los daños en la audición, porque estos aparatos llegan a alcanzar
niveles elevados de sonido, exponiendo la audición a decibeles (dB, unidad que mide
la intensidad de los distintos ruidos) cada vez más altos.
“El oído humano tiene la capacidad de escuchar, en niveles normales, hasta 80
decibeles y a partir de 80 decibeles se comienza a tener problemas auditivos por
exposición al ruido; sin embargo, el daño depende de la susceptibilidad de cada
persona, del tipo de ruido y del tiempo de exposición, que de acuerdo con la Ley
Federal del Trabajo, éste no debe pasar de las cuatro horas cuando es por arriba de
los 95 decibeles” opinó el Dr. Lucio Santos García, otorrinolaringólogo y especialista
en audiología.
Agregó que una lesión se convierte en permanente cuando afecta al nervio. Sin
embargo, no se debe satanizar el uso de aparatos portátiles de sonido; aunque los
dispositivos de música llegan alcanzar los 120 decibeles no siempre se escucha al
máximo volumen; cuando llega a ocurrir sí se pueden causar lesiones auditivas.
A continuación se presenta un esquema sobre los niveles de ruido por tipo:
Fuente: Federación Internacional de Personas con Problemas de Audición (IFHOH)
http://spanish.youth.hear-it.org/page.dsp?forside=yes&area=1284
Ahora bien, la frecuencia de uso recomendada depende de los decibeles a los que la
persona este acostumbrada a escuchar su música; si lo hace entre 60 o 70 decibeles,
puede utilizarlos todo el día.
¿Cómo saber a qué decibel escuchar la música? El Dr. Santos señala que sin duda, lo
ideal sería utilizar un decibelímetro; sin embargo, menciona otras alternativas de
ayuda:
1. La máxima salida de sonido señalada en la caja del dispositivo de audio,
permite dar una idea del nivel utilizado.
2. Si la persona de a lado escucha perfectamente la música de los audífonos, es
señal de que el nivel está por arriba de los 100 decibeles.
En el artículo Oír bien para vivir mejor: Aparatos auxiliares auditivos publicado en el
boletín Brújula de compra se puede consultar más información relacionada con el
tema.
¡Que siga la música!
A continuación se hacen una serie de recomendaciones para disfrutar la música al
máximo:

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

Antes de comprar música digital es importante conocer el proceso, los términos
y condiciones, la ayuda y las preguntas frecuentes que ofrece el sitio de
Internet.
Algunos sitios solicitan la instalación de un software que generalmente es
gratuito.
Antes de comprar la música, es conveniente escuchar primero algunos de sus
fragmentos; usualmente los sitios ofrecen la opción de escucharla por 30
segundos.
No todas las canciones se pueden escuchar en los reproductores portátiles: es
necesario conocer el formato del archivo que se va a bajar y si es compatible
con el reproductor que se dispone.
Si al realizar una compra se utiliza tarjeta de crédito, es importante revisar que
el sitio cuente con las señales de seguridad (“s” después del “https” en la barra
de estado y el candado con certificado vigente en la parte inferior o superior
derecha de la pantalla). Si no se cuenta con la seguridad apropiada hay que
buscar otra opción de compra.
Conviene recordar que el intercambio de música gratis puede traer un costo,
como la infección o instalación de un código malicioso.
Aunque no toda la música gratis es ilegal, debido a que algunos artistas
ofrecen su música en Internet, la mayoría de los sitios no cuenta con el
consentimiento del artista o compositor para poder grabarla, por lo tanto se
comete un delito.
Y para los oídos…




Bajar el volumen del reproductor portátil evita dañar la audición.
Algunos aparatos cuentan con limitadores de volumen: es conveniente utilizarlo
para evitar altos niveles que pudieran ocasionar daños.
Si se percibe un zumbido o una sensación de hormigueo en el oído los
especialistas recomiendan retirar los audífonos inmediatamente.
No abusar de la capacidad auditiva, los oídos deben descansar con
regularidad, entre más tiempo se esté expuesto a la música con mucho
volumen, mayor será el riesgo de dañar la audición.