Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Rev. Logop. Fonoaud., vol. IV, n.º 4 (233-238), 1985. ESTUDIO NEUROLINGÜÍSTICO DE UN CASO DE SÍNDROME DE LANDAU-KLEFFNER CASO CLÍNICO Por J. Elías Bescos*, M. Ll. Barraquer Feu, Ll. Barraquer Bordas y J. Peña Casanova* * Unidad de Neuropsicología y Logopedia. Hospital General Nuestra Señora del Mar. Instituto Neurológico Municipal, Barcelona F. J. L., varón de 11 años de edad, sin antecedentes de patología neurológica en su familia y con dos hermanos sanos. El embarazo cursó sin problemas. Parto lento, de presentación cefálica, que precisó fórceps. No cianosis. Desarrollo psicoafectivo y psicomotor normal con retraso en el inicio del habla que no se desarrolló hasta los tres años. Cursa sus estudios hasta 4.º de básica sin ningún problema, resaltándose normalidad en la esfera del lenguaje. En septiembre de 1981, cuando tenía 10 años de edad, un día por la mañana los padres acuden a su habitación al oír ruidos extraños. Lo encuentran presentando convulsiones tónico-clónicas generalizadas que duraron unos 5-6 minutos. Después de esta crisis los padres notan en el niño una cierta dificultad en el lenguaje, que es catalogada de tartamudez. Inicia tratamiento con gotas de Depakine, pero a pesar de ello en enero de 1982 presenta una segunda crisis, también matutina, tónico-clónica generalizada de similares características a la primera. Después de esta segunda crisis, los padres observan en el niño trastornos importantes en el habla: empieza a cambiar sílabas por otras, inicia una palabra que no puede acabar al ir repitiendo una misma sílaba... Este trastorno va progresando de una forma irregular, hasta que los padres no entienden prácticamente nada de lo que el niño les dice. Además, ha perdido la capacidad de entender lo que le dicen, cosa que contrasta con el hecho de que oye perfectamente y bien identificando, por ejemplo, el sonido del teléfono. P ACIENTE Agradecemos las orientaciones y valiosos comentarios del Profesor José Manuel Blecua Perdices del Departamento de Filología Hispánica de la Universidad Autónoma de Barcelona. Diversas exploraciones otológicas fueron normales. Un EEG (4 de mayo de 1982) mostró anomalías paroxísticas frecuentes a nivel de la zona rolándica temporal izquierda, raramente a derecha, con fenómenos de sincronía bilateral secundaria. Otros dos EEG (septiembre y noviembre de 1982) pusieron también de manifiesto dichas manifestaciones irritativas paroxísticas. Se practicó TAC el 26 de febrero de 1982 que presentó una imagen hipodensa de pequeño tamaño a nivel del área temporal derecha. Una nueva TAC (noviembre de 1982) fue normal. Visto por nosotros en noviembre de 1982. El niño se mostraba inquieto, hiperactivo pero muy solícito. La exploración neurológica clínica fue normal. Datos neuropsicológicos básicos Lenguaje espontáneo: muy fluente con aspectos de liberación. Dominado por la desintegración fonética y fragmentos de estereotipia. Ininteligible si no existe un índice externo que permita «adivinar» el contenido. Repetición: imposible. Denominación: anartria. Comprensión: muy rudimentaria. Lectura: realiza verbalización pero no presenta datos sugestivos de comprensión. Escritura: preservada a la copia. Test de M. L. Albert: normal. Praxis constructiva: copia adecuadamente las figuras simples (círculo, triángulo y cuadrado) cosa que no ocurre con figuras más complejas (reloj, cubo y casa). Correspondencia: Prof. Ll. Barraquer Bordas. C/. Roger de Llúria, 102. 08009 Barcelona. 233 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. ORIGINALES El dibujo espontáneo de una figura humana, presenta un esquema corporal básico normal pero con deformidades evidentes. Suma elemental escrita afectada. EL SÍNDROME DE LANDAU Y KLEFFNER. DATOS CLÍNICOS BÁSICOS GENERALES Como podemos deducir por la historia clínica y pruebas complementarias realizadas a F. J. L., éste presenta un típico síndrome de Landau-Kleffner. Este síndrome asocia, por una parte, y como elemento constante, los trastornos adquiridos del lenguaje junto a alteraciones paroxísticas del EEG en un momento u otro de su evolución. Encontramos además y con bastante frecuencia, crisis epilépticas y más raramente trastornos del comportamiento. La exploración clínica (aparte de su afasia) es siempre normal. La edad de inicio suele ser antes de los siete años [Deconna y cols. (1982); Dugas y cols. (1982); Fejerman y cols. (1980); Landau y Kleffner (1957); Mantovani y Landau (1980); Narbona y cols. (1981); Peña-Casanova y Barraquer-Bordas (1983)]. El síntoma inicial suele ser una crisis epiléptica que precede normalmente al trastorno afásico. El intervalo entre la crisis y la afasia suele ser variable, desde un mes a dos años. También es posible la aparición simultánea (o casi) del trastorno epiléptico. No es raro, de todas maneras, encontrar dicho trastorno afásico precediendo a las crisis epilépticas, coincidiendo con un cuadro febril o no (otitis de repetición, meningitis, intervención quirúrgica banal...). Excepcionalmente, el síntoma inicial son los trastornos del comportamiento. De hecho, una característica de dicho síndrome es la ausencia de toda posibilidad de sistematización en cuanto a su sintomatología y evolución. Semiología de los trastornos del lenguaje Uno de los elementos típicos de la afasia del síndrome de Landau-Kleffner es el trastorno de la comprensión oral. Acostumbra a ser bastante intenso, pudiendo no limitarse al lenguaje «hablado» y afectando también a los «sonidos» no verbales. Nos en234 contramos con inatención auditiva y en muchos casos con una agnosia auditiva pura. Los trastornos de la expresión oral suelen ser constantes, apareciendo casos con una expresión oral disminuida e incluso nula. La producción está generalmente reducida cualitativa y cuantitativamente. Se pueden observar casos con una expresión ininteligible con ecolalia, estereotipias verbales, perseveraciones, parafasias fonémicas, etc. El lenguaje escrito está poco afectado en relación al oral y la prosodia habitualmente está conservada. La expresión y comprensión mímica y gestual es normalmente rica. La agnosia auditiva jugaría un papel importante en el desarrollo de los trastornos de la expresión oral, al verse privado el paciente del «feed-back» auditivo-verbal. La evolución de los trastornos del lenguaje es muy variable. Aproximadamente en un tercio de los casos la recuperación es completa o casi completa; en otro tercio de los casos la recuperación es sólo parcial persistiendo discretas secuelas (anomias, parafasias...) y finalmente otro tercio de casos presentan una recuperación prácticamente nula, persistiendo grandes trastornos de la comprensión y expresión. Parece ser que la recuperación o no del trastorno afásico está muy influida por la edad de inicio de la sintomatología y sobre todo por la edad de inicio de la afasia. Las probabilidades de recuperación serían mayores en aquellos pacientes en los que la afasia aparece a los cuatro años de edad o más. Crisis epilépticas No son un elemento constante dentro del síndrome de Landau-Kleffner, pudiendo no aparecer aproximadamente en un 30 % de los pacientes. Su característica principal es su pleomorfismo sintomático de un niño a otro e incluso dentro de un mismo niño. Encontramos crisis generalizadas, ausencias con o sin caídas, crisis tónicas, atónicas, unilaterales derechas o izquierdas, crisis adversivas, de automatismos y también, en algunos casos, crisis con suspensión del lenguaje, con vocalizaciones, mioclonías faciales y alucinaciones auditivas. Las crisis pueden ser nocturnas o diurnas. Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Su frecuencia es asimismo variable. Normalmente no implican un handicap importante. Puede agruparse en fases durante las cuales son más numerosas. Acaban desapareciendo siempre. No acostumbran a presentarse más allá de la adolescencia. Para su tratamiento no hay ningún fármaco específico, utilizándose los antiepilépticos habituales que normalmente no afectarán el curso de la afasia. Alteraciones paroxísticas del EEG Son un elemento constante, observándose prácticamente siempre en el primer registro. El trazado es muy variable de un sujeto a otro e incluso dentro de un mismo sujeto. Comportan puntas lentas, puntas-ondas lentas y polipuntas ondas que desencadenan descargas leves o prolongadas. Pueden ser generalizadas, preferentemente asincrónicas, aunque a veces son sincrónicas. Acostumbran a predominar en uno u otro hemisferio. Pueden ser también localizadas, sobre todo a nivel de la región temporal derecha o izquierda o temporo-occipital, variando a lo largo de los registros. El sueño suele acentuar las anomalías del trazado. En su evolución se constatan variaciones morfológicas así como la vuelta a un trazado normal que puede ser transitorio o definitivo. A la larga, siempre nos encontramos con una normalización de dichas alteraciones paroxísticas. No existe una relación entre el electroencefalograma y la afasia. Trastornos del comportamiento Suelen ser moderados pudiendo, empero, interferir en la reeducación del lenguaje. Frecuentemente se observa hipercinesia. También se han descrito casos con accesos de cólera, conducta agresiva o comportamiento de oposición. De hecho, se tiene que ser muy prudente en el momento de «etiquetar» dichos trastornos del comportamiento, ya que en muchos casos podrían ser la reacción lógica de una persona «normal» que ha perdido repentinamente la capacidad de comunicación por medio del lenguaje hablado. Más raramente estos trastornos se presentan con una intensidad importante y con un comportamiento regresivo y encopresis. Excepcionalmente aparecen rasgos psicóticos. La capacidad intelectual acostumbra a estar preservada y se observa una clara disociación entre la eficiencia intelectual no verbal y la eficiencia intelectual verbal, en detrimento de esta última, ya que la regresión de la afasia raramente es total. Hipótesis sobre fisiopatogenia y etiología En el síndrome de Landau-Kleffner existen diversos elementos que hacen suponer una afectación hemisférica bilateral asentándose sobre todo a nivel de las áreas temporales. Uno de ellos es, por ejemplo, la existencia de trastornos masivos de la comprensión verbal y con casi la misma frecuencia una verdadera agnosia auditiva. Esta semiología apunta hacia la afectación bilateral ya que, si no, el hemisferio no dañado, aún no siendo el dominante, podría suplir en mayor o menor grado el trastorno auditivo y sobre todo del lenguaje. Respecto a las hipótesis etiológicas, existen diversos puntos de vista; uno de ellos aboga respecto a la existencia de una afectación orgánica bilateral: «Encefalopatía afásica», según el término de Dugas y Mialet, de etiología no determinada y que afectaría básicamente a las regiones temporales. La etiología de esta afectación orgánica sería vírica, por mecanismos inmunoalérgicos. No existen suficientes datos para apoyarla. Algunos autores atribuyen a las perturbaciones funcionales de naturaleza epiléptica de las regiones temporales de los dos hemisferios, un papel predominante dentro del terreno fisiopatológico de la afasia. En contra de dicha teoría está el hecho de la persistencia de la afasia una vez desaparecidos los trastornos paroxísticos del EEG. De todas formas hemos de tener en cuenta que en el curso del desarrollo existe un período crítico para la adquisición del lenguaje. En resumen, podríamos decir que de todas estas variedades hipotéticas sobre la etiología y fisiopatogenia del síndrome de Landau-Kleffner, no existe aún ninguna que aparezca como segura. 235 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. ORIGINALES ANÁLISIS NEUROLINGÜÍSTICO DEL CASO F. J. L. A continuación presentamos en cuatro partes la transcripción de muestras del habla del niño F. J. L. obtenidas a partir de los estímulos indicados: - Descripción de láminas. - Denominación de imágenes. - Lectura. - Conversación. Descripción de láminas — Dime qué es esto (calle de una ciudad — (¿«Ande» (dónde) está?) — Fíjate bien. Ahora te voy a enseñar otro dibujo. ¿Qué es esto? (tienda) — — ¿Y esto? (pizarra) — — Y esto, ¿qué representa?, ¿qué es? (carnicería) (ropa) — — ¿Y esto? — (Aquí está) (¿Arriba?) — Dime esto, qué es (paisaje con una casita) — (Puerta) — ¿Qué más? — — ¿Qué más? — . — ¿Qué más? - . . (Árbol) (Flores) (Agua) — ¿Y esto? ¿Qué es? (zoológico). (Avestruz) (Cocodrilo) (Tigre) (Hipopótamo) («Agüela» (Mamá) (Niños) (abuela) (Ya está). — ¿Qué más? Denominación de imágenes - (ojo) - - (zapato) - (queso) - (seta) - (cebra) - 236 - (jersey) - (lámpara/quinqué) - (niña) - (jirafa) - (pera) - (cereza) - (dado) - (osito) - (elefante) - (mano) - (uva) - (árbol) - (taza) - (indio) - Lectura - Usted sabe cómo - Bajó a la tierra - Volví del trabajo a casa - Cerca de la mesa en el comedor - Silla Círculo Hamaca Triángulo Quince Rojo Bebiendo Setecientos Marrón - Conversación - ¿Qué vamos a hacer ahora? ¿Cómo te llamas? Dime tu nombre Dímelo otra vez ¿Cómo te llamas? ¿Francisco? Francisco, ¿que más? ’ Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. CONCLUSIONES DEL ESTUDIO NEUROLINGÜÍSTICO Después de haber estudiado detenidamente el caso que presentamos del niño F. J. L., nos decidimos a reproducir gráficamente las muestras más sobresalientes de su habla. Y ello por dos motivos. Si es evidente el interés lingüístico de la desestructuración de la lengua, no lo es menos la ejemplificación clínica que de ella sacamos. Además, hasta ahora de los pocos casos que se conocen en la literatura mundial del síndrome de Landau-Kleffner, ninguno de ellos ha sido revelado a partir de las muestras directas de su desarrollo lingüístico en el papel. No ha sido tarea fácil exponer toda la producción verbal del paciente. Algunas veces a lo largo de su discurso ha resultado casi imposible reproducir parte de los sonidos por él emitidos. Por tal razón nos hemos visto obligados a dejar espacios con puntos suspensivos. Pero el análisis no se ha detenido ahí. Si se viera que la mayoría de las veces no se trata de un síndrome de desintegración fonética, sí se evidencia una fuerte distorsión tanto en la producción de las vocales como de las consonantes e incluso en la formación de diptongos espontáneos. Naturalmente hemos considerado que el niño provenía de una zona con su dialecto peculiar, lo cual le ha influido en los hábitos del lenguaje. Pero yendo un poco ordenadamente debemos hacer hincapié en la melodía tampoco nada fluente. Así nos encontramos con que además de unas alteraciones tonemáticas súbitas sobre todo —aunque no siempre— al final de ciertas palabras no predeterminadas (hipertonemas hipotonemas también observamos un hablar saltado y entrecortado. Ahora bien, los ejemplos transcritos nos muestran que aunque hay algunas aproximaciones a las palabras, generalmente la intromisión de las alteraciones fónicas, estereotipias y automatismos que se repiten indiscriminadamente, lo que podría ser calificado de neologismos, los retazos de palabras sin discriminación semántica junto con la inestabilidad del sistema fonético-semántico global demostrada en las diferentes soluciones para un mismo vocablo y la falta de un mínimo de sintaxis para estructurar la frase, hacen que la comunicación no llegue a producirse. En la lectura, cuando se trata de leer una sola palabra el paciente suele dar alguna aproximación con toda suerte de alteraciones, algunas ya mencionadas: paralexias, neologismos con diptongación espontánea, modificación de la melodía normal (hiper o hipotonemas), alargamiento de vocales, aspiraciones, vocales parecidas a la neutra o a la o abierta, geminación de consonantes, etc. En el resto de la lectura, compuesto por tres frases y un sintagma, junto a las observaciones señaladas debemos apuntar que escasamente podemos reconocer algunos vocablos que los componen; sin ir más lejos, elementos tan esenciales como el verbo apenas son distinguibles y si se pone de manifiesto no es por su papel sintáctico, sino por la semejanza fonética con la palabra. A las otras partes, denominación de imágenes, descripción de láminas y la conversación, salvo la aparición de una especie de e abierta poca cosa podríamos añadir. Las conclusiones globales las hemos dividido en los siguientes apartados sin que obligatoriamente cada uno de ellos lleve ejemplificación total de los efectos observados: - Distorsión del sistema vocálico castellano. Distorsión del sistema consonántico castellano. Estereotipias-automatismos. Diferentes deformaciones de un mismo vocablo. Dialectalismos. Distorsión del sistema vocálico castellano a) Gran cantidad de oo abiertas b) Gran cantidad de ee abiertas c) Sonido semejante a la vocal neutra d) Alargamiento de vocales e) Geminación de vocales f) Aspiración de vocales 237 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. ORIGINALES g) Nasalización de vocales h) Alteración de las unidades tonales (hipertonemas) i) Alteración de las unidades tonales (hipotonemas) Diptongación espontánea: j) a) diptongos crecientes b) diptongos decrecientes k) Ayuda articulatoria: a) con sílaba repetitiva b) con vocal neutra final Distorsión del sistema consonántico castellano Gran predominio de oclusivas en las estereotipias y automatismos: b) Geminación de algunas consonantes: c) Producción de fricativas palatales sordas y alguna sonora: Dialectalismos - - Pérdida de por «agüela» (Abuela) por (Rojo) por «sapato» (Zapato). Notemos como rasgo dialectal, además, la predorsal final en «seteciento» por (Setecientos) por (¿«Ande» (dónde) está?) RESUMEN Presentamos un caso de síndrome de LandauKleffner con todas sus características clínicas y realizamos un estudio neurolingüístico de las «muestras de lenguaje» obtenidas en la exploración neuropsicológica que se practicó al paciente. Este artículo constituye, según nuestra información, el primer estudio detallado, desde el punto de vista neurolingüístico, de las alteraciones del lenguaje en un caso con síndrome de Landau-Kleffner. BIBLIOGRAFÍA d) Palatalizaciones diversas: e) Cierta tendencia al rotacismo: f) Sonorizaciones: Estereotipias-automatismos Diminutivos Con variantes diversas . . . - . . . - . . . - Diferentes soluciones a un mismo vocablo (Árbol) (Elefante) 238 DEOONNA T., FLETCHER P. y VOUMARD C.: «Temporary regression during language acquisition: a Linguistic Analysis of a 2 ½ year old-Child with epileptic Aphasia». 1982, 24, 156-163. DUGAS M., MASSOM N., LE HEUZEY M. F. y REGNIER N.: «Aphasie “acquise” de l’enfant épileptique (syndrome de Landau et Kleffner)». Revue Neurologique. 1982, 138, 755-780. FEJERMAN N. S. y MEDINA C.: «Afasia epiléptica adquirida en el niño». Archivos Argentinos de Pediatría, 1980, 78, 510-520. LANDAU W. M. y KLEFFNER F. R.: «Syndrome of acquired aphasia with convulsive disorder in children». Neurology, 1957, 7, 523-530. MANTOVANI J. F. y LANDAU W. M.: «Adquired aphasia with convulsive disorder: course and prognosis». Neurology, 1980, 30, 524-529. NARBONA J., GARCÍA RODRÍGUEZ L. y MARTÍNEZ-LAGE J. M.: «Afasias infantiles congénitas y adquiridas». Revista de Medicina de la Universidad de Navarra, 1981, 25, 153-159. PEÑA-CASANOVA J. y BARRAQUER-BORDAS Ll.: Neuropsicología. Toray, 1983. Recibido: enero de 1985.