El análisis de la coyuntura en América Latina Pedro Sáinz OECD SEMINARIO SOBRE INDICADORES LÍDERES Y ENCUESTAS DE EXPECTATIVAS IPEA - CEPAL - OECD Río de Janeiro, 4-5 de diciembre de 2000 Pedro Sáinz1 Documento OECD 28 de noviembre de 2000 A. OBJETIVO DEL SEMINARIO El Seminario de análisis de coyuntura es coauspiciado por el Instituto de Pesquisa Económica Aplicada (IPEA), la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (CEPAL) y la Organización Económica de Cooperación y Desarrollo (OECD). Forma parte de las actividades de cooperación con los países latinoamericanos de los dos últimos organismos. En particular ha puesto su foco de atención en Brasil, pero se contará con la participación de un número reducido de expertos de Argentina, Chile y México. El tema central del Seminario es el análisis de la coyuntura económica. Se ha identificado un conjunto de agentes públicos y privados que llevan a cabo actividades en esta área en los países participantes. Durante el Seminario se expondrán y discutirán distintos tipos de análisis de coyuntura, centrados en el nivel de actividad económica, prestando especial atención a las metodologías utilizadas: las variables que se proyectan, los períodos de proyección, la periodicidad y oportunidad con que se dan a conocer y los medios a través de los cuales se difunden. A la vez la OECD, la CEPAL y el IPEA presentarán sus experiencias en esta área. De este modo se espera que los expertos que trabajan en esta área puedan conocer en mayor profundidad los distintos métodos y los distintos tipos de análisis que se utilizan en este grupo seleccionado de 4 países latinoamericanos como asimismo en los organismos coauspiciadores. Se sabe que estos distintos análisis tienen un carácter complementario y por ello podrían dar origen a actividades de cooperación. Los organizadores confían en que será posible identificar al menos algunas áreas de cooperación, lo que debiera permitir programar mejor a la OECD y a la CEPAL sus tareas de apoyo a los países latinoamericanos. B. LA COYUNTURA LATINOAMERICANA EN LOS 80 Y 90 Existe una abundante literatura en torno a la metodología y experiencia en el área del análisis de la coyuntura y en particular del nivel de la actividad económica para los países desarrollados. Como es sabido ella no es ajena a la naturaleza de las economías y a las demandas de los gobiernos y de los agentes privados. Durante los años 90 el análisis de coyuntura a nivel internacional ha sufrido fuertes críticas por la incapacidad de previsión en los casos de las crisis mexicana, del sudeste asiático y de Rusia. Esta crítica afectó especialmente al Fondo Monetario Internacional, que a propósito de ella puso en marcha ambiciosos planes para dar acceso a información oportuna a los agentes. De este modo parece pertinente revisar las 1 Consultor de OECD para este seminario 2 características de las situaciones de coyuntura que han afectado a América Latina en los años 80 y 90. El análisis de coyuntura ha adquirido un gran auge en los países latinoamericanos. Una revisión de los principales periódicos de la región pone en evidencia la aparición y expansión de secciones económicas que dedican buena parte del contenido al análisis de la coyuntura nacional, regional y mundial. A la vez los agentes públicos y privados hacen creciente uso del análisis de coyuntura. Esta expansión de los usuarios ha estado acompañada de un notable aumento de los productores de análisis de coyuntura. Esta expansión de las estadísticas y de su interpretación comparte características con lo que sucede con la producción de estadísticas en general. La transformación tecnológica ha permitido logros notables en términos de rapidez de acceso y de procesamiento de la información. Como es obvio estas características son especialmente relevantes para el análisis de coyuntura donde la oportunidad de la información es imprescindible. En el caso particular de América Latina la transformación económica de los años 80 y 90 ha traído consigo modificaciones apreciables en el funcionamiento de las economías. Entre esas modificaciones varias han acentuado la importancia de la coyuntura frente al mediano y al largo plazo. En efecto la crisis de comienzo de los años 80 se extendió prácticamente durante la mayoría de la década en muchos países de la región. Las dificultades de balanza de pagos derivadas de la crisis del endeudamiento externo obligaron a los gobiernos a enfrentar situaciones críticas en el sector fiscal, en la balanza de pagos, en el empleo y en la inflación. Como es sabido todo esto redundó en un estancamiento cuando no en una caída del Producto por habitante para el conjunto de los años 80. En estas circunstancias los gobiernos tuvieron que enfrentar sucesivas dificultades en el corto plazo lo que transfirió el centro de las preocupaciones desde la transformación económica al manejo del corto plazo. A la vez durante los años 80 y en especial durante los 90 se intensificó el proceso de reformas macroeconómicas e institucionales. Cambió radicalmente el papel de los sectores público y privado, el funcionamiento de los mercados internos, las relaciones económicas y financieras con el exterior. Se intensificó el flujo de capitales externos, y durante los años 90 adquirieron importancia los agentes externos. De este modo el análisis de coyuntura debió enfrentar una nueva realidad con nuevos agentes, nuevos mercados, nuevas funciones y por tanto con comportamientos sobre los cuales no se tenían experiencia previa significativa. Los años 90 se han caracterizado por una recuperación moderada del crecimiento en la mayoría de los países de la región. No obstante, tras tasas moderadas de crecimiento subyacen importantes transformaciones estructurales; cabe destacar entre ellas una notable expansión en la producción de los servicios en relación a los bienes, un incremento de la importancia del sector financiero y del cálculo financiero en el manejo de las empresas, y un aumento de la importancia relativa de las relaciones económicas externas. A la vez se han producido importantes cambios en el área patrimonial, por lo que la coyuntura se ha visto influida por grandes ventas del patrimonio público y posteriormente del patrimonio privado. Un adquirente fundamental ha sido 3 el sector externo con lo que el cambio patrimonial ha estado asociado a transacciones importantes de balanza de pagos. La creciente importancia de las transacciones financieras internas y externas ha otorgado un papel apreciable a las operaciones de corto plazo que vienen influyendo significativamente en las utilidades y pérdidas de los agentes tanto en las operaciones corrientes como en la valoración del capital. De allí que por ejemplo resulte extremadamente importante para el gobierno y los agentes privados el contar con buenas proyecciones de la inflación, de la tasa de interés y del tipo de cambio. De otro lado la recuperación del crecimiento no ha estado exenta de recesiones. Por lo contrario en la mayoría de las economías se ha acentuado la vulnerabilidad, la incertidumbre, y el contagio con lo que sucede en otras economías. Son bien conocidas las crisis que durante los 90 afectaron a la región, destacándose la de finales de 1994 y 1995 y la que se inició en 1997 con la crisis del Sudeste Asiático y luego con la crisis Rusa. Los efectos sobre las economías latinoamericanas de este contexto externo y de las reformas han sido múltiples. Los países han sufrido recesiones o estancamiento económico por períodos prolongados. A la vez la salida de la crisis ha venido acompañada de notables esfuerzos fiscales destinados a recuperar al sector bancario que en muchos países ha supuesto movilizar porcentajes apreciables del presupuesto. Del lado positivo los gobiernos han tenido gran éxito en controlar los procesos inflacionarios, por lo que se ha logrado una estabilidad de precios que para muchos países era desconocida en el período que se inició con la posguerra. C. EXPERIENCIA LATINOAMERICANA EN EL ANÁLISIS DE LA COYUNTURA Son estos algunos de los componentes de las economías de la región que condicionan el análisis de coyuntura. En otros términos el uso más intensivo del análisis de coyuntura en los años 90 ha significado un proceso de aprendizaje apreciable. A comienzos del año 2000 se ha ganado experiencia en el análisis de corto plazo como para justificar un intercambio de metodologías. Una primera revisión de la actual experiencia latinoamericana hace posible identificar al menos tres tipos de análisis de coyuntura. El primero se refiere a proyecciones del nivel de actividad económica, y en ocasiones se hace extensivo al empleo, la inflación y la balanza de pagos. El segundo, a partir de la opinión de los empresarios y de los consumidores, genera indicadores de trayectoria de la actividad económica y del consumo privado. El tercero analiza las tendencias de la actividad económica, buscando identificar su aceleración, su enlentecimiento o sus quiebres. La primera es la que agrupa a mayor cantidad de productores. Está fuertemente asociada en el plano conceptual al Sistema de Cuentas Nacionales. En efecto es bien sabido que las cifras oficiales de crecimiento del producto y de la evolución de sus componentes sectoriales y de oferta y demanda global, se calculan siguiendo ese sistema de cuentas. De este modo la calidad de las proyecciones termina juzgándose contra las cifras oficiales. 4 Por ello buena parte de estas proyecciones replican en el cálculo los conceptos, y métodos del organismo oficial, con la diferencia que cuentan con menor información. Más aún, existen en esta área de proyecciones distintas posibilidades dependiendo del momento y del horizonte con que se preparan las proyecciones. De hecho los propios organismos oficiales encargados del cálculo de Cuentas Nacionales Trimestrales suelen preparar estimaciones de carácter preliminar que cubren lo ocurrido en el trimestre o en los meses anteriores, para los cuales no existe aún suficiente información para presentar un cálculo definitivo. En la preparación de estos cálculos aparece un concepto muy importante para el análisis de coyuntura que es el de “indicador líder”. En esencia supone reconocer que la información de distintas variables se produce con desfases entre ellas y que están relacionadas. Se trata por tanto de aprovechar las que se producen con el menor o sin desfase para estimar el resto de las variables o una parte de ellas. Este esfuerzo está asociado a un gran esfuerzo metodológico orientado a examinar el comportamiento de las variables que se obtienen más rápidamente para determinar sus modelos de comportamiento en el tiempo y la relación que tienen con las variables que se desean estimar. Además de estimaciones del producto para el último trimestre o últimos meses otras instituciones ajenas a la que prepara las cuentas nacionales, estiman la trayectoria del producto en el corto plazo cubriendo el año en curso y en ocasiones el año siguiente. Normalmente se sustentan en modelos contables y econométricos que también en la mayoría de los casos repiten en alguna medida el sistema de cálculo de las cuentas nacionales. Como es bien sabido en el sistema de cuentas nacionales existen tres formas de calcular el nivel del producto: partiendo del valor bruto de producción sectorial con deducción de los insumos intermedios, (métodos de la producción) por los componentes del valor agregado y por el lado de la oferta y la demanda global. (método de gasto) En el cálculo de cuentas nacionales estos tres métodos sirven para controlar la calidad de la estimación y dependiendo del país y de sus fuentes estadísticas presentan fortalezas y debilidades. Por ello cuando se trata de preparar proyecciones es habitual recurrir a la información disponible de actividades sectoriales tales como la producción industrial olas proyecciones de cosechas agrícolas, a estimaciones del comercio exterior y a componentes del valor agregado. En este sentido el Seminario representa una buena oportunidad para confrontar modelos y técnicas de estimación, como así mismo fuentes de información. Si bien la proyección más solicitada y publicada es la del ritmo de crecimiento del producto quienes preparan las proyecciones están normalmente en condiciones de presentar aperturas del producto por actividades económicas y los componentes de la oferta y la demanda global. A la vez las proyecciones suelen combinar estimaciones a precios constantes y corrientes lo que lleva implícito una proyección de precios. Así es también posible decir algo acerca de la inflación y de la relación de precios del intercambio. Por los métodos de cálculo utilizado se suele contar asi mismo con proyecciones de la balanza de pagos. (cuenta del sector externo) En el caso concreto de este Seminario se contará con presentaciones del Banco Central de Chile, del INEGI de México y del IBGE que tienen las características generales descritas 5 anteriormente. El Banco Central de Chile calcula el IMACEC, Indicador Mensual de Actividad Económica, cuyos resultados tienen un retraso de 45 días respecto del cierre del mes correspondiente y son difundidos mensualmente a través de comunicados de prensa y publicados todos los meses en los boletines del Banco Central. El INEGI publica el IGAE, Indicador Global de Actividad Económica, que es difundido a través de comunicados de prensa y publicado en su pagina web y que también tiene un retraso de 45 días con relación al cierre del mes correspondiente. Por fin el IBGE calcula las cuentas nacionales trimestrales de Brasil, cuyos resultados son difundidos a través de comunicados de prensa y publicados en su pagina web con un retraso de 8 semanas respecto del cierre del trimestre. El segundo método de análisis de coyuntura se sustenta en encuestas de opinión del sector empresarial y de los consumidores. En varios países de la región se levantan encuestas en las que se consulta a un conjunto seleccionado de empresas acerca de sus opiniones en torno a la evolución de su producción, ventas, compras, inventarios, empleo y otras variables. También se les consulta acerca de sus opiniones con respecto a la marcha general de la economía. El aprovechamiento de estas encuestas para producir indicadores de adelanto está relativamente poco desarrollado en la región. No obstante en algunos países se produce sistemáticamente información y análisis de coyuntura. En particular en el caso de Brasil la Fundaçión Gertulio Vargas e la Confederación Nacional de Industria preparan análisis y indicadores basados en encuestas a los empresarios. Las encuestas a los consumidores se han venido incorporando paulatinamente al análisis de coyuntura. En los últimos años varios países vienen enfrentando una situación relativamente atípica en la región y que se caracteriza por una gran cautela de los consumidores y de los bancos en torno al gasto en consumo. En efecto al reforzarse las actividades de supervisión del sistema bancario y al expandirse la participación de la banca extranjera en la región, los bancos han adquirido una actitud más cautelosa en sus políticas de préstamos para financiar el consumo privado. Así se ha hecho relativamente común encontrar niveles altos de depósitos en el sistema bancario y colocaciones en papeles públicos. De otro lado y especialmente en América del Sur, la elevación de las tasas de desempleo abierto y los efectos limitados que la recuperación de actividad del año 2000 viene gestando sobre el empleo se ha traducido en una actitud cautelosa por parte de los consumidores. Todo ello ha impedido que la recuperación sea rápida y en ocasiones viene impidiendo salir del estancamiento. Además al existir en la región un ambiente de mayor estabilidad de precios se hace más fácil para los bancos y para los consumidores proyectar hacia el futuro su comportamiento. De allí que las encuestas de opinión a los consumidores hayan adquirido importancia. En el caso concreto de Brasil la Confederación Nacional de la Industria y la Federación del Comercio del Estado de Sao Paulo preparan análisis y indicadores basados en encuestas a los consumidores. El tercer método orientado al estudio de tendencias persigue calificar la evolución de la producción o de otras variables económicas en torno a su mantención, aceleración, reducción o quiebre. En el caso latinoamericano una parte importante del quiebre de tendencias se viene originando durante los años 90 en cambios en las condiciones externas de las economías. Especial importancia han tenido los flujos de capital extranjero que han pasado por períodos de fuerte expansión y contracción. Además en algunos países se han producido tendencias ha acentuar desequilibrios, tales como los de balance comercial o del déficit del sector público. Con 6 motivo de las crisis del año 94 y la que se inició en 1997 se ha vuelto a plantear la capacidad de proyección que tienen los gobiernos y los agentes privados frente a estas situaciones. De allí que haya ganado importancia la capacidad de previsión de este tipo de cambios en las tendencias. El instrumental que se suele utilizar está asociado a la identificación de variables que puedan anticipar cambios en variables claves para el desempeño de las economías. También aquí se suele usar la denominación de indicadores líderes que suelen ser índices compuestos cuya trayectoria se calcula a partir de la trayectoria de otras variables desfasadas. En el caso de Brasil el IPEA, la FIPE, el Banco Central de Brasil, e otras instituciones publicas y privadas han desarrollado trabajos en esta línea. D. FUENTES DE INFORMACIÓN El Seminario constituye una excelente oportunidad para confrontar las fuentes de información que se vienen utilizando para los tres tipos de proyecciones. Permitirá a la vez comparar en algunos casos las diferencias entre los países latinoamericanos participantes. A la vez se contará con información de la situación en los países de la OECD. Un aspecto interesante en relación a los métodos que reproducen el sistema de Cuentas Nacionales es que los propios organismos encargados de preparar las cifras definitivas de cuentas hacen estimaciones preliminares o han preparado indicadores a ser usados como proxi del nivel de actividad económica. Por ello el Seminario debiera permitir contar con una buena evaluación de la información disponible y del calendario con que se puede tener acceso a ella. A la vez el resto de los organismos que preparan este tipo de proyecciones recurren con toda seguridad a información originada en otras fuentes. En cualquier caso se puede listar preliminarmente parte de la información que suele utilizarse en este tipo de estimaciones. La producción industrial mensual, las proyecciones de cosechas agrícolas, la evolución del sector de la construcción, las ventas de los supermercados o del comercio en general, el numero de impulsos telefónicos registrados, el nivel general de los precios, las tasas de interés y la evolución del comercio externo, son algunas de las variables consideradas. La disponibilidad de información condiciona a su vez en buena parte los métodos que se pueden utilizar. Así el acceso a información más desagregada puede dar origen a una reproducción también más desagregada de la actividad económica. En la medida que la información cubra el nivel de actividad sectorial, componentes del gasto y componentes del valor agregado las estimaciones pueden someterse a mayores pruebas de consistencia. Las encuestas de opinión de empresarios y consumidores constituyen una fuente más restringida de información que la asociada a Cuentas Nacionales. En este seminario contaremos con las presentaciones correspondientes a la Encuesta Cualitativa Industrial elaborada por el INDEC de Argentina, y el Indice de Confianza de los Consumidores elaborado por el INEGI de México, además de las presentaciones anteriormente mencionadas correspondientes a las encuestas realizadas en Brasil. 7 La utilización de esta información parece ser bastante restringida y suele estar en manos de quienes producen estas encuestas de opinión. El Seminario debiera permitir explorar formas de dar acceso a los resultados de estas encuestas a un mayor número de usuarios. La experiencia de la OECD debiera resultar especialmente valiosa en este caso, tanto por los métodos de explotación de las encuestas como por las formas de acceso a la información de distintos agentes. Por último el método de estimación de características de las tendencias se sustenta metodológicamente en la disponibilidad de numerosas series de tiempo. Conceptualmente estas metodologías están asociadas a las teorías del ciclo económico. Parece por tanto especialmente pertinente discutir la medida en que las tendencias y sus quiebres se asocian en América Latina a un ciclo económico similar al que se da, o se daba en los países desarrollados. El hecho de que se busca anticipar con un desfase relativamente constante quiebres en las tendencias de la serie que se quiere adelantar, denominada serie de referencia, requiere contar con otras series que se constituyen en indicadores de adelanto. Se plantean así condiciones que deben cumplir las series de indicadores de adelanto, tales como inexistencia de quiebres estructurales, confiabilidad de la información, no ser objeto de muchas variaciones, periodicidad constante de la información (idealmente mensual), amplitud del ciclo parecido al del ciclo de la serie de referencia, y acceso periódico a la información. Cabe por tanto examinar la medida en que en el caso latinoamericano se aplican este tipo de estimaciones y si la información satisface los requerimientos teóricos de este tipo de técnicas. A la vez, es posible que la evolución de los sistemas informativos y de las técnicas de análisis esté haciendo hoy posible introducir este tipo de análisis, a lo que potencialmente se pueda optar en el futuro cercano. 8