PLANIFICACION_DE_UNA_SESION_DE_PSICOMOTRICIDAD

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La psicomotricidad es un área de conocimiento que pretende desarrollar las capacidades y
competencias del individuo utilizando el movimiento y la acción. El desarrollo psicomotor es
un factor esencial en el desarrollo general del niño, en su autonomía, personalidad, en la
adquisición de conocimientos y en el equilibrio emocional. Desde la escuela, los maestros y las
maestras debemos hacer todo lo posible para que los niños y las niñas consigan ese desarrollo.
La psicomotricidad se propone construir un espacio relacional en la escuela adecuado para la
adquisición de los aprendizajes. Una de las mejores formas de trabajar en Educación Infantil es
utilizando uno de los principios de la psicomotricidad, como es el juego. Éste, utilizado de
manera adecuada, se convierte en un elemento facilitador e integrador de aprendizajes.
Así pues, con la finalidad de conseguir un desarrollo pleno e integral de las capacidades de mi
alumnado, propongo una serie de juegos variados para que se usen como un buen recurso
didáctico en las sesiones de psicomotricidad.
PLANIFICACIÓN DE UNA SESIÓN DE PSICOMOTRICIDAD:
Mi sesión va dirigida a un grupo de niños y niñas de cuatro años de un colegio de Educación
Infantil y Primaria de la periferia de la ciudad donde vivo.
Esta sesión psicomotriz está programada para el primer trimestre, concretamente se
desarrollará en el mes de octubre durante la quincena que dure la unidad didáctica de mi
programación diaria en la cual quedaría incluida tal sesión.
La sesión que me propongo realizar tiene como finalidad cumplir con los siguientes objetivos:
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Potenciar las posibilidades expresivas del cuerpo
Crear ambientes propicios para el desarrollo motor del niñ@
Favorecer el esquema corporal y la percepción espacial
Mejorar la coordinación dinámica-general
Fomentar las habilidades motrices por medio de la música y el movimiento
Conocer su propio cuerpo y el de los otros, sus posibilidades de acción y
aprender a respetar las diferencias.
Pero en la planificación de una buena sesión de motricidad han de trabajarse aspectos
sociales, comunicativos, de lenguaje, afectivos, emocionales y no sólo los aspectos físicomotores sino también los psicológicos en el desarrollo evolutivo y personal del niñ@.
Para que esos objetivos se cumplan es básico que se trabajen una serie de contenidos
mediante el desarrollo de unas actividades-tipo. Estos contenidos trabajados en mi sesión son:
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La conciencia postural: movimiento (rápido/lento)-quietud
La relajación
La percepción espacio-temporal
Las posiciones verticales y horizontales, (de pié/tumbad@s)
Equilibrio estático y dinámico, el control del cuerpo
Partes del cuerpo
Articulaciones
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 Desplazamientos espaciales, (en línea recta, curva y en círculo)
 Coordinación motriz
 Expresión corporal
 Saltos y giros, marcha y carrera
 El lenguaje gestual, a través del cuerpo
METODOLOGÍA:
Se caracteriza por ser una metodología relacional, globalizada, lúdica, significativa y creativa.
EVALUACIÓN:
La finalidad de la evaluación es determinar el desarrollo alcanzado por cada niñ@. Los
instrumentos de evaluación son las escalas de observación (organizadas por edad) –que me
van a permitir determinar el nivel de aprendizaje de cada un@-. Teniendo ésta, pues, un
carácter formativo y continuo.
RECURSOS: Con los materiales empleados promoveré la participación de mis alumn@s y su
originalidad. El uso, pues, de estos materiales hace posible que el desarrollo de la sesión sea
más divertida para mis alumnos/as. Estos pueden ser:
- Módulos de gomaespuma
- Colchonetas
- Pelotas, globos y balones
- Aros
- Picas
- Cuerdas
- Conos de goma
- Ladrillos y saquitos de arena
- Bancos suecos, espejo, espalderas
- Telas y trapos viejos
- Instrumentos musicales (pandero), radiocassette con CD
- Material fungible
LA SESIÓN DE CLASE:
Esta sesión de psicomotricidad que llevaré a cabo con est@s alumn@s de cuatro años será
una sesión donde la música sea un importante apoyo al ejercicio físico de sus movimientos y
coordinación de los mismos utilizando el gimnasio de mi colegio como un buen recurso
espacial que me permita poder realizar las distintas y diversas actividades dirigidas y no
dirigidas con el fin de ir desarrollando sus propias capacidades de competencia motriz.
Al poner en contacto directo el espacio físico del gimnasio con los niñ@s estaré usando un
nuevo contexto diferente del aula donde ell@s mism@s exploren ese propicio espacio,
dejándoles un breve tiempo de juego libre y espontáneo para que así desconecten un poco de
las rutinas diarias de clase y descarguen la tensión acumulada que tengan.
Usaré, pues, para el desarrollo de esta sesión, el diseño de un plan de actividades que me
sirvan para conseguir esos objetivos (que más arriba ya he formulado).
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Durante el desarrollo de esta sesión de psicomotricidad, participaré como uno más del grupo
–de forma activa-, implicándome en la dinámica del juego y sirviendo a su vez de modelo
imitado para mis alumn@s en la realización de sus acciones motrices y de movimiento.
En el momento posterior a la sesión, se valoran las actividades realizadas y se hacen cambios
o se introducen variables en función a las necesidades y motivaciones de l@s niñ@s así como
el grado mayor o menor de dificultad que puedan tener para ser realizadas según las edades
de éstos/-as.
Una vez iniciada tal sesión, comenzaré primero llevando a cabo actividades de tipo dirigidas
donde ellos/as traten de imitar los movimientos que yo realice al ritmo de una pieza musical o
canción.
En el proyecto educativo del cual diseño mi programación, durante esa sesión, trabajo el
esquema corporal para que el niño y la niña adquieran conciencia postural sabiendo reconocer
la diferencia entre un cuerpo en movimiento y uno sin movimiento.
Por lo que estas actividades dirigidas se verían representadas mediante juegos como “el
juego de las estatuas”, consistente en jugar a ser estatuas que recobran vida y se mueven al
son de una música, volviendo a ser estatuas de nuevo cuando ya no se oye la música. Nos
podemos mover siguiendo el ritmo de la misma, más rápido o más lento, acompañando el
ritmo de ésta con el movimiento de todas las partes de nuestro cuerpo (cabeza, brazos,
piernas, manos) y realizando diferentes gestos y posiciones mientras cantamos, por ejemplo, la
canción “SON LE CABALIÈRE”, que dice así: Son, son, son les cabalière, iere, iere y si no se
mueven se les seca la armadura y si no se mueven ya no tienen solución. ¡Atención, atención!
la cabeza en posición, on, on, on (bis) y se continúa citando otras partes del cuerpo (brazos,
manos, piernas y pies).
Otra actividad puede ser “el juego del escondite inglés”, que consistiría en decir la frase 1,2,3
al escondite inglés –sin mover las manos ni los pies-. Se trata de que un niño o una niña del
grupo diga esa frase colocándose de espaldas al resto de sus demás compañeros y compañeras
de clase, que intentarán avanzar hasta llegar a la pared en la cual se apoya ese niño o esa niña,
de forma que si el niño o la niña ve alguno/a del grupo moverse (cuando se giren mirando al
grupo que avanza) tendrá que retroceder y situarse en el lugar de inicio.
En este ejercicio se puede introducir la variante siguiente: “Siendo estatuas que están
colocadas en un museo, cuando diga la consigna 1,2,3… éstas cambiarán su posición inicial”.
En dicho ejercicio se puede usar aros para trabajar así el concepto dentro-fuera.
Otra variante en la realización del mismo juego puede ser el uso de un instrumento musical
como, por ejemplo, el pandero. Así nos moveremos al compás de los golpes del pandero,
donde cada golpe marcado indica que los niños y las niñas darán un paso o moverán una parte
de los miembros de su cuerpo (brazos, piernas, cabeza, manos, cintura, flexión de piernas y
brazos). Pero si no hay golpe u otra consigna que yo les indique se quedarán quietos
adoptando la última posición de marcha o postura corporal.
En esa misma sesión se pueden trabajar los movimientos, desplazamientos y recorridos
espaciales, como:
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Recorrer la clase sorteando diversos obstáculos (bancos, sillas, mesas, conos de
goma, cubos, objetos de esponja -con formas geométricas-, aros, picas, ladrillos,
etc.)
Dibujar círculos de distintos colores, saltar con los pies juntos dentro y fuera de
cada uno.
Realizar ejercicios físicos con movimientos rápidos y lentos.
Desplazarse en forma lineal andando de espaldas. Consiste en dibujar líneas
paralelas con tiza blanca en el suelo de la clase para indicar la direccionalidad del
recorrido que señala el camino que el/la niñ@ recorra desde un punto inicial a otro
final.
Caminar con los brazos alzados al ritmo de la música o del sonido de un pandero,
tumbándonos luego al suelo cuando la pieza musical no se escuche.
Elevar el brazo izquierdo, luego el derecho, flexionándolos por el codo, y con
ambos brazos también –a la vez-.
Flexionar y extender las muñecas.
Bajar y subir el cuerpo flexionando y extendiendo las rodillas, siguiendo el ritmo
con palmadas o libremente.
Otro contenido de mi sesión psicomotriz está dirigida a trabajar la percepción espacial
(estructuración del espacio y orientación en el espacio) con ejercicios de posición vertical y
horizontal (de pié y tumbados), así como ejercicios de movimiento y ritmos lentos/rápidos
usando aros, pelotas, y marcando con sonidos musicales las distintas posibilidades de
expresión y lenguaje corporal.
DESARROLLO DE LA SESIÓN:
UNIDAD DIDÁCTICA: ¡Cómo se mueve mi cuerpo!
Nombre de la sesión: Giramos sin parar
FECHA: primera semana de octubre
OBJETIVO DIDÁCTICO: Experimentar formas básicas de giro
CONTENIDO: Los Giros
ACTIVIDADES:
Choca los cinco: En gran grupo l@s niñ@s se desplazan por el gimnasio. Cuando se
crucen entre ell@s se saludarán “chocando los cinco”. Variante: se saludan chocando
el pie, arrodillándose, con un beso o abrazo, con la espalda, con el culo, etc.
¿Quién teme al lobo? En gran grupo, uno hace de lobo preguntando al resto de sus
compañer@s “¿quién teme al lobo?” y todos responden “¡yo no!” cruzando hacia el
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otro extremo de la sala sin que sean pillados por el que hace de lobo. Pero los que sean
cogidos por el lobo se convertirán en sus hijitos lobos que ayudan al papá o la mamá
lobo a cazar más lobitos.
¿Cómo giramos?: En gran grupo, todos caminan por la sala libremente y al dar una
palmada, pitido o toque de un instrumento musical (pandero) realizarán un giro.
Giramos como si fuéramos un trompo, bien con los brazos abiertos, pegados al cuerpo,
con las manos sobre la cabeza o con las piernas abiertas.
Los lápices locos: En una colchoneta deben girar como un lápiz que rueda. Variantes:
Con los brazos estirados, con los ojos cerrados, uniendo los pies con otr@ compañer@ y
girando a la vez.
El trompito: Por pareja, cada uno, con una cuerda cogida por los extremos uno de los
compañer@s empieza a girar sobre sí mismo, enrollándose la cuerda sobre su cuerpo,
el otro sigue sosteniendo la cuerda por un extremo. Cuando su compañero está liado
tira de la cuerda dando el otro vueltas como si fuera un trompo. Variante: se enredan
los dos a la vez, girando hacia la derecha o hacia la izquierda.
DURACIÓN: La duración de la sesión de psicomotricidad no debe ser muy larga (sino más bien
breve), cada juego o actividad debe ser de unos 4 ó 5 minutos, aproximadamente, para que a
l@s alumnos/-as no les resulte pesada ni aburrida, sino todo lo contrario divertida y
motivadora.
Mi CONCLUSIÓN está en resaltar la importancia del juego psicomotor, animando a
compañeros y compañeras maestr@s para que proporcionen a sus alumn@s nuevas
experiencias de aprendizaje.
BIBLIOGRAFÍA:
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
CONDE CAVEDA, J. y VICIANA GARÓFANO, V. (1997): Fundamentos para el
desarrollo de la motricidad en edades tempranas, Ediciones ALJIBE,
Málaga.

GARCÍA, J.A y BERRUEZO, P(1996): Psicomotricidad y Educación Infantil. Ed.
CEPE.

GARCÍA NÚÑEZ, J.A y FERNÁNDEZ VIDAL, E (1999):
psicomotricidad. Ed. CEPE.

LLEIXÀ ARRIBAS, T. La Educación Física de 3 a 8 años (Segundo Ciclo de
Educación Infantil y Ciclo inicial de Enseñanza Primaria), EDITORIAL
Paidotribo, Barcelona.

PINEDA CHACÓN, J. y COLS. (1997): “El cuerpo, habilidades y destrezas”.
EDICIONES Wanceulen, Sevilla.
Juego y
ANEXOS:
FOTOS DE UNA SESIÓN DE PSICOMOTRICIDAD, experiencia real en el aula
de 3-B de tres años de educación infantil en el colegio CEIP. Joaquín Tena
Artigas de Alcolea (Córdoba), NOVIEMBRE 2010.
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