El proceso de escritura

Proyectos IV: Análisis Gráfico
El proceso de escritura
Proyectos IV: Análisis Gráfico / El proceso de escritura
La escritura académica
El proceso de escritura es una de las partes más complejas y delicadas dentro del desarrollo de un proyecto. Es
el punto en el cual tenemos que organizar todas las ideas que hemos comparado y relacionado, y debe acabar
traduciéndose en una visión personal del tema y una aplicación concreta.
Si hemos sido estructurados y tenemos una visión global de todos los conceptos que trabajamos, el ejercicio de
escritura será más sencillo.
Una gran herramienta para poder estructurar la escritura es crear un índice, e incluir en este todos los conceptos según el orden en que nos interesa presentarlo y el discurso que queremos crear. El índice nos permitirá
tener una visión global y estructurada de nuestro trabajo teórico, y se traducirá en un discurso coherente y con
sentido.
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Hay dos puntos importantes cuando comenzamos un proceso de escritura:
El autor situado
El primero es situarnos como autores. Debemos tener claras una serie de cuestiones sobre nuestra propia
posición como autores: desde dónde hablamos, qué queremos decir, cuál es nuestro target... son preguntas
clave que tienen que verse reflejadas de forma coherente, tanto en la parte conceptual como en el desarrollo
práctico del proyecto.
Escribimos para ser leídos
El segundo punto clave es saber que escribimos en todo momento para ser leídos, y que por lo tanto es necesario mantener unos estándares correctos de redacción, tamaño y jerarquía de la información.
Como creadores solemos ser muy conscientes de nuestros propios procesos creativos, y obviamos que el
lector a veces puede no tener una visión tan extensa de un campo concreto.
Nuestra labor en este caso es no dejar cabos sueltos para que la interpretación y comprensión del lector sean
las correctas.
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Fases del proceso de escritura
Por último, los procesos de escritura se articulan en varias fases, principalmente una fase de esbozo, una de
redacción y una de revisión, que puede pasar por varios estadios.
Fase de esbozo
Es aquella en la que recopilamos información a partir de las lecturas realizadas, y comenzamos a organizar las
ideas a partir de notas, comentarios u otras herramientas como las fichas de lectura. Aún siendo una fase relativamente caótica dentro del proceso, es recomendable comenzar a organizar en cierta medida la información en
este primer estadio, ya que será un momento en el que recopilemos una gran cantidad de información que posteriormente podemos olvidar si no hemos ubicado correctamente.
En este caso las fichas de lectura son una herramienta muy recomendable. Una ficha de lectura es un documento en el que anotamos toda la información importante que hemos extraído de un autor u obra, desde citas
interesantes, secciones de texto, conceptos... Siempre daremos la referencia de la página en la que hemos
encontrado la información, y al comienzo de la ficha dejaremos constancia de la citación de esa obra, según el
sistema de citas que vayamos a utilizar. El simple hecho de utilizar una ficha de lectura de forma metódica nos
ayudará a ahorrar numerosas horas de trabajo en el momento de redactar.
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Fase de redacción
Es la parte principal de todo proceso de escritura. Una vez hemos acabado la fase de lectura y tenemos
organizada la información extraída de dicho proceso, la fase de redacción es aquella en la que ponemos en
relación todo lo recopilado con nuestro desarrollo propio del discurso.
Es en esta parte en la que nuestra voz como autor debe quedar patente, y donde lo importante está en utilizar la
voz de otros autores y referentes para potenciar nuestro dicurso propio. La capacidad relacional es indispensable a la hora de conseguir este equilibrio en la creación de un texto.
Fase de revisión
El proceso de revisión es clave para el correcto desarrollo de cualquier texto. De hecho el proceso de escritura
acaba convirtiéndose en una continua reiteración entre las fases de escritura propiamente dicha, y las fases de
revisión.
La revisión de aquello que hemos escrito no es algo que deba llevarse a cabo exclusivamente cuando la totalidad del texto está terminado, sino que es algo que debemos de abordar al terminar cada capítulo o sección,
como única forma de asegurar la coherencia de los contenidos.
Uno de los mejores ejercicios que pueden hacerse es el de ceder el texto a terceras personas que puedan
darnos una opinión sobre su legibilidad, si es más o menos comprensible o si los contenidos están bien expuestos.
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4 consejos para el proceso de escritura
La estructura necesita del caos: la constitución de una estructura clara y definida en un texto, vendrá como
consecuencia de un proceso de desarrollo que normalmente es caótico. No hay que huir del caos, ni tenerle
miedo durante el proceso de escritura, pero hay que tener la capacidad para reordenar ese caos en el texto
final.
El proceso de escritura y el resultado final son interdependientes: normalmente hasta llegar al texto final se
habrá pasado por numerosas fases y correcciones. Cada una de ellas enriquece el resultado.
Ser conscientes de los estados de confusión y de confianza: antes de empezar a escribir, debemos pensar en
que habrá momentos en los que nos encontremos con mucha confianza en nosotros mismos, y otros en los que
nos sintamos confusos y perdidos. Ser conscientes de ambos estados ayuda a no perder el rumbo del proyecto.
Cuatro ojos ven más que dos: tanto para el proceso de escritura, como para cualquier fase del proyecto, siempre es bueno contar con la ayuda y la visión de otras personas.
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