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Seis hombres que lucharon por el régimen
democrático de la Segunda República.
PÚBLICOMADRID14/12/2011 09:07 Actualizado: 14/12/2011 09:31
José Miaja Menant
A pocas horas del golpe, Miaja fue nombrado ministro de la Guerra. Su intención de
pactar para evitar la contienda fue tal que el primero al que llamó para anunciarle su
nombramiento fue al golpista general Mola.
Sebastián Pozas Perea
El general Pozas fue un héroe africanista que se exilió a México en 1940. Allí fue donde
desarrolló su "republicanismo", que cobró más fuerza del comunismo en el que había
militado durante la guerra.
Segismundo Casado
La actividad del coronel Casado López en la guerra consistió en "poner un mínimo de
orden" en las informaciones de todo tipo procedentes de frentes cambiantes e inestables
propios de la contienda.
Toribio Martínez Cabrera
El general de brigada, que durante el primer año de la contienda se convirtió en jefe del
Estado Mayor del Ministerio de Guerra, comenzó su defensa de la República en
Cartagena y la culminó en Madrid.
Domingo Batet Mestres
Considerado por la derecha como un acérrimo enemigo, Betet no concebía la idea de un
Ejército como garante del patriotismo sino como servidor del Gobierno elegido
legítimamente.
Jesús Aranguren Roldán
Oficial de la Guardia Civil desde 1895, Aranguren se refugió en el Consulado de
Panamá tras estallar la guerra. Fue fusilado en 1939 en Barcelona por su lealtad a la
República.
El Ejército Popular de la República y sus mandos profesionales: por qué recordar
en 2011 a veinticinco Generales, Almirantes y Coroneles.- Jesús Aranguren
Roldán. General de Brigada de la Guardia Civil.- José Asensio Torrado. General
de División.- Antonio Azarola Gresillón. Contralmirante.- Domingo Batet Mestres.
General de División.- Miguel Buiza Fernández-Palacios. Almirante habilitado.Antonio Camacho Benítez. Coronel.- Segismundo Casado López. Coronel.-
Manuel Cascón Briega. Coronel.- Antonio Cordón García. General de Brigada.Antonio Escobar Huerta. General de Brigada.- Manuel Estrada Manchón. Coronel.Mariano Gámir Ulibarri. General de Brigada.- Luis González de Ubieta y GonzálezCampillo. Capitán de Corbeta.- Juan Hernández Saravia. General de Brigada.- Emilio
Herrera Linares. General de Brigada.- Ignacio Hidalgo de Cisneros. General de
Brigada.- Francisco Llano de la Encomienda. General de División.- Julio Mangada
Rosenörn. Coronel.- Toribio Martínez Cabrera. General de Brigada.- Leopoldo
Menéndez López. General de Brigada.- José Miaja Menant. Teniente General.- Miguel
Núñez de Prado. General de División.- Ángel Pastor Velasco. Coronel.- Sebastián Pozas
Perea. General de División.- Vicente Rojo Lluch. Teniente General.- Anexos
"Nos vuelven a decir ahora las mismas mentiras
del franquismo"
Javier García Fernández presenta '25 militares de la República'
Que de todas las personalidades que se citan en el libro 25 militares de la República
(Ministerio de Defensa, 2011), siete murieran asesinados por los franquistas, 15 en el
exilio y sólo tres en España tras años de exilio es, según Javier García Fernández
(Madrid, 1949), "una característica muy específica de cómo actuaron los vencedores de
la Guerra Civil".
Precisamente esa actuación y 40 años de dictadura condenaron al olvido a los militares
que se mantuvieron leales en la defensa del marco democrático de la II República.
García Fernández ha reunido sus biografías en un libro en el que han colaborado
historiadores de la talla de Ángel Viñas y militares en activo. Sus principales objetivos:
desechar "el mito" de unas Fuerzas Armadas que se alzaron en bloque contra la
República, y destacar la "profesionalidad" de los oficiales republicanos.
¿Han calculado cuántos militares de la II República se mantuvieron
leales al régimen democrático?
Entre oficiales del Ejército, probablemente la mitad no participó en el golpe. Realmente
pensábamos, por la propaganda de la dictadura, que el Ejército se había levantado en
armas para salvar España. Pero en realidad, el golpe de Estado triunfó allí donde tenían
habilidad para hacer saltar el golpe. ¿En qué se diferencia Sevilla de Madrid? Pues en
que Queipo de Llano fue más audaz o tuvo más inteligencia que Fanjul, que estaba en
Madrid, y que como elemento de la sublevación lo hizo muy mal.
¿Por qué se han decidido por estos 25?
Me he decidido yo. Quería hacer un libro de homenaje a los militares profesionales
republicanos. Tenemos la imagen de que los militares del Ejército republicano eran
unos aficionados. Pero había oficiales profesionales de todos los empleos: de general a
teniente.
¿Hubo factores que provocaron que muchos militares republicanos
cambiaran de mando?
Hubo un porcentaje de ellos que estaban en la zona republicana, y que se pasaron a la
zona rebelde. Pudo ser por pura alineación ideológica, o por situaciones más complejas,
como que tuvieran a la familia en el otro lado. Pero tampoco era fácil pasarse de un lado
a otro. Algunos fueron leales por convencimiento, otros por comodidad, otros por
supervivencia...
¿Hay alguna diferencia de edad entre los oficiales leales y los golpistas?
En materia de generaciones les tocó lo mismo. Cuando Azaña aprueba las leyes de
reforma militar y eso posibilita que muchos oficiales se retiraran de las Fuerzas
Armadas hubo promociones de todas las edades que se retiraron. Sí se puede decir que,
entre la élite golpista, el pequeño grupo de oficiales que prepararon el golpe eran
comandantes, generales y coroneles, es decir, jefes. Pero los hubo a favor y en contra de
la rebelión de todas las edades.
¿La lealtad tuvo que ver con la ideología o se debió más al respeto a la
soberanía nacional?
Fue por su respeto a la legalidad. De estos 25 militares, ¿cuántos en el 36 estaban
afiliados a partidos políticos de izquierdas? Muy pocos, cuatro o cinco. Algunos de
ellos, sobre todo en el empleo de generales, se podían considerar conservadores o
incluso muy católicos, como el general Aranguren, el general Escobar o el propio
general Rojo. Había otros que habían ido evolucionando, como el general Martínez
Cabrera, que se fue aproximando del conservadurismo a un centro izquierda. Pero no
más allá. Aceptaron el régimen establecido.
Ha hablado de la profesionalidad de los militares republicanos. ¿Qué
ocurrió para que finalmente perdieran la Guerra Civil?
Muchas cosas. Un elemento central fue la ayuda en material, armamento y personal que
las potencias fascistas, Alemania e Italia, dieron a los rebeldes. También la no ayuda
que Francia y Reino Unido dieron a la República. Si triunfaron los golpistas fue porque
pudieron consolidar aparatos de guerra muy potentes. Estaban en mejores condiciones
que el Ejército republicano, que fue desestructurado. Además, aunque es verdad que en
el Ejército republicano hubo una represión que desde el punto de vista de hoy en día nos
repugna, esa no fue la represión sistemática y fría del bando golpista.
¿Ha habido un reconocimiento suficiente a los militares republicanos por
parte de la democracia?
Durante mucho tiempo, hasta mediados los noventa, no se planteaba nada. Después, por
parte de las fuerzas más conservadoras ha habido un movimiento para legitimar a los
rebeldes y para poner en cuestión al bando republicano, que era el que representaba la
democracia. Eso ha provocado que en un momento hayan proliferado historiadores y
pseudohistoriadores que han tratado y están tratando de rehabilitar a los rebeldes con los
mismos argumentos y las mismas zafiedades que hacía la biografía de finales de la
guerra. Las mismas patrañas, las mismas mentiras que decían los historiadores
franquistas del 39, otra vez nos las vuelven a decir. Y era necesario decir que había
gente de orden que trataban de mantener el orden de la República, que era un régimen
democrático.
¿No le acusarán de reabrir viejas heridas?
Las heridas se provocaron durante la guerra y después de la guerra. Si alguien en
España no ha querido reconciliarse es el franquismo y la derecha que ha estado con el
franquismo. Ya no se trata de juzgar a los buenos y a los malos. Simplemente de que la
gente tenga la información. No de hacer juicios morales, eso le corresponde a cada uno.
Muchos militares fueron fusilados o tuvieron que exiliarse. ¿Tienen
derecho sus familias a la indemnización?
En el año 77 algunos hijos sí recibieron pensiones o indemnizaciones. Y es que la
represión franquista duró tanto tiempo que en algunos casos no sólo mataba sino que
arruinaba a la gente.
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