Movimientos Literarios Contemporáneos y Periodismo Tema 1: LA ÉPOCA DE LA ILUSTRACIÓN 1700: muerte Carlos II, guerra de Sucesión. Dinastía borbónica (Felipe V). En literatura, el siglo de Oro acaba en 1681 con la muerte de Calderón; el Barroco entra en periodo de agotamiento, hasta 1726, año en el que se publica el primer tomo de Teatro Crítico Universal, de Feijó. Este año supone el comienzo de la Ilustración (Siglo XVIII) en literatura, junto a 1737, cuando ve la luz la Poética de Luzán. Se establece un cambio con respecto al Barroco y surgen dos elementos que se superponen: gusto por lo conocido y deseo de renovación. El fin de esta etapa se da en 1808 (Guerra de Independencia). Los frutos literarios más importantes de la Ilustración llegan al final, con El sí de las niñas (Moratín), estrenada en 1805 y publicada en 1806, aunque fue escrita antes. La prensa en España sigue los modelos extranjeros (Inglaterra, Francia, Países Bajos...). El inicio del XVIII se produce en 1737 con la publicación del Diario de los Literatos de España (1737-1742), de carácter más didáctico que informativo (típico del XVIII). En 1745 comienza el reinado de Fernando VI que dará paso en 1759 al de Carlos III. A partir de entonces van a empezar a brotar gran número de estallidos. El reinado de Carlos III se divide en dos partes: 1. Hasta 1775 las ideas ilustradas son poco conocidas, pero ya hay algunos personajes de renombre como Pablo de Olande, que tuvo mucha importancia por su promoción de traducciones de obras francesas e inglesas. Otro autor importante que intentó combinar la tradición barroca con las ideas ilustradas fue Nicolás Fernández de Moratín. Vicente García de la Huerta escribió La Raquel con el propósito de demostrar que era capaz de escribir una obra trágica clásica que se convirtió en la mejor obra española del siglo XVIII en este estilo. También destacó Ramón de la Cruz, considerado un autor muy castizo y famoso por sus sainetes, que eran adaptaciones de obras italianas. La prensa alcanzó durante este periodo mucha divulgación. Destaca el tipo de periódico llamado “espectador” (parecido al The Spectator inglés), que consistían en ensayos críticos sobre la sociedad y las costumbres. Otro tipo de prensa incluía textos literarios como poesías y no sólo de autores importantes, sino también de los lectores. Entre los escritores de periódicos tenemos a Nifo, que promovió muchos periódicos como el Novelero de los Estrados, que incluía novelas y textos literarios cortos. También incluyó traducciones de autores franceses de la época como Marmontel. Otro autor periodístico importante de la época fue Clavijo y Fajardo con El Pensador. También fue importante El escritor sin título, de Romeo y Tapia. I 2. A partir de 1775 comienza a actuar una 2ª generación. Muchas veces serán los mismos autores con un cambio de estilo. El más importante fue José de Cadalso, autor de las Cartas Marruecas. La primera publicación de Cadalso en prensa se publicó después de su muerte en El Correo de Madrid. Los periódicos van a seguir una periocidad y la obra no sale completa, sino que se publica por entregas. Otros autores son Jovellanos y Tomás de Iriarte, que escriben ya plenamente dentro de las ideas ilustradas. En prensa, esta época es dominada por El Censor, que tenía un estilo parecido a El Pensador, con ensayos, etc... También incluye textos literarios, como algunos de Jovellanos (sátiras en contra de la mala educación de la nobleza) y Meléndez Valdés. Otra publicación periódica importante es el Memorial Literario, que se asemeja a las actuales revistas literarias. Duró hasta 1791, pues se prohibieron todos los periódicos, excepto La Gaceta de Madrid y el Diario de Madrid, periódico de carácter general que fundamentalmente incluía anuncios y pérdidas (joyas, niños...). Siempre que se prohíbe la prensa se permite publicar estos dos. 1788: Muere Carlos III y sube Carlos IV al poder. 1789: Rev. Francesa, que repercute en todos los órdenes. A España le afecta especialmente (Napoleón). 1791: “Cordón sanitario”; se prohíben noticias francesas. En la época de Carlos IV, la literatura de la Ilustración ofrece las obras de mayor calidad. Autores: Meléndez Valdés cultiva todos los géneros poéticos, Álvarez Cienfuegos, Leandro Fernández de Moratín (El sí de las niñas, también gran poeta); otros autores como Quintana serán conocidos también como promotores de un periódico del siglo XIX: el Variedades (1803-1806). Pasados los primeros años desde 1791 se permiten de nuevo publicaciones periódicas (Memorial Literario volvió a surgir). Ambos son muy distintos entre sí: Variedades, tendencias francesas; Memorial Literario más neoclásico, con Moratín, etc... Tipo de circunstancias (libro y prensa): censura gobernativa y censura inquisitorial. Todo texto que iba a la imprenta tenía que pasar por el Consejo de Castilla, que evitaba publicaciones contrarias a la razón, moral, etc... Cuando los censores son más ilustrados ,van aprobando obras que se acercan a la sencillez, etc... Era una censura previa. La Inquisición funciona al contrario: no actúa hasta que hay denuncia, y el lapsus de tiempo puede ser de décadas. Algunas obras nunca se presentaban a la censura, sino que se distribuían mediante copias manuscritas, oralidad... en tertulias literarias, etc... Por eso eran conocidas las Cartas Marruecas, por ejemplo. También ocurría con algunos periódicos( “Los duendes”: El Duende de Palacio, por ejemplo). Por otra parte, los periódicos, cuando eran como El Censor o El Espectador, se encuadernaban como libro años más tarde. II Las dificultades estaban también en la reunión de noticias de otros países y las traducciones literarias (principalmente desde la literatura grecolatina clásica, literatura española anterior – sobre todo Renacimiento s.XVI - y literatura extranjera contemporánea – Francia, Inglaterra e Italia -): Literatura española anterior: el siglo XVIII representa reacción contra el Barroco y se apoyan en el Renacimiento: Fray Luis de León, Cervantes... Literatura extranjera contemporánea: Francia es omnipotente (idioma muy conocido); inglés menos conocido (Cadalso lo conocía). Su influjo va avanzando a lo largo del siglo. Se considera civilización opuesta a la mediterránea, y es una fuente imaginativa importante. Aspectos en poesía: Noches Lúgubres a imitación de Pensamientos Nocturnos de Young; Italia: relaciones en el siglo XVIII muy importantes en España (Carlos III fue rey de Nápoles). Música italiana muy presente en teatros, etc... CLASICISMO El concepto de belleza preside las artes, pero es un concepto de belleza intemporal. Lo que se debe imitar es lo bello de la naturaleza y da igual el tiempo. Lo ideal es el canon de belleza griego. El gusto del espectador no cambia y hay unas normas que garantizan esa perfección. Las normas se atienen a la razón, son fruto de la inteligencia humana. Estas normas se basan en modelos antiguos que han supuesto una cumbre. Una obra valiosa es aquella que imita a los modelos y la labor propia de cada escritor es modelar su propia versión de esos modelos. Se vuelven a formular las mismas obras con los mismos personajes o actualizándolas. Reglas: las tres unidades, decoro (las cosas deben representarse como son), verosimilitud, mantener la finalidad del arte (entretener y enseñar), justicia poética (premiar las buenas acciones y castigar las malas), géneros sin mezclas (tragedia = final trágico; comedia = final feliz), etc... Variantes en el S. XVIII Domina por momentos la razón (Voltaire). Algo más tarde surge otra corriente que se basa en el sentimiento (Rosseau). Son los dos polos por los que se mueve la Ilustración. La sociedad influye en la literatura porque la tendencia de la burguesía es reclamar unos asuntos más cercanos a su estatus (la tragedia), que trataba asuntos concernientes a la realeza. Comienza a acercarse a temas actuales, personas con oficios, del 3º Estado y bastante ajenas a todo tipo de reglas clásicas. En el teatro la separación rígida de comedia y tragedia va a debilitarse. Aparece desde Inglaterra la novela sentimental, drama serio o comedia lacrimosa. Los sucesos son graves en este tipo de obras. Los personajes son serios y cuando todo parece que va a acabar mal, todo se restablece y acaba bien. El espectador, después de llorar abundantemente, acaba riendo. El sentimentalismo y la emoción provienen de un interés por el público, de ver sus reacciones ante la obra. Se busca un efecto educativo, por lo que utilizan un recurso poco natural que es apelar a los sentimientos. De esta forma el III espectador no puede pensar. Lo clásico puro se basa en la observación de la belleza y por tanto la emoción no puede interrumpir esa observación. En la medida en que se introduce ese sentimiento se va alejando de los cánones clásicos. En el S. XVIII se incrementa la curiosidad por otras civilizaciones y pueblos primitivos. Por ejemplo, se empieza a valorar más a Homero frente a Virgilio. Existe la idea de que la civilización saca al hombre de su medio natural y lo transforma. Por ello se cultiva todo lo concerniente a la naturaleza. Los temas giran en torno a regiones desconocidas de América, África, etc... POESÍA ILUSTRADA Características: didactismo, crítica social, humanitarismo, pacifismo, elogio, ciencia, cultura, virtudes cívicas (amistad, filantropía), alejada de metáforas y pasión, con más utilidad moral... Poesía utilitaria: transmisión de ideas ilustradas. Predominio de la razón aunque posteriormente deriva a la faceta emotiva, sentimentalismo (2ª regeneración 1775). Autores: Nicolás Fernández de Moratín: se encuadra en la época de Carlos III. Fue muy conocido por sus poesías. Romances de Madrid, la fiesta de los toros, etc... Tomás de Iriarte: más creativo y de mayor calidad literaria. Compuso algunas comedias: El señorito mimado, La señorita malcriada... Entre sus obras poéticas destacan las Fábulas Literarias: temas clásicos, pero todos satirizaban los vicios literarios de la época (descuidar el estudio, admirar lo extranjero sin conocer lo propio...). Era una poesía cuidada y bien estructurada. El Correo de Madrid cuenta con sus lectores, que mandan textos de opinión sobre temas sociales y no sólo cartas al director. EL ROCOCÓ Es un estilo artístico que también se da en la pintura, la escultura, la arquitectura, la música y la literatura. Recoge aspectos del barroco, pero está configurado dentro de la Ilustración con unos perfiles y características muy definidas respecto a temas, contenidos, etc... Se inserta dentro del sensualismo, un ambiente refinado que quiere entroncar con la antigüedad. Temas pastoriles. Mundo ficticio (lo ideal de la vida). Busca el preciosismo en lo pequeño, lo elegante, los materiales más ricos y exóticos... En el campo literario hay temas festivos: la belleza, la amistad, las fiestas al aire libre, el vino, etc... Enlaza con Grecia y el bucolismo del siglo XVI. Se olvidan de los problemas y de lo trágico de la vida. Estrofas breves, frases exclamativas, uso de diminutivos... Aparece la mitología grecolatina, unos paisajes amables y unas escenas que suelen tener movimiento. José Cadalso: nació en Cádiz. Sus estancias en Francia e Inglaterra repercutieron en su obra. Dejó una obra muy francesa (Cartas Marruecas) IV y otra muy inglesa (Noches Lúgubres) inspirada en los Pensamientos Nocturnos de Young. Meléndez Valdés: nació en la provincia de Badajoz y estudió en Salamanca, donde conoció a Cadalso. Tuvo influencia de Jovellanos, que cambió su orientación rococó a una poesía más comprometida con la Ilustración, aunque no dejó de escribir alguna poesía rococó. Fue profesor de la Universidad de Salamanca y también magistrado. Durante la Guerra de Independencia se vincula a José Bonaparte y en 1814 se exilia a Francia, de donde ya no volvería. La 2ª mitad del reinado de Carlos III se conoce como la época de El Censor; se trata de un periódico de opinión muy notable. Su promotor es un personaje de la Corte: Cañuelo. Todo lo que se incluía, la línea editorial... se decidía en el entorno de la Condesa de Montijo (de ideas renovadoras y críticas, frente al despotismo de Carlos III). Llegó un momento en el que se censuró tanto que no pudo salir a la calle, antes de la prohibición de 1791. El Censor se publicó entre 1781 y 1788. Mientras duró se publicaron discursos (eran la forma de cada número) que censuraban costumbres y el panorama social de la época. Los discursos podían ser ensayos o poemas, éstos últimos con un nuevo estilo literario: poesía filosófica. La poesía filosófica se da entre 1775 y 1788, y predominan los temas serios. Comienza a desarrollarse la poesía seria y sensible, culminación de la poesía ilustrada. Dos vertientes: subjetiva (propia intimidad, naturaleza...) y objetiva, (centrada en la sensibilidad hacia los temas humanitarios y sociales). Se acude a argumentos en los que predomina la “razón del corazón”. Esa carga sensible se refleja en un estilo filosófico. Repercusiones en el estilo: se impregna de efectos emocionales (exclamaciones, palabras forzadas, violentas, arcaicas o modernas, temas actuales...), es decir, todo aquello que haga que el lector se identifique con las ideas del autor. Suelen ser estrofas libres, pero habitualmente se utiliza el endecasílabo blanco (sin rima). A veces se acortan distancias entre géneros (se acercan prosa poética y verso prosaico). EL TEATRO Jovellanos: Quería modernizar la justicia: las penas de los delitos no debían ser tan crueles y desproporcionadas y debían adaptarse a la sociedad (rehabilitación y no penas, etc...). Quería incorporar a la literatura española las nuevas tendencias que rompían con el clasicismo en cuanto que ahora interesaban obras más naturales y reales que se adapten al público. Temas serios acomodados a un estamento medio y que plantearan problemas no generales, sino de una condición social (no de carácter abstracto y universal, sino aplicable a cualquier estrato). Los argumentos iban a ser formulados desde el punto de vista del impacto al espectador. V - El delincuente honrado: En esta tragedia se da la anagnórisis (desencadenamiento de la tragedia al descubrirse un hecho) y la peripecia (cambio paradójico en la suerte el héroe; la mejor tragedia es la que va de bien a mal). Hay final feliz, por lo que el público presupone que no es una tragedia al estilo antiguo. Vicente García de la Huerta: Nació en Zafra (Badajoz), y estudió en Salamanca. Fue académico de la RAE. Vivió varios conflictos y fue al destierro, donde escribió “Raquel”. - “Raquel”: En 1778 se estrena en Madrid, aunque ya lo había hecho en 1775 en Barcelona. Tema: una bella judía es asesinada por los nobles para que Alfonso VIII se desanime y vuelva a ocuparse de la guerra. Esta tragedia está escrita según las reglas clásicas. Se aprecia una obra en clave para los intereses políticos de la Casa de Alba, pues es un intento de avisar a Carlos III para que no le ocurra lo mismo (interpretación política). Es un modelo de tragedia clásica del S. XVIII. Hay pocos personajes, ya que la obra se focaliza en 3 ó 4 de ellos. Tono elevado, importancia de interrogaciones retóricas, etc... Leandro Fernández de Moratín: - “El sí de las niñas”: Ejemplo de comedia de buenas costumbres. Se trata de poner un modelo en escena que no se rechace, que sea modelo de conducta. Trata de la educación en la verdad, que no se presione de tal manera que la voluntad se tuerza por respeto reverencial y se acabe fingiendo. Lección de autenticidad, y también de ceder y buscar la realidad (con el personaje de Don Diego). La comedia tiene todas las características de la comedia neoclásica: hay sentimiento, pero se renuncia a todos los “efectos especiales” que hay en Jovellanos. Lenguaje sencillo y serio, pocos personajes, tiempo limitado, un lugar... A pesar de ser comedia, no hay risa a carcajadas, pues es un tema serio. - “Comedia nueva o Café”: anterior a “El sí de las niñas”. Esta sí es comedia al estilo clásico: enseña costumbres ridiculizando. Ataque al teatro popular. Posibilidades de acción espectacular con texto pobre. La representación llega a la mitad porque el público se revela (en la historia). Tema literario: teatro dentro del teatro. VI Tema 2: SIGLO XIX (I): EL ROMANTICISMO 1798-1800: Hermanos Schlegel; El Ateneo; se sentaron las bases del Romanticismo como movimiento. En 1830 puede considerarse que comienza el Realismo, o por lo menos un movimiento distinto a los postulados de los Schlegel. Hay figuras que enlazan con el Romanticismo: Herder: concepto de pueblo; concepto de belleza distinto al de los preceptos clásicos (poesía popular). Ossiam: poemas imaginativos. Se descubrió que fueron invento de McPherson. Schiller estableció una diferencia entre dos grandes grupos de poesía: - Ingenua: naturaleza contemplada de una manera no problemática. - Sentimental: la que corresponde a la poesía posterior. El mundo se contempla de forma problemática, la vida aparece como un drama. Poesía imperfecta porque no puede captar todos los aspectos de la vida humana. Con los hermanos Schlegel queda separada la Antigüedad de la Modernidad. El mundo antiguo es un ciclo cerrado, luego comienza otro (en el que todavía nos encontramos). Se considera a la Edad Media como una continuidad moral y se rechaza el clasicismo francés en cuanto a intento falso de algo muerto, ya pasado. La creatividad y lo original es fundamental, la imitación ha caducado. Esto lleva a pensar que todos los géneros son válidos, y se da la mezcla de géneros. Coleridge: leyó a Schlegel en Inglaterra. En Italia se creó el Círculo de Milán, muy importante. Hay una conexión entre Inglaterra, Alemania y el resto de Europa. En Francia se va difundiendo entre 1820 y 1830. En España en 1814 se difunden en prensa los escritos de Schlegel. En 1830 el Romanticismo se considera asimilado en toda Europa. F. Schlegel va a publicar revistas como El Europeo, en 1805. ROMANTICISMO En España se fomenta primero el espíritu nacional y luego las regiones; en Italia y Alemania se utiliza la idea de unidad, mientras que en Polonia es la independencia de Rusia. El Romanticismo y sus ideas irán cambiando a lo largo del tiempo. En un primer periodo es un movimiento conservador, pero irá cambiando hacia un liberalismo al que, por ejemplo, los Schlegel eran contrarios. Hereda una Europa marcada por la Revolución Francesa y Napoleón, y por eso al principio es conservador. Tratan de construir algo positivo que buscan en lo propio, lo autóctono. Se intenta romper con una retórica o principios propios del clasicismo. Se propician campos de inteligencia como la imaginación para captar la realidad, en una profundización a la que no llega la razón de la Restauración o el clasicismo. Se olvidan los preceptos de otras épocas para crear unos propios VII de la literatura moderna regidos por la belleza, la intuición, la imaginación, etc... No hay reglas previas. Se van a ir creando nuevos géneros y también se recuperan elementos que el racionalismo descartaba (lo autóctono y lo original rompe con la teoría de la imitación racionalista). Todas las ciencias que tienen que ver con la Historia alcanzan un gran desarrollo porque interesan por esa originalidad y por la continuidad que supone la búsqueda de lo propio a través del tiempo. En el Romanticismo se hace hincapié en el devenir, en lo original y propio, sin las limitaciones del clasicismo, se potencian otras formas de captar la realidad (imaginación, intuición, etc...). Se construye un planteamiento por oposición a la tradición clásica grecolatina que tiene su comienzo en la Edad Media y llega hasta su época. Se rechaza el clasicismo francés al considerarlo falso y cualquier intento de recuperar la cultura grecolatina fuera de su ámbito, ya que la consideran como pasada y finalizada. Frente a la visión externa del hombre y de la naturaleza (lo que le interesaba al clasicismo) se busca una mirada al interior (problemas, pensamientos...). Se busca la belleza fuera de un arte útil (considerada como el objeto propio del arte). El arte en el Romanticismo potenciará la dimensión simbólica para representar cosas que no son posibles de representar desde el realismo. Algunos ejemplos son la muerte, el fracaso, etc... El Romanticismo, por ello, está lleno de símbolos. Se cultiva la idea de que este mundo es limitado y la realización de los deseos ilimitados se hará en otro mundo (concepción abierta), y por ello se explican algunas cosas únicamente de forma simbólica. Se potencia el intimismo, subjetivismo, sueños, etc..., pero también se busca lo vivo y lo concreto, por lo que se habla de un realismo romántico que trata de poner en relieve las contradicciones de la vida (ej: bello-feo; muerte-vida). Se atiende a las tradiciones y el gusto por la Historia para revivir las épocas pasadas. Se trata de recuperar libros de la Edad Media, las vestimentas antiguas para el teatro, etc... Hay un costumbrismo romántico que se hace realidad en la recuperación de costumbres (texto e imagen). El cosmopolitismo del XVIII llevó a la literatura de viajes debido al universalismo, mientras que en el Romanticismo se llega a este tipo de literatura para conocer lo propio y las costumbres, pero de otros. Libertad en planteamientos estéticos, nuevos géneros literarios y experimentación con ellos, buscando el colorismo; la sonoridad o el intimismo son otras características románticas. Se tiene también un gusto por lo exótico. En 1808 hay un cambio por la Guerra de Independencia; hay mucha prensa, pero siempre polarizada en los dos bandos. 1814 (Fernando VII): Martínez de la Rosa escribe en Cádiz una tragedia, “La Viuda de Padilla”, con estructura clásica y estilo patriota. VIII Hay autores nacidos en el último tercio del siglo XVIII (hacia 1785) que ya no son ilustrados al estilo tradicional, pero sus estilos todavía tienen esquemas clasicistas: Martínez de la Rosa (1787-1862): su vida es un ejemplo de tener un papel activo en la guerra, como Ángel Saavedra, J.J. Mora, etc... Esta época, hasta 1820 (poco destacado por prohibiciones, etc...) tiene un gran número de traducciones, algunas de ellas plenamente románticas. Bölh de Faber (1770-1836) publica en 1814 en el Mercurio Gaditano unos fragmentos de unas conferencias de Schegel en las que se alaba a Calderón. J.J. Mora respondió de manera agresiva diciendo que sus teorías (sustituir poética clásica por nuevas modas) eran subversivas. Esa polémica se desarrolló en los años siguientes al publicar Mora desde 1817 una revista llamada “Crónica científica y literaria”, con posiciones a favor y en contra del Romanticismo. Dura hasta 1820, cuando un nuevo periódico de agitación política rompe con el discurso cultural; de nuevo publicaciones políticas, hasta 1823. Entonces, de nuevo absolutismo (Fernando VII) y se abre un nuevo periodo en las letras y el periodismo: carácter cultural minoritario, sólo en revistas especializadas literarias. Solamente El Censor (uno nuevo, no el de antes), con carácter ilustrado, tenía interés cultural. Alberto Lista era el autor más destacado de El Censor. Se puede decir que el Romanticismo en ese trienio (1820-1823: trienio liberal) no fue muy favorecido, pues se reponían obras prohibidas en la época anterior (como “La Viuda de Padilla”). 1823: de nuevo Restauración, hasta 1833. Periodo conocido como la Década Ominosa. En 1829, Fernando VII se casa por cuarta vez, lo que sensibiliza la situación. Fernando VII considera enemigos no sólo a los liberales, sino también a un nuevo partido conservador (lo que luego sería el carlismo), por lo que flexibiliza su postura hacia los liberales. Dos aspectos en este periodo: exilio muy importante a partir de 1823, por lo que hay que seguir el desarrollo literario dentro y fuera de España: Dentro de España: finales 23-24, El Europeo; dura mientras Barcelona está protegida por tropas francesas. Es un periódico que promueve la concordia, favorable al Romanticismo (seguía ideas de Faber). Está escrito por jóvenes catalanes y promovido por emigrantes italianos, como Monteggia. Formaban el Círculo de Milán, y huían desde 1816, promoviendo el Romanticismo. Esto hace que el litoral se convierta en un foco importante del Romanticismo, junto a Madrid. En Madrid, de nuevo prohibición de periódicos; sin embargo, en 1827 la vida literaria aparece cada vez con más noticias del Romanticismo (no en publicaciones periódicas, pero sí en tertulias literarias, discursos teóricos, etc...). Ya en 1828 Larra empieza a publicar alguna de sus obras periodísticas, como El Duende Satírico del Día (periódico unipersonal). Comienza a hablarse de W. Scott y Lord Byron. IX Fuera de España: - Inglaterra: José Joaquín de Mora es favorable al Romanticismo y traduce obras. Es el momento de Walter Scott. - Francia: Martínez de la Rosa estrena en 1830 en París el drama romántico “Abén Humeya”, y también escribe “La conjuración de Venecia”, que permanece sin representar hasta su estreno en España. Ángel Saavedra también está exiliado allí, y escribió “Don Álvaro o la fuerza del sino”. 1833: Muere Fernando VII. Se unen trayectorias de dentro y fuera de España y se desarrolla hasta la mayoría de edad de Isabel II la década de mayor esplendor del Romanticismo, marcada por el teatro y las publicaciones periódicas: Teatro: se suceden una serie de estrenos que renuevan el panorama teatral y que son ejemplo de los diferentes romanticismos que empiezan a convivir. Hasta ahora Romanticismo histórico (“La conjuración de Venecia”, estrenada en 1834), ahora también liberal o frenético (1835, “Don Álvaro...”, que ya rompe totalmente con la estética clasicista); enseguida confluyen. Todos estos dramas dependen de un Romanticismo exagerado como el de Víctor Hugo. 1836: “El Trovador” de Gutiérrez plantea temas característicos del Romanticismo (gitana, hogueras, lucha de la nobleza...). Es un drama exagerado y confuso, pero lleno de belleza. 1837 y siguientes: hay una menor exageración. “Los amantes de Teruel”, de Hartzenbusch, es la más destacada. Frente a exageración, vuelta a la contención, pero muy romántico (los protagonistas mueren de amor). 1843: época moderada. Destacan dramas de Zorrilla, como “Don Juan Tenorio” (1844). Algunos autores ven aquí una confluencia de los diversos romanticismos. En 1844 también llega la mejor novela histórica española: “El señor de Bembibre”, de Gil de Carrasco. Prensa: se publica más literatura en prensa que en libros. Las narraciones breves y la lírica se dan a conocer en revistas literarias. Poesía: para publicar un libro de poemas hay que llegar a 1840, cuando se publica un libro que recopila poemas publicados. Hay poca tradición en España de publicar libros de relatos en esos momentos. Estas publicaciones son fundamentales para conocer el desarrollo del Romanticismo español y cómo penetra el Romanticismo extranjero en España (se editan cuentos). 1844: siguen publicándose obras románticas, pero ya con declive. La Historia interesa mucho menos y pasa a la sub-literatura (folletín, etc...). Lo que interesa son costumbres contemporáneas, todavía desde óptica romántica. Al caer el interés por la reconstrucción histórica se ven costumbres contemporáneas. X Fernán Caballero (pseudónimo de la hija de Faber) publica “La Gaviota” en 1849, y supone un éxito. Para algunos autores, el Romanticismo se prolonga hasta fechas muy avanzadas del siglo, hasta 1870 (es evidente que ya no se puede hablar de romanticismo). Galdós publica sus primeras novelas, como “La fontana de oro” (1870), en la que hay una toma de postura de separación con el Romanticismo. En 1870 también muere Bécquer. En 1868, Isabel II es destronada. 1857: “Museo Universal”, periódico que ya es realista. PRENSA ROMÁNTICA “El Europeo”: editado por Cook, Aribau, Monteggia, López Soler y Galli. “El Artista” (1835-1836): sus promotores eran Eugenio de Ochoa y Federico de Madrazo. Es la mejor del Romanticismo español. Los dos autores habían estado es París; Ochoa estaba más dedicado a las letras, Madrazo era pintor (además famosísimo). Era revista de letras y de todas las artes, y surge a imitación de una revista francesa del mismo nombre. Tenía litografías que eran auténticas obras de arte. Aparecían retratos de escritores del Siglo de Oro o contemporáneos (ej: Duque de Rivas). En 1850 la gente buscaba ejemplares de El Artista. Aparecen los dos tipos de Romanticismo. Su visión era negativa (desterrar el clasicismo anterior) y positiva (fomentar el Romanticismo). Espronceda publicó aquí sus primeras obras. Sus portadas mezclan la fantasía propia del Romanticismo con elementos medievales góticos. Tono humorístico en los artículos (típico de la época). “Semanario Pintoresco Español”: nace en 1836, promovido por Mesonero Romanos, que acababa de llegar de Europa. Se caracteriza no por hacer una obra muy buena, sino por ser una revista asequible para que la compre la gente. Su primera época, dirigida por Mesonero Romanos (desde 1836 a 1842), tendía al costumbrismo, pero no dejaba de publicar poemas sumamente románticos. En 1840 el panorama entorno al Romanticismo ya había cambiado (aceptado plenamente). POESÍA ROMÁNTICA Dos vertientes: - Lírica: de expresión de los propios sentimientos. Aprecia la belleza, la imaginación... A veces trata aspectos políticos. En España se cultiva poco el lirismo subjetivo en el Romanticismo. - Narrativa: poemas narrativos cuyo objeto es descubrir leyendas, temas caballerescos, ensueños... La versificación y los aspectos formales de la poesía son muy importantes porque muestran la originalidad, variedad y riqueza en la polimetría, sin trabas ni normas. Lenguaje más directo para la expresión de la realidad. La mitología grecolatina aparece aún, pero les parece algo muy frío; aparece otra mitología romántica (como la de la Edad Media). Hay también ocasionalmente mitología nórdica. XI “La canción del pirata” (Espronceda): el símbolo del pirata es la libertad absoluta: preferir vivir con riesgos, pero no sujetarse a la propia ambición y avaricia. El capitán pirata tiene ese prestigio de independencia y del orientalismo. Está clara la libertad métrica, combina el estribillo con las estrofas que desarrollan el tema. Rima muy marcada, aguda, metros muy musicales y ligeros. Enrique Gil y Carrasco (1815-1846): nacido en El Bierzo (León). Su obra está ubicada en su propia tierra. Autor que ha sabido captar el sentido de la naturaleza con el sentimiento del Romanticismo. Su obra tiene muchas facetas, como la literaria intimista que refleja en su poesía y en su novela “El señor de Bembibre”. Además, participó en la prensa con muchas colaboraciones; algunas de ellas se refieren a la descripción de tipos y costumbres de distintas regiones (no con carácter satírico, sino antropológico). Esa sección de tipos y costumbres del Semanario Pintoresco está encabezada por un grabado donde aparecen personajes con traje regional. También es conocido por su crítica literaria y reseñas de estrenos dramáticos. Espronceda fue quien le dio a conocer en Madrid en una reunión del liceo. “El cautivo” es un poema lírico. Narra la historia de un prisionero en tierras arábigas, cabe entender que en las Cruzadas. Lo importante es la expresión de los sentimientos (más que la narración de la historia) y la reflexión de temas como la libertad, el destino, el paso del tiempo, etc... Es un romance. Después cambia el sonido de la rima (al cambiar de tema). El cierre final conecta con el comienzo. Hay polimetría, gusto por la variación, sin miedo a la consonancia. Debajo hay un grabado, tal como figura en el Semanario Pintoresco. En el texto hay notas muy propias del Siglo de Oro (la noche callada, el ruiseñor...). No es una poesía abstracta (expresa el sentimiento mediante imágenes que representan la pérdida del tiempo al no poder vivir en libertad), pero tampoco es racional. “Un Castellano leal”, de Ángel Saavedra (Duque de Rivas): leyenda histórica. Es un romance dividido en distintos romances que forman la narración del hecho concreto caballeresco, noble y patriótico. El Duque de Rivas aprovecha para hacer una síntesis de España. También era pintor (en el incendio final se ve imagen de humo, etc...). TEATRO ROMÁNTICO El primer drama romántico que se estrenó en España fue “La conjuración de Venecia” (1834), de Martínez de la Rosa, que regresaba de París y aceptaba los principios básicos del liberalismo (hasta 1837, cuando ganaron los liberales más exaltados). Está en prosa y el tema es europeo, muy propio de Shakespeare. Es un tema y una forma que pronto dejó el XII Romanticismo español de lado: pronto se pasó al verso para temas dramáticos, debido al gusto por sonoridad y musicalidad. También se prefería el verso porque el drama romántico tenía como fondo de origen la comedia española del Siglo de Oro, que era versificada. El tema de Venecia llevaba consigo la posibilidad de puesta en escena muy brillante (disfraces carnaval, paisaje con canales, etc...). Tema de la rebelión y tema privado de los esposos. Escena de amor y muerte, se expresan sentimientos en la cripta de la familia de la joven (Laura). El 1º Acto podía ser muy discursivo, pero la puesta en escena era en cambio animadísima. Tema de libertad, de amor, de inocencia perseguida; el 2º Acto cambia la escena, se pasa a presentar la trama privada de los esposos que se encontraban escondidos en la cripta; el 3º Acto es en un ambiente familiar; 4º Acto: escena del triunfo y fracaso de la conjuración. Ecos de la literatura medieval española y europea; 5º Acto: ambiente lúgubre, muy negro y sombrío, de represión. Se produce una anagnórisis. El drama romántico es una tragedia distinta de la clásica. Cuando Larra asistió al estreno de la obra hizo una reseña entusiasmado. El siguiente drama romántico que se estrena en España es “Don Álvaro o la fuerza del sino” (1835), del Duque de Rivas. Ya no se emplean unidades de lugar y tiempo, y se mezclan prosa y verso. En verso estamos en el trasfondo del Siglo de Oro. Obra también de gran éxito y final conmocionante para la época: todo el mundo muere al final. El hecho fortuito de que Don Álvaro mate al padre de su amada conlleva la venganza de los hermanos de la dama. Triunfo del drama centrado en la Historia de España, con conexiones simbólicas del Don Juan de Tirso de Molina. XIII