Paralelismos del Lenguaje Arq. Verónica Rodríguez Lenguaje verbal / Sistema Gráfico. El lenguaje es por definición un sistema simbólico. Es una instancia de ausencia en un fondo de presencia, y de presencia en un fondo de ausencia. El lenguaje permite a través de algo evocar otra cosa en su ausencia. Esta característica condiciona anticipadamente la evocación de la cosa. La capacidad de representación del los sistemas simbólicos es el eje de coincidencia analítico que desarrollaremos en la comparación del lenguaje verbal y gráfico; sin olvidar que el lenguaje verbal es el paradigma del orden simbólico. Por lo tanto podríamos decir que bajo esta óptica el lenguaje verbal y el gráfico tendrían una raíz común, aunque fuera arriesgado hablar de lenguaje y fuera un simple sistema de significación. Para abordar el estudio del lenguaje la lingüística ha distinguido dos posibles constituyentes, a saber: LENGUA y HABLA. La lengua puede ser entendida como el conjunto de reglas en que se basa el hablante, la estructura o el sistema; y el habla como el acto individual a través del cual el hablante usa la lengua y se comunica, es decir el ejercicio permanente de dicha estructura. Si mantenemos este enfoque y analizamos el lenguaje gráfico también podemos reconocer dos componentes que podríamos denominar SISTEMA GRÁFICO y REPRESENTACIÓN. En el sitema gráfico, al igual que en la lengua encontramos unidades mínimas (recta, punto, plano) y reglas específicas de combinación. Sin embargo a diferencia del lenguaje verbal para el lenguaje gráfico existe un metalenguaje o sistema de referencia que determina la lógica de las reglas de combinación. El metalenguaje de referencia es la matemática, especificamente la geometría proyectiva que estudia las propiedades gráficas de las formas geométricas, que a su vez son el resultado de la combinación de tres elementos fundamentales: punto, recta y plano. Los axiomas o postulados que se establecen entre estos elementos constituyen los cimientos de la geometría proyectiva. Es esta ciencia derivada de la matemática la que sienta las bases para todos los sistemas de representación gráfica. Si hacemos ahora un análisis comparativo entre habla y representación gráfica, podemos verificar una gran diferencia, en la representación gráfica hay un claro referente que es el objeto, y en el caso particular de este análisis hablaremos del referente arquitectónico. Teniendo claro los conceptos que hemos establecido para los términos de sistema gráfico y de representación, podemos ahondar directamente en cada uno de ellos, dentro del marco de la enseñanza de la materia. En la dialéctica presentada donde el Sistema Gráfico es la estructura que permite desarrollar la Representación, y el permanente ejercicio de la Representación es lo que permite ahondar y perfeccionar el Sistema Gráfico, es en donde encuadramos la estrategia que hemos adoptado para la enseñanza de esta materia. Dentro de un extenso plan de labor como el que tiene la carrera de arquitectura, y donde el lenguaje gráfico es el sustento de cualquier otro aprendizaje en distintos estadios de la carrera, se hace imprescindible tomar conciencia de la responsabilidad y seriedad con la que debemos encarar la materia y su enseñanza. La representación gráfica en cualquiera de sus sistemas, representa a la arquitectura en toda su complejidad y extensión. Sin embargo la utilización del lenguaje gráfico no solo nos permite representar al objeto, con las características que éste presenta, a la manera de una fotografía, sino que permite el análisis y el conocimiento de sus partes, de su estructura, de su composición, de sus formas, de sus materiales, de su escala, de su espacialidad, del sin fin de elementos que contenga la mirada aguda y pertinentemente dirigida del observador de este objeto. Por eso el desarrollo de la representación, una vez aprendidos los sistemas gráficos, se plantea claramente como una herramienta de estudio de los objetos arquitectónicos que nos preceden, como también el único hilván que permite conectar el proyecto a la realidad. La representación gráfica nos posibilita de esta manera visualizar y por lo tanto analizar ya no sólo desde los sistemas de combinatorias propios de la estructura de los sistemas gráficos, es decir, del Dibujo como un primer estadio de este aprendizaje; sino que apunta directamente al pensamiento, desarrollo y producción de la arquitectura. En esta instancia del análisis, donde el lenguaje gráfico ha sido desmenuzado, cabe aclarar que la arquitectura en sí misma tiene su propio lenguaje, porque podemos individualizar unidades mínimas, reglas específicas de combinación, conformando de esta manera la estructura, propia de este lenguaje que a su vez puede ramificarse en cada uno de los diferentes enfoques propios de la complejidad de la arquitectura, es decir, desde su estructura, su construcción, composición, morfología, escala, y así con cada uno de los temas que el arquitecto sea capás de ahondar en su proyecto. Si aceptamos como posible el paralelismo entre lenguaje gráfico y lenguaje de arquitectura, podríamos establecer que una vez conocidos sus sistemas básicos conformados por unidades mínimas y reglas específicas para su combinación, existe en los dos casos la producción en sí misma tanto de un objeto gráfico, como de un objeto arquitectónico. Dibujar arquitectura no es la mera representación planteada anteriormente. La personal combinación del lenguaje gráfico nos permite brindar intencionadamente infinitas imágenes con una visión particular y única del objeto representado. Análogamente el proyecto arquitectónico tampoco es la simple utilización de los sistemas estructurales, constructivos, morfológicos o funcionales. Dado que el fin último del arquitecto es la producción de arquitectura y habiendo planteado un paralelismo entre ambos lenguajes, cabe considerar como posible que el conocimiento del lenguaje gráfico en su total envergadura, sirva como sólida base para el desarrollo del pensamiento abstracto y por lo tanto, de la producción arquitectónica. Esto puede fundamentarse en que el metacódigo en el que se basa la estructura del lenguaje gráfico, como ya dijimos, es la matemática. Por lo tanto cuanto más internalizado, comprendido y desarrollados estén los sistemas gráficos , como un paso de acercamiento al pensamiento abstracto; mayor posibilidad existe de poder representar, ya no sólo la realidad, sino el infinito campo de las ideas, que podrán alimentar y dar forma al proyecto.