Campo-Alange, se hizo lo mismo con la Escuela de Química de

Campo-Alange, se hizo lo mismo c o n la Escuela de Química
de Segovia, enviándosele 3 8 muestras de los minerales
más c o m u n e s , e s c o g i d o s por Pedro Chenard.
Casi al mismo tiempo que salían aquéllas del Gabinete,
entraba en éste una remesa muy abundante de productos
marinos, preparada en Mallorca por el incansable Vilella y
acompañada de extensa nota. Dábanse en ésta curiosos
detalles acerca del procedimiento para preparar los p e c e s ,
curtiendo sus pieles mediante un preservativo confeccionado c o n p o l v o s de tabaco del Brasil, pimienta, alumbre
calcinado y alcanfor, y se añadían curiosos datos relativos
a cada uno de los ejemplares que formaban el envío, constituido por p e c e s , entre éstos la «Flamola» de los mallorquines; crustáceos, c o m o el «Crancho pepelut»; erizos de
mar «bogamarins»; rama de coral rojo y también de color
carmesí, « c o m o el que estoy trabajando en el consabido
aderezo para la Reina Nuestra Señora» dice Vilella, y por
último, buen número de moluscos, gorgonias, esponjas, etcétera, etc.
C o m o se vé, el colector mallorquín se anticipó casi un
siglo a los modernos «Acuarios» o «Institutos de Biología
Marina» en la pesca y preparación de los objetos m e n c i o nados. El total del importe de este envío ascendió a 2 . 5 9 5
reales de vellón.
Sin embargo, y a pesar del aparente celo y entusiasmo
de Vilella, el envío causó en Clavijo una impresión desagradable; « n o p u e d o dejar de decir a V . E. (el C o n d e de
Floridablanca), exclamaba aquél en su informe, que m e ha
causado sentimiento y aun indignación el que, después de
la prevención hecha al mismo Vilella de no remitir a este
Museo sino producciones raras o que falten en él, haya enviado una remesa de c o s a s las más triviales, que forzosamente han de quedar arrinconadas». Estas frases demuestran claramente que por aquellas fechas era rico ya el
Gabinete en material de la fauna marina, al menos en sentir
de Clavijo. Por otra parte, previene al Ministro advirtiéndole que Vilella y otros m u c h o s , bajo la capa de interés
por el M u s e o , lo que buscaban era especular a costa del