“Workshop on the Dynamics of Prices and Wages”1. Microeconomic Evidence of Nominal Wage Rigidity in Chile. El taller presenta evidencia macroeconómica sobre el grado de rigidez salarial nominal a la baja en Chile y explora sus consecuencias en términos de empleo. Los resultados, por un lado, indican un bajo nivel de flexibilidad salarial y, por otro, se relacionan con los determinantes de la rigidez salarial, señalando que el grado de flexibilidad depende inversamente del tamaño de la empresa, de la cantidad de mujeres trabajadoras, de la edad de los trabajadores y de la participación de trabajadores calificados a nivel de empresa. Finalmente el estudio indica que una consecuencia directa de la rigidez salarial, es consecuencia de una mayor fluctuación del empleo, a lo largo de los ciclos económicos. I. Antecedentes Generales La idea de conocer y profundizar sobre los determinantes de la rigidez salarial en Chile no es nueva y, actualmente, producto de la crisis global, son muchas las voces que claman por flexibilizar los salarios a objeto de reducir los altos costos de salida de muchas empresa que, en estos tiempos, deben replantearse su estrategia de vida en el corto, mediano y largo plazo. La rigidez de los salarios en Chile, nace de dos temas relacionados con la evolución del salario medio real por hora y el salario mínimo real2. Con base en esta conclusión se han desarrollado 3 propuestas de política diferentes: algunos economistas proponen la baja del salario mínimo, otros la introducción de un salario mínimo específico para jóvenes entre 18 y 24 años de nivel inferior al general y, finalmente, otros proponen la introducción de un componente variable de las remuneraciones a partir de salarios participativos. II. Marcus Cobb A través del taller sobre la Dinámica de Precios y Salarios, patrocinado por el Banco Central de Chile, el señor Marcus Cobb3 expuso sobre la “Evidencia Macroeconómica de la Rigidez de Salarios Nominales en Chile”. 1 Biblioteca del Congreso Nacional “La Rigidez de los Salarios en Chile”, autor Sr. Andrés Marinakis, Santiago, Noviembre de 2005, pág. 2. Ver www.oitchile.cl. 3 Marcus Cobb División de Estudios del Banco Central de Chile. 2 2 El señor Cobb indica que la idea del documento de trabajo4, tiene por finalidad “caracterizar el grado de rigidez salarial en Chile” y de “identificar los distintos determinantes del comportamiento de los salarios”. Para tal efecto utilizó datos de 440 mil historias de salarios para el período diciembre de 2001 a diciembre de 2007, utilizando una micro base de datos de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS)5, que contiene información detallada de trabajadores de distintas empresas, relacionada con remuneraciones imponibles, sexo, edad y a que empresa pertenecen, la cual corresponde a un sector industrial determinado, tal como agricultura, minería, manufactura, construcción, electricidad, gas y agua; comercio, transporte y servicios. Los datos fueron incorporados a un modelo econométrico de detección de cambios estructurales desarrollado por Bai y Perron (2003), cuyo enfoque ha sido aplicado para el mercado laboral en los Estados Unidos por Gottschalk (2005), y se basa en el supuesto de que el salario nominal cambian de una manera discreta. El principal resultado obtenido es que Chile muestra, relativamente, un grado bajo de flexibilidad salarial. La duración promedio de tiempo que debería tomar a la economía, como un todo, ajustar sus salarios, está por sobre los nueve trimestres, con algunas diferencias entre sectores económicos. La estimación econométrica de los determinantes del grado de rigidez salarial a la baja muestra que esta depende inversamente del tamaño de la empresa, del porcentaje de mujeres trabajadoras, de la edad de los trabajadores y de la participación de trabajadores calificados a nivel de empresa. El impacto del grado de rigidez salarial a la baja sobre el empleo es una contracción alta del empleo durante períodos económicos depresivos y, en general, una alto comovimiento con los ciclos económicos. En otras palabras, las empresas usan el empleo para compensar la inflexibilidad salarial. El experto, finalmente, concluye que la frecuencia y magnitud de los ajustes salariales muestra algunas diferencias en los diferentes sectores económicos. En particular, los sectores de la construcción y servicios muestran una frecuencia relativa mayor, mientras que el sector manufacturero tendría la frecuencia más baja. Sin embargo la frecuencia de reducción salarial no varía significativamente entre sectores económicos, con la excepción del sector construcción, el cual virtualmente dobla la estimación de frecuencia en otros sectores. Esto podría reflejar el hecho de que las actividades de construcción están dominadas por proyectos temporales. 4 Documento de Trabajo N°496, Banco Central de Chile. La Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) es una corporación privada sin fines de lucro que otorga cobertura total a los siniestros por accidentes laborales y que desarrolla programas de prevención de riesgos en Chile. Los trabajadores afiliados a la ACHS corresponden al 35%, aproximadamente, del total de trabajadores asalariados. 5 3 El análisis econométrico de los determinantes de la rigidez salarial nominal a la baja indica que tanto las características del empleado, como las características de las empresas, son relevantes. Con respecto a las características del trabajador, empresas con alta concentración de mujeres, jóvenes y trabajadores no especializados enfrentaran un bajo grado de flexibilidad laboral y viceversa. Por el lado de las empresas, las pequeñas y medianas muestran un grado más bajo de flexibilidad a la baja, lo cual podría ser explicado por regímenes de pagos más complejos en empresas grandes. Finalmente, sobre las consecuencias de la rigidez hacia la baja, las estimaciones detectadas por el estudio indican que el grado de rigidez salarial tiene fluctuaciones más altas de empleo como contrapartida. Este tipo de efectos es especialmente relevante cuando la actividad está creciendo, por debajo del promedio histórico. En efecto, si el crecimiento fue menos de un 1% del promedio, el empleo decrecería 0,35% y en el caso extremo de cero flexibilidad, este decrecería 0,20% si la empresa tuvo un alto grado de flexibilidad.