La familia tiene que aprender a defenderse. Encuentro Diocesano

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La familia tiene que aprender a defenderse. Encuentro Diocesano de Familias en el
Colegio
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El principal problema de la familia en España es la educación y su solución se encuentra en esa misma familia, por derecho
propio y adquirido. Propio porque “lo que a mí me autoriza a educar según mis convicciones a mis hijos es porque les
quiero” afirma el Director General del Foro Español de la Familia, Ignacio García-Juliá. Adquirido porque “los poderes
públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de
acuerdo con sus propias convicciones”, legisla el artículo 27.3 de la Constitución Española.
Las causas que han provocado el grave deterioro de la educación en nuestro país han sido dos: las leyes ideológicas
aprobadas en los últimos años y, la falta de formación de las familias para refutar con valentía esas ideologías impuestas. Se
trata de los grandes “Desafíos para la Familia en el siglo XXI”, título de la conferencia ofrecida por Ignacio García-Juliá en el
“Encuentro Diocesano de Familias” organizado por el Secretariado Familia y Vida de la Diócesis Orihuela-Alicante y
celebrado en el Colegio Diocesano Santo Domingo de Orihuela.
Las citadas leyes ideológicas están educando a la sociedad en el hedonismo, convirtiendo al ciudadano en un ser egoísta
preocupado sólo en adquirir placer. El agente encargado de erradicar esta doctrina filosófica es la familia, ya que “el primer
núcleo de transmisión de nuestros valores es el hogar”, recuerda el Director General del Foro Español de la Familia quien
afirma que el éxito de este reto se logrará “formándonos, diciéndolo y actuando” porque nuestros hijos no están a salvo sólo
con la educación que les damos en el entorno familiar.
La Ley Orgánica 2/2010, de 3 de marzo, de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo es
nefasta para la sociedad, sobre todo los artículos 5 y 8 analiza Ignacio García-Juliá.
Artículo 5. Objetivos de la actuación de los poderes públicos.
1. Los poderes públicos en el desarrollo de sus políticas sanitarias, educativas y sociales garantizarán:
a) La información y la educación afectivo sexual y reproductiva en los contenidos formales del sistema educativo.
La presente ley obliga al mundo educativo a impartir una asignatura con una “determinada visión de la sexualidad”,
negando a los padres su derecho constitucional de educar a sus hijos según sus convicciones. En este artículo se impone a
los centros académicos enseñar sexualidad desde el punto de vista de la “anticoncepción y sexo seguro que prevenga, tanto
las enfermedades e infecciones de transmisión sexual, como los embarazos no deseados”, recoge el artículo 5.f de la Ley
Orgánica 2/2010. En este apartado Ignacio García-Juliá recuerda las palabras de Juan Pablo II: “Las ideas se proponen, no se
imponen”.
En este artículo se anuncia una de las ideas que desde la política se está vendiendo a la sociedad: el sexo seguro. Sin
embargo, esta idea va en contra de la realidad ya que se trata de una falacia. El Centro Coordinador de Enfermedades
Infecciosas anuncia que el sexo seguro no existe, afirmación basada en el trabajo de su dependiente Centro Nacional para la
Prevención del VIH, líder nacional en la prevención y el control de la infección por el virus de inmunodeficiencia humana, las
enfermedades de transmisión sexual y la tuberculosis. Junto a este argumento del sin sentido del sexo seguro, se encuentra
la realidad que ha experimentado Francia. Este país aprobó hace diez años una ley muy parecida a la española en materia
de salud sexual, reproductiva y de interrupción del embarazo. El transcurso de 10 años y los análisis de los resultados han
inmerso a Francia en un debate cuyo objetivo es evitar la destrucción de la población femenina francesa, en vista de las
cifras obtenidas a raíz de su ley. En el año 2001 Francia practicaba cien mil abortos al año, en el 2010 la cifra ascendió a los
doscientos mil. En el año 2001 Francia registraba 5 enfermedades en su Catálogo de Enfermedades de transmisión sexual,
en 2010 Francia reconoce 33 infecciones de transmisión sexual. Desde la aprobación de la ley francesa en materia de salud
sexual hasta la actualidad, este país ha sufrido un incremento del 400% de cáncer del sistema linfático en mujeres de 35 a
45 años y su origen lo sitúan en el uso y abuso de las píldoras anticonceptivas que “provocan un disparo hormonal que
desgasta el sistema linfático”, explica Ignacio García-Juliá, quien añade más información sobre el estudio francés, como el
aumento del 300% del cáncer de útero. Todas estas cifras han desenmascarado una ley, muy parecida a la española,
aprobada para evitar enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados, y que ha sido un desastre.
Artículo 8. Formación de profesionales de la salud.
La formación de profesionales de la salud se abordará con perspectiva de género e incluirá:
a) La incorporación de la salud sexual y reproductiva en los programas curriculares de las carreras relacionadas con la
medicina y las ciencias de la salud, incluyendo la investigación y formación en la práctica clínica de la interrupción
voluntaria del embarazo.
b) La formación de profesionales en salud sexual y salud reproductiva, incluida la práctica de la interrupción del embarazo.
En referencia a este artículo el Director General del Foro Español de la Familia se pregunta: “¿Dónde está la libertad de
cátedra?”. Se trata de un derecho fundamental reconocido en el artículo 20 de la Constitución Española y que hace
referencia a la autonomía universitaria. Este artículo también va en contra del Código Hipocrático en su apartado 4: “No dar
ningún tipo de medicina mortal a quien se lo pida, ni remedios abortivos”. Y en su reforma de 1948, el código de los médicos
recoge el juramento de “se respetará la vida humana desde la concepción”. En contra de todo esto, el artículo 8 de la ley de
salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo obliga a los estudiantes de medicina a “conocer las
técnicas para provocar abortos”, denuncia el Director General del Foro.
Toda esta información ideológica es la que estamos recibiendo en la actualidad, sobre todo los jóvenes que “están entrando
en la cadena del sociologismo moral” y que por lo tanto son fácilmente manipulables. Como explicó en la conferencia
Ignacio García-Juliá esta “cadena empieza en todo el mundo lo hace. El segundo paso es si todo el mundo lo hace, es
natural. El tercer eslabón de la cadena es si todo el mundo lo hace y es natural, es bueno. Y el cuarto eslabón es si todo el
mundo lo hace, es natural y bueno, es exigible”. La preocupación de los padres es saber cómo sacar a sus hijos de esa
cadena, y esto se debe hacer “en el primer paso, y decirles que no todo el mundo lo hace”, explica el Director General del
Foro y, para poder dar argumentos y formación la familia tiene que formarse y actuar. Ignacio García-Juliá recomienda
empezar la formación con la lectura de “El Lexicón” de Juan Pablo II, “un libro que recoge todo aquello que los padres de
familia tenemos que saber para hablar de familia, de educación” porque actualmente la familia no tiene un criterio
suficiente para hacer frente al debate social, “no tenemos un criterio clave”, afirma Ignacio García-Juliá.
Este es uno de los desafíos de la familia del siglo XXI, su formación para defenderse de los ataques con criterio y sentido
común y, para hablar bien de las cosas buenas.
Mª Carmen Portugal, madre de alumno
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