AGOSTO DE 1945 - Instituto Tabancura

Estudios Sociales – Guía Nº 1 – 3º-4º Enseñanza Media – Prof. Antonio Rioseco Aragón
La Segunda Guerra Mundial y sus consecuencias
Como hemos visto, la Segunda Guerra Mundial fue un conflicto que marcó indiscutidamente el devenir
del siglo XX, pues, además de causar muerte y destrucción en distintos lugares de La Tierra, desencadenó otros procesos que se proyectarían hasta los años noventa.
Tras la Guerra hubo un reordenamiento de las fuerzas políticas y económicas del orbe, teniendo a
EE.UU. y a la URSS como los principales referentes. El primero, representaba al capitalismo y a las democracias liberales; el segundo, al comunismo y los regímenes autoritarios. Dos visiones de mundo contrapuestas e imposibles de coexistir sin conflictos, por lo que se vieron envueltos en un proceso de polarización mundial conocido como Guerra Fría.
Con polarización entendemos la existencia de dos extremos, en este caso constituido por las dos ideologías más poderosas, frente a las cuales, las distintas fuerzas políticas del resto de los países debía alinearse a una de ellas. Esta situación se vio particularmente representada por el “Muro de Berlín”, con el
cual se dividió a la capital alemana entre el lado occidental pronorteamericano y el oriental dominado por
los soviéticos. Esto era consecuencia, a su vez, de la separación de Alemania en dos países, la República Federal Alemana (RFA) y la República Democrática Alemana (RDA). El Muro constituyó el símbolo de
la Guerra Fría y la polarización que le fue característica, donde la existencia de esta “Cortina de Hierro”
marcaba la división entre el mundo occidental capitalista y el oriental comunista; una separación no sólo
física –por cierto–, sino también ideológica.
Desde el punto de vista económico, los años de postguerra estuvieron marcados por la implementación
por parte de EE.UU. del “Plan Marshall” que, a través de créditos e inversiones, buscaba levantar las
economías de los países europeos que se alineasen con la potencia norteamericana. Por otro lado, la
URSS extendió su influencia y dominio por toda Europa de Este, donde apoyó regímenes autoritarios
como los de Rumania, Hungría, Checoslovaquia, Yugoslavia, etc. El comunismo busca establecer una
centralización de la economía por parte del Estado, controlando la propiedad de los medios de producción y toma las decisiones económicas.
Fuera de las fronteras de Europa, la Guerra Fría también tuvo su desarrollo, pues se vivía en una constante pugna entre el avance del comunismo y el coto que EE.UU. fue poniendo a esta situación. En razón
de ello, estallaron conflictos armados en Corea y Vietnam, lo que se sumó a las constantes intervenciones norteamericanas en distintas zonas –como en Latinoamérica– con el fin de impedir el triunfo de revoluciones de carácter marxista. En este sentido, EE.UU. implementó para nuestro continente la “Doctrina
de seguridad nacional” que tenía como finalidad modificar la misión de las fuerzas armadas de otros países para dedicarse a combatir aquellas ideologías, organizaciones o movimientos que, dentro de cada
país, pudieran favorecer o apoyar al comunismo en el contexto de la Guerra Fría, legitimando la toma del
poder por parte de las fuerzas armadas y la violación sistemática de los derechos humanos. Así, miles de
militares y policías fueron entrenados por los norteamericanos convirtiéndose luego en agentes utilizados
por los organismos represores en las diversas dictaduras militares latinoamericanas.
La descolonización
Otro proceso propio de la postguerra es la independización de las colonias que las naciones europeas
mantenían, principalmente, en África, Medio Oriente y Asia. Es así que, tras luchas y pactos de independencia, surgen numerosos países que venían a transformar la cartografía política conocida hasta entonces. Pero la descolonización significó, sobre todo en África, el surgimiento de conflictos armados, ya fuese dentro de los nuevos países o entre las distintas naciones. Guerras que aparecieron en un mapa que,
con fronteras de líneas rectas en muchos casos, desconocían los límites naturales y culturales de las
tribus y pueblos tradicionales del continente negro.
Estudios Sociales – Guía Nº 1 – 3º-4º Enseñanza Media – Prof. Antonio Rioseco Aragón
Asimismo, se crea el estado de Israel, enclavado en Palestina, territorio que se encontraba bajo el “Mandato Británico de Palestina” desde fines de las Primera Guerra Mundial. Los judíos, que habían sido perseguidos y presos en campos de concentración y exterminio durante la segunda guerra por parte de la
Alemania Nazi, encontraban al fin un lugar donde poder establecerse luego de siglos de diáspora. Sin
embargo, esta situación generó un conflicto que se arrastra hasta nuestros días, en los que judíos y musulmanes se han enfrentado constantemente sin lograr una convivencia pacífica en Medio Oriente.
I. A partir de la lectura del texto anterior y lo visto en clases responde las siguientes preguntas
1. ¿Por qué podemos señalar que la Guerra Fría está marcada por la polarización del mundo?
2. ¿Para qué fue erigido el Muro de Berlín? ¿Por qué es uno de los símbolos más gráficos de la Guerra
Fría?
3. ¿Qué fue el Plan Marshall? ¿Qué finalidades tenía?
4. ¿Qué relaciones podemos establecer entre Guerra Fría y Latinoamérica en general, y con nuestro país
en particular?
5. Defina descolonización y señale sus consecuencias y proyecciones.
II. A partir de la lectura del texto que sigue y lo visto en clases, reflexiona y contesta:
AGOSTO DE 1945
Jorge Teillier (1935-1996)
El día en que Hiroshima y Nagasaki ardían yo
veía feliz a medio mundo, porque los aliados
habían vencido y al fin se terminaba la guerra, y
terminarían todas las guerras.
Yo pensaba en la Bomba como en un gran fuego de artificio en la plaza de Año Nuevo, y mientras aceras de asfalto derretido arrastraban a
miles de seres, yo miraba jugar al escondite a
niñas vecinas y esperaba que me llamaran a
sentarme a la mesa.
Los girasoles relucían y caracoles despreocupados trazaban sus senderos plateados en el jardín, mientras en la tierra del sol naciente monstruosas plantas retorcidas crecían y nacían larvas sin nombre.
Aquí hermosas muchachas peinaban largas
trenzas, mientras allá millares de mujeres quedaban sin cabello.
Caía el telón sobre otro día y yo miraba ávidamente al mundo cerrado para siempre a los ojos
de tantos niños.
Aún no se usaba la palabra radiactividad.
Y yo a los diez años sabía que todo estaba bien:
era el fin de la guerra y triunfaban los buenos.
Todo el mundo estaba feliz y se preparaba el
desfile de la Victoria, cuando al otro lado de
nuestro otoño Hiroshima y Nagasaki ardían.
1. ¿Es posible relativizar la noción de buenos y
malos (vencedores y vencidos) para el caso
de la segunda guerra mundial?
2. ¿Qué proyecciones tuvo para el mundo y la
paz el bombardeo atómico efectuado por
EE.UU. a dos ciudades japonesas?