PREFACIO I DE LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR El misterio de la

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PREFACIO I DE LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR
El misterio de la Ascensión
Este prefacio se dice el día de la Ascensión del Señor; puede decirse también en los días después de
la Ascensión hasta el sábado antes de Pentecostés en aquellas misas que no tienen prefacio propio.
V/. El Señor esté con vosotros.
R/. Y con tu espíritu
V/. Levantemos el corazón.
R/. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
V/. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
R/. Es justo y necesario.
En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
darte gracias
siempre y en todo lugar,
Señor, Padre santo,
Dios todopoderoso y eterno.
Porque Jesús, el Señor, el rey de la gloria,
vencedor del pecado y de la muerte,
ha ascendido [hoy] ante el asombro de los ángeles
a lo más alto del cielo,
como mediador entre Dios y los hombres,
como juez de vivos y muertos.
No se ha ido para desentenderse de este mundo,
sino que ha querido precedernos como cabeza nuestra
para que nosotros, miembros de su Cuerpo,
vivamos con la ardiente esperanza de seguirlo en su reino.
Por eso,
con esta efusión de gozo pascual,
el mundo entero se desborda de alegría,
y también los coros celestiales,
los ángeles y los arcángeles,
cantan sin cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo...
En el día de la Ascensión, si se usa el Canon romano, se dice Reunidos en comunión propio; si se
usa la plegaria eucarística II, se dice Acuérdate, Señor propio; si se usa la plegaria eucarística III, se
dice Atiende los deseos propio.
PRÆFATIO I DE ASCENSIONE DOMINI
De mysterio Ascensionis
Sequens praefatio dicitur in die Ascensionis Domini; dici potest diebus post Ascensionem usque ad
sabbatum ante Pentecosten, in Missis quae praefatione propria carent.
V/. Dóminus vobíscum.
R/. Et cum spíritu tuo.
V/. Sursum corda.
R/. Habémus ad Dóminum.
V/. Grátias agámus Dómino Deo nostro.
R/. Dignum et iustum est.
Vere dignum et iustum est,
aequum et salutáre,
nos tibi semper
et ubíque grátias ágere:
Dómine, sancte Pater,
omnípotens aetérne Deus:
Quia Dóminus Iesus, Rex glóriae,
peccáti triumphátor et mortis,
mirántibus Angelis,
ascéndit (hódie) summa caelórum,
Mediátor Dei et hóminum,
Iudex mundi Dominúsque virtútum;
non ut a nostra humilitáte discéderet,
sed ut illuc confiderémus,
sua membra, nos súbsequi quo ipse,
caput nostrum principiúmque, praecéssit.
Quaprópter, profúsis paschálibus gáudiis,
totus in orbe terrárum mundus exsúltat.
Sed et supérnae virtútes
atque angélicae potestátes
hymnum glóriae tuae cóncinunt,
sine fine dicéntes:
Sanctus, Sanctus, Sanctus...
In die Ascensionis, quando adhibetur Canon romanus, dicitur Communicántes proprium.
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