DIOS Y EL DINERO.

Domingo 8 Tiempo Ordinario
26 y 27 de febrero de 2011
Num.423
“Busquen el reino de Dios y su justicia; lo demás se les dará por añadidura”
Primera Lectura
(Isaías 49, 14-15)
Sión decía: El Señor me abandonó, mi esposo
se olvidó de mí. Pero, ¿puede una madre
olvidar a su criatura, dejar de querer al hijo de
su entrañas? Pues, aunque una madre olvidara,
yo no me olvidaré de ti.
Salmo 61
Descansa sólo en Dios, alma mía.
Sólo en Dios descansa mi alma,
porque de él viene la salvación;
sólo él es mi roca y mi salvación,
mi alcázar: no vacilaré.
Descansa sólo en Dios, alma mía,
porque él es mi esperanza;
sólo él es mi roca y m salvación,
mi alcázar: no vacilaré.
De Dios viene mi salvación y mi gloria,
él es mi roca firme,
Dios es mi refugio.
Pueblo suyo, confía en él,
desahoguen ante él su corazón.
Segunda Lectura
(1 Corintios 4, 1-5)
Hermanos: Nosotros no pretendemos ser otra
cosa que servidores de Cristo, encargados de
comunicar los designios de Dios. Y a la
persona que se le ha dado un encargo lo que
se le pide es que sea fiel. A mí muy poco me
preocupa el ser juzgado por ustedes o por
Oración al
Santo Cristo de los Milagros
¡Santo Cristo de los Milagros!
Intercede ante tu Padre a favor de las
necesidades que hoy te presento.
Concede la salud a los enfermos.
Bendice nuestro hogar. Danos valor
para enfrentarnos a nuestros
problemas.
Líbranos de todos los males de cuerpo
y alma. Aumenta nuestra fe. Enciende
nuestra caridad. Danos esperanza en
las luchas de la vida. Otórganos la paz
interior y exterior. Haznos valientes
apóstoles tuyos.
Atiéndeme especialmente en las
necesidades que hoy te presento, pues
Tú me dices: “vengan a Mi, todos los
que estén cansados y agobiados, que
Yo los aliviaré”.
Recibe, Señor, mi promesa y después
de las luchas de la vida, concédenos
encontrarte en la Casa del Padre.
Amén.
cualquier otra instancia humana presente. Ni
siquiera me atengo a mi propio juicio. Yo tengo
la conciencia tranquila, pero no por eso quedo
absuelto de culpa; mi juez es el Señor. Por eso,
no juzguen antes de tiempo. Esperen a que
venga el Señor, que iluminará todo lo que está
oculto en las tinieblas y pondrá de manifiesto
las intenciones que hay en cada corazón. Y
entonces dará Dios su aprobación a cada uno.
o con qué os vais a vestir. Los gentiles se
afanan por esas cosas. Ya sabe vuestro Padre
del cielo que tenéis necesidad de todo eso.
Sobre todo buscad el reino de Dios y su
justicia; lo demás se os dará por añadidura. Por
tanto, no os agobiéis porque el mañana traerá
su propio agobio. A cada día le bastan sus
disgustos.
Avisos Parroquiales
Evangelio
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(Mateo 6, 24-34)
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
Nadie puede estar al servicio de dos amos.
Porque despreciará a uno y querrá al otro; o, al
contrario, se dedicará al primero y no hará
caso del segundo. No podéis servir a Dios y a
dinero. Por eso os digo: no estéis agobiados
por la vida, pensando qué vais a comer o
beber, ni por el cuerpo, pensando con qué os
vais a vestir. ¿No vale más la vida que el
alimento, y el cuerpo que el vestido? Mirad a
los pájaros: ni siembran, ni siegan, ni
almacenan y, sin embargo, vuestro Padre
celestial los alimenta. ¿No valéis vosotros más
que ellos? ¿Quién de vosotros, a fuerza de
agobiarse, podrá añadir una hora al tiempo de
su vida? ¿Por qué os agobiáis por el vestido?
Fijaos cómo crecen los lirios del campo: ni
trabajan ni hilan. Y os digo que ni Salomón, en
todo su fasto, estaba vestido como uno de
ellos. Pues, si a la hierba, que hoy está en el
campo y mañana se quema en el horno, Dios
la viste así, no hará mucho más por vosotros,
gente de poca fe? No andéis agobiados,
pensando qué vais a comer, o qué vais a beber,
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Misas de la semana: lunes y martes a las
6:00 am., miércoles en las Marianitas a las
7:30 pm., jueves 7:30 pm. y viernes en el
canal 13 a las 8:00 pm.
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Rosario comunitario: Calle 67 #22 Fam.
Reyes.
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Domingo 6 de marzo - Misa catequesis
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5 y 6 de marzo, Taller de evangelización
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Miércoles 9 de marzo comienza la cuaresma
con la imposición de la ceniza. Las misas
para ese miércoles serán a las 8:00 am y a las
7:30 pm. Para este tiempo especial de
conversión tendremos las misas penitenciales
de los viernes a las 6:00 am. Y el sábado 26
de marzo, retiro parroquial. Dispongamonos
para aprovechar al máximo este tiempo.
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El Cáliz Peregrino. Esta semana le llevarán:
7:00 p.m. Teresa, Teresita y Karla
7:00 a.m. Angel y Leonides Figueroa
9:00 a.m. Carmen Ayabarreno
11:30 .a.m. Antonia Ayala
DIOS Y EL DINERO.
En más de una ocasión expresa Cristo las
condiciones tajantes que suponen su
seguimiento. Sus exigencias están en la
misma línea de amor exclusivo que
exigía Yahvé en el Antiguo Testamento a
su pueblo. No hay más que un solo Dios
y Señor. El politeísmo de los pueblos
vecinos era inadmisible para la religión
yahvista. Jesús continúa esa revelación
veterotestamentaria, viene a darle
cumplimiento. Por eso insiste en que o se
está con Él, o se está contra Él. Hay que
decidirse.
Aquí nos habla el Señor del servicio al
dinero. Podría parecer que son pocos los
que realmente sirven al dinero, y que
sucede lo contrario, es decir, que
nosotros nos servimos del dinero y no le
servimos a él. No obstante, cuando se
pone al dinero en primer plano, se acaba
por vivir sólo para ganar dinero, sin que
nunca sea suficiente por mucho que se
gane. Entonces se comienzan a sacrificar
cosas al dinero: el tiempo, los
sentimientos, la familia, uno mismo.
Jesús nos pone en guardia para que no
caigamos en semejante aberración. El
dinero tiene sólo una importancia
relativa. Por encima de él se han de
poner los valores del espíritu, la amistad,
la honradez, la conciencia, el amor en
sus múltiples manifestaciones, Dios en
definitiva. Sólo así alcanzaremos la paz y
la felicidad.
Hay que trabajar por supuesto, tratar de
obtener cuanto necesitamos para llevar
una vida digna. Pero siempre eso será un
medio y no un fin. Por otra parte, hemos
de vivir seguros de que Dios existe y que
nos ama, que puede ayudarnos y nos
está continuamente ayudando. Vivir
confiados en la providencia divina,
siempre ocupados pero nunca
preocupados. Luchando con toda el
alma, pero sin perder jamás la calma.
¡Cantemos al Señor!
Sábado 7:00 pm.
Domingo 7:00 am.
El vive en mí, no temo al mañana.
El vive en mí, gozoso estoy.
Yo sé que, él, preparó, mi futuro.
Mi vida vale más, porqué, él, vive en mí.
Alegre la mañana,
que nos habla de ti.
Alegre la mañana
Entrada
Ofertorio
Hoy he regresado a tu casa,
mi Señor
ofreciendo mis talentos
mi trabajo y mi dolor.
Por que sé que en tus manos
está la solución
a todos mis pesares
que llevo en mi interior,
Cuando sienta
que me voy a desviar
no lo voy a dudar
eres tu mi verdad.
Aquí estoy ante tu altar
ofreciendo todo lo que tengo
y lo que me hace falta.
porque sé que con tu paz
llenas todos los rincones
y vacíos de mi alma.
Te ofrezco mi familia
mis hijos y mi hogar
mi empleo y mis amigos
conocidos y demás.
Te ofrezco hoy mi alma
que la puedas transformar
y así utilizarla
en instrumento de tu paz
Comunión
Confía, confía
que yo soy el Dios de la vida //
Nada hay que me puedas separar
Del amor que siento por ti
Ni lo alto, ni lo profundo
Ni lo ancho, ni nada oscuro
Nada hay que me pueda separar
Del amor que siento por ti
Si por ti morí y resucité
Si por ti mi vida entregué
Salida
El vive en mí, no temo al mañana.
El vive en mí, gozoso estoy.
Yo sé que, él, preparó, mi futuro.
Mi vida vale más, porqué, él, vive en mí.
Entrada
En nombre de Dios Padre,
del Hijo y del Espíritu,
salimos de la noche
y estrenamos la aurora,
saludamos el gozo
de la luz que nos llega
resucitada y resucitadora.
Regresa desde el sueño
el hombre a su memoria,
acude a su trabajo,
madruga a sus dolores.
Le confías la tierra,
y a la tarde la encuentras
rica de pan y amarga de sudores.
Tu mano acerca al fuego,
a la sombría tierra
y el rostro de las cosas
se alegra en tu presencia.
Silabeas el alba
igual que una palabra,
Ta pronuncias el mar
como sentencia.
Ofertorio
Mi alma alaba al Señor
y mi espíritu se alegra en su
presencia
porque Él que es grande
maravillas ha hecho en mi
Es santo su nombre.
//Mi alma alaba al Señor//
y mi espíritu se alegra en su
presencia
porque Él que es grande
maravillas ha hecho en mi
Es santo su nombre.
Comunión
Yo le llevo desde niño muy adentro,
Te encontraba en el pájaro y la flor
En la lluvia en la tierra y en el silencio
Y en mis sueños cada noche
estaba tú
Desde entonces quiero darte
siempre gracias
Porque puedo darme cuenta de tu amor
Beberé de tu cuerpo y de tu sangre
Y por siempre te daré mi corazón
Como no creer en Dios
Si me ha dado los hijos y la vida
Como no creer en Dios
Si me ha dado la persona preferida
Como no creer en Dios
Si lo siento en mi pecho a cada instante
En la risa de un niño por la calle
O en la tierna caricia de una madre
Como no
Como no creer en Dios
Si esta en las viñas y en el manso trigo
Como no creer en Dios
Si me dio la mano abierta de un amigo
Como no creer en Dios
Si me ha dado la tristeza y la alegría
De saber que hay un mañana cada día
Por la fe por esperanza y el amor
Como no
Salida
Madre del Divino Pan
Madre de la Eucaristía
Madre que nos alimentas,
eres tú, Virgen María (2)
El nos dijo, Yo soy Pan Vivo
se ofreció como alimento,
y todos nosotros sus hijos,
le pedimos su sustento.
El su carne ofreció
como vida plena y eterna;
danos de tus manos buenas,
ese manjar de gracias llena.
Quién mi Carne come, quién mi Sangre bebe,
vida en Dios le daré
Madre, dánoslo a El.
Domingo 9:00 am.
Entrada
El amor de Cristo nos reúne
en banquete fraternal
con la luz de Fe en el alma
Acudamos juntos al altar (2)
A los hombres del desierto
milagroso pan les dio,
en figura del misterio que
en la cena consumo.
Al que coma de Mi carne,
al que beba de Mi sangre,
le daré la vida eterna
en el Reino de Mi Padre
Lo que acabo yo de hacer
lo debéis hacer Vosotros;
y guardad este recuerdo,
que es eterno testamento.
Ofertorio
Tú me dijiste, Señor,
que en mi camino,
iré encontrando
hambrientos de mi pan,
que habrá sedientos
que vengan a mi fuente,
enfermos, tristes
de frío y soledad.
Tú me dijiste
que sufres en el pobre
que estas desnudo
o no tienes libertad,
que en el anciano que espera
tú me esperas
y en ese niño de hambre morirás.
Aquí me tienes, Señor,
yo quiero amarte,
amando al pobre
y aquel que sufre más.
Tuyo es mi pan
y el agua de mi fuente;
ven a mi casa y amor encontraras.
En el camino
hay siempre un hombre herido,
que necesita
mi ayuda y mi amistad,
no mil discursos
que hablan de justicia,
no mil palabras
que el viento llevara.
En el camino,
Jesús me estas mirando
y en tu mirada
hay pena y soledad.
Quiero entregarte
mi alma y mi alegría,
toma mi vida
en ofrenda de hermandad.
Comunión
Tomad y comed,
Mi cuerpo entregado por amor.
Tomad y comer,
Nos une en un solo corazón.
Y al comulgar de un mismo pan,
Construimos tu reino Señor,
Porque somos un solo cuerpo,
Somos hijos de un mismo Dios
Somos todos hermanos.
Toda tu vida esta ahí,
Al partir y entregarnos el pan
Te haces carne de nuestras vidas
Compañero que siempre estas
Nadie dio amor más grande.
Dame a entender más tu misterio
Pues nos mandas que hagamos igual
Ser el pan que se parte siempre
Que alimenta a los demás
Hay que amar como tú.
Salida
En tu ser un dulce canto gozarás,
de alegría, cada día.
Aunque penas y tristeza tú tendrás,
en tu ser un dulce canto gozarás.
Cántico celeste
en la noche tendrás,
en tu corazón,
aunque en la aflicción,
fácil es cantar,
cuando reina la paz
pero en el dolor es mejor cantar.
Ya la noche pasará, con su pavor,
de sus pruebas ya no temas,
hoy trabaja, ora y sirve a tu Señor,
pronto el sol alumbrará tu corazón.