Descargar PDF - AMSAFE La Capital

Anuncio
AUTORA: MARIANELA POLITTI
FRAGMENTOS DE TESTIMONIOS DEL LIBRO “NUNCA MÁS” (CONADEP- Comisión Nacional sobre
la desaparición de personas – Buenos Aires, septiembre de 1984)
Desaparición y muerte de Ricardo Adrián Pérez y María G. Esther Cubas de Pérez (Legajo N° 32)
"Soy padre de Ricardo Adrián Pérez, argentino, nacido el 31 de agosto de 1950, radicado con su
esposa en Santo Tomé, provincia de Santa Fe. El 23 de abril de 1977 recibo un llamado telefónico
de un tío de Ricardo..." (..........)
"Mi hijo y su esposa habían sido detenidos por servicios de inteligencia de la Provincia de Buenos
Aires, con apoyo de personal militar uniformado del Cuerpo de Artillería 121- Area 212, Ciudad de
Santa Fe". "Presento un recurso de hábeas corpus, por razones de jurisdicción le dan traslado al
Juez Federal de Santa Fe, Dr. Mantaras. El 30 de agosto de 1977 me presento en el juzgado donde
me entero de la respuesta enviada por las autoridades del Cuerpo 121, que dice: "Santa Fe, 10 de
agosto de 1977. Al juez Federal de la Ciudad de Santa Fe: En los autos caratulados Pérez, Ricardo
Adrián sobre recurso de hábeas corpus (Exped. N° 483177), llevo a conocimiento de V.S. que la
detención del nombrado anteriormente, se efectuó a requerimiento de la autoridad militar (Área
La Plata - Pcia. de Buenos Aires), por presuntas vinculaciones con actividades subversivas. Su
traslado lo realizó personal de investigaciones de la ciudad de La Plata, perteneciente a la Policía
de la Provincia de Buenos Aires". "El día 21 de diciembre de 1978 recibo un llamado telefónico de la
Policía Federal (Sec. Identificaciones), preguntando si, Ricardo A. Pérez vivía en mi casa; le contestó
que sí y que soy el padre. Me notifican que habla sufrido un accidente en la Ruta Provincial NO 12
de la Provincia de La Pampa, a 20 kms. de C. Baron, con un coche Fiat 125 totalmente incendiado,
con restos humanos de dos personas, una masculina y otra femenina, imposibles de identificar por
la acción del fuego". "Me dirijo al lugar del accidente. Hicimos comentarios con los policías del
lugar y para ellos era todo sospechoso, ya que la Cédula de Identidad había sido arrojada a un
costado del coche para que no se incendiara y que en la forma que apareció el coche lo habían
incendiado intencionalmente los supuestos asesinos, dada la hora 6.30 de la mañana. Los restos
fueron depositados en la morgue de Gral. Pico como N.N."
Las Familias - Las Abuelas
La situación de los familiares de las prisioneras en estado de gravidez era harto angustiante y
peculiar. Así, como en muchos otros casos, la Sra. Estela B. de Carlotto -Vicepresidenta de
Abuelas de Plaza de Mayo- (Legajo N' 2085), recibió a través de una carta anónima de quien había
compartido el cautiverio con su hija Laura Estela, noticias de que ésta se encontraba bajo 'Tuerzas
de Seguridad" y con su marido, también secuestrado. Posteriormente, se enteró a través de una
persona liberada:
..."que su embarazo continuaba adelante, que nos mandaba un mensaje a su papá y a mí para que
estuviéramos atentos al momento en que naciera su bebé, que iba ser en junio de 1978, que lo
buscáramos en la Casa Cuna y que, si era varón, le iba a poner el nombre de mi esposo: Guido.
Cuando llegó la fecha aproximada del nacimiento de mi nieto yo, en ese momento, estaba
ejerciendo como docente y me jubilé para poder criarlo. Como si fuera su madre comencé a
preparar su ajuar. Yo tuve cuatro hijos, Laurita era la mayor. Comencé a hacer lo que ella me había
mandado decir: buscar el bebé en la Casa Cuna de La Plata, de Buenos Aires, en los Juzgados de
Menores, en todo lugar donde pudiera haber pasado algún chiquito, siempre con resultados
negativos, sin ninguna respuesta. Mientras tanto, el 25 de agosto de 1978, recibimos en mi
domicilio de La Plata una notificación de la Comisaría de la zona donde se nos citaba a los padres
de Laura Estela Carlotto a la Subcomisaría de Isidro Casanova.
Con carácter de urgente y a efectos "que se le notificarán". Nada más. Pensamos que podríamos
dar con ella, con el bebé. También pensamos que ya era la muerte"...
... "Llegamos y efectivamente, el Subcomisario, respondiendo a directivas del área operacional 114
nos muestra un documento, el documento de mi hija, en perfecto estado y nos pregunta si somos
familiares de esa persona. Le dijimos que sí, que éramos los padres y nos informa de su
fallecimiento. Por supuesto que no fue fallecimiento sino un asesinato frío y premeditado por parte
del Ejército"....
... "Mi hija había sido asesinada en la madrugada del 25 de agosto fraguando una mentira
enorme: de que iba en un automóvil y no acató la orden de detención y por lo tanto fue
eliminada"...
..."No pude verla. No me dejaron verla. Mi esposo y familiares me dijeron que me quedara con la
imagen que tuve siempre de ella. Ese rostro feliz, ese rostro de una joven argentina pujante,
idealista, luchadora. Porque tenía el rostro destrozado por un itakazo disparado a quemarropa. Y
tenía el vientre también destrozado, seguramente para que no pudiera comprobar el nacimiento
de mi nieto"....
..."Cuando pregunté al Subcomisario por el bebé, él me dijo que desconocía totalmente la
existencia de algún niño... Por gente liberada he sabido que es un varón, que nació el 26 de junio
de 1978. Hace poco ha cumplido seis años. Yo lo sigo buscando. Lo seguiré buscando todos los días
de mi vida."
La lectura de los testimonios puede ayudar a que los alumnos escriban una definición de
“memoria”: ¿Qué es la memoria? ¿Qué diferencias tiene con la historia? ¿Por qué los
testimonios son importantes para construir la memoria social?
Cuento: “La pesadilla” de Pedro Orgambide
Poesías y notas de Juan Gelman (Si dulcemente, Lumen, Barcelona, 1980)
“Nota III”
andar con las rodillas desnudas
por un campo de vidrios rotos/
andar con el alma desnuda
por un campo de compañeros rotos
que no los mojará el atardecer
ni el mar que moja a cualquiera/
no sé qué los moja ahora/
por fin quietos/sin miedo
a la muerte/muertos
por plomo o por cianuro/por
mano propia o ajena/muertos
en todo caso/podridos
bajo tierra en la tierra
que sí los recibió/incendios
que apagó el odio militar/hijitos
empújennos al triunfo
Nota XIV
¿estás vivo? / ¿estás muerto? / ¿hijo?
¿vivimorís/ otro vez/ otro día/ como
moriviviste estos tres años
en un campo de concentración? /¿qué
hicieron de voz/ hijo/ dulce calor que alguna vez
niñaba al mundo / padre de mi ternura/ hijo
que no acabó de vivir? / ¿acabó de morir? /
pregunto si acabó de morir/ el nacido el morido
a cada rato/ niño
que andó temprano por la sombra/ voz
que mutilaron/ ojo
que vio/ niñito de mi sed arrancado
a sus pedazos/ a su sed/ las sedes
que le abrigaban corazón/
se lo encendían mesmamente/
toda la noche golpeándome la puerta
SUGERENCIAS PARA LAS ACTIVIDADES:
- Reflexionar sobre las múltiples dimensiones que adquiere la relación entre verdad y
ficción.
- Reflexionar sobre las diferencias entre la narración de un testimonio y la construcción de
las subjetividades en la literatura.
- Identificar de qué manera los autores incorporan el contexto histórico-social a la lógica
ficcional.
-¿Qué situaciones narran estas historias? ¿Qué ideas transmiten sobre la política, el exilio,
las ausencias y el recuerdo?
Analizar a partir de los fragmentos el relato de situaciones, las sensaciones, los recuerdos
explícitos, las elipsis, los silencios. ¿Qué otras voces aparecen, desde qué lugares se
cuentan?
Descargar