Consejo Nacional Electoral 'Urna°, DE Los:muta ACLARACION DE VOTO ASUNTO: Resolución No. 3594 del 26 de noviembre de 2014 Personería Jurídica de la Unión Patriótica En el caso de la Unión Patriótica, el Consejo Nacional Electoral mantiene la personería jurídica a pesar de no haber alcanzado el umbral del 3% en las elecciones de marzo de 2014. Sin embargo, incurre en vados yerros hermenéuticos que le enrostró la Sección Quinta del Consejo de Estado en relación con la interpretación de la Constitución Política que condujeron en el 2002 a declarar la pérdida de la misma. El bloque de constitucionalidad tiene aplicación para la protección de los derechos políticos. El CNE no fue más allá de lo que concluyó la Sala de Consulta y Servicio Civil del Consejo de Estado. La importancia de este aspecto es que de haberse traido a la situación concreta el principio contenido en el artículo 93 de la Constitución, el CNE debió aplicar el principio de convencionalidad que se deriva de la Convención Americana de Derechos Humanos. Este Convenio hace parte de la legislación interna y vincula no solo a las autoridades judiciales (control de constitucionalidad), sino también a las autoridades administrativas, entre ellas al Consejo Nacional Electoral (principio de convencionalidad). Con esta decisión, el CNE asume en forma parcial y recortada su competencia de garantizar los derechos políticos de las minorías y la oposición. Además, omite examinar en profundidad el aparte del concepto de la Sala de Consulta y Servicio Civil del Consejo de Estado, según el cual "la afectación de derechos de la Unión Patriótica - no - se supera instantáneamente con la devolución de la personería jurídica y sin un mínimo período de transición que le permita reorganizarse como partido y recuperar el ejercicio pleno de sus derechos políticos". Se ha debido también avanzar en la adopción de medidas de reparación integral de los derechos de la UP, a partir de los principios de la Convención Americana de OH (restitutio in integrum) y, en especial, de lo que señala su articulo 691. Aunque la Convención no menciona explícitamente las personas jurídicas como sujetos de reparación, existen antecedentes que lo permiten. Tanto la Convención Americana de DH como la Ley 1488 de 2011, Ley de Víctimas, establecen unos criterios para la reparación de los sujetos afectados con graves violaciones al derecho internacional humanitario y de Consejo Nacional Electoral REPUBLIC DI COLOMBIA 2 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 los derechos politicos. De conformidad con las competencias constitucionales del CNE (art. 265 C.P.) le corresponde adoptar medidas de resarcimiento pues el principio de que lo accesorio sigue a lo principal, no tiene sentido que se restablezca la personería jurídica, sin resarcir los daños derivados de la actuación del CNE, ni los demás derechos inherentes a ella. Si no se avanza en medidas de reparación perdurará la situación de discriminación en la que actualmente se encuentra la U.P., por efecto de la pérdida de su personería jurídica. Esta omisión es inadmisible en el contexto de una eventual solución política al conflicto armado interno y desconoce que la reparación integral es una condición indispensable para la garantía de la no repetición. Entre las medidas transicionales para una reparación integral de las víctimas de la U.P. se encuentran la reconstrucción de la memoria histórica, el reconocimiento de los gastos de funcionamiento dejados de percibir en el periodo 2002-2013, el reconocimiento por parte del CNE de la U.P. como una agrupación política víctima de la violencia política y la exhortación al gobierno nacional y al Congreso de la República para que expidan el Estatuto de la Oposición que menciona el articulo 112 de la Constitución Política. ASUNTO: Resolución No. 3594 del 26 de noviembre de 2014 Rad. 5782-14-Personería de la Unión Patriótica Magistrado ponente: CARLOS CAMARGO ASIS Con el debido respeto hacia las decisiones de la Corporación, me permito aclarar el voto en el asunto de la referencia, por las razones que expongo a continuación. La Resolución 3594 del 26 de noviembre de 2014 "por medio de la cual se decide sobre la vigencia de la personería jurídica del Partido Político UNIÓN PATRIOTICA", hace justicia con esta agrupación política pues decidió mantener su personería jurídica a pesar de que 01:CANILAC[bNFS-M.F.0 Consejo Nacional Electoral RIPUBLI A DE COLOAllnk 3 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 no alcanzó el umbral electoral del 3% que establece el artículo 108 de la Constitución Political. Un entendimiento simplemente literal de la norma constitucional en mención implicaba la pérdida de este derecho. Esta es la razón por la cual acompaño la decisión objeto de la presente aclaración. Sin embargo, la resolución no va más allá de reproducir lo que ya había señalado la Sala de Consulta y Servicio Civil del Consejo de Estado. Esa sala concluyó que Na aplicación del umbral electoral a la Unión Patriótica en las elecciones al Congreso de la República haría nugatoria la efectividad de la Sentencia del Consejo de Estado del 4 de Julio de 2013' 2 mediante la cual se decretó la nulidad de las Resoluciones Nos. 5659 del 30 de septiembre de 2002 y 7477 del 20 de septiembre, de 2002, expedidas por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que suprimieron la personería jurídica de la U.P3. En esta aclaración se señala que la decisión debió incorporar, además del análisis de las condiciones en las que esta agrupación participó en la contenida electoral de marzo de 2014, los siguientes aspectos I. Un examen de los antecedentes y hechos relevantes, que llevaron a la pérdida de la personería jurídica de la U.P.; La personería jurídica de la Unión Patriótica, le fue restablecida mediante la Resolución N° 2576 del 24 de septiembre de 2013, luego de la sentencia dictada por la Sección Quinta, de asuntos electorales del Consejo de Estado, Radicación N° 11001-03-28-000-2010-00027-00, Consejera Ponente: Dra. Susana Buitrago Valencia 2 Consulta del 1° de abril de 2014, Expediente 11001-03-06-000-2014-00044-00 (Radicación N°2202), Sala de Consulta ty Servicio Civil, Consejero Ponente: Dr. William Zambrano Cetina. La decisión no contó con el apoyo del magistrado Roberto Rafael Bornarcelli, quien salvó el voto. El magistrado Germán Bustillo Pereira aclaró el voto. Consejo Nacional Electoral an-xu 4LE COLOMBIA 4 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 II. Un examen de las decisiones adoptadas por el Consejo de Estado y de la resolución del CNE que ordenó el registro de los directivos de la U.P.; III. Un examen de la normatividad aplicable a las víctimas del conflicto interno armado y de los principios del bloque de constitucionalidad y de convencionalidad, establecidos en el artículo 93 de la Constitución Política, y ,en particular, de la Convención Americana de Derechos Humanos, o Pacto de San José de Costa Rica; IV. Un examen de las decisiones juridicas proferidas en relación con los líderes de la U.P., víctimas de graves violaciones de derechos humanos, tanto por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) , como de los jueces y tribunales nacionales; V. Un examen de los derechos y reglas consagradas en la Ley de Víctimas4, con el propósito de establecer si esta ley es aplicable al asunto sub-examine; VI. La adopción de medidas de reparación colectiva, en sede electoral, a favor de los integrantes de la U.P. El Consejo Nacional Electoral no podía ignorar el contexto normativo y jurisprudencial anterior, menos aún, cuando la situación de la U.P. se encuentra enmarcada en el contexto de una eventual solución pacífica del conflicto armado interno. A partir de esas premisas se han debido adoptar también otras decisiones dentro del ámbito de su competencia — no solo el mantenimiento de la personería jurídica -, con el fin de avanzar, con un criterio de progresividad, en la reparación integral de /os derechos inherentes a la personería jurídica de la U.P., pues así se deriva de la sentencia de la Sección Quinta y de la Sala de Consulta y Servicio Civil del Consejo de Estado. 4 Ley 1448 de 2011 "Por la cual se dictan medidas de atención, asistencia y reparación integral a las víctimas del conflicto armado interno y se dictan otras disposiciones". OR.e. Consejo Nacional Electoral uu REPÚBLICADE fvmn 5 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 En esta aclaración de voto se examina cada uno de los aspectos mencionados, que constituyen el fundamento jurídico del presente escrito. L Antecedentes y hechos relevantes Aunque la decisión señala que la "Sala no desconoce la evidente persecución y los terribles asesinatos a que fue sometido ese grupo político de oposición" (pág. 14) y alude al "Plan Sistemático de Exterminio" que se puso en marcha contra ese partido político, en realidad, incurre una vez más en el yerro de no interpretar la situación conforme a la Constitución, y no agrega nada distinto a los pronunciamientos del Consejo de Estado. LO anterior, por cuanto deja de lado examinar si es procedente o no considerar, en sede administrativa-electoral, la aplicación de los principios del bloque de constitucionalidad y de convencionalidad, y de la Ley 1448 o Ley de Víctimas. A riesgo de reiterar lo expresado en actos administrativos anteriores, a continuación se presenta una exposición resumida de los hechos que anteceden a la actuación del CNE. La U.P. nació como organización política en el mes de mayo de 1985 y su personería jurídica le fue reconocida mediante Resolución N° 037 del 20 de agosto de 1986 por el CNE. Este reconocimiento le permitía desplegar todas las actividades propias de una agrupación política válidamente conformada, surgida de los acuerdos de paz de mediados de los años ochenta. Sin embargo, muy tempranamente se desató una operación de dimensiones insospechadas que concluyó en su práctico exterminio. C Consejo Nacional Electoral 11 PI Eurn DE COLOMBIA 6 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Al decidir una acción de tutela instaurada por un integrante de la UP., en el año de 1994 la Corte Constitucional dispuso proteger el derecho a la vida y la integridad personal del peticionario y adoptó varias medidas tendientes a que se garantizaran los derechos fundamentales de sus afiliados y simpatizantes. En la sentencia de tutela T-439 de 1994 La Corte señaló que en ese momento las autoridades conocían el alcance de las acciones perpetradas contra integrantes de esa agrupación. También mencionó que "la doctora AIDA ABELLA ESQUIVEL, Presidenta de la Unión Patriótica, entregó a la Corte una lista que incluye los nombres de más de mil personas vinculadas a dicho movimiento y que fueron asesinadas o desaparecidas". En la decisión, la Corte examinó la relación entre violencia política, vulneración de los derechos humanos y la Constitución de 91, en los siguientes términos: "3. El carácter democrático, participativo y pluralista del proceso político peligra cuando tiene que afrontar situaciones de hecho que atentan contra la existencia misma de la organización política. La presencia de los grupos guerrilleros en algunas zonas del país sitúa en un nivel critico la vigencia del sistema político democrático en dichos territorios. El uso de la violencia como mecanismo de lucha política, la persecución física e ideológica, y la sistemática violación de los derechos fundamentales a la vida, la integridad personal, la igualdad, y la libertad, entre otros, comprometen seriamente la posibilidad de alcanzar un orden justo por las vías pacíficas. Cuando se presentan situaciones de conflicto armado entre la fuerza pública y los grupos armados que están fuera de la legalidad, el Estado tiene la obligación de ser extremadamente sensible en sus intervenciones, con miras a preservar el equilibrio político y social, mediante la protección eficaz a los grupos, partidos o movimientos minoritarios, en especial a aquellos que por su carácter contestatario pueden "estar en la mira" de otros grupos que, gozando de los beneficios institucionales y patrimoniales, pueden ver amenazadas sus prerrogativas. El surgimiento de grupos, movimientos y partidos políticos minoritarios a raíz de la desmovilización de antiguos integrantes de la guerrilla requiere de especial C Consejo Nacional Electoral REpuBLI +. DE COLOMBIA 7 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 protección y apoyo por parte del Estado. La institucionalización del conflicto, la dejación de las armas y su sustitución por el ejercicio activo de la participación políticodemocrática y la renuncia de la violencia como método para alcanzar el cambio social, son alternativas que deben ser garantizadas por todas las autoridades para evitar que la llamada "guerra sucia" acabe cerrando la posibilidad de llegar a un consenso que reuna a todos los sectores de la población y permita la convivencia pacífica"... (...) La nueva fisonomía del poder político en Colombia significa el abandono de la hipótesis de "lucha contra el enemigo interior" y su sustitución por la cultura de los derechos humanos y su protección aún en tiempos de grave perturbación del orden público. En relación con la eliminación progresiva de la U.P. como fuerza política, agregó: La situación de amenaza aducida es inescindible del contexto vivido por esta agrupación política y su eliminación progresiva. Las simples cifras de muertes y desapariciones de sus militantes o simpatizantes durante los años 1985 a 1992, suministradas por la Unión Patriótica a esta Corte, muestran de manera fehaciente la dimensión objetiva de la persecución política contra ella desatada, sin que por parte del Estado se hubieran tomado las medidas suficientes para garantizar su protección especial como partido político minoritario, sistemáticamente diezmado a pesar de su reconocimiento oficial. La Corte mencionó el contexto político general existente para la época y llamó la atención sobre la necesidad de que se adoptaran medidas de protección a favor de toda agrupación política que optara por las vías democráticas, como consecuencia de los acuerdos de paz: -La UP-...tiene un derecho al apoyo institucional necesario para el ejercicio pleno de sus derechos de participación política, así como, para garantizar su seguridad y la de sus miembros, el acceso a los medios y mecanismos estatales indispensables para desarrollar su acción política y poder crecer como alternativa de poder. No obstante, cabe advertir que "la combinación de las formas de lucha como método para llegar al poder es contraria al orden constitucional democrático, participativo y pluralista, y su utilización manifiesta y sostenida puede conllevar a la extinción de la personería jurídica del partido o movimiento político que recurra a ella (CP art. 95), como quiera que ello significa el desconocimiento del Estado social de derecho y de los fines esenciales del mismo - servir a la comunidad, promover la prosperidad general y garantizar la efectividad de los principios, derechos y deberes consagrados en la Constitución -, los cuales deben ser defendidos y respetados, sin excepción, por todos los colombianos". Consejo Nacional Electoral REWSLT + rE COIDlink 8 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Nótese que desde ese momento, se trazó el horizonte que han debido seguir las autoridades del Estado para enfrentar la persistencia del conflicto armado en Colombia: la proscripción del uso de la violencia como arara de acción política y de cualquier modalidad de combinación de formas de lucha para acceder al poder, el respeto y la protección especial a los derechos de las minorías políticas y, en especial de aquellas surgidas de los acuerdos de paz; el abandono de la teoría del enemigo interno y la promoción de una cultura de respecto a los derechos humanos. Todo lo anterior a partir del principio de distinción , aspecto esencial del derecho internacional humanitario. En desarrollo de la decisión anterior, la Defensoría del Pueblo elaboró un Informe en que señaló que la U.P. fue el resultado del proceso de paz entre el secretariado de las guerrillas de las FARC-EP y el gobierno del Presidente Belisario Betancourt6. Menciona que uno de tos compromisos que adquirió el gobierno nacional de ese entonces fue otorgar "a la Unión Patriótica y a sus dirigentes las garantías y seguridades indispensables para que puedan desarrollar, en forma idéntica a las demás agrupaciones políticas, su acción tanto proselitista como electoral". Destacó que en los acuerdos suscritos con esa agrupación el Este principio que diferencia entre "combatientes- y "no combatientes", se encuentra consagrado en las normas que integran el Derecho Internacional Humanitario que hacen parte de la legislación interna colombiana a partir del bloque de constitucional consagrado en los artículos 93 y 94 de la Constitución. Al respecto se encuentra, entre otras, la sentencia C-291 de 2007 de la Corte Constitucional. 6 El documento titulado informe del Defensor del Pueblo para el Gobierno, el Congreso y el Procurador General de la 5 Nación fue publicado en octubre de 1997 Estudio de casos de homicidio de miembros de la Unión Patriótica y Esperanza, Pa_; Libertad. fue elaborado a partir de la sentencia de tutela T-439 de 1992 en D cual se dispuso. entre otros aspectos: -CUARTO.- SOLICITAR al señor Defensor del Pueblo que. dentro de la órbita de sus competencias y para los fines indicados en el articulo 282 de la Constitución, elabore, en el término de tres (3) meses un informe con destino al Congreso Nacional, al Gobierno y al Procurador General de la Nación. sobre el estado en que se encuentran las investigaciones penales y disciplinarias que se adelantan como consecuencia de las muertes de miembros del partido político Unión Patriótica y del movimiento político Esperanza, Paz y Libertad, así como promover ante las autoridades judiciales competentes las acciones necesarias para el definitivo y total esclarecimiento de estos hechos". (No está resaltado en el original) Consejo Nacional Electoral REPUBLI ADr COWAIKA 9 Aclaración de voto Resolución Na 3594 de 2014 ejecutivo se estableció un compromiso expreso en el sentido que: "El Gobierno hará recaer todo el peso de la ley sobre el ciudadano o la autoridad que conculque sus derechos o niegue, eluda o desconozca las garantías que les corresponda". En el período 1986 — 1988 la U.P. participó por primera vez en una contienda electoral y obtuvo un destacado respaldo en las urnas, alcanzando el apoyo de 320.000 electores que se tradujo en 5 senadores, 9 representantes a la Cámara, 14 diputados departamentales, 351 alcaldes y 23 alcaldes municipales. La Defensoría del Pueblo señaló que en los dos primeros años desde su creación "se asesina al máximo dirigente y candidato a la presidencia JAIME PARDO LEAL, el 11 de noviembre de 1.987, a 2 senadores, 2 representantes a la Cámara, 5 diputados regionales, 45 concejales y 4 alcaldes municipales" 8, y que en el período preelectoral de 1988, en medio de una ausencia total de garantías electorales, se perpetraron contra esa agrupación política 396 homicidios, de los cuales 9 fueron candidatos a Concejos municipales, 5 de candidatos a Alcaldías y 13 diputados. Continua la reconstrucción histórica con el período 1988-1990 en el cual con una notoria variación en su representación popular pues de 23 alcaldías que alcanzó por nombramiento en 1986, pasó a 15 por elección directa en 19889. Los datos de ese período son espeluznantes y a ellos se agregan los asesinatos de su candidato presidencial Bernardo Jaramillo y de uno de sus más destacados líderes, José 8 op. cit, página 65. op. cit. página 66 op. cit. Página 68 Consejo Nacional Electoral KW. BLICA PE COIC,UBL4 10 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Antequera, en 1990, que se sumaron a los "más de 700 homicidios de los cuales fueron víctimas miembros de la Unión Patriótica". Estas cifras fueron ampliadas por investigaciones posteriores. En un estudio adelantado por el periodista Roberto Romero Ospina se documenta que desde 1984 hasta 1997 se produjeron 1.598 víctimas, desapariciones y asesinatos de personas que eran miembros y simpatizantes de la U.P.10. Otros análisis no provenientes de la U.P. señalan más de 3.000 muertos de esa agrupación" . Esta situación llevó incluso, a que en el Código Penal colombiano se reconociera el delito de genocidio por móviles políticos, que se definió como la conducta tendiente a "destruir total o parcialmente un grupo por razones — no solo raciales, étnicas o religiosas como lo establece la legislación internacional, sino también — por causas políticas"12 . Romero Ospina, Roberto. Unión Patriótica. Expedientes contra el Olvido. Centro de Memoria, Paz y ReconciliaciónAlcaldía Mayor de Bogotá y Agéncia Catalana de Cooperació al Desenvolupament. páginas 23 a 138. Dudley. Steven. Armas y Urnas. Historia de un genocido político. Ed. Planeta, 2008. En un estudio adelantado por el senador Iván Cepeda Castro titulado "Genocidio Político: el caso de la Unión Patriótica en Colombia" se presenta una periodización de la acción criminal perpetrada contra la Unión Patriótica así: 1. Fase de debilitamiento organizativo del movimiento 1.984-1992: 2. Fase del "golpe de gracia" al movimiento y de la normalización social del genocidio, 19922002: 3. Fase de exterminio de los sobrevivientes, de 2002 hasta el presente. En kW." usx‘s.desaparecidos.orgicolombialfmcepeda'áenocidio-upicenedaltmlálsdfootnote5nan. Documento Recuperado el 10 de abril de 2015. 12 En el actual Código Penal el artículo 101 señala: "Genocidio. El que con el propósito de destruir total o parcialmente un grupo nacional, étnico, racial, religioso o político, por razón de su pertenencia al mismo...". En la sentencia C-177 de 2001, la Corte Constitucional se refirió al delito de genocidio político en los siguientes términos: "Ningún reparo puede formularse a la ampliación que de la protección del genocidio a los grupos políticos, hace la norma cuestionada, pues es sabido que la regulación contenida en los Tratados y Pactos Internacionales consagra un parámetro mínimo de protección, de modo que nada se opone a que los Estados, en sus legislaciones internas consagren un mayor ámbito de protección. No hay óbice para que las legislaciones nacionales adopten un concepto más amplio de genocidio, siempre Y citando se conserve la esencia de este crimen, que consiste en la destrucción sistemática y deliberada de un grupo humano, que tenga una identidad definida Y es indudable que un grupo político la tiene. La incriminación de la conducta sistemática de aniquilación de un grupo político, mediante el exterminio de sus miembros, encuentra pleno respaldo en los valores y principios que !m'Orinan la Constitución Politica de 1991 entre los que se cuentan la convivencia, la paz y el respeto irrestricto a la vida y a la existencia de los grupos humanos, considerados como tales, con independencia de su etnia, nacionalidad, credos políticos, filosóficos o religiosos". Consejo Nacional Electoral &PUBLICA DE COLOMBIA 11 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Aunque no es del caso examinar las causas de este holocausto, conviene señalar que los análisis sobre sus razones no son coincidentes. Para algunos, la estrategia comunista de la combinación de todas las formas de lucha llevó a una reacción, por medios ilegales, de sectores tradicionales que veían en la UP una amenaza comunista; para otros, esa situación se explica en el propósito de lograr su destrucción "mediante la disolución de su fuerza politica con las posibilidades reales de poder demostradas con el respaldo social creciente que les llevó a ser elegidos en diversos niveles del poder político"13 . En punto a este asunto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos señaló lo siguiente: "La Unión Patriótica no se concibió como un partido político en el sentido estricto de la palabra sino que se percibió, más bien, como una alternativa política frente a la estructura tradicional del poder para contar con un medio que permitiera canalizar las diversas manifestaciones de protesta civil y popular y, asimismo, con un mecanismo político para la posible reasimilación de las FARC a la vida civil-14 . Sin embargo, su accionar político resultó truncado por la ola de asesinatos contra integrantes de esa agrupación. Interesa destacar que en el Informe de la Defensoria del Pueblo se señaló que "los grupos políticos de oposición o minorías, tienen un compromiso de claridad y transparencia frente al país", y agregó que "la combinación de todas las formas de lucha como método para Corporación para la Defensa y Promoción de los Derechos Humanos. REINICIAR. ¿Es la ley de víctimas un instrumento idóneo para reparar integralmente a las víctimas del genocidio contra la Unión Patriótica?, Serie de Documentos Básicos 4, 2013, pág. 55. H CIDH, Caso 11.227 vs Colombia, Informe de Admisibilidad, Informe No. 5 del 12 de marzo de 1997, párrafo 3, citado en Es la ley de Víctimas un instrumento idóneo para reparar integralmente a las víctimas del genocidio contra la Unión Patriótica?. Fundación Reiniciar, Serie Documentos Básicos 4, pág. 44. Consejo Nacional Electoral Ruin ■ PE C310 /A 12 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 llegar al poder es contraria al orden constitucional y que su utilización manifiesta y sostenida puede conllevar a la extinción de personería jurídica del pedido o movimiento político que recurra a ella. "15 Tanto la sentencia de la Corte Constitucional como el Informe de la Defensoría del Pueblo señalan que de haber existido alguna evidencia sobre la combinación de armas y votos como estrategia para acceder al poder político, el camino institucional que han debido seguir las autoridades y los sectores que consideraban que la actividad proselitista y electoral de la U.P. fuesen contrarias al orden constitucional, era el de adelantar las investigaciones judiciales contra quienes pudieron haber incurrido, deliberada o conscientemente, en esa estrategia, contraria y excluyente con el principio básico de toda organización estatal civilizada del monopolio de las armas en el Estado. Igual postura ha asumido la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que examinar el caso del lider de la UP Manuel Cepeda Vargas, ventilado ante ese organismo, señaló lo siguiente: "Si los funcionarios públicos poseían información fidedigna que relacionaba al Senador Cepeda y a los demás miembros de la UP con actividades ilegales, podían poner esta información en conocimiento de las autoridades judiciales correspondientes"" 15 16 Defensoría de Pueblo, op. cit. pág.227. Citada por el Tribunal Superior de Bogotá, Sala de Justicia y Paz. Sentencia 30 de abril de 2013, radicado N° I 1-001- 60-00 253-2006 810099 )Rad. interno 1432). Caso Beben Veloza.García cff OnamanaiNEla-rouár Consejo Nacional Electoral REPUSLICA COLO...U.1A 13 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 También se hubiera podido solicitar la pérdida de la personería jurídica ante el CNE, si de conformidad con la Ley 130 de 1994 se hubiera concluido que esa agrupación política desarrollaba sus actividades por fuera del orden constitucional y legal17. Las realidades demuestran que se tomó el camino contrario: bajo la conducta displicente de varias autoridades civiles y militares se apeló al asesinato político en masa y se dejó en la impunidad los centenares de homicidios contra líderes y miembros de una agrupación que había surgido bajo la promesa de la paz negociada. Otra hubiera sido la situación institucional del país si a partir del reconocimiento del conflicto interno que persistió a pesar de los cambios constitucionales del 91 y de la dejación de armas por varios grupos insurgentes, se hubieran acatado las reglas de respeto a la población civil y del derecho humanitario que obliga a una distinción entre combatientes y civiles18. En realidad, esta regla, que debe observar toda comunidad política que se precie de ser democrática, es una derivación del principio de organización del estado liberal moderno, según el cual "los fines justos pueden ser alcanzados por medios legítimos, y los medios legítimos deben ser empleados para alcanzar fines justos"19. Más contradictorio aún resultó que el Consejo Nacional Electoral no hubiera adoptado medida, ni decisión alguna en el ámbito de su competencia para resguardar los derechos de las minorías políticas y de oposición. 17 El artículo S° de esta ley, aplicable para el momento de los hechos dice: "ARTICULO r—Sanciones. Cuando las actividades de un partido o de un movimiento sean manifiestamente contrarias a los principios de organización y ,funcionamiento señalados en el articulo 6° de la presente ley el Consejo Nacional Electoral podrá ordenar que se le prive de la financiación estatal y del acceso a los medios de comunicación del Estado, además de la cancelación de su personería jurídica si la tienen". 18 19 Al respecto sentencia C-291 de 2007 Corte Constitucional. Benjamin, Walter. Para una crítica de la violencia y otros ensayos. Taurus, T. Edición 1999 pág 24 C E " Consejo Nacional Electoral REFÚBLI n ocCocomeu 14 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Todo lo contrario, se dictaron las Resoluciones 5659 del 30 de septiembre de 2002 y 7477 del mismo año, con las cuales se canceló la personería jurídica de la U.P. por no haber conseguido en las elecciones a Congreso de 2002 el número mínimo de votos o una representación necesaria (50.000 votos o al menos un representante o un senador, según lo establecía el artículo 108 original de la Constitución de 1991), cuando era ya una fuerza exterminada. Con la pérdida de la personería jurídica se perdieron también los derechos de esa colectividad a postular y avalar candidatos a cargos de elección popular; a la financiación estatal de su funcionamiento y campañas; a la utilización de los medios de comunicación para hacer divulgación política y propaganda electoral, contemplados en los artículos 108 y 109 de la Constitución Política y en la Ley 130 de 1994. Cabe anotar que en las elecciones de ese año (2002), la UP no participó y denunció la ausencia de garantías derivadas del hecho notorio e incontrovertible de los centenares de homicidios y desapariciones cometidos contra sus líderes, integrantes y simpatizantes20. A pesar que el artículo 112 protege los derechos de la oposición y las minorías que y artículo 265-3 original de la Constitución Política establecía que al Consejo Nacional Electoral le correspondía velar "por los derechos de la oposición y las minorías" y que la Ley 130 de 1994 desarrolló esta atribución, las resoluciones en mención no contienen ninguna alusión a la situación material a la que se vio enfrentada la U.P. y, por el contrario, fue ignorada a partir de una interpretación exegética de las normas relacionadas con los requisitos para obtener o conservar la personería jurídica. 20 Así se señala en la demanda instaurada por los Doctores Jaime Araujo Renteria y Jorge Ignacio Salcedo Galán ante el Consejo de Estado. nessnessissrea Consejo Nacional Electoral RFPCI3LIC!DE COLOMBIA 15 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 En relación con el exterminio de sus líderes, el Consejo Nacional Electoral señaló que esas "circunstancias extrañas", no podían invocarse ante la autoridad electoral para que se abstuviera de dar aplicación a un mandato legal, e ignoró la eliminación de la casi totalidad de esa comunidad política y de sus líderes, sin los cuales resultaba imposible realizar cualquier campaña electoral. II. Las decisiones del Consejo de Estado (a) La sentencia de la Sección Quinta Al resolver la demanda de nulidad instaurada por los doctores Jaime Araujo Rentería y Jorge Ignacio Salcedo Galán, la Sección Quinta del Consejo de Estado declaró nulas las Resoluciones del Consejo Nacional Electoral21, que extinguieron la personería jurídica de la U.P. En la decisión, esa corporación hizo varias precisiones. En primer término, que el acto impugnado era de contenido electoral; en segundo lugar, que el asunto no podía interpretarse como una cuestión particular pues revestía un asunto de interés general "para la presentación de la democracia y del carácter participativo y pluralista del estado colombiano"; en tercer lugar, que el examen de las resoluciones en cuestión "trasciende la esfera de pronunciamientos que solo afectan al partido político y que adquieren la condición de actos con impacto social y político" y, por consiguiente, eran "controlables por la vía del proceso objetivo de legalidad, que no está sujeto a término de caducidad', pues su finalidad era "preservar en abstracto el ordenamiento legar También concluyó que la excepción de cosa juzgada en relación con una acción judicial instaurada con antelación y 21 Citada en pie de página 1. eeeieeei ene, Consejo Nacional Electoral REPÚBLICA DE. COLOMBL1 16 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 que se propuso para inhibir un pronunciamiento de fondo no se configuraba pues el asunto no versó sobre el mismo objeto, ni se funda en la misma causa, ni existía identidad jurídica de las partes22. Esa corporación se apartó de la hermenéutica que sostuvo el órgano administrativo electoral, al considerar que las resoluciones del CNE que retiraron la personería jurídica de la U.P. incurrieron tanto en falsa motivación como en una desviación de poder, pues: "...lo que ocurrió con la U.P. fue que no contó con las condiciones de garantía indispensables para vincularse a la contienda electoral al Congreso del año 2002 con una pluralidad de candidatos avalados y en un escenario de normalidad participativa. Consecuencia de ello, por obvias razones estaba en imposibilidad de obtener cincuenta mil (50.000) votos, o de conservar al menos una curul en esa corporación de elección popular. Estas fueron las verdaderas razones, de fuerza mayor, que le impidieron, en igualdad de condiciones a los demás partidos, y con garantías de libertad, poder ejercer este derecho político, derecho que es de naturaleza fundamental". Para llegar a esta conclusión, la Sección Quinta del Consejo de Estado tomó en su integridad el Informe de la Defensoría del Pueblo y concluyó que al Consejo Nacional Electoral: "le era exigible constitucional y legalmente que valorara la situación fáctica que gobernaba los acontecimientos del estado de fuerza mayor que padecía el partido, respecto de su capacidad real de participación política, bajo un enfoque con rasero totalmente diferente al que de ordinario, ante situaciones de normalidad, empleaba para evaluar en cualquier otro partido político la ausencia de 50.000 votos o no alcanzar o mantener un escaño en el Congreso de la República. Porque debido a la Se refiere al radicado 11001032400020030014801 que se tramitó ante la Sección Primera del Consejo de Estado. Consejero Ponente: Dr. Marco Antoni Velilla, que decidió desfavorablemente a los demandantes una acción de nulidad y restablecimiento del derecho relacionada con el mismo asunto. 22 Consejo Nacional Electoral REaSLI A De CoLonuun 17 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 crisis de la UP, se trataba de un estadio totalmente irregular y diferente, luego también diferente debía ser el tratamiento a impartir a este partido". El Consejo de Estado insistió en que el CNE se "limitó a aplicar en forma literal el numeral 1° del artículo 4° de la Ley 130 de 1994, para concluir que la UP no reunía los requisitos para conservar su personería", cuando lo que le correspondía hacer era examinar si era viable un tratamiento legal especial en razón a "la particular situación que afrontaba, lo cual era de notoriedad pública". La sentencia es concluyente: "Este contenido de los actos administrativos demandados evidencia el tratamiento que, apartado de la realidad reinante, el CNE impartió a la situación de especial consideración que afrontaba y que le planteó la UP, pues calificó el exterminio del grupo de personas militantes, por razones de intolerancia política, como hecho 'previsible', 'conocible; de 'común ocurrencia; de 'frecuente acontecer', propio de 'acontecimiento normal'. Recurrió a argumentos y conceptos aplicables a las obligaciones civiles y comerciales para resolver una situación de derechos humanos". A partir de señalar que le correspondía a la autoridad electoral descifrar el sentido de la regulación sobre las normas referidas a la personería jurídica de las agrupaciones políticas, concluyó que: "Los citados actos administrativos quedan sin validez ni efecto alguno, lo que significa que la UP no ha perdido la personería jurídica, sino que la mantiene" Como se dijo atrás, el Consejo Nacional Electoral no cumplió con ninguna de las reglas anteriores pues en las resoluciones declaradas nulas acudió a una interpretación literal de las normas constitucionales y de la ley electoral, a pesar de que una de sus funciones Consejo Nacional Electoral KM:TUCA DE COLOMBU 18 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 primordiales se encuentra en garantizar la vigencia plena de los derechos fundamentales de carácter electoral, y en particular, de los derechos de las minorías políticas y de la oposición 23 . En realidad, el CNE desconoció la fuerza normativa de los principios constitucionales y la aplicación directa de los derechos fundamentales a la participación politica y el pluralismo, como aspectos que han debido prevalecer sobre las reglas del umbral en la situación concreta. Al respecto, la Corte Constitucional ha señalado que la interpretación puramente legalista y gramatical de una norma superior que se refiere a los derechos fundamentales, dejando de lado la valoración de los hechos particulares, abre una brecha entre la normatividad jurídica y lo real, no da cuenta de su sentido y sus fines24 y conduce a desconocer la carta de derechos. Esto fue lo que ocurrió en el caso de la UP: se ignoró el carácter normativo de la Constitución; se optó por un entendimiento literal del artículo 108 constitucional y 4° de la Ley 130 de 1994, al margen del sistema de valores y principios constitucionales, como la vida, el pluralismo y la participación democrática; se apoyó en el principio de legalidad sin ponderarlo con la supremacía de la Constitución; no valoró los supuestos de hecho que precedieron la pérdida del derecho a la personería jurídica de una agrupación política; desconoció el contexto fáctico del genocidio político. Es decir, invocó la regla sobre el umbral electoral a partir de una interpretación exegética de su alcance y finalidad, al margen de una realidad material que resultaba ineludible. r Véase artículos 34 y 50 de la Ley 130 de 1994. Interpretación Constitucional. 24 Escuela Judicial Rodrigo Lara Bonilla. http://www.ejr1b.nettsitesidefaultifiles/interpretacion_constitucional.pdf Diego López. r. Edición, en eff Consejo N cional Electoral RITÜMI A DE COLMISIA 19 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Colofón de todo lo anterior fue la nulidad de los actos administrativos que suprimieron la personería jurídica de la UP y la remisión de la decisión a la Corte Interamericana de Derechos Humanos "para que haga parte del caso número 11.227' relacionado con la demanda que cursa bajo el radicado número 11.227 que cursa. ante ese organismo. A partir de esa decisión del Consejo de Estado, el CNE devolvió la personería jurídica a la Unión Patriótica, mediante la Resolución 2576 del 24 de septiembre de 201325. La sentencia de la Sección Quinta del Consejo de Estado es relevante no solo por el hecho de retirar del ordenamiento jurídico los actos administrativos atacados, sino también porque fijó una serie de reglas para la interpretación del artículo 108 de la Constitución Política en punto al umbral electoral, así: i. Al momento de establecer si una agrupación política mantiene la personería jurídica, debe examinarse la situación fáctica para determinar si existen circunstancias de anormalidad y excepcionalidad que impidan cumplir con la votación exigida; ii. En el evento en que tales circunstancias se presenten, estas deben ser graves, extraordinarias y ajenas al partido afectado; iii. Debe estar plenamente demostrado que esa anormalidad impiden una aplicación automática y puramente formal de las reglas del umbral electoral26. 25 "Por medio de la cual se autoriza el registro de los miembros de la Junta Patriótica Nacional y del Comité Ejecutivo Nacional de la Unión Patriótica, y se adoptan otras determinaciones". 26 Así se señala en el concepto de la Sala de Consulta y Servicio Civil del Consejo de Estado del I° de abril de 2014, Consejero Ponente: Dr. William Zambrano Cetina. Expediente N° 11001-03-06-000-2014-00044-00. Olutturn Euemen Consejo Nacional Electoral REPUBLICA DE C01-01‘51-A 20 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Obsérvese también que el Consejo de Estado se pronunció de fondo en relación con las pretensiones planteadas contra unos actos de carácter electoral (de nulidad, no restablecimiento de derecho) y, en principio, de contenido particular, y, precisamente por ello, señaló que en razón a la "incidencia que para el interés general de preservación de la democracia..." encontró que los actos acusados trascendían la esfera de pronunciamientos que solo afectan al partido político "y adquieren la condición de actos con impacto social y político que, por lo tanto, los hace controlables judicialmente por la vía del proceso objetivo de legalidad, que no está sujeto a término de caducidad'. En razón de lo anterior, y para preservar en abstracto el orden jurídico, con independencia de los efectos que generaba la decisión, efectuó un pronunciamiento anulatorio. La decisión de la Sección Quinta no impartió una orden expresa al Consejo Nacional Electoral de restablecer la personería jurídica de la U.P., pues la anulación de los actos acusados se produjo como consecuencia de una acción de "simple nulidad' en orden a "presentar en abstracto el ordenamiento legal, con independencia de los efectos derivados que per se genere el fa/lo'. (b) El Concepto de la Sala de Consulta y Servicio Civil Por otro lado, y en respuesta a la consulta elevada por el Ministerio del Interior sobre la posibilidad de inaplicar el umbral electoral a esta agrupación política en las elecciones legislativas del 2014, en la que se invocó el "proceso de acercamiento con las víctimas y sobrevivientes de la Unión Patríotica para un eventual proceso de reparación integral en el 0.1.o, &anis. Consejo Nacional Electoral IFFL SUCA DE COLOMBIA 21 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 mamo de la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras (Ley 1448 de 2011)" 27 , la Sala de Consulta y Servicio Civil señaló que se debía examinar "si se dan los supuestos fácticos para la aplicación de la norma" relacionada con el umbral y si una interpretación puramente literal del artículo se encontraba acorde con los valores del pluralismo y la participación. En su respuesta señaló que aunque la sentencia de nulidad no establece ninguna excepción o protección intemporal a favor de la U.P., le corresponde a las "autoridades tener en cuenta la sustantividad de la sentencia y la necesidad de dotarla de eficacia". Para resolver los interrogantes planteados por el gobierno nacional, la Sala de Consulta y Servicio Civil acudió a los principios de la justicia transicional y los deberes de reparación de las víctimas del conflicto armado, contenidos en la Ley 1448 de 201128 , en el entendimiento que: "la grave y prolongada afectación de los derechos de participación de la Unión Patriótica no se supera instantáneamente con la devolución de la personería jurídica y sin un mínimo período de transición que le permita reorganizarse como partido y recuperar el ejercicio pleno de sus derechos políticos". La Sala de Consulta concluye que la aplicación del umbral electoral para las elecciones de 2014 no era solo improcedente desde el punto de vista constitucional sino también: 27 En la reseña sobre consulta que elevó el Gobierno Nacional a la Sala de Consulta este organismo señala que el ejecutivo hace énfasis en que "se hace necesario estudiar mecanismos eficaces para garantizar que la sentencia del Consejo de Estado del 4 de junio de 2013 tenga efectos reales en la protección de los derechos de participación de la Unión Patriótica y que esta organización pueda reincorporarse efectivamente a la vida política del país en condiciones de igualdad con los demás partidos políticos. Para el organismo consultante es claro que las medidas de protección a favor de la Unión Patriótica no deben ser puramente formales y que el estado tiene el deber de implementar acciones afirmativas orientadas a la reparación integral de los daños causados a dicha organización política". 2' "Por la cual se dictan medidas de atención, asistencia y reparación integral a las víctimas del conflicto armado interno y se dictan otras disposiciones", conocida como Ley de Víctimas. Consejo Nacional Electoral REPUSE A DE COLOMBIA 22 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 "desde la perspectiva de la no repetición y del restablecimiento de derechos de las victimas del conflicto armado, frente a las cuales un trato formalmente igualitario sin consideración a sus especiales circunstancias de debilidad y victimización, resultaría materialmente contrario al articulo 13 de la Constitución Politica". El Consejo de Estado señaló que para las elecciones de 2014, la Unión Patriótica no se encontraba en condiciones de igualdad, pues suponer que la sola circunstancia de obtener la personería jurídica, inscribir candidatos y hacer propaganda electoral, como cualquier otro partido, no atendía la circunstancia específica de esta agrupación política, y, por el contrario, expresa una "visión parcial y restringida de los derechos de participación reconocidos en la Constitución a todos los partidos y movimientos políticos". Insiste en que, en el caso de la U.P., existe un deber estatal de reparación pues este partido se encontraba en una situación fáctica excepcional para organizarse e iniciar su actividad con mayor anticipación. Lo anterior en razón a que la sentencia que devolvió la personería jurídica es un punto de partida en un proceso de transición hacia el restablecimiento de sus derechos políticos. Se concluye de lo anterior, que la aplicación del umbral electoral a la U.P. en las elecciones de 2014, "haría nugatoria la efectividad de la sentencia del Consejo de Estado del 4 de julio de 2013". cE OR I.UN ELEcroML Consejo Nacional Electoral RYPITTICA DE COWMBIA 23 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 De este pronunciamiento de la Sala de Consulta y Servicio Civil del Consejo de Estado debe destacarse el énfasis en los principios y los derechos contenidos de la Ley de Víctimas29 para dar respuesta a las preguntas formuladas por el gobierno nacional. Para el organismo consultivo, los principios de dignidad de las victimas, verdad, justicia y reparación, no-repetición, complementariedad y rehabilitación de los derechos en su dimensión individual y colectiva, tendiente a una reparación integral de los derechos conculcados, adquieren una fuerza normativa para todas autoridades, incluidas las autoridades electorales. III. La normatividad aplicable al caso de la UP derivada de la restitución de su personería jurídica y el bloque de constitucionalidad Y es precisamente por lo anterior, que le correspondía al Consejo Nacional Electoral, a partir del principio del bloque de constitucionalidad contenido en el artículo 93 de la Constitución Política y, por supuesto los apartes pertinentes de la Ley de Víctimas3° , incorporar a la situación planteada no solo las normas de rango legal sino también los instrumentos internacionales de protección de los derechos humanos que se relacionan con el asunto y, en particular, la Convención Americana de los Derechos Humanos. 29 " La Sala comparte lo señalado por el organismo consultante en el sentido que la aplicación del umbral electoral a la Unión Patriótica en las elecciones de 2014 resultaría constitucionalmente improcedente, no solo desde el punto de vista de los principios de la democracia participativa, representativa y pluralista (articulo I C.P.), sino también desde la perspectivas de no repetición y de restablecimiento de los derechos de las víctimas del conflicto armado, frente a las cuales un trato formalmente igualitario sin consideración a sus especiales circunstancias de debilidad y victimización, resultaría materialmente contrario al artículo 13 de la Constitución Política". 3° La consejera de Estado, Susana Buitrago, explica la decisión de la Sección Quinta del Consejo de Estado, así: "Es de valía agregar que el reconocimiento legal al partido de la UP se fundó también en el bloque de constitucionalidad: los mandatos establecidos en el artículo 21 de la Declaración Universal de los derechos Humanos y en el 23 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos", op. cit, pág. 197. ORGAM2AC I ON E:14.70LC Consejo Nacional Electoral REPUBLICA DE CoLoNtBIA 24 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Esta línea hermenéutica sobre la normatividad aplicable al caso de la Unión Patriótica, ha sido adoptada tanto por la Corte Constitucional, por la sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, como por la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá. (a) Corte Suprema de Justicia En efecto, en sentencia del 15 de febrero de 2013, proferida dentro de la investigación penal adelantada contra el ex congresista CESAR PEREZ GARCIA, la Corte Suprema de Justicia concluyó la responsabilidad del sindicado por la comisión de los delitos cometidos contra integrantes de la Unión Patriótica, entre ellos, varios concejales elegidos en representación de esa agrupación política, episodio conocido como la "masacre de Segovia': "A partir de la incorporación de los Tratados Internacionales de Derechos Humanos a la Constitución Política, sus principios se convierten en parámetros vinculantes de interpretación de los derechos y deberes constitucionales. Por lo tanto, bajo esa consideración se deben apreciar los postulados básicos del derecho penal interno sobre los cuales se ha construido la legitimidad del derecho de penar — entre ellos el de legalidad e irretroactividad de la ley —, y las normas de derecho internacional que se refieren a los compromisos materiales de justicia, verdad y reparación ante graves infracciones contra derechos humanos fundamentales. 31 En ese contexto se piensa que puede ser contradictorio que en aras de la justicia se cuestionen en su nombre principios del derecho penal demoliberal; sin embargo, esa antinomia sólo puede ser admisible a partir de una elaboración que tiene en cuenta la la toma en consideración de los principios y derechos incorporados en el bloque es necesaria, pues en el sistema de fuentes colombiano la constitución es norma de normas y debe aplicarse de manera preferente, por lo que el operador jurídico no solo debe implicar las normas contrarias a la Carta sino que, además, debe interpretar las leyes desde los principios y valores constitucionales. Y cuando se habla de la Constitución pues debe entenderse no solo el texto constitucional sino además los derechos y principios que se encuentran incorporados al Bloque de Constitucionalidad." Cfr. Bloque de Constitucionalidad, Derechos Humanos y proceso penal. Uprimmy Yepes, Rodrigo, pág. 65. 31 "... OREsvanow Emcroitü_ Consejo Nacional Electoral REPÚBLICA DE COLOAIRM 25 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 lectura de los textos legales desde una visión positivista que mira más al trazo lingüístico de la ley que a la realización material de principios y valores superiores.32 En cambio, "por la imperatividad de las normas humanitarias y su integración en el bloque de constitucionalidad... el Estado colombiano debe adaptar las normas de inferior jerarquía del orden jurídico interno a los contenidos del Derecho Internacional Humanitario con el fin de potenciar la realización material de dichos valores", lo cual implica que principios del derecho penal tradicional se afecten con mayor intensidad en aras de la realización de otros de mayor relevancia, como el de protección de la dignidad humana, fundamento de los Estados civilizados.33 Es más, la Corte Interamericana en decisión del 26 de mayo de 2010 se refirió a la sistematicidad del ataque como elemento central de acciones de las que fueron víctimas miembros de la Unión Patriótica, lo cual no deja dudas de la estructura y generalidad del ataque, elemento esencial en la configuración del delito de lesa humanidad.34 La Corte ha señalado al respecto lo siguiente: "Desde 1991, por fuerza de la normativización de la Constitución que antes se consideraba como un tema esencialmente político, la interpretación del derecho dejó de ser un problema de mera hermenéutica o de lógica de buena voluntad, razón por la cual hoy en día la ley solo puede tener sentido en la medida en que sus fórmulas realicen los valores y principios del texto Superior y los tratados internacionales sobre derechos humanos que conforman el bloque de constitucionalidad. 32 "Desde ese punto de vista, los principios, las categorías dogmáticas y los sistemas procesales no pueden considerarse a partir de interpretaciones que aíslen las normas que los definen para rescatar su sentido literal, sino desde sus fines constitucionales, de los cuales se destaca el de la construcción de un orden justo (Preámbulo Constitucional)." Cfr, Sentencia de Casación del 20 de octubre de 2005, radicado 24.026. 33 "Los principios no son normas que establezcan exactamente lo que debe hacerse, sino normas que exigen que 'algo sea realizado en la mayor medida posible, dentro de las posibilidades jurídicas y reales existentes. El ámbito de lo jurídicamente posible está determinado por principios y reglas que juegan en sentido contrario." Cr., Carlos Bernal Pulido. El neo constitucionalismo y la normatividad del derecho. Ed. Externado de Colombia. 34 En la sentencia mencionada, la Corte Interamericana en el caso Manuel Cepeda vs. Colombia, señaló: "En las fuentes disponibles no se encuentran cifras inequívocas sobre el número de personas víctimas de la violencia contra la UP. En 1995 los relatores especiales de Naciones Unidas sobre tortura y ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, habían señalado que desde 1985 la UP había perdido 'a más de 2000 miembros, con inclusión de un senador, tres diputados de la Cámara baja y varios alcaldes y consejeros municipales, todos los cuales han sido asesinados por motivos políticos'... De un documento elaborado en 2008 para el programa Presidencial de Derechos Humanos de la Vicepresidencia de la república surge que, en el periodo 1984 1993, 540 homicidios corresponden a miembros de la UP con respecto al total de víctimas fatales y no fatales de violencia política entre 1984 y 1994, pues en promedio, las víctimas de la UP representan el 40% del total; aunque para los años 1986 y 1987 llegaron a representar casi el 60% del total de las víctimas...? Consejo Nacional Electoral RIMA= A DE COLOMBIA 26 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Obsérvese que los tipos penales que invoca la Sala Penal de la Corte Suprema son objeto de una interpretación contextual a partir del bloque de constitucionalidad y, a partir de allí, se profirió la respectiva condena. (b) Tribunal Superior de Bogotá - Justicia y Paz En una sentencia del Tribunal Superior en Bogotá, proferida en el marco de la Ley 1448 de 2011 - Ley de Víctimas, esa corporación judicial señaló que quien hubiera sufrido un daño como consecuencia de infracciones al Derecho Internacional Humanitario o de violaciones graves a las normas internacionales que protegen los derechos humanos, ocurridas con ocasión del conflicto armado interno puede: "acudir a los mecanismos ordinarios que el ordenamiento jurídico ha previsto para garantizar los derechos a la verdad, la justicia y la reparación, y, por otro, a las prescripciones de DIN y de DIDH que buscan prevenir las violaciones de derechos y que brindan protección a todas las personas en el marco de los conflictos armados internos" 35 . Y en lo que se refiere a la reparación integral de las víctimas de delitos ocurridos en ese contexto: ... no está de más recordar que los derechos de las víctimas de graves violaciones a los derechos humanos, están reconocidos por el Derecho Internacional, y tienen relevancia constitucional porque.- (i) según el artículo 93 de la CN., tales derechos contenidos en tratados y convenios internacionales, ratificados por el Congreso, hacen parte del sistema constitucional colombiano, (fi) los derechos constitucionales deben ser interpretados de conformidad con los tratados de derechos humanos ratificados por Colombia, y (iii) la Corte Constitucional ha reconocido el carácter prevalente de las normas de Derecho Internacional Humanitario y del Derecho Internacional de los Tribunal Superior de Bogotá. Sala de Justicia y Paz. Sentencia del 30 de Octubre de 2013 Magistrado Ponente Dr. Eduardo Castellanos Rozo, Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099, Rad. interno 1432 eff arnoilm Consejo Nacional Electoral Rin:MICA Dr CCWNISIA 27 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Derechos Humanos, y los derechos fundamentales de las víctimas del conflicto armado" 35 Las dos decisiones judiciales reseñadas no dejan duda alguna sobre el carácter vinculante de los tratados internacionales de derechos humanos y, en especial, de la Convención Americana de Derechos Humanos, para las autoridades colombianas en punto al tratamiento judicial de los casos ventilados ante esas instancias por graves violaciones a los derechos humanos de miembros o simpatizantes de la U.P. A partir de lo anterior cabe formular las siguientes preguntas: ¿en el contexto de las medidas que le corresponde adoptar al Consejo Nacional Electoral en relación al cumplimiento de la decisión de la Sección Quinta del Consejo de Estado y del concepto de la Sala de Consulta y Servicio Civil de esa corporación, debió únicamente proferir el acto administrativo mediante el cual se mantuvo la personería jurídica a pesar que la UP no alcanzó el umbral electoral? o, ¿le correspondía también traer al asunto sub examine el principio del bloque de constitucionalidad, y a partir de allí, decidir sobre la aplicación de la normatividad que hace parte del sistema interamericano de derechos humanos, y, en particular, la Convención Americana sobre Derechos Humanos, para efecto de avanzar en la reparación integral de las víctimas del genocidio de la UP, en su dimensión colectivaelectoral?. (c) El bloque de constitucionalidad y el principio de convencionalidad: La Convención Americana de D.H. vincula a las autoridades electorales 10 Ídem Consejo Nacional Electoral REPÚBLICA DE COLomink 28 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Para responder estas preguntas se insiste en que que la Corte Constitucional ha señalado que las normas del Derecho Internacional Humanitario y del Derecho Internacional de los Derechos Humanos hacen parte del sistema constitucional colombiano, y tienen un carácter prevalente en el ordenamiento jurídico interno. El principio del bloque de constitucionalidad, se complementa con otro menos conocido, pero igualmente relevante: el principio de convencionalidad, que se refiere ya no al carácter vinculante de los instrumentos internacionales relacionados con los derechos humanos en general (bloque de consfitucionalidad37), sino a la aplicación directa de la Convención Americana de Derechos Humanos, incluidas también las interpretaciones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a través de sus sentencias, en particular en lo atinente a las reglas para la reparación de las víctimas del conflicto interno armado. El control de convencionalidad ha sido definido como la obligación de verificar "la consonancia de las normas del derecho interno que se aplican a los casos concretos con la Convención Interamericana de Derechos Humanos y con los estándares interpretativos fijados por la Corte IDI138. La Convención Americana de Derechos Humanos fue adoptada como parte de nuestra legislación interna mediante la Ley 16 de 1972, ratificada el 31 de julio de 1973. A la luz del En la sentencia C-067 de 2003, la Corte Constitucional señaló entre otros aspectos los siguientes: 1) "El bloque de constitucionalidad como aquella unidad jurídica compuesta 'por.. normas y principios que, sin aparecer formalmente en el articulado del texto constitucional, son utilizados como parámetros del control de constitucionalidad de las leyes, por cuanto han sido normativamente integrados a la Constitución, por diversas vías y por mandato de la propia Constitución Son pues verdaderos principios y reglas de valor constitucional, esto es, son normas situadas en el nivel constitucional, a pesar de que puedan a veces contener mecanismos de reforma diversos al de las normas del articulado constitucional strictu sensu."; 2) En la Constitución de 1991, el bloque de constitucionalidad se sustenta a partir de los artículos 9, 93, 94, 214 , 53 y 102; 3) Citando a Bobbio, se establece que las disposiciones que integran el bloque superior cumplen cuatro finalidades: "i) son reglas de interpretación respecto de la dudas que puedan suscitarse al momento de su aplicación; ii) la de integrar la normatividad cuando no exista norma directamente aplicable al caso; iii) la de orientar las funciones del operador jurídico, y iv) la de limitar la validez de las regulaciones subordinadas" 38 Bazán, Víctor. El control de convencionalidad: incógnitas, desafíos y perspectivas. En http://www.corteidh.oncr/tablas430034.pdf 37 Consejo Nacional Electoral RIPISLICA Oe Cotamnia 29 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 articulo 93 de la Constitución Politica, no existe duda sobre su carácter vinculante para las autoridades colombianas39. Según el principio del control de convencionalidad "le corresponde a los órganos del Poder Judicial ejercer no sólo un control de constitucionalidad, sino también 'de convencionalidad" ex officio entre las nomas internas y la Convención Americana, evidentemente en el marco de sus respectivas competencias y de las regulaciones procesales correspondientes". El artículo 2° de este instrumento internacional establece que los Estados Partes tienen el deber de suprimir las normas y practicas de cualquier naturaleza que deriven en una violación de los derechos y garantías que allí se reconocen, así como de la expedición de normas y desarrollar prácticas conducentes a la observancia efectiva de esas garantías. Debe mencionarse también que la violación de la Convención, que genera responsabilidad de los Estados Partes puede ocurrir por medio de leyes, por acciones directas y por omisiones. Con respecto a este último aspecto la Corte IDH ha señalado que "la falta de toma por parte del Estado de medidas de protección (...) acarrea per se una violación de la Convención '60. La responsabilidad por la observancia de los derechos señalados en esta Convención no se circunscribe a las autoridades judiciales, que tiene en este ámbito una responsabilidad Sentencia C-370 de 2006 sobre M Ley de Justicia y Paz, aparte 4.3.3. CIDH. Voto razonado del juez Antonio Cancado Trinidades, a la sentencia en el caso de La Masacre de Mapiripdn. Sentencia del 15 de septiembre de 2005. Serie C. N° 134. Citado en Quinche Ramírez, Manuel Fernando. El control de convencionalidad y el sistema colombiano. Revista Iberoamericana de Derecho Procesal Constitucional, núm. 12, juliodiciembre 2009. 3 10 Consejo Nacional Electoral REPUBLI A PE COLOMEA 30 Aclaración devoto Resolución No. 3594 de 2014 principal 41, sino que también abarca otras "autoridades", tal como se indica en varias decisiones de la Corte IDH, en las que se refiere en forma explícita a "los funcionarios y autoridades públicas —quienes — tienen el deber de garantizar que la normativa interna y su aplicación se adecuen a la Convención Americana"42 . Por consiguiente, el deber de cumplimiento de las obligaciones de los Estados Partes en relación con la protección y violación de los derechos humanos de que trata el instrumento interamericano no se circunscribe únicamente a las autoridades judiciales, sino que comprende también a otras autoridades públicas y, entre ellas, las autoridades electorales siempre que las violaciones abarquen aspectos relacionados con asuntos de su competencia y, en particular, con los derechos políticos que se mencionan en el artículo 23 de la convención43. Para resarcir las violaciones de las garantías previstas en la Convención, la jurisprudencia de la Corte IDH menciona dos clases de medidas: la supresión de normas y prácticas de cualquier naturaleza que entrañen violaciones a las garantías allí contenidas y la 41 Al respecto se puede encontrar que la Corte IDH señala que es "el Poder Judicial quien debe ejercer una especie de control de convencionalidad" entre las normas jurídicas internas que aplican en los casos concretos y la Convención Americana sobre Derechos Humanos -Caso Almonacid Arellano y otros vs. Chile, Fondo de Reparaciones y Costas, Sentencia del 26 de septiembre de 2006, pan., 124 42 Caso de la Masacre de La Rochela contra Colombia. Sentencia de mayo I I de 2007, Serie C N° 163. párrafo 192, citado por Quince, op. cit. pág. 186 43 El articulo 23 de la Convención señala lo siguiente: "Artículo 23. Derechos Politicos.l. Todos los ciudadanos deben gozar de los siguientes derechos y oportunidades: a) de participar en la dirección de los asuntos públicos. directamente o por medio de representantes libremente elegidos; b) de votar y ser elegidos en elecciones periódicas auténticas, realizadas por sufragio universal e igual y por voto secreto que garantice la libre expresión de la voluntad de los electores, y c) de tener acceso, en condiciones generales de igualdad, a las funciones públicas de su pais. 2. La ley puede reglamentar el ejercicio de los derechos y opon a que se refiere el inciso anterior, exclusivamente por razones de edad, nacionalidad, residencia, idioma, instrucción, capacidad civil o mental, o condena, por juez competente, en proceso penal-. Y, en concurrencia con el anterior se encuentran los derechos a la vida (art. 4), a la integridad personal (art. 5), art. 8 (garantías judiciales), art. 13 (libertad de pensamiento y de opinión). entre otros. En Méjico el control de convencionalidad en materia electoral tiene plena aplicación. Véase, por ejemplo. Magistrada Roselia Bustillo Marin. El control de convencionalidad: La idea del bloque de constitucionalidad y su relación con el control de constitucionalidad en materia electoral. Lineas Jztrisprudenciales. Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, pág. 7. Consejo Nacional Electoral KEItini DE CoLomslA 31 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 expedición de normas y desarrollo de prácticas conducentes a la efectiva observancia de las mismas. Esta función, corresponde, principal, pero no únicamente, a los órganos del poder judicial, pues así se deduce del plexo normativo de la propia Convención. Al respecto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos señala que: "Conforme a estas normas y su interpretación autorizada, los Estados miembros de la OEA tienen el deber de organizar el aparato gubernamental y todas las estructuras a través de las cuales se ejerce el poder público de manera que sean capaces de garantizar jurídicamente el libre y pleno ejercicio de los derechos humanos y de prevenir, investigar, juzgar y sancionar su vulneracion'44, Quiere decir lo anterior, que las autoridades públicas deben asumir la fuerza normativa de los derechos contenidos, entre otros instrumentos, en la Convención Americana de Derechos Humanos. Y no solo eso, les corresponde también aplicar la jurisprudencia de la Corte Interamericana que fija el alcance de los derechos, la responsabilidad de las autoridades nacionales en su protección y realización, y las reglas para su reparación integral en los eventos de su violación. Al respecto, el consejero del Estado, Jaime Orlando Santofimio señala que el principio de convencionalidad se encuentra integrado a la normatividad nacional y vincula a todas las autoridades y no solo a las autoridades judiciales que responden por ejercer el control de convencionalidad, es decir, de la interpretación, en sede judicial, del ordenamiento jurídico a partir de conformidad con la Convención Americana de Derechos Humanos 45 . En 44 45 Sentencia C-370 de 2006, párr. 433. https://www.voutube.com/wateh?v=1WnrhmN I uA. página visitada 15 de abril de 2015. Consejo Nacional Electoral RFPLIIIU A DE COLOMBIA 32 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 particular, los artículos 1 y 2 de la Convención obligan a todas las autoridades la obligación de respetar los derechos que ella consigna y de adaptar la legislación interna a sus directrices. Este principio encuentra asiento no solo en el artículo 93 de la Constitución Política, sino también en los artículos 1, 2, 103 y 104 de la Ley 1437 de 2011. En particular, el artículo 1° del CPACA señala que la finalidad de su normas, el de la sujeción de "las autoridades a la Constitución y demás preceptos del ordenamiento jurídico, el cumplimiento de los fines estatales, el funcionamiento eficiente y democrático de la administración, y de a observancia de los deberes del estado y de los particulares". Por consiguiente, existe el deber para las autoridades nacionales de dictar los actos objeto de sus competencias con sujeción a la convencionalidad. Se sigue de lo anterior, que no se puede invocar el derecho interno para justificar su incumplimiento. Y, por supuesto, este principio implica también que las reglas para lograr la justa reparación cuando quiere que hayan ocurrido daños materiales e inmateriales, deben atender los principios que en esta materia contiene la Convención. IV. Los criterios de la reparación integral (restitutio in integrum) Ahora bien, entre los derechos que contempla la Convención Americana se encuentran los de las víctimas de graves violaciones. En particular, el artículo 63-146 establece que cuando se produzca una violación a un derecho o a una libertad consagrada en este instrumento, las autoridades públicas no solo deben garantizar el goce efectivo de ellos, sino también, y cuando ello sea procedente, decida que hubo violación de un derecho o libertad protegidos en [la] Convención, la Corte dispondrá que se garantice al lesionado en el goce de su derecho o libertad conculcados. Dispondrá asimismo, si ello fuera procedente, que se reparen las consecuencias de la medida o situación que ha configurado la vulneración de esos derechos y el pago de una justa indemnización a la parte lesionada". 46 " ...cuando cff ORGM CIOX EUCCOUL Consejo Nacional Electoral REnüBLI A DC COLOMMA 33 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 ordenará la reparación de las consecuencias de la situación que configura la vulneración de ellos y el pago de una indemnización justa a la parte afectada La integralidad de la reparación comprende varios aspectos: la restitución integra o plena (restitutio in integrum), el restablecimiento de la víctima a la situación anterior al hecho de la violación, y de no ser posible el restablecimiento pleno, la compensación a través de medidas como la indemnización económica por el daño ocasionado, medidas simbólicas destinadas a la reivindicación de la memoria y la dignidad de las víctimas, entre otras47. Todas estas medidas para garantizar la no repetición de las graves violaciones a los derechos humanos. Dicho de otra manera, en la medida en que se omite la aplicación de las reglas jurídicas tendientes al resarcimiento de los daños causados, se la posibilidad de nuevas espirales de vulneración de los derechos humanos y de allí la importancia de la actuación del CNE para que no se repita un nuevo genocidio político. Estos criterios han sido recogidos en la sentencia C-228 de 2002 de la Corte Constitucional43, en la cual se reconocen los derechos de las víctimas a verdad, justicia y reparación en los procesos penales, disciplinarios y administrativos. Posteriormente, en la sentencia C-370 de 2006, se precisaron los derechos de las víctimas de los delitos atroces y se adoptaron las reglas contenidas en las sentencias de la Corte IDH como criterios de Un desarrollo de estos principios se encuentran en la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Bogotá, Sala de Justicia y Paz, Radicado Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432, caso HÉBERT VELOZA GARCÍA, párrafos 1127 a 1141. 41 En esta sentencia, la Corte Constitucional señaló lo siguiente: "De lo anterior surge que tanto en el derecho internacional, como en el derecho comparado y en nuestro ordenamiento constitucional, los derechos de las víctimas y perjudicados por un hecho punible gozan de una concepción amplia—no restringida erciusivamente a una reparación económica- fundada en los derechos que ellas tienen a ser tratadas con dignidad, a participar en las decisiones que las afecten y a obtener la tutela judicial efectiva del goce real de sus derechos, entre otros, y que exige a las autoridades que orienten sus acciones hacia el restablecimiento integral de sus derechos cuando han sido vulnerados por un hecho punible. Ello sólo es posible si a las victimas y perjudicados por un delito se les garantizan, a lo menos, sus derechos a la verdad, a (ajusticia y ala reparación económica de los danos sufridos". 47 • cff acncl, accw. Consejo Nacional Electoral JUN.: MICA DE COLOMBIA 34 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 interpretación auténtica de los derechos establecidos en la Convención Americana de Derechos Humanos49. En punto al asunto que interesa a esta aclaración de voto, la Corte IDH fija unos estándares sobre la reparación de las víctimas de violaciones graves ocurridas durante el conflicto armando interno en Colombia. Así, en el Aparte V (aplicación del artículo 63-1 de la Convención Americana) de la sentencia en el caso del senador Manuel Cepeda Vargas contra el Estado colombiano, del 26 de mayo de 2010, ese organismo estableció varias obligaciones a cargo del Estado con el fin de reparar el daño una vez ocurrido este y, entre otros aspectos, mencionó los siguientes: a) una investigación completa, para determinar y enjuiciar a los responsables materiales e intelectuales de los hechos; b) medidas de satisfacción y no repetición , como la publicación de la sentencia, el reconocimiento público de la responsabilidad del Estado en la ejecución extrajudicial; c) medidas de conmemoración y homenaje a las victimas, entre ellas la publicación de un video documental; d) la indemnización económica que comprende los daños materiales y morales. Estas medidas se relacionan con la restitución, indemnización, rehabilitación, así como la garantía de la no repetición5° . La restitución implica, siempre que sea posible, devolver a la víctima al estado anterior a la violación manifiesta; 19 511 la indemnización, debe cubrir los perjuicios económicamente Quinche Ramírez, op. cit, paz.' 84 y siguientes. El artículo 63 de la Convención Americana señala lo siguiente: "I. Cuando decida que hubo violación de un derecho o libertad protegidos en esta Convención, la Corte dispondrá que se garantice al lesionado en el goce de su derecho o libertad conculcados. Dispondrá asimismo. si ello fuera procedente, que se reparen las consecuencias de la medida o situación que ha configurado la vulneración de esos derechos y el pago de una justa indemnización a la parte lesionada". Consejo Nacional Electoral RaPCBLECÁ DE COLOnllnk 35 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 cuantificables, entre ellos, los daños físicos y morales, la pérdida de oportunidades, los gastos de asistencia jurídica y expertos; en cuanto a la satisfacción medidas eficaces para que no continúen las violaciones, declaraciones oficiales que restablezcan la dignidad de los afectados, conmemoración y homenajes a las víctimas, entre otras. En todo caso, la reparación debe consistir en medidas que propugnen por hacer desaparecer los efectos de las violaciones cometidas. Ahora bien, podría desestimarse la solicitud de una reparación integral colectiva a favor de la U.P. en razón a que la Convención Americana de Derechos Humanos se hace referencia explícita a los derechos de las personas morales como puede ser, por ejemplo, un partido político. Al respecto, el artículo 2° señala que por persona se entiende todo "ser humano" y los artículos 16 y 23 se refieren a los derechos de asociación y políticos como atribución de "las personas" y "los ciudadanos", lo cual haría suponer que las personas colectivas no serían objeto de protección del convenio y, por ello, no les serían aplicables las reglas de la reparación en caso de violaciones a derechos humanos. Sin embargo, como lo señala Federico Andreu-Guzmán el concepto de víctimas colectivas es de recibo en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Para el jurista "La Declaración sobre los principios fundamentales de justicia para las víctimas de delitos y del abuso de poder, de las Naciones Unidas, estipula también que son víctimas: "las personas que, individual o colectivamente, hayan sufrido daños, inclusive lesiones físicas o mentales, sufrimiento emocional, pérdida financiera o menoscabo sustancial de los derechos fundamentales, como consecuencia de acciones u omisiones que violen la legislación penal vigente en los Estados Miembros, incluida la que proscribe el abuso de poder". (subraya añadida). Y, en ese orden, agrega que: Consejo Nacional Electoral IILMBLICA vE CoLommA 36 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 "Un sistema destinado a la protección efectiva y material de los derechos humanos tiene la obligación de estudiar si en cada caso concreto, más allá de la apariencia formal, los actos presuntamente arbitrarios que afectaron a una persona jurídica, tuvieron también el efecto real (material o sustancial) de afectar por conexidad los derechos humanos de las personas naturales vinculadas, asociadas o de cualquier manera relacionadas con la persona jurídica. Si así fuera y se cumplieran los restantes requisitos necesarios para admitir la petición, la Comisión no podría rechazar el caso con el pretexto de que la violación prima facie, afecta a la persona jurídica" Por tanto, en casos de esta naturaleza resulta procedente la adopción de medidas de reparación, por los daños causados en forma colectiva, en relación con derechos como la libertad de expresión, la asociación, y el ejercicio de derechos políticos que, tendiendo un carácter individual son de ejercicio colectivo. Estos derechos se encuentran mencionados en los artículos 4,5 13, 15, 16 y 23, entre otros, de la convención. A partir de lo anterior, nada impedía que el CNE, atendiendo los pronunciamientos del Consejo de Estado y las razones invocadas por el gobierno nacional, hubiera avanzado con un criterio transicional, en la restitución de algunos de los derechos de ejercicio colectivo a favor de los integrantes de la U.P., a partir de sus competencias constitucionales y legales, en particular, las consignadas en el artículo 265 de la Constitución yen la Ley 1475 de 2011. Con esta decisión el CNE optó por una solución retórica: mencionó los derechos derivados de la personería jurídica, la posibilidad de inscribir candidatos a cargos y corporaciones públicas de elección popular, la financiación estatal de actividades políticas del partido o movimiento político, y el derecho a utilizar los medios de comunicación social del Estado, de manera permanente; transcribió extensos párrafos de la sentencia C-490 de 2011 de la Consejo Nacional Electoral REPÚBUCA DE COLonina 37 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 Corte Constitucional que se refiere a estos derechos; invocó el principio de igualdad, pero omitió hacer referencia alguna a la expresión contenida en la sentencia de la Sección Quinta del Consejo de Estado, según la cual "la UP no ha perdido su personería jurídica, sino que la mantiene" y menos aún, a los siguientes apartes del Concepto de la Sala de Consulta y Servicio Civil: ... La sentencia analizada no establece a futuro ninguna exención o protección especial o intemporal a favor de la Unión Patriótica respecto del umbral electoral. Empero, no significa lo anterior que las autoridades no deban tener en cuenta la sustantividad de la sentencia y la necesidad de dotarla de efectividad" Como tampoco examinó el siguiente aparte de la Resolución 2576 de 2013 del CNE, se estableció que: "...los fallos de nulidad producen efectos retroactivos o 'ex tunc', esto es, desde el nacimiento del mismo acto anulado, las cosas han de retrotraerse antes de su expedición y, por lo tanto, han de regresar al estado en que figuraban antes de que se profirieran las Resoluciones que declararon la pérdida de la personería jurídica de la Si se hubieran analizado tanto las decisiones del Consejo de Estado, como la propia Resolución 2576, el CNE ha debido no solo mantener la personería juridica de la U.P., sino también fijar unas medidas en el ámbito electoral para la reparación de los derechos afectados con la extinción de aquella, por dos razones: La primera, porque los efectos ex tunc implican retrotraer las cosas al estado anterior, no solo el mantenimiento de la personería, sino de los derechos que se derivan de ella. La segunda, porque la máxima jurídica según la cual lo accesorio sigue a lo principal (accesorium sequitur sortem rei f cisssmaN nra. Consejo Nacional Electoral RERTUCA DE COLOMBIA 38 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 principales) tiene plena vigencia en este caso. Le correspondía pues al CNE examinar en la situación concreta las medidas para reparar no solo el derecho principal (personería jurídica), sino los accesorios en materia electoral (financiación estatal, otorgamiento avales, acceso a medios de comunicación social). V. La Ley 1448 de 2001 o Ley de Víctimas y la reparación de los derechos de la U.P. Finalmente, y si lo anterior fuera insuficiente, el CNE hubiera podido, a partir de a Ley de Víctimas, avanzar en medidas reparatorias frente a la U.P. Basta señalar que esta ley tiene plena aplicación en el asunto examinado: El articulo 1 señala que en el marco de la ley 'pueden adoptarse medidas "administrativas", "individuales y colectivas', dentro de un marco de justicia transicional, para "hacer efectivo el goce de sus derechos a la verdad, la justicia y la reparación con garantía de no repetición, de modo que se reconozca su condición de víctimas y se dignifique a través de la materialización de sus derechos constitucionales"; el articulo 3 fija el ámbito temporal de su aplicación desde el 1 de enero de 1985; el artículo 8 señala el derecho a la aplicación de medidas transicionales; el artículo 25, el derecho a la reparación integral; el artículo 26, el principio de colaboración armónica entre las autoridades en el cumplimiento de la ley; el artículo 27 el principio según el cual "En los casos de reparación administrativa, el intérprete de las normas consagradas en la presente ley se encuentra en el deber de escoger y aplicar la regulación o la interpretación que más favorezca a la dignidad y libertad de persona humana, así como a la vigencia de los Derechos Humanos de las víctimas"; el Consejo Nacional Electoral IWITuca DECoLcuulu 39 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 artículo 28, los derechos de las víctimas; el artículo 69, las medidas de reparación; y los artículos 151 y 152, la figura de la reparación colectiva y los sujetos de la misma. En conclusión, a partir del marco normativo aplicable al asunto examinado, la Unión Patriótica tiene derecho a una restitución integral de sus derechos, esto es, al acceso efectivo y en condiciones de igualdad a medidas de reparación, acordes a los estándares del derecho internacional de los derechos humanos. Para el efecto, el CNE bien hubiera podido reconocer dentro de su competencia, no solo los recursos para el funcionamiento de la agrupación política que dejó de recibir en el período 2002-2013, sino también hubiera podido adoptar otras medidas reparatorias, que van desde a) el otorgamiento de una franja en los medios de comunicación para la reconstrucción de la memoria histórica de los hechos que victimizaron a esa organización y sus militantes; b) la presentación pública de excusas en un acto solemne por haber suprimido arbitrariamente la personeria jurídica; c) la exhortación al gobierno nacional y al Congreso de la República para la expedición del Estatuto de la Oposición que, de haberse expedido oportunamente, habría permitido que voces como las de la UP tuvieran presencia en los organismos de control electoral; d) el restablecimiento de las curules perdidas por efecto de los homicidios de que fueron víctimas sus líderes en la misma proporción similar a la que tenía la UP en el momento en que se inició su exterminio físico y político. Todo lo anterior, sin afectar su derecho a la acción judicial en el ámbito contencioso administrativo lo cual traería como contrapartida que el estado podría compensar lo que otorgue a través del programa de reparaciones administrativas del casos'. 51 OEA. Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Lineamientos principales para una politica integral de reparaciones. 19 de Febrero 2008. Mimeo. e 011...C. ELEZtHI.I.1 Consejo Nacional Electoral K/FIMU A DE CoLomBLA 40 Aclaración de voto Resolución No. 3594 de 2014 De esta forma, el CNE podría resarcir en parte los daños causados a esa agrupación con una actuación que desconoció la Constitución y las leyes. Al no hacerlo, repite nuevamente su postura de inaplicar la Constitución Política que nos rige y que la vincula como órgano de garantías electorales a favor de las minorías y la oposición. Y lo más grave: mantendrá la situación de discriminación en la que actualmente se encuentra la U.P., por efecto de la pérdida de su personería jurídica que no logrará superarse sin medidas efectivas de reparación. En los anteriores términos, suscribo la presente aclaración de voto. • AR NOVOA GARCÍA Magistrado ANG.