38 LATERCERA Jueves 4 de septiembre de 2014 Deportes PRECEDENTES Fútbol David Arellano, 1927 Raúl Iglesias, 1955 Manuel Mondaca, 2003 El 2 de mayo, el jugador de Colo Colo se golpeó con las piernas el estómago, durante un partido en Valladolid. Se le diagnosticó peritonitis y falleció al día siguiente. El 30 de agosto se enfrentaban Palestino y Magallanes en Santa Laura. El argentino Iglesias era el árbitro y se desplomó a los 43’. Falleció de un infarto, en el lugar. El 21 de octubre, el arquero de la Sub 17 de Unión Española se desplomó y sufrió convulsiones en un entrenamiento. Falleció camino a la clínica Dávila, por un edema pulmonar agudo. Fallece un futbolista en pleno amistoso R Carlos Barra, de Quilicura (2ªD), se desploma tras un remate. Fernando Contreras Minuto 22 de juego. En la cancha de entrenamiento del Estadio Municipal de La Cisterna juegan Palestino y Maipo Quilicura de Buin, equipo de la Segunda División Profesional. El juego se desarrolla bajo nubes amenazantes y el equipo local no se esfuerza mucho para ponerse 3-0 en ventaja. Con las ganas de buscar mejor suerte, el equipo visitante intenta posicionarse en campo rival. Carlos Barra Vargas (24), lateral derecho del equipo dirigido técnicamente por Luis Saavedra se proyecta, encuentra el espacio y remata. Sin suerte. El partido sigue 3-0. Sería la última jugada del compromiso. El joven jugador, quien ultimaba los detalles de su contrato con la institución buinense, retoma su posición y se desploma. La angustia de los presentes fue inmediata. Cuatro personas intentaron reanimar a Barra. La ambulancia llega unos 20 R Reanimación sin desfibrilador se prolonga durante 20 minutos. minutos después. Sus efectivos tampoco consiguen salvar la vida del joven. El forense certifica su muerte a pie de césped una hora después. “No hay palabras. El shock es muy fuerte. El chico cayó y eso fue todo. No había con qué asistirlo de buena forma. Cuando llegó la ambulancia con todos los equipos, ya no había nada que hacer. Ver llegar a su papá a encontrarse con su hijo muerto es de lo más fuerte que me ha tocado. Ojalá esto sirva de prece- dente para que se tomen las medidas necesarias”, dice Jorge Bell, agente de jugadores y testigo del hecho. Jorge Schwager, zaguero de Palestino, asegura: “Cuando lo fuimos a ver ya estaba con los ojos blancos y convulsionando. Fue muy fuerte. Los médicos intentaron reanimarlo hasta que llegó la ambulancia. Estuvieron largo rato. No había desfibrilador y todo se hizo a mano. Nos dimos cuenta de inmediato que había muerto Todos asociamos la R “Murió haciendo lo que más le gustaba”, asegura su padre. situación a un problema cardíaco”, puntualiza. En 2008, la ANFP inició un plan para abastecer a todos los clubes profesionales de un DEA (desfibriladores externos automáticos). Hace dos años, sin embargo, Palestino sufrió el robo del suyo, por lo que sólo contaba con estos en los partidos oficiales. Las bases del fútbol chileno obligan al local a contar con dos ambulancias totalmente equipadas en un duelo. Pese a que todo ocurrió pa- C ARLOS BARRA estaba dispuesto a realizar cualquier esfuerzo para concretar su sueño. Quería ser futbolista profesional y sabía que, a sus 24 años, Maipo Quilicura, de Buin, podría ser la última puerta que se le abriera para cumplirlo. El destino lo devolvió al lugar donde comenzó todo. Antes del partido de entrenamiento con la escuadra que iba a defender en esta temporada, el volante devenido en lateral derecho saludó a varios conocidos. Fue especialmente cariñoso con quienes fueron sus profesores. En La Cisterna era uno más de la casa. Había realizado toda su formación en Palestino e, incluso, había aportado, hace algunos años, a la consecución de un título en las categorías inferiores. En las dependencias del club árabe está el registro de la hazaña deportiva. Ahí también surge la primera pista respecto de los problemas cardíacos que pudieron desembocar, ayer, en su deceso. “Nos comentaron que el chico había estado en Palestino y que tenía un soplo al corazón. Le había salido mal el electrocardiograma. Se estaba probando en Quilicura”, dice el carrilero palestinista Jorge Schwager, quien lo vio desplomarse sobre la cancha. Coincide el técnico de Maipo Quilicura, Luis Saavedra. “Cuando niño, tenía problemas al corazón. Pero ya estaba todo superado. Era profesor de Educación Física. Era un joven sano, con toda la ilusión. Llevaba más de un mes con nosotros”, dijo el conmocionado DT quien, tras el incidente, piensa en terminar su carrera. “Si me pregunta ahora, no quiero volver a una cancha de fútbol”, enfatizó. Ricardo Quilodrán, gerente del Fútbol Joven del club de colonia, desconoce la versión. “Acá, en las divisiones inferiores, les sado el mediodía, el cuerpo de Barra fue trasladado hasta el Servicio Médico Legal recién a las cuatro de la tarde, hasta donde llegaron familiares y amigos. No obstante optaron por manejar el tema en privado, su padre, Carlos Barra, dijo que “todo fue un accidente; una situación fortuita”. “Es una pena inmensa”, añadió, “un dolor insuperable. Él estaba buscando su oportunidad en el fútbol. Quería ser profesional... Murió haciendo lo que más le gustaba”.b hacemos un electrocardiograma a nuestros jugadores todos los años. La exigencia la establece la ANFP, que obliga a adjuntarlo a la inscripción. Nos dolió mucho lo que pasó con Carlos. Él no llegó a la serie Juvenil, pero fue campeón con la Sub 15 en el Monumental”. La búsqueda de una oportunidad lo llevaría desde La Cisterna a Deportes Temuco. El equipo del Ñielol era dirigido por Sergio Bernabé Vargas. El lateral sólo disputó los amistosos de pretemporada. Superman no lo consideró en el plantel. Debió volver a Pudahuel Barrancas. La señal OO El malogrado Carlos Barra, quien falleció ayer, en un amistoso en La Cisterna. FOTO: DEPORTES TEMUCO La escalofriante confesión del futbolista fallecido a un amigo dos semanas antes del incidente que le costó la vida. Por Christian González A. “Me da miedo que el corazón me juegue una mala pasada” El malogrado deportista se había titulado de profesor de Educación Física en la Universidad Autómona. Ahí lo conoció Nicolás Núñez, quien lo incorporó al staff de SinAlitas.cl, empresa que se dedica a impartir clases de natación a domicilio en el sector oriente de la capital. Se habían conocido en la entidad educacional, que no pide un examen de suficiencia física a los alumnos que ingresan a la carrera. Ahí surgió una relación de estrecha confianza. “Carlos fue uno de los profesores mejor evaluados de este año. Incluso, iba a darle una charla al resto del equipo. Tenía una gran relación con los clientes. Y era muy leal. Una vez, una clienta le ofreció contratarlo para que le realizara clases particulares. La rechazó y me lo informó”, revela. Ese nivel de cercanía le permitió a Núñez conocer el síntoma que ni el padre homónimo del futbolista dijo recordar ayer: “Supe hace poco que tenía un problema. Hace unos 15 días, me dijo ‘tengo miedo; de repente, me da miedo que el corazón me juegue una mala pasada, que me juegue en contra’. Son repocas las personas que sabían de esto. Para él, nunca fue un impedimento. Nunca le tomó el peso”.b