LA CEGUERA RELIGIOSA La atención mundial de estos días se ha volcado entorno a los atentados terroristas, que han cobrado la vida de millares de vidas inocentes y que han afectado tranquilidad mundial. Yo creo que el origen de todo este problema es: “La ceguera religiosa” La ceguera religiosa no es algo nuevo. Fue la causa por la cual crucificaron a nuestro Señor. El Apóstol Pablo escribió lo siguiente: “Ninguno de los príncipes de esta edad conoció esta sabiduría; porque si ellos la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de la gloria.” La ceguera religiosa llevó a Saulo de Tarso a perseguir a los cristianos. La Biblia nos relata lo siguiente: “Entonces Saulo asolaba a la iglesia. Entrando de casa en casa, arrastraba tanto a hombres como a mujeres y los entregaba a la cárcel.” Tiempo después Pablo escribió lo siguiente: “a pesar de que antes fui blasfemo, perseguidor e insolente. Sin embargo, recibí misericordia porque, siendo ignorante, lo hice en incredulidad.” La ceguera religiosa fue la que llevó los líderes religiosos de aquel tiempo a matar cruelmente a Juan Hus y Jerónimo de Praga, por proclamar la verdad... La ceguera religiosa fue la que llevó los gobernantes influenciados por las autoridades religiosas a ejecutar a William Tyndale, quien antes de morir exclamó: “Señor, ¡abre los ojos del rey de Inglaterra!. Por el pecado de haber traducido la Biblia al Inglés y haberla distribuido por toda Inglaterra. La ceguera religiosa agnóstica, ateísta se vistió con ropajes materialistas. Según el Dr. Russel Kirk en su libro: “Economía, Trabajo y Prosperidad en Perspectiva Cristiana” dice: “El comunismo es más que un sistema económico. Lo que muchas gentes no se dan cuenta es que el comunismo no es esencialmente un movimiento político como tampoco es esencialmente un movimiento económico. Es esencialmente una religión. Karl Marx una vez fue interrogado por un reportero: "¿Cual es su meta principal? El respondió que su meta principal tenía un doble objetivo: Destronar a Dios y destruir el capitalismo. Concluimos que: el comunismo encuentra su más grande adversario en Jesucristo. Por lo cual deducimos que el comunismo es una religión del anticristo. La ceguera religiosa es la que ha llevado a algunos musulmanes extremistas a considerar el “Jihad”, como el sexto pilar del Islamismo, la palabra árabe Jihad quiere decir: hacer un esfuerzo exhaustivo para agradar a Dios, ayudando a otros musulmanes en sus necesidades, pero también si es necesario a pelear contra sus enemigos. Son considerados enemigos los Kafir: no creyentes del Islam, tales como los budistas o hinduistas, los cuales si no se convierten al islam, pueden ser ejecutados y una vez convertidos al islam, se considera un pecado capital si renuncian a su fe. También son considerados enemigos los ahl al-kitab (pueblo del libro) e incluyen a los judíos, cristianos y seguidores de zoroastro. La ceguera religiosa llevó a los terroristas al suicidio y asesinar miles de vidas, creyendo servir a Dios. Escrito está: “y aun viene la hora cuando cualquiera que os mate pensará que rinde servicio a Dios.” (Juan 16:2) La palabra de Dios nos declara que la ceguera tiene un origen: “Pues el dios de esta edad presente ha cegado el entendimiento de los incrédulos...” El dios de este siglo se refiere a satanás, quien a lo largo de los siglos ha traído ceguera espiritual, la cual ha sido la causa de las distintas maldades del ser humano. El Señor Jesucristo declaró que antes de su venida la ceguera religiosa continuaría haciendo estragos. En alguna época futura se cumplirá la siguiente profecía: “Entonces os entregarán a tribulación y os matarán, y seréis aborrecidos por todas las naciones por causa de mi nombre.” (Mateo 24: 9) La ceguera espiritual solo puede ser curada a través del conocimiento personal de Jesucristo. El Apóstol Pablo expresó: “Porque el Dios que dijo: "La luz resplandecerá de las tinieblas" es el que ha resplandecido en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en el rostro de Jesucristo.” Estoy convencido de que la verdadera alternativa para sacar a este mundo de la ceguera y fanatismo religioso es la proclamación del Evangelio a toda criatura. Una persona genuinamente nacida de nuevo es librada de todo error y fanatismo religioso, ya que escrito está: “...el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad” Una persona genuinamente “nacida de nuevo”, no es otro fanático religioso. Es una nueva criatura que ha recibido el perdón de sus pecados y el Espíritu Santo ha venido a hacer morada en su corazón. El fruto del Espíritu Santo manifestado en el interior de esa persona es descrito por Pablo como: “amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y dominio propio.” Es el tipo de ciudadano que puede influir en sus seres queridos y semejantes para bien. Es el tipo de ciudadano salvadoreño que tanto se necesita en estos tiempos difíciles. René Mejía Vides www.cimientoestable.org