¿Tendrás deuda hipotecaria durante la jubilación? La mayoría de los prejubilados esperan tener deuda hipotecaria durante la jubilación. Si eres uno de ellos, es una buena idea entender las ventajas y desventajas a fin de considerar tus opciones. Tener una hipoteca en tu vivienda tiene ventajas fiscales, pero pueden agotarse durante la jubilación. Y, por supuesto, tienes que determinar si puedes cubrir el pago de la hipoteca con tus ahorros y los beneficios del Seguro Social. Para saberlo, busca ayuda en la calculadora para la jubilación, de AARP, en www.aarp.org/retirementcalc. Estos son algunos de los asuntos que debes considerar si tendrás una hipoteca durante la jubilación. Beneficios fiscales de una hipoteca Un tipo común de préstamo hipotecario es una hipoteca a 30 años. Con ella, tu pago generalmente incluye dos partes: el capital y los intereses. Tu pago de capital se destina a la cantidad real del préstamo, mientras que el pago de los intereses se destina a la tasa de tu prestamista cobra por darte el préstamo. La mayor parte de tu pago en los primeros años va hacia el interés. Pero, con el tiempo, una mayor parte se destina a tu capital. Deducciones por interés hipotecario La mayoría de los propietarios se benefician de una deducción de intereses hipotecarios a la hora de pagar impuestos. La cantidad que pagas en intereses hipotecarios se deduce de tus ingresos brutos, lo que reduce la cantidad de impuestos sobre la renta federal. Pero recuerda: cuanto menos hipoteca te quede por pagar, menor será también el interés. Esto reduce el beneficio de la deducción. Deducción de impuestos sobre la ­propiedad Es común que los pagos de la hipoteca incluyan los pagos de los impuestos sobre la propiedad y el seguro. La porción de tu pago por estos conceptos se mantienen en reserva, una cuenta especial de donde tu institución hipotecaria paga estos cargos. Tus impuestos estatales y locales sobre la propiedad son deducibles a la hora de presentar tu declaración de impuestos federales. Desventajas tributarias al pagar una hipoteca durante la jubilación Los beneficios fiscales al tener una hipoteca pueden ser grandes, pero su valor puede disminuir significativamente cuando te jubiles. En primer lugar, puedes estar pagando mucho menos interés de tu préstamo, lo que resulta en una deducción de intereses hipotecarios mucho menor. En segundo lugar, es probable que tus ingresos en la jubilación sean menores de lo que fueron durante tus años laborales. Tus impuestos sobre la renta probablemente serán más bajos, por lo que las deducciones de tu interés hipotecario y los impuestos sobre la propiedad pueden tener poco o ningún valor a la hora de pagar tus impuestos. Además, si planificas pagar tu hipoteca mensual con el dinero de un plan 401(k) o una IRA, es posible que tengas una mayor carga tributaria. Si las cuentas son tradicionales, es decir, que no pagaste impuestos sobre tus contribuciones, tendrás que pagar impuestos sobre ellas y tus ganancias cuando comiences a retirar ese dinero. Sin embargo, la tasa de tu impuesto sobre la renta probablemente será menor en la jubilación de lo que fue durante tus años laborales. Además de extraer dinero de estas cuentas para el pago de la hipoteca, tendrás menos dinero para vivir. Cuando se combinan tus ingresos de estas cuentas con el beneficio del Seguro Social, es posible traspasar ese umbral que hace que tu beneficio del Seguro Social sea tributable. Esto ocurre cuando tu ingreso en la jubilación, incluida la mitad de tus beneficios del Seguro Social, supera los $25,000 ($32,000 para parejas). Qué hacer Si te gusta la idea de quedarte con tu vivienda y estás en camino a pagar tu hipoteca, puede valer la pena que te quedes. Obtendrás una agradable reducción en los gastos mensuales cuando los pagos de la hipoteca desaparezcan. Todavía tendrás que pagar impuestos y el seguro (y todo el mantenimiento necesario por ser propietario de una vivienda), pero si puedes costearlo, no tener una hipoteca es muy bueno. Para ver cuánto más rápido puedes pagar tu hipoteca si haces pagos adicionales, consulta la calculadora para terminar de pagar el saldo de la hipoteca, de AARP, en www.aarp.org/money. Si te falta mucho para cancelar el saldo de tu hipoteca, podrás continuar beneficiándote de las deducciones tributarias. Pero si tus impues­ tos federales sobre la renta son más bajos y el beneficio de la deducción no es muy grande, vender la vivienda puede ser una buena idea. Todos estos años después de la caída del mercado inmobiliario, las ventas de bienes raíces siguen siendo difíciles en algunas partes del país. Si la venta no es una opción para ti, considera conseguir un inquilino para ayudar a pagar los gastos de la hipoteca y el mante­ nimiento. Si vendes tu vivienda, los primeros $250,000 ($500,000 en el caso de para parejas casadas) de las ganancias de capital no son tributables, siempre y cuando hayas vivido en tu hogar, por lo menos, dos de los cinco años antes de venderlo. El dinero que ganes en la venta de la vivienda podría ser una bendición para tus ahorros de jubilación. ¿Por qué no pensar en una hipoteca revertida? Si eres dueño de tu vivienda o has pagado una gran parte de tu hipoteca, podrías ser elegible para aprovechar el valor líquido de tu hogar para obtener ingresos de jubilación mientras vivas allí. Una hipoteca revertida te permite pedir préstamos contra tu vivienda. No tienes que pagar el préstamo, siempre y cuando vivas allí. Debes tener 62 años o más y vivir en tu hogar para ser elegible. Puedes recibir pagos en una sola suma total, en una línea de crédito, como ingreso mensual o en alguna combinación de los anteriores. Tus pagos se basan en el valor de tu vivienda, según lo determinado por el prestamista. Una hipoteca revertida es una decisión finan­ ciera importante y puede ser muy arriesgada para algunas personas. Aprende todo lo que puedas acerca de cómo funciona y qué otras opciones tienes antes de tomar una decisión. Puedes comenzar en www.aarp.org/revmort. Toma medidas QQ Entiende cuánto pueden durar tus ahorros y tus beneficios del Seguro Social con la calculadora para la jubilación, de AARP, en www.aarp.org/retirementcalc. QQ Echa un vistazo a los documentos de tu hipoteca para determinar cuánto tiempo deberás seguir pagando tus cuotas ­mensuales durante la jubilación. QQ Averigua si el dinero que extraerás de los planes para la jubilación preimpuestos para pagar tu hipoteca y vivir, combinado con la mitad de tus beneficios del Seguro Social, hará que tu beneficio sea gravable. QQ Considera acelerar la cancelación de tu deuda. Consulta cómo los pagos adicionales podrían beneficiarte con la calculadora para terminar de pagar el saldo de la hipoteca, de AARP, en www.aarp.org/money. QQ Si estás considerando una hipoteca rever­ tida, procede con precaución. Averigua todos los detalles que puedas en www.aarp.org/revmort. ©2014 AARP Financial Security 601 E Street NW Washington, DC 20049 www.aarp.org D18950 (1214)