El lóbulo cefálico (xu, fig. i) es bastante parecido al de la H. im

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L. ALAEJOS Y SANZ.
El lóbulo cefálico (xu, fig. i) es bastante parecido al de la H. impar, pero generalmente se encuentra teñido por una substancia granulosa rojiza que domina principalmente en la región anterior, dejando un espacio casi sin pigmentación en la base, en
el cual se encuentran los ojos posteriores.
Los palpos están provistos de largas papilas táctiles y la placa
subcefálica se encuentra teñida de un color azulado negruzco parecido al que presenta en la especie anterior.
Las antenas y los apéndices cirriformes llevan papilas táctiles
(xu, fig. 2 ) largas ( 0 , 1 0 mm.), pero más pequeñas que las de la
H. impar.
Pero los principales caracteres por los que se pueden diferenciar las dos especies son la estructura de los-élitros y la de las
cerdas dorsales; estas últimas, á pesar de ser de forma parecida,
tienen las espinillas mucho más pequeñas, y las líneas transversales que forman no están tan separadas (fig. 3) como en la especie anterior.
Los élitros tienen colores muy vivos, variando según la región;
así, en la que se encuentra cubierta por el élitro anterior es de
un color rojo violado; en la región posterior es más amarillenta
y en el centro y espacios laterales aparecen mezclados los colores verde, pardo y amarillo, dominando principalmente el primero. Esto en cuanto se refiere á l a x a r a superior, pues en la
inferior suelen tener en el centro, cerca del punto de inserción,
un espacio muy teñido de verde, debido á una substancia granulosa, constituyendo células poligonales con un espacio pequeño
en el centro, incoloro á manera de núcleo.
Toda la superficie de los élitros está provista (fig. 4) de papilas fuertes quitinosas que pueden variar de tamaño según el
lugar donde se encuentren, llegando á faltar por completo en
un pequeño espacio en el borde anterior, que es el que queda
cubierto por los élitros que le preceden. Estas papilas quitinosas
pueden estar aisladas ó formando grupos sobre una misma placa;
las primeras dominan en la mitad posterior ó región descubierta,
y suelen ser las de mayor tamaño, las unas con una abertura
muy grande y de forma cilindrica (fig. 8), y las otras algo más
pequeñas y con la extremidad más ó menos afilada (fig. 9 y 1 0 ) ,
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