memorias constituyentes del eln

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MEMORIAS CONSTITUYENTES DEL ELN
Camilo González Posso – Presidente de INDEPAZ –
“He sido designado para participar en LA ASAMBLEA CONSTITUYENTE” dijo Manuel
Pérez entonces comandante del ELN.
Por esos días la Coordinadora Guerrillera Simón Bolívar y el gobierno consideraban los términos
de la posible participación de la FARC, el ELN y el EPL (Caraballo) en la Asamblea Constituyente
que había sido ya acordada con el respaldo de 5 millones de votos en las elecciones
presidenciales del 27 de mayo de 1990.
La CGSB, y en ella el ELN, tenia serios reparos al pacto político que suscribieron el gobierno, los
partidos liberal, conservador y la AD M19, pero vio en el proceso constituyente en curso una
oportunidad para la política y el diálogo sobre la paz. Por ello la CGSB expresó su disposición a
concurrir a la Asamblea y escucho la oferta del gobierno. Cinco cupos ofreció el gobierno en el
último intento en diciembre de 1990 y 20 fue la contrapropuesta de delgados, entre los cuales 11
serían de las FARC, 7 del ELN y 2 del EPL. En esos días fue cuando Manuel Pérez dijo que él era
uno de los escogidos para ir a la Asamblea Constituyente y de esa manera subrayó que fue el
gobierno quien cerró el tema1.
La crónica de este episodio ha sido repetida por Catatumbo y Caraballo y termina con el ultimátum:
lo toman o lo dejan mandó a decir el Presidente Gaviria, sin rebajarles por supuesto la previa
desmovilización, concentración y entrega de armas. Las expectativas del cura Pérez, Jacobo Arenas
y Caraballo quedaron sepultadas debajo de las bombas que cayeron por los lados del cuartel de la
cumbre guerrillera en la Serranía de La Macarena.
Pero la idea de una constituyente como parte de un acuerdo de paz tiene muchos otros momentos en
la historia del ELN. Unas veces ha figurado como posibilidad de síntesis de una Convención
Nacional y en otras ocasiones ha sido consignada en documentos avalados por los gobiernos como
escenario probable de solución al conflicto. Aunque todas las apuestas políticas del ELN han estado
en su concepción de poder popular autónomo desde la base social, no deja de tener significado el
que en cada ocasión que ha intentado un diálogo con los gobiernos, desde Samper a Santos, haya
colocado sobre la mesa la posibilidad de una Constituyente.
He tenido la oportunidad de estar cerca de esas agendas, como testigo o protagonista en varios
intentos de diálogo entre el gobierno y el ELN o con delegados de la sociedad civil (Maguncia,
Viana, Rio Verde, Ginebra, Estocolmo, San José, La Habana) y me parece oportuno hacer memoria
ahora que se han generado tantas expectativas por las conversaciones exploratorias adelantadas
por esa organización insurgente con el gobierno.
De toda esa experiencia podría decir, en interpretación libre y tal vez revisionista, que la alternativa
revolucionaria del ELN ha contemplado lo que Camilo Torres llamó Asamblea Nacional Popular
como hilo conductor en la constitución de poder dual, llamado también proceso de Convención
Nacional autónomo del Estado. Al considerar la solución negociada el ELN ha hablado de
Asamblea Constituyente como confluencia de ese poder popular con la institucionalidad para un
nuevo pacto. Las preguntas siempre han estado en las proporciones de la combinación, en las
1
Voz 27 septiembre de 1990 http://www.ideaspaz.org/tools/bcp?page=2613
1
formas de articulación de la democracia directa y la representativa y en los alcances sociales y de
soberanía de los contenidos.
LAS CONSTITUYENTES EN LOS TIEMPOS DEL RUIDO
En la década de los setenta y primera parte de los años ochenta el ELN no tuvo presencia en
escenarios de diálogo hacia una solución política; sus propuestas se dirigieron a establecer bases
en regiones en las cuales procuraba recomponerse después de los golpes en la Operación Anorí que
diezmó sus frentes en 1973. Por esos años se habló en Colombia de la necesidad de una Asamblea
Constituyente. Eran los tiempos de la crisis del Frente Nacional y de todo el régimen bipartidista
hegemónico en el siglo XX. Los partidos tradicionales promovieron el pacto de monopolio del
poder, inicialmente entre 1958 y 1970 y luego se dieron las mañas para prolongarlo hasta 1991 con
la tesis de la participación paritaria en los cargos públicos y con las practicas tradicionales del
clientelismo.
Pero la crisis les brotó por todas las costuras como se vio en las elecciones de 1970 cuando la
ANAPO se les metió por la mitad y tuvieron que acudir al fraude para hacerle el relevo presidencial
al candidato Misael Pastrana Borrero. El régimen entró en turbulencia cuestionado por paros
cívicos, movimientos campesinos, levantamientos estudiantiles, que tuvieron su cima en 1977
cuando se realizó el Paro Cívico Nacional. Surgió el M19 y crecieron todas las guerrillas. El Estado
de Sitio como forma de gobierno se reforzó con el Estatuto de Seguridad perfeccionando una
dictadura civil muy efectiva para la arbitrariedad pero poco eficaz para resolver el desbarajuste de
un régimen que había caducado pero que se negaba a renovarse.
“Institucionalización o catástrofe” fue el diagnóstico de López Michélsen cuando propuso en 1973
una “pequeña constituyente” para superar las crisis. Y en la otra orilla, desde 1974 los movimientos
socialistas le respondimos que lo que se necesitaba era una Gran Asamblea Constituyente 2.
La experiencia del Perú, con la Asamblea Constituyente que le dio punto final a las dictaduras
militares en 1978, fue de gran influencia entre la intelectualidad en Colombia. La consigna de la
Asamblea Constituyente se propagó en estos años en América Latina como parte de las alternativas
a la dictadura en Brasil, Bolivia y Centroamérica. Pero en Colombia el debate sobre la oportunidad
de una constituyente se quedó en las elites que necesitaban cada vez más renovar su vieja
maquinaria institucional. Las propuestas socialistas de constituyente tenían poco eco y las
guerrillas estaban en pleno auge en resonancia con los avances del sandinismo en Nicaragua y de
las ofensivas antidictadura de las guerrillas en El Salvador.
Cuando se abrió el Dialogo Nacional durante el gobierno de Belisario Betancurt (1984 – 1985) a
las mesas reunidas en el Congreso de la República llegaron las propuestas de Asamblea
Constituyente como camino a la paz. El EPL, desde las comisiones del dialogo fue pionero de
estas ideas y Convergencia Socialista las entregó al Dialogo en 1985 y al Congreso por la
Nueva Colombia realizado por el M19 en los Robles, Cauca3.
En ese momento el ELN no consideró la participación en los diálogos por la paz ni acompañó a las
FARC en los Acuerdos de La Uribe que abrieron las conversaciones con el gobierno de Belisario
Betancurt. Por esos años el ELN estaba en reconstrucción o en lo que Carlos Medina Gallego llama
el RE - FUNDAMIENTO. En 1982 los Elenos formaron una nueva dirección nacional bajo la
conducción de Manuel Pérez y Nicolás Bautista y en 1984 realizaron lo que denominaron Primer
2
3
PST, El Socialista, Semanario, archivo INDEPAZ
Convergencia, Constituyente o Congreso Admirable para la paz, Los Robles Cauca, Febrero de 1985,
2
Congreso. En esa refundación el ELN rescató su herencia camilista sobre el poder popular y la
elaboró para formular la propuesta de poder como poder paralelo al del Estado que se va
constituyendo en una estrategia de sustitución de los poderes establecidos desde la base de la
sociedad.
Al momento de la conformación de la Unión Camilista – ELN en 1987 esas tesis, que aquí
llamo constituyente por la base, fueron recogidas por su dirección:
“El poder local es el espacio donde el pueblo empieza a ejercitar su libertad y democracia,
donde empieza a resolver problemas económicos y sociales a partir de su propia
iniciativa…el poder popular local va reemplazando el viejo poder oligárquico…va echando
las bases de la nueva sociedad…el poder popular local es el espacio donde se unen las
vanguardias y las masas para dar vida a las instituciones políticas, a proyectos económicos,
a formas organizativas militares, a manifestaciones culturales…” 4
CONSTITUYENTE DEMOCRÁTICA Y POPULAR
La formación de la Coordinadora Guerrillera Simón Bolivar y de los frentes políticos
que acogían sus propuestas, marcó en 1987 un giro importante en la estrategia de las guerrillas y en
la relación de las FARC y del ELN con el tema de la solución política y el debate nacional sobre los
mecanismos de un posible pacto de paz. Como relata Carlos Medina Gallego, en 1988 la CGSB
incluye en su ideario la necesidad de una nueva constitución.
“La II Conferencia de la CGSB se realizó en abril de 1988. La situación nacional atravesaba
por un periodo crítico en materia de orden público y violencia cruzada. La Coordinadora se
preocupó en ese momento por formular lo que se denominó un Acuerdo Popular y
Democrático que buscaba salirle al paso a la implementación del Estatuto Antiterrorista y la
guerra sucia que estaba en su mayor recrudecimiento a través de una movilización social
nacional que tomara como bandera esencial el Derecho a la Vida. En ese momento
la Coordinadora siente que las necesidades del pueblo y sus derechos ya no tienen solución
en la Constitución Política, que acababa de cumplir 100 años, y que por lo tanto, se requería
de un nuevo pacto social y político que emanara de las necesidades y las luchas del pueblo
y que se plasmara a través de una constituyente popular y democrática”. 5
A sólo unos meses de la fundación de la CGSB se produjo la escisión del M19 que pactó con el
gobierno de Cesar Gaviria, en diciembre de 1988, el inicio de un dialogo hacia la desmovilización y
dejación de las armas. Los acuerdos de Pizarro y el gobierno fueron duramente criticados por
Jacobo Arenas y los jefes del ELN pero el impacto del proceso fue obligando a la CGSB a
involucrarse en la discusión publica y a hacer propuestas para la solución política.
En mayo de 1989 en las mesas de dialogo y negociación con el M19 se llega al acuerdo de
promover una Asamblea Constituyente para la paz en la subcomisión encargada del tema y con la
firma de delgados de los partidos políticos, mesas dirctivas del Congreso de la República y de
organizaciones aliadas de ese proceso.
4
AHELN. Unionn Camilista ELN. Fundamentos. 8 de junio de 1987. Estrategia y Tanctica. 1925,, http://www.bdigital.unal.edu.co/3556/1/469029.2010.pdf .
5
Carlos Medina G, Una historia comparada del ELN y las FARC, Universidad Nacional, 2013.
3
Lo que sigue es conocido. Los acuerdos políticos con el M19 que se incluyeron en la reforma
constitucional y abrían la posibilidad de convocar al pueblo a referendo o constituyente en
diciembre de 1989 fueron hundidos por el propio gobierno en el Congreso. Los congresistas amigos
de los narcotraficantes, en plena guerra de Pablo Escobar , introdujeron
un
artículo prohibiendo la extradición de Colombianos y el gobierno prefirió hundir todo el proyecto y
de paso el pacto con el M19. El asesinato de Luis Carlos Galán había desatado un movimiento
democrático de amplio espectro que levantaba la bandera de la constituyente y detrás de las
propuestas de paz se animaba una gran ilusión especialmente en las ciudades y en las capas medias.
Sobre ese escenario el M19 decidió apelar al pueblo y habló de hacer el pacto de paz con un
levantamiento constituyente. (Declaración del 14 de diciembre de 1989: Ante el fracaso del
referendo, aplazar las elecciones y convocar una Asamblea Nacional Constituyente) 6.
Algunos de los voceros de las organizaciones firmantes de la propuesta de mayo sobre el asamblea
constituyente y otras personas asociadas desde 1985 en el Comité Nacional Proconstituyente
redactamos en ese diciembre de 1990 la papeleta de voto convocando a ser metida en las urnas el 11
de marzo como un acto de desobediencia civil y de soberanía popular. En enero de 1990 se sumó el
diario El Espectador que, en medio de las ruinas y del duelo por el asesinato de Guillermo
Cano, se inclinaba por llamar a la abstención; luego lo hizo El Tiempo a instancias de los
universitarios que bautizaron ese voto como séptima papeleta y le dieron el gran impulso. Nadie
contó los votos pero no hubo duda en Colombia de que se había producido un hecho revolucionario
constituyente. El M19 dejo las armas sin haberse cumplido el pacto político solo con un acuerdo de
garantías para la participación, amnistia y con la esperanza de empatar con la
ola constituyente desatada. A los pocos días Carlos Pizarro fue asesinado por orden de una
asociación de la ultraderecha del régimen, los servicios de inteligencia del DAS y los
narcotraficantes paramilitares, tal como lo confesó su jefe Carlos Castaño.
Una muestra de la conexión inmediata del ELN y la CGSB con lo que ocurría con el proceso
constituyente fue su inmediata reacción ante el voto del 11 de marzo.
“La Quinta Cumbre de la CGSB, se pronuncia a favor de una Asamblea Nacional
Constituyente que interprete el sentimiento nacional de cambio. Considera que así
concebida, abre nuevos y anchos caminos para la reconciliación de los colombianos en un
ambiente democrático y crea las condiciones para la solución política a la crisis nacional
por lo que abogamos y para lo que consideramos conveniente un dialogo gobierno guerrilla
que incorpore nuevos elementos como: realizarlo de cara al país, con presencia
internacional que garantice la seriedad de las conversaciones e incluso la posibilidad de
ceses de fuego de carácter bilateral y dentro de plazos definidos…En consideración a todo
lo anterior, convocamos al pueblo a rechazar por ilegitimas las próximas elecciones
presidenciales y a apoyar el pronunciamiento nacional por la convocatoria de una Asamblea
Nacional Constituyente de composición democrática y representativa, cuya tarea central sea
la elaboración de una nueva constitución capaz de reflejar la realidad colombiana del
momento y proyectarnos en la solución democrática de nuestros problemas.” 7
La CGSB alertó sobre la necesidad de darle a una constituyente un carácter “popular, democrático y
soberano”. En las elecciones del 27 de mayo de 1990, por iniciativa del gobierno apoyada por los
partidos liberal y conservador y la AD M19, se convocó al pueblo a votar por una “Asamblea
Constitucional” para reformar la constitución e instalar la democracia participativa. Ese voto logró
6
7
FUCUDE, Biblioteca de la paz, Negociaciones con el M19, EPL, MAQL y PRT, 1989 – 1991,
AH-ELN. V Cumbre del a CGSB. Conclusiones Abril de 1990. Págs. 13-14
4
más de 5 millones de sufragios, el 85% del total de la votación para Presidente de la República. La
reacción del ELN fue de reconocimiento al mandato popular pero de rechazo a la pretensión de
recortarlo dandole el carácter de Constitucional, es decir parcial, y no de Constituyente soberana.
Así lo manifestó en el mensaje al Primer Congreso Preconstituyente, realizado en Bogotá en Julio
de 1990.
“Una Constituyente soberana donde converjan las fuerzas vivas del país será el punto de
partida a la solución de sus grandes problemas y para abrir la búsqueda de salidas políticas
prontas y concretas al conflicto armado… El gobierno del Dr. Gaviria le daría la espalda a
las aspiraciones de cambio y a la solución política que desde tiempo atrás hemos venido
proponiendo, si impulsa otro tipo de Constituyente y niega la participación de las
organizaciones populares. Habría que buscar formulas para que las fuerzas vivas del país
estén representadas en la Constituyente, tales como los gremios económicos, las
organizaciones sociales, los movimientos comunales y de usuarios, los estudiantes, la
iglesia, las organizaciones de Derechos Humanos, las de consumidores, la CGSB, los
departamentos y municipios”8
En ese mensaje el ELN señala los ejes de las transformaciones mínimas que debería abocar una
constituyente y propone una composición multisectorial con 300 miembros. 9 La importancia que le
otorga a lo que está ocurriendo en la vida política se recoge en el nombre de su reunión de agosto de
1990, el VI Pleno de la Dirección Nacional denominado “Por vida y constituyente la Simón
Bolívar presente”.
Las conversaciones entre el gobierno y la CGSB para una eventual vinculación de las FARC y el
ELN a la Asamblea Constitucional, transformada en Constituyente a partir de la sentencia del
Consejo de Estado en agosto de 1990, se realizaron hasta el día de la elección de esa Asamblea el 9
de diciembre de 1990, cuando el gobierno las dio por terminada mandando a bombardear la sede
de reuniones en el municipio de Uribe Meta. Quedaron en la mesa las diferencias sobre la
composición, carácter de la constituyente y exigencia del gobierno de previa desmovilización. De
manera simbólica se recuerda el desacuerdo sobre el número de delegados de las FARC y el ELN
que se sumarían a los 70 ya definidos en el pacto político.
A pesar del bombardeo las conversaciones con la CGSB se quisieron reanudar en 1991 a instancias
de la Asamblea Constituyente. Pero los tiempos estaban marcado una vez el 4 de febrero se inicio el
trabajo de la Constituyente con el plazo definido de seis meses para aprobar la nueva constitución.
La decisión del gobierno era acelerar el paso al tiempo que preparaba la “guerra integral” en contra
de las guerrillas que no habían aceptado el pacto. Faltando un mes para la terminación de las
sesiones de la Asamblea se dieron cita las FARC y el ELN con el Ministro de Gobierno Humberto
de la Calle. Ese ya era un capitulo cerrado que tuvo su epilogo en Tlaxcala cuando se mostraron las
grandes diferencias sobre los procedimientos y contenidos de un pacto. Allí el gobierno, después
de la muerte de Argelino Duran en manos del EPL (C), dio por canceladas las conversaciones.
8
AH-ELN. Carta Abierta la Primer Congreso pre-Constituyente. UC-ELN – FARC-EP. Montañas de
Colombia, Julio 10 de 1990.http://www.bdigital.unal.edu.co/3556/1/469029.2010.pdf . Cmg 680
9
“1. liquidar la Doctrina de la Seguridad Nacional; 2. Desmontar el régimen autoritario del Estado del Sitio permanente;
3.Garantizar la Soberanía Nacional; 4. Refrendar una política internacional que desate los lazos de dependencia actuales,
reemplazándolos con la autodeterminación nacional, la solidaridad internacionalista y el no alineamiento; 5. Asegurar la
vida y el más amplio bienestar económico y social de las mayorías nacionales; 6. Conformar un ejército patriótico garante
del proceso de cambio y de la soberanía de la nación colombiana” AH-ELN. Carta Abierta la Primer Congreso preConstituyente. UC-ELN –FARC-EP. Montañas de Colombia, Julio 10 de 1990
5
EL PUEBLO MANDA
En el palacio de Viana en Madrid se volvió a hablar de constituyente pero ahora fue subordinada
por el ELN a la realización de la Convención Nacional. El gobienro de Samper estaba comenzando
y en un golpe de audacia, con gestiones especiales de Augusto Ramirez Ocampo, se reunieron
discretamente los delegados de las partes para establecer la ruta de un nuevo intento de paz. El
famoso acuerdo de Viana tuvo solo una horas de vida pues pasó de secreto a debate público cuando
se alborotaba ya el escándalo de las narcoelecciones y el gobierno antes de comenzar ya estaba en
crisis y con cero capacidad de maniobra para meterse en un proceso incierto de diálogos con una
guerrilla que estaba en ascenso.
Pero el esquema de Convención Nacional que se pactó en Viana el 9 de febrero de 1998 tiene un
alto significado en este recuento de amores y desamores del ELN con la idea de una Asamblea
Constituyente.
En el primer punto del documento se pactó “La convocatoria a una Convención Nacional
para la Paz, la Democracia y la Justicia Social que tendrá como finalidad estructurar un
acuerdo cuyo desarrollo se dé en todas las instancias legislativas y espacios posibles que
sean indispensables, inclusive por medio de la convocatoria a una Asamblea Nacional
Constituyente como lo ha venido proponiendo la insurgencia o a un Referendo que concite
la amplia participación democrática de todos los colombianos”.
La Convención Nacional parece otra traducción de la Asamblea Popular de Camilo Torres y
muestra la reiteración del ELN en buscar el poder local cada vez que tiene dificultades o radicaliza
su discurso. Y así ocurrió después de los diálogos frustrados, de la guerra total del Gobierno
Gaviria y del panorama de esos años marcado por la ofensiva de los paramilitares en el Magdalena
Medio, el Catatumbo, Arauca y Casanare.
En mayo de 1996, Manuel Pérez le escribía a una amiga,
“Proponemos la realización de una Convención Nacional en zonas donde pueda participar
la insurgencia. Que se hagan Convenciones Regionales para nombrar los delegados de los
sectores populares, gobiernos municipales, gremios económicos, iglesia popular y
jerárquica, organismos de D.H. y la insurgencia. Se conforma un nuevo gobierno en base al
programa que allá se apruebe”10 En entrevista publicada por El Tiempo el cura Pérez volvió
sobre lo mismo. “ E.T.: Qué posición tiene el E.L.N. frente a la crisis del gobierno de
Samper? Cómo la están aprovechando política y militarmente? M.P.: Es una crisis de
gobierno, pero el problema cobija al Estado, al sistema y a la sociedad. Proponemos una
convención nacional de aquellos que son independientes del gobierno, de los conspiradores,
del imperialismo y del paramilitarismo, para construir un programa nacionalista y
democrático al frente del cual se conforme una junta de gobierno”.
En diciembre de 1997 “Pérez reiteró la propuesta de que se organice un gran encuentro de
todos los sectores de la sociedad, que convoque después a una Constituyente en la que se
que plantee el cambio estructural de la sociedad y se elija un nuevo Gobierno ” 11
CONVENCIÓN COMO PRECONSTITUYENTE EN UN PACTO
10
Cartas a Laura, https://www.eln-voces.com/descargas/libros/eln/024-SI-LAS-MONTA
%C3%91AS.pdf.
11
http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-676460
6
La Convención Nacional oscila entre confluencia de poderes independientes que constituyen
un poder paralelo con junta de gobierno que asume el poder y proceso preconstituyente que sirve
de base a un acuerdo de transición con el régimen existente. Así parece ubicarse en el acuerdo
firmado en Alemania en la reunión realizada en el Convento Puerta del Cielo.
El Mandato Ciudadano por la paz mostró en octubre de 1997, con sus diez millones de votos, que
en medio de la crisis de estos años y de generalización de la violencia irrumpía un fuerte
movimiento en contra de la guerra y sus atrocidades y por la solución negociada del conflicto
armado. El ELN reconoció ese Mandato como una expresión de soberanía popular y aceptó reunirse
con una delegación del Consejo Nacional de Paz para avanzar en compromisos humanitarios y
retomar el camino de la solución política. El Pacto de Maguncia lo firmamos 32 delegados del CNP,
representativos de sectores organizados de la sociedad civil y la delegación del Comando Central
del ELN integrada por Pablo Beltran y Milton Hernandez . Entre los civiles estaba el actual
presidente de la República Juan Manuel Santos y su Ministro de Defensa Luis Carlos Villegas,
entonces Presidente de la ANDI. Uno de los apartes más destacados del Pacto de Maguncia suscrito
el 15 de julio de 1998 en un convento, es precisamente el relativo a la Convención Nacional:
“En vista de los resultados positivos obtenidos en esta reunión acordamos también
la convocatoria de una Convención Nacional con miras a la obtención de la paz y la justicia
social, la ampliación de la democracia y la consolidación de la soberanía nacional, bajo
los siguientes parámetros: Por Convención Nacional entendemos un proceso con varios
espacios de diálogo, con capacidad propositiva por parte de representantes del Estado, la
sociedad y la guerrilla que en el participen. La Convención Nacional buscará elaborar las
bases de un acuerdo político de reformas y transformaciones sociales con miras a la
democratización del Estado y de la sociedad. Su desarrollo se hara a través de
los mecanismos que sean indispensables de orden administrativo o legislativo e inclusive a
través de la organización de una Asamblea Nacional Constituyente”.12
Los asistentes nos comprometimos como comité de impulso de la Convención y del temario allí
esbozado y en desarrollo de ese acuerdo se realizó la reunión de Rio Verde, Antioquia. El
comunicado de ese encuentro detalla entre otros el temario de lo que sería la Convención y define
un cronograma para su realización.
“1. Derecho Internacional Humanitario, derechos humanos, impunidad, justicia, insurgencia y
conflicto. 2. Recursos naturales y política energética. 3. Democracia, Estado, Fuerzas Armadas y
corrupción. 4. Economía y problemas sociales. 5. Cultura e identidad; nación-región , ordenamiento
territorial; problema agrario y narcotráfico”. 13
El gobierno de Pastrana también acogió el Mandato por la Paz y dio los pasos para iniciar primero las
conversaciones con las FARC en 1999 en el Caguan y luego con el ELN para lo cual se propuso una zona de
encuentro en el Magdalena Medio. Los paramilitares y sus aliados decidieron oponerse con todas sus armas al
desarrollo de las conversaciones con el ELN en una zona especial o similar a la establecida en El Cagúan.
Pero el ELN siguió en la linea de Maguncia y Rio Verde como le escuchamos plantear a Antonio Garcia en la
reunión convocada con el gobierno en Ginebra Suiza en julio de 2000. El punto central del Comandante del
ELN fue la necesidad del consenso nacional para realizar la Convención Nacional como preparación de una
Asamblea Constituyente:
“ Pensamos que el instrumento fundamental para realizar las transformaciones es la convocatoria a
una Asamblea Nacional Constituyente; entonces, ese acuerdo nacional tiene que ir más allá de la
Convención Nacional, pero es el que va a permitir generar esa convocatoria de Asamblea Nacional
Constituyente. El acuerdo debe permitir definir los alcances de la misma constituyente la forma, la
12
Mandato por la Paz, Documentos desde la Puerta del Cielo, 15 de agosto de 1998, revista consultada
en el Archivo de INDEPAZ.
13
Valle del Rio Verde, 12 de octubre de 1998 http://www.ideaspaz.org/tools/download/51089
7
metodología de cómo se debe nombrar o seleccionar a los participantes y la metodología de
preparación.
Sobre la base de esa Asamblea Nacional Constituyente se puede visibilidad la reconstrucción de la
sociedad colombiana, pues se trata de una reestructuración de la sociedad que necesariamente se
relaciona con la esencia de lo que sería la constituyente, es decir, la reestructuración de los poderes,
del poder económico, del poder político, del poder militar, del poder de los medios de comunicación.
El sentido de esa reestructuración tiene que ser la democratización de la sociedad y que el nuevo
Estado represente ese diseño de sociedad y que los nuevos Gobiernos representen e integren ese
diseño de sociedad”. 14
Las propuestas presentadas ese día por Antonio García no se pudieron debatir en Ginebra porque la reunión
se irrumpió abruptamente cuando llegaron las noticias del asedio de los paramilitares a los comandantes del
ELN que se encontraban en la Serranía de San Lucas.
LA CONVENCIÓN EN LA HABANA
Durante la primera década de este siglo XXI el ELN articuló su discurso estratégico con sus enunciados de
Convención Nacional, Acuerdo Nacional, Asamblea Constituyente y Nuevo Gobienro de Nación, Paz y
Equidad.
A los pocos días de haberse posecionado Álvaro Uribe el ELN le dirigió un mensaje críticando su política de
“paz romana” y señalando que no se daban condiciones en ese momento para “el inicio de un proceso sólido
que fructifique y enrumbado hacia un nuevo país”. No obstante ese escepticismo sobre posibles pactos de paz
con la nueva administración, el ELN reafirma sus propuestas. En la carta del 2 de septiembre de 2002 señala
que:
“Seguimos convencidos que la búsqueda de la solución política es un esfuerzo de todos los
colombianos, donde entre todos, a través de la Convención Nacional, construyamos un Gran
Acuerdo Nacional, que dote de polóticas para resolver los granes atranques que los gobiernos no han
logrado, y como esuerzo culminante de esgta búsqueda se convoque a una Asambnlea Nacional
Constituyente que le dé nacimiento a la Nueva Colombia que nos merecemos todos.” Carta abierta
al Presidente Álvaro Uribe Vélez. Comando Central del ELN, 2 de septiembre de 2002.
Colombia debe marchar hacia la construcción de un Nuevo Gobierno, de nación, paz y equidad. Un
gobierno que sea construido desde cada colombiano, desde lo local y lo regional, desde hechos
políticos y sociales, desde la movilización y la protesta
…
Llamamos a toda Colombia, a los jóvenes, a los trabajadores, a las mujeres, a todos quienes nos
duele la suerte de la Patria, a trabajar por una salida política al conflicto; para que en ese proceso
participativo unifiquemos idearios, para que en el ejercicio de buscar la paz construyamos
democracia; para que en cada encuentro examinemos los dolores de la patria y desde nosotros
mismos construyamos el futuro. La búsqueda de la paz debe colocarnos en el camino de un Nuevo
Gobierno”. 15
Tal vez lo más novedoso del planteamiento del ELN en este periodo es la focalización de su estrategia en el
objetivo de un Nuevo Gobierno de Nación, Equidad y Paz, tal como lo acordaron el el IV Congreso realizado
en julio de 2006. La Convención Nacional tiene en ese discurso el papel de concitar la participación popular
desde la base en consonancia con el lema ¡ El pueblo habla el pueblo manda!. En mi lenguaje sería una
variante de preconstituyente que le da sustento a la Asamblea Constituyente y lleva a la conformación de un
nuevo gobienro como garante de las transformaciones que emanan de los mandatos del pueblo. 16
14
Antonio Garcia, Ginebra Suiza, 23 de julio de 2000, en FUCUDE,…
http://www.derechos.org/nizkor/colombia/doc/paz/eln1.html
16
Colombia debe marchar hacia la construcción de un Nuevo Gobierno, de nación, paz y equidad. Un
gobierno que sea construido desde cada colombiano, desde lo local y lo regional, desde hechos políticos y
sociales, desde la movilización y la protesta. Tiene que ser un gobierno sustancialmente diferente, construido
con la participación democrática y protagónica de las mayorías que haga viable un acuerdo nacional para
15
8
Con ese andamiaje político el ELN estableció diálogos esporádicos con el gobierno de Uribe desde diciembre
de 2002 y se formalizó una mesa de diálogo exploratorio en diciembre de 2005 que funcionó hasta agosto de
2007 en ocho rondas realizadas en La Habana. El objetivo de la Fase Formal Exploratoria fue elaborar la
agenda para las negociaciones y definir lo que se denominó el Acuerdo Base. Ese intento de llegar a una fase
formal de negociaciones de paz fracasó porque el gobierno buscaba solo el desmonte de la guerrilla y el ELN
un acuerdo de cambios para un “nuevo país”. Esas diferencias se reflejaron en los capítulos del borrador de
Acuerdo Base y en los desencuentros sobre la exigencia del gobierno de cese al fuego unilateral y
concentración en uno o varios sitios de todos los efectivos urbanos y rurales del ELN como condición previa
para instalar la mesa de conversaciones. Desde el CNP la delegación a la VIII Ronda llevó varias propuestas
para desbloquear los diálogos, pero ya la suerte estaba echada para el fin de esas rondas tal como lo consigne
en el informe presentado el 12 de septiembre de 2007.17
En el borrador de Acuerdo Base se llegó a plasmar un esquema de participación que contemplaba en el
capitulo II el impulso a la Convención Nacional, su preparación y realización; se consignó incluso la idea de
un equipo impulsor: “Dentro de las labores de preparación de la Convención Nacional se invitará a diferentes
sectores políticos y sociales del país a participar de manera directa en la construcción de escenarios de paz y
en especial de la Convención Nacional”. (FUCUDE, opus cit. Pág. 277). Ademas se habló de encuentros
preparatorios de la Convención Nacional en los cuales
“se buscará articular las Casas de Paz, el Consejo Nacional de Paz y los Programas de Desarrollo y
paz, con las organizaciones comunitarias, ciudadanas que trabajan por la paz. Especial participación
tendrán las comisiones de sociedad civil que trabajan en el proceso, así como la Iglesia Católica y
otras iglesias”.
EN 2015: DE NUEVO SE HABLA DE CONVENCIÓN Y DE CONSTITUYENTE PARA LA PAZ
En este recorrido descriptivo, y por supuesto parcial, llegamos a la situación actual en la cual se están
realizando de nuevo diálogos exploratorios entre el gobierno y el ELN para establecer una agenda y
pasar negociaciones formales. No es mucho lo que ha trascendido sobre los contenidos de lo que ha
propuesto el ELN en los puntos abordados sobre participación y mecanismos para implementar posibles
acuerdos de transformaciones políticas o económicas.
Pero si son muchas las especulaciones al respecto y sobre lo que conversaron Nicolas Bautista (Gabino) y
Tomichenko en las citas que sostuvieron en La Habana en diciembre de 2014 o mayo de 2015.. El ELN ha
informado que coincidieron en destacar que la solución política exige un amplio proceso de participación y
los dos jefes de esas organizaciones afirman que sería conveniente mantener dos mesas paralelas de
negociación con el gobierno con la idea de que en una fase avanzada puedan aportar a un solo escenario de
pacto de terminación del conflicto y construcción de paz. Y allí está de nuevo la hipótesis sobre el lugar que
puede llegar a tener una Asamblea Constituyente de Paz.
Nicolas Rodríguez, en un mensaje escrito el 22 de abril de 2013 con el titulo El Pueblo habla, el pueblo
manda, señaló su ruta ideal para las conversaciones en este período:
“El ELN le ha dicho al país que está dispuesto a sentarse en la mesa de diálogos con el
gobierno, a buscar un ambiente propicio y caminos ciertos, para que se exprese y
materialice por parte de las mayorías, la gran agenda recogida en los mandatos de años de
luchas populares y sociales, que es lo más auténtico del sentir de las mayorías.
Hemos propuesto la importancia de una Convención Nacional, como mecanismo
democrático de encuentro y participación popular y democrática, donde las mayorías
se expresen, y legislen igual hemos planteado que una Constituyente refrende las
transitar hacia las transformaciones estructurales que el país necesita. En tal sentido, se inscribe el propósito
de la Convención Nacional, como un esfuerzo de mayorías”. Declaración Política del IV Congreso del ELN, 6
de julio de 2006. https://www.eln-voces.com/j25/descargas/sifuturo/SF_008.pdf
17
Camilo González Posso, Conversaciones bloqueadas por desacuerdos, CNP, septiembre 12 de 2007. En el
libro Biblioteca de paz 2002 – 2010, Fundación Cultura Democrática, Bogotá 2013, pág. 311.
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grandes decisiones salidas de un verdadero proceso democrático popular y social, todo
ello es posible en una acción y lucha de masas que aglutine a todas y todos los luchadores
por el futuro y la paz de Colombia”.18
No queda duda del lugar central que el ELN le ha dado a la Asamblea Constituyente como
escenario culminante de un pacto de paz y un proceso participativo vinculante. Es probable que esas
fórmulas vuelvan a ser sometidas al escrutinio nacional al iniciarse formalmente la negociación
entre el gobierno y esta organización insurgente. Además tiene sentido que se presente como un
punto de confluencia con las negociaciones de las FARC.
El asunto ahora es sobre la conveniencia, necesidad o viabilidad de incluir la Convención Nacional
y la Constituyente en la ruta de los pactos de paz. Y todas esas incógnitas dependen del tamaño de
las transformaciones que se logren definir en los tres escenarios de pacto que están abriendo: los
escenarios construidos entre el gobierno y las guerrillas, los pactos políticos para reformas
institucionales y de construcción de paz en las relaciones interpartidistas y con movimientos
sociales y los pactos de reforma que se definan en las mesas entre el gobierno y los movimientos
sociales. Ese conjunto podría ofrecer los insumos de un Gran Acuerdo Nacional para la
convocatoria a una Constituyente de Paz.
Por lejana que parece hoy la opción de una Constituyente, hay muchos signos que muestran que
puede abrirse camino para lograr que el pacto de paz tenga la dimensión que requiere para abrir una
nueva época histórica de superación de un siglo de violencia, guerras y conflictos armados. La
coincidencia en ese tema crucial se volvería el tema central de debate nacional una vez se inicie la
mesa de conversación formal entre el gobierno y el ELN. Varias fuerzas políticas han señalado ya su
disposición a promover una Constituyente de Paz, así difieran en cuanto al temario, la fecha o las
precondiciones. Es el caso de los partidos Liberal y del Polo Democrático. Incluso en el Centro
Democrático hay sectores que consideran la convocatoria a una Constituyente como centro de
una estrategia de paz, como lo manifestó Luis Carlos Restrepo en carta pública 19. En condiciones
de cese definitivo al fuego y a las hostilidades la convocatoria y definición de características de
una Constituyente sería la ocasión para vincular a sectores que hoy están al margen del proceso de
acuerdos, incluir asuntos pendientes desde 1991 y para empatar con las agendas que son vitales para
la sociedad pero que no han estado en las mesas de negociación.
[email protected]
18
https://www.eln-voces.com/j25/index.php/es/voces-del-eln/comando-central/338-el-pueblo-hablael-pueblo-manda?showall=&limitstart=
19
Luis Carlos Restrepo, Carta al Centro Democrantico propone discutir sobre Constituyente en la
estrategia de paz, El Tiempo, 21 de diciembre de 2014. http://www.eltiempo.com/politica/proceso-depaz/excomisionado-restrepo-sugiere-propiciar-discusion-sobre-constituyente/15006195
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