20 y 10 el fuego y la palabra Crónica de una campaña

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20 y 10
el fuego y la palabra
Crónica de una campaña
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En
México ...
La Campaña EZLN: 20 y 10, el fuego y la
palabra, cerró un ciclo de festejos e inició
uno nuevo. La enorme respuesta de la
sociedad civil nacional e internacional ha
hecho de la celebración de estos dos aniversarios un espacio de rebeldía, de reflexión, de construcción y de resistencia, y
ahora se propone, tanto en México como
en muchas partes del mundo, hacer del
2004 un año de conmemoraciones zapatistas.
La revista Rebeldía, nuestra revista,
continuó con las actividades planeadas:
en el contexto de la campaña, presentó
dos discos compactos con todos los
comunicados producidos por el Ejército
Zapatista de Liberación Nacional durante
esta primera década de lucha y resistencia. También presentamos la memoria
musical zapatista en cuatro discos compactos de música rebelde (reggae, rock,
corridos, ska y trova); tuvimos la apertura
de la exposición de algunos de los carteles más representativos de estos diez
años; mesas redondas y espacios de diálogo con los temas “la cultura y el zapatismo” y “los medios de comunicación y
el zapatismo”; además de un espectáculo
de danza regional de inspiración zapatista, un acto político cultural en el
Hemiciclo a Juárez y, finalmente, para
conmemorar los diez años del alto al
fuego impuesto por una protagónica
sociedad civil, celebramos un encuentro
con intelectuales, indígenas, artistas,
académicos, representantes de la iglesia,
del rock y de la sociedad civil en general.
La hora ha llegado
Hagamos lo que hoy se mira imposible
I. Indígenas y Zapatismo
4
Hermanos y Hermanas: Les habla el Comandante David.
Buenos días, buenas tardes, buenas noches.
Es 22 de diciembre de 2003, aniversario seis de la masacre de Acteal. Son las mesas redondas y espacios de diálogo
entre los pueblos indígenas del país y el zapatismo. Es la voz
del Comandante David. Son las voces de cientos de indígenas
en Yucatán, Jalisco, Colima, Chiapas, Puebla y Quintana
Roo. Son los problemas comunes, la represión, la exclusión.
Es el trabajo local y regional. Es 22 de diciembre, y 17 de
noviembre, y primero de enero y cualquier día. Es la hora de
actuar.
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La humedad que camina junta
“Y como si fuéramos humedad que avanza por caminos, los
pueblos indios vamos trabajando, acercándonos entre nosotros”, dice Leocadio Serio López, wixárika de Jalisco, miembro del concejo de vigilancia de su comunidad, San Sebastián
Tepehuaxtlán. Él y cientos más, se reunieron en Guadalajara
para reforzar un trabajo regional que lleva años gestándose:
tepehuanos, wixárikas, nahuas, incluso mixtecos migrantes,
que habitan en Jalisco, en Colima, que tienen contacto con los
indígenas de Durango. Es una reunión de la región CentroPacífico del Congreso Nacional Indígena. Pero esta vez, su
asamblea tiene un doble propósito: festejar su acercamiento y
su palabra, a la vez que festejar el cumpleaños de los zapatistas. Al mismo tiempo, en Yucatán y en Jalisco, en Chiapas y
en Colima, en Puebla, en Quintana Roo y en el Distrito Federal, se llevaron a cabo reuniones entre indígenas para analizar
y discutir sus problemas locales, para abrir propuestas, para
seguir trabajando. El motivo para estas reuniones de trabajo
fue nuevamente el zapatismo y su aniversario. Nosotros los
zapatistas nos levantamos en armas por una causa justa;
porque la vida y la situación de los pueblos indios es cada vez
peor, dijo el Comandante David.
Hace diez años; y hace treinta, cien, quinientos años que
su lucha comenzó. Pedro Uc Ve, maya yucateco, durante la
reunión en Mérida, recordó la lucha emprendida por Jacinto
Canek, allá en su tierra. Jornalero del municipio de Ticul,
Yucatán, Uc Ve sintetizó las razones de la resistencia de los
pueblos originarios: “Nuestra lucha ha sido contra la conquista y la colonización. Somos producto de 500 años de
resistencia”. Los indígenas —dijo— hemos participado en la
construcción de este país a lo largo de la historia, y nunca se
nos ha reconocido.
Ante esta realidad, muchos pueblos indígenas han venido luchando por reclamar sus derechos y pedir justicia, pero
sus justos reclamos nunca han sido escuchados, confirmó el
Comandante David.
Trabajando por la vida
Así dieron inicio las mesas redondas con el tema “Indígenas y
Zapatismo”, cada una organizada a su manera, aunque todas
alejadas de los reflectores y las primeras planas. Cada una en
un punto distinto del país y con el propósito de escuchar el
mensaje que para la ocasión envió el CCRI-CG del EZLN a
través del Comandante David, y para trabajar en torno a problemas concretos de su comunidad, de su pueblo, de su región.
Tierra, autonomía, organización, fueron los temas centrales de
5
El año once de la guerra contra el olvido lo iniciamos con la presentación, el 9
de enero, de dos discos multimedia que
contienen los comunicados, las cartas, los
discursos y una selección de entrevistas
con el Ejército Zapatista de Liberación
Nacional, desde el levantamiento del 1 de
enero de 1994 hasta el 31 de diciembre de
2003. Esta producción contiene, además,
una serie de archivos de audio con las
voces de los propios zapatistas y más de
700 fotografías tomadas por miembros de
la sociedad civil en el mismo periodo.
El acto de presentación se realizó en el
Centro Cultural Ricardo Flores Magón,
en el sur de la ciudad de México, y contó
con la asistencia de un entusiasta público
y cuatro comentaristas: Francisco López
Bárcenas, abogado mixteco, integrante
del Congreso Nacional Indígena; los
politólogos Luis Hernández Navarro y
Luis Javier Garrido, ambos articulistas
del diario La Jornada, y Francisco Pineda, profesor de la Escuela Nacional de
Antropología e Historia y uno de los responsables de este esfuerzo de recopilación (el otro es José Montfort).
En su intervención, Francisco López
Bárcenas expresó que los documentos y
las fotografías de los zapatistas sirven
como espejos de toda la sociedad y mantienen viva la memoria colectiva de los
mexicanos. Aquellos rostros que salieron
del anonimato en 1994, agregó, nos sacaron de la pesadilla de injusticias que
padecemos desde hace cinco siglos. Sus
palabras rebeldes también hacen referencia al fuego y lo sagrado y nos recuerdan
los derechos de los pueblos indígenas a la
tierra y la autonomía.
Por su parte, el coordinador editorial
de La Jornada, Luis Hernández Navarro,
expresó que en el marco de la Campaña
se ha desatado una nueva campaña
periodística para denigrar a la lucha zapatista. No es casual, dijo, que esta vez el
empeño por desacreditar a la rebelión
indígena haya iniciado en las páginas del
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diario español El País. Pero curiosamente
las tesis formuladas en esta nueva ofensiva repiten las viejas fórmulas de la derecha que hemos escuchado desde hace
diez años. El periodista mexicano hizo
alusión a un artículo de Enrique Krauze
publicado en Madrid, en fechas recientes.
Por otra parte, observó Hernández
Navarro, en cada discurso zapatista encontramos las huellas de una larga marcha
que en todo momento ha retomado la tradición de decir la verdad. Los discursos
rebeldes, dijo, están construidos a partir de
la multiplicidad, respetando la oralidad de
la literatura indígena en armoniosa combinación con las expresiones más destacadas
de la literatura clásica y contemporánea.
El conjunto de la obra escrita del EZLN se
nos presenta como la pintura de un mural
selvático, de diversas tonalidades y formas. El zapatismo ha hablado de frente al
poder y, hacia la sociedad civil, sus palabras funcionan como grandes ventanas
para asomarse al futuro, concluyó.
Luis Javier Garrido, reconocido politólogo de la UNAM, manifestó que el EZLN
ha sido acción y palabra. Por ello, agregó,
los documentos compilados en estos discos compactos constituyen materiales fundamentales para quien mañana quiera
conocer la historia de México. La palabra
fresca y transparente de los zapatistas nos
ha acompañado durante estos años y
seguirá siendo parte de nuestra experiencia política. Esos discursos nos permiten
reconocernos en lo que hemos sido y en lo
que hemos hecho. La palabra expresada
por el Comité Clandestino Revolucionario
Indígena, por el Subcomandante Marcos y
por los habitantes de las comunidades
indígenas también ha sido —hay que reconocerlo— la palabra de la sociedad civil.
Ya no es imaginable un México sin la voz
de los zapatistas, enfatizó.
Finalmente, Francisco Pineda expresó
que esta compilación de documentos
zapatistas es una contribución al no olvido.
Este material se suma a otros trabajos
la discusión. Las voces captadas aquí —algunas con nombre y
apellido— retratan más bien una voz colectiva, construida con
el trabajo cotidiano y en las reuniones.
Esta es la participación del Comité Clandestino Revolucionario Indígena, Comandancia General del Ejército
Zapatista de Liberación Nacional, de la mesa de Zapatismo y
Pueblos Indígenas —escucharon todos los asistentes. Los
indígenas, desde hace muchos años hemos venido sufriendo
toda clase de injusticias: no tenemos derecho a la tierra, a la
educación, ni el respeto a nuestra lengua y cultura.
En la reunión realizada en la ciudad de Puebla, con la participación de decenas de indígenas, compañeras y compañeros
totonacas hablaron de la importancia del rescate de las raíces
indígenas: hay que “trabajar por la vida recobrando nuestra
sabiduría; es necesario recuperar lo nuestro, nuestras formas de
ser, lo que hemos abandonado”. Coincidieron en la necesidad
de mantener vivos los usos y costumbres de los siete pueblos
indígenas del estado como algo prioritario para buscar una
alternativa, porque “no es posible seguir viviendo en el mundo
de guerra y destrucción que nos impone el capital”.
Los pueblos que luchan por sus derechos reciben a
cambio persecuciones, encarcelamientos, asesinatos a sus
dirigentes. A otros no los mata, pero los calma con migajas y
promesas.
También en Puebla, las historias de represión se hicieron presentes: las amenazas y agresiones en contra de los
integrantes de la Organización Independiente Totonaca (OIT)
y sus asesores son constantes. Griselda Tirado, abogada indígena y una de las fundadoras de la OIT fue asesinada el 6 de
agosto pasado. Su delito: trabajar en la construcción de la
autonomía de los pueblos totonacas. A Griselda la mataron de
un escopetazo en la espalda.
La defensa del territorio
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Las palabras del Comandante David seguían en el ambiente,
tejiéndose con las otras voces: Primero nos despojan de todas
nuestras riquezas naturales y luego nos explotan y nos maltratan y nos esclavizan en nuestra propia tierra.
Hilario Escamilla, habitante del municipio de Xoy, en
Yucatán, durante la reunión que se celebró en Mérida, tomó la
palabra para contar la lucha de su comunidad por defender la
tierra: “ya nos habían quitado nuestras tierras para construir
una carretera. Los del gobierno nos dijeron que era para traernos progreso, pero a cambio de nuestros terrenos. Primero
buscamos defendernos por vía legal, pero caímos en las trampas de los abogados del gobierno”. Así que a través de la
organización de los habitantes de Xoy, lograron algo que
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antes parecía imposible: “obligamos al poderoso a sentarse a
dialogar, con la enseñanza de lo que había hecho el EZLN”.
En Quintana Roo han tenido experiencias similares. En
el pueblo de Tihosuco, lugar en donde se llevó a cabo la reunión indígena, los compañeros compartieron las historias de
defensa de la tierra de su comunidad. Hace poco, a través de
Procede, las autoridades del estado buscaron apropiarse de
sus ejidos para destinarlos a proyectos “ecoturísticos”.
Las voces iban y venían. Todos y todas intervenían,
completaban lo que decían sus compañeros, agregaban datos,
querían contar su propia experiencia. Plasmadas en papel, es
difícil hacer sentir todo ese mosaico, toda la diversidad. También en Guadalajara hablaron de sus experiencias de lucha, de
la defensa de la tierra y el territorio. Compañeros wixárika y
tepehuanos contaron la lucha que llevan para impedir la tala
indiscriminada de madera en parte de las diez mil hectáreas
que se encuentran en litigio con los mestizos del poblado de
San Lucas Xalpa. Hasta esta reunión —que fue una verdadera
asamblea con amplia participación— llegaron por la noche los
participantes de la mesa realizada en Zacualpan, Colima, para
acompañar con música el intercambio de voces y el trabajo.
¡Ya basta de vivir y morir en la humillación y el olvido! Invitamos a todos los pueblos indígenas de nuestro país
a que se unan y se organicen para ejercer sus derechos
como pueblos.
Las palabras del Comandante David encuentran eco en
las de Maurilio Ramírez de la Cruz, presidente del comisariado de bienes comunales autónomo de la comunidad agraria
wixárika de Bancos de San Hipólito, quien ha sido reconocido por otras tres comunidades wixárika y una tepehuana.
“Gracias a la organización regional, llevamos mucho tiempo
hombres, mujeres y niños, luchando por nuestro territorio. Lo
hicimos autónomamente, la gente es la que decide”. Organizados de esta manera, han conseguido el apoyo de comunidades vecinas, e incluso de poblaciones tepehuanas de
Durango. Desde mayo del año pasado y hasta la fecha, distintas movilizaciones y plantones se han dado para impedir la
destrucción de su hábitat. Así, dijo don Maurilio, hay que
resaltar la importancia de la integración de las comunidades
para darle fuerza al proceso autogestivo.
Habla ahora Leocadio Serio López, también wixárika:
“Nosotros hemos estado recuperando nuestros terrenos y
territorios pese a la presión del gobierno, nosotros estamos
por resolver los problemas bajo nuestra propia paciencia y
tiempo, sin que ellos nos presionen para resolver”. El compañero Leocadio terminó su participación diciendo: “La cultura es nuestra porque tenemos nuestra historia, tenemos
nuestras tradiciones”.
presentados por la revista Rebeldía, como
las muestras fotográficas y de carteles, el
libro, el video y el disco compacto de
música que repasan de diferentes maneras los diez años transcurridos desde el
levantamiento indígena.
La presentación de estos dos discos
compactos estuvo acompañada de un
espectáculo de danza regional de inspiración zapatista, a cargo del grupo Danzariega, quien presentó la obra “Se está
juntando el agua en los arroyos...”. Un
programa de danza experimental compuesto por nueve piezas con temas alusivos a la lucha zapatista. Un espectáculo
de colores, expresiones y manifestaciones de un grupo de hombres y mujeres
jóvenes que se acercan a través de la
danza a la lucha rebelde de Chiapas.
Exposición de Cartel 1994-2
2004
Memoria Futura
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El 10 de enero abrió sus puertas el auditorio “Quetzalcóatl”, en el centro de
Iztapalapa, para la inauguración de la
exposición de cartel “1994-2004. Memoria Futura”, que contiene la muestra más
representativa de la obra gráfica en cartel
producida durante estos diez años de
lucha zapatista.
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El esfuerzo de recopilación de este
material estuvo a cargo de Eugenia
Gutiérrez, así como el montaje y disposición de las obras que fueron colocadas
para su exhibición en una serie de mamparas en el vestíbulo del auditorio.
Los 140 carteles seleccionados (muchos más quedaron fuera) fueron presentados por tres diseñadores gráficos que
relataron sus experiencias laborales y la
historia de cómo algunos de los carteles
llegaron a las mamparas de esta exposición.
El primero en tomar la palabra fue
Leonel Sagahón quien, apoyándose en
una serie de imágenes, relató cómo han
ido cambiando los simbolismos y la
forma de manifestarse de acuerdo con los
diferentes momentos históricos. En los
primeros momentos, explicó, la tradición
gráfica se centra en la revolución, en los
movimientos de ferrocarrileros, de maestros y en la liberación de los presos políticos. Sin embargo, a partir de 1968 con los
movimientos estudiantiles y las luchas de
liberación en Latinoamérica, hay un giro
en el uso de las imágenes gráficas; ya que
éstas se utilizan para plasmar y promover
las consignas y el cumplimiento de las
diversas demandas.
Los años 80, continuó, están marcados
por las manifestaciones magisteriales, de
colonos y sindicatos que inician con la tradición popular tanto en México como
Estados Unidos y Europa. Con el levantamiento zapatista de 1994 las imágenes se
vuelven más abstractas pero contundentes,
además se introduce el concepto de tolerancia. Surge entonces la necesidad de
expresar el apoyo al EZLN, entre otras formas, a través de carteles. Leonel Sagahón
concluyó señalando que los carteles presentados en la exposición son heterogéneos, festivos, diversos, producto de
distintos puntos de vista del movimiento
zapatista. No hay una consigna central que
hable de la propaganda. Muchos son carteles anónimos, inconscientes, los cuales
Nos toca actuar… la autonomía
Está claro que ningún gobierno nos va a dar el derecho y la
libertad para vivir dignamente, por eso ahora ya no pedimos,
ni exigimos, ahora nos toca actuar y ejercer nuestros derechos
como pueblos legítimos y primeros pobladores de nuestro país.
“Yo quisiera que la gente sienta lo que yo pienso”. Fue
la traducción del pensar de Cecilia Carrillo, quien habló en
wixárika. “Yo pienso que la lucha zapatista es muy importante para todo México. Nosotros, en nuestros territorios estamos luchando igual que ellos para que nos reconozcan”. En
las distintas reuniones indígenas, después de denunciar los
agravios de los que han sido objeto pueblos y comunidades a
lo largo del país, vinieron las propuestas que ya son realidad
para muchos: trabajar, organizarse, buscar la autogestión. Las
palabras del Comandante David cobraban vida nuevamente:
por eso ahora ya no pedimos, ni exigimos, ahora nos toca
actuar. Maurilio Ramírez Cruz explicó: “Nuestro territorio lo
hicimos autónomamente, la gente es la que decide que sea lo
que nosotros decimos y no lo que el gobierno quiere. Nuestra
autonomía ha ido fortaleciendo nuestra asamblea y fortaleciendo también a nuestras autoridades tradicionales y agrarias; para podernos desarrollar en el futuro estamos haciendo
nuestras propias leyes, como los zapatistas”.
En Yucatán, Pedro Uc Ve lo dijo así: “Estamos concientes de lo que queremos: hacer valer nuestra autonomía, autogestión, dignidad y libertad sin tener que pedírselo al
poderoso, sino haciéndolo”. A cientos de kilómetros,
parecían completar la frase los indígenas totonacas de Puebla: haciéndolo, “a partir de recuperar nuestras raíces, nuestras costumbres, porque es la única forma de avanzar”. Por su
parte, Alfonso Acevedo Díaz, de la organización Ketxymbal
y originario del municipio sureño Chaksinkin, dijo en maya y
español que el EZLN “ha sido una gran enseñanza para los
pueblos, sobre todo con la noción de mandar obedeciendo”.
Los aliados invencibles
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Uc Ve habló también del EZLN y su vinculación con los pueblos indios del país: “Los indígenas le hemos dado al Ejército
Zapatista un corazón que palpita por la libertad, un lenguaje
fresco, directo, nuevo; un rostro nuevo con el color de la tierra”. Pero sobre todo “los indígenas le han dado al EZLN la
enseñanza de que los aliados son invencibles”. En la misma
reunión, José Anastasio Euan Romero, miembro del equipo
Indignación Pro Derechos Humanos de Yucatán, originario
de la comunidad Chavlecal, contó cómo se revaloró la palabra indígena. “El movimiento insurgente del EZLN —dijo—
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fue un renacer, un despertar para nosotros, donde también
comprendimos el sentido de lo que es ser indígena. Se abrió
un camino para que todos los pueblos indígenas nos diéramos
cuenta de nuestros derechos con o sin ley, y nos hiciéramos
más fuertes. Hemos abierto los ojos y no los volveremos a
cerrar. Hemos aprendido que ser indígena es un orgullo”.
José dijo al final: “al zapatismo le debo mi reivindicación como indígena, el zapatismo es una tarea de todos, no
solo de los indígenas. Mi corazón está convencido de que esta
lucha crecerá”. La jornada de discusión e intercambio había
llegado a su fin. No estuvieron todos, pero el trabajo y el compromiso están ahí, en las pequeñas comunidades, en los pueblos indígenas de este país.
El Sistema Zapatista de Televisión Intergaláctica concluía su transmisión: Los invitamos a todos los pueblos indígenas de nuestro país, a que se unan y se organicen para
ejercer sus derechos como pueblos y no tengan miedo de
hacerlo; porque no es ningún delito unirse y organizarse
para buscar y trabajar por una vida digna para nuestros pueblos y para el futuro de nuestros hijos, para que sean verdaderos herederos de nuestra raza, de nuestra cultura y de
nuestra historia. Lo que nos toca hacer ahora es unirse,
organizarse mejor: que cada pueblo, que cada estado, que
cada comunidad se sienten a pensar, a analizar qué es lo que
deben hacer para cambiar esta triste situación. La hora ha
llegado y no esperar hasta que el mal gobierno nos dé permiso, porque eso nunca sucederá. Por eso, si no lo hacemos
nosotros los pueblos, nadie lo hará por nosotros.
9
hacen frente a la propaganda centralizada,
vertical y oficial. Hay una ausencia del
culto a la personalidad y tienen como
defecto valioso el ser contestatarios.
El diseñador Andrés Ramírez señaló
por su parte que la importancia de esta
exposición es que evidencia cómo la
gente que busca un mismo fin, lo plasma
de forma diferente. Menciona que en los
140 carteles expuestos se manifiestan
diferentes puntos de vista, diversas formas de comprender y vivir el movimiento. Reiteró que el protagonista de la
exposición es el EZLN.
Con el levantamiento zapatista, indicó
en su turno Renato Aranda, se introduce
en el cartel la imagen del indígena con
una actitud digna, activa y propositiva.
Afirmó que la importancia de la exposición “Memoria Futura” es que invita al
espectador a mirar hacia atrás por medio
de los testimonios gráficos que 10 años
de historia pública nos han dejado y que
deben servirnos para reflexionar en
dónde estamos, quiénes somos y el futuro
que queremos. Resaltó también que la
mayoría de los carteles expuestos están
hechos por la sociedad civil y que son
pocos los realizados por diseñadores gráficos y que los carteles de la sociedad
civil son los más vistos porque cumplen
la función de informar en las calles.
Finalmente, Aranda señaló que en las
imágenes expuestas no existe la idolatría
ni el protagonismo, sino que invitan al
apoyo y participación desde cada una de
nuestras diferentes trincheras.
Durante la conferencia se insistió en
que el cartel cumple una función efímera,
circunstancial, momentánea, y ya después es parte de la historia; que las imágenes (presentes y no presentes) expresan
las distintas formas de sentirse zapatista,
no intentan convencer y han creado una
nueva manera de ver las cosas. Son imágenes que identifican y unen, han modificado el concepto del ser mexicano, nos
han dado una nueva identidad.
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II. Campesinos y Zapatismo
La exposición relata los pequeños
momentos que han hecho la historia
zapatista. Nos regresan a los terribles
acontecimientos de Acteal y hacen vigente el Ya Basta y el cese al fuego, ratifican
las demandas de Paz y el cumplimiento
de los Acuerdos de San Andrés, y nos alegran recordando las fiestas, bailes y eventos deportivos hechos para, por y con los
zapatistas. Reconfortan las manifestaciones de apoyo de diferentes organizaciones nacionales y extranjeras. Invitan a la
celebración de los aniversarios y convocan a la participación ciudadana en las
diferentes consultas. Proponen que marchemos juntos por la Paz, la Dignidad y
por el Color de la Tierra para que “los
pasos de todos los que caminen con verdad, se conviertan en un solo paso”. Convocan a los diferentes sectores a los
Encuentros, Congresos y Jornadas. Que
hagamos uso de la palabra para que marchemos juntos. En fin, el cartel convoca,
invita, llama, evoca y cuestiona…
En el campamento Cosme Damián, en tierras recuperadas de
la huasteca potosina, los trabajos para recibir a los compañeros que iban a participar en la mesa redonda sobre “Campesinos y Zapatismo” habían comenzado con varias semanas de
anticipación. A las afueras de la comunidad se doblaban
esfuerzos para arreglar el vado y dejar pasar a los vehículos.
Asombrado, un compañero les comentó: “Si hasta parecen
zapatistas”. “¿Pos qué no seremos?”, le contestaron.
Mesas redondas y espacios de
diálogo
Una cita con la memoria
Dos temas convocaron la participación
de cientos de personas el 8 y el 10 de
enero: “La cultura y el zapatismo” y “los
medios de comunicación y el zapatismo”.
Las mesas sobre el primer tema se llevaron a cabo simultáneamente en Guadalajara, Acatlán de Osorio en Puebla,
Querétaro, Ciudad Nezahualcóyotl en el
estado de México y en el Distrito Federal.
Pintores, fotógrafos, escultores, locutores, graffiteros, bailarinas, periodistas, y
demás representantes de la cultura en
México, se presentaron en cada uno de los
espacios abiertos por Rebeldía para hablar
de su relación con la lucha zapatista.
“La cultura es el cimiento de los conocimientos que fortalece y engrandece
nuestra identidad, nuestros pensamientos
y nuestros quehaceres. Nuestro México
está compuesto de muchas culturas y
Durante el 93 aniversario de la revolución mexicana, campesinos de distintos estados se encontraron simultáneamente en
varias localidades para hacerle honor a la gesta heroica del
pueblo mexicano a través del diálogo y para escuchar el mensaje del Comandante Tacho. En Tlaxcala, más de tres mil
campesinos y ex-braceros, acompañados por las estudiantes
de la Normal Rural de Panotla, maestros y maestras del
Movimiento de Bases Magisteriales y por pobladores urbanos organizados en la Unión Popular Apizaquense Democrática Independiente (UPADI) se concentraron en la capital del
estado para “caminar la palabra y formar con ella una cadena”, como dijo don Gonzalo León, integrante de la Unión de
ex-Braceros Tlaxcaltecas y vecino de San Pablo Citlaltépetl.
Acompañados también por la banda del compañero Pilotzin,
de Tepatlaxco; por representantes campesinos de las comunidades de Huixquilucan y Xalatlaco, del estado de México; y
por los comités del Frente Zapatista de Liberación Nacional
de Tlaxcala, conmemoraron tanto el 20 de noviembre de
1910 como el 1 de enero de 1994, “para que no sean borrados
de nuestras memorias”.
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Nuestra historia nos ha demostrado. Nadie ha podido
destruirnos, recordó también el comandante Tacho quien dio
voz al EZLN en mensaje videograbado presentado en cada
encuentro. Y en tierras zapatistas del estado de México, al pie
de los volcanes, en Amecameca, los asistentes a la mesa
Campesinos y Zapatismo reflexionaron sobre el propósito de
la reunión como una lucha por “detener este intento por
borrar la historia, rescatar nuestra cultura y de esa manera
entender qué queremos y lo que estamos haciendo. Por eso
debemos estar todos organizados y así dar un rotundo no al
genocidio del país”. En esta región boscosa, donde el campesinado ha sido fuertemente golpeado por los intereses privados y la corrupción de los políticos, también se escuchó la
voz de los herederos del maíz. Empleados, transportistas y
maestros al lado de los campesinos, denunciaron la tala de los
bosques y los problemas ecológicos derivados de la comercialización de la tierra.
Esta grave situación es provocada por el mismo gobierno mexicano, porque sólo se preocupa de los intereses de los
ricos, de los grandes ricos explotadores transnacionales que
pretenden adueñarse de nuestro país, de nuestros suelos a
través del dinero, afirmó el Comandante Tacho a través del
Sistema Zapatista de Televisión Intergaláctica.
Ya no esperemos más
El gobierno ya no se preocupa de nosotros los campesinos.
Hay un abandono total porque ya no existe una política
económica nacional de Estado que garantice mejores precios
de los productos que producimos y tenga un buen mercado
para que así se pudiera mejorar las condiciones de vida de
los campesinos.
11
cada etnia tiene su modo de entender las
cosas... expresó el comandante Zebedeo,
en el mensaje enviado por el EZLN para
esta mesa.
“Cantar es una cultura —dijo el
comandante tzeltal— bailar es una cultura, luchar es una cultura, reír es una cultura, llorar es una cultura, gritar es una
cultura, festejar es una cultura, tocar un
instrumento es una cultura, trabajar es
una cultura, amar a tu amigo, a tu amiga,
a tu querido, a tu querida, a tu gobierno
federal, estatal, local por si todavía eres
conformista, es una cultura”, concluyó.
Las últimas mesas redondas programadas por Rebeldía durante este periodo
de la campaña se refirieron a “Los medios
de comunicación y el zapatismo”, tema
que convocó la realización del foro
“Resistencia: medios libres”, que se llevó
a cabo en el Multiforo Alicia y al cual se
presentaron una serie de medios independientes, entre ellos Radio Zapata, la Ke
Huelga, el H Ruido, Radio Sabotaje,
Radio Zapote, Radio Aegis, AIRE y H 99,
representados por una gran cantidad de
jóvenes (más de 120) que iniciaron las
actividades colocando una antena en la
azotea para difundir el evento que fue
transmitido en la capital por el 91.7 FM
(en la zona norte) y por el 102.9 FM y
94.1 FM (en la zona sur).
Hasta esta mesa alternativa llegó el
mensaje del insurgente Adolfo, locutor de
Radio Insurgente, del EZLN: “Es nuestro
deber recordarles a los trabajadores de los
medios de comunicación del planeta tierra que nosotros los zapatistas luchamos
por el derecho a la información, esto es
una de nuestras 13 demandas. Sabemos
muy bien que los malos gobernantes tratan de comprar a los medios de comunicación para que informen mentiras y
oculten la verdad, beneficiando al poder
del dinero. Por eso les pedimos a los
medios de comunicación que no se dejen
comprar, que ya es tiempo de hablar e
informar la verdad de lo que sucede en
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México y el mundo, por ejemplo las
luchas por la libertad que se hacen en
otros países pobres”, señaló el especialista en radio transmisiones zapatistas.
Simultáneamente en Tampico, Tamaulipas, participaron en la mesa de medios
de comunicación y zapatismo: Aurelio
Regalado, historiador, periodista y
columnista, Baldemar Mijangos, director
de noticieros del grupo Promorrey y conductor del noticiero del canal 11 por cable
y Julián Javier Hernández, corresponsal
de Reforma y El Norte; el moderador,
Víctor Zenón Vargas, miembro del Frente
Zapatista de Liberación Nacional.
Acto político cultural y verbena
popular.
Presentación de la Memoria
musical zapatista.
El domingo 11 de enero, como parte de
los festejos de la campaña 20 y 10: El
Fuego y la palabra, Rebeldía convocó a
un acto político-cultural con una gran
fiesta popular en el Hemiciclo a Juárez.
Como se acostumbra en las fiestas zapatistas, no faltó el baile y la música, “que
alegra los corazones en la lucha por
democracia, libertad y justicia”.
“Esta es una fiesta por los 20 y 10 del
EZLN, por ese amanecer esplendoroso
que nos hizo despertar el 1 de enero de
1994, por eso estamos aquí ¡Viva el
EZLN!”, dijo nuestra flamante maestra
de ceremonias, Doña Rosario Ibarra y
con estas palabras se inició el evento.
Después recordó muchos de los momentos importantes en la lucha zapatista, pero
también de las acciones de la sociedad
civil: la gran marcha del 12 de enero del
94 para detener la guerra, las diferentes
luchas por la libertad de presos políticos y
por recuperar vivos a los desaparecidos
desde los años 70s; hizo también alusión
a la traición de la clase política mexicana
a los Acuerdos de San Andrés. Recordó
los avances de la autonomía en estos
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En Tacoaleche, Zacatecas, uno de los estados de la
República que más sufren la emigración, se reunieron ejidatarios y rancheros para analizar los principales problemas campesinos de la región. Los malos precios de sus
productos, como el frijol, y los engaños del gobierno y los
partidos políticos marcaron la conversación. Mientras
tanto, en el estado de Morelos, en la plaza central de
Popotlán, en una plática sobre el movimiento zapatista con
los campesinos de la localidad, tomó la palabra Don Lorenzo, representante de la comunidad, y habló de la necesidad
de cada pueblo de organizarse, como lo están haciendo los
indígenas de Chiapas siguiendo el ejemplo de los zapatistas
de 1910.
Estos gobiernos nos han demostrado todo lo contrario.
Se dedican en promover leyes para privatizarlas, promoviendo el interés del neoliberalismo y por eso han viajado a casi
todo el mundo, mientras que aquí los campesinos en México,
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no hay asistencia técnica, no hay apoyos suficientes sin
legalizar la tierra. Porque quieren imponer otro modo de
vida en el mundo globalizado, por eso están promoviendo a
toda costa las privatizaciones y el abandono de todos los
campesinos en México”, expuso el análisis del Comandante
Tacho.
“Si los gobiernos y los diputados fueran gente decente,
no necesitarían tantos policías para que los cuidaran”. A esta
conclusión llegaron los ex-braceros tlaxcaltecas quienes
denunciaron que mientras los diputados tienen un sueldo diario de 3,317 pesos, los siguen engañando y tratan de dividir a
su movimiento, ya que al elaborar el presupuesto de los gastos del gobierno para 2004 no tomaron en cuenta la devolución de los fondos de pensiones que el gobierno les sigue
robando a los ex-braceros.
Nos encontramos obligados a organizarnos, a luchar
por mejores condiciones de vida de nuestras familias. Ya no
esperemos nada de los malos gobiernos porque sólo nos
quieren engañar con miserables Procampo, Progresa. Estas
sobras que siguen repartiendo, nunca va a resolver nuestras
necesidades, ni mucho menos va a mejorar nuestras condiciones de vida, continuó el Comandante.
En la plaza central de Amecameca, una compañera del
municipio de San Salvador Atenco gritó: “No seré muy buena
para el micrófono, pero si hay chingadazos, ay me avisan y
aquí me vengo a apoyar”. El comisario del ejido Acuexcomac
pidió luchar por el patrimonio de nuestros hijos y nietos,
organizarse y no vender la tierra por unos centavos porque,
dijo, “prefiero tener un puño de tierra que un puño de billetes,
porque el billete se acaba y la tierra permanece”.
Tierra, libertad, democracia y justicia
Hagamos lo que hoy se mira imposible, nos organicemos
para este imposible, luchemos por tierra y libertad, por
democracia y justicia, para todos los mexicanos. Hermanos y
hermanas campesinas, no permitamos que nos quiten el
único patrimonio de nuestra vida campesina.
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años, y los festejos de la campaña en
muchos lugares como: Italia, Chile, Bolivia, Argentina, el país Vasco, Francia,
Estados Unidos.
El concierto empezó con Betsy Pecanins, quien acompañada con guitarra,
chelo y armónica, inundó el ambiente de
blues. La fiesta comenzó. Más adelante,
Nina Galindo cantó el himno zapatista y
otras rolas de blues, continuando con la
participación del grupo Trolebús.
Durante el festejo, en grandes tiras de
papel, niños, jóvenes, padres de familia y
abuelos, expresaron sus sentimientos e
ideas, su esperanza sobre la lucha zapatista, con dibujos, poemas y mensajes de
agradecimiento y admiración, con reflexiones sobre la lucha, valorando lo caminado, observando lo que falta por
construirse... Fueron decenas de metros
de papel los que se llenaron de mensajes
que se harán llegar a las comunidades
rebeldes zapatistas.
El Hemiciclo a Juárez se mantuvo lleno
de gente durante las seis horas que duró la
fiesta. Amas de casa, niños y niñas, abuelos, jóvenes, estudiantes, maestros, trabajadores, homosexuales, decenas o cientos
de trabajadoras domésticas, artistas,
punks, indígenas migrantes y vagabundos,
estuvieron presentes disfrutando los distintos espacios de la verbena popular.
En una de las paredes del Hemiciclo se
colocó la exposición fotográfica del proceso de lucha y resistencia zapatista. El
baile comenzó con el grupo musical Son
de Maíz, quien hizo levantar a la gente de
las sillas con sus salsas y sones cubanos.
Nadie podía resistirse a la música, ni los
policías a caballo, que acompañaban las
percusiones de la canción, golpeando al
ritmo sus monturas. Después los Leones
de la Sierra de Xichú dejaron ver su creatividad y su humor crítico en una presentación que fue celebrada por los miles de
personas presentes.
Antes de concluir el evento, Nacho
Pineda, del Multiforo Alicia, presentó el
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paquete de cuatro discos compactos de
música zapatista y prozapatista, material
producido por Rebeldía como parte de la
campaña: “hablar de zapatismo y de
música es hablar de una relación amorosa”, dijo el responsable de la selección
de más de 80 canciones rebeldes. El
disco, dividido en cuatro volúmenes:
Fuego, Palabra, Resistencia y Dignidad,
muestra una parte de la extensa producción musical zapatista que se ha producido en México, en otros países del
mundo y en las comunidades rebeldes.
El disco de Fuego, expresa “la solidaridad internacional de los músicos con los
movimientos de resistencia y dignidad en
todo el mundo”. Este disco incluye canciones representativas del zapatismo, sus
causas, su resistencia, su lucha por libertad y justicia, ideas con las cuales se identifican y trabajan muchos artistas desde
hace diez años.
En el disco la Palabra, trovadores de
diversos lugares y ritmos, muestran
cómo el zapatismo ha abierto posibilidades creativas en los diversos géneros
musicales, recobrando y revitalizando
la fuerza que tiene como expresión
popular.
El tercer disco titulado Resistencia,
ofrece canciones de diversos grupos de
rock mexicano, y como los otros discos,
deja ver la relación del zapatismo con la
sociedad, en su dolor y su esperanza. Son
canciones a través de las cuales muchos
jóvenes mexicanos han podido acercarse
al zapatismo, compartiendo rebeldías,
rompiendo los cercos informativos que el
poder impone a la sociedad.
Música y rebeldía se hermanan en un
movimiento artístico-cultural en torno a
la lucha zapatista, desde finales del siglo
pasado hasta hoy, en México y muchas
partes del mundo; es un movimiento que
sigue y promete seguir creciendo ya que
es parte de la creación de una nueva cultura política, de la lucha contra el neoliberalismo y por la humanidad.
El actual gobierno ya demostró que sus intereses no son
del pueblo ni mucho menos de los campesinos, por eso han
reformado el artículo 27 constitucional en perjuicio de los
campesinos y a favor de los intereses de los grandes ricos
extranjeros. Por eso nosotros, los del Ejército Zapatista de
Liberación Nacional, les hacemos un llamado a que nos
organicemos juntos y luchemos juntos frente a otros sindicatos, a otros movimientos para que las tierras sean para quien
las trabaja.
En la Plaza Pública de San Pablo Actipan, estado de
Puebla, la Unión Campesina “Emiliano Zapata Vive”,
celebró este 17 de noviembre el surgimiento del EZLN, junto
a su tercer aniversario y su victoria en la defensa de sus tierras, contra el despojo que les pretendían imponer a través del
Plan Milenio. El reclamo de tierra y libertad, la lucha por la
memoria y contra el olvido, tuvieron así una digna jornada en
diferentes puntos de nuestra República. En ambiente festivo,
en medio de desfiles, comida, huapango, los campesinos
acordaron nuevas reuniones para continuar el trabajo de organización desde abajo. En el aire resonaban las palabras del
Comandante Tacho: Nadie nos podrá vencer. Nos quieren
muertos, su propósito es desaparecernos, pero los campesinos nos resistimos ante esta conquista porque sabemos
sobrevivir. Somos expertos en las producciones básicas que
necesita nuestro pueblo.

(Este texto recoge muchas voces y fue posible escribirlo gracias a
la participación de muchas personas, comités y colectivos, y sobre todo
a partir de los reportes recogidos por los siguientes compañeros: Pablo
Rojas, Itzam Pineda, Luz Rivera, el Yerbas, Vladimir Viramontes,
Gerardo Camacho, Enrique Espinoza, Tania Barberán, Jesús Aguilar,
Diego Castillo, Yuriria Juárez y Rodrigo Armada)
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