¡Cuánto talento por aprovechar! - Cooperativas Agro

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Cooperativas Agro-alimentarias de España y el Instituto de la Mujer y para
la Igualdad de Oportunidades, a través del convenio para “El emprendimiento
y liderazgo de la mujer en las cooperativas agrarias”, organizaron el pasado
mes de diciembre, un taller formativo al que asistieron más de treinta mujeres
de cooperativas. Durante la jornada, las mujeres profundizaron en temas
como el empoderamiento; liderazgo y gestión del talento; y conciliación y gestión
del tiempo. De aquella jornada surgieron muchas interesantes reflexiones,
como las que exponen Carmen Vallejo y Carmen Martínez a continuación
¡Cuánto talento
por aprovechar!
Carmen Vallejo Garcelán. Socia de Cooperativa. Consultora Senior en Planes de Igualdad
y Responsabilidad Social Corporativa para empresas. Profesora de Sostenibilidad-RSC
y Planes de Igualdad. Escuela de Organización Industrial (EOI). Coach para profesionales.
igualdad
H
ace años leía una frase que me gustó mucho: «Con el nuevo día vienen
nuevas fuerzas y nuevos pensamientos». Considero que la Jornada del
día 16 de diciembre de 2015, Técnicas y Habilidades para la Gestión del Talento de la Mujer Cooperativa, impulsada por Cooperativas Agro-alimentarias
de España, fue uno de esos días donde confluyeron mujeres con una fuerza
incuestionable y pusieron a trabajar sus mentes.
Las mujeres de las cooperativas agroalimentarias son diversas como los
propios sectores agroalimentarios a los que pertenecen, eso lo pude comprobar desde el primer momento. Trataré de explicarme, a través de mi exposición quería transmitir a las mujeres que reivindiquen su Empoderamiento,
porque descubrirán que pueden alcanzar aquello que se propongan en el ámbito cooperativista, llegando si lo desean a ocupar altos puestos de responsabilidad, pero para ello resulta imprescindible: eliminar los estereotipos de
género, potenciar la autoestima, tener confianza en sí mismas y salir de zonas
de confort.
Empoderamiento que se refuerza con dar visibilidad a nuestro talento. Me
gustaría destacar que entre los rasgos más característicos se encuentran:
nuestras competencias emocionales, que somos multitarea, aprendizaje continuo, capacidad de trabajo en equipo, rigor y tenacidad. Quisiera comentar
que cuando se pregunta a las mujeres cómo se puntúan en estos rasgos,
resulta curioso que la nota no es alta. Me sorprende porque esto tiene relación
con que las mujeres aún seguimos dejando el protagonismo a los hombres.
Tal vez porque en el medio rural, la mujer asume la mayoría de las tareas que
tradicionalmente han desarrollado sus madres y abuelas, es decir, el cuidado
de hijos y mayores. Por tanto es fundamental que las cooperativas incorporen
programas de conciliación profesional, familiar y personal, y asumir que la
conciliación no es solo para las mujeres. Debemos desterrar el presentismo
que tanto caracteriza al trabajo y comenzar a llevar a cabo una eficaz gestión
del tiempo, esta es una asignatura pendiente para hombres y mujeres. Encon-
tramos «ladrones de tiempo» que sin
duda debemos aprender a eliminar.
Sugerencias no faltaron por parte de
las cooperativistas asistentes. Y aquí
es donde nuevamente comprobé que
todas tenemos un potencial creativo,
que se puso de manifiesto a través
de la técnica de creatividad «Seis
sombreros para pensar», que mostró
que las mujeres contamos con suficiente talento y liderazgo para formar
parte de los Consejos Rectores.
Me gustaría desde este artículo
dar con MAYÚSCULAS MI ENHORABUENA a las cooperativistas, que
fueron las auténticas protagonistas
de la Jornada del pasado diciembre,
pues estoy segura que en los próximos años hablaremos cada vez más
de mujeres presidentas de cooperativas y ya tenemos excelentes ejemplos de liderazgo de mujeres que
dirigen los Consejos Rectores.
Finalizaré con otra frase que siempre la tengo en mi mente: «Debes
hacer las cosas que crees que no
puedes hacer». Y considero que todas las mujeres podemos llegar a
donde nos propongamos