¿Quién pudiera en la inmensidad del cielo volar tranquila como ave

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DOMINGO 21 DE AGOSTO DE 2011
CÓDIGO CIEN
4
TRADICIÓN Y VERDAD
Por Leonardo del Cío
EL PROBLEMA
Cuenta la leyenda que en un
Monasterio Budista ubicado
en una ladera casi inaccesible
de las frías y lejanas montañas de los Himalayas, un buen
día uno de los monjes guardianes amaneció sin vida. Le
hicieron los rituales tibetanos
propios para esas ocasiones,
llenos de profundo respeto y
misticismo. Sin embargo, era
preciso que algún otro monje
asumiera las funciones del
puesto vacante del guardián.
Debía pues encontrarse a la
brevedad al sustituto adecuado para llevarlas a cabo.
El gran maestro convocó a
todos los discípulos del monasterio para determinar
quién ocuparía el honroso
puesto de guardián. El lama,
con mucha tranquilidad y calma colocó una magnifica mesa de madera en el centro de
la enorme sala en la que estaban reunidos, y encima de ésta colocó un exquisito y antiguo jarrón de porcelana con
una rosa amarilla de majestuosa y singular belleza en su
interior. Pasados unos instantes, en los cuales todos observaban y callaban, les dijo:
- He aquí el problema –les
dijo mientras señalaba con su
dedo índice el jarrón- Todos
permanecían inmóviles intentando entender. Asumirá el
puesto de Guardián Honorable
de nuestro Recinto, aquel monje que descifre el misterio, y resuelva el problema.
Todos quedaron asombrados mirando aquella escena:
Un antiguo jarrón de gran valor y belleza, con una flor en el
centro. Los monjes estaban petrificados en el más respetuoso
silencio, hundidos en sus interrogantes internas. ¿Qué significaba ese bello jarrón con la
flor adentro? ¿Qué hacer con
él? ¿Cuál podría ser el misterio,
el enigma ahí encerrado? ¿Simbolizaría quizás las tentaciones del mundo? ¿Podría ser algo tan simple como que necesitara agua la flor? Eran tantas
preguntas sin respuesta.
En un momento determinado, decidido y resuelto, uno
de los ahí presentes dio unos
pasos al frente e hizo una pregunta al maestro:
- Antes de proceder, deseo
confirmar si entendí bien.
¿Mencionó Usted que esta
obra de arte, incluida la bella
flor, son el problema?
- ¡Eso mismo dije! –respondió sin titubeos el lamaDe inmediato el candidato
a sustituto desenfundó su filosa espada y de un tajo, en menos de un segundo partió en
dos la antigua y valiosa obra
de arte, desparramándola en
pedazos con todo y la partida
flor. Acto seguido, enfundó el
arma, mostró una caravana
de reverencia en respeto al superior, y regresó a su puesto.
Todos estaban boquiabiertos y estupefactos. Temían la
ira de su maestro y sus terribles consecuencias. Después
de todo, el jarrón era invaluable por antiguo.
El lama se limitó a comentar:
- Honremos a nuestro nuevo guardián del Monasterio. Es
el único que entendió que cuando algo se convierte en un problema, sin importar de qué o de
quién se trate, es prioridad ponerle un remedio a la situación.
En realidad, poco importa cuál
sea el problema. Los hay cuya
naturaleza nos confunde, pues
envuelve nuestros sentidos,
emociones y sentimientos, pero en el fondo continúa siendo
un problema. Si es un problema, precisa ser resuelto en bien
de nuestra armonía y paz, la
cual nunca debe ser hipotecada, ni vendida ni canjeada, no
importa que se trate de una
mujer sensacional, o de un
hombre maravilloso o de un
gran amor no correspondido o
que ya partió para más nunca
volver, si no existe más sentido
para ello en tu vida, precisa ser
eliminado a la brevedad y sin
consideración. Muchas personas cargan la vida entera con el
peso de cosas que fueron importantes en su pasado y que
hoy solamente ocupan un espacio inútil en sus mentes, espacio que es indispensable para
crear nueva vida.
Historia del dominio público.
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“La vida mi amante”, teclea:
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sábados de 9:00 a 11:00 a.m.
BILBAO INICIA NUEVE DÍAS DE FIESTA CON MÁS DE
300 EVENTOS DE TODO TIPO
Miles de personas acuden al lanzamiento del chupinazo, con la “Marijaia” en primer plano, con el que dan comienzo las fiestas de Bilbao, la Aste Nagusia, con un programa oficial compuesto por más de 300 eventos de todo tipo.
Por María del Refugio Guerrero Román
Nunca busques consuelo en los
humanos
ni busques caridad,ni amor, ni asilo;
que aunque se llamen todos tus
hermanos,
todos, a tu alma, tirarán de filo...
En actitud de imploración
tu mano jamás la tiendas,,, sé como el
berilo,transparente en la luz, y ahonda
arcanos...
sé buzo heroico de tu propio Nilo...
Ya cuenta te darás si a media vida
llegas a ser de tu alma tesorero,
que como deuda te dejó una herida.
El mundo miserable y traicionero,
y el falso triunfo de tu propia elegida
hizo de ti un probre pordiosero.
Por El soñador de la Paz
Escúchame tú, canción,
ya eres parte de mi vida
cuando te oigas en mi voz
escaparán tus heridas.
Escúchame si te tomo
aquí en esta tersa noche
donde huelen esos tonos
que se tiñen sin
reproches.
Puede amanecer el alba
candente de algunos bajos
cargada de frío y
escarcha
entre rayos y vivarachos.
Para entretejer momentos
sin dejarte de besar,
luego lanzarte hasta el
viento
entre sonidos sin par.
Así romper con los tonos
de la flores que yo planto
serán tus bellos motivos
vuelo de amor, hecho
canto.
Por Alicia Serrato Casas
¿Quién pudiera
en la inmensidad
del cielo volar tranquila
como ave apacible
cruzar horizontes,
gozar de los aires,
gozar el silencio
de inmensas alturas?
Yo admiro al cóndor
y envidio a las alturas
que se remontan al cielo
con hambre de paz
a volar y volar,
volar lentamente,
jugar con las nubes,
mecerse en los aires
monótonamente.
Qué suave quietud
invade mi alma
al verlas allá,
flotar el aire
y en plácido vuelo
de suaves vaivenes,
perderse en la
calma de gris lejanía.
¿Por qué en este
incansable añorar,
este ensueño sin final?
¡Oh, limbo infinito que lejos estás!
¿Por qué mi
alma anhela esa
paz alcanzar
si puedo tan solo
entre abismos vagar?