ALTERACIONES DEL OLFATO ESTRUCTURA HISTOLÓGICA DE LA MUCOSA OLFATORIA La mucosa olfatoria es una zona amarilla de la mucosa nasal, que está constituida por el epitelio olfatorio que contiene al quimiorreceptor, y por la lámina propia. En el ser humana, como también en los demás animales microsmáticos, el epitelio olfatorio ocupa una pequeña superficie; cubre aproximadamente 5cm2 del receso posterior dorsal de cada fosa nasal. Bajo el epitelio olfatorio subyace una delgada lámina propia conjuntiva, en la cual se encuentran las glándulas de Bowman, los axones olfatorios que conforman la fila olfatoria y vasos sanguineos. Neuroepitelio: En él se localizan: Células de soporte: Ricas en enzimas que metabolizan a las sustancias odoríferas. Ellas poseen inclusiones que corresponden a uun pigmento pardusco, semejante a la lipofuscina y responsable del color amarillo de la mucosa. Células basales: Reservorio de neuronas, se consideran células progenitoras indiferenciadas. Células microvellosas: Su estructura fina y similar a las neuronas, permite considerarlas como quimiorreceptores secundarios. Neuronas olfatorias: Son células bipolares. Sus dendritas se proyectan hacia la cavidad nasal, finalizando en un engrosamiento con cilios quimiosensores (primera superficie de contacto). Sus axones son amielínicos y forman el nervio olfatorio que atraviesa la lámina cribosa del hueso etmoides, llegando al bulbo olfatorio donde hacen sinapsis principalmente con las células mitrales y también con las células en penacho. Lámina propia o submucosa: El epitelio olfatorio se ubica sobre una lámina propia muy celular, conformada por un tejido conjuntivo laxo con un vasto plexo de capilares sanguíneos; se observan en ella células tales como macrófagos, células plasmáticas y células pigmentarias, linfocitos B y células cebadas mucosales. Además, contiene las glándulas de Bowman, haces de axones olfatorios (fila olfatoria) y plexos venosos y linfáticos profundos. Este tejido conjuntivo laxo se continua con el tejido conjuntivo denso del periostio de la lámina cribiforme. Sobre el neuroepitelio se localiza la capa de moco producida por las glándulas de Bowman. Este moco está constituido por: Agua. Mucopolisacáridos Proteínas. Enzimas. OBP (Proteínas de unión a fragancias). Olfatomedinas (Factores neurotróficos que favorecen la transformación de las células basales). LA QUÍMICA DE LOS OLORES Típicamente, el olor de cualquier material comprende una mezcla compleja de multitud de moléculas olorosas de distintos tipos, cada una en una concentración determinada, aunque en ocasiones predomina el efecto de un elemento puro, compuesto de un único tipo de moléculas olorosas que determina el olor dominante. Un intento inicial de abordar el problema de estudio de los olores desde el punto de vista químico fue tratar de establecer relaciones entre la estructura molecular y las propiedades olorosas. Sin embargo, esta relación no es en absoluto unívoca y hay muchos más factores a tener en cuenta (si bien existen patrones comunes a muchas moléculas olorosas). Las moléculas que pueden ser detectadas por nuestro sentido del olfato deben tener ciertas propiedades, como por ejemplo ser lo suficientemente pequeñas como para ser volátiles (masa molecular relativa mayor de 30 a 300 g·mol-1), de modo que puedan vaporizarse, alcanzar la nariz y luego disolverse en la mucosa olfativa. Otros factores importantes son las interacciones internas (moléculas polares o no polares), la distribución de átomos, la distribución de carga, y la posibilidad de que se produzcan rotaciones estructurales. Finalmente, las relaciones (fuerzas) intermoleculares también tienen mucha importancia, y determinan finalmente su volatilidad y solubilidad en agua, entre otros factores. Algunos de los compuestos olorosos más destacados tienen estructuras en anillo con electrones no localizados, lo que les da una especial estabilidad desde el punto de vista químico. Los químicos llaman a esta propiedad “aromaticidad”, porque los primeros compuestos que se descubrieron con dicha estructura presentaban olor, aunque muchas (pero no todas) de estas moléculas aromáticas (en el sentido químico) tienen de hecho olor. TRANSDUCCIÓN OLFATORIA En el sistema olfatorio la transducción significa la conversión de señales químicas en una señal eléctrica que puede transmitirse al sistema nervioso central. Los pasos en la transducción olfatoria sin los siguientes: 1. Moléculas odorantes se unen a receptores sobre los cilios de las células olfatorias. 2. Estos receptores esta acoplados a adenilciclasa a través de una proteína G. Cuando la sustancia odorante esta unida a la proteína G, esta se activa y esto activa a su vez a una adenilcilasa. 3. La adenilciclasa cataliza la conversión de ATP en AMPc. La concentración intracelular de AMPc aumenta y abre canales de Na+ en la membrana celular del receptor olfatorio. Cuando los canales de Na+ se abren, la membrana de las células receptoras se despolarizan. Este potencial despolarizante de receptor aproxima el potencial de membrana al umbral y despolariza el segmento inicial del axón del nervio olfatorio. A continuación se generan potenciales de acción que se propagan a lo largo de los axones del nervio olfatorio en dirección del bulbo olfatorio. CODIFICACIÓN DEL IMPULSO OLFATORIO No se sabe con exactitud de que manera se codifican los estímulos olfatorios. Se conoce la siguiente información: 1. Las células receptoras olfatorias reaccionan a varios odorantes. 2. Las células receptoras olfatorias muestran diferentes respuestas a los mismos odorantes. 3. Cuando se examina la respuesta a un determinado odorante en muchos receptores, surgen diferentes patrones para diversos odorantes. Cada odorante produce un patrón único de actividad dentro de una población de receptores y dicho patrón se transmite al sistema nervioso central donde es interpretado como ese odorante. VÍAS OLFATORIAS Los axones de las células receptoras abandonan el epitelio olfatorio, pasan a través de la lámina cribosa y hacen sinapsis sobre dendritas apicales de células mitrales en el bulbo olfatorio. Esta sinapsis tiene lugar en grupos a los que se denomina glomérulos. En los glomérulos convergen casi 1000 axones de receptores olfatorios sobre una célula mitral. Las células mitrales se disponen en una sola capa dentro del bulbo olfatorio y poseen dendritas laterales y apicales. El bulbo olfatorio también contiene células granulosas y periglomerulares. Las células granulosas y perigromerulares son interneuronas inhibitorias que hacen sinapsis dendro-dendriticas sobre las células mitrales vecinas. Los impulsos inhibitorios pueden generar inhibición lateral que puede agudizar la información enviada al sistema nervioso central. Las células mitrales del bulbo olfatorio se prolongan hacia los centros elevados del sistema nervioso central. Conforme el fascículo olfatorio se aproxima a la base del cerebro, se divide en dos fascículos principales, un fascículo lateral que establece sinapsis en la corteza olfatoria primaria que incluye la corteza piriforme, y el fascículo olfatorio medial que se prolonga hasta la comisura anterior y el bulbo olfatorio contralateral. CLASIFICACIÓN CLÍNICA DE LAS ALTERACIONES DEL OLFATO 1.ANOSMIA: pérdida completa del sentido del olfato, temporal o prolongada, dividiendose en tres tipos: Anosmia pasajera: Es causada, básicamente, por la inflamación y fatiga de la mucosa pituitaria, debido a un resfriado común. Anosmia temporal: Se origina por la acción de alguna toxina viral o bacteriana, por alguna lesión en el nervio olfatorio o puede ocultar algún otro tipo de patología grave como rinitis (asma alérgica), tumores, desviación del tabique nasal o por envejecimiento de la mucosa. También el uso constante de vasoconstrictores contribuye; así como en caso de ser fumador, la nicotina y el alquitrán. Anosmia congénita: Se padece por un traumatismo cerebral o por problemas desde el nacimiento. 2.PAROSMIA: cambio cualitativo o percepción anormal de la respuesta olfatoria. 3.CACOSMIA: sensación subjetiva de un olor desagradable. 4.HIPOSMIA: pérdida parcial de la respuesta olfatoria . 5.HIPEROSMIA : Exceso de olfato ALTERACIONES ADQUIRIDAS DEL OLFATO Los trastornos del olfato tienen muchas causas, algunas más claras que otras. La mayoría de las personas comienzan a sufrir trastornos del olfato después de haber tenido algunas enfermedades o lesiones recientes. Los factores desencadenantes se pueden clasificar en: 1.INFECCIOSAS: El epitelio olfatorio es particularmente sensible a los virus pudiendo aparecer ANOSMIA luego de una infección del tracto respiratorio superior. Su recuperación es rara siendo el pronóstico peor en los mayores de 40 años. 2.MECÁNICA: Los pólipos nasales y las desviaciones septales altas pueden presentarse con HIPOSMIA. 3.INFLAMATORIAS: La Alergia ,la Rinitis atrófica y el Sd Sjoegren pueden afectar a los receptores olfatorios. 4.TÓXICOS: La exposición a sustancias tóxicas puede dejar un daño temporal o permenente del olfato. Algunos son: Tetracloruro de carbono, monóxido de carbono, dióxido sulfúrico, formaldehido, benzeno. La Nicotina disminuye la sensitividad olfatoria. 5.TRAUMATISMOS: TEC con desaceleración rápida de la cabeza pueden seccionar las fibras olfatorias a nivel de la placa cribiforme dejando incluso una Fïstula de LCR. 6.ENDOCRINAS: La Diabetes Mellitus, el Hipotiroidismo, el Hipogonadismo, Sd.Turner y Kallmann puden alterar el olfato. 7.NUTRICIÓN: Déficit de vit A, B12 y Zinc llevan a hiposmia. 8.TUMORALES: Tumores etmoidales especialmente Neuroblastoma olfatorio y meningiomas alteran el olfato. 9.IATROGENIA: La cirugía y la radioterapia de la zona pueden alterar el olfato. 10.NEUROLÓGICAS: La Esclerosis Múltiple, Epilepsia, Parkinson y AVE dañan la olfación. 11.PSIQUIÁTRICAS: La Psicosis y la Esquizofrenia pueden presentarse con alteraciones del olfato. 12.IDIOPÁTICAS: Son un importante grupo en el que no se logra determinar la causa. Existen aberraciones del sentido del olor, no saber cuál es, confundirlo, notarlo como muy intenso. Estas características pueden deberse a un mal funcionamiento de los nervios (nervio olfatorio) y del propio cerebro, para este sentido. El nervio olfatorio es uno de los nervios que mejor se regeneran. El sistema nervioso de mamíferos adultos tiene una capacidad regenerativa limitada en respuesta a las lesiones, las neuronas dañadas responden de forma diferente dependiendo de su localización. Hay regiones del sistema nervioso donde, en condiciones normales, existe neurogénesis, axonogénesis y dendritogénesis a lo largo de toda la vida del individuo. Es el caso, por ejemplo, del epitelio olfatorio, donde se produce una génesis de neuronas olfatorias a partir de precursores presentes en las capas básales del epitelio, que además son capaces de crecer su axón para reconectarse, en el bulbo olfatorio, con las neuronas de segundo orden de la vía olfatoria. DIAGNOSTICO DE LOS DESÓRDENES DEL SENTIDO DEL OLFATO Además de un examen físico e historia médica completa, Se puede explorar con exámenes especiales, substancias que se hacen oler por el paciente y de acuerdo al puntaje se establece la normalidad o la alteración del olfato Los procedimientos de diagnóstico pueden incluir lo siguiente: Medir la concentración más baja de una sustancia química que la persona pueda reconocer. Comparar los olores de diferentes sustancias químicas. Exámenes de "raspar y oler". TRATAMIENTO DE LOS DESÓRDENES DEL SENTIDO DEL OLFATO Y EL GUSTO El tratamiento específico será determinado por el médico, o médicos basándose en lo siguiente: La edad del paciente, su estado general de salud y su historia médica. Qué tan avanzado está el desorden. Sus expectativas para la trayectoria del desorden. La tolerancia del paciente a determinados medicamentos, procedimientos o terapias. La opinión o preferencia del paciente (o de su familia). El tratamiento puede incluir lo siguiente: Suspender o cambiar los medicamentos que contribuyen al desorden. Corregir el problema médico que está causando el desorden. Eliminar por medio de cirugía los obstáculos que puedan estar causando el desorden. Recibir asesoramiento. BIBLIOGRAFÍA Libros: Gartner, Leslie. Hiatt, James. Histologia texto y atlas. Editorial Mc Graw-Hill interamericana. Primera Edición. Mexico. 1997. Págs: 301-304 Tchernitchin, Andrei. Histología. EditorialnMediterraneo Ltda.. Primera Edición. Chile. 1995. Págs: 361-369 Contando, Linda. Fisiología. Editorial Mcgraw-Hill Interamericana. Primera Edición en español. México. 2003. Págs: 90-92 Revistas/Apuntes: Marcías Guarasa, Javier. Los sistemas del olfato y el gusto, Fisiología y Funcionamiento. Ingeniería Neurosensorial, Departamento Ingeniería Electrónica. Pontificia Universidad Católica de Chile. Chile. 2004. Internet: http://acta.otorrinolaringol.esp.medynet.com/textocompleto/actaotorrino39/C021188.PDF http://www.uandes.cl/dinamicas/Patolog http://escuela.med.puc.cl/paginas/publicaciones/ApuntesOtorrino/AnatomiaNasal.ht ml http://www.sharpenespanol.com/healthinfo/content.cfm?pageid=P03586