Cómo elaborar un discurso de graduación

Cómo elaborar un discurso de graduación
El acto de graduación es un momento muy importante, pues el trabajo y el
esfuerzo de varios años obtienen su recompensa. Es el día en que familiares, amigos y
profesorado se reúnen para celebrar ese logro.
Si eres la persona elegida, ten en cuenta que te convertirás en “la voz de tu
promoción”. Realizar un buen discurso es una experiencia inolvidable. Para conseguirlo,
te ofrecemos algunos consejos y sugerencias, tanto para la escritura como para la
pronunciación.
ESCRIBIR UN DISCURSO DE GRADUACIÓN
1.- “Lluvia de ideas” sobre tu experiencia en el instituto
Piensa sobre este tema y anota todo lo que se te ocurra. No te preocupes si no tiene
mucho sentido; son sólo apuntes que te servirán para redactar con fluidez el discurso.
Te pueden servir algunas preguntas como éstas:
 ¿Cómo hemos cambiado desde que empezamos el instituto?
 ¿Cuál es la lección (académica y vital) más importante que hemos aprendido en este
tiempo?
 ¿Qué anécdotas y curiosidades han ocurrido durante este tiempo?
 ¿Qué desafíos tendremos que superar en el futuro? ¿Nos han preparado para ello?
2.- Empieza a desarrollar un tema
Tu discurso debe tener un tema, específico o general, para articular lo que digas. Sin
él, podría parecer que estás diciendo cosas “sin ton ni son” o sin una intención final. Te
sugerimos algunos posibles, entre muchos otros:
 Trayecto recorrido. Realizar un repaso cronológico de lo que han supuesto estos
años: cómo llegasteis, cómo habéis ido cambiando, qué proyectos de futuro tenéis…

Adversidad. Enumerar los desafíos y obstáculos que, como grupo, se os han
planteado y que habéis logrado superar.
 Madurez. Indicar cómo habéis ido cambiando y aceptando responsabilidades.
 Lecciones vitales. El instituto no sólo enseña lecciones académicas, sino que nos
prepara para la vida; el trabajo, el esfuerzo y el sacrificio acaban dando su fruto. Y
buena prueba de ello es el acto de graduación.
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3.- Piensa en la estructura de tu discurso
Como sabes, todo texto tiene tres partes bien definidas: introducción, desarrollo y
conclusión. En la retórica clásica, estas tres partes referidas al discurso, se llamaban
de otra manera, como ya hemos visto en otro archivo de la wiki.
Mucho más sencillo, para que lo entiendas, puedes seguir el “método hamburguesa”
o “método sándwich”:
El pan de arriba es tu introducción, clara y concisa (sin olvidar saludar al
auditorio y agradecer la presencia de cada uno de los miembros de la comunidad
educativa: padres y familiares, profesorado y compañeros y amigos).
El relleno son las ideas que vas a desarrollar, en forma de párrafos (breves y
claros).
Y el pan de abajo es tu conclusión (sencilla, pero contundente).
Puedes usar kétchup, mayonesa, salsas u otros condimentos (chistes, anécdotas,
bromas, curiosidades…), pero recuerda que demasiada salsa puede arruinar una
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buena hamburguesa.
No olvides a quién se dirige tu discurso. Es muy importante para establecer el tono
que quieres dar al texto. Lo más fácil es que escribas lo que te gustaría que te dijeran
en una ceremonia de graduación, sobre el esfuerzo realizado y sobre los momentos
que quedan por vivir.
4.-
Comienza la introducción con algo cautivador
En primer lugar, no olvides saludar al auditorio y agradecer su presencia y apoyo en
estos años, dedicándole algo cariñoso a cada grupo implicado (padres, familiares y
profesorado).
A continuación, iniciarás el discurso, propiamente dicho. Puedes hacerlo con tu mejor
idea para atrapar la atención de la gente; para ello, debe ser algo importante y estar
bien contado. Puede ser una cita interesante, un acontecimiento, una historia o un buen
chiste sobre los años de instituto. Alguna sugerencia:
 Si hablas de afrontar la adversidad, todo el mundo esperará que hables de
exámenes, de relaciones personales, de lo duros que son los profesores… ¿Por
qué no los sorprendes? Ejemplo: las notas no siempre indican cuánto has aprendido,
o que no es difícil encontrar personas excelentes entre los profesores…
 Puedes gastar una broma, como: "Recuerdo el primer día de instituto hace cuatro
años. Parecíamos niños recién levantados de la cama. Y, aunque ahora somos algo
mayores, todavía algunos siguen estando tan dormidos como aquel día."
 Puedes jugar con los dobles sentidos, como: "No quiero preocuparles, pero esta
promoción tiene un serio problema. No es un económico, ni intelectual, ni de
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conducta. No. Es un problema de “actitud”: La promoción de 2014 tiene el problema
de ser asombrosa y genial (o el par de adjetivos que queráis hacer destacar)."
5.- Haz interesante el desarrollo del discurso y recuerda unirlo con tu tema

En cada uno de los párrafos (que deberán ser breves) irás desgranando alguna idea
o algún matiz importante y que tenga que ver siempre con el tema elegido. Procura
que no sean más de cuatro o cinco párrafos. Ve al grano.
 Ya sabes que un texto lo es si guarda: adecuación, coherencia y cohesión. Respeta
estas características para el discurso que estás elaborando.
 Es el momento también de desgranar alguna anécdota, momentos entrañables, etc.
Este tipo de recursos harán que nuestro discurso sea mucho más cercano para el
público. Pero debes procurar que el contenido global de la anécdota pueda ser
comprendido por todos los presentes, no únicamente por los estudiantes y docentes.
Recuerda que ese día asistirán también familiares que no han vivido el día a día y
deben entender lo que cuentes.
6.- Usa tu conclusión para sacar una moraleja
Es el momento de volver al tema que elegiste y preguntarte: ¿Qué podemos aprender
de este tema? Esta será tu lección, tu moraleja final. Algunas lecciones podrían sonar
algo así como:
 "En conclusión, el instituto nos ha enseñado que las notas, con ser importantes, no
lo son tanto como la educación recibida. Por ejemplo: sacamos buena nota en un
examen de matemáticas, pero conseguimos una educación al entender que los
modelos matemáticos nos pueden ayudar a volar; aprendemos a analizar un poema,
pero conseguimos una educación al entender que los poemas son hermosos y nos
sirven para afrontar mejor la vida”.
 "Cuando pienso en nuestra promoción, no pienso en ninguna persona en particular,
sino en una comunidad humana, en una familia. Y como tal comunidad y familia,
caminaremos asumiendo nuestra responsabilidad y buen hacer en el mundo”.
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PRONUNCIAR TU DISCURSO DE GRADUACIÓN
1.- Habla despacio
Cuando te encuentres frente al auditorio, con el corazón desbocado y la boca seca, tal
vez sientas la tentación de hablar aceleradamente para terminar cuanto antes. Sin
embargo, los buenos discursos, se suelen pronunciar despacio, con fuerza y
sentimiento tras cada palabra. Recuerda bajar el ritmo normal de cómo hablas.
 Un buen ejercicio podría ser escuchar el famoso discurso “I have a dream”, de Martin
Luther
King,
Jr.
(http://www.youtube.com/watch?v=x7C9OympYtQ),
(http://vimeo.com/53743162), uno de los oradores públicos más eficaces del siglo
XX. Fíjate en lo despacio que hablaba. Los discursos lentos suenan mejor porque
permiten a la audiencia ir procesando lo que oyen y disfrutarlo mucho más.
 Graba la pronunciación de tu discurso y escúchate. Notarás que incluso cuando
creías que estabas hablando realmente lento, se escucha mucho más rápido de lo
que imaginabas. Siempre se puede hablar más despacio. Hazlo de nuevo.
2.- Pausa para enfatizar
Respira profundo un par de veces tras pronunciar una frase. Da tiempo a tu audiencia
para que le encuentre el sentido a lo que estás diciendo. Haz una pausa después de
decir una frase realmente motivadora para profundizar en el sentido de la frase.
Incluso, bebe un poco de agua para tranquilizar tus nervios y dar tiempo a que el
auditorio se fije con más detenimiento en lo que vas a decir a continuación.
3.- Ten el discurso casi memorizado
Tener memorizado el discurso te ayudará a no mirar tanto tu texto, y no limitarte
exclusivamente a leerlo de un pedazo de papel. Si sólo lees el discurso sonará
mecánico, quitándole su ritmo natural y la fluidez del lenguaje.
4. Mantén buen contacto visual con tu audiencia
Tener contacto visual te permitirá atrapar a la audiencia no sólo con tus palabras,
sino también con tus ojos y tu presencia. Esta habilidad es algo realmente importante
para un orador público, pero se suele pasar por alto con facilidad porque es difícil de
dominar.
o Mira a tu auditorio de vez en cuando. Si estás leyendo el discurso, pasarás mucho
tiempo mirando al papel. Cuando acabes un párrafo, puede ser el momento para
echar un vistazo general al público. Esto te ayudará a recuperar el aliento.
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o
No tengas miedo de mirar durante dos o tres segundos a una persona en particular,
o a una zona del auditorio. Este gesto, si eres capaz de introducirlo en tu puesta en
escena del discurso un par de veces o tres, lo agradecerá el público, porque
entenderá que les estás hablando a todos y cada uno de ellos.
5.- No te preocupes por las equivocaciones
Si te equivocas, no te preocupes ni te disculpes. Déjala así y continúa como si no
pasara nada; se notará menos. Cuanto menos te detengas en hacer evidente tus
errores (que seguro cometerás, pues todos los cometemos al hablar) menos se
notarán; incluso se verá como un síntoma de espontaneidad y cercanía.
6.- Infunde sentimiento a tu voz
No leas con una voz monótona o aburrirás a todo el mundo. Mantén el entusiasmo en
lo que dices y deja que tu entusiasmo se refleje en tu voz. Modula la voz cambiando
el tono, la velocidad y el volumen para que tu presentación sea aún mejor.
Intenta encontrar sentido en una palabra o en una frase de cada párrafo y llevar la
entonación hacia ella, como si fuera algo natural.
7.- Sé confiado, no chulesco
Confía en tu habilidad para hacer reír a las personas, para hacer que te entiendan lo
que quieres transmitirles.
Si notas nervios, piensa que los asistentes al acto son personas que te quieren
(familiares, compañeros, profesorado) y que van a valorar positivamente todo lo que
digas. Por tanto, tienes que dominar tus nervios y devolverles con lo mejor de ti la
confianza que han depositado en tu lectura.
8.- Practica tu discurso con suficiente tiempo
Revisa lo escrito y practica la lectura con tiempo de antelación, incluso delante de
algunos amigos o familiares de confianza. Eso te ayudará:
 A entender qué funciona y qué no en el discurso. Todavía tendrás tiempo de cambiar
algo que no haya quedado claro o que se te haya olvidado. Admite sus sugerencias.
 A memorizar casi el discurso, lo que rebajará tu nerviosismo y que la lectura final sea
mucho más fluida.
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ALGUNOS CONSEJOS Y ADVERTENCIAS ÚTILES

Cuando estés frente al atril, dedica una gran sonrisa sincera al auditorio.

No escribas nada rimbombante ni tópico como: “no es una despedida para
siempre”.

Podrías narrar en primera persona el discurso. Pero es aconsejable que trates de
hacer un discurso inclusivo; para ello, emplearás la primera persona del plural. Así,
aunque lo hagas y lo leas tú, todo el mundo se sentirá como si lo estuviera leyendo
personalmente.

Cuando te dirijas al público, deberás hacerlo con respeto, aunque sean personas
cercanas; a veces no está mal hablarles de usted.

Recuerda en algún momento a todos los profesores de estos años, no sólo de
los que has tenido en cuarto; también a la orientadora del instituto y a aquellos
profesores que se han jubilado o que han cambiado de centro. Recuerda
especialmente a los tutores.

Dedica también un cariñoso recuerdo a aquellos compañeros que empezaron con
vosotros y que, por una u otra razón, hoy no están compartiendo este momento
con vosotros.
 Evita cualquier comentario ofensivo o de protesta. Recuerda que es un momento
agradable para recordar, no para provocar rechazo en el auditorio.
 No plagies un discurso de Internet. Ten en cuenta que el mejor discurso copiado
siempre es peor que el más humilde que tú puedas hacer, puesto que estaría vacío
de contenido y sería frío y distante. Además, podrías meterte en problemas legales,
llegado el caso.
 Intenta evitar que tu discurso sea largo, porque los oyentes se aburrirán y dejarán
de prestar atención a lo que dices. El éxito de tu intervención en una graduación
pasará por ser claro y conciso. Una duración adecuada no debería rebasar los 5 ó
6 minutos.
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Estos apuntes se han elaborado a partir de estas páginas web:
http://es.wikihow.com/realizar-un-discurso-de-graduaci%C3%B3n
http://fiesta.uncomo.com/articulo/como-elaborar-un-discurso-de-graduacion-19682.html
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Por si quieres ampliar conocimientos, puedes consultar también estas páginas:
http://www.grupopedia.com/sociedad/educacion/como-escribir-un-discurso-de-graduacion/
http://www.speech-topics-help.com/graduation-speech-topics.html
http://html.rincondelvago.com/creacion-de-un-discurso.html
http://graduaciones.org/2014/como-armar-un-buen-discurso-de-graduacion-2/
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