Procuración e Impartición de Justicia Local en el

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Procuración e
Impartición de
Justicia Local en el
Distrito Federal
Procuración e
Impartición de
Justicia Local en el
Distrito Federal
México, 2011
Créditos
Coordinador del libro
- Eduardo de Jesús Castellanos
Hernández
Autores de los artículos
- Luis Genaro Vásquez Rodríguez
- José Ramón Amieva Gálvez
- Edgar Elías Azar
- José Raúl Armida Reyes
- Ramón Montaño Cuadra
Apoyo editorial y compilación
- Ernesto Reyes Cadena
- Thania Coral Salgado Ponce
Diseño y formación editorial
- José Amaya Hernández
- Rocío Miranda Calixto
- María de la Luz Ramírez
Manríquez
Procuración e Impartición de
Justicia Local en el
Distrito Federal
Primera edición enero de 2011
© 2011
Secretaría de Gobernación
Dirección General de
Compilación y Consulta del Orden
Jurídico Nacional
www.gobernacion.gob.mx
www.ordenjuridico.gob.mx
www.testamentos.gob.mx
Derechos reservados conforme a la ley
ISBN: 978-607-427-095-2
Impreso en México / Printed in Mexico
Bucareli 99, Col. Juárez,
Del. Cuauhtémoc, cp. 06699, México, df.
Directorio de la
Secretaría de Gobernación
José Francisco Blake Mora
Secretario
Juan Marcos Gutiérrez González
Subsecretario de Gobierno
Rubén Alfonso Fernández Aceves
Subsecretario de Enlace
Legislativo
Felipe de Jesús Zamora Castro
Subsecretario de Asuntos
Jurídicos y Derechos Humanos
René Martín Zenteno Quintero
Subsecretario de Población,
Migración y Asuntos Religiosos
Álvaro Luis Lozano González
Subsecretario de Normatividad
de Medios
José Oscar Vega Marín
Oficial Mayor
Presentación
E
l Distrito Federal fue creado por el Congreso General me­
diante decreto de 18 de noviembre de 1824 como sede los
poderes federales en la Ciudad de México. Restablecido
después del periodo centralista por el Acta Constitutiva y de Refor­
mas de 18 de mayo de 1847 y erigido como entidad federativa
por reforma constitucional de 22 de agosto de 1996.
Como dicha sede, también lo señalan expresamente las Consti­
tuciones Federal de 1857 y Política de los Estados Unidos Mexica­
nos de 1917, y se rige en lo relativo a su organización política por
el Estatuto de Gobierno del Distrito Federal, publicado en el
Diario Oficial de la Federación el 26 de julio de 1994, cuyo artículo
segun­do, primer párrafo, dispone que: La Ciudad de México es
el Distrito Federal, sede de los Poderes de la Unión y capital de los
Estados Unidos Mexicanos. El Distrito Federal es una entidad fe­
derativa con personalidad jurídica y patrimonio propio, con plena
capacidad para adquirir y poseer toda clase de bienes que le sean
9
necesarios para la prestación de los servicios públicos a su cargo, y
en general, para el desarrollo de sus propias actividades y funciones.
Entre las atribuciones de los poderes públicos locales están
las funciones de procuración e impartición de justicia, a cargo de la
Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal y el Tribu­nal
Superior de Justicia del Distrito Federal. Asimismo, el Tribunal de­
lo Contencioso Administrativo del Distrito federal y la Junta Local
de Conciliación y Arbitraje tienen la función de dirimir las contro­
versias administrativas y fiscales, y laborales, respectivamente,­
en sus ámbitos de competencia.
En un Estado federal como el nuestro, los órdenes de gobier­no
tienen competencias exclusivas y comparten otras concurrentes
en diversas materias, de ahí que la colaboración y la cooperación­
intergubernamentales sean un medio indispensable para la go­
bernabilidad democrática y la viabilidad de las instituciones pú­
blicas, en virtud de que las distintas competencias, coberturas o
disponi­bilidad de recursos imponen la necesidad del consenso y la
identifi­cación de objetivos comunes.
Por otra parte, la normatividad federal y local se aplica en un­
mismo ámbito territorial, por lo que los respectivos emisores deben­
evitar los conflictos entre las disposiciones jurídicas a observarse,
así como prever con claridad las materias que las distintas autori­
dades pueden legalmente conocer. Esto garantiza a los goberna­
dos la seguridad y la certeza necesarias en los actos, hechos o
procedimientos en los que intervengan, ya sea como solicitantes de
servicios públicos, contribuyentes, justiciables, contratantes,
proveedores o prestadores de bienes o servicios, concesionarios,
servidores públi­cos, trabajadores, etcétera.
En ese sentido, es de particular interés para las autoridades
de los tres órdenes de gobierno que la población conozca las acti­
vidades que realizan, cómo llevan a cabo las funciones que el orden
10
Procuración e
Impartición...
jurídico les señala, y difundir la normatividad que fundamenta
su actuación, organización y procedimientos para cumplir sus
fines con carácter trascendente, ético, útil y oportuno, como parte
de los medios que el Estado provee para alcanzar el orden público,
la­justica y el bien común.
Para contribuir a lo anterior, y como expresión de la colaboración­
intergubernamental ya señalada, la Secretaría de Gobernación­pre­
senta este volumen sobre la procuración e impartición de justicia­
local en el Distrito Federal, con el propósito de aportar­una fuente
de consulta especializada sobre estas dos funciones fundamen­
tales para la consolidación del Estado de Derecho en el marco de la
autonomía competencial y las atribuciones que la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos y el Estatuto de Gobier­no
del Distrito Federal otorgan a las instituciones­locales.
Se trata, sin duda, de un material útil que será de particular­
interés para los estudiosos, profesionales y especialistas en las
materias que se abordan en este texto, y para los servidores pú­bli­
cos federales, locales y municipales de todo el país.
Los artículos que integran este libro fueron elaborados por los
titulares y presidentes de distintas instancias administrativas y
judiciales del Distrito Federal que amablemente, y con profundo
interés y sentido republicano, aportaron para su publicación y
difusión por la Secretaría de Gobernación del gobierno federal,
lo que garantiza al lector interesado la pertinencia y actualidad
de la información tanto en los contenidos como en los diversos
aspectos que integran cada tema.
Participaron el Lic. Luis Genaro Vásquez Rodríguez, Subpro­
curador de Averiguaciones Previas Desconcentradas de la Procu­
raduría General de Justicia del Distrito Federal; el Mtro. José Ramón
Amieva Gálvez, Subprocurador Jurídico y de Derechos Humanos
de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal; el Ma­
Presentación
11
gistrado Edgar Elías Azar, Presidente del Tribunal Superior de Jus­
ticia del Distrito Federal; el Magistrado José Raúl Armida Reyes,
Presidente del Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito
Federal, y el Lic. Ramón Montaño Cuadra, Presidente de­la Junta
Local de Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal.
A todos ellos, nuestro reconocimiento y gratitud.
Subsecretaría de Asuntos Jurídicos y
Derechos Humanos
Dirección General de Compilación y
Consulta del Orden Jurídico Nacional
La función investigadora del
Ministerio Público del Distrito
Federal en el nuevo Sistema de
Justicia Penal
Lic. Luis Genaro Vásquez Rodríguez
Subprocurador de Averiguaciones
Previas Desconcentradas de la
Procuraduría General de Justicia del
Distrito Federal
L
a Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal,
como parte de la reorganización de las instituciones encar­
gadas de la procuración de justicia a nivel federal y local,
generada a partir de las reformas constitucionales publicadas el
18 de junio de 2008 que desentraña un nuevo proceso penal acu­
satorio, ha llevado a cabo diversas acciones que se ajustan al
nuevo sistema, que entre otras destaca el desarrollo de métodos
alternativos de solución de controversias a través de la mediación,
implementación de la oralidad en justicia para adolescentes, así
como la recomposición del procedimiento de integración en la
averiguación previa en las agencias del Ministerio Público hacién­
dola breve en cuanto al inicio de la averiguación previa, acotando
los tiempos de espera en beneficio del denunciante, querellante,
ofendido o víctima en las agencias investigadoras; perfiladas estas
acciones de este nuevo diseño con la creación del marco regulatorio
efectivo que permita ofrecer condiciones de transparencia para
una procuración de justicia rápida y eficiente, inhibiendo el poder
monopólico del Ministerio Público, erradicando paulatinamente
el tradicional sistema inquisitivo mixto.
13
Por lo que la Subprocuraduría de Averiguaciones Previas Des­
concentradas, perteneciente a la Procuraduría General de Justicia
del Distrito Federal, con la finalidad de buscar diferentes alternati­
vas de atención a la ciudadanía para que ésta sea más oportuna,
eficiente, eficaz, transparente; ha desarrollado diversos programas.
Programa “Sistema de Atención
de Requerimientos de
Autoridad –siara–”
Con el propósito de mantener una positiva dinámica en la actuali­
za­ción de la actividad de integración en las averiguaciones previas,
la Subprocuraduría de Averiguaciones Previas Descon­centradas
realizó las gestiones necesarias para impulsar la disponibilidad de
un mecanismo que simplificara de manera notable el tiempo
de respuesta de una petición del agente del Ministerio Público
inves­tigador a una entidad financiera a través de la Comisión
Nacional Bancaria y de Valores.
14
Procuración e
Impartición...
En virtud de lo anterior, en fecha 05 de octubre de 2009 se
imple­mentó el “Sistema de Atención de Requerimientos de Auto­
ridad” (siara) cuyo procedimiento y herramienta informática se
ajusta a la normatividad contenida en los artículos 16, 20 y 21 de la
Cons­titución Política de los Estados Unidos Mexicanos; artícu­los
37, 124 y 273 bis del Código de Procedimientos Penales para el
Distri­to Federal, artículo 2 fracción I, 3 fracción IV, 17, 27 frac­ción
XIII y 30 de la Ley Orgánica de la Procuraduría General de Jus­
ticia del Distrito Federal; artículos 7 fracciones I y XI y 60 fracción
X del­Reglamento de la Ley Orgánica de la Procuraduría General
de Justicia del Distrito Federal, en relación con el artículo 4o.,
fracciones V, XXXVI y XXXVII, 16 fracción I y 19 de su Ley; 117
de la Ley de Instituciones de Crédito; 25 de la Ley del Mercado de­
Valores, y 45 del Reglamento de Supervisión de la Comisión Na­
cional Bancaria y de Valores.
La Subprocuraduría de Averiguaciones Previas Desconcentra­
das fue la primer área de estructura dentro de la Procuraduría Ge­
neral de Justicia del Distrito Federal en utilizar esta herramien­
ta, que posteriormente se aplicó en las demás áreas centrales de
investigación de la misma.
La función
investigadora...
15
“siara”, cuenta con asesoría y apoyo técnico para la utiliza­
ción y operatividad del sistema, que garantiza la fluidez de la
información, haciendo mención que este procedimiento se hace
consistir desde la generación de datos específicos desde un primer
usuario responsable denominado “operador” que alimentará los
datos re­levantes de la petición ministerial, que son verificados por
un segundo responsable designado llamado “administrador”.
El “administrador” gestionara el visto bueno de la autoridad
requirente (Subprocurador) para solventar la legalidad que estable­
ce el artículo 117 fracción II de la Ley de Instituciones de Crédito;
todo ello para generar un formato con registro electrónico que una
vez escaneado y transmitido a la Vicepresidencia de Supervisión
de Procesos Preventivos de la citada comisión nacional y se emite
un acuse electrónico como comprobante de su recepción.
Por su parte, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores una
vez validada la solicitud recibida, transfiere el archivo electrónico
a la entidad financiera respectiva para que esté en aptitudes legales
de proporcionar dicha información a la autoridad ministerial,
manteniendo desde luego la secrecía bancaria de sus cuentaha­
bientes, para que en su oportunidad, el agente del Ministerio Público
obtenga datos y elementos de prueba en breve tiempo para la
comprobación del cuerpo del delito y la probable res­ponsabilidad en
la investigación de un delito, regularmente de índole patrimonial.
Lo anterior, ha evidenciado una respuesta positiva y sustan­
cial de las diversas entidades financieras a través de la Comisión
Nacional Bancaria y de Valores a las peticiones ministeriales que­
se han emitido, tanto de la Subprocuraduría de Averiguaciones­
Previas Desconcentradas, como ahora ocurre en las demás áreas
centrales de investigación de esta Procuraduría, simplificando
los tiempos de envío a la entidad financiera, qué, anterior a la
implemen­tación de este sistema era de aproximadamente de
quince días contados desde que se emitía la tradicional solicitud
16
Procuración e
Impartición...
por la autoridad ministerial, siendo ahora un tiempo de no más
de veinticuatro horas en que se procesa la información en la
institu­ción financiera.
No deja de ser importante reiterar que ante el desarrollo de
esta útil herramienta informática, la integración de las averi­gua­
ciones previas en las que se investigan delitos de índole patri­
mo­nial como el fraude, el abuso de confianza y el robo, ha sido
exitosa por la información oportuna y específica.
El hecho de haber adoptado este sistema informático eleva
los principios constitucionales, privilegiando esta importante
tarea de procurar de justicia, haciéndola cada vez más pronta,
gratuita e imparcial, velando por la legalidad en los juicios en el
que se garantice el respeto a los derechos humanos del imputado
y de la víctima del delito.
La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, re­
frendando el compromiso de servir a la ciudadanía bajos los prin­ci­
pios de legalidad, certeza, honradez, lealtad, objetividad, impar­cia­
lidad, profesionalismo, transparencia, eficacia, eficiencia y respeto
a los derechos humanos, así mismo, ha desarrollado diversos
programas que responden contundentemente a problemáticas
específicas expresadas por la ciudadanía.
Programa “mp Virtu@l”
Uno de los principales reclamos del sentir social, es la necesidad
de percibir mayor confianza en la institución del Ministerio Pú­
blico y re­ducir los tiempos de espera en las Coordinaciones Terri­
toriales –agencias del Ministerio Público–. A fin de dar respuesta a
ambos aspectos, la Procuraduría Capitalina, en atenci­ón a esta
demanda ciudadana, desarrolló e implementó un programa que
apoyado con las nuevas tecnologías, permite que los ciudadanos
puedan iniciar querellas, averiguación previa especial –sólo robo
de celula­res– y actas especiales vía internet.
La función
investigadora...
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El programa es nombrado Ministerio Público Virtual, o
mp
Virtu@l,­mismo que surgió oficialmente el 14 octubre de 2008,
derivado del acuerdo A/005/2008 emitido por el C. Procurador
General de Justicia del Distrito Federal, y publicado en la Gaceta
Oficial del Distrito Federal en la misma fecha mencionada, para dar
respuesta integral al compromiso de la Institución, y acercar de
ese modo los servicios de la institución a los ciudadanos.
Al utilizar el sistema “mp Virtu@l” la atención al ciudadano se
vuelve inmediata, en consecuencia, las Unidades de Investiga­
ción con Detenido de las agencias del Ministerio Público atienden
con mayor diligencia los delitos considerados como graves.
Entre los principales beneficios que brinda este programa
se encuentran:
•Servicio digitalizado del procedimiento de inicio de actas especia­
les, averiguación previa especial y averiguaciones previas de delitos­
que se persiguen por querella.
•Acceso al Ministerio Público a través de Internet, las 24 horas del
día los 365 del año.
•Celeridad en el trámite de inicio de actas especiales, averiguación
previa especial, y averiguaciones previas de delitos que se persi­
guen por querella, así como aquéllos considerados perseguibles de
oficio, y que éstos últimos, son iniciados en las agencia del Ministerio
Público.
•Desahogo de las cargas de trabajo del Ministerio Público en turno
con detenido.
Se han instalado y puesto en operación Unidades de Recepción­
por Internet en cada una de las 16 Fiscalías Desconcentradas de
Investigación, en la Fiscalía de Investigación de delitos Sexua­
les, en las Fiscalías de Procesos del Ministerio Público de lo Civil
y de lo Familiar, y en la Agencia Especializada para la Atención
a Turistas.
18
Procuración e
Impartición...
Debido a la buena aceptación que ha tenido dicho programa,
se han instalado otras Unidades de Recepción por Internet (uris)
en diversas agencias del Ministerio Público de las Fiscalías de
mayor demanda y posteriormente se irán incrementando.
Es destacable también, que en el mes de octubre de 2008
se firmó convenio entre la Procuraduría y la IV Legislatura de
la Asamblea Legislativa del df, el cual consistió en capacitar al
personal de los 66 módulos de Atención Ciudadana de cada una
de las fracciones parlamentarias, propiciando con ello el acerca­
mien­to del programa a la ciudadanía que acude a los mismos.
mp Virtu@l fue la principal herramienta del Ministerio Público
durante la etapa de contingencia sanitaria, acaecida durante
los meses de abril y mayo de 2009, ya que fungió como el único
contacto inmediato para que el personal Ministerial siguiera
prestando la debida atención a la ciudadanía.
Asimismo, el programa
mp
Virtu@l es considerado también
un vínculo para las personas que tienen alguna discapacidad
temporal o permanente, ya que pueden realizar el inicio de averi­
guaciones previas desde cualquier lugar con acceso a internet,
sin necesidad de acudir a la agencia del Ministerio Público, sola­
mente deberán hacerlo para ratificar.
La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, refren­
dando el compromiso de volver más accesibles sus servicios y
acercarlos a toda la ciudadanía y, sensible a que un gran segmen­
to de la población no cuenta con acceso a internet en su domicilio,
ha buscado celebrar convenios de colaboración con distintas
instituciones gubernamentales, órganos públicos, organizaciones
sociales, instituciones académicas, organizaciones civiles y de la
iniciativa privada, para que en lugares públicos se facilite el uso
gratuito de internet a la población y pueda ser utilizado este
programa, tal es el caso del Sistema de Transporte Colectivo
(stc) –Metro–.
La función
investigadora...
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El stc ha colaborado decididamente en la capacitación del per­
sonal encargado de los Cibercentros, es decir, los módulos de Acceso
a Internet que se encuentran localizados en estaciones como: Pino
Suárez, San Lázaro, Zaragoza, Pantitlán, Barranca del Muerto, La
Raza, Zapata, Tacubaya, Chabacano y Zócalo.
La capacitación fue orientada a que los responsables de estos
cibercentros, conozcan el sistema mp Virtu@l y si algún ciudadano
se acerca a querer denunciar hechos posiblemente constitutivos
de delitos, como amenazas o robo de celulares, puedan ha­cerlo con
su ayuda.
Programa “mp Virtu@l
Itinerante”
Asimismo, a fin de acercar aún más los servicios de la Procuraduría­
Capitalina a la ciudadanía, se creó también el programa mp virtu@l
Itinerante.
Este último consiste en la colocación de módulos móviles
del programa mp Virtu@l, los cuales se colocan en lugares de alta
concentración de la población como son escuelas, plazas públi­
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Procuración e
Impartición...
cas, centros comerciales, explanadas delegacionales, centrales
camioneras, eventos deportivos, eventos culturales, entre otros.
Esta modalidad del programa mp Virtu@l, permitió crear un
vínculo más directo con la población, ya que muchos de ellos expre­
saron sentir empatía con los representantes de la autoridad, al
ver que se llevaban los servicios de la Procuraduría Capitalina
hasta sus comunidades.
Derivado del proceso de mejora continua del programa, se logró
observar que a pesar de los mecanismos creados para acercar los
servicios de internet a la población, aún se quedaba un inmenso
grupo sin poder accesar al servicio, se logró un convenio de colabora­
ción con el Consejo Ciudadano de Seguridad Pública y Procuración
de Justicia del Distrito Federal, para crear mp Virtu@l telefónico.
Esta nueva vertiente del programa mp Virtu@l, permite a los
ciudadanos que no cuentan con acceso a internet, realizar una
La función
investigadora...
21
llamada telefónica al call center del Consejo Ciudadano (5533,
5533), en donde un ejecutivo los orientará y los ayudará a llenar
el formato electrónico para denunciar hechos perseguibles por
querella, actas especiales, o averiguaciones previas especiales, éstas
últimas son específicamente para denunciar el robo de telé­fonos
celulares o cualquier aparato de comunicación móvil.
Programa “Ministerio
Público Transparente”
Otra de las prioridades de la Procuraduría Capitalina, es facilitar
nuevas prácticas de atención a los ciudadanos que acuden a las
Agencias del Ministerio Público, a iniciar una averiguación previa,
o quienes se encuentran en espera de algún familiar o conocido que
está puesto a disposición del Ministerio Público.
Bajo esa responsabilidad de brindar atención oportuna, pronta
y transparente a la ciudadanía, la Subprocuraduría de Averiguacio­
nes Previas Desconcentradas, titular de las Fiscalías Desconcentra­
das de Investigación que se encuentran localizadas en cada una de
las 16 Delegaciones Políticas del Distrito Federal, creó el pro­grama
“Ministerio Público Transparente”, a través del cual se explotan
las bondades de las nuevas tecnologías en pro de mejorar el servicio
que se ofrece en las Agencias del Ministerio Público, ase­gurando
con ello, que el ciudadano reciba información transparente, ágil,
veraz e inmediata.
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Procuración e
Impartición...
Las pioneras del programa Ministerio Público Transparente,
fueron las Fiscalías Desconcentradas de Investigación, toda vez
que por lo general es a través de las mismas que la ciudadanía
establece el primer contacto con el Ministerio Público.
La creación, desarrollo y puesta en práctica del programa “Mi­
nisterio Público Transparente” cuya innovación radica en ser el
pionero a nivel Nacional en hacer pública y transparente la infor­
mación que por derecho pueden saber los familiares y/o defenso­
res de las personas que se encuentran puestas a disposición del
Ministerio Público, con lo cual se consigue reducir viejas prácticas
arraigadas, como secrecía de información para una defensoría
ade­cuada, corrupción y maltrato por parte del personal que atien­
de la barandilla de las Agencias del Ministerio Público, hacia los
familiares y defensores de los indiciados.
Uno de los factores que motivaron la creación de dicho sistema,­
fue esencialmente escuchar los principales reclamos de los fami­
liares y/o defensores de las personas puestas a disposición del
Ministerio Público; como son la espera para tener información
como: ¿Por qué delito está puesto a disposición? ¿Cuál es el núme­ro
de la averiguación previa?, ¿Cuánto tiempo más estará ahí? ¿Hace
cuanto iniciaron la averiguación?, etcétera.
Asimismo, otra de las circunstancias que movieron la creación
del programa “Ministerio Público Transparente”, fue darse cuenta
que la costumbre de no proporcionar a los ciudadanos la infor­
mación relativa a las personas de su interés, que se encuentran
puestos a disposición en alguna Agencia del Ministerio Público, se
había convertido en una práctica frecuente, en virtud de que la
ciudadanía, en la desesperación por obtener datos acerca de su
familiar y/o defendido puesto a disposición, ofrecía dádivas a los
servidores públicos a cambio de esa información.
Por ello, la Subprocuraduría de Averiguaciones Previas Descon­
centradas, sensible al sentir de la ciudadanía, decidió poner en
marcha el programa “Ministerio Público Transparente”, para
La función
investigadora...
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evitar que los familiares o conocidos de las personas puestas a
disposición del Ministerio Público, se enfrenten a recibir malos
tratos o indebida atención, sin mencionar la pérdida innecesaria
de tiempo, para localizar a la persona que buscan.
Este programa permite que los ciudadanos tengan certeza
acerca de los tiempos y diligencias en las que intervine su familiar
y/o defendido, que se encuentre sujeto a una investigación dentro
de la averiguación previa, además de conocer la hora exacta en
la que se deberá determinar su situación jurídica.
Este programa tiene como objetivos principales:
1.Modernizar los métodos de atención ciudadana;
2.Transparentar la actuación del Ministerio Público y,
3.Proporcionar oportunamente información visual relativa a la situa­
ción jurídica de las personas puestas a disposición del Ministerio
Público.
Dicho programa se basa en la implementación de un sistema
que permite al ciudadano visualizar la información respecto a la
situación jurídica de las personas que están a disposición del Mi­
nisterio Público, mediante pantallas de plasma, colocadas en las
salas de espera de las Coordinaciones territoriales de Seguridad
Pública y Procuración de Justicia –Agencias del Ministerio Público–.
La información que se exhibe en las pantallas es la siguiente:
•Número de averiguación previa
•Fecha y hora de inicio de la averiguación previa
•Nombre y edad del imputado –probable responsable–.
•Unidad de investigación con detenido que integra la averiguación
previa.
•El delito que se imputa.
•El cronómetro regresivo que permite visualizar el tiempo que resta
para determinar la situación jurídica del imputado.
24
Procuración e
Impartición...
•Y el estatus en el que se encuentra la persona o la determinación, si
fue liberado, o si fue consignado, incluye el Centro de Reclusión al
que fue remitido, así mismo si es que fue arraigado.
Ministerio Público Transparente logró innovar y eficientar
el modelo de atención a la ciudadanía que era cumplido por el
personal ministerial encargado de atender la “barandilla” en las
Agencias del Ministerio Público.
Este proyecto se presentó al Contralor General de la Procuradu­
ría General de Justicia del Distrito Federal, al Comisionado Presi­
dente del Instituto de Acceso a la Información Pública del Distrito
Federal, (infodf), y a la Comisión de Derechos Humanos del Dis­
trito Federal, quienes coincidieron en las ventajas que propor­
ciona el programa, mismas que no contravienen los principios
de respeto a los derechos humanos ni vulneran la protección a
los datos personales.
Debido a que este programa representaba una innovación
nunca antes vista en la historia de la Procuraduría General de Jus­
ticia del Distrito Federal, este proyecto contó con el apoyo del
infodf, de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal y
del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública y Procuración de
Justicia, para su aplicación.
Ministerio Público Transparente está diseñado para garanti­
zar el respeto de los derechos humanos de los probables responsa­
bles, y dar certeza jurídica, tanto al inculpado como a los familiares
que acuden en busca de información, por ello representa un gran
avance de la pgjdf en materia de transparencia, al evitar la secrecía
de infor­mación que por derecho le debe ser proporcionada a los
familiares y defensores de las personas puestas a disposición
del Ministerio Público.
Con este sistema de información, la pgjdf da pleno cumplimien­
to a las garantías constitucionales de los ciudadanos, con los bene­
ficios de: respeto a los derechos humanos de la persona puesta a
La función
investigadora...
25
disposición; transparencia de la información; acceso inmediato
y oportuno a la información verídica de la averiguación previa;
certeza jurídica; así como en la inhibición de la discrecionalidad
y abatimiento de la corrupción.
De esta manera la Procuraduría Capitalina, da respuesta a
la creciente demanda social de recibir información veraz, oportu­
na y certera sobre la situación jurídica de las personas puestas
a disposición del Ministerio Público, de una manera inmediata y
oportuna, logrando así abatir en gran medida la corrupción, al en­
contrarse al alcance de los interesados la información relativa a las
personas puestas a disposición del Ministerio Público, a la vez que
se fomenta el respeto a los derechos humanos y se transparenta
la actuación del Ministerio Público, asegurando inmediatez y ve­
racidad en la información de las personas puestas a disposición
de las Agencias del Ministerio Público.
Programa “Ministerio
Público Transparente Web”
Asegurar la transparencia y el acceso a la información pública a
la ciudadanía, primordialmente para dar respuesta al reclamo social
de recibir atención pronta y expedita, además de informa­ción veraz y
oportuna, son objetivos básicos de la Procuraduría Capitalina, esto
es, sin dejar de lado el objetivo primordial de con­tinuar denodada­
mente con su mandato constitucional de la perse­cución del delito
del orden común, atendiendo las necesidades especiales de los di­
versos grupos para abatir la inseguridad jurí­dica y la impunidad.
26
Procuración e
Impartición...
Asimismo, esta Institución tiene como eje principal hacer de
la Ciudad de México un espacio de recuperación de la confianza
social,promoviendo el respeto a la legalidad y a la cultura de la de­
nuncia. Para ello, se han generado nuevos mecanismos integrales
que reúnen el esfuerzo coordinado de las diversas áreas que com­
ponen esta institución.
Históricamente había sido difícil para los familiares, amigos y
conocidos de las personas que se encuentran puestas a disposi­
ción del Ministerio Público ubicar en dónde se encontraba su
familiar, porque regularmente hacían interminables llamadas a
hospitales y a todos los contactos posibles, en busca de mayores
datos para saber a dónde dirigirse.
Aún más difícil, ya que muchas veces podían deambular por
diversas Agencias del Ministerio Público cercanas al domicilio,
hasta dar con la correcta. Por ello, atendiendo a esa inquietud ciuda­
dana, de lo difícil que era localizar a la persona puesta a disposición
se buscó evolucionar para hacer llegar la información aún más­
pronto a la ciudadanía, rebasando para ello las barreras de tiempo
y espacio.
Este reto de poner al alcance de la ciudadanía la información bá­
sica de las personas puestas a disposición, sólo podía ser subsana­do
mediante el uso de tecnologías de comunicación e información tales
como la Internet, debido a que de ese modo pueden mediatizarse
trámites y servicios.
Derivado de ese gran esfuerzo, surge el programa mp Trans­
parente Web, mismo que fue creado mediante el uso de nuevas
tecnologías de comunicación e Información, tal es el caso de la Inter­
net, ya que esta red cosmopolita permite mantener activos los
canales de comunicación a cualquier hora y en cualquier lugar
del Distrito Federal, del País, o del Mundo.
El programa mp Transparente Web, permite brincar barreras de
tiempo o espacio para que los familiares, amigos, conocidos o aboga­
dos de las personas puestas a disposición del Ministerio, puedan­ac­
La función
investigadora...
27
cesar libremente a la información básica del mismo, desde­cualquier
lugar con acceso a Internet y de esa forma saber a dónde di­rigirse
y definir qué acciones ejecutarán.
mp Transparente Web modernizó el antiguo sistema que exis­
tía para brindar información a los ciudadanos sobre las personas
de su interés que se encontraban a disposición del Ministerio
Público, ya que dio la oportunidad de revisar la información bási­
ca desde Internet, en lugar de tener que acudir a la Agencia del
Ministerio Público.
El programa mp Transparente Web, puede consultarse ingre­
sando al portal de la Procuraduría General de Justicia del Distrito
Federal: www.pgjdf.gob.mx o directamente desde la dirección
electrónica: http://mptransparente.pgjdf.gob.mx/Busqueda/
Busqueda.aspx
28
Procuración e
Impartición...
Una vez dentro del portal del programa, el usuario debe digi­
tal el nombre, apellido paterno, materno y edad de la persona
que busca y dar click en el botón consultar. Los datos que se
despliegan al realizar la consulta vía Internet son:
1.Nombre del indiciado.
2.Edad (Para evitar confusiones con algún homónimo)
3.La denominación de la Agencia del Ministerio Público en la que se
encuentre puesto a disposición.
Posteriormente al darle click en la opción ver localización, se
desplegará la siguiente información:
1.Domicilio de agencia o de la Fiscalía;
2.Nombre Fiscal;
3.Teléfonos de Fiscalía;
4.Nombre y teléfonos del responsable de agencia;
5.Georeferencia de ubicación de la Agencia del Ministerio Público.
La función
investigadora...
29
Al tener la Procuraduría General de Justicia del Distrito Fede­­ral,
la responsabilidad de ser el representante legal de los intereses­de
los habitantes del Distrito Federal, busca implementar acciones
eficaces y eficientes para la Persecución del Delito y la Procuración­
de Justicia con respeto irrestricto a los Derechos Humanos, a efec­
to de fortalecer la confianza y seguridad en la convivencia de los
habitantes.
Programa
“Subprocuraduría
Itinerante”
Continuando con el proceso de recuperación de confianza de
la ciudadanía hacia la institución del Ministerio Público, surge la
necesidad de crear un programa que acerque a las autoridades
con las comunidades de las 16 Delegaciones Políticas del Distrito
Federal.
Este programa se denomina Subprocuraduría Itinerante; por
medio del cual, el Subprocurador de Averiguaciones Previas Des­
concentradas cuenta con una oficina móvil para recorrer diferen­
tes puntos de la ciudad, ofreciendo audiencias públicas directas
a los ciudadanos que sea de su interés entrevistarse directamente
con el Subprocurador.
30
Procuración e
Impartición...
Con este programa se atienden los siguientes puntos:
Proximidad social. El Subprocurador de Averiguaciones Previas Des­
concentradas debe propiciar en el ámbito de su competencia, vías de
solución directa a los conflictos, de tal forma que la ciudadanía sea
debidamente orientada y canalizada dando solución a sus peti­ciones.
Atención ciudadana inmediata. La ciudadanía recibe una atención
inme­diata en la problemática que plantee, ya que el Subprocura­dor
inter­vendrá en el asunto en forma directa y sin intermediarios.
Presencia en las Fiscalías Desconcentradas. El Subprocurador escu­
cha a la ciudadanía, quien le plantea su problemática, orientándola­
sobre el procedimiento, girando instrucciones para su solución y ca­
nalizándola en ese mismo acto con el Fiscal o Responsable de Agencia,
o­en su caso, a la instancia competente. Estas visitas periódicas del­
Subprocurador, tienen como finalidad supervisar la actuación de los
Fiscales, Responsables de Agencia, personal sustantivo del Ministe­
rio Público y sus auxiliares.
Por lo tanto este programa de proximidad social, permitió
establecer vínculos directos con la problemática de la ciudada­
nía y de sus comunidades para plantear soluciones específicas
y designar a los responsables de su aplicación.
Programa
“Llámale a tu Fiscal”
La queja recurrente de la ciudadanía respecto a la función y ser­
vicio brindado por las instituciones encargadas de la procura­ción­de
justicia, se concentra de manera fundamental, en que el servicio
que se otorga y al cual tienen derecho, no se ejerce de una forma
transparente, abierta y con prontitud.
Por lo anterior, se consideró menester implementar mecanis­
mos de supervisión, control y atención ciudadana, que permitan a
La función
investigadora...
31
corto plazo el acceso a la atención y seguimiento de las demandas
que en materia de procuración de justicia afecten al ciudadano, a
través de la comunicación directa e inmediata con los Fiscales de
la Procuraduría General de Justicia del Distrito Fe­deral, mediante­
diversos medios de comunicación, que permitan escuchar y anali­
zar cada caso en particular, así como dar la debida atención a los
asuntos de su competencia.
Llámale a tu fiscal, es un programa que le da la oportunidad
a­la ciudadanía de establecer un vínculo directo con los titulares de
las Fiscalías de Investigación y así exponer quejas y otras demandas
por diferentes medios: teléfono de oficina y Nextel, correo electrónico,­
mensajes de texto, etcétera.
La implementación de este programa permite brindar al ciuda­
dano un medio de comunicación inmediato y confiable que le permi­
32
Procuración e
Impartición...
ta ser escuchado y canalizado a los distintos servicios que pro­por­
ciona la Procuraduría.
Asimismo, proporcionar atención personalizada de los Fisca­
les, para elevar el nivel de trato y atención del ciudadano que acude
a las coordinaciones territoriales a su cargo y crea una vin­culación
directa con la problemática de los ciudadanos que deman­dan pro­
curación de justicia, generando las acciones necesa­rias para la
adecuada solución del conflicto.
Llámale a tu Fiscal fortalece la presencia de la Procuraduría
a través de los Fiscales, mediante el contacto directo entre la ciuda­
danía y el Fiscal; en la atención de barandilla, en las unidades de­
investigación, en las coordinaciones territoriales, así como en los
medios masivos de comunicación.
A través de éste programa, se ha conseguido transformar a
los titulares de las Fiscalías de Investigación, en servidores públicos­
dinámicos y perceptivos, además de elevar el nivel de confianza
entre los ciudadanos para acercarse al Ministerio Público.
Programa
“Caras Nuevas”
El proceso de recuperación de confianza que empezó con la creación
de los programas antes especificados, no habría estado completo
sin una rotación inteligente de personal sustantivo.
Por lo tanto y derivado de lo establecido en el artículo sexto del
acuerdo A/003/98 del C. Procurador General de Justicia del Distri­to
Federal, cuyo contenido especifica la forma de rotación para el
personal del Servicio Público de Carrera, a fin de que conozcan
con­precisión las distintas facetas de la función sustantiva que
desempeña, salvo casos excepcionales, fue creado el programa
Caras Nuevas.
La función
investigadora...
33
Este programa consiste en transformar la percepción social de
los servidores públicos que atienden a la ciudadanía en las agencias
del Ministerio Público, mediante la rotación del personal sustan­
tivo, a efecto de erradicar actos de corrupción, inercias y vicios que
por costumbre se habían arraigado entre el personal, litigantes o
imputados.
El programa Caras Nuevas permite elevar la calidad de vida
laboral y mejorar la salud Institucional, erradicar el estancamiento
en la productividad y eliminar áreas problemáticas y mejorar la
actitud del personal en las Agencias del Ministerio Público, desarro­
llar su potencial y aumentar la motivación para ofrecer un­servicio
de calidad a los usuarios.
Su aplicación se ha realizado en etapas, promoviendo cambios
internos y externos de acuerdo a la siguiente premisa: el personal
sustantivo –Ministerios Públicos y Oficiales Secretarios– con 3 y
hasta 5 años de antigüedad en la misma Coordinación Territorial
–Agencia del Ministerio Público–, fue asignado a otra Coordinación
de la misma Fiscalía Desconcentrada; y en los casos de los servido­
res públicos que superaban los 5 años, fueron cambiados a otras
Fiscalías Desconcentradas.
La primera etapa se llevó a cabo en octubre y noviembre de
2008, en la que involucró a 614 servidores públicos de las unida­
des de investigación con detenido. La segunda etapa se realizó en
34
Procuración e
Impartición...
los meses de enero y febrero de 2009, en el que se involucró a 498
servidores de las unidades de investigación sin detenido. Y la
tercera etapa a partir del 1o. de febrero, en la que se invo­lucrará
a 196 servidores públicos tanto de unidades de investigación con
detenido y unidades de investigación sin detenido.
Caras Nuevas, se continúa aplicando de manera permanente,
a fin de mantener a los servidores públicos en movimiento, para
evitar viejas prácticas.
Fiscalía Desconcentrada
de Investigación en
Delitos Ambientales y
en Materia de Protección
Urbana
Un tema que ha cobrado gran relevancia en la procuración de jus­
ticia es el Ambiental, ya que resulta de orden público e interés
social la protección del ambiente, la prevención y control de la
contaminación, así como la preservación, restauración y conser­
vación ambiental en el Distrito Federal, y especialmente en lo que
se re­fiere al suelo de conservación, áreas naturales protegidas
de competencia local, áreas de valor ambiental, áreas verdes en
suelo urbano, barrancas y zonas de recarga de mantos acuíferos.
Por ello, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Fede­ral,
sensible a esta preocupación de la sociedad, transformó las funcio­
nes de la Fiscalía de Supervisión y Coordinación de Averiguaciones
Previas Desconcentradas Zona Oriente, convirtiéndola en la Fisca­
lía Desconcentrada de Investigación en Delitos Ambientales y
en materia de Protección Urbana (fedapur), mediante el acuerdo
A/007/2008, del Procurador General de Justicia del Distrito Fe­
deral, publicado en la Gaceta Oficial el 21 de Octubre de 2008.
fedapur es ahora la responsable de investigar los delitos ambien­
tales, en todas sus vertientes, toda vez que existen múltiples de­litos
La función
investigadora...
35
comunes que impactan negativamente o representan un riesgo
urbano para el Distrito Federal, los cuales requieren una atención
especial desde una óptica integral, multidisciplinaria e interinsti­
tucional.
Asimismo es la responsable de conocer de las conductas
tales como depósito de cascajo en suelo urbano o vía pública,
des­po­jos o invasiones de predios rústicos y urbanos, conductas
ilícitas de­Directores Responsables de Obra, uso de documen­tos
falsos relacionados con el uso del suelo urbano, y con gestiones de
natura­leza ambiental, daños culposos a árboles y recursos natu­
rales de competencia local, que hoy no se tipifican como delitos
ambietales,­ aunque comparten características similares, pero
no reciben el tratamiento integral desde la perspectiva ambiental
y de protección urbana.
Como parte de sus principales acciones de concientización,
creó y puso en marcha el Sistema Interactivo de Justicia Ambiental
(sija), para lo cual se proporciono equipos completos de sistema de
cómputo, los cuales fueron instalados con dicho sistema en las
Fiscalías: Iztapalapa, Xochimilco, Tlalpan, Álvaro Obregón y Milpa
Alta, Gustavo A. Madero, Tláhuac. Magdalena Contreras y Cuaji­
malpa. Fiscalías que por su ecosistema fueron considera­das pro­
picias para realizar funciones preventivas de delitos ambientales.
Este micrositio contiene información normativa tanto penal
como ambiental de todo el país y ya cuenta con su dirección
para consultarse desde cualquier computadora con acceso a inter­
net: www.pgjdf.gob.mx/fedapur
En dicho portal, se puede consultar un cuadro con los delitos
ambientales y sus penas, así como la transcripción del Código
Penal local, donde aparecen los delitos ambientales. También se
muestran mapas sobre suelo de conservación, su zonificación,
barrancas y áreas naturales protegidas.
Es importante resaltar que desde su creación, se han liberado
diversos predios invadidos, como “El Zapote” o “Tehuiztitla” –ambos­
36
Procuración e
Impartición...
en la Delegación Tláhuac–, y con esto se ha acumulado ya la
liberación de más de un millón de metros cuadrados, de suelo
ambientalmente relevante (área natural protegida, área verde en
suelo urbano o suelo de conservación, que se mantenían inva­
didos o en donde se realizaban edificaciones prohibidas por las
normas ambientales y urbanas respectivas).
En total han sido liberados más de 1,000,000 metros cuadrados­
de suelo de conservación, en las Delegaciones Tláhuac y Gustavo
A. Madero.
Cabe resaltar que más de un millón de metros cuadrados se han
asegurado, por antecedentes de invasión; con el aseguramiento
se busca evitar cometer un delito ambiental o, en su caso, acreditar
el­dolo de los invasores al ocuparlo aún sabiendo que un predio
está asegurado.
Gracias a labor de investigación policial, por primera vez en
la historia del país, se logró detener en flagrancia a 4 personas
que es­taban depositando cascajo en una zona de conservación de
la Delegación Tlalpan, y en enero de 2009, se realizó la primera
de­­tención de personas dedicadas a la tala de árboles; esta acción
sentó­­precedente a nivel Nacional, por ser la primera detención en
flagrancia por tal delito.
Igualmente relevante, es el nombramiento a la Institución a
través de la
fedapur
para la Coordinación del Grupo de Delitos
Ambientales dentro de la Conferencia Nacional de Procuración
de Justicia y se ha presentado a los integrantes una política cri­
minal ambiental nacional abarcando la problemática tanto a nivel
local como nacional.
La Fiscalía Desconcentrada de Investigación para Delitos
Ambientales y en materia de Protección Urbana (fedapur) participa­
en las reuniones del Equipo de Trabajo Interinstitucional sobre
Riesgos Ambientales (etira), en las que participan la Secretaría de
Protección Civil, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento
Territorial, la Secretaría del Medio Ambiente, todas del Distrito Fe­
La función
investigadora...
37
deral, entre otras, y en las que se realizan estudios para prevenir y
suprimir los altos niveles de ruido en el Centro Histórico, así como la
tira de residuos de la construcción, para lo cual se han realizado
operativos en forma conjunta.
Entre los logros más relevantes de esta Fiscalía se encuentra
la creación de un área de peritos ambientales, misma que no existía
anteriormente; la coordinación de investigaciones en materia de
inte­ligencia para efectuar operativos ambientales con la colabo­
ración de policía de investigación y peritos ambientales de la Fiscalía.
Asimismo se han impulsado eventos académicos para la pre­
ven­ción del delito ambiental y también se logó prevenir la invasión
(Ecoguardas) de aproximadamente 15,000 posibles ocupantes y
se obtuvieron órdenes de aprehensión contra líderes relevantes
de asentamientos irregulares.
Han realizado mapeo y geoposicionamiento de fenómenos
delincuenciales en materia ambiental en el Distrito Federal e
impul­saron la elaboración de los lineamientos de política criminal
ambiental nacional, los cuales marcan objetivos comunes que
deben perseguirse por las Procuradurías Generales de Justicia
que integran la Conferencia Nacional de Procuración de Justicia; se
distribuyeron para sus comentarios en todas las Procuradurías
de Justicia estatales y ninguna las objetó o atacó su observancia.
Cabe resaltar, que dichos lineamientos no pueden ser obligato­
rios pues violarían la autonomía constitucional de las Entidades
Federativas. No obstante sí puede emitir documentos de trabajo
que faciliten la labor de la procuración de justicia en el país, estatal­
o regionalmente; sin embargo, pese a no ser obligatorios, la Procu­
ra­duría General de Justicia del Estado de Campeche creó en junio
del presente año, una Agencia Especializada en Delitos Ambientales.
Con la creación e implementación de estos programas se
fortalecen las funciones del Ministerio Público para la correcta
investigación y persecución de los delitos del fuero común, en el
Distrito Federal.
38
Procuración e
Impartición...
Intervención del Ministerio
Público del Distrito Federal
en Procesos no Penales
(Mediación)
Mtro. José Ramón Amieva Gálvez
Subprocurador Jurídico y de Derechos
Humanos de la Procuraduría General
de Justicia del Distrito Federal
Prólogo
El Estado tiene la obligación de hacer efectivos los derechos
y de generar las condiciones necesarias para que las personas
los ejerzan y para lograrlo se debe crear un sistema de justicia
eficien­te para hacer frente a las violaciones de los derechos de la
ciudada­nía. El sistema de justicia incluye al conjunto de normas
y órganos destinados a prevenir o resolver controversias penales,
civiles, administrativas, laborales, etcétera, en las que están impli­
cados particulares y órganos del Estado. Justamente, el campo
de la “justicia” es uno de los más importantes, en el que se define
la vigencia de los derechos de la sociedad; donde se prueba si las
libertades y garantías reconocidas a las personas tienen o no apli­
cación real en las comunidades. El Estado debe organizar el
apa­rato y estructura gubern amental de manera que sea capaz
de asegurar jurídicamente el libre y pleno ejercicio de los dere­
chos de la sociedad. Como consecuencia de esta obligación, los
Estados deben prevenir, investigar y sancionar toda violación de
los derechos y garantizar la reparación de los daños producidos.
39
El acceso a la justicia va mucho más allá de garantizar a
las personas la posibilidad de acudir mediante un recurso ante los
ór­­ganos encargados de aplicar normas jurídicas. Implica que el
cumplimiento de la ley, a través de la actividad del Estado, sea
efi­­ciente y genere seguridad jurídica. Lo anterior se manifiesta en
el derecho que tiene toda persona, independientemente de su con­
di­ción económica, social, política, de género o de cualquier otra
índole, de acudir ante las autoridades competentes ministeriales,
judiciales o administrativas, para obtener la protección de sus dere­
chos o para hacer valer cualquier otra pretensión.
Es indudable que el sistema penal tiene características inqui­
sitoriales (demostradas en figuras como el arraigo, la prisión
preventiva, la prueba tazada y el papel del Ministerio Público),
lo que tiene repercusiones en la política de prevención del delito
y seguridad pública, en la procuración de justicia, en la integri­
dad, la libertad y la seguridad personal y en la administración de
justicia. Además, la forma en que está concebido el sistema penal
y la reparación del daño implican una fuerte exclusión de la vícti­
ma durante las diversas fases procesales. Por ello, en México
con la reforma constitucional de los artículos 17 y 18, se prevé
la implementación de una “Justicia Alternativa” y “Mecanismos
Alternativos de Solución de Controversias”, en donde éstos últi­
mos se centra en la figura de “Mediación” como una forma de
despresurizar el sistema de justicia, y establecer una forma efi­
ciente para solucionar las controversias que se puedan suscitar
entre las partes, sin necesidad de echar a andar el aparato de
gobierno en sus fases de procuración y administración de justicia.
Aspectos Constitucionales
En este contexto, el 18 de junio de 2008, se reformó la Constitución­
Política de los Estados Unidos Mexicanos para permitir la trans­
formación del sistema de justicia penal en un sistema acusatorio.
40
Procuración e
Impartición...
Cada Estado de la República, y el Distrito Federal deberán expedir­
y poner en vigor las modificaciones u ordenamientos legales que
sean necesarios para incorporar el Sistema Procesal Penal Acusa­
torio antes del año 2016. La reforma requiere no sólo de cambios
legales, sino de múltiples estrategias y programas de capacitación,
porque se trata de un cambio profundo en la forma de pro­curar
e impartir justicia. Es indispensable que la reforma al sistema de
justicia en concreto del Distrito Federal considere los más altos
estándares de derechos humanos, y garantice un sistema de
justicia que cumpla con los principios de publicidad, contradicción,
concentración, con­tinuidad e inmediación, así como la igualdad
entre las partes; asegure el trabajo independiente de los servicios
periciales; limite la­ prisión preventiva y la pena de prisión y
que además, contemple la posibilidad de conciliación o justicia
restaurativa, para así evitar la saturación del sistema penal con
hechos delictuosos que podrían resolverse mediante procedi­
mientos sencillos y ágiles de conciliación.1
Derivado de lo anterior, se reforma el artículo 17 constitucional­
para señalar que los mecanismos alternativos de solución de con­
troversias son una garantía de la población para el acceso a una
justicia pronta y expedita. Estos mecanismos alternos a los pro­cesos
jurisdiccionales para la solución de controversias, entre otros la
mediación, conciliación y arbitraje, permitirán en primer lugar
cambiar al paradigma de la justicia restaurativa, propiciarán
una participación más activa de la población para encontrar otras
formas de relacionarse entre sí, donde se privilegie la responsabi­
lidad personal, el respeto al otro, la utilización de la negociación­
y la comunicación para el desarrollo colectivo; también servirán
para despresurizar las altas cargas de trabajo de los órganos
Programa de Derechos Humanos del Distrito Federal, Ciudad de México, agosto
de 2009, página 181.
1
Intervención del
Ministerio...
41
jurisdiccionales y para que las víctimas obtengan de forma más
rápida la reparación del daño, que es una asignatura pendiente de
nuestro sistema de derecho.
La Mediación es un mecanismo de resolución alternativa
de conflictos al interior del nuevo proceso penal y más especí­
fi­camente, de los acuerdos reparatorios, y que además tiene
aplicabilidad en la rama civil, familiar o vecinal, que es el ámbito
donde originalmente surge la práctica de la mediación, bajo los
principios de voluntariedad en la participación de la víctima y el
imputado; el principio de confidencialidad de las conversaciones
que tiene lugar dentro del proceso de mediación, y; el principio de
imparcialidad del mediador.
Derecho Comparado
Ámbito Internacional
Legislacion de Estados
Unidos de América
En los Estados Unidos de América, la Mediación surge a finales de
los años setenta del siglo XX, siendo una vía de promover la con­
vivencia entre las partes, para la resolución de sus conflictos, a
la­vez que desarrolla habilidades sociales y corporativas, ya que
no se concentra en la resolución del conflicto, sino en la transforma­
ción de la relación entre las partes.2
La Mediación en Estados Unidos dentro del movimiento denomi­
nado como “Alternative dispute resolution” (adr), los primeros ser­
vicios de mediación ajenos o complementarios al sistema ju­dicial
2
Revista Electrónica de Estudios Filológicos, http//www.um.es/tonosdigital/
znum15/secciones/tritonos-1-Abdellatif.htm, [número 15], [Junio 2008], [página 5].
42
Procuración e
Impartición...
tradicional, se centraron en la regulación de conflictos familiares
ante casos de separación y divorcio como formas alternativas o com­
plementarias al proceso judicial, a la hora de dirimir las disputas­de
pareja, de proteger a los menores, de resolver cuestio­nes de índole
patrimonial y de fomentar actuaciones educativas. La vinculación
y la obligatoriedad jurídica determinaba el carác­ter voluntario o
imperativo de la Mediación.
De manera paulatina la Mediación se ha ido ocupando de la
resolución de conflictos en distintas áreas sociales y humanas,
interculturalidad, educación, menores, consumo, salud, asociacio­
nismo, comunidades, etcétera. A partir de la primera experiencia
norteamericana, se fue reconociendo la oportunidad y viabilidad de
las adr como una función profesional de “autoregulación de disputas”
sociales (familiares, culturales, escolares, comu­nitarias, etcétera),
alternativa o complementaria a la vía judicial. En ella ju­garon un
papel determinante teorías de “resolu­ción de conflictos” como la
“negociación asistida” de la escuela de Harvard, el “méto­do transfor­
mativo” de Bush y Folger, o el “círculo narrativo” de Sara Coob.
La Mediación es considerada como método en la gestión preju­
dicial de las controversias sociales y familiares, ante la crisis admi­
nistrativa de la justicia, la necesidad de aligerar los costos econó­
micos y temporales de los procesos judiciales y la conveniencia
de reconocer una mayor capacidad de participación al ciudadano
en la resolución de los conflictos que le afectaban, encontrando el
desarrollo de dos tipos de Mediación: la del sector público (trabajado­
res sociales, abogados) y la del sector voluntario (asociaciones).3
Contribuciones a las Ciencias Sociales, http//www.eumed.net/rev/cccss/07/sfr.
htm,Universidad de Malaga España, [página 5 referencia].
3
Intervención del
Ministerio...
43
Legislacion de Colombia
El Código de Procedimiento Penal Colombiano, en su artículo 518,
define lo que se entiende por justicia restaurativa en los siguientes
términos:
“Se entenderá por programa de justicia restaurativa todo proceso en
el que la víctima y el imputado, acusado o sentenciado participan
conjuntamente de forma activa en la resolución de cuestiones deri­
vadas del delito en busca de un resultado restaurativo, con o sin la
participación de un facilitador”.
“Se entiende por resultado restaurativo, el acuerdo encaminado a
atender las necesidades y responsabilidades individuales y colec­tivas­
de las partes y a lograr la reintegración de la víctima y del infractor
en la comunidad en busca de la reparación, la restitución y el ser­
vicio a la comunidad”.4
Por su parte el artículo 521, establece; “Son mecanismos de
justicia restaurativa la conciliación preprocesal, la conciliación
en el incidente de reparación integral y la mediación”.
Los artículos 523 a 527, regulan la mediación de la siguiente
manera:
Artículo 523. Concepto. Mediación es un mecanismo por medio
del cual un tercero neutral, particular o servidor público desig­
nado por el Fiscal General de la Nación o su delegado, conforme
con el manual que se expida para la materia, trata de permitir el
intercambio de opiniones entre víctima y el imputado o acusado
para que confronten sus puntos de vista y, con su ayuda, logren
solucionar el conflicto que les enfrenta.
4
44
Código de Procedimientos Penales de Colombia, 2000.
Procuración e
Impartición...
La mediación podrá referirse a la reparación, restitución o resar­
cimiento de los perjuicios causados; realización o abstención de
determinada conducta; prestación de servicios a la comunidad; o
pedimento de disculpas o perdón.
Artículo 524. Procedencia. La mediación procede desde la
formulación de la imputación y hasta antes del inicio del juicio oral
para los delitos perseguibles de oficio cuyo mínimo de pena no
exceda de cinco (5) años de prisión, siempre y cuando el bien jurí­
dico protegido no sobrepase la órbita personal del perjudicado, y
víctima, imputado o acusado acepten expresa y voluntariamente
someter su caso a una solución de justicia restaurativa.
En los delitos con pena superior a cinco (5) años la media­
ción será considerada para otorgar algunos beneficios durante
el trámite de la actuación, o relacionados con la dosificación de la
pena, o el purgamiento de la sanción.
Artículo 525. Solicitud. La mediación podrá solicitarse por la
víctima o por el imputado o acusado ante el fiscal, juez de control de
garantías o juez de conocimiento, según el caso, para que el Fiscal
General de la Nación, o su delegado para esos efectos, proceda a
designar el mediador.
En los casos de menores, inimputables y víctimas incapaces,
sus representantes legales deberán participar en la mediación.
Artículo 526. Efectos de la Mediación. La decisión de víctima
y victimario de acudir a la mediación tiene efectos vinculantes,
en consecuencia, excluye el ejercicio de la acción civil derivada
del delito y el incidente de reparación integral.5
El mediador expedirá un informe de sus resultados y lo remiti­
rá al fiscal o al juez, según el caso, para que lo valore y determine
sus efectos en la actuación.
5
Idem.
Intervención del
Ministerio...
45
Los resultados de la mediación serán valorados para el ejerci­
cio de la acción penal; la selección de la coerción personal, y la
individualización de la pena al momento de dictarse sentencia.
Artículo 527. Directrices. El Fiscal General de la Nación elabora­
rá un manual que fije las directrices del funcionamiento de la me­
diación, particularmente en la capacitación y evaluación de los
mediadores y las reglas de conducta que regirán el funcionamiento
de la mediación y, en general, los programas de justicia restaurativa.
Legislacion de Chile
En Chile los mediadores están constituidos por un equipo de pro­
fesionales conformados por abogados, psicólogos, asistentes so­
ciales y docentes, inscritos en el Registro Nacional de Mediadores
del Ministerio de Justicia, con amplia experiencia en temas de
Familia y Mediación. El objetivo de éstos es ofrecer una atención
profesional y eficiente, por integrar los conocimientos adquiridos
y el propio bagaje vivencial, pero también la atención pretende ser
cálida, cercana y comprensiva, pues la mediación en cualquiera
de sus áreas, sea como proceso para la restructuración familiar
cuando se asume la separación, el divorcio u otros desacuerdos,
o bien en ámbitos como el escolar, comunitario u otro requiere
del capital más importante de su equipo profesional, a saber, de los
valores y principios que guían su desempeño.
Así mismo, existe un problema de demora excesiva en los juzga­
dos de familia, lo que origina un periodo de incertidumbre prolon­
gado en la regulación de pensiones de alimentos, sin embargo, como
el sistema de mediación se encuentra actualmente vigente, permite
resolver en forma rápida, pacífica y confidencial, los problemas,
sin necesidad de concurrir al Juzgado de Familia. La Mediación
está autorizada por el Ministerio de Justicia, los acuerdos a que
se llegue entre las partes, obtendrán igual valor de sentencia judi­
46
Procuración e
Impartición...
cial, tan pronto sean aprobados y homologados por los jueces del
Juzgado de Familia, por medio del “acta de mediación”.
La mediación puede darse antes de interponer una acción
judicial o inclusive después de interponer una demanda y hasta
cinco días antes de la audiencia de juicio en el juzgado. Los conflic­
tos que se resuelven a través de la mediación son la custodia de
los hijos, relativos al cuidado personal, regulación de visitas a los
hijos, pensión compensatoria para el cónyuge que lo solicita, la
patria potestad, materias vinculadas al régimen de bienes del ma­
trimonio, fijación de pensiones de alimentos (también aumentos o
rebajas). La mediación es una opción eficiente para resolver las
regulaciones que se demandan ante el juzgado de familia, siempre
y cuando no exista de por medio violencia intrafamiliar.6
Ámbito Nacional
Constitución Política de
los Estados Unidos Mexicanos
Con motivo de la Reforma a la Constitución Política de los Estados­
Unidos Mexicanos de 18 de junio de 2008, el artículo 17 en su pá­
rrafo tercero establece: “Las leyes preverán mecanismos alternati­
vos de solución de controversias. En la materia penal regularán
su aplicación, asegurarán la reparación del daño y establecerán los
casos en los que se requerirá supervisión judicial”.
Código de Procedimientos Penales
para el Estado de Oaxaca
Artículo 26. Justicia Restaurativa
Se entenderá por justicia restaurativa todo proceso en el que la
víctima y el imputado o condenado participan conjuntamente de
6
Centro de Mediación serchimed, http://www.mediacionenchile.blogsopt.com.
[consulta 29 de Julio del 2010], [de la páginas 1 a la 3].
Intervención del
Ministerio...
47
forma activa en la resolución de cuestiones derivadas del delito
en busca de un resultado restaurativo, con o sin la participación
de un facilitador.
Se entiende por resultado restaurativo, el acuerdo encami­
nado a atender las necesidades y responsabilidades individuales
y colectivas de las partes y a lograr la reintegración de la víctima y
del infractor en la comunidad en busca de la reparación, la resti­
tución y el servicio a la comunidad.
Código de Procedimientos
Penales para el Estado
de Chihuahua
En el Título Séptimo, Capítulo I, regula los acuerdos reparatorios,
definiéndolos en el artículo 196, de la siguiente manera: “Se en­
tien­de por acuerdo reparatorio el pacto entre la víctima u ofendido
y el imputado que lleva como resultado la solución del conflicto a
través de cualquier mecanismo idóneo que tiene el efecto de con­
cluir el procedimiento”:
Establece en su artículo 197 que Procederán los acuerdos repa­
ratorios en los delitos imprudenciales en los que proceda el perdón
de la víctima u ofendido; los de contenido patrimonial que se hayan
cometido sin violencia sobre las personas; en los que admitan pre­
sumiblemente la sustitución de sanciones o condena condicional,
así como en aquellos cuya pena media aritmética no exceda de cinco
años de prisión y ca­rezcan de trascendencia social.
Se exceptúan de esta disposición los homicidios imprudencia­
les en los supuestos a los que se refiere el artículo 139 del Código
Penal, los delitos en contra de la libertad y seguridad sexuales y el
normal desarrollo psicosexual, violencia familiar, y los delitos come­
tidos por servidores públicos en el ejercicio de sus funciones o
con motivo de ellas y los realizados por sujetos que pertenezcan
48
Procuración e
Impartición...
a alguna asociación delictuosa u organización criminal, de con­
formidad con el Código Penal. Tampoco procederán los acuerdos
reparatorios en los casos en que el imputado haya celebrado ante­
riormente otros a­cuerdos por hechos de la misma naturaleza.
Si el delito afecta intereses difusos o colectivos, el Ministerio
Público asumirá la representación para efectos de la conciliación,
cuando no se haya apersonado como víctima, alguno de los suje­
tos autorizados en este Código.
En los artículos 198 a 200, se regula la oportunidad, el trámite
y los efectos de la siguiente manera:
•Artículo 198. Oportunidad.
Los acuerdos reparatorios procederán hasta antes de decretarse el
auto de apertura de juicio oral. El Juez, a petición de las partes,
podrá suspender el proceso penal hasta por treinta días para que
las partes negocien, medien o concilien. En caso de interrumpirse
la negociación, mediación o conciliación, cualquiera de las partes
puede solicitar la continuación del proceso.
•Artículo 199. Trámite.
Desde su primera intervención, el Ministerio Público o, en su caso,
el Juez de Garantía, invitará a los interesados a que lleguen a
acuerdos reparatorios en los casos en que proceda, y les explicará los
efectos y los mecanismos de mediación o conciliación disponibles.
La información que se genere en los procedimientos respectivos no
podrá ser utilizada en perjuicio de las partes dentro del proceso penal.
El juzgador no aprobará los acuerdos reparatorios cuando tenga
fundados motivos para estimar que alguno de los intervinientes
no está en condiciones de igualdad para negociar o ha actuado
bajo coacción o amenaza.
•Artículo 200. Efectos.
El Juez aprobará los acuerdos, los cuales se registrarán de un
modo fidedigno.El plazo fijado para el cumplimiento de las obliga­
ciones pactadas suspenderá el trámite del proceso y la prescripción
de la acción penal.
Intervención del
Ministerio...
49
Si el imputado incumple sin justa causa las obligaciones pactadas­
dentro del término que fijen las partes o, en caso de no establecer­
lo, dentro de un año contado a partir del día siguiente de la ratifica­ción
del acuerdo, el proceso continuará como si no se hubiera arri­bado
a acuerdo alguno.
El cumplimiento de lo acordado impedirá el ejercicio de la acción
penal o, en su caso, extinguirá la ya iniciada.
Código de Procedimientos
Penales para el
Estado de México
El artículo 11 establece que: “Son mecanismos alternativos de so­
lución de controversias la mediación, la conciliación, el arbitraje y
cualesquiera otros que establezca este código”.
En su artículo 116 señala que: “Se entiende por acuerdo re­
paratorio el pacto entre la víctima u ofendido y el imputado que
lleva como resultado la solución del conflicto a través de cualquier
meca­nis­mo idóneo que tiene el efecto de concluir el procedimiento”.­
En los artículos 117 a 120, regula la procedencia, la etapa pro­
cesal, el trámite y los efectos, de la siguiente manera:
•Procedencia
Artículo 117. Procederán los acuerdos reparatorios en los delitos
culpo­sos; aquellos en los que proceda el perdón de la víctima u ofen­
dido; los de contenido patrimonial que se hayan cometido sin vio­
lencia sobre las personas; y en aquellos que tengan señalada una
pena cuyo término medio aritmético no exceda de cinco años de
prisión.
Se exceptúan de esta disposición los homicidios culposos produ­
cidos en accidentes de tránsito bajo el influjo de sustancias que
alteren la capacidad de conducir vehículos o con motivo de la
conducción de vehículo de motor de transporte público, cuando
se ocasionen le­siones que pongan en peligro la vida a más de
50
Procuración e
Impartición...
tres personas o se cause la muerte de dos o más personas.
Si el delito afecta intereses difusos o colectivos, el ministerio públi­
co asumirá la representación para efectos del acuerdo reparatorio,
cuando no se haya apersonado como víctima alguno de los sujetos
autorizados en este código.
•Etapa Procesal
Artículo 118. Los acuerdos reparatorios procederán hasta antes de
decretarse el auto de apertura de juicio oral. El juez de control, a pe­
tición de las partes, podrá suspender el procedimiento penal hasta
por treinta días para que las partes lleguen a un acuerdo reparatorio.
En caso de interrumpirse el trámite alternativo de solu­ción, cualquie­
ra de las partes puede solicitar la continuación del procedimiento.
•Trámite
Artículo 119. Desde su primera intervención, el ministerio público o,
en su caso, el juez de control, invitará a los interesados a que lleguen
a acuer­dos reparatorios en los casos en que proceda, y les explicará
los efectos y alcances de éstos.
La información que se genere en los trámites alternativos de solución
no podrá ser utilizada en perjuicio de las partes dentro del proceso
penal.
El juzgador no debe aprobar los acuerdos reparatorios cuando tengan
motivos fundados para estimar que no contienen los elementos
de existencia o validez; que alguno de los intervinientes no está en
condiciones de igualdad o que existe simulación en la forma para
hacer efectiva la reparación del daño o que ha actuado bajo coacción
o amenaza.
•Efectos
Artículo 120. El juez vigilará que se registre de un modo fidedigno el
acuerdo reparatorio.
El plazo fijado para el cumplimiento de las obligaciones pactadas
suspenderá el trámite del proceso y la prescripción de la acción penal.
Si el imputado incumple sin justa causa las obligaciones pactadas
dentro del término que fijen las partes o, en caso de no establecer­
Intervención del
Ministerio...
51
lo, dentro de un año contado a partir del día siguiente del registro
del acuerdo, el proceso continuará como si no se hubiera celebrado
acuerdo alguno.
El cumplimiento de lo acordado extinguirá la acción penal.
Código de Procedimientos
Penales para el
Estado de Sonora
El Código de Procedimientos Penales para el Estado de Sonora,
en el artículo 2o., establece que en la averiguación previa corres­
ponde al Ministerio Público:
…
X. En caso procedente, promover la conciliación o la media­
ción entre las partes; y
En su artículo 126 Bis, establece Sin perjuicio de lo pre­
visto en el presente capítulo, el Ministerio Público procurará en
todo momento la conciliación entre las partes en delitos de que­
rella,­culposos y en aquellos cuya sanción máxima no exceda de
tres años de prisión o tengan señalados una pena alternativa.
Al efecto, el Ministerio Público deberá poner a consideración del
ofen­dido o víctima, la posibi­lidad de llevar a cabo su conciliación
con el imputado y si aquél aceptara, se dictarán las providencias
necesa­rias para propiciar un acuerdo conciliatorio, procediendo
en su oportunidad, a levan­tar acta donde se harán constar los
resulta­dos de la diligencia, dando fe y autorizando la misma el
Agente del Ministerio Público.
Los convenios celebrados en términos del párrafo anterior, ten­
drán­el carácter de títulos ejecutivos en términos del Código de
Procedi­mientos Civiles para el Estado de Sonora.
Además de la conciliación, en los casos de los delitos a que
se refiere este precepto, el Ministerio Público orientará al ofendi­
do y al inculpado para que si lo estiman procedente, acudan a un
52
Procuración e
Impartición...
centro de media­ción, para dirimir el conflicto en lo que resulte
legalmente procedente.
La Mediación en el
Distrito Federal
La reforma Constitucional considera las figuras de “Justicia Alter­
nativa”, entendida ésta como un conjunto de métodos distintos a los
jurisdiccionales contenciosos tradicionales, para la solución de con­
troversias entre particulares, así como de “Mecanismos Alternati­vos
de Solución de Controversias”, los cuales se comprenden, como la
instancia alternativa al proceso judicial, que se encuentran dispo­
nibles para la solución de conflictos, en donde, más que imponer
una determinación de una autoridad, permite a las partes crear su
propia solución.
Tocante a ello, se pretende que éstos, para resolver ciertos tipos
de conflictos legales, no entablen un litigio formal en un juzgado
tradicional, sino que acudan a una institución especializada en la
cual se diriman aquellos. Dentro de los Mecanismos Alternativos
de Solución de Controversias encontramos a:
•La negociación
•La mediación
•La conciliación
•El arbitraje
Éstas, en sus diversas variantes, constituyen verdaderos medios­
alternativos de solución de conflictos.
Sin embargo, no se trata de instrumentos propiamente no­ve­
dosos, sino que éstos se han revalorado y transformado de ma­nera
paulatina para asumir una función más dinámica y de vigorosa
orientación social, lo que tiende a su organización institucionaliza­
Intervención del
Ministerio...
53
da. En realidad, a través de ellos no se persigue suplantar al pro­ce­so
jurisdiccional sino, en todo caso, brindar instancias diferen­
ciadas, alternativas para dirimir los diferendos. La solución del con­
flicto puede provenir no sólo del juez, sino también,­y a menudo,
de­las propias partes, bajo la dirección de un tercero imparcial que
no nece­sariamente es letrado.
En este trabajo, nos abocaremos al estudio de la figura de la
Mediación, la cual surge en respuesta a los conflictos que nacen
entre la convivencia social, misma que se ha tornado compleja,
debido al crecimiento de la población, la desigualdad económica, el
avance tecnológico y la globalización, factores que han incrementa­
do y creado nuevos conflictos en la sociedad mexicana, provocando
la insuficiencia de los servicios tradicionales de la Administración
de Justicia.
Luego, entonces, resulta importante establecer un concepto de
Mediación, entendido éste como un procedimiento voluntario,
confidencial y flexible, con la finalidad de facilitar a que dos o más
personas o instituciones, encuentren la solución a un conflicto en
forma no adversarial, regido por principios de equidad y honesti­dad,­
en el que interviene un tercero imparcial y neutral llamado me­
diador; es decir, se puede considerar como el método voluntario
por el cual dos o más personas involucradas en una controversia, a
las cuales se les denomina mediados, buscan y construyen una
solución satisfactoria a la misma, con la asistencia de un tercero
imparcial denominado mediador.7
Por lo tanto el papel del Mediador es muy importante, toda vez
que no toma decisiones por los mediados, sino que les ayuda a faci­
litar su comunicación a través de un procedimiento metodológico,
tomando en cuenta sus emociones y sentimientos, centrándose
Diario de Debates, Asamblea Legislativa del Distrito Federal, México Distrito
Federal, Diciembre de 2007, página 153.
7
54
Procuración e
Impartición...
en las necesidades e intereses de los mediados, para que pongan
fin a su controversia en forma pacífica, satisfactoria y duradera.8
Dicha figura surge como un método que busca la solución vo­
luntaria de conflictos entre las partes, y con ello evitar la interven­
ción de las autoridades, ya sea en Procuración o Impartición de
Justicia.
En tanto que los Mediados, son personas físicas o morales que
después de haber establecido una relación de variada naturaleza
jurídica se someten a la mediación en busca de una solución pa­
cífica a su controversia.
Los antecedentes de la figura de la Mediación en el Distrito Fede­
ral, los encontramos en el Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal y el Consejo de la Judicatura del Distrito Federal, desde el
año 2001, que han programado y realizado diversas accio­nes
culminadas en la creación del Centro de Justicia Alternativa del
Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (cja) en 2003.
Es decir, surge como una inquietud que busca mecanismos
para resolver conflictos, en los que no se considera necesaria la
intervención de autoridades judiciales, esta intervención se mate­
rializa en el derecho de las personas a ser parte de un proceso y a
promover la actividad jurisdiccional hasta obtener una decisión
judicial; sin embargo, esa concepción ha venido experimentando
una seria preocupación por la excesiva litigiosidad y por su relati­
vidad como acceso para todos.
Por lo tanto, el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal,­
con la creación del Centro de Justicia Alternativa, inició sus
actividades con la Inserción de los Métodos Alternos de Solución
de Controversias, en donde en una primera etapa, únicamente en
incorporó la materia Familiar a partir del 01 de septiembre de 2003.
8
Biblioteca digital: bibliografía internacional anotada, http://www.abanet.org/rol/
publications/mexico_principios_mediacion_sp.pdf, [consulta 28 de Julio del 2010].
Intervención del
Ministerio...
55
Proyecto de que desde su inicio, provocó en la población, una
respuesta de aceptación, toda vez que ya existían cientos de
testimonios personales de individuos agradecidos al Centro por
haber facilitado soluciones negociadas a sus conflictos y por el
cambio que operó en sus personas y relaciones personales.
Para la implementación de este proyecto, se hizo necesaria la re­
forma a la Ley Orgánica del Tribunal, entre las que se destaca­la mo­
dificación al artículo 200, que faculta al Consejo de la Judi­catura a
“…expedir acuerdos generales... para el desarrollo de programas de
soluciones alternativas de controversias…”. Promulgadas el 1o.
de abril de 2003. Por lo que dicho proyecto se centró en alcanzar
cinco objetivos antes de la fecha fijada para iniciar el servicio de
Mediación Familiar, siendo éstos:
1.Establecer la normatividad que regiría su funcionamiento;
2.Contar con los mediadores que proporcionarían el servicio;
3.Determinar el presupuesto y la estructura organizacional necesaria;
4.Formalizar los acuerdos con aquellas instancias que fungirían ini­
cialmente como proveedoras de los casos materia de mediación, y
5.Acondicionar el espacio físico en el que se instalaría nuestro
servicio.10
Una de las tareas principales y de mayor importancia fue
seleccionar al personal debidamente calificado, requerido para
ofrecer el servicio de Mediación en materia Familiar, por lo que se
inició con la determinación de los indicadores de certificación por
competencias laborales del Mediador Familiar que permitieron
seleccionar a las personas más aptas para ello; después, se llevó
10
Biblioteca digital: bibliografía anotada, http://www.poderjudicialdf.gob.mx/
en/PJDF/Centro_de_Justicia_Alternativa_Organos, [Distrito Federal], [con­
sulta el 28 de Julio del 2010].
56
Procuración e
Impartición...
a cabo el Concurso de Selección correspondiente, considerando
un procedimiento de evaluación de las competencias laborales
en materia de mediación, en derecho de familia y en el ámbito
psicológico (estructura de personalidad), de la misma manera que
se impartió el curso pertinente de capacitación y entrenamiento,
que también incluyó una evaluación selectiva y la consiguiente
designación de los nuevos mediadores familiares, para su poste­
rior nombramiento.
Así mismo, el Centro de Justicia Alternativa comenzó sus acti­
vidades de forma experimental y posteriormente la apertura al pú­
blico del servicio de mediación en materia Familiar, incorporando al
servicio a cinco mediadores, así como con el personal especia­lizado,
técnico y administrativo indispensable, ubicándolo en un espacio
adecuado, el cual se encuentra actualmente en el 4o. piso del edi­
ficio de Río Lerma 62, en la Colonia Cuauhtémoc, Delegación del
mismo nombre, de la Ciudad de México.
Este Centro, contaba con la instalación de cinco salas de media­
ción, una sala de convenios, una sala de mediadores, dos áreas
de información especializada, recepción y una sala de juntas, pro­
curándose en todas ellas el ambiente adecuado y agradable. Re­
quisito necesario para propiciar un ambiente de cordialidad y de
voluntad entre las partes para resolver sus conflictos.11
Dentro de los factores que motivaron la creación del Centro de
Justicia Alternativa, encontramos a la sobrecarga de trabajo de los
órganos jurisdiccionales, el abuso de los recursos que la ley otorga
para los procesos judiciales, la dilación de los juicios, el alto costo
que implica el litigio, el desconocimiento del derecho y de los pro­
cedimientos jurisdiccionales, así como la insatisfacción social
frente a la resolución judicial, la ineficacia de la vía conciliatoria,­
la falta de profesionalismo en el patrocinio de los negocios jurídi­
11
Idem
Intervención del
Ministerio...
57
cos, la carencia de una actitud institucional democrática que
permita la participación de la ciudadanía en la resolución de sus
conflictos, entre otros, son factores que condujeron al Consejo de
la Judicatura del Distrito Federal a incorporar en el proceso de
reforma judicial, medidas transformadoras para superar la pro­
blemática descrita.
La inclusión de los métodos alternos de solución de controver­
sias como vías de acceso a la justicia, a través de la institucionali­
zación y desarrollo de métodos autocompositivos capaces de
alternar y coexistir con la vía jurisdiccional, está constituyendo
un pilar importante en la construcción de un sistema de justicia
más humano, satisfactorio, económico, ágil, expedito y rápido.
La creación del Centro para administrar y desarrollar los méto­
dos alternos de solución de conflictos en el Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal, se anticipó, a lo que estableció la
reforma del Artículo 17 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, del 18 de junio de 2008, el cual establece
que las leyes preverán mecanismos alternativos de solución de
contro­versias, dando así la posibilidad de que las personas por
iniciativa propia puedan resolver sus conflictos sin la interven­
ción de autoridades, como un mecanismo complementario al
servicio de la justicia ordinaria.
Así como con la publicación de la Ley de de Justicia Alterna­
tiva del Distrito Federal, en la Gaceta Oficial del Distrito Federal
el 8 de enero de 2008, se dio mayor intervención a la aplicación
del Mecanismo Alternativo de Solución de Controversias deno­
minado Mediación, el cual tiene como objetivo fomentar una
convivencia social armónica, a través del diálogo y la tolerancia,
mediante procedimientos basados en la prontitud, la economía
y la satisfacción de las partes.12
Gaceta Oficial del Distrito Federal. Ley de Justicia Alternativa del Tribunal
Superior de Justicia del Distrito Federal, enero de 2008, Página 2.
12
58
Procuración e
Impartición...
Por lo tanto, se puede considerar a esta figura como una vía
pacífica de solución de conflictos que, en términos humanos, de­
tiempo, recursos y costos, ha mostrado ser más eficiente que
cualquier otro, porque además de privilegiar la libre decisión de las
partes, la cooperación y el compromiso mutuo, facilita la pacífica
continuidad de las relaciones reduciendo así la posibilidad de fu­
turos litigios, independientemente de que, en la medida que se
difunda, al ponderarse la responsabilidad de los involucrados
en el arreglo de su conflicto ante la sociedad, ésta se proyecta
como un medio capaz de generar una cultura pacificadora que
recupera la posibilidad de una armónica convivencia entre los
individuos, razones por las cuales el Consejo de la Judicatura del
Distrito Federal resolvió incorporarla a las nuevas disposicio­nes
legales, como lo refiere el Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal, en su página de Internet, referente al Centro de Justicia
Alternativa.
Este modelo de justicia, que sirvió de motivación para la crea­
ción de la referida Ley de Justicia Alternativa del Tribunal Superior
de Justicia del Distrito Federal, en donde a lo largo de su contenido,
regula a la figura de la Mediación; su objetivo; los­supues­tos en los­
que procederá (Materias Civil, Mercantil, Familiar, Penal y en
Justicia para Adolescentes); su propósito respecto a la ­jurisdicción
ordinaria, sus principios, los aspectos específicos de los Mediado­
res como prestadores del servicio, como son los requisitos, sus
obligaciones, recusaciones, la figura de los orientadores especiali­
zados, los requisitos que deberán cumplir, así como el alcance
del incumplimiento de las obligaciones tanto de los mediadores,
como de los orientadores especializados, dando lugar al inicio de un
pro­ceso disciplinario, y en su caso sancionarlo por la Comisión
de Disciplina Judicial del Consejo, o bien, estimularlos por tener
un comportamiento meritorio y destacado; los impedimentos de
éstos para actuar como testigos en procedimiento legal relacionado
Intervención del
Ministerio...
59
con los asuntos en los que participe, en términos del principio
de confidencialidad; de los derechos y deberes de los mediados; del
pro­cedimiento de la Mediación; de los efectos de los acuerdos a los
que lleguen los mediados y sus formalidades; así como de la figura
de la Re-mediación ante el supuesto de incumplimiento parcial o
total de un convenio celebrado por los mediados.
La expedición de esta ley, también se fundamentó en base a
la actividad que ya desempeñaba el Centro de Justicia Alternati­va­­
desde el 2003, del cual se pudo advertir que no era posible dar cum­
plimento a los convenios que en él se celebran, ya que no hay­fuerza
coercitiva que obligara a las partes. Es por ello, que también se
requiere propuso la modificación al artículo 500 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, a efecto de dotar
a los referidos convenios de imperio y coercitividad, para que
así pudieran ser ejecutados en vía de apremio a través de una
orden del juez, sin tener que pasar por todo un procedimiento
jurisdiccional.13
Por lo tanto, la Mediación a partir de enero de 2008, se encuen­
tra debidamente regulada en el Distrito Federal, lo que ha ocasio­
nado que se considere como un mecanismo de solución efectivo,
siendo que dentro de sus beneficios, es la rapidez a la solución de
controversias de las personas que tienen algún conflicto, dado
que ello se vislumbra en una disminución en los costos, no sólo
para las partes involucradas sino para el Sistema de Justicia, ya
que representa una posibilidad muy cercana de descongestionar
a los tribunales, es decir, se evita acudir ante cualquier instancia
ju­dicial, optando por la utilización de métodos no contenciosos.
Actualmente, el servicio de mediación que proporciona el
Centro de Justicia Alternativa del Tribunal Superior de Justicia
Diario de Debates, Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Diciembre de
2007, México Distrito Federal, Página 156.
13
60
Procuración e
Impartición...
del Distrito Federal, es público y gratuito, sustentado en el respeto
a la autodeterminación de las personas y que reivindica su digni­
dad, toda vez que se trata de un procedimiento voluntario por
el cual los particulares, con la ayuda de un mediador experto
en técnicas de comunicación y negociación, que proporcionan a
los mediados un ambiente óptimo que influye en la posibilidad
de resolver sus conflictos, ya sea en sus relaciones familiares,
civiles, comerciales, penales y de justicia para adolescentes.14
La función de los mediadores, se encuentra bajo la supervi­sión
del Centro de Justicia Alternativa, los cuales al ser una parte indis­
pensable en el proceso de solución de conflictos, están sujetos
a talleres de retroalimentación, que se desarrollan en sesiones
plenarias semanales en las que exponen sus experiencias, anali­
zan aspectos específicos de los casos que atienden, los evalúan
e intercambian opiniones e ideas, que los conducen al estudio
de los temas relacionados con la problemática afrontada y al
enriquecimiento de su formación académica como mediadores y
servidores públicos responsables, conscientes de la importancia
de su intervención.
Durante el tiempo en que el Centro de Justicia Alternativa ha
desarrollado sus funciones, ha buscado la difusión permanente
del programa a través de pláticas y conferencias pronunciadas
por sus miembros ante diversos foros temáticos, asociaciones pro­
fesionales, colegios de abogados, dependencias de gobierno, entre
otras instituciones públicas y privadas, así como de divulgación
controlada a través de medios impresos que se colocan y distri­buyen
en diversos espacios del Distrito Federal. Por lo que, se ha logrado
que el tema de mediación forme parte del Plan de Estudios de
Instituciones de Educación Superior.
14
Biblioteca digital: bibliografía anotada, http://www.poderjudicialdf.gob.mx/
en/PJDF/Centro_de_Justicia_Alternativa_Organos, [Distrito Federal], [Consulta
28 de Julio del 2010].
Intervención del
Ministerio...
61
Un aspecto importante de la Mediación son los principios
que los rigen, siendo éstos:
1.Voluntariedad: La participación de los particulares en la media­
ción deberá ser por propia decisión, libre y auténtica.
Desde este principio el procedimiento de mediación es auto
compo­sitiva, es decir, responde a la determinación de los media­
dos para acudir, permanecer o retirarse del procedimiento de la
mediación, sin presiones, libremente, decidir sobre la información
que revelan; así como resolver llegar a un acuerdo.
Los mediados tendrán siempre la libertad de seguir participando
en la mediación, incluso en el contexto de programas obligatorios.
Esto implica que el mediador debe reconocer que son los media­
dos quienes tienen la potestad de tomar las decisiones en la me­
diación en los casos que les permite la ley.
2.Confidencialidad: La información generada por las partes duran­te
la mediación no podrá ser divulgada.
Al inicio de la mediación, el mediador informa a los mediados
sobre la importancia y alcances de la confidencialidad y solicita
su com­promiso respectivo.
Las sesiones de mediación se celebrarán en privado con la
restric­ción para los mediados de no poder llamar como testigo
al media­dor en un proceso o juicio arbitral relacionado con el
objeto de la mediación.
La confidencialidad involucra al mediador y a los mediados, así
como a toda persona vinculada a dicha mediación.
3.Flexibilidad: La mediación carecerá de toda forma rígida, ya que
la flexibilidad es parte de la voluntad de los mediados.
Desde este principio, el procedimiento de mediación evitará
suje­tarse al cumplimiento de formas y solemnidades rígidas.
Aunque la mediación posee una estructura a la que se le atribu­
yen distintas etapas y reglas mínimas, esto no debe de interpre­
tarse como un procedimiento estructurado sino flexible; toda
vez que, durante el procedimiento, el mediador y los mediados
62
Procuración e
Impartición...
pueden obviar pasos y convenir la forma en que se desarrollará
más efectiva y eficazmente la comunicación entre los mediados.
Debe existir amplia libertad para aplicar el procedimiento, a efecto
de alcanzar acuerdos eficientes y satisfactorios.
4.Neutralidad: Los mediadores que conduzcan la mediación de­
berán mantener a ésta exenta de juicios, opiniones y prejuicios
propios respecto de los mediados, que puedan influir en la toma
de decisiones.
Desde este principio, el mediador sustrae sus puntos de vista rela­
cionados con el conflicto, a fin de evitar inducir las conclusiones
a que deban llegar los mediados.
Así ayuda a los mediados a arribar a sus propios acuerdos, abstenién­
dose de emitir juicios, opiniones o soluciones sobre los asuntos tra­
tados y respetando las decisiones que adopten éstos.
5.Imparcialidad: Los mediadores que conduzcan la mediación debe­rán
mantener a ésta libre de favoritismos, inclinaciones o preferencias
personales, que impliquen la concesión de ventajas a alguno de
los mediados.
Desde este principio, no podrá haber inclinación por parte del me­
diador a favor de alguno de los mediados.
Por lo tanto, el mediador debe contener sus impulsos naturales
de simpatía, agrado o concordancia con determinadas ideas, situa­
ciones o personas que se encuentren involucradas en un proce­
dimiento de mediación.
Así, los mediados reciben el mismo trato y pueden percibir que
el mediador es una persona libre de favoritismos de palabra o
acción, que ha asumido el compromiso de apoyar los por igual,
sin propiciar ventajas para uno u otro.
6.Equidad: Los mediadores propiciarán condiciones de equilibrio entre
los mediados, para obtener acuerdos recíprocamente satisfactorios.
Desde este principio, el mediador deberá siempre indagar si los
mediados entienden claramente los contenidos y alcances de ese
acuerdo.
Cuando el mediador detecte desequilibrio de poderes entre los me­
diados, procurará, sobre la base de sus intervenciones, balancear
Intervención del
Ministerio...
63
balancear el procedi­miento, buscando un procedimiento equili­
brado.
7.Legalidad: La mediación tendrá como límites la voluntad de las
partes, la ley, la moral y las buenas costumbres.
Cuando el mediador dude sobre la legalidad o viabilidad de un
acuerdo, o sepa, o razonablemente sospeche, que éste está basado
en información falsa o de mala fe, deberá recomendar a los media­
dos que consigan consejo de otros, preferiblemente expertos en
el campo relacionado con el contenido del acuerdo, antes de fina­
lizarlo, teniendo cuidado de no perjudicar el procedimiento de
mediación y/o a alguno de los mediados por esta intervención.
8.Economía: El procedimiento deberá implicar el mínimo de gastos,
tiempo y desgaste personal.
Desde un principio se busca que la aplicación de la mediación por
voluntad de las partes sea eficiente para que las partes acudan de
manera voluntaria lo que les reduciría gastos en la tramitación
del procedimiento de solución de controversia, y se refleje ante las
instancias de procuración y administración de justicia.
La Implementación de la
Mediación en la Procuraduría
General de Justicia del
Distrito Federal
Actualmente, con los antecedentes de la Mediación que desarro­
lla y realiza el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Fede­ral
a través del Centro de Justicia Alternativa, el Ministerio Público
tiene como obligación hacer saber a los denunciantes, querellan­
tes, víctimas, ofendidos y probables responsables de los servicios­
que presta el Centro de Justicia Alternativa del Tribunal Supe­rior
de Justicia para el Distrito Federal, para la solución de sus con­
troversias, tal y como lo establece el artículo 9 Bis del Código de
Procedimientos Penales para el Distrito Federal en su fracción XVI.
64
Procuración e
Impartición...
Por otro lado, existe el Acuerdo A/004/04 emitido por el Pro­
curador General de Justicia del Distrito Federal, por el que se
establecen lineamientos para el inicio de actas especiales en las
agencias del Ministerio Público, así como para promover la conci­
liación entre las partes tratándose de averiguaciones previas de
querella, publicado el 4 de mayo del 2004, en la Gaceta Oficial
del Distrito Federal, en cuyo artículo 5o. establece lo siguiente:
Quinto. Para los efectos del último párrafo del artículo anterior,
cuando se trate de hechos que siendo presuntamente delictivo, sólo
sean perseguibles por querella o a petición de parte ofendida, en
todos los casos, el agente del Ministerio Público, una vez iniciada la
averiguación previa promoverá la conciliación entre el inculpado y
el ofendido, debiendo proceder en los términos siguientes:
I.Los Agentes del Ministerio Público de las Unidades de Investiga­
ción con detenido, harán saber al ofendido y al inculpado cuan­
do se encuentren presentes la facultad que la ley le concede al
ofendido para otorgar el perdón;
II.Los Agentes del Ministerio Público de las Unidades de Investi­
gación sin detenido, en su primera diligencia, procederán a citar
a las partes involucradas, para que comparezcan el día y hora
que para tales efectos señale, de conformidad con el formato de
citatorio que forma parte del presente como anexo único;
III.La fecha en que deberán comparecer los destinatarios de los citato­
rios, no podrá exceder del término de tres días hábiles, contados a
partir de la fecha en que se haya asentado la constancia respec­
tiva en la averiguación previa, sin menoscabo de que durante ese
lapso, de considerarse necesario, se ordene la práctica de diligen­
cias, para evitar la pérdida, destrucción o deterioro de las huellas,
vestigios u objetos relacionados con el hecho de que se trate;
IV.Lograda la comparecencia de las partes, se les hará de su cono­
cimi­ento el motivo y alcance de la conciliación, aclarando cualquier
duda que éstas formulen y que este orientada a favorecer la
Intervención del
Ministerio...
65
conciliación; de la conveniencia y trascendencia del acto que
realizan, puntualizando que en el caso de llegar a un acuerdo o en­
tendimiento, en el que el representante social siempre procu­rará
se cubra la reparación del daño causado, el ofendido o quere­
llante, deberá otorgar el perdón a los inculpados y que éste es
una forma de extinción de la acción penal, lo que impedirá que
en el futuro pueda volver a querellarse por los mismos hechos,
debiendo asentar debida constancia en la averiguación previa
respectiva.
V.La diligencia de conciliación a que se hace referencia con antelación,
podrá diferirse por una sola vez, a solicitud expresa del ofendido o
querellante y deberá continuarse dentro de los cinco días hábiles
siguientes, lo que se hará constar en la averiguación previa.
VI.Si el querellante ratificaré su querella y efectuada ésta, las partes­
no llegan a conciliarse, el agente del Ministerio Público­pro­cederá­
a asentar debida constancia en la indagatoria­correspondiente,­
debiendo continuar con la práctica de­diligencias para la debida­
integración de la misma.
Los agentes del Ministerio Público tienen la obligación de
recibir y atender al ofendido en cualquier momento en que éste
manifieste su voluntad de otorgar el perdón, sin que sea obstáculo
para ello el que se haya elaborado el pliego de consignación o se
haya concedido la libertad provisional del inculpado.
En este contexto, con la reforma Constitucional se establece
en su artículo 17, la figura de los “Mecanismos Alternativos de
Solución de Controversias”, adoptada por la Procuraduría Gene­ral
de Justicia del Distrito Federal en su Reglamento de la Ley Orgá­
nica, publicado el 11 de febrero de 2010, en la Gaceta Oficial del
Distri­to Federal, creando en su artículo 76, la Unidad de Media­
ción en la Procuración de Justicia, con las atribuciones siguientes:
I.Desarrollar los métodos alternativos de solución de controversias
a través de la mediación;
66
Procuración e
Impartición...
II.Promover la mediación en el ámbito de Procuración de Justicia
entre los denunciantes, querellantes, víctimas, ofendidos e
imputados, que atiende el Ministerio Público;
III.Conocer las controversias entre particulares, originadas por la
comisión de delitos que se investiguen por querella y por cuanto
hace a la reparación del daño;
IV.Atender las solicitudes de mediación que formulen los ofendidos,
víctimas, querellantes e imputados, en los términos de la fracción
anterior, elaborando al efecto el acta inicial y, en su caso, el con­­
venio de mediación respectivo;
V.Proponer las alternativas de solución a los conflictos que le son
planteados;
VI.Mantener la confidencialidad del diálogo que se establezca duran­
te el procedimiento, con apego a la Ley de Transparencia y Acceso
a la Información Pública para el Distrito Federal;
VII.Intervenir conjuntamente con el Instituto de Formación Profe­
sional en el diseño del plan curricular de asignaturas del Progra­ma
de Capacitación de Formación de Mediadores;
VIII.Propiciar la capacitación entre el personal de las unidades admi­
nistrativas de la Institución que lo requieran, dentro del Programa
de Capacitación de Formación de Mediadores;
IX.Promover y difundir conjuntamente con el Instituto de Forma­ción
Profesional conferencias, coloquios, talleres, cursos, semi­narios,
simposios o similares, en materia de mediación;
X.Seleccionar al personal que se adscriba a la Unidad, con base en
la determinación del perfil del puesto;
XI.Promover la difusión y divulgación de la mediación, en el ámbi­
to de la Procuración de justicia, como una cultura formadora
entre la población de la Ciudad de México y hacia las entidades
federativas; y,
XII.Las demás que determine la normatividad aplicable.
De lo anterior, se advierte que si bien es cierto que faltan accio­
nes por realizar para la operación de medidas alternas como lo
Intervención del
Ministerio...
67
es la Mediación, también lo es que con la publicación de la Ley
de Justicia Alternativa del Tribunal Superior de Justicia del
Distrito Federal, el Reglamento de la Ley Orgánica de la Procura­
duría General de Justicia del Distrito Federal, el Gobierno de la
ciudad adecua la legislación secundaria a la constitución derivado
de la reforma del 18 de junio de 2008. Sin pasar por alto que en
esto ayuda la existencia del acuerdo A/004/2004, emitido por la
Procuraduría.
Conclusiones
La Ciudad de México es un lugar en donde se vive bajo la cultura
del conflicto, donde la forma de pensar de nuestra sociedad es el de
recurrir a las instancias de la justicia penal antes que hacerlo
a los mecanismos de solución extrajurídicos, sin analizar si el
conflicto del intereses presenta una relevancia jurídico penal.
En la Ciudad se privilegia la persecución del delito antes de
defender los derechos de la víctima. En una equivocada aprecia­
ción de lo que el sistema penal debe brindar a los justiciables, se
cree que con la sanción se cumple toda la finalidad del siste­ma,
olvidándo­se de la pretensión reparatoria que la víctima anhela y
postula, por tal motivo es benéfica la entrada en vigor y aplicabili­
dad de la figura jurídica denominada mediación, sin embargo,
para que ésta siga funcionando y en su momento sea eficaz y
contunden­te en los fines que se persiguen, es necesario que el
Gobierno de la Ciudad de México ponga en marcha las acciones
siguientes:
•Llevar a cabo las reformas necesarias a la legislación local para
instaurar un sistema efectivo de justicia alternativa, ajustán­dolas a
las realizadas a la Constitución.
•Fortalecer los procesos del Centro de Justicia Alternativa, fomen­
tando la mediación con el propósito de disminuir las cargas de trabajo
en los tribunales y hacer más ágil el pago de la repara­ción del daño.
68
Procuración e
Impartición...
•Diseñar e implementar un programa de capacitación permanente
en materia de mediación para los servidores públicos encargados
de la aplicación de los mecanismos alternativos de solución de con­
troversias.
•Impulsar la implementación del tema de mediación para que forme
parte de los planes de estudio en todas las instituciones de educa­
ción superior, así como implementa la publicidad y difu­sión de los
mecanismos alternativos de solución de conflicto.
•Seleccionar adecuadamente a los mediadores que intervendrán
en la aplicación de los mecanismos alternativos de solución de con­
troversias, con base en un perfil que garantice la capacidad para
llevar a cabo exitosamente la mediación.
El Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal
a 153 años de su creación
Mgdo. Edgar Elías Azar
Presidente del Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal
Introducción
El Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal es una institu­
ción fundada en los principios liberales predominantes durante la
segunda mitad del Siglo XIX. Los principios de libertad e igualdad
se hicieron patentes. Así, durante la Presidencia del General
Juan Álvarez, el Ministro de Justicia de la República, Licenciado
Benito Juárez, elaboró la Ley de los Tribunales de Justicia del
Fuero Común del Distrito Federal, llamada “Ley Juárez”, mediante
la cual se estableció y estructuró lo que hoy conocemos el Tribunal
Superior de Justicia del Distrito Federal. Durante este periodo,
el Tribunal Superior de Justicia en el Distrito y Territorios de la
Federación estaba constituido por diez juzgados –cinco civiles
y cinco penales–; tres salas, dos unitarias de segunda instancia y
una compuesta por tres Magistrados para conocer de tercera
instancia. Durante este periodo, fue esta institución de inspiración
liberal la que se encargó de la ardua labor de administrar justicia
en la capital de la República.
71
Hoy, tras 153 años de su creación, el Tribunal Superior de
Justicia de la Capital, dista mucho de aquella estructura que, si
bien era ajustada para las dimensiones del Distrito Federal en
su momento, hoy sería absolutamente insuficiente. La realidad
es que la difícil y ardua labor de administrar justicia requiere
de estructuras cuya complejidad y conformación atiendan a las
características propias de la sociedad a la que sirven y en las que
desarrollan su función, ya que no considerar el factor social en su
planeación, estructuración y conformación sería como descono­
cer su propia naturaleza, pues la función judicial –lejos de todo
aquello que pudiera suponerse se encuentra circunscrita dentro
de las acciones prioritarias de gobierno y de alto impacto, pues
son precisamente los órganos jurisdiccionales los que resuelven
la mayor parte de la conflictiva que se presenta en la sociedad.
Ya sean asuntos penales, que revisten delitos de trascendencia­
social, como secuestro, homicidios, robos, violaciones, entre otros;
civiles, que implican la resolución de problemas relacionados con
los tratos rutinarios de las personas como las compraventas, rentas,
adeudos, conflictos de índole comercial, incumplimientos de pagos,
etcétera; familiares, relativos a asuntos sumamente delicados como
lo son divorcios, reconocimientos de paternidad, guarda y custodia,
pago de alimentos y pensiones alimenticias, adopciones, procesos
sucesorios, y en general todo aquellos conflic­tos derivados de las
relaciones de familia; y la justicia para adolescentes, que atiende,
de forma especializada, las conductas delictivas realizada por
menores de dieciocho años, los juzgados y salas que conforman el
Poder Judicial de la Capital de la República, forman parte funda­
mental para garantizar la paz y estabilidad sociales.
Para nadie es ajeno que en la actualidad la sociedad mexicana
ha incrementado su tendencia a judicializar la conflictiva social.
Antes, existían otros mecanismos, dentro del ámbito privado, que
permitían resolver conflictos entre particulares sin que hubiera la
72 Procuración e
Impartición...
necesidad de la participación de la autoridad. Ya fuera a través
de la negociación, la mediación, la conciliación, o cualquier otro
medio idóneo, las personas procuraban solucionar sus conflictos.
Ahora, la desconfianza, la apatía y la insociabilidad se hacen
patentes y los individuos buscan instancias gubernamentales,
con características de imparcialidad, que les ayuden a resolver
las conflictivas que se presentan.
No es extraño que conflictos de incumplimientos de pagos me­
nores a 100 o 200 pesos sean motivo de un juicio, o el pago de re­
pa­­raciones de daños provocados por accidentes entre vecinos,
desemboquen en asuntos del orden penal. Incluso, conflictiva de
diferencias menores entre cónyuges se ventilan en procesos de di­­
vorcios, los cuales no trascendían de las paredes de los hogares y
su incumbencia no se consideraba del interés del Estado. En
pocas palabras, la sociedad ha perdido –lenta y paulatinamente
la capacidad y posibilidad de autocomposición, lo que impera la
intervención de los órganos del gobierno para aminorar el encono­
social.
Así, las estructuras de las instituciones de administración
de justicia muestran una tendencia de crecimiento que redunda
en la utilización de mayores recursos del erario, para así estar en
condiciones de adecuarse a la exigencia social por contar con más
instancias de impartición de justicia. Por ello, es indispensable que
se busquen nuevas mecanismos, no tan costosos para la hacienda
pública y más efectivos para solución de la conflictiva social.
A lo largo de este trabajo observaremos la estructura y condicio­
nes actuales que conforman el Tribunal Superior de Justicia del
Distrito Federal, con lo que observaremos la complejidad que re­
viste y su condición sui géneris con respecto a los demás Pode­res
Judiciales de los Estados de la República, para después precisar
las acciones que se han realizado durante los últimos años ten­
dientes a dotar de mayor eficiencia a las actividades sustantivas
El tribunal
Superior...
73
que realiza el Tribunal, para concluir con los retos y perspectivas
a los que se enfrenta esta institución que, sobra afirmar, reviste
una gran importancia no sólo para la Capital del país sino para
la República en su conjunto.
El Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal
en la actualidad
La Ciudad de México, Distrito Federal, Capital de la República es
un conglomerado social altamente complejo. En su territorio habi­
tan 8, 720,916 personas y, transitan habitualmente alrededor de
3,000,000 provenientes de la zona conurbada del Estado de México,
lo que implica una afluencia rutinaria de más de 12,000,000 per­
sonas.1 Estos datos, dan una pequeña idea de la complejidad que
reviste el gobernar una ciudad de estas dimensiones. Las institu­
ciones de­gobierno requieren de estructuras burocráticas grandes,
acordes a la realidad que enfrentan de forma rutinaria. En esta lógica,
el acceso a la justicia no puede ser distinto.
El Tribunal Superior de Justicia del Distrito Fe­deral se encuen­
tra conformado por una plantilla de 9,038 traba­jadores, de­los
cuales el 86.9 por ciento se encuentra ubicado en áreas que tienen
que ver con el ejercicio de la función jurisdiccio­nal, mientras que
13.1 por ciento restante, se encuentra en áreas administrativas
y de apoyo judicial.
Esta fuerza laboral se encuentra repartida en veinticinco
salas, integradas cada una por tres magistrados, de las cuales
diez se ocupan de la competencia civil, nueve penales, cuatro
familiares y dos de justicia para adolescentes. Doscientos setenta
y siete juzgados, de los cuales ochenta y tres tienen competencia
1
II Conteo de Población y Vivienda 2005, datos obtenidos de inegi.
74 Procuración e
Impartición...
civil, sesenta y nueve penal, cuarenta y dos familiares; quince
especializados en justicia para adolescentes; veintiocho especiali­
zados en justicia de paz civil y cuarenta en justicia de paz penal.2
Conformación Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal
Órganos Jurisdiccionales
Salas
Civiles
Penales
Familiares
Adolescentes
Total
Juzgados de
Primera Instancia
Civiles
Penales
Familiares
Adolescentes
Total Juzgados de Paz
Civiles
Penales
Total
No. Juzgados
10
9
4
2
25
No. Juzgados
Magistrados
30
27
12
6
75
83
69
42
15
209
No. Juzgados
28
40
68
Total de Salas: 25
Total de Juzgados: 277
Total de Órganos Judiciales: 30
Como podemos observar, la estructura con que cuenta el Tri­
bunal Superior de Justicia del Distrito Federal es grandes dimen­
siones, las cuales son comparables con poderes judiciales como
los de las Repúblicas de Chile o de Colombia. Por lo que hace a los
2
Compendio Estadístico 2000-2008, Tribunal Superior de Justicia del Distrito Fede­
ral. Antes de la reforma de abril de 2009, el Tribunal Superior de Justicia tenía bajo su
jurisdicción el Juzgado Mixto de las Islas Marías, el cual, actualmente se encuentra
adscrito al Poder Judicial Federal.
El tribunal
Superior...
75
poderes judiciales de los Estados de la República Mexicana, el Dis­
trito Federal, junto con los Poderes Judiciales de los Estados de
México, Jalisco y Nuevo León, cuentan con una estructura organi­
zacional amplia aunque, en dimensiones, difícilmente cuentan
con una estructura similar a la de la Capital de la República.
Por las dimensiones con que cuenta, el Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal ocupa el 2.9 por ciento del gasto
anual total programático de la Capital de la República. Así, para
el ejercicio fiscal 2010, la Asamblea Legislativa del Distrito Fede­
ral definió establecer un monto de gasto para el Poder Judicial
del Distrito Federal de 3,657.4 millones de pesos.3
En esta tónica y dadas las dimensiones con que cuenta el Tri­
bunal Superior de Justicia de la Capital de la República, es justo
explicar las cargas de trabajo a las que se enfrenta el Poder Judi­
cial del Distrito Federal, pues en el año 2009, ingresaron 300,
785 asuntos nuevos, de los que 229,798 fueron recibidos por los
juzgados, de los cuales 200,833 fueron asuntos de naturaleza
civil-mercantil, lo que representa el 66.8 por ciento del total; 69,370
en materia familiar, (23 por ciento); 27,453 penales (9.1 por ciento)
y 3,129 en materia de justicia para adolescentes (1 por ciento).
Así, en los juzgados de primera instancia, los juicios iniciados
en el año 2009 se incrementaron en un 23.2 por ciento respecto
del año anterior y, como es posible observar, la materia civil fue
la que tuvo el mayor incremento –aproximadamente del 30 por
ciento– en tanto que la materia penal creció un 3.9 por ciento la
materia familiar tuvo un aumento del 24.4 por ciento.
Por lo que hace a las resoluciones dictadas en juzgados de pri­
mera instancia, en el año 2009 ascendieron a 132,136, lo que sig­
Gaceta Oficial del Distrito Federal , número 749, de fecha 31 de diciembre de
2009.
3
76 Procuración e
Impartición...
nificó un aumento del 12.1 por ciento en relación con el año judicial
anterior. Así, la tendencia en materia civil se incrementó en un 11.3
por ciento al pasar de 54,494 a 60,637; las penales aumentaron
en 6.3 por ciento, de 14,745 a 15,677 y las familiares en 18.8
por ciento de 37,046 a 44,025 por ciento en el mismo periodo.
Del mismo modo, las Salas recibieron 59,097 asuntos nuevos, de
los cuales 18,707 corresponden a la materia civil (31.7 por ciento);
9,089 a la materia mercantil (15.4 por ciento); 18,601 corres­ponden
al ámbito penal (31.5 por ciento); 11,105 a la materia­fa­miliar (17.7
por ciento) y 1,595 a la justicia para adolescentes (2.7 por ciento).
En el año judicial de 2009 se emitieron un total de 58,707
sentencias de segunda instancia.
Estas cifras nos dan una idea del reto que reviste para los
juzgados y salas de la Capital de la República el impartir justicia
dentro de los términos y plazos que ordena la legislación y, pese
a ello, los asuntos se resuelven en términos de ley. El esfuerzo y labor
encomiable que realizan los juzgados impera la atención de entre
cinco y seis audiencias diarias; al tiempo que se dictan acuerdos,
se firman sentencias, se revisan proyectos y, además de todo, se
atienden asuntos de la administración del juzgado.
La labor que se realiza por parte de los impartidores de justi­
cia de la capital merece especial atención. Desde el año 2008,
existen 2.2 jueces por cada 100,000 habitantes de la Ciudad, lo
cual nos indica las cargas de trabajo a la que están expuestos
estos funcionarios judiciales.
Por ello, es dable afirmar que los magistrados y jueces son fun­
cionarios egregios que respaldan la investidura que se les otorga.
Todos, sin excepción, participan un estricto procedimiento para
alcanzar esta posición, que implica estudio y dedicación, pues la
función de juzgar a nuestros semejantes no es un asunto menor,
por el contrario, demanda características y cualidades suma­
mente peculiares, de excepción.
El tribunal
Superior...
77
Desde varios lustros, sólo se accede al digno cargo de juez tran­
sitando por un proceso arduo de examinación, en el que partici­
pan tanto juzgadores de prestigio, magistrados, consejeros de
la judicatura, y académicos de renombre. Los procedimientos
son arduos y afanosos, demandan estudio y compromiso de
quienes desean servir a la sociedad con integridad y excelsitud
pero, sobre todo un profundo amor por la función jurisdiccional
y vocación de servicio.
Ahora bien, el Tribunal Superior de Justicia de la Capital,
además de contar con la estructura judicial que hemos comenta­
do, también cuenta con otras áreas que, a continuación se enlistan:
Consejo de la Judicatura del df
(Administración, vigilancia y disciplina del tsjdf)
•Presidente del tsjdf que también lo es del Consejo.
•1 Magistrado.
•1 Juez de Primera Instancia.
•1 Juez de paz.
•2 designados por la aldf.
•1 designado por el Jefe de Gobierno.
Áreas del Consejo de la Judicatura del Distrito Federal
•Contraloría General.
•Coordinación Administrativa.
•Visitaduría Judicial.
•Comisión de Administración y Presupuesto.
•Comisión de Disciplina Judicial.
Áreas de Apoyo Judicial
•Dirección General del Centro de Justicia Alternativa.
•Dirección General de Anales de Jurisprudencia y Boletín Judicial.
78 Procuración e
Impartición...
•Dirección General del Instituto de Estudios Judiciales.
•Dirección del Servicio Médico Forense.
•Dirección Jurídica.
•Dirección de Consignaciones Civiles.
•Dirección de Turno de Consignaciones Penales.
•Dirección de Oficialía de Partes Común.
•Dirección del Archivo Judicial y del Registro Público de Avisos
Judiciales.
•Dirección de Comunicación Social.
•Dirección de Orientación Ciudadana y Derechos Humanos.
•Dirección de Información Pública.
•Centro de Convivencia Familiar Supervisada.
•Unidad de Trabajo Social.
Una Oficialía Mayor.
•Oficialía Mayor.
•Dirección Ejecutiva de Planeación.
•Dirección Ejecutiva de Recursos Humanos.
•Dirección Ejecutiva de Recursos Financieros.
•Dirección Ejecutiva de Recursos Materiales.
•Dirección de Obras.
•Dirección de Seguridad.
•Dirección de Protección Civil.
Como podemos observar, el Tribunal Superior de Justicia de la
Capital, cuenta con una estructura compleja y amplia, acorde a
la realidad de una ciudad sui géneris, cuya demografía y condi­
ciones obligan a contar con un ente de justicia grande, al que la
población acude en busca de resolver una conflictiva que igual
afecta la libertad, que los bienes y patrimonio de las personas.
Cada asunto que se presenta ante los jueces del Distrito Federal, se
encuentran revestidos de la afanosa necesidad de recibir solución
con la preponderancia del factor justicia.
El tribunal
Superior...
79
La actual conformación del Poder Judicial del Distrito Federal
obedece a una conflictiva social distinta a la que se presentó en
su instauración a mediados del siglo xix. Por el contrario, las con­
diciones han ido cambiando a la par de la transformación social
de nuestro país. Así, en distintos momentos de la vida de nuestra
República como nación independiente, las instituciones de justi­
cia han jugado papeles preponderantes en nuestro devenir. En
el caso del Tribunal Superior de Justicia de la Capital, podemos
afirmar que éste ha atendido a las necesidades sociales y momen­
tos políticos por las que ha transitado el Estado Mexicano.
Así, tras el debate en torno a la naturaleza jurídica del Distrito
Federal, el Tribunal ha pasado de ser una dependencia de un Depar­
tamento Administrativo, a un poder autónomo, así reconocido
por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Tras la segunda reforma política del Distrito Federal, de junio de
1996, el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal logró
su autonomía presupuestal en 1999, con la reforma a su Ley Orgá­
nica. En ella, se le reconocía la potestad de poder administrar los
recursos presupuestales con sujeción a los procesos de control
de gasto que estimara convenientes, siempre dentro del orden
constitucional. En esta tónica, el Consejo de la Judicatura del
Distrito Federal, logró establecerse como órgano de administra­
ción, vigilancia y disciplina del Tribunal Superior de Justicia, de
los juzgados y de cualquier otro órgano encargado de la función
judicial en el Distrito Federal.
De igual manera, se estableció que fuera la Asamblea Legis­
lativa del Distrito Federal, la que legislara en el ámbito de compe­
tencia de las responsabilidades de los funcionarios judiciales.
Otro de los grandes avances alcanzados por el órgano judicial
capitalino es, precisamente, el reconocimiento de su organización
interna y la adecuación de las disposiciones regulatorias del Conse­jo
de la Judicatura del Distrito Federal y ubicar su reglamentación
80 Procuración e
Impartición...
en torno a las disposiciones del artículo 100 de nuestra Norma
Fundamental –la regulación de facultades del Consejo de la Ju­
dicatura Federal–, con base en la fracción III de la base cuarta,
del artículo 122 de nuestra Constitución, con lo cual se buscó
brindar mayor certeza en la realización de las funciones de vigilan­
cia y disciplina.
Especial mención merece la reciente reforma constitucional,
publicada en abril del presente año, que le permitió al Tribunal Su­
perior de Justicia el elegir, de entre los Magistrados y Jueces, a tres
de los integrantes del Consejo de la Judicatura del Distrito Federal,
al igual que ocurre con el Poder Judicial Federal. Quedó atrás la
figura de la insaculación, que dejaba a la suerte la desig­nación de
quienes integran el órgano de administración del Poder Judicial
de la Capital de la República. Asimismo, gracias a esta reforma
hoy no existe distinción entre los jueces que imparten justicia en el
Distrito Federal. La distinción entre jueces de primera instancia y
jueces de paz hoy forma parte del pasado. Se reconoce, en dig­nidad
y prestancia, los méritos para ejercer la función jurisdiccional
independientemente de los procesos aplicados para la resolución
de los conflictos.
Como podemos observar, la transformación del Tribunal
Superior de Justicia del Distrito Federal ha sido ardua y permanen­
te, precisando, sin menoscabo de la participación de importantes
personajes para la vida de la Ciudad, que éstos han tenido lugar
en atención al clamor social por contar con instancias de imparti­
ción de justicia acordes a la realidad de una Ciudad cosmopolita,
en­riquecida por una diversidad característica de nuestra nación.
Hoy, la Ciudad de México cuenta con un poder judicial fuerte,
en el que convergen la responsabilidad y fortaleza de la legitima­
ción social, refrendada a través de la continua y reiterada presencia
de quienes acuden a sus instalaciones en busca de justicia. Como
veremos más adelante, las transformaciones sociales han provoca­
do que las personas acudan, con mayor frecuencia, a los órganos
El tribunal
Superior...
81
jurisdiccionales en busca de la resolución de conflictos que otra, en
condiciones de mayor armonía social, se podían realizar sin que
la autoridad interviniera directamente para resolverlos.
Las transformaciones
sociales y la justicia
Las transformaciones sociales, políticas y económicas que ha
sufrido el país a lo largo de los últimos treinta años, ha provo­
cado un clima de desconfianza y de tensión en la sociedad. No
es difícil encontrar que el factor de litigiosidad de la sociedad ha
incrementado de forma considerable.
A partir de agosto de 1976, con la fractura de la estabilidad
cambiaria que duró 22 años, la sociedad había “creado esquemas
de transacciones comerciales y pactos contractuales basados en
la estabilidad interna de precios y en la inalterabilidad del tipo
de cambio.4” Aunado a lo anterior y a la disminución de la renta
petrolera, la implantación de medidas de apertura comercial,
el seguimiento de los principios establecidos en el Consenso de
Washington, a una exaltación inusitada del individualismo y de un
liberalismo desmedido, la falta de solidaridad social, a la pérdida de
valores, al incremento de los abismos y diferencias económico-so­
ciales y ante la falta de capacidad política de mediación y solución de
los conflictos sociales y a la sesión mal entendida de las facultades y
atribuciones de gobierno, que dio lugar a una desarticulación social
que en mucho ha favorecido a incrementar la participación de
los órganos judiciales en la resolución de la conflictiva social.
4
Aguilera Gómez, Manuel, La justicia Federal y sus desafíos, editorial Dirección
General de Comunicación Social del Consejo de la Judicatura Federal, México,
2006, página 73.
82 Procuración e
Impartición...
No es extraño encontrar en las cifras proporcionadas por los
órganos jurisdiccionales un incremento considerable en los ingre­
sos y asuntos que se les presentan día con día. En el Tribunal
Superior de Justicia hemos tenido un incremento de más del 100
por ciento con relación a los asuntos ingresados en el año 2000.
Este fenómeno afecta tanto al Poder Judicial Federal como a los
Poderes de las Entidades Federativas, lo cual es una muestra­
clara de dos circunstancias particulares: a) primeramente, que
la desconfianza sistemática producida por el individualismo exa­
cerbado, ha ido en aumento y se requiere de la intervención estatal
para resolver la mayoría de las conflictivas que implican la afectación
de derechos, y b) pese a las encuestas de opinión en torno a la
confiabilidad de las instituciones públicas, lo cierto es que este
incremento sólo refleja una alta aceptación y confianza efectiva
en las instituciones de justicia.
Ante esta realidad es importante destacar que la exigencia social
por contar con mayores instancias de resolución de conflic­tos
va en aumento. La desconfianza institucional tanto en la po­­lítica
como en varias instancias gubernamentales hacen las con­­diciones
idóneas para incrementar los índices de litigiosidad social. Otra, con
la existencia de instancias de solución de conflictos sociales, –llá­
mense operadores políticos o bien instancias­gubernamentales
informales de negociación y conciliación la asistencia hacia las ins­
tancias de impartición de justicia se amino­raba. Por el contrario,
obe­decían a un principio de última ratio en el que se accedía a los
tribunales como última instancia de resolución. Hoy, por desgracia,
el incremento de asuntos de nuevo ingreso en los tribunales, princi­
palmente los del Distrito Federal, muestran que existe un déficit
social y el desánimo por buscar acercamientos y resoluciones a
las conflictivas, sin la intervención de una autoridad.
En síntesis: el desencanto gubernamental ha traído como
consecuencia inevitable el deseo inexorable de resolver la conflic­
tiva social a través de los tribunales, con consecuencias políticas
El tribunal
Superior...
83
y sociales diversas, pero que irremediablemente derivan en una
participación activa de los órganos judiciales, tanto en la interpre­
tación de leyes como en su aplicación, siempre dentro del marco
constitucional.
En esta lógica, la participación judicial en la vida política y
social de México ha cobrado una gran relevancia para garantizar
la gobernabilidad del país. Más allá de discusiones reiteradas
sobre el papel que juegan los órganos de interpretación de la norma
jurídica –ya sea en el ámbito constitucional o de la legislación
ordinaria, así como en su aplicación, la realidad es que la parti­
cipación de los poderes judiciales –federal y de las entidades
federativas se ha tornado en indispensable para garantizar el
correcto desarrollo de la vida democrática del país. Sin embargo,
esta situación trae consecuencias que, a la postre, pueden acarrear
un colapso en su vida institucional, pues el incremento de las
cargas de trabajo en este ámbito impera de un crecimiento que,
difícilmente, podrá aguantar el erario público.
La intervención de los jueces en los quehaceres de la vida pú­
blica se puede observar en algunas decisiones que últimamente
se han tomado dentro del ámbito federal y del Distrito Federal. La
Suprema Corte de Justicia de la Nación ha establecido criterios
bajo los cuales habrá de elaborarse el proyecto de presupuesto
de egresos de la federación; o bien, han resuelto cuestiones de
organización en torno a las disposiciones que regulan el procedi­
miento legislativo. Estas determinaciones, incluso, han obligado
al legislativo federal a reformar disposiciones acatando puntual­
mente los señalamientos ordenados por el Tribunal Constitucio­
nal. Otro ejemplo lo encontramos con la validación constitucional
respecto a las reformas del Código Civil en torno al matrimonio.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación, prácticamente calificó
el actuar legislativo del Poder Legislativo del Distrito Federal, al
84 Procuración e
Impartición...
momento de declarar validez de una norma creada con base en
los procedimientos jurídico-legislativos propios de la institución,
mismos que son revisados y validados por las instancias de control
constitucional.
No podemos perder de vista que las instancias jurisdiccio­
nales toman un papel más activo en la vida política del país y
esto se debe a innumerables factores, de los cuales algunos se
han comentado con anterioridad, sin embargo uno de ellos es,
sin duda, el principio de definitividad en sus resoluciones. Ello
impide, en gran medida, que la conflictiva social se escale a dimen­
siones de disturbio social. Los grupos sociales podrán o no estar
de acuerdo con lo que resuelvan las instancias judiciales, pero
las resoluciones que emitan se acatan y se ejerce el poder coac­
tivo del estado para hacerlas valer aún en contra de la voluntad
de las partes.
Este principio está revestido de una legitimación social plena
y que está directamente vinculada con el aspecto de ultima ratio
que comentamos párrafos atrás. Sin duda, la conflictiva que se
presenta ante las instancias judiciales no debe tener solución
por vías ordinarias entre particulares, es decir, no existen puntos
de concordancia que permitan llegar a acuerdos, o bien que se
presenten posturas absolutamente radicalizadas que, en grado
de obcecación, se impida la conciliación entre las partes.
Esta falta de convergencia entre las personas, ha orillado a
un incremento de las instancias jurisdiccionales, con las con­
secuentes repercusiones económicas, sociales y políticas. Sin
embargo, no podemos perder de vista que la participación de la
jurisdicción en la resolución de la conflictiva social se ha vuelto
una necesidad de primer nivel para la población, pues en los órga­
nos jurisdiccionales ven la fuerza necesaria para atender los
clamores de justicia que, algunos sectores de la población, han
sentido como desatendidos por las demás instancias ejecutivas
y legislativas.
El tribunal
Superior...
85
Retos y perspectivas del
Poder Judicial del
Distrito Federal
Hoy los órganos de impartición de justicia se enfrentan a una rea­
lidad que difícilmente se avistaba cuando fueron constituidos.
Su participación en la vida política y social del país se concibió
como un mecanismo de equilibrio entre los poderes ejecutivo y
legislativo –revestidos de la legitimidad que brinda el voto popular
como órganos de control de legalidad. La realidad y las condiciones
socio-políticas y económicas del país –y del mundo en general–
han hecho de los poderes judiciales instancias legitimadoras de
las determinaciones adoptadas tanto por los ejecutivos como las
legis­laturas. Sus facultades de interpretación son, ahora, auténti­
cos mecanismos de control del poder público, siempre vigilantes
del respeto de la ley y, principalmente, de la norma fundamen­
tal. Por ello es que ahora han cobrado más prestancia en la lógica
gu­bernamental. Sin embargo, esta responsabilidad no puede
reali­zarse de forma aislada, alejada de los otros poderes y, mucho
menos, verse desde la óptica soberbia de la superioridad.
Los órganos de impartición de justicia son instancias que,
necesariamente, requieren de la participación de los otros pode­
res con los que conviven. Pretender realizar las funciones consti­
tucionales que tienen previstas desde la soledad siempre traerá
consecuencias funestas, cuyas víctimas serán necesariamente
la sociedad. Poder que marcha solo marcha muerto.
Hoy la relevancia que tienen los poderes judiciales –federal y
locales– efectivamente no tiene antecedente en la vida de nues­
tra República. Sin embargo, la experiencia internacional indica
que es precisamente en esta relevancia en donde encuentran su
propia desestabilidad y su debilidad.
86 Procuración e
Impartición...
La población acude a resolver su conflictiva a los órganos juris­
diccionales con el ánimo de encontrar solución a problemas que,­sin
ánimo de rijosidad, podrían resolverse con entendimiento y refle­
xión. Las condiciones sociales actuales impiden que esto pueda
llevarse a cabo a través de mecanismos ordinarios de comunicación,
entendimiento y aceptación, pues la preponderancia individualista­
que permea en la sociedad mexicana obliga a la confrontación y al
encono, orillados por la obcecación y la intran­sigencia, lo que hace­
que se pierda la razón y se dé paso irr­e­mediable a la terquedad.
Por ello, es de máxima prioridad el tratar de inculcar en la so­
ciedad la utilización de métodos alternos de solución de conflictos,
en los que la razón y la sensatez permitan encontrar salida a pro­
blemas que puedan converger hacia un beneficio común, sin que
para ello tenga que prevalecer el interés de uno sobre el otro. En
pocas palabras, retomar aquello que había venido ocurriendo
en las sociedades: encontrar puntos de encuentro para que la co­
munidad salga beneficiada.
La promoción de métodos alternos de solución de conflictos es
una tarea a la que los Poderes Judiciales locales nos hemos abo­
cado. El Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal viene
apostando a este esfuerzo desde el año 2000, cuando tras un estudio
elaborado por la Comisión Nacional de Tribunales Superiores de
Justicia, se detectó el índice de crecimiento de los asuntos con­
tenciosos que se les presentaban para su resolución. A partir de
entonces, se puso en marcha un programa para fomentar el uso
de los medios alternos de solución de conflictos, el cual hoy en
día comienza a dar frutos.
Apostar a mecanismos de autocomposición es la clave para
evitar el colapso de los órganos jurisdiccionales. Por un lado, acer­
can a la población al reencuentro con sus orígenes de correlación
social en tanto que, por el otro, ayudan a la reducción de los índices
de litigiosidad y aminoran las cargas de trabajo a las que actual­
mente se exponen a los órganos judiciales.
El tribunal
Superior...
87
Por ello es indispensable que tanto el Congreso de la Unión
como los poderes legislativos locales, cobren conciencia de la
relevancia que tiene la obligatoriedad de la utilización de medios
alternos de solución de conflictos, previo a la iniciación de procedi­
mientos judiciales. Establecer a la mediación, conciliación o
cualquier otro medio de autocomposición como una instancia
previa al ejercicio de la acción, facilitaría a la regeneración del
tejido social y a la reducción del encono que se vive en la sociedad.
Existe conciencia de que esta es una solución que llevará
algún tiempo el poderla instaurar. El ánimo de contienda que
actualmente existe en la sociedad impide que cualquier esfuerzo
legislativo pueda llevarse a cabo. Como ejemplo, baste observar la
instauración de la instancia previa y de conciliación en los procedi­
mientos civiles. Hoy ha resultado una letra muerta, pues menos
del uno por ciento de los procedimientos jurisdiccionales civiles en
el Distrito Federal concluyen en esta fase procesal.
Por lo pronto y de forma urgente, es indispensable la revisión
de los procedimientos jurisdiccionales con los que actualmente
se llevan a cabo los juicios del fuero común. Se requiere de procedi­
mi­­­entos ágiles, que se alejen de los anquilosados formalismos que,
lejos de brindar certeza jurídica, retardan innecesariamente la re­
so­­­lu­ción judicial. Figuras jurídicas como la apelación preventiva5
o la oralización de los procedimientos, deben trascender fronteras
y permitir su naturalización en los sistemas procesales de los Es­
ta­­dos de la República, pues sus resultados han permitido que
los procedimientos civiles y mercantiles se desahoguen con mayor
ag­ilidad y, con ello, evitar tácticas dilatorias y apelaciones que, por
su propia naturaleza, no requieren ser tramitadas inmediatamente.
5
Sistema de apelación en la que la parte presenta su agravio y se reserva para
su resolución conjunta con la de sentencia definitiva, que actualmente se uti­
liza en el procedimiento ordinario mercantil y el ordinario civil en el Distrito
Federal.
88 Procuración e
Impartición...
Por otro lado, se estima necesario la adecuación de la legislación
y la homologación de procedimientos en los Estados de la República,
pues con ello no sólo se estaría dando un paso trascendental para
la modernización de los sistemas procesales del país, sino que,
además, se reforzaría el principio de certeza jurídica que ordena la
Constitución.
Reflexión Final a modo
de conclusión
La función judicial en nuestros días reviste una trascendental­
impor­tancia para garantizar la gobernabilidad del país. Baste
rei­te­rar la trascendencia que tiene para la sociedad el dirimir
sus con­tro­­versias y establecer determinaciones definitivas, que se
acaten y se hagan cumplir, aún por la vía de la coerción. Para que
esto sea una realidad, es necesario establecer medidas y pará­
metros que garanti­cen una independencia y autonomía de los
órganos judiciales.
Es necesario que las legislaturas se adecuen y establezcan
normas destinadas a garantizar tan apremiante objetivo, sin que
con ello se establezcan aspectos de sumisión con respecto a los
ejecutivos y legislativos. En otras palabras, se considera perti­
nente establecer normas que eviten el sometimiento de poderes y
que, por el contrario, se respeten los equilibrios concebidos desde
la teoría de Montesquieu.
Garantizar la independencia de los poderes judiciales requiere
de una autonomía financiera plena, sin que con ello se entienda
como una patente de corso para utilizar los recursos del erario con
absoluta discrecionalidad. Por el contrario, no es pretensión ni
mucho menos añoranza, el que los poderes judiciales se encuentren
alejados de mecanismos de rendición de cuentas, más bien es la
exigencia de un respeto e igualdad de condiciones que garanticen,
efectivamente un equilibrio entre poderes.
El tribunal
Superior...
89
Hoy la exigencia de mayores y mejores mecanismos de imparti­
ción de justicia implican, necesariamente, que la planeación y ope­
ración de los recursos presupuestales destinados a esta función de
gobierno se desarrollen y se apliquen a las necesidades precisas. La
planeación estratégica en materia judicial demanda la existencia
de suficiencias presupuestales que permitan una inver­sión clara y
concisa para la atención de deficiencias en el desempeño judicial.
Se requiere autonomía financiera para definir, con responsabi­
lidad y de cara a la sociedad, las acciones y el rumbo de la admi­
nis­tración de los órganos judiciales locales, la inversión para la
instauración de la infraestructura y el desarrollo de tecnologías
ad hoc para garantizar una impartición de justicia acorde a las exi­
gencias sociales, pues como hemos visto, la sociedad demanda
poderes judiciales fuertes, que brinden un servicio expedito, ga­­
rantista y con certeza.
Para lograr contar con gobiernos fuertes y legítimos, es nece­
sario contar con instituciones que cumplan con las aspiraciones
so­ciales. La sociedad espera independencia entre los poderes ejecu­
tivo, le­gisla­tivo y judicial, mas nunca ansía el rompimiento ni el
encono. Más bien demanda un respeto a los ámbitos y esferas de
competencia y que éste se materialice en mejores niveles de vida.
Por ello nos exige madurez política para tomar las determinacio­
nes que mejor convengan a la República, sin atender a temores
infundados ni a recelos inmerecidos. Es tiempo que se acepte la
necesidad de brindarle a México poderes judiciales fuertes e
independientes que acepten su responsabilidad por impartir
justicia con prontitud y respetando las garantías sociales del
debido proceso.
90 Procuración e
Impartición...
Estructura, competencia y
funcionamiento del Tribunal de lo
Contencioso Administrativo del
Distrito Federal
Lic. José Raúl Armida Reyes
Magistrado Presidente del Tribunal de lo
Contencioso Administrativo del Distrito Federal
Antecedentes
El Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal,
inició sus labores el 17 de julio de 1971. Su ley publicada cuatro
meses antes (17 de marzo de 1971) fijaba una competencia sólo
administrativa, mas no fiscal, ya que en esa época el Tribunal com­
petente para conocer de asuntos en materia fiscal (resoluciones
emitidas por autoridades fiscales del extinto Departamento del
Distrito Federal) era el entonces Tribunal Fiscal de la Federación,
actualmente Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa
y es hasta finales del año de 1979 cuando se nos otorgó la com­
petencia para conocer de asuntos en materia fiscal local y así
sucesivamente se ha ido ampliando la competencia del Tribunal.
Nuestro Tribunal se crea con el fin de establecer la justicia admi­
nistrativa en el Distrito Federal, en forma ágil y eficaz, se encuentra
dotado de plena autonomía para resolver con imparciali­dad los
juicios que los particulares promuevan contra de los actos o resolu­
ciones provenientes de cualquier autoridad de la Administración
91
Pública del Distrito Federal y a partir del año 2001 se le dio la autono­
mía presupuestal, lo que viene a reforzar su independencia.
La nueva Ley Orgánica que rige al Tribunal de lo Contencioso
Administrativo del Distrito Federal entró en vigencia a partir del
11 de septiembre de 2009, se divide en dos Títulos, el primero se
refiere a la organización y competencia del Tribunal y el segundo,
al procedimiento.
Estructura del Tribunal
de lo Contencioso
Administrativo del
Distrito Federal
Conforme a los artículos 1o. y 2o. de la Ley Orgánica del Tribunal­
de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal, vigente a
partir del 11 de septiembre de 2009, este órgano jurisdiccional,
está dotado de plena jurisdicción y autonomía para dictar sus
fallos e independiente de las autoridades administrativas, se com­
pone de una Sala Superior integrada por siete Magistrados, por
cinco Salas Ordinarias, actualmente no existen Salas Auxiliares,
pero existe la posibilidad de crearlas cuando la necesidades del
servi­cio lo requiera; tanto las Salas Ordinarias como las Auxilia­
res se integran con tres Magistrados cada una y tienen la misma
competencia.
Anteriormente en el referido artículo 2o., se dispuso que el Tri­
bunal se integraba con una Sala Superior, compuesta por cinco
Magistrados y por tres Salas Ordinarias de tres Magistrados cada
una, pero a raíz de la reforma que se hizo al citado precepto el 14 de
diciembre de 1999 y que entró en vigor el 1o. de enero del 2000,
se amplió el número de integrantes de Sala Superior de cinco
a siete miembros, año en que la Sala Superior por necesidades
del servicio se vio obligada a crear la Primera Sala Auxiliar y en
2001, la Segunda Sala Auxiliar.
92 Procuración e
Impartición...
Estas Salas Auxiliares con la entrada en vigor de la nueva
Ley Orgánica, se convirtieron en Ordinarias en acatamiento a lo
dispuesto en el artículo Segundo Transitorio de la Ley en cita.
De acuerdo a lo establecido en el artículo 6o. de la Ley que rige
al Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal, el
Tribunal tiene un Presidente que será a su vez Presiden­te de la Sala
Superior y de la Junta de Gobierno, elegido por los Magistrados
que la integran, la duración de su cargo es de cuatro años.
A su vez, cada Sala Ordinaria y Auxiliar tendrá un Presidente
electo­por sus Magistrados, quien durará dos años en su cargo y
no podrá ser reelecto para el siguiente periodo.
Originalmente, dicho artículo establecía un periodo de dos
años para la Presidencia del Tribunal y de su Sala Superior y de
un año para la Presidencia de las Salas Ordinarias en donde se
permitía la reelección, plazos que se estimaron insuficientes para
desarrollar un plan de trabajo en beneficio de la institución (ar­
tículo 5o. reformado el 14 de diciembre de 1999, con vigencia a
partir del 1o. de enero del 2000).
La Sala Superior es el Órgano Supremo del Tribunal de lo
Contencioso Administrativo del Distrito Federal, en términos del
artículo 21 de la Ley que lo rige.
Con la finalidad de que la Sala Superior oriente sus activida­
des, a las cuestiones jurisdiccionales, sin perder por ello su carác­
ter de órgano supremo y rector del Tribunal, toda vez que conserva
facultades para resolver sobre las cuestiones administra­tivas más
importantes tales como la aprobación y expedición del Reglamento
Interior, así como la facultad de crear Salas Auxiliares, el 26 de
enero del 2010 se instaló “La Junta de Gobierno y Administración”;
órgano que tiene a su cargo la administración, vigilancia, discipli­na
del Tribunal y del sistema profesional de carrera jurisdiccional al
interior del mismo, contando con autonomía técnica y de gestión
Estructura,
Competencia...
93
para el adecuado cumplimiento de sus funciones, en coordina­­
ción permanente con el Pleno de la Sala Superior.
La creación de La Junta de Gobierno y Administración, obedece
a la tendencia nacional e internacional de distinguir orgánicamente
las funciones estrictamente jurisdiccionales de las de carácter admi­
nistrativo, al interior de los órganos encargados de impartir justicia.
La Junta de Gobierno se integra por el Presidente del Tribunal,
quien también como anteriormente se dijo será presidente de la
Junta de Gobierno, por dos Magistrados de Sala Superior y dos de
las Salas Ordinarias.
Cabe destacar que la nueva Ley Orgánica, conserva la figura
de la suspensión del acto impugnado y la suspensión con efectos­
restitutorios, así como de la suplencia de la queja en beneficio del
gobernado; definiendo atinadamente el que sólo se requiere contar­
con un interés legítimo para presentar una demanda, lo que pro­picia
que un mayor número de justiciables tengan acceso a la impartición
de justicia; como figura novedosa se encuentra la figura de la litis
abierta; se faculta a las Salas de Primera Instan­cia para analizar
de oficio la competencia de la autoridad que dictó la resolución
impug­nada o que intervino en la elaboración del procedimiento
del que derive; así como cuando la resolución impugnada ca­rezca de
fundamentación y motivación; y con el fin de evitar litigios intermi­
nables también obliga a que las Salas al emitir sus senten­­cia, debe­
rán examinar las causas de ilegalidad que puedan llevar a de­clarar
una nulidad lisa y llana de la resolu­ción o acto administrati­vo
impugnado, conforme al principio de mayor beneficio. Se fortale­ció­
la figura del Magistrado Instructor ya que él se encarga de llevar
todo el proceso; es decir, él admite o desecha la demanda, dicta
acuerdos respecto a la suspensión, pruebas, contestación de de­
manda, ampliación de demanda, contes­tación a la ampliación
de demanda etcétera.
94 Procuración e
Impartición...
Competencia y
Funcionamiento del
Tribunal de lo Contencioso
Administrativo del
Distrito Federal
Chiovenda define la competencia como: “el conjunto de las causas
que con arreglo a la ley, puede un Juez ejercer en su jurisdicción y
la­­facultad de ejercerla dentro de los límites que le esté atribuida.”
En un sentido jurídico general se alude a una idoneidad atri­­
buida a un órgano de autoridad para conocer o llevar a cabo deter­
minadas funciones o actos jurídicos.
La competencia de los tribunales se determina por la materia, la­
cuantía, el grado y el territorio.
En el caso del Tribunal de lo Contencioso Administrativo del
Distrito Federal se determina únicamente por materia y territorio.
La competencia por materia, se establece en el artículo 31 de
la ley que lo rige, refiriéndose tanto a las Salas Ordinarias como
a las Auxiliares, ya que ambas tienen la misma competencia para
conocer de asuntos de naturaleza administrativa y fiscal.
La fracción I del artículo 31o., se refiere fundamentalmente a la
competencia de las Salas del Tribunal, para conocer de los juicios
en contra de los actos administrativos que las autoridades de la
Admi­nistración Pública del Distrito Federal dicten, ordenen, eje­
cuten o traten de ejecutar, en agravio de personas físicas o morales.
Al respecto, debe destacarse que la fracción que se analiza no
establece como si lo hace la fracción III de este artículo que las
resoluciones administrativas de naturaleza fiscal tenga que ser
definitivas, ya que basta que sea un acto de molestia que cause
agravio al particular para que pueda ser combatido a través del
juicio de nulidad.
La fracción II, del artículo 31, permite a las Salas del Tribunal
conocer de juicios en contra de actos administrativos que emita la
Estructura,
Competencia...
95
Administración Pública Paraestatal del Distrito Federal entendien­
do como tal a los organismos descentralizados, las empresas
de participación estatal mayoritaria y los fideicomisos públicos
(artículo 97 del Estatuto de Gobierno del Distrito Federal), siempre
y cuando actúen con el carácter de autoridades.
La fracción III, del artículo 31, faculta a las Salas para cono­
cer de juicios en contra de las resoluciones definitivas dictadas
por la Administración Pública del Distrito Federal, en materia
tributaria, se debe impugnar las resoluciones que pongan fin al
procedimiento y que por lo tanto determinen la existencia de una
obligación fiscal, se fije ésta en cantidad líquida o se den las bases
para su liquidación, cuando nieguen la devolución de un ingreso
indebidamente percibido o cualesquiera otras que causen agra­
vio en materia fiscal. Es por ello que en esta materia es necesario
que exista un acto definitivo que decida la situación jurídica del
contribuyente para combatirlo y no procederá el juicio contra
meras actuaciones de trámite o que formen parte de la secue­la de
un procedimiento administrativo.
La fracción IV del artículo 31, se refiere a los juicios que pueden
promover los particulares en contra de la falta de contes­tación de las
autoridades a sus promociones cuando hayan transcu­rrido treinta
días naturales, sin dar respuesta a menos que las Leyes y Regla­
mentos fijen otros plazos o la naturaleza del asunto así lo requiera.
Con este juicio sólo se asegura una respuesta de la autoridad sin
poder señalar el sentido que pueda tener esa contestación. Si la
respuesta es negativa, en relación con lo pedido, el particular se verá
obligado a combatir dicha resolución a través de un nuevo juicio.
En las fracciones V y VI del artículo 31 aludido se establece la
competencia de las Salas para conocer de juicios en contra de
resoluciones negativas fictas y en donde se demande la resolución
positiva o afirmativa ficta, en el caso de la primera, se configura
transcurrido el plazo de cuatro meses contados a partir de la recep­
ción por parte de las autoridades demandadas competentes de la
96 Procuración e
Impartición...
última promoción presentada por el o los demandantes a menos
que las leyes fiscales fijen otros plazos y en el caso de la resolución­
positiva ficta cuando lo establezcan las disposiciones legales
aplicables y en los plazos que éstas los determinen.
En la fracción VII del mismo artículo se establece la competen­
cia de las Salas para conocer de juicios en que se impugnen la nega­
tiva de la autoridad a certificar la configuración de la positiva ficta,
cuando así lo establezcan las leyes.
En la fracción VIII del multicitado artículo se otorga compe­
tencia a las Salas del Tribunal para conocer de las quejas por
incumplimiento de las autoridades a las suspensiones que se de­
creten respecto de un acto impugnado en juicio, así como por
el­desacato a las sentencias firmes pronunciadas por las Salas.
La fracción IX, otorga competencia a las Salas para conocer del
recurso de reclamación en contra de acuerdos de trámite que
dictan los Magistrados, los Presidentes de cualquiera de las Salas.
En la fracción X, se da competencia a las Salas del Tribunal
para conocer de los juicios (lesividad) que promueven las autori­da­
des para que sean nulificadas las resoluciones favorables a las
personas físicas o morales.
La fracción XI, del artículo en cita faculta a las Salas para
conocer de resoluciones que dicten negando a las personas físicas
o morales la indemnización a que se contrae el artículo 77 Bis de
la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos,
en dicho precepto se establece que cuando en el procedimiento
administrativo disciplinario se haya determinado la responsabi­
lidad del servidor público y que la falta administrativa haya causa­do
daños y perjuicios a particulares, estos podrán acudir en las de­
pendencias, entidades o a la Contraloría, para que ellas directa­
mente reconozcan la responsabilidad de indemnizar la repa­ración
del daño en cantidad líquida y en consecuencia, ordenar el pago
correspondiente, sin necesidad de que los particulares acudan
a la instancia judicial o cualquier otra.
Estructura,
Competencia...
97
El Estado podrá requerir de los Servidores Públicos el pago
de la indemnización hecha a los particulares.
Si el órgano del Estado niega la indemnización, o si el monto
no satisface al reclamante se tendrán expeditas, a su elección,
la vía administrativa o judicial.
Por último en la fracción XII, del multicitado artículo otorga
competencia a las Salas de este Tribunal para conocer de los demás­
que expresamente señalen ésta u otras Leyes como ejemplo pode­
mos citar la Ley de Propiedad en Condominio de Inmuebles para el
Distrito Federal, que en su titulo VIII denominado de las “San­
ciones” capítulo único artículo 89 establece que los afectados con
la imposición de sanciones podrán a su elección, interponer el
recurso de inconformidad previsto en la ley del Procedimiento
Administrativo del Distrito Federal o intentar el juicio de nuli­dad
ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito Fede­
ral; igualmente en el artículo 13 de la Ley de la Caja de Previsión de
la Policía Preventiva del Distrito Federal se establece que las contro­
versias que surjan por resoluciones de la caja derivadas de las
prestaciones a que se refiere esa ley serán de la competencia del
Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal.
En el artículo 55 de la Ley de Ejecución de Sanciones Penales
para el Distrito Federal en su Título IV, establece el procedimien­
to para la concesión del tratamiento en externación y el beneficio
de libertad anticipada se iniciará de oficio o a petición de parte y
la resolución definitiva que emita la autoridad ejecutora surtirá
sus efectos desde luego y puede ser impugnada ante el Tribunal
de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal, estableciendo
el artículo 50 de la Ley en cita que por cada dos días de tra­bajo se
hará la disminución de uno de prisión, siempre que el recluso
observe buena conducta o participe regularmente en las activida­
des educativas que se organicen en el establecimiento y revele por
otros datos su efectiva readaptación social; esta última será, en
todo caso el factor determinante para la concesión o negativa de
98 Procuración e
Impartición...
la remisión parcial de la pena que no podrá fundarse exclusiva­
mente en los días de trabajo, en la participación en actividades
educativas y en el buen comportamiento del sentenciado.
En el artículo 108 de la Ley de Procedimiento Administrativo
del Distrito Federal, se señala que los interesados afectados por los
actos y resoluciones de las autoridades administrativas podrán a
su elección interponer el recurso de inconformidad previsto en
esa Ley o intentar el juicio de nulidad ante el Tribunal, también
contempla dicha Ley en su artículo 128 que contra la resolución
que recaiga al recurso de inconformidad, procede el juicio de nuli­
dad ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito
Federal.
El artículo 93 de la Ley Federal de Responsabilidades de los
Servidores Públicos vigente únicamente para el Distrito Federal,
establece que el servidor público afectado por los actos o resolucio­
nes de la Contraloría General de la Administración Pública del
Distrito Federal o de los órganos de control interno, podrá, a su
elección, interponer el recurso de revocación, previsto en dicha
ley o impugnar dichos actos o resoluciones ante el Tribunal de lo
Contencioso Administrativo del Distrito Federal.
También es competente para conocer de las resoluciones que
emita la Caja de Previsión para Trabajadores a Lista de Raya del
Departamento del Distrito Federal relativas a las pensiones (por
jubilación, retiro por edad y tiempo de servicios como por causa
de muerte).
La Sala Superior además de ser el Órgano Supremo del Tribu­nal
de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal, es la única
instancia competente para fijar jurisprudencia, de confor­midad
con lo que establecen los artículos 9 del Estatuto de Gobierno del
Distrito Federal, 24 fracción I y 142 de la Ley Orgánica que rige
a dicho Tribunal, jurisprudencia que se fija con tres precedentes.
La Sala Superior es competente para resolver los recursos
de apelación que puedan promoverse o interponerse en contra de
Estructura,
Competencia...
99
las resoluciones que dicten las Salas de primera instancia, que
decreten o nieguen sobreseimiento, las que resuelvan el juicio o la
cuestión planteada en el fondo y las que ponga fin al procedimiento
(artículo 137 de la Ley del Tribunal). Igualmente es competente
para conocer el Recurso de Reclamación cuando se interponga en
contra de una sentencia dictada para hacer efectiva una garantía
otorgada con motivo de una suspensión en términos del artículo
106 de la Ley en cita.
También conoce del Recurso de Reclamación previsto en el
artículo 134 de la Ley de la materia, que se interponga en contra de
los acuerdos de trámite dictados por el Presidente de esa Sala o
de cualquiera de sus integrantes.
La Sala Superior conoce de las excitativas de justicia que pro­
muevan las partes, cuando los Magistrados no formulen el pro­yecto
de resolución que corresponda o no emitan su voto respecto de
proyectos formulados por otros Magistrados dentro de los plazos
señalados por la Ley.
Califica las recusaciones, excusas e impedimentos de los Ma­
gistrados del Tribunal y, en su caso, designa al magistrado que
deba sustituirlo; y establece las reglas para la distribución de los
asuntos entre las Salas del Tribunal, así como entre los Magistra­
dos Instructores y Ponentes.
Para hablar de la competencia del Tribunal de lo Contencioso
Administrativo del Distrito Federal, es necesario hablar de la Cons­
titución y de las garantías de seguridad jurídica consagradas en
los artículos 14 y 16 de nuestra norma suprema.
Mantener y consolidar las instituciones jurídicas para que
cumplan sus objetivos fundamentales, contribuye a la fortaleza
del Estado de derecho; por medio del estudio de la legislación,
comprendemos los deberes, derechos y obligaciones, que corres­
ponsablemente tenemos gobernantes y gobernados, entre los
que destacan, la estricta observancia de la ley y la defensa del
justiciable frente a la administración pública.
100 Procuración e
Impartición...
Un aspecto importante de la gobernabilidad está caracteriza­
do por los espacios creados por el sistema de justicia, en donde el
Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal,
desem­peña una función muy importante al permitir que las per­
sonas físicas o morales afectadas por un acto de autoridad que
emita cualquier autoridad del Gobierno del Distrito Federal, pueda
ser enmendado, o dejado sin efectos, mediante resoluciones que se
justan al marco jurídico vigente.
La esfera de atribuciones concedidas al Poder Público y las
limitaciones que le son impuestas, por una parte, así como el con­
junto de derechos fundamentales que se reservan a los goberna­
dos, por la otra, se exteriorizan o se plasman en un documento
so­lemne llamado Constitución.
En este sentido, la Constitución es el conjunto de normas que
tiene por objeto armonizar las relaciones de los órganos del Poder
Público entre sí y de éstos con los gobernados, consignando un mí­
nimo de derechos indispensables para que estos últimos puedan
desenvolver libremente su personalidad y lograr sus propios fines.
Así pues, dentro de nuestro régimen de derecho, la Constitu­
ción Política de los Estados Unidos Mexicanos, es por excelencia
la Norma Fundamental de la cual depende la eficacia del orden
jurídico en su conjunto, última razón de validez de todo el sistema
normativo mexicano.
El carácter fundamental que concede a la Constitución la nota
de Ley Suprema del Estado, supone que todo el ordenamiento jurídi­
co se encuentra condicionado por las normas constitucionales, y
que ninguna autoridad tiene más poderes que los que le re­conoce
la Constitución, pues de ella depende la legitimidad de todo el siste­
ma de normas e instituciones que componen aquel ordenamiento.
En suma, la constitución es la Norma Fundamental sobre la
cual gira la eficacia y licitud de toda la estructura del Derecho
Positivo Mexicano, sin la cual ésta no sólo carecería de validez, si
no que además tendería a desaparecer. De ahí que no puede
Estructura,
Competencia...
101
ser válido ningún acto de autoridad que resulte contrario a la
Constitución.
Las garantías individuales de seguridad jurídica plasmadas en
los artículos 14 y 16 de la Constitución, son sin duda las que mayor
protección imparten al gobernado frente a los abusos del Poder Pú­
blico, dentro de nuestro sistema constitucional.
Para los fines del presente artículo, haremos referencia exclusiva­
mente a las garantías de seguridad jurídica, conocidas comúnmente
como garantía de previa audiencia y garantía de legalidad, consagra­
das respectivamente, en los artículos anteriormente citados.­
La Garantía de Audiencia
Con toda razón se ha dicho que la garantía de audiencia consti­
tuye­la defensa primordial con que cuentan los gobernados frente
a los actos del Poder Público que tiendan a privarlo de sus dere­
chos e intereses.
La garantía de audiencia, se encuentra consignada en el segun­
do párrafo del artículo 14 Constitucional, que literalmente expresa:
“Nadie podrá ser privado de la vida, de la libertad o de sus propie­
dades, posesiones o derechos, sino mediante juicio seguido ante
los Tribunales previamente establecidos, en el que se cumplan las
for­­malidades esenciales del procedimiento y conforme a las leyes
expedidas con anterioridad al hecho”.
Del párrafo transcrito, el Maestro Burgoa infiere cuatro garan­
tías específicas de seguridad jurídica, a saber:
1.El derecho que tiene toda persona, a quien se pretenda privar de
alguno de los bienes jurídicos tutelados por el precepto constitu­
cional, de que previamente se siga un juicio.
2.Que dicho juicio se substancie ante tribunales previamente esta­
blecidos.
102 Procuración e
Impartición...
3.Que en el mismo juicio se observen las formalidades esenciales
del procedimiento.
4.Y que el fallo respectivo se dicte conforme a las leyes existentes
con antelación al hecho o circunstancias que hubiere dado motivo
al juicio.
Titular del Derecho de Audiencia. La garantía de audiencia,
como derecho subjetivo público, corresponde a todo sujeto como
en los términos del artículo 1o. Constitucional. En este caso existe
una relación de supra subordinación, que implica la aparición
de actos de autoridad que tienen como ámbito de operabilidad
la esfera jurídica del particular.
El Acto de Privación. Los actos de privación son aquéllos en
que el Estado produce una merma, menoscabo o disminución
en la esfera jurídica del gobernado. Para que el acto de autoridad­
pueda considerarse “acto de privación” en los términos del artícu­
lo 14 Cons­titucional, es necesario que el menoscabo o impedimen­
to constituyan el fin último definitivo y natural del acto.
Bienes Jurídicos Tutelados por la Garantía de Audiencia. El
Segundo párrafo del artículo 14 de la Ley Fundamental tutela los
siguientes bienes jurídicos:
a)Libertad. Se salvaguarda la libertad del gobernado en la vida. Se
garantiza la existencia misma del gobernado frente a los actos
de autoridad que pretendan hacer de ella objeto de privación.
b)Cualquiera de sus manifestaciones, frente a los actos del Poder
Público que tiendan a coartarla.
c) La Propiedad. Se tutelan derechos subjetivos fundamentales que
de ella se derivan: el uso, disfrute y disposición de la cosa misma.
d)La Posesión. En este caso se protege tanto a la posesión originaria
(o a título de dueño) como a la posesión derivada.
Estructura,
Competencia...
103
Alcance Protector de la Garantía de Audiencia. Aunque de la
interpretación literal del precepto constitucional pudiera pensar­
se que la garantía de audiencia sólo es operante frente a los “tribu­
nales” propiamente dichos, es decir, frente a los órganos juris­
diccionales formal y materialmente instituidos, lo cierto es que
también opera frente a los actos de las autoridades administrati­
vas, que tiendan a privar a los gobernados de cualquier bien
jurídico tutelado por dicha disposición constitucional.
La Garantía de Legalidad
El artículo 16 de la Constitución General de la República, en su­
primer párrafo establece: “Nadie puede ser molestado en su per­
sona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino en virtud de
man­­damiento escrito de la autoridad competente, que funde y
motive la causa legal del procedimiento”.
Esta garantía de seguridad jurídica conocida como garantía
de legalidad, implica que, para que los actos de la autoridad
puedan ser considerados plenamente válidos o legales, deben
contener determinados requisitos sin los cuales no podría surtir
efectos. Dichos requisitos consisten en un mandamiento escrito
de autoridad competente, que funde y motive la causa legal del
procedimiento.
La garantía de legalidad es la que mayor protección le otorga al
gobernado, a tal punto que la garantía de competencia queda com­
prendida dentro de ella. Mediante la garantía de legalidad se tutela
todo el sistema de derecho objetivo, desde la Constitución hasta los
reglamentos administrativos más específicos los elemen­tos jurídi­
cos que la componen son:
Titular de la Garantía de Legalidad. El término “nadie”, equivale a nin­
gu­na persona, ningún gobernado, por lo tanto, el titular de esta garan­
tía es todo gobernado, es decir, todo sujeto cuya esfera jurídica sea
susceptible de ser objeto de algún acto de autoridad.
104 Procuración e
Impartición...
El Acto de Autoridad. El acto de autoridad a que se refiere la disposi­
ción constitucional implica una molestia o una perturbación o afec­
tación de la persona, familia, domicilio o papeles del gobernado.
Mandamiento Escrito. El acto autoritario de molestia siempre debe
derivarse de un mandamiento u orden escritos. Consecuentemente,
cualquier mandamiento u orden verbal que tiendan a molestar los
bienes jurídicos tu­­telados por la garantía de legalidad, devienen en
atentatorios de la misma.­Por lo tanto todo agente de autoridad debe
obrar siempre con base en una orden escrita.
Además, el mandamiento escrito debe contener la firma autén­tica del
funcionario público que lo expida, sin que pueda aceptar­se que se
cumpla con la exigencia constitucional, estampando en el documento
oficial respectivo una simple firma facsimilar.
A este respecto, la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de
la Nación ha establecido que la firma que calce cualquier orden escrita
debe ser siempre auténtica, ya que no es sino el signo­gráfico con el
que, en general, se obligan las personas en todos los actos jurídicos
en que se requiere la forma escrita, de tal manera que carece de valor
una copia facsimilar, sin la firma auténtica del original del documen­
to en que la autoridad impone un crédito a cargo del causante, por no
constar en mandamiento debidamente fundado y motivado.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación ha ratificado el prin­
cipio de legalidad en jurisprudencia firme:
“Autoridades. Las autoridades sólo pueden hacer lo que la ley les
permite”.­
“Autoridades Administrativas. Los actos de las autoridades admi­
nistrativas, que no estén autorizados por ley alguna, importan una
violación de garantías.”
Ahora bien, conforme con el principio de legalidad, las atribu­
ciones de las autoridades deben imperiosamente estar determi­
nadas por una ley, formal y materialmente constituida, es decir,
que emane del Poder Legislativo (Federal o Estatal, según el caso)
Estructura,
Competencia...
105
y que tienda a crear, modificar o extinguir una situación jurídica
general.
Por lo tanto, todo Órgano del Estado que tenga como caracte­
rística el ser autoridad y esté en posibilidad de emitir actos con tal
carácter que afecten la esfera jurídica de los particulares, debe ser
creado única y exclusivamente por el Poder Legislativo, al que la
propia Constitución confiere las facultades de creación de órganos
de autoridad. Desde este punto de vista, no es posible aceptar que
se puedan crear dependencias oficiales ni autoridades ni conferir
atribuciones por medio de reglamentos, circulares, acuerdos, ma­
nuales de organización, ni mediante convenios de coordinación o
acuerdos delegatorios de facultades.
Los reglamentos constituyen conjuntos de preceptos expedidos
por el Poder Ejecutivo, en uso de una facultad especial con­signado
en la Constitución, que tienen como objeto facilitar la exacta obser­
vancia de las leyes emanadas del Poder Legislativo. De­esta suer­
te, ningún reglamento puede ir más allá del contenido de la ley
ni con­trariar su texto y por ende las atribuciones de autoridades
con­signadas en un reglamento no tendrán validez legal alguna,
si las mismas no están respaldadas por una ley emanada del
Legislativo.
Lo anterior, desde luego no debe confundirse con las facultades
que tiene el Ejecutivo para crear empleos o puestos remunera­
dos, cuando éstos son incluidos en el presupuesto de egresos
correspon­diente aprobado por el Legislativo. Esto es, la posibilidad
legal de crear empleos no autorizados al Ejecutivo para crear
órganos de go­bierno con autoridad e imperio, ya que como se ha
expresado, esta facultad compete de manera exclusiva al Poder
Legislativo.
En conclusión, el Ejecutivo puede crear, mediante su facultad
reglamentaria, puestos administrativos o dependencias guber­
namentales que ayuden en las tareas de aplicar las leyes; pero
esos órganos no serán autoridad ni tendrán el imperio legal del
106 Procuración e
Impartición...
Estado para causar molestias a los particulares en su persona,
bienes­o derechos, no pudiendo en consecuencia, por medio de sus
titulares, firmar mandamientos escritos de autoridad, puesto que
tales mandamientos sólo podrán ser firmados por autoridades
que hayan sido expresamente creadas y dotadas de competencia
por el Congreso de la Unión.
Por otra parte, las circulares se expiden con propósitos mera­
mente administrativos; generalmente contienen un conjunto de
disposiciones de carácter interno, dirigidas por los órganos supe­
riores hacia los inferiores para especificar la interpretación de
normas, acuerdos, decisiones o procedimientos.
Los instructivos son prescripciones que los superiores dan a los
funcionarios colocados bajo su autoridad en lo que concierne a
la interpretación de las leyes y reglamentos.
Los acuerdos son órdenes que los superiores expiden a los
subordinados para que realicen determinados actos, dentro de
las atribuciones que la ley les confiere a tales subordinados. Sin
embargo, debe aclararse que los acuerdos de ninguna manera per­
miten el encargo del cumplimiento de funciones que la norma
confiere como propias al superior, de manera que un subordinado
pueda realizar los actos que solamente a aquél le corresponden.
En principio, las facultades que la ley confiere a una autoridad,­
no son delegables y por tanto, los acuerdos delegatorios que común­
mente confieren las autoridades administrativas a sus subordina­
dos, carecen de sustento jurídico y de validez legal. De acuerdo con
el principio de legalidad, según el cual las autoridades solamen­te
pueden hacer lo que la ley les permite, para que sea fa­ctible la
delegación de facultades es necesario que una norma legal facul­te
expresamente tal delegación, de lo contrario la dele­gación devendrá
en atentatoria del artículo 16 Constitucional.
Además para que el titular de un órgano de autoridad pueda
delegar algunas de sus funciones a favor de un subordinado, es
menester que estas funciones no deban ser ejercidas de manera
Estructura,
Competencia...
107
exclusiva por sus titulares. La Segunda Sala de la Suprema Corte
de Justicia de la Nación ha sustentado la siguiente tesis de juris­
prudencia:
“Los titulares de las Secretarías y Departamentos de Estado pueden
delegar sus facultades a favor de funcionarios subalternos; pero si
bien es cierto que pueden hacer tal delegación, también lo es que
ella es permisible mientras no contravengan disposiciones legales
que expresamente se refieran a facultades que se hubiesen señalado
a determinadas autoridades que específicamente fueron creadas
para desempeñarlas, pues lo contrario implicaría que el Código
Aduanero pudiera ser modificado con el pretexto de la susodicha de­
legación de facultades, con lo cual la autoridad administrativa esta­
ría legislando a su arbitrio con invasión clara de las atribuciones que
sólo competen al Poder Legislativo”.
En suma, conforme al principio de legalidad, es posible afirmar
categóricamente que los órganos de la Administración Pública
de ninguna manera pueden crear autoridades ni conferir, delegar
fa­cultades o determinar competencias por medio de reglamentos,
circulares, instructivos, acuerdos u otras disposiciones de carác­ter
formalmente administrativo.
Concepto de Fundamentación. Por fundamentar un acto, se
entiende la invocación de los preceptos específicos de la ley en que la
autoridad se sustente o apoye para emitir los actos de molestia a que
se refiere el artículo 16 de la Constitución General de la República.
En otras palabras, la fundamentación legal consiste en que
los actos que originan la molestia de que habla el artículo 16
Constitucional, deben basarse en una disposición legal que prevea
la situación concreta para la cual sea procedente realizar el acto
de autoridad, es decir, que exista una norma legal que lo autorice.
La fundamentación, por tanto, es una consecuencia directa del
principio de legalidad, según el cual las autoridades sólo pueden
hacer lo que las leyes les permitan. La Suprema Corte de Justicia­
108 Procuración e
Impartición...
de la Nación ha establecido: “las autoridades deben gozar de fa­
cultades expresas para actuar, de modo que no tenga que inferirse
la permisión legal para realizar determinados actos.”
El destacado jurista Ignacio Burgoa señala que la exigencia de
fundar legalmente los actos de molestia, impone a las autorida­des­
diversas obligaciones, que se traducen en las siguientes con­di­
ciones:
a)Que el órgano del Estado del que tal acto provenga, esté investido
con facultades expresamente consignadas en la norma jurídica (ley
o reglamento) para emitirlo.
b)Que el propio acto se prevea en dicha norma.
c) Que su sentido y alcance se ajusten a las disposiciones normativas
que lo rijan.
d)Que el citado acto se contenga o derive de un mandamiento escrito,
en cuyo texto se expresen los preceptos específicos que lo apoyen.
Sobre el particular la Suprema Corte de Justicia de la Nación
ha emitido las siguientes tesis, que en su parte conducente, a conti­
nuación se transcriben:
“Cuando el artículo 16 de nuestra Ley Suprema previene que nadie
puede ser molestado en su persona, sino en virtud de mandamiento
escrito de autoridad competente que funde y motive la causal legal
del procedimiento, está exigiendo a las autoridades no simplemente
que se apeguen, según criterio escondido en la conciencia de ellas,
a una ley, sin que se conozca de qué ley se trata y los preceptos de
ella, que sirvan de apoyo al mandamiento relativo de las propias
autoridades, pues esto ni remotamente constituiría garantía alguna
para el particu­lar. Por lo contrario, lo que dicho artículo les está
exigiendo es que citen la ley y los preceptos de ella en que se apoyen,
ya que se trata de que justifiquen legalmente sus proveídos ha­ciendo
ver que no son arbitrarios. Forma de justificación tanto más nece­
saria, cuanto que dentro de nuestro régimen constitucional las­
Estructura,
Competencia...
109
auto­ridades no tienen más facultades que las que expresamente
les atribuye la ley.”
“El requisito constitucional de legal fundamentación, estri­ba no en la
invocación global de un código o de un cuerpo de dispo­siciones legales,
pues de ser esto así, bastaría que los mandamien­tos civiles se funda­
mentaran diciendo “con apoyo en las disposiciones del Código Civil”,
las procesales penales “con apoyo en las disposiciones del Código
de Procedimientos Penales”, etcétera; lo cual evidentemente dejaría al
particular en igual desamparo que si la garantía de funda­mentación
no existiera, así como expuesto a los desmanes de la po­­testad pública,
al no sujetarse ésta al cause institucional de dicha garantía”.
“El requisito de fundamentación que exige el artículo 16 constitu­
cional, no se satisface con la citación de la ley de la materia, en que se
haya apoyado la autoridad responsable, sino que es indispensable,
para que el acto pueda reputarse fundado, que precise, en concreto,
el precepto legal en que pretenda sustentarse.”
“Si en una resolución no se cita ningún precepto legal que se hubi­
era tomado en consideración para dictarla, procede conceder al
quejoso el amparo y protección de la Justicia Federal que solicita,
para el efecto de que la autoridad responsable dicte la resolución
que proceda, pero fundándola debidamente en la ley”.
Concepto de Motivación. Por motivar un acto debe entenderse
el señalamiento de las causas materiales o de hecho que la autoridad
haya tenido en cuenta para emitir el acto de molestia. Es decir,
que deben indicarse de modo claro y preciso las circunstan­cias y
modalidades del caso particular, que sirvieron de base a la auto­ridad
para concluir que la situación concreta del gobernado, encuadra
dentro del marco general establecido por la ley.
En tal virtud, si la situación concreta del gobernado no se en­
cuentra dentro del supuesto normativo previsto por la ley, el acto
de autoridad será violatorio del artículo 16 Constitucional, debido
a la falta de motivación legal, no obstante la invocación de los fun­
damentos legales.
110 Procuración e
Impartición...
Los requisitos de fundamentación y motivación legales, deben
concurrir necesariamente en cualquier acto de autoridad que impli­
que molestias para el particular, a fin de que aquél no entrañe
violación a la garantía de legalidad consagrada por el artículo 16
Constitucional.
“Además, la invocación de los preceptos legales aplicables al caso
concreto, así como el señalamiento de las causas materiales o de
derecho que hayan dado lugar al acto autoritario deben contener­
se pre­cisamente en el mandamiento escrito en que se contenga el acto
de autoridad de que se trate, sin que sea dable expresarlos en otro
do­cumento distinto, a efecto de que el particular esté en aptitud de
producir su defensa. Así lo ha definido la Segunda Sala de la Supre­
ma Corte de Justicia de la Nación, en la tesis que a continuación
se transcribe:
“Si el mandamiento que se impugna no se encuentra apoyado
en ninguna disposición legal, resulta violatorio, en perjuicio del
quejoso, de la garantía de legalidad que establece el artículo 16
Constitucional, en atención a que debe ser el acto reclamado
fundado y motivado al producirse, sin que su fundamentación
y motivación puedan expresarse con posterioridad.”
La Causa Legal del Procedimiento. Finalmente, se entiende por
causa legal del procedimiento, el acto o la serie de actos que pro­
vocan o pueden provocar molestia en la persona, familia, domicilio,
papeles o posesiones del gobernado, realizados por una autoridad
que tenga amplias facultades conforme a la ley para emitir dicho
acto de molestia y que éste se encuentre fundado y motivado.
Refiriendo la garantía de legalidad a los actos administrativos,­
el maestro Miguel Acosta Romero apunta que de dicho principio­
constitucional, se desprende una serie de requisitos que debe satis­
facer el acto administrativo, cuando el mismo va dirigido a los
Estructura,
Competencia...
111
particulares y limita su esfera jurídica, y que deben cumplirse por
parte de las autoridades que lo emitan. Tales requisitos son los
siguientes:
a)Ser emanado de una autoridad competente, es decir, con facultades­
legales para ello.
b)Adoptar la forma escrita, generalmente es mediante oficio, en el
que se consignan las características del acto y sus límites, así como
la fundamentación y motivación, y suscrito por el funcionario
competente (firma autógrafa).
c)La fundamentación legal, es decir, que la autoridad cite o invoque
los preceptos legales conforme a los cuales el orden jurídico le per­
mite realizar el acto dirigido al particular.
d)La motivación, la autoridad debe señalar cuáles son las circunstan­
cias de hecho o de derecho, inmediatas anteriores al acto adminis­
trativo que lo originaron.
La Ley que rige al Tribunal de lo Contencioso Administrativo
del Distrito Federal, recoge esos principios en su artículo 127 al
establecer como causas de nulidad de los actos impugnados: la
incompetencia de la autoridad, el incumplimiento y omisión de
las formalidades legales, violación de la Ley o no haberse aplica­
do la debida, así como la arbitrariedad, desproporción, injusticia
ma­nifiesta o cualquier otra causa similar.
En mi experiencia como Magistrado, he podido observar, que
las autoridades de la Administración Pública del Distrito Federal al
emitir sus actos o resoluciones, con demasiada frecuencia violan en
perjuicio de los gobernados las garantías de audiencia y legalidad,­
ello obedece a que en los juicios que se promueven ante el Tribunal
de lo Contencioso Administrativo, los justiciables obtengan en
un alto porcentaje sentencia favorable en la que desde luego, se
condena a la autoridad a restituir al actor en su derecho indebida­
mente afectado.
112 Procuración e
Impartición...
Para concluir, considero que nuestro país se construye el Es­tado
constitucional democrático contemporáneo, en donde el respeto a
los derechos humanos resulta pieza clave para la impartición de
justicia, así como el derecho al acceso a la informa­ción pública y la
rendición de cuentas; por lo que con motivo del año 2010 en que se
festejó el Bicentenario de la Independencia de nuestro país y el
Centenario de la Revolución Mexicana, así como el año de acceso
a la justicia, considero oportuno invitar a todos los ciudadanos del­
Distrito Federal a hacer valer sus derechos cuando consideren
que algún acto de autoridad proveniente de la Administración Pú­
blica del df., lesione su esfera jurídica, ya que el Tribunal de lo
Contencioso Administrativo del Distrito Federal ha sido conside­
rado como un instrumento que fortalece el Estado de derecho y
a la democracia.
La justicia laboral local en el
Distrito Federal (Privilegiando la
Conciliación)
Lic. Ramón Montaño Cuadra
Presidente de la Junta Local de
Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal
L
a justicia laboral en materia federal, no sólo en el df, sino
en toda la República Mexicana, está administrada por
la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, a través de cada­
una de las Juntas Federales de Conciliación y Arbitraje, y en­
cada Entidad por las Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje,
siendo éstas, en mayoría, Órganos Autónomos que se regulan
de manera general por la Constitución de los Estados Unidos Mexi­
canos y por la Ley Federal del Trabajo,con su fundamento particu­lar
en el Artículo 123 de la Carta Magna.
El Artículo 123 Constitucional, en su fracción XX, faculta a­
las Juntas de Conciliación y Arbitraje, tanto federales como locales­
a dirimir los conflictos entre el capital y el trabajo, conflictos que­
ofrecen características diversas y que encierran en muchos casos
problemáticas complejas, difíciles de resolver, situación que se
deriva de una rancia tendencia a dejar que los conflictos terminen­
generalmente en procesos judiciales largos y costosos para todas
las partes involucradas, en este caso: el actor, el demandado y el
gobierno, tendencia que se ha agravado por la situaión económi­
115
ca, dando como consecuencia, que en la mayoría de las Juntas
Locales y Federales, existan un número de juicios en trá­mite que
impide se cumplan las premisas de que estos juicios sean expeditos
y justos.
Una de las razones, del porque los juicios se hacen “añejos”,
es que no se ha observado al proceso de conciliación, como una
herramienta que logre que estos conflictos se resuelvan de mane­
ra rápida y que además se logre mediante este proceso conci­
liatorio garantizar los derechos de los trabajadores y patrones,
enmarcados en las leyes de la materia, por lo tanto, es un objetivo
sustantivo de la actual Presidencia de esta junta, el privilegiar
el proceso conciliatorio y de esa forma iniciar la implantación
de un nuevo enfoque que evite la tendencia a que los conflictos
se conviertan en juicios, en donde generalmente exista una parte
ganadora y una parte perdedora, al privilegiar la conciliación, se
busca un resultado en la que todos ganen en tiempo y en dinero.
Al respecto, La Junta Local de Conciliación y Arbitraje del
Distrito Federal, ha implantado como primordial proceso la conci­
liación, tanto para los juicios rezagados, como para los conflictos
nuevos, situación que ha requerido principalmente dos cosas, la
primera concentrar este proceso conciliatorio en un área especia­
lizada, en la que participan conciliadores, que previamente han
sido capacitados y que cuentan con amplios conocimientos y
experiencia, cubriendo así con el perfil adecuado para llevar al­cabo
esta importante función; así mismo, se ha dispuesto la revisión
de los juicios en trámite, esto a fin de que tanto en los conflictos
colectivos, como en los individuales, y con fundamento en lo que
observa el Artículo 901, de la Ley Federal del Trabajo, el cual dispone
que la conciliación es válida en cualquier etapa del procedimiento,
se logren acuerdos entre las partes actora y deman­dada, siempre
sobre la base de garantizar los derechos labo­rales del­trabajador
y la imparcialidad para el patrón, cumpliendo con la premisa de
116 Procuración e
Impartición...
“Impartir Justicia Social”, y que para definir Justicia, parafrasea­
mos al gran jurisconsulto Ulpiano, quien así definió a la Justicia:
“Constante y Perpetua Voluntad de Dar a Cada Quien lo Suyo”, y
que en materia laboral, es el firme propósito de esta Junta Local.
Este nuevo enfoque de privilegiar la búsqueda para que los
conflictos laborales se resuelvan de manera rápida y con benefi­
cios para todas las partes involucradas, tiene también la finalidad
de recuperar una parte esencial de las razones que dieron origen
a las Juntas de Conciliación y Arbitraje, a las que inicialmente solo
se les reconocía la facultad para conciliar y no para juzgar, y que
lamentablemente cuando se le ha concedido mayores atribucio­
nes que las de conciliar, este proceso conciliatorio, paso a segundo
término, generando juicios largos y costosos para todos los que en
ellos participan de ahí que en la actualidad se estén redoblando
esfuerzos por lograr, conciliar el mayor número de juicios posible,
situación que hace necesaria una mayor capacitación al funciona­rio
público que integra el Tribunal y de esa forma conseguir concilia­
ciones eficaces y con los mejores resultados posibles para todos,
buscando siempre cumplir con el esquema de “Impartir Justicia
Social”.
La base legal para este impulso a retomar la conciliación como
la herramienta primordial para dirimir los conflictos laborales­­
en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del d.f., se desprende
del Artículo 876, Fracción I, el cual dispone que:
Artículo 876. La etapa conciliatoria se desarrollará en la siguiente
forma:
I.Las partes comparecerán personalmente a la Junta, sin abo­gados
patronos, asesores o apoderados;
La justicia
laboral...
117
Situación que ha sido superada por la Jurisprudencia, en el sen­
tido de que “Las Partes” en esa etapa pueden comparecer a través de
sus abogados, pero la intención de concilia­ción esta latente, hecho
que se corrobora; toda vez, que la Frac­ción II dispone:
II.La Junta intervendrá para la celebración de pláticas entre las partes
y exhortará a las mismas para que procuren llegar a un arreglo
conciliatorio;
Al igual que en materia de Huelga, en donde acudir a la audi­
encia conciliatoria es obligatorio al grado de que la ausencia de­la
representación de los trabajadores, provoca que no corra el plazo
establecido para el estallamiento de la huelga, como lo señala el
Artículo 927 Fracción II.
La posición reiterada de esta Junta, para dirimir los conflictos
laborales de que tenga conocimiento, será la de privilegiar la “conci­
liación”, por lo que impulsará todas las acciones necesarias, a fin
de lograr soluciones a los conflictos, sin que esto implique la re­
nuncia de derechos de los trabajadores, procurando así la “Justicia­
La­boral”, sin llegar a sustanciar el procedimiento y en caso de no­
lograrlo, se pasará a la siguiente etapa, que se sustenta en el­Ar­
tículo 841, de la Ley Laboral, que faculta a la Junta, a emitir laudos­
sin someterse a reglas estrictas para su interpretación, si no re­
solver a conciencia, a verdad sabida y buena fe guardada, pero
expresando los motivos y fundamentos legales que lo apoyen.
En efecto como se puede observar, la ley laboral es tutelar de
la clase trabajadora, por lo que la función de la Junta es buscar la­
solución practica de los asuntos, privilegiando la equidad y la con­
ciliación, que de la juridicidad, no obstante que la mayoría de los
juristas en la materia, consideran que las Juntas de Conciliación
y Arbitraje son verdaderos tribunales que asumen una verdadera
función judicial.
118 Procuración e
Impartición...
Sin embargo, en teoría podemos decir que las Juntas, son verda­
deras procuradoras de la justicia laboral, habrá quien no esté de
acuerdo con ello, porque la realidad está a veces más allá que la
teoría, es decir, las Juntas en teoría como ya se indicó conocen
de asuntos de equidad y justicia social, cuyo objetivo es realizar
el fin del derecho, pero en la práctica se opina que son verdaderos
tribunales que imparten justicia laboral, cuando se lleva a cabo
todo un procedimiento en un juicio laboral.
En efecto, la función de la Junta es la impartición de justicia,
de manera pronta y expedita, de los conflictos labores que se pre­
sentan, primero mediante la conciliación y sólo si este proceso
conciliatorio fuese rebasado, entonces mediante un Juicio Labo­
ral, cuidando siempre que un interés no predomine respecto del
otro, armonizando el equilibro entre los factores de la producción
capital-trabajo, mediante el dialogo y la negociación para alcanzar
acuerdos benéficos para ambos sectores, y evitar que las controver­
sias se prolonguen, y así poder reducir de manera sus­tancial
los 72 mil asuntos que actualmente se procesan en la Junta,
en esa tesitura el impartir justicia, es un fin que día a día debe
estimularse, como actualmente se está haciendo, mediante la
conjunción del esfuerzo, los conocimientos y la experiencia del
personal que integra este Órgano Autónomo, impulsando así una
transformación, tangible y verdadera en un sistema de impartición
de justicia laboral, calificado de lento, opaco y con mala fama, a
un tribunal con verdadera mística de servicio e imparcialidad.
Es por ello, que la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del
Distrito Federal, no puede, ni debe apartarse de su origen, basada
en una actitud tutelar de un derecho de clase, cuyo propósito
es el de actuar como una instancia conciliatoria potestativa,
pero­también como órgano regulador que determina la razón de
acuerdo al conflicto del que conocen y las pruebas aportadas
por las partes.
La justicia
laboral...
119
Resulta importante destacar el hecho de que la Junta Local
de Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal, es el Tribunal La­
boral Local que atiende y resuelve la mayor cantidad de asuntos
laborales de todo el país.
Uno de los retos históricos más grandes, que ha tenido la
Junta, es el rezago en el trámite y solución de los asuntos que se
han generado, esto en virtud de un notable incremento sistemático
en la cantidad de juicios planteados año, tras año, lo que está
determinado por varias circunstancias, entre otras: la compe­
tencia territorial que abarca este tribunal, aunado al incremento
demográfico y de actividad económica que ha tenido la Ciudad de
México, así como a las crisis político-financieras que de manera
coyuntural han afectado la generación de empleos, y la estabili­
dad de los mismos, siendo la más reciente la que se originó en el
año 2008 y que a la fecha sigue sin resolverse.
Estas crisis se manifiestan principalmente en despido masivo
de trabajadores, derivadas de la insolvencia de las empresas
para afrontar la caída de sus ingresos, sus costos financieros, de­
inventarios, deudas, y desde luego de su nómina, entre los princi­
pales, despidos que derivan un incremento muy importante en
las demandas presentadas en la Junta, y que dadas las circuns­
tancias económicas y financieras de las empresas que lo hacen,
reduce de manera importante que estos conflictos se resuelvan
de manera óptima desde el punto de vista de los montos de indem­
nización que de acuerdo a la ley le corresponde a los trabajadores,
por lo que resulta ideal lograra convenios al través del proceso de
conciliación que si bien no resulta el mejor para los trabajadores,
evita iniciar juicios que al final resultan ociosos en virtud de la
insolvencia del patrón, circunstancia que fortalece la intención de
esta Junta a privilegiar convenios al través de la Conciliación.
Es de destacar, que para eficientar el servicio que este Tribu­
nal Laboral brinda a la ciudadanía una de las soluciones es abatir
el rezago imperante, para ello, la Junta ha intensificado la función
120 Procuración e
Impartición...
conciliatoria con el propósito de encontrar formas satisfactorias e
impedir que las controversias se prolonguen, ocasionando costos
que repercutan negativamente en las situaciones económicas de
las empresas o que perjudiquen el bienestar de los trabajadores.
Otro aspecto que le da solidez a la idea de que sea a través de la
conciliación el que se resuelvan la mayoría de los conflictos labo­
rales presentados a la junta es que esta alternativa, desprende
beneficios a favor de ciertos principios de derecho como son los
de economía y celeridad procesal, los de pronta y expedita impar­
tición de justicia, así mismo, son razones de peso los efectos
positivos que tiene sobre los campos político, social y económico.
En acatamiento a esos principios, este Tribunal Laboral, ha
aplicado una serie de medidas tendientes a abatir las excesivas
cargas de trabajo, una de las principales, consistió en la emisión
de la Circular 08/2010, de fecha 27 de mayo del año en curso, di­
rigida a los 17 Presidentes de las Juntas Especiales, mediante la
cual se les instruyó, para que con su personal jurídico promuevan­
la conciliación de manera permanente, al inicio y durante las
audiencias de su conocimiento, además de impulsarla mediante
el envío constante de los expedientes a la Secretaría Auxiliar de
Conciliadores, canalizando a las partes para ser atendidas por
los Funcionarios Conciliadores, encomendados legalmente para
esa función, al considerar que es precisamente a través de la vía
conciliatoria como pueden resolverse en mayor porcentaje los
juicios laborales individuales.
A la fecha, la medida implementada ha obtenido exitosos re­
sultados, concretando un número considerable de Convenios
entre las partes, en los que se vigila no afectar, ni violentar los de­
rechos adquiridos e irrenunciables de los trabajadores, dando por
terminado de esa manera los conflictos de intereses.
Para mayor claridad del objetivo a seguir, se presenta un
comparativo de los meses de abril (con 23 días hábiles) y del 28
de mayo al 8 de julio de 2010 (con 30 días hábiles), respecto de
La justicia
laboral...
121
las conciliaciones atendidas por el área de Conciliadores, con los
resultados que se precisan:
Comparativo de conciliaciones de los
meses de abril y mayo 2010
Secretaría auxiliar de
Abril (23 días
conciliadores
hábiles)
28 de mayo
8 de julio (30
días hábiles
Platicas conciliatorias
atendidas
189
827
Conciliaciones con
nueva cita
113
577
58
161
Convenios
El objetivo de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del
Distrito Federal, es el de cumplir cabalmente con la finalidad
del artículo 123 Constitucional y para ello se habrá de potenciar
la labor conciliatoria, tanto por las 17 Juntas Especiales, como
por la Secretaría Auxiliar de Conciliadores, a la que se le delega
por Ley esa función.
Asimismo, se tiene como reto el lograr convenios al través
de la conciliación que se acerquen al cumplimiento cabal de las
prestaciones que marca la Ley Federal del Trabajo, situación
que deberá hacerse, cuidando no se ponga en riesgo el cierre de
fuentes de trabajo y como consecuencia de todo lo anterior, abatir
el rezago de los juicios y demandas que actualmente existen en
la Junta.
122 Procuración e
Impartición...
Acerca de los
Autores
Lic. Luis Genaro
Vásquez Rodríguez
Subprocurador de Averiguaciones Previas
Desconcentradas de la Procuraduría
General de Justicia del
Distrito Federal
L
icenciado en Derecho por la Escuela Libre de Derecho.
Obtuvo­mención honorífica en su examen profesional con la
tesis intitulada “La procuración de justicia en la transición­
democrática de México”. Tiene un Posgrado en Derecho Penal por la
Escuela Libre­de Derecho. Cursó estudios de maestría en el Master
Interna­cional de Derecho Penal, Constitución y Derechos Humanos, coaus­piciado por la Universidad de Barcelona y la Universi­dad
Autó­noma Metropolitana. Becado por el Departamento de Estado de
los­Estados Unidos de América, obtuvo el Diploma de Transición
Política en el Sistema Federal de los Estados Unidos de América,
en Washington, dc, en el 2001. En el servicio público ha ocupado
diversos cargos en los poderes Legislativo y Ejecutivo, así como en
el ámbito de la seguridad pública y la procuración de justicia. En
el Poder Legislativo, en la LV Legislatura, fue Asesor Jurídico de la
Oficialía Mayor del Senado de la República; en la LVII Legis­atura
se desempeñó como Secretario Técnico del Presidente de la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política de la Cámara de
Diputados federal; en esta misma legislatura fungió como Secretario
125
Técnico de la Comisión Permanente del Honorable Congreso de la
Unión. En la Procuradu­ría General de Justicia del Distrito Federal
ha ocupado diversos cargos como Director de Asuntos Es­peciales de
la Subprocu­raduría de Averiguaciones Previas Desconcentradas,­
y Fiscal Desconcentrado de Investigación en las delegaciones Miguel Hidalgo y Coyoacán. En el año 2002 la organización México
Unido contra la Delincuencia le otorgó un reconocimiento al mérito
profesional en­el servicio público. En la Secretaría de Seguridad
Pública del Distrito Federal, ocupó el cargo de Director Ejecutivo­
de la Región IV, que comprende las delegaciones Coyoacán, Tlalpan­
y Xochimil­co, convirtiéndose en uno de los primeros mandos civi­
les de la Policía Preventiva del Distrito Federal. Se desempeñó
como Visitador General de la Procuraduría General de Justicia del
Distrito Federal, desde donde impulsó la supervisión electrónica
de las Averiguaciones Previas y la vigilancia ciudadana a las Agen­
cias del­Ministerio Público. El 14 de febrero de 2008, fue designado Jefe del Estado Mayor Policial, y a partir del 17 de julio del
mismo año, ejerce el cargo de Subprocurador de Averiguaciones
Previas Desconcentradas.
Procuración e
Impartición...
126
Mtro. José Ramón
Amieva Gálvez
Subprocurador Jurídico y de Derechos
Humanos de la Procuraduría General de
Justicia del Distrito Federal
E
s Licenciado en Derecho por la Universidad del Valle de
México, Titulado con mención honorífica, bajo el Sistema
de Alto Ren­dimiento Académico, y Maestro en Adminis­
tración Pública por el Instituto Nacional de Administración Públi­
ca. Cuenta con los Diplomados en Desarrollo Organizacional por
la Universidad Nacional Autónoma de México, y Diplomado en
Derecho Penal y Procedimiento Penal Mexicano. Ha sido Subge­
rente de Relaciones de Gobierno de la Dirección Legal de Servicios
Administrativos (cifra), Jefe de lo Contencioso y Obra Pública de
la Comisión Coordinadora para el Desarrollo Rural del Distrito
Federal, Subdirector Jurídico y Gerente Jurídico de la Comisión
de Recursos Naturales del Gobierno del Distrito Federal (corena),
Director Jurídico y Apoderado Legal del Fideicomiso Público y
Fondo para el Desarrollo Económico del Distrito Federal, Asesor
Jurídico del Secretario de Gobierno del Distrito Federal, Coordi­
nador General Jurídico del Jefe de Gobierno del Distrito Federal,
127
y Coordinador de Asesores del Subprocurador de Procesos de la­
Procuraduría General de Justicia del d.f. Actualmente, es Subpro­
curador Jurídico y de Derechos Humanos de la Procuraduría Ge­
neral de Justicia del df. Asimismo, ha sido Profesor de las materias­
de Derecho Administrativo y Actos Administrativos de la Univer­
sidad unymca y participante en diversos Foros en Materias Ambien­
tal, Finanzas Públicas y de Gobierno.
Mgdo. Edgar Elías
Azar
Presidente del Tribunal Superior
de Justicia del Distrito Federal
N
ació en Acapulco, Guerrero, el 7 de agosto de 1946. Realizó­
sus estudios profesionales en la Facultad de Derecho de
la Universi­dad Nacional Autónoma de México (unam), obte-
niendo el título de Licenciado en Derecho el 17 de agosto de­1970.
En 1998 realiza dos diplomados, el primero de ellos en Arbitraje
Internacional, en la Escuela Libre de Derecho y el otro en Derecho
Civil, en la Universidad de Estudios de Posgrados en­Derecho. En
agosto de 2000, obtuvo el grado de Maestría en Contra­tos Civiles
por la Universidad Iberoamericana; en noviembre 2002, el Diplomado de Estudios Avanzados por la Universidad Complutense
de Madrid, y en enero de 2005 el grado de Doctor en Derecho con
mención honorífica por unanimidad, por la misma Universidad.
Tiene 13 años en la Administración Pública, Federal y Estatal, lapso
en el cual desempeñó diversos cargos como son: Director General
de Asuntos Jurídicos del Gobierno del Estado de Guerre­ro, Director
Jurídico de la Administración del Patrimonio de la Beneficencia
Pública, Director de Normatividad y Control de la Dirección General de Adquisiciones, Director de Legislación y Consulta de la
129
Dirección General de Asuntos Jurídicos, todos de la Secretaria
de Salud, y Secretario de Finanzas del Gobierno del Estado de
Guerrero. Ha sido académico y catedrático de las Universidades
Americana de Acapulco, Anáhuac del Sur, Iberoamericana, itam,
Escuela Libre de Derecho e Instituto de Investigaciones Jurídicas de
la unam,­además ha participado como expositor y conferencista en
instituciones públicas y priva­das, como representante de México
en Foros Internacionales. Asimismo ha participado en diversos
trabajos legislativos de los que han resultado importantes reformas a leyes relacionadas con la Administración de Justicia. Ha
publicado diversos libros y participado en revistas. Su actividad en
este Tribunal ha sido de 31 años, inició en 1966 como Archivista­“G”
Transitorio del Archivo Judicial, Taquígrafo “F”, Secretario del Ramo
Penal en el Juzgado Primero Mixto de Paz, ocupando diversos puestos administrativos hasta el año de 1969 que fue designado Juez
“A” de Paz de Cuautepec Barrio Bajo. Después ocupó los cargos de
Juez Décimo Quinto Mixto de Paz del Partido Judicial de México,
Distrito Federal; Juez Noveno de lo Civil (1993-1999), y Ma­gistrado
de la Primera Sala Civil de 2003 al 2007. Actualmente ocupa el
cargo de Presidente del­Tribunal Superior de Justicia y del­Consejo
de Judicatura del Distrito Fede­ral por el periodo del 1 de enero de
2008 al 31 de diciembre de 2011.
Procuración e
Impartición...
130
Lic. José Raúl
Armida Reyes
Magistrado Presidente del Tribunal de lo
Contencioso Administrativo del
Distrito Federal
E
s originario de Xalapa, Veracruz. Es Licenciado en Derecho
por la Facultad de Derecho Universidad Nacional Autóno­
ma de México (unam). Abogado Postulante entre 1974 y
1980. De 1982 a 1985 se desempeñó como Asesor de la Dirección
General de Carreteras en Cooperación, de la Secretaría de Comu­
nicaciones y Transportes. De 1980 a 1986 fungió como Secretario
de Acuerdos del Tribunal de lo Contencioso Administrativo del
Distrito Federal. Magistrado de Sala Ordinaria de 1986 al 2000,
siendo Presidente de Sala en los años de 1988, 1991,1993, 1995,
1997 y 1999. Del 2000 al 2007 fue Magistrado de Sala Superior
y del 2008 a la fecha es Magistrado Presidente del Tribunal y de
su Sala Superior. Realizó el Curso de Actualización Judicial para
empleados del Poder Judicial Federal impartido por el Instituto
de Especialización Judicial de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, y es Conferencista en diversos foros nacionales e Interna­
cionales, así como Catedrático a nivel de Diplomados en la unam.
131
Lic. Ramón Montaño
Cuadra
Presidente de la Junta Local de
Conciliación y Arbitraje del
Distrito Federal
E
s originario de la Ciudad de México. Licenciado en Dere­cho
por la Universidad Nacional Autónoma de México donde
se­desempeñó como profesor de Derecho Agrario (octubre
1986-1988). Ha desempeñado los siguientes cargos en la Adminis­
tra­ción Pública: Secretaría de Obras Públicas: Abogado Dictaminador en el Departamento de Convenios, Contratos y Asuntos Labora­
les (octubre 1968–abril 1972); Secretaría de Hacienda y Crédito
Público: Jefe del Departamento de Administración y Control de
Delegaciones (abril 1976-febrero 1977); Secretaría de la Reforma
Agraria: Asesor Jurídico del Oficial Mayor-relación laboral con el
Sindicato (febrero 1978–febrero 1981); Instituto de Seguridad y
Servicios Sociales de los Trabajado­res del Estado: Subdelegado
de Prestaciones de la Delegación Regional zona Norte del df., rela­
ción con los Sindica­tos Federados en materia de prestaciones
133
(julio 1998-febrero 2001);Banco­Nacional de Obras y Servicios
Públicos: Subdelegado de Promoción en el Distrito Federal (junio
2001-diciembre 2002); Secretaría de Seguri­dad Pública: Oficial
Mayor (enero 2003-julio 2004); Go­bierno del Distrito Federal: Oficial Mayor del Gobierno local del Distrito Federal (5 de diciembre
de 2006-31 de diciembre de 2009). Actualmente es Presidente
de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal.
Índice
Presentación........................................................ 7
La función investigadora del
Ministerio Público del Distrito
Federal en el nuevo Sistema de
Justicia Penal
Lic. Luis Genaro Vásquez Rodríguez,
Subprocurador de Averiguaciones
Previas Desconcentradas de la
Procuraduría General de Justicia del
Distrito Federal.................................................................................13
Intervención del Ministerio
Público del Distrito Federal
en Procesos no Penales
(Mediación)
Mtro. José Ramón Amieva Gálvez,
Subprocurador jurídico y de Derechos
Humanos de la Procuraduría General
de Justicia del Distrito Federal...........................................................39
137
El Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal
a 153 años de su creación
Mgdo. Edgar Elías Azar,
Presidente del Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal................................................................71
Estructura, competencia y
funcionamiento del Tribunal de lo
Contencioso Administrativo del
Distrito Federal
Lic. José Raúl Armida Reyes,
Magistrado Presidente del Tribunal
de lo Contencioso Administrativo del
Distrito Federal.................................................................................91
La justicia laboral local en el
Distrito Federal (Privilegiando la
Conciliación)
Lic. Ramón Montaño Cuadra,
Presidente de la Junta Local de
Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal. ........................................115
Acerca de los autores........................................... 123
Procuración e
Impartición de
Justicia Local en el
Distrito Federal
Se terminó de imprimir en el mes
de enero del 2011 en Talleres­
Gráficos de México, Canal del
Norte No. 80, Col. Felipe Pesca­
dor, cp. 06280, México, df., cons­
ta de­1,000 ejemplares y estuvo
al cuidado de la Dirección Gene­
ral­ de Compilación y Consulta­
del Orden Jurídico Nacional
isbn:
978-607-427-095-2
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