Informativo Caballero Bustamante Fuente: www.caballerobustamante.com.pe Derechos Reservados En torno al concepto de renta: Análisis Jurisprudencial y Pronunciamientos de SUNAT A través del presente informe expondremos los aspectos más trascendentes y característicos de las teorías que pretenden explicar el concepto de renta, y con base en ellos, analizaremos los diversos pronunciamientos tanto del Tribunal Fiscal como de la SUNAT, lo que nos permitirá apreciar la concreción práctica de las referidas teorías en la solución de los casos planteados, siempre orientados en gravar con el impuesto únicamente aquellos conceptos que se califican como renta a la luz de nuestra normatividad positiva vigente. I. Introducción Uno de los aspectos fundamentales para iniciar el estudio del Impuesto a la Renta, es precisar el objeto que será sujeto de gravamen, ya que a partir del mismo, el legislador decidirá si determinada utilidad o ingreso que acrecienta al patrimonio de una entidad se encontrará gravado con el Impuesto a la Renta. Para acometer a esta empresa, podemos iniciar nuestro periplo a partir de tomar definiciones económicas y jurídicas sobre el concepto de renta, a las que habría que agregar consideraciones que tienen que ver con aspectos de política fiscal. En tal sentido, la renta constituye una de las manifestaciones de la riqueza; así, en la Ley del Impuesto a la Renta (en adelante LIR) se recogen tres de las teorías de renta más ampliamente difundidas a saber: la renta producto, el flujo de riqueza y el consumo más incremento patrimonial; sobre el particular, resulta menester advertir que el concepto de renta dependerá de la teoría que adoptemos para analizar el caso concreto, pudiendo presentarse supuestos que califiquen como renta bajo el alcance de alguna teoría mientras que para otra el mismo concepto resulte siendo ajeno a todo ámbito gravado. II. Teorías Fiscales sobre el concepto de Renta 1. La Teoría de la Renta Producto De acuerdo con esta teoría, constituye renta el producto periódico que proviene de una fuente durable en estado de explotación. Se entiende que la renta debe ser un producto o riqueza nueva, distinta y separable de la fuente que la produce, quedando dicha fuente en condiciones de seguir produciendo rentas. Por ello, bajo dicha concepción no constituirá renta la enajenación de bienes de capital o del activo fijo, ya que la transferencia de los mismos agota la fuente productora. Siendo ello así, los elementos característicos que debe contener la renta bajo la óptica de esta teoría son los siguientes: • La periodicidad en el beneficio, bastando que dicha periodicidad sea potencial. • El mantenimiento o permanencia de la fuente productora, en el sentido que la fuente sobreviva a la producción de la renta con lo cual mantiene su capacidad de repetirla en el futuro. Por tanto, es necesario que la fuente haya sido habilitada para ello. Este criterio se puede apreciar en el artículo 1º de la Ley del Impuesto a la Renta, LIR en adelante, donde se señala que las rentas alcanzadas por este impuesto son aquellas que provengan del capital, del trabajo y de la aplicación conjunta de ambos factores entendiéndose como tales aquellas que provengan de una Informativo Caballero Bustamante Fuente: www.caballerobustamante.com.pe Derechos Reservados ta, que el aspecto materia de análisis se sustenta en el criterio doctrinario de flujo de riqueza que se incluye en forma implícita. En tal sentido, resulta conveniente recurrir a la palabra autorizada del ilustre tratadista Juan Roque García Mullín quien sobre el particular nos precisa que: • Ingresos por Actividades Accidentales: Son ingresos originados por una habilitación transitoria y eventual de una fuente productora, o sea que proviene de actos accidentales que no implican una organización de actividades con el mismo fin. • Ingresos Eventuales: Son ingresos cuya producción depende de un factor aleatorio, ajeno a la voluntad de quien lo obtiene, tales como los premios de lotería y los juegos de azar. No hay periodicidad, ni habilitación racional de la fuente, de modo que no podrán ser incluidos en la teoría de renta- producto. • Ingresos a Título Gratuito: Comprende tanto a las transmisiones gratuitas por acto entre vivos (regalos, donaciones) como por la causa de muerte (legados y herencias). fuente durable y susceptible de generar ingresos periódicos. De igual forma, el primer párrafo del inciso a) del artículo 23º de la LIR también se ciñe a la teoría de la renta producto. 2. Teoría del Flujo de Riqueza Se considera renta a la totalidad de los ingresos provenientes de terceros, es decir, el total del flujo de riqueza que desde los terceros fluya hacia el contribuyente en un periodo de tiempo dado. Como se puede apreciar, a diferencia de la renta-producto, para esta concepción no interesa que el ingreso provenga de una fuente durable susceptible de generar ingresos periódicos, sino que amplía el concepto de renta a todo beneficio o ingreso nuevo que ha fluido hacia el contribuyente producto de una operación con terceros, por ejemplo, las ganancias de capital o los ingresos provenientes de actividades accidentales. Al respecto, García Mullín (1) nos señala que se: “(…) considera como una condición suficiente y a la vez necesaria para configurar la renta, el hecho de tratarse de enriquecimientos que han fluido desde terceros hacia el contribuyente”. Sobre el particular, John F. Due, afirma que ganancias de capital son todos los incrementos en el valor de realización del patrimonio poseído, excepto las utilidades provenientes de la compra venta de bienes como actividad lucrativa. Por lo tanto, si tenemos el caso que tierras, edificios, equipos de capital, títulos, acciones y similares que pueden venderse a precios superiores a las sumas pagadas originalmente por ellos, se ha realizado una ganancia de capital. La calificación de la renta, no resulta sencilla, dado que debe considerarse la intención del sujeto propietario del bien, a fin de establecer la naturaleza de la ganancia habitual o de capital. El penúltimo párrafo del artículo 3º de la LIR a la letra establece que: “En general, constituye renta gravada de las empresas cualquier ganancia o ingreso derivado de operaciones con terceros, así como el resultado por exposición a la inflación determinado conforme a la legislación vigente”. Sobre el particular, en el inciso g) del artículo 1º del Reglamento de la LIR se dispone que las ganancias o ingresos derivados de operaciones con terceros se refieren a la obtenida en el devenir de actividades de la empresa en sus operaciones con otros particulares, en que los intervinientes participan en igualdad de condiciones y consienten el nacimiento de obligaciones. En virtud de lo expuesto se observa en la legislación vigente del Impuesto a la Ren- Consideramos oportuno señalar que el resultado por exposición a la inflación no constituye en estricto un ingreso proveniente de operaciones con terceros; sin embargo, el legislador lo ha incluido incorrectamente como tal, ya que dicha renta califica en estricto dentro de la teoría del consumo más incremento patrimonial. 3. Teoría del Consumo más Incremento Patrimonial Según esta teoría, la renta está definida como el total del incremento de patrimonio que tenga el contribuyente en un periodo, obteniéndose la misma a través de la comparación del valor del patrimonio al final de aquél, sumándose los consumos más retiros de utilidades. También sobre esta teoría García Mullín (2) señala que bajo la misma, la renta es la suma algebraica de lo consumido más los cambios en el valor del patrimonio. Conforme se advierte en el literal d) del artículo 1º de la LIR, constituye renta gravada con el impuesto también las rentas imputadas, incluyendo las del goce o disfrute, establecidas por la Ley, que se realicen o no de manera habitual. Se advierte entonces que la norma peruana incluye como aspecto gravado también ganancias que sólo pueden ser definidas como tales bajo la teoría del consumo más incremento patrimonial, esta disposición hace referencia a las rentas atribuidas a los individuos por el hecho de haber disfrutado (consumido) el bien. Por consiguiente, a fin de establecer como hecho imponible una manifestación de riqueza que no es material se recurre a presunciones respecto de las cuales no se ha establecido una relación numerus clausus de supuestos configurados, lo que permite al legislador incluirlas a lo largo de la norma conforme la teoría del consumo más incremento patrimonial. Los supuestos en los cuales se constata la configuración de dichas rentas al amparo de esta teoría, se encuentran consagradas por las rentas fictas o las rentas presuntas que surgen por el uso o disfrute de determinados bienes que son cedidos gratuitamente como es el supuesto de lo regulado en el inciso h) del artículo 28º de la LIR. III. Aplicación Práctica 1. En la Jurisprudencia del Tribunal Fiscal El Tribunal Fiscal, al pronunciarse sobre diversas controversias, se ha servido del concepto de renta para dilucidar si tal supuesto está comprendido dentro de los alcances del Impuesto a la Renta; en tal sentido, comentaremos algunas de sus resoluciones más relevantes así como el análisis realizado por dicho ente colegiado. Así, en la RTF Nº 616-4-99, jurisprudencia de Observancia Obligatoria, el Tribunal Fiscal señaló: “Que el artículo 5º del Decreto Legislativo Nº 802 dispuso que la deuda tributaria acogida al Programa Extraordinario de Regularización Tributaria, PERTA, podía, entre otras modalidades, ser cancelada mediante su capitalización previa reducción de un 70% del capital, exigiéndose para ello la emisión de un número de acciones representativas del incremento del capital social producto de dicha capitalización en las empresas agrarias azucareras que hubieran cambiado o cambiaran su modalidad empresarial por la sociedad anónima […] Que tal reducción, no califica como renta, de acuerdo con el criterio de renta producto previsto en el inciso a) del artículo 1º de la Ley del Impuesto a la Renta aprobada por el Decreto Legislativo Nº 774. Que de otro lado, si bien el artículo 3º se establece que en general constituye renta gravada de las empresas cualquier ganancia o beneficio derivado de las operaciones con terceros así como el proveniente del resultado por exposición a la inflación determinado conforme a la legislación vigente, debe indicarse que las sumas que han sido materia de acotación en el caso de autos, Informativo Caballero Bustamante Fuente: www.caballerobustamante.com.pe Derechos Reservados no provienen de operaciones realizadas por la recurrente con terceros, sino de ingresos que debían en principio ser entregados al Estado, pero que éste dispuso en virtud de la norma arriba citada que no lo sean. Que las obligaciones tributarias y los beneficios otorgados respecto de las mismas, nacen por imperio de la Ley, independientemente del deudor tributario, lo que no sucede en el caso de obligaciones entre particulares, siendo en consecuencia una obligación entre Estado y particular”. Tal como señala el Tribunal Fiscal, la reducción del capital social exigido para el acogimiento a los Beneficios señalados en el PERTA Agrario no se encuentra dentro de los alcances del ámbito de aplicación del Impuesto a la Renta en mérito a la teoría de la renta producto, ya que, a pesar de que el ingreso pueda ser separado de la fuente productora, dicho ingreso carece de la característica de ser periódico. Por ello, el tribunal procede a analizarlo a la luz de la teoría del flujo de riqueza para la cual efectivamente sí existe un ingreso sin ser habitual pues se origina en un ingreso accidental, pero éste surge del imperio de la Ley deviniendo en una operación entre el Estado y un particular. Al respecto, el Órgano Colegiado ha señalado claramente que el Estado, en sus relaciones con los particulares no puede ser considerado un particular, ya que mantiene en una relación de superioridad. En atención a lo señalado en el último párrafo del artículo 3º de la LIR, dicho supuesto no ha sido contemplado por el legislador (operaciones entre particulares y el Estado) y por tanto, se encuentra fuera del ámbito de aplicación de la LIR. De otro lado, en la RTF Nº 00542-1-2007 el Tribunal Fiscal se pronunció señalando lo siguiente: “Que en este sentido, los ingresos obtenidos como producto del régimen aduanero del drawback, no califican en el concepto de renta producto recogido por nuestra legislación, al no provenir de una fuente durable y susceptible de generar ingresos periódicos, así como tampoco derivan de operaciones con terceros, entendidos como los obtenidos en el devenir de la actividad de la empresa en sus relaciones con otros particulares, en las que los intervinientes participan en igualdad de condiciones y por lo tanto consienten en el nacimiento de sus obligaciones, según el criterio establecido en la RTF Nº 616-4-99 que constituye jurisprudencia de observancia obligatoria”. En tal sentido, resulta claro que si bien se presentan importes pecuniarios que se incorporan al patrimonio del contribuyente, no se verifica la exis- tencia de una "renta" a la luz de los postulados de la teoría del flujo de riqueza, por cuanto no nos encontramos frente a una típica relación de intercambio del mercado, sino que estamos frente a una obligación que tiene su génesis no en la libertad contractual sino en la legislación sobre la materia. En la RTF Nº 1003-4-2008 el Órgano Colegiado ha dispuesto lo siguiente: “Que en el caso de autos la recurrente adquirió acciones de Inversiones Alramo S.A. a un valor menor a su valor patrimonial a la fecha de adquisición, (según se señala en la Nota 11 a los Estados Financieros del Ejercicio 2000 anteriormente citada), por lo que a la fecha de adquisición de tales acciones, la cual se realizó en el ejercicio 1999, se produjo una plusvalía mercantil negativa […] Que el artículo 1º de la Ley del Impuesto a la Renta establece que se encuentran gravadas las rentas que provengan del capital, del trabajo y de la aplicación conjunta de ambos factores, entendiéndose como tales aquellas que provengan de una fuente durable y susceptible de generar ingresos periódicos (criterio de la renta producto establecido en nuestra legislación), siendo evidente que los ingresos generados del badwill no se encuentran en este supuesto, toda vez que no provienen de una fuente durable susceptible de generar ingresos periódicos como lo requiere la citada norma; Que de otro lado, el último párrafo del artículo 3º de la referida Ley dispone que constituye renta gravada de las empresas cualquier ganancia o beneficio derivado de operaciones con terceros (criterio del flujo de riqueza que abarca las ganancias de capital realizadas). Que los ingresos derivados de badwill, no constituyen ganancias de capital realizadas por cuanto no proviene de la enajenación de valores, sino por el contrario se producen por efecto de su adquisición a un valor menor a su valor patrimonial, siendo que los ingresos derivados del badwill no constituyen una ganancia efectivamente realizada, la que sólo se produciría de venderse las acciones a un mayor valor al de su adquisición que a su vez resulte mayor o igual al valor patrimonial de las acciones. Que cabe indicar que nuestra legislación no recoge de manera general el criterio de consumo más incremento patrimonial que incluye las valorizaciones o ganancias de capital no realizadas, que no resultarían gravadas bajo el criterio de flujo de riqueza, siendo que el supuesto materia de autos no se encuentra recogido como renta gravada en nuestra legislación”. En el caso expuesto, el badwill o plusvalía mercantil negativa ocurre porque la adquisición de las acciones se efectúa a un menor valor respecto de su valor patrimonial, por ello, no respondería a la concepción de renta producto, por cuanto no deviene de una fuente productiva y durable, además del hecho que tal renta no es susceptible de ser periódica. En el supuesto que se analice bajo los parámetros de la teoría de flujo de riqueza, dicha renta no resultaría tal, ya que no se trata de una ganancia, beneficio o enriquecimiento obtenido por un sujeto en un ejercicio determinado dado que –como lo señala el propio Tribunal Fiscal–, dicho ingreso es potencial, pues sólo se originará si la enajenación se realiza a un menor valor que su valor patrimonial, mientras que para la teoría de consumo más incremento patrimonial el badwill sí constituiría renta toda vez que éste refleja una variación patrimonial; sin embargo, el legislador no ha incluido en la LIR este supuesto. Por tanto, no se encontrará gravado con el Impuesto a la Renta, debiendo tenerse en cuenta que la LIR ha recogido esta teoría en los artículos 52º, 90º y 93º. En la RTF Nº 0601-5-2003 la máxima instancia en materia administrativa tributaria ha expresado que: “Es objetivo de la controversia determinar si los intereses abonados por la Administración al momento de devolver el pago indebido realizado por la recurrente, constituyen ingresos afectos al Impuesto a la Renta por el ejercicio 1997. […] Dicho interés se encontraba vinculado a una obligación legal, esto es, su existencia se sustenta en la ley, en la obligación de la Administración de devolver el pago requerido indebidamente más el interés correspondiente, por lo que no se está frente a un acto entre particulares, pues tanto la devolución del capital como los intereses nacen en virtud de la ley y no del deudor tributario”. Como señalamos anteriormente, si bien es cierto que el pago de los intereses a favor del contribuyente implica un ingreso monetario hacia él, dicho ingreso no proviene del devenir de sus operaciones con terceros en tanto que el Estado no es considerado un particular en la medida que el pago de los intereses no se deriva de un acuerdo entre ambos (consentimiento expreso), sino que obedece a un mandato legal que impone al Estado tal obligación. 2. Algunos Pronunciamientos de la SUNAT La SUNAT ha dado respuesta a diversas consultas institucionales, a través de las cuales, se le preguntaba si ciertos hechos económicos se encuentran dentro del ám- Informativo Caballero Bustamante bito de aplicación del Impuesto a la Renta; es decir, si el legislador al plasmar la hipótesis de incidencia tributaria había contemplado dicho aspecto material. Para ello, la SUNAT ha analizado las teorías fiscales acerca de la renta para luego verificar si dichas teorías han sido recogidas en la LIR. En el Informe N° 064-2006-SUNAT/ 2B0000 la SUNAT ha analizado el tema si el crédito fiscal especial que se contempla en la Ley de la Amazonía constituye renta; así, sobre el particular señala: “El numeral 13.2 del artículo 13° de la Ley de la Amazonía, dispone que los contribuyentes ubicados en la Amazonía, que se dediquen principalmente a las actividades comprendidas en el numeral 11.1 del artículo 11°, gozarán de un crédito fiscal especial para determinar el Impuesto General a las Ventas que corresponda a la venta de bienes gravados que efectúen fuera de dicho ámbito. (…) Conforme fluye de las normas citadas, el Impuesto a la Renta considera como rentas gravadas, entre otras, a las que responden al criterio de renta-producto, vale decir, a las que provienen de una fuente durable y susceptible de generar ingresos periódicos; así como a las ganancias consideradas dentro del criterio de flujo de riqueza y que correspondan a empresas. Ahora bien, los ingresos obtenidos por los contribuyentes derivados de la aplicación del beneficio del Crédito Fiscal Especial no cumplen con el criterio de renta-producto pues se originan en la aplicación de una norma legal que tiene por objeto promover el desarrollo sostenible e integral de la Amazonía, y no de una fuente durable y susceptible de generar ingresos periódicos. De otro lado, debe tenerse en consideración que los ingresos generados a favor de los contribuyentes al aplicar el beneficio del Crédito Fiscal Especial, no se originan de operaciones con particulares en los términos señalados en el inciso g) del artículo 1° del Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta, sino de un derecho concedido en base al IUS IMPERIUM del Estado, por lo que el referido ingreso tampoco se ajusta al criterio de flujo de riqueza asumido por nuestra legislación. En consecuencia, los ingresos originados por la aplicación del beneficio del Crédito Fiscal Especial regulado en la Ley de la Amazonía no se encuentran gravados con el Impuesto a la Renta”. Siendo ello así, resulta claro que no resultaría correcto que se considere como renta los ingresos generados por concepto de crédito fiscal especial, dado que ni provienen de una fuente durable sus- Fuente: www.caballerobustamante.com.pe Derechos Reservados ceptible de generar ingresos periódicos (teoría de la renta producto), ni tampoco cumple con los alcances de la teoría de flujo de riqueza, por cuanto el beneficio no se genera por un acuerdo celebrado bajo una relación horizontal voluntaria con el Estado, sino que tiene su génesis en una relación vertical impuesta por la Ley. De otro lado, en el Informe Nº 0892008-SUNAT/2B0000 la Administración Tributaria ha señalado que: “(…) las AFP deben constituir un Encaje Legal con recursos propios, a fin de garantizar una rentabilidad mínima de las inversiones del Fondo administrado que dichas AFP deben obtener, calculándose diariamente el valor del mismo. Los recursos del Encaje Legal forman parte del patrimonio de las AFP y no del Fondo administrado por éstas, aun cuando comparten con aquél la característica de ser inembargables. Adicionalmente, la dinámica de las cuentas del Rubro 6089 Resultado del Ejercicio del Manual de Contabilidad para las AFP, demuestra que las normas contables las obligan a registrar los rendimientos del encaje como una cuenta del ingreso. De este modo, las AFP reconocen en sus estados financieros los ingresos del rubro utilidad del encaje legal en el Estado de Ganancias y Pérdidas. En ese sentido, conforme a la metodología establecida para su contabilización en el Manual de Contabilidad de las AFP, se concluye que los rendimientos del Encaje Legal son ingresos de las AFP y así deben ser registradas en su contabilidad. Teniendo en cuenta lo anterior, puede afirmarse que los rendimientos del Encaje Legal, al ser considerados ingresos de las AFP según la metodología establecida para su contabilización, se encuentran afectos al Impuesto a la Renta en aplicación del inciso a) del artículo 1° del TUO de la Ley del Impuesto a la Renta, toda vez que dichos beneficios provienen de una fuente durable y susceptible de generar una rentabilidad periódica, como es el Encaje Legal”. De acuerdo con el análisis realizado, existe la obligación legal, por parte de las AFPs, de realizar el encaje legal; dicho encaje genera rendimientos los que al provenir de una fuente durable (encaje legal) que sobrevive a la producción de una riqueza y que es susceptible de generar ingresos periódicos constituye renta, bajo los alcances de la teoría de la renta producto, consagrada legislativamente en el inciso a) del artículo 1º de la LIR. Asimismo, en el Informe Nº 211-2007SUNAT/2B0000 se ha dejado sentado el siguiente criterio: “Cabe mencionar que el monto de la GRP [garantía de red principal] será determinado con el objeto de cubrir el Ingreso Garantizado anual en el Año de Cálculo, de acuerdo con los plazos y condiciones fijados en el contrato, habiendo quedado establecido que se trata de un cargo incorporado a la tarifa eléctrica en el rubro correspondiente al peaje del Sistema Principal de Transmisión Eléctrica. […] Así pues, en el supuesto analizado, el titular de la concesión de transporte de gas natural por ductos y distribución de gas natural por red de ductos, por mandato de una norma jurídica que garantiza su inversión, recibe el monto recaudado por concepto de GRP, el cual está destinado a asegurarle una retribución adecuada por sus servicios. El monto correspondiente al cargo de GRP se encuentra incluido como parte del componente tarifario por el servicio prestado que cobra tanto la empresa distribuidora de electricidad, como la empresa transmisora de electricidad, así como la empresa generadora de electricidad y, finalmente, el titular de la concesión de transporte de gas natural por ductos y distribución de gas natural por red de ductos. En mérito a lo expuesto, se concluye que el ingreso por concepto del cargo de GRP cobrado por las distintas empresas como parte de su componente tarifario por el servicio prestado constituyen rentas gravadas, comprendidas en el inciso a) del artículo 1° del TUO de la Ley del Impuesto a la Renta, y por ende, dichas empresas deben asumir el pago del impuesto”. Siendo ello así, en el caso de los ingresos por garantía de red principal (GRP), queda claro que éste constituye renta para su perceptor, toda vez que él debe habilitar la fuente productora de la renta, correspondiendo que cuente con los recursos necesarios para prestar el servicio de distribución de gas y electricidad, lo cual nos da claros indicios que nos encontramos frente a una aplicación práctica de la teoría de renta producto; de igual modo, el ingreso obtenido es potencialmente periódico, en la medida que la empresa continúe prestando el servicio a sus clientes quienes deberán abonarle la GRP. NOTAS (1) GARCÍA MULLÍN, Juan Roque. Manual del Impuesto a la Renta. Organización de Estados Americanos, Documento CIET Nº 872, pág. 19. (2) GARCÍA MULLÍN, Juan Roque. Op. Cit., pág. 22. n