Bon dia, buenos días… Sr. Presidente de la Diputación, autoridades, y sobre todo ciudadanos y ciudadanas de la provincia de Valencia. El 24 de Mayo el pueblo Valenciano dijimos alto y claro lo que llevábamos demasiado tiempo sintiendo y padeciendo: Basta ya! Basta ya de corruptelas y chanchullos, de ladrones de guante blanco, de insultarnos, de tomarnos por borregos a los que mentir a la cara con impune sonrisa. Basta ya, de personas viviendo en la calle, de cientos de desahucios diarios, de niños y niñas pasando hambre en vacaciones, de familias viviendo de la ridícula pensión de los abuelos, de recortes y limitaciones a nuestros derechos básicos y fundamentales: salud, educación o protección social. Basta ya de humillaciones. De que solo se nos conozca por nuestro sol y corruptos. De que los medios de comunicación de medio mundo nos señalen, como ejemplos de lo que el servicio público JAMÁS debe ser. De que las instituciones internacionales hagan lo mismo y nos lluevan las denuncias por incumplimiento de leyes, ocultación de cuentas, o violación de derechos… El 24 de Mayo nos cansamos. Y fuimos nosotros y nosotras quienes contamos: Mil... dos mil... tres mil… cuatro mil votos... Mil... dos mil... tres mil… cuatro mil votos. Votos que reclamaban “CAMBIO”. Así una y otra vez, limpiándonos la vergüenza de estos años y permitiendo que la ilusión se dibujara en nuestras caras. Nunca más contar PELAS de maletines, nunca más vender nuestro futuro a otros. Nunca más financiar obras faraónicas con sobrecostes opacos que enriquecieron a 4…. a costa de los dineros de un pueblo que no puede siquiera pagar su factura de luz, o dar un plato digno de comida diaria a sus hijos. Los corruptos, a la cárcel; el futuro, en nuestras manos. València en Comú és una plataforma municipalista assembleària, nascuda en el cap i casal al setembre de dos mil catorze. Des d´aleshores fins ara, s'ha gestat i viscut acceleradament. Vam cometre grans errors i grans encerts. Buscàvem una confluencia i unitat popular arrelada als carrers i espentada pels partits rupturistes i els moviments socials. No ho vam aconseguir completament, però quaranta-un mil persones ens van donar el seu suport, i com a altaveus d'eixes persones estem hui ací. En aquest injust sistema de representació indirecta que avui regix la Diputació, hi ha milers i milers de veus que no tenen representació. Milers i milers de persones que van confiar en candidatures municipalistes; i els seus vots, no sumats, no tenen veu ací. A ells volem dirigir-nos també. Potser este diputat no estiga ací pels vostres vots, però es compromet, si així ho voleu, a fer d'enllaç vostre a l'ajuntament d'ajuntaments, a escoltar les vostres demandes i alçar-les a aquet plenari. Mil... dos mil... tres mil... quatre mil vots. Els vostres vots no es perden, avui també voten canvi. València en Comú, ayer, como con todas las decisiones importantes, convocó a su asamblea. Debíamos decidir que votábamos hoy. Debatimos durante horas, y decidimos votar SI a la investidura del ya presidente, Jorge Rodríguez. Lo hicimos por varios motivos. El 24 de Mayo el pueblo exigió cambio, y el 13 de Junio, los votos se transformaron en plenos de los que salieron nuevos alcaldes y alcaldesas. Y a la salida de los respectivos consistorios, imagino que todos y todas vimos lo mismo: alegría e ilusión. Vimos amigos duros y grandes, llorar de emoción. Madres, padres, hermanos amigos, desconocidos… muchísimos desconocidos; abrazándose y saltando con una sonrisa que no les cabía en la boca. Escuchamos a los militantes de los partidos vitorear a los representantes de otros partidos. Vimos a funcionarios llorando como si les hubieran quitado un yunque de encima. Sentimos ilusión y esperanza. Hoy, 14 de Julio, los miles y miles de votos que dijeron “hasta aquí”, exigen un cambio también en la Diputación. Por eso votamos sí, votamos sí a la esperanza y la ilusión. Votamos sí al cambio, a la creencia de que las cosas pueden y deben hacerse mejor. A que nunca más, hemos de volver a sentir vergüenza. Este es nuestro sí, señor Rodríguez. Es el sí de la ciudadanía. El sí de un pueblo que sueña que vamos a cambiarlo todo. La responsabilidad es inmensa. Espero que la sienta tan fuerte como nosotros asumimos ese compromiso y que nunca, jamás, les decepcionemos. Pero no es un sí ciego e infinito. No es un cheque en blanco. No es un sí a formar gobierno ni todo lo contrario. Es un voto de confianza inicial. Un apoyo en la línea de lo que creemos que quiere la mayoría social. Para mantener este sí en un futuro, o incluso ser compañeros de gobierno hará falta mucho más: que nos presente un plan de gobierno que mire y vele por las comarcas y mancomunidades, que potencie las competencias de los municipios, que las paredes de esta institución sean transparentes cuál cristal. Queremos una auditoria ciudadana e integral de esta Diputación. Queremos saber a cuánto asciende el expolio, quien lo ha realizado; y exigimos responsabilidades políticas y judiciales del desfalco y la corrupción. Queremos, sobre todo, que se pongan en marcha mecanismos que hagan imposible que nadie vuelva a repetir aquello de mil, dos mil, tres mil, cuatro mil peles… Queremos un gobierno transversal, en el que las fuerzas que lo compongan sean socios de gobierno y no comparsas minoritarias. La mayoría de fuerzas aquí representadas creemos que las diputaciones deben ir desapareciendo. Queremos ver pasos firmes en esa dirección. En diciembre del año pasado, me presentaba a unas primarias, y una de las personas que más quiero, me regaló un libro en el que puso la siguiente dedicatoria: “Primo, nuestros sueños, no caben en sus urnas”. sueños no caben en urnas.... Y es cierto, los Pero Mil... dos mil... tres mil votos, pueden hacernos recuperar la ilusión; pueden devolvernos el orgullo de pertenecer a esta tierra; Mil... dos mil... tres mil votos, lo cambian todo; a que esos sueños se puedan hacer realidad; Mil... dos mil... tres mil votos, abren la puerta, a un nuevo futuro. Un nuevo futuro en el que desde València en Comú trabajaremos incansablemente por una sociedad cada día más democrática, participativa, justa, igualitaria, libre, inclusiva, plural y diversa. El 13 de Junio, hicimos nuestras las palabras de Salvador Allende, y hoy, lo volvemos a hacer: “LA HISTORIA ES NUESTRA; Y LA HACEN LOS PUEBLOS”……. Si se puede! Muchas gracias, moltes gràcies…