Tema 107 PÁPULA FIBROSA DE LA NARIZ Y ANGIOFIBROMA Dr. L. Requena DEFINICIÓN HISTOPATOLOGÍA La pápula fibrosa de la nariz es un hamartoma que está constituido por tejido angiofibromatoso, en el seno del cual se suelen observar también folículos pilosos malformados. A pequeño aumento, la pápula fibrosa de la cara aparece como una pequeña lesión exofítica de morfología cupuliforme (Figura 3), aunque también puede ser polipoide. Esta pápula está constituida por dos componentes bien diferenciados: - Tejido angiofibromatoso. - Uno o más folículos pilosos malformados, que se acompañan de una vaina conectiva perifolicular exagerada. La epidermis que cubre la lesión muestra una hiperqueratosis compacta y ortoqueratósica, con hipergranulosis. En ocasiones se observa aplanamiento de las crestas epidérmicas. Aunque en un principio algunos autores describieron un aumento en el número de melanocitos, con tendencia al agrupamiento de los mismos e incluso la formación de alguna pequeña teca, estudios más recientes no han conseguido demostrar este aumento del número de melanocitos, y menos aún la presencia de tecas o nidos de melanocitos, ya que los melanocitos existentes se disponen como células aisladas a lo largo de la unión dermo-epidérmica. En la dermis se observa un aumento de fibras colágenas agrupadas en bandas, que en las áreas más superficiales se orientan perpendicularmente respecto a la epidermis, mientras que alrededor de los folículos pilosos y de algunas vénulas estas fibras colágenas se disponen en capas concéntricas como hojas de cebolla. En algunas áreas, entre las fibras colágenas pueden observarse llamativos fibrocitos multinucleados, alguno de los cuales muestra abundante citoplasma, con morfología estrellada, y en ocasiones conteniendo inclusiones citoplasmáticas de cuerpos redondos intensamente basófilos. Otro hallazgo característico consiste en la presencia de un número aumentado de capilares y vénulas en la dermis, que muestran sus luces dilatadas y unas paredes de espesor variable (Figura 4). ETIOLOGÍA Aunque se trata de un hamartoma, la mayoría de las lesiones son adquiridas en la vida adulta y se desconoce cual o cuales son los factores que determinan el desarrollo de estas lesiones. Algunos autores postularon que la pápula fibrosa era el resultado de la involución de un nevo melanocítico, pero en la actualidad se ha demostrado que las células gigantes multinucleadas de forma estrellada que, con frecuencia, se observaban en la dermis de la pápula fibrosa no son melanocitos, sino que se trata de células multinucleadas de naturaleza fibrohistiocitaria. CLÍNICA La pápula fibrosa de la nariz es una lesión relativamente frecuente, y generalmente aparece como una pequeña pápula cupuliforme, firme, del color de la piel normal (Figura 1), aunque en ocasiones puede ser una lesión sésil, pigmentada o de aspecto angiomatoso. Su número varía y, aunque habitualmente se trata de lesiones únicas, existen también pacientes descritos con lesiones múltiples (Figura 2). En la mayoría de los casos la lesión se localiza en la nariz, aunque otras áreas de la cara pueden estar también afectadas. En raras ocasiones, la lesión se localiza en áreas extrafaciales. 443 Dermatología: Correlación clínico-patológica Figura 1. Pápulas fibrosas en el ala nasal derecha. Figura 2. Múltiples angiofibromas en la cara de un paciente con esclerosis tuberosa. 444 Pápula fibrosa de la nariz y angiofibroma Figura 3. Pápula fibrosa mostrando vasos dilatados en la dermis y numerosos folículos pilosos malformados. Figura 4. Detalle de los vasos dilatados y los numerosos fibroblastos de la dermis. En la unión dermo-epidérmica se observa también un número aumentado de melanocitos. 445 Dermatología: Correlación clínico-patológica La presencia de folículos pilosos anormales es prácticamente constante en las pápulas fibrosas. Cuando no se observan estos folículos anormales puede ser debido a que la biopsia se haya realizado por afeitado y sea demasiado superficial. Estos folículos pilosos suelen estar malformados, y en ocasiones se reducen a meras estructuras embrionarias constituidas por papilas foliculares rudimentarias y gérmenes foliculares primitivos. Independientemente de la morfología o del grado de desarrollo de estos folículos pilosos, cada uno de ellos se encuentra rodeado de una fibroplasia constituida por capas concéntricas de fibras colágenas que remedan las vainas conectivas perifoliculares. Entre estos folículos pilosos se observan también abundantes fibrocitos y vénulas dilatadas y suele existir una grieta de retracción separando este componente angiofibroplásico y la fibroplasia perifolicular. Existen dos raras variantes histopatológicas de pápula fibrosa de la nariz. La primera es la pápula fibrosa de células granulares, en la cual los fibrocitos presentes en el estroma contienen gruesos gránulos citoplasmáticos que dan una apariencia granular a estas células. La otra variante es la denominada pápula fibrosa de células claras, en la que los fibrocitos del estroma presentan un citoplasma vacuolizado que da a estas células la apariencia de células claras. En la actualidad, la mayoría de los autores consideran que la pápula fibrosa de la nariz (o de la cara) es la misma entidad que el fibroma perifolicular, el denominado angiofibroma melanocítico, y el mal llamado adenoma sebáceo de la esclerosis tuberosa, y que en realidad todas estas lesiones son variantes de angiofibroma. Se trata de hamartomas con un componente epitelial (folículos pilo- 446 sos) y un componente mesenquimal (fibrocitos, fibrosis perifolicular e interfolicular y vénulas). Respecto a las células gigantes multinucleadas, los estudios inmunohistoquímicos han confirmado la naturaleza fibrohistiocitaria de estas células, ya que con frecuencia expresan vimentina y factor XIIIa, pero no proteína S-100. También se ha demostrado la positividad de CD34 en algunas células del estroma de la pápula fibrosa. DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL Con frecuencia la pápula fibrosa se confunde desde el pinto de vista clínico con un nevo melanocítico, un angioma o un carcinoma basocelular de pequeño tamaño. Los nevus melanocíticos suelen ser de mayor tamaño y muestran mayor grado de pigmentación que las pápulas fibrosas. Los angiomas faciales también suelen ser de mayor tamaño que las pápulas fibrosas, su consistencia no es tan firme y la coloración es más eritematosa. Por último, los carcinomas basocelulares son lesiones traslúcidas, que muestran abundantes telangiectasias en su interior y suelen tener menor consistencia que las pápulas fibrosas, ya que habitualmente se trata de lesiones muy friables. TRATAMIENTO La pápula fibrosa de la nariz es una lesión absolutamente benigna que, cuando está completamente desarrollada, permanece estable en forma y tamaño. En la mayoría de las ocasiones, su extirpación se lleva a cabo únicamente por motivos estéticos.