ble, cuánto y cómo crece, si está bien conservada, si los locales son

EL ARCHIVO GENERAL GESTOR DEL PATRIMONIO DOCUMENTAL DE CASTILLA Y LEÓN
ble, cuánto y cómo crece, si está bien conservada, si los locales son los adecuados, si están dotados de las oportunas medidas de seguridad, qué servicios
prestan, de qué personal disponen, etc.
Algunas cosas ya se han iniciado:
• Se está procediendo a la elaboración de los mapas de recursos del Sistema, humanos, informáticos o económicos.
• Igualmente, se ha establecido un modelo tipo de memoria anual para los
Archivos Centrales de las Consejerías y los Archivos Territoriales de las
Delegaciones de la Junta en cada provincia, siguiendo el modelo del que
ya se implantó hace unos años para los Archivos Históricos Provinciales
y que sirve para conocer la situación tanto coyuntural como estructural de
los mencionados archivos.
Para potenciar la coordinación del Sistema, se ha establecido un calendario
de reuniones con los distintos archivos centrales y territoriales cuyos objetivos
son múltiples. Entre otros cabe destacar:
• Editar el Manual de gestión documental11
• La elaboración de una Instrucción única para las Secretarías Generales y
Territoriales sobre el funcionamiento de los archivos de oficina en relación con las transferencias documentales a los archivos correspondientes.
Es también necesario el aprovechamiento de las nuevas tecnologías (ya no
tan nuevas) para conseguir dar respuestas ágiles a las demandas de información
que se nos hagan. Para ello, se ha propuesto la centralización de las bases de
datos de que disponemos, y las futuras que puedan elaborarse, en el Archivo
General, para facilitar el intercambio de información, normalizarla y optimizar
los recursos disponibles. Asegurar la presencia del Sistema de Archivos de Castilla y León en Internet, establecer programas de digitalización que permitan
hacer exposiciones virtuales o la posibilidad de realizar consultas remotas, son
metas que deben conseguirse en un plazo no muy largo si se pretende que los
archivos tengan presencia en la sociedad del conocimiento.
En el plano de la normalización descriptiva, Castilla y León fue pionera en el
intento de adaptación de las normas internacionales de descripción archivística12
a través del Manual de Descripción Multinivel13, pero en la actualidad este tipo
de trabajos están prácticamente parados. La recuperación de la iniciativa mediante
el establecimiento de un grupo de trabajo de la Junta sobre Normas de Descripción, especialmente en lo tocante a la creación de convenciones sobre fondos,
series, documentos especiales o cuadros de clasificación, sería un paso decisivo
para ello. La reciente publicación del inventario sobre el Consejo General de Castilla y León14 es un buen ejemplo de lo que podría hacerse en esta dirección.
Es también imprescindible la creación de una base de datos de Autoridades
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