Estudios sobre las vidas de DAVID Y SALOMÓN DR. BRIAN J. BAILEY Publicaciones Sion Un ministerio del Instituto Ministerial Sion Título original: “Studies on the Lives of David and Solomon” Estudios sobre las vidas de David y Salomón Registrado © por Brian J. Bailey, Agosto 2001. Todos los derechos reservados Diseño de portada: Registrado © por Brian J. Bailey y sus licenciadores. Todos los derechos reservados. Libro de texto de Zion University. Usado con permiso. Edición en español impresa en Julio 2004. Publicado por Zion Christian Publishers. Traducción al español: Equipo de Honduras y México. Edición: Gisela Casillas, Carla Borges, 2004. A menos que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas fueron tomadas de la versión Reina-Valera en su revisión de 1960, © 1960 Sociedades Bíblicas Unidas. Impreso en los EE.UU. de Norteamérica por: Zion Christian Publishers P.O. Box 70 Waverly, New York14892 EE. UU. de Norteamérica Teléfono: (1-607) 565-2801 Fax (1-607) 565-3329 www.zionfellowship.org ISBN # 1-890381-62-4 DEDICATORIA A la gloria de Dios, y a mi esposa Audrey, quien me ayudó e inspiró a acercarme al Hijo mayor del rey David; aquel que es mayor que Salomón—el Señor Jesucristo. Brian J. Bailey. AGRADECIMIENTOS A los equipos de traducción de Honduras, México y Guatemala, que realizaron la traducción de este libro, corrección de pruebas y los detalles tipográficos de esta obra. A Gisela Casillas de Fragoso y Carla Borges, por su colaboración en la edición y revisión de este libro. A Sarah Humphreys , por su excelente diseño de la portada. Al equipo editorial de Zion Christian Publishers, Carla Borges, Jason Glowski, Daniel Humphreys, David Kropf. Deseamos extender nuestra gratitud a todos ustedes ya que sin todas sus horas de arduo trabajo la publicación de este libro no hubiera sido posible. Estamos verdaderamente agradecidos por su diligencia, creatividad y excelente labor en la compilación de este libro para la gloria del Señor. Índice PRIMERA PARTE LA VIDA DE DAVID Capítulo 1 David y Goliat Capítulo 2 David y Saúl Capítulo 3 La formación de un rey Capítulo 4 La experiencia de Siclag Capítulo 5 David y Betsabé Capítulo 6 El constructor del templo SEGUNDA PARTE LA VIDA DE SALOMÓN Capítulo 7 Los años formativos de Salomón Capítulo 8 La ascensión de Salomón al trono Capítulo 9 La construcción del templo Capítulo 10 El apogeo de su reinado y gloria Capítulo 11 Sus años finales y decadentes Capítulo 12 Comparación entre David y Salomón PRIMERA PARTE BOSQUEJO DE LA VIDA DE DAVID A DAVID SE LE CONOCE POR: A. Sus características piadosas y sus logros: 1. Un varón conforme al corazón de Dios (1 Samuel 13:14). 2. El dulce cantor de Israel (2 Samuel 23:1). 3. Profeta (2 Samuel 23:2). 4. Sacerdote (Salmo 40). 5. El rey que recibió tres unciones: a. Llamado como un pastorcillo. b. Escogido como el rey de Judá. c. Fiel como el rey de Israel. 6. Símbolo de Cristo. 7. El rey guerrero que condujo a Israel al reposo (Hebreos 4:7; 2 Samuel 7:1, 7). B. Su pecado de adulterio y las consecuencias: 1. Las razones: a. No guardó las leyes para los reyes (Deuteronomio 17:17). b. Debió de estar en el campo de batalla, sin embargo se quedó en casa (2 Samuel 11:1). c. Debió de respetar la santidad del matrimonio (2 Samuel 11:3). 2. El juicio: a. Heridas, vergüenza y afrenta (Proverbios 6:32, 33). 10 David y Salomón b. Su hija amancillada (2 Samuel 13:1). c. Su hijo Amnón es asesinado (2 Samuel 13:29). d. Su hijo Absalón lo traiciona (2 Samuel 15:1). 3. Su restablecimiento: a. Su genuino reconocimiento del pecado (Salmo 51:3, 4a). b. Aceptación de los juicios de Dios (Salmo 51:4b; Levítico 26:41). c. Abandono del pecado (Salmo 51:10; Oseas 14:2). d. Espera con humildad que Dios lo libere (Salmo 40:1). La vida de David Capítulo 1 DAVID Y GOLIAT I. DAVID Y GOLIAT A. GOLIAT—EL FILISTEO B. DAVID—EL HOMBRE DE DIOS 1. Su genealogía—La tribu de Judá 2. Su misión—La liberación y la victoria a. Derrotando a los Goliats b. Recibió diez panes c. Fiel en sus responsabilidades d. Su actitud de sumisión e. Él hablaba en fe constantemente f. Fue preparado para ser rey g. Sabía que la batalla era del Señor h. Para llevar a una nación a la victoria C. LOS GOLIATS PERSONALES 1. Representan ataduras 2. Un espíritu maligno 3. Una imagen 11 12 David y Salomón En las Sagradas Escrituras, y quizá en toda la historia, una de las batallas más famosas es la de David y Goliat; de ella podemos aprender lecciones aplicables a iglesias, familias e individuos. A veces un Goliat espiritual (o enemigo) se levanta y ataca al pueblo de Dios. Del relato en 1 Samuel 17 acerca del combate entre David y Goliat, podemos aprender sobre la naturaleza del enemigo y el camino a la victoria. A. GOLIAT—EL FILISTEO Se nos dice que Goliat era un paladín de los filisteos. De acuerdo con la ley de la primera mención, podemos ver en Génesis 26:12-16 que los filisteos representan la envidia y los celos (cuando algo es mencionado por primera vez en la Biblia, esa será la clave para la interpretación de la verdad). Es frecuente que el obstáculo de la envidia se interponga en el camino de cada uno de nosotros. ¡Tiene que ser derribado! “Y ya también el hacha está puesta a la raíz de los árboles” (Mt. 3:10). En 1 Samuel 17:4-7 vemos que en la descripción de Goliat hay una repetición constante del número seis. Este número representa “la carne” y es un ejemplo o tipo del hombre de pecado (el número 666, Apocalipsis 13:18). También puede representar a un espíritu maligno. Goliat tiene una doble connotación de las obras de la carne y de las de un espíritu maligno. Otro punto que cabe destacar es que Goliat es que era un gigante. Él representa a un enemigo que no puede ser vencido por fuerzas naturales, ya sea el poder humano, la sabiduría o capacidad natural, o aun por un gran número de personas. La vida de David 13 Goliat mantuvo con mucho temor y temblor a todo un ejército y a una nación entera. En nuestros días, es posible que los Goliats espirituales mantengan ciudades, naciones, familias y personas, literalmente atadas. La Escritura nos relata que durante cuarenta días, Goliat se presentó por la mañana y por la tarde. No desistía de su implacable oposición, intimidación y burla de Israel. Seguía apareciendo y toda la nación sentía su presencia. Por eso considero que Goliat representa una atadura de la que la gente está muy consciente. En 1 Samuel 17 es evidente que ni los líderes elegidos de Israel ni el que Dios mismo había escogido, Saúl, podían liberar al pueblo. Tampoco Israel, actuando como un bloque de gente unida, podía liberarse de semejante yugo. No debemos olvidar que en el Salmo 108:9, hablando de los filisteos, Dios dice: “Me regocijaré sobre Filistea” (los filisteos), lo que demuestra que los Goliats que se nos oponen, sea cual sea su estatura, están destinados a ser víctimas del pueblo de Dios. B. DAVID—EL HOMBRE DE DIOS David, quien tuvo la clave de la victoria sobre Goliat, fue el octavo hijo de Isaí. El número ocho significa vida nueva, un nuevo comienzo. El manto davídico es el único capaz de derribar cualquier Goliat espiritual, y ésta es una de las razones por las que es tan importante estudiar la vida de David. Cristo se humilló a sí mismo cuando se hizo llamar Hijo de David porque en la vida de David, especialmente como lo vemos en los Salmos, vemos muchos aspectos de la vida, naturaleza y carácter de nuestro Señor Jesucristo que no 14 David y Salomón encontramos en los Evangelios. David, como el Señor Jesús, es un ejemplo para nosotros. Otro aspecto importante acerca de David, es que resucitará, y será el rey que gobierne en Jerusalén durante el milenio. De esta manera, David es símbolo de los que tendrán parte en la primera resurrección y que serán “reyes y sacerdotes” con el Señor durante el reino milenial. Un aspecto de importancia particular es que David halló favor y gracia ante los ojos de Dios. Él simboliza a las personas incluidas en las promesas de Romanos 5:17, que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia, y que “son capaces de gobernar y reinar” en esta vida presente. Este es el llamado que Dios nos hace: gobernar y reinar en esta vida presente. Su propósito es que ganemos las batallas que están por delante, para que poseamos todo lo que Él ha preparado para nosotros. 1. Su genealogía — la tribu de Judá David era de la tribu de Judá y, por consiguiente, heredero de las promesas de esa tribu. En Génesis 49:1, Jacob reúne a sus hijos y les dice: “Juntaos y os declararé lo que os ha de acontecer en los días venideros”. En Génesis 49:8 Jacob dice (hablando de Judá): “Tu mano en la cerviz de tus enemigos”, (en otras palabras: “derrotarás a tus enemigos”). Asimismo, agrega en el versículo 10: “No será quitado el cetro [bastón de mando para los gobernadores] de Judá, ni el legislador de entre sus pies”. Esto es aplicable a David, que gobernó a Israel como el más grande de todos sus reyes. Él sostuvo el cetro y tipificó al Rey de reyes y Señor de señores. La vida de David 15 David heredó las promesas que Dios dio por medio del patriarca. Es importante que conozcamos y comprendamos las promesas que Dios ha dado tanto para nuestras vidas personales, como para las congregaciones en las que Él nos ha puesto. Puede ser que hayamos recibido promesas hace mucho tiempo, pero Él las honrará. David estaba consciente de su genealogía y de su herencia, y se dirigió hacia todo aquello que Dios le había prometido y le había provisto. Como individuos, nos conviene conocer los rasgos negativos de nuestra genealogía. Mi esposa y yo hemos visto a muchas personas carentes de victoria en sus vidas, mas bajo la unción del Espíritu de Dios, el Señor ha revelado que esa falta de victoria radica en generaciones pasadas. Por ejemplo, hay ataduras que se transmitieron de padre a hijo. Cuando éstas se han revelado, reconocido y expuesto a la luz, estas sirven como el medio para liberar a esos seres queridos. Por lo tanto, la genealogía es importante no solo en lo que se refiere a los aspectos positivos, sino también a los negativos, porque éstos se pueden vencer por el poder de Dios y convertirse en algo bueno. 2. Su misión — La liberación y la victoria Existen muchos puntos importantes que el Espíritu Santo nos revela en la vida de David, particularmente de su encuentro con Goliat. Podemos resumirlos así: a. David sabía que podía derrotar a Goliat debido a la unción del Señor. b. Recibió diez panes y diez quesos (1 S. 17:17, 18). Los diez panes representan la ley, y los diez quesos, la Palabra 16 David y Salomón que Dios le habló. David fue un hombre que obedeció tanto la ley como la palabra que recibió del Señor. Él caminó a la luz de lo que Dios le reveló. c. Cuando dejó atrás el rebaño, lo puso en manos de un cuidador. Esto revela mucho de su carácter. Se preocupaba por sus responsabilidades presentes y era fiel. No salió simplemente a enfrentar un nuevo y mayor desafío (Goliat), sino que se aseguró que todo estuviera en orden, antes de ir a pelear contra el gigante. d. David procedía en obediencia a su padre, con una actitud sumisa (1 S. 16:19-23). e. David hablaba en fe constantemente, y Dios quiere que nosotros también hablemos en fe constantemente. ¡David confesó lo que su Dios podía e iba a hacer! f. David había recibido la preparación necesaria para entrar en la presencia del rey; y fue comisionado por Saúl en vista de sus victorias pasadas sobre el oso y el león. En otras palabras, David había experimentado la victoria en circunstancias menores (que vinieron por medio de la unción del Espíritu de Dios), y esto contribuyó a prepararlo para combatir a Goliat. Las pequeñas victorias ayudan a capacitarnos para combatir a nuestro “Goliat”. Muchas veces, agobiados por las batallas pequeñas, descuidamos la preparación que Dios está forjando en nosotros para victorias futuras. g. David desechó la armadura de Saúl. Él no tomó consigo ningún equipo que no hubiera probado. Tomó las armas que estaba acostumbrado a usar (la honda y la piedra). Mas su La vida de David 17 seguridad y confianza estaban puestas en lo que Dios haría y no en su propia fuerza o habilidad. David gritó a Goliat (1 S. 17: 45-47): “Yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los Ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has provocado. Jehová te entregará hoy en mi mano y yo te venceré y te cortaré la cabeza, y daré hoy los cuerpos de los filisteos a las aves del cielo y a las bestias de la tierra; y toda la tierra sabrá que hay Dios en Israel. Y sabrá toda esta congregación que Jehová no salva con espada y con lanza; porque de Jehová es la batalla y Él los entregará en nuestras manos”. Esta es la actitud que Dios quiere que tengamos cuando entramos en batalla contra los Goliats espirituales que se levantan contra nosotros. h. Lo más extraordinario de la victoria de David fue que se llevó con él a toda la nación de Israel. Cuando David derribó a Goliat, toda la nación de Israel despojó al resto de los filisteos. Yo creo que cuando nosotros, como congregaciones del pueblo de Dios, derribemos a los “Goliats” que se nos oponen, experimentaremos no solo una victoria personal, sino que todo el Cuerpo de Cristo en nuestros pueblos o ciudades, conocerá la victoria y despojará por completo a los enemigos que han estado estorbando los propósitos de Dios. Cuando el paladín de los filisteos fue derrotado, la opresión fue rota totalmente. 18 David y Salomón C. LOS “GOLIATS” PERSONALES ¿Qué representa Goliat en nuestras vidas? Hay tres posibilidades: 1. Goliat puede representar una atadura familiar proveniente de generaciones pasadas, que no ha sido eliminada todavía. Las ataduras familiares pueden ser terribles. Hace poco, mi esposa y yo escuchábamos a una abuela contarnos cómo cierto pecado que predominaba en la familia, estaba ahora manifestándose en su nieta. La abuela exclamaba: “¡Oh, esto debe parar! ¡No debe propagarse a otra generación!”. Yo creo que esta es la actitud que Dios quiere que tengamos hacia tales ataduras. Si existe en usted una atadura familiar proveniente de generaciones pasadas, de sus padres y abuelos, es necesario hacer algo; de lo contrario, podría transmitirse a sus hijos. La respuesta de Dios es que el “Goliat” de las ataduras familiares puede ser, y será, derribado. 2. Goliat también puede representar un espíritu maligno que oprime y tiene cautiva a una persona amada. Dios quiere romper esa esclavitud y liberar a los cautivos. 3. Goliat también puede ser la imagen de un enemigo espiritual, un poderoso Goliat, que se levanta contra una congregación del pueblo de Dios, tratando de impedir que ésta posea la herencia y la tierra que Dios le ha prometido. Este Goliat puede impedir que el pueblo de Dios espiritualmente se abra brecha hacia nuevas áreas y “altiplanicies” en Dios. Dios quiere que el poder de este enemigo sea quebrantado. Él quiere poner una santa determinación en nuestros corazones, y hacer que broten la La vida de David 19 fe y la esperanza para que digamos: ¡Oh, este gigante será derribado! He visto a Goliat erguirse tan alto, pero también he visto la potencia del Espíritu de Dios derribarle. Debemos entender que Dios ha dispuesto que tales enemigos sean derribados por Su pueblo moviéndose en el poder de Su Espíritu. ¡Oh cuán glorioso es saber que ciertos enemigos están allí solo porque Dios dispuso que sean derribados. Es alentador contemplar al enemigo y decirle: ¡Oh, tú has sido ordenado por Dios para ser derrotado! Después de destruir a Goliat, Israel obtuvo siempre la victoria sobre los filisteos. A partir de ese momento, ya no importaba lo que los filisteos trataran de hacer, Israel siempre prevalecía, pues había quebrantado el poder del gigante. Al poner nuestros ojos en el Señor, y confiar en que los “Goliats” serán derribados, tanto en nuestras propias vidas como en la congregación, debemos estar convencidos de que cuando sean derribados, siempre venceremos en esas áreas. Más tarde estos gigantes no podrán recobrar la vida por sí mismos para seguir oprimiéndonos, porque una vez derribado un “Goliat”, siempre tendremos el poder para triunfar sobre aquello que antes nos agobió. Hagamos guerra bajo el manto davídico, combatiendo y derribando a Goliat. Es necesario dejar que el Espíritu de Dios se levante en nuestros corazones y diga: “Oh Dios, por favor, Goliat será combatido en nuestras vidas, en nuestras familias y en los asuntos de nuestra iglesia”. Al igual que David, declaremos ante Dios: “¿Quién es este filisteo incircunciso?, ¿Cómo puede permanecer de pie ante la unción del Señor?”. 20 David y Salomón Al declararlo por el Espíritu de Dios, podremos ver, como vio David, que Goliat ciertamente cae. Veremos cómo se rompe todo aquello que nos ataba, y entraremos en una nueva esfera de victoria que nunca antes habíamos conocido. Goliat había mantenido cautiva a Israel por demasiado tiempo, pero llegó un día divinamente señalado, en que Dios dijo: “Hay una nueva unción, hay una palabra fresca, hay una esperanza, hay una fe, hay una victoria por ganar. Goliat, hoy te toca caer ante la unción de Dios que está en su pueblo”. Por lo tanto, confiemos ahora en que Dios quebrantará al Goliat que amenaza nuestras familias y al Goliat que ha agredido a nuestra congregación. Entonces, por la gracia del Señor, avancemos a una mayor altura en Dios, y entremos a poseer la tierra. La vida de David 21 Capítulo 2 DAVID Y SAÚL I. DAVID Y SAÚL A. SAÚL—LA RAMA SIN FRUTOS (Ungido, mas no caminando en la luz) 1. 2. 3. 4. ¿Por qué fue escogido Saúl? Las consecuencias de la elección El significado de sus señales Un corazón dividido y la desobediencia hacen caer 5. Saúl y David B. DAVID—LA RAMA FRUCTÍFERA (Ungido y con un carácter desarrollado) 1. Sumisión 2. Servicio 3. Sabiduría 4. Fidelidad C. COMPARACIÓN ENTRE DAVID Y SAÚL (La obediencia, clave para ser fructífero) 1. Obediencia a medias — El defecto fatal de Saúl 2. Obediencia completa — Lo que Dios busca en su pueblo 22 David y Salomón TRASFONDO HISTÓRICO En la época en que David peleó contra Goliat y le dio muerte, Saúl reinaba en Israel. Saúl había sido ungido por Dios para ser el primer rey de Israel, pero su vida fue una mezcla de obediencia parcial a Dios y amor al mundo. La vida de Saúl contrasta de manera impresionante con la de David, su servidor por muchos años. De estos dos hombres podemos aprender valiosas lecciones en cuanto a las características de un cristiano que no produce fruto (Saúl) y las cualidades de un cristiano fructífero (David). A. SAÚL—LA RAMA SIN FRUTOS Ungido, mas no caminando en la luz Saúl fue como una rama muerta una rama que está unida a la vid pero que no tiene la vida de la vid fluyendo por sus arterias. En consecuencia, Saúl no produjo fruto. En Juan 15:2, el Señor Jesucristo habló de la gente que es como Saúl: “Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará”. El rey Saúl era una rama sin fruto y, con el tiempo, Dios tuvo que hacerlo a un lado, para dar lugar a alguien que sí produjera fruto, el rey David, un varón conforme al corazón de Dios. Existe un nuevo mover del Señor en Su Iglesia, el cuál nos llevará a nuevas alturas de gloria. Él desea que penetremos en un nuevo ámbito de gloria y en una nueva dimensión del Espíritu de Dios. Pero la “madera muerta” no podrá entrar a este nuevo lugar en Dios. En el Espíritu, yo he visto ramas que están muertas. Algunas se han unido a la Iglesia pero no son totalmente obedientes al La vida de David 23 Señor; y Dios desea realizar un cambio en estas personas. Lo mejor que podemos hacer es siempre escuchar a Dios y cambiar antes de que el Señor se mueva, ya que de esta manera nosotros podremos tener parte en Sus gloriosos planes. 1. ¿Por qué fue escogido Saúl? Saúl fue el primer rey de Israel (1 S. 9). Era hijo de Cis, de la tribu de Benjamín y llegó a ser rey cuando el pueblo de Israel rechazó a Dios y a Samuel para que los gobernaran. En Oseas 13:11 el Señor, recordando esto, dijo: “Te di rey en mi furor”. La tribu de Benjamín no había recibido promesas concernientes al trono; y por lo tanto, a diferencia de David, en Saúl no se estaba cumpliendo ninguna profecía. Entonces, ¿por qué fue escogido Saúl como rey? 1 Samuel 8:4, 5 nos relata que todos los ancianos de Israel vinieron al profeta Samuel y le dijeron: “Constitúyenos un rey que nos juzgue”. Cuando Samuel oró al respecto, Dios le dijo: “No te han desechado a ti sino a Mí, para que no reine sobre ellos”. Es muy peligroso desear ser como alguien más. Los hijos de Israel vieron a las naciones que los rodeaban; vieron que tenían reyes que los gobernaban y dijeron: “Queremos ser como las otras naciones”. A menudo sucede que aunque lo que anhelamos o deseamos esté mal, en un momento dado Dios no lo niega más, y concede los deseos de nuestro corazón. Pero antes de dar un rey a los hijos de Israel, Dios dijo a Samuel que les advirtiera acerca de las consecuencias (1 Samuel 8:11-18). Como resultado de desear ser como los demás pueblos, ellos experimentarían servidumbre y no libertad. 24 David y Salomón El Salmo 106:15 ilustra el mismo principio al relatarnos un incidente que tuvieron los hijos de Israel en el desierto: “Y Él les dio lo que pidieron mas envió mortandad sobre ellos”. Debemos ser muy cuidadosos al orar; debemos estar seguros de que el deseo de nuestros corazones concuerda con la voluntad de Dios. Hay épocas específicas de nuestras vidas en que de repente creemos romper barreras invisibles en el Espíritu, y sentimos que en esos momentos podemos recibir lo que anhelamos. Cuán importante es verificar si nuestros anhelos concuerdan con el sentir de Dios, y si nuestros objetivos son lo que Él desea darnos. De otra manera, tendremos escasez en el alma. 2. Las consecuencias de la elección Los hijos de Israel se negaron a escuchar a Samuel porque deseaban ser como las otras naciones (1 S. 17:19, 20). En cierto modo, la gente encuentra seguridad en la esclavitud; pero, habiendo puesto una cosa en movimiento, los hijos de Israel comenzaron a cosechar las consecuencias. Poner una cosa en movimiento es algo pavoroso, porque a su tiempo se cosechan las consecuencias. Lo más sabio es ayunar, orar y clamar a Dios: “Señor, escoge por mí”. Entonces, por Su gracia, podremos poner en movimiento cosas que estaban dispuestas para nosotros desde antes de la fundación del mundo, de acuerdo con el plan celestial para nuestras vidas. Y es entonces que tendremos una razón para gozarnos. Pero Israel, echó a andar algo que era irrevocable. Los israelitas pusieron en movimiento un deseo que se oponía a la voluntad de Dios para sus vidas. Y Dios se los admitió. Uno piensa que si algo contradice la voluntad de Dios, Él pondrá La vida de David 25 todo obstáculo en nuestro camino. ¡Pero no, Dios no lo hará! Él hará que acontezca aquello que hemos echado a andar, aunque ello contradiga los más altos propósitos que tiene para nuestras vidas. He oído a algunos decir: “Yo sé que esto es de Dios porque cuando oré, sucedió”. ¡Pero eso no significa nada! Lo importante es que sea congruente con el plan Divino. Eso es lo que determina si es la voluntad de Dios o no. Cuando los ancianos de Israel llegaron a pedir un rey, Dios se los concedió. No solamente les dio un rey, sino que también escogió al hombre (Saúl) que habría de reinar, y además hizo proezas a favor de ese gobernante. Vemos pues, que es necesario tener mucho cuidado cuando activamos algo por medio de la oración. En primer lugar, debemos estar seguros de que lo que pedimos tiene la aprobación del Dios Todopoderoso, porque una vez bautizados en el Espíritu Santo, tenemos cierta autoridad y habilidad para hacer que las cosas sucedan. Esto le sucedió a Israel. Dios escogió por ellos. Eligió al rey que ellos querían. En lo natural, Saúl tenía muchas cualidades. El pueblo deseaba una persona que saliera por él a la guerra, y Dios les proporcionó un hombre de elevada estatura, que de hombros para arriba superaba a todos los del pueblo; un brillante guerrero. 3. El significado de sus señales El propio representante de Dios, Samuel, se encontró con Saúl, quien recibió ciertas señales (1 S. 10:1-7). El hecho de que Dios dé señales no significa necesariamente que una persona esté en la voluntad de Dios. Simplemente indica que 26 David y Salomón sigue el curso de una decisión tomada. Según estudiamos las señales relacionadas con Saúl, vemos en ellas grandes signos de interrogación: a. La unción de Saúl (1 S. 10:1). Saúl fue ungido por Samuel con una redoma (un frasco) de aceite. Una redoma es hecha a mano, hablando de los esfuerzos del hombre. En comparación, David fue ungido con el aceite vertido de un cuerno, que indica la creación de Dios. b. La ofrenda de los panes (1 S. 10:3, 4). A Saúl se le dijo que se encontraría con unas personas que llevarían tres panes, de los cuales le serían entregados solamente dos. El número tres es el símbolo de la Deidad, de la Trinidad. (Hay tres cielos, tres áreas en el Templo: el Atrio, el Lugar Santo y el Lugar Santísimo). Esta señal significaba que Saúl no podría participar de todo lo que estaba en el reino. Solo podría llegar hasta el Lugar Santo, pero nunca experimentar toda la abundancia y gloria de la presencia de Dios. c. El don de profecía (1 S. 10:5-6, 9-11). Cuando Saúl se alejó de Samuel, Dios le dio otro corazón, y cuando se encontró con un grupo de profetas, empezó a profetizar de tal manera, que los que lo vieron se preguntaron: “¿Saúl también entre los profetas?”. Sin embargo, el ejercicio de los dones espirituales no es en sí ninguna evidencia de la aprobación de Dios. El mismo Jesús dijo, en Mateo 7:22, “Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios y en tu nombre hicimos muchos milagros?”. Pero Jesús dijo que no reconocería a aquellos que no hubiesen caminado en obediencia a Su voz. La vida de David 27 El hecho de que Dios dé señales no significa que una persona esté dentro de la voluntad de Dios. 4. Un corazón dividido y la desobediencia hacen caer a. Un corazón dividido: Saúl era un enigma. Su corazón tenía doblez y por eso su conducta era variable. Un día seguía a Dios ardientemente, y otro día caminaba con el mundo. Cuando llegó el momento de elegir públicamente al rey, todo Israel se reunió y empezó a echar suertes delante de Samuel para que el pueblo entero pudiera ver al hombre escogido por Dios. Entonces la tribu de Benjamín fue seleccionada, y de ella, la familia de Cis, y finalmente, Saúl. Pero en el preciso momento en que él como rey debía de estar presente para recibir el homenaje del pueblo, Saúl se encontraba escondido entre el bagaje. Al esconderse, su comportamiento fue el de un hombre que evade sus responsabilidades. Esto fue lo que Saúl hizo prácticamente toda su vida. Él evadió sus responsabilidades, y nunca pudo hacerle frente a la realidad. En el reino de Dios hay que darle la cara directamente a las áreas de problema. Cuando Dios nos habla, tenemos que atender, y dejarlo obrar en nuestros corazones. En momentos de decisión, debemos tomar la determinación correcta, y no esperar simplemente a que desaparezca el problema. En el reino, no nos podemos esconder jamás. Sin embargo, Saúl, el que había de guiar a Israel a las batallas, se ocultó y evadió sus responsabilidades. Muchos cristianos hacen lo mismo, aceptan todo muy complacidos, hasta que llega el momento de la decisión. Pero debemos entender que nosotros mismos estamos hechos de 28 David y Salomón decisiones y opciones. Dios nos enfrenta a decisiones y opciones una y otra vez. Lo que decidimos marca nuestro rumbo. Cuando decidimos alinearnos con la palabra que Dios nos ha hablado, elegimos bien y ponemos los pies en la senda correcta. Pero cada vez que tomamos una decisión equivocada, apartamos nuestros pies del camino de Dios. A menudo ocurre que Dios guía a las personas a momentos de decisión, pero ellas, en vez de enfrentar la prueba directamente y con resolución, muchas veces procuran, como Saúl, evadir la responsabilidad o la decisión. En el reino, tenemos que ser resueltos y tratar las cosas de frente. b. Desobediencia: Saúl desobedeció cuatro veces a Dios. Estos incidentes ilustran lo inestable que era Saúl y cómo su comportamiento oscilaba de aquí para allá, como un péndulo. En los siguientes párrafos, observe por favor los repetidos actos de desobediencia de Saúl, cuando se encontraba en momentos cruciales de decisión. La frecuente desobediencia de Saúl • 1 Samuel 13:8-14 Saúl usurpó el ministerio sacerdotal. En el momento en que debió estar presente para recibir el reino, Saúl se escondió. Después, se atribuyó un ministerio que Dios no le había dado y, desobedeciendo la palabra de Dios, ofreció sacrificios que solo podían ofrecer los sacerdotes. Aquel hombre que no sabía aceptar sus propias responsabilidades, se atribuyó un ministerio que no le correspondía. • 1 Samuel 14:24 Cuando Israel salió a la guerra, Saúl ordenó que nadie comiera. Su hijo Jonatán que no escuchó la orden de su padre, comió un poco de miel. Por ello, La vida de David 29 Saúl quiso matarlo. Saúl puso a su pueblo bajo esclavitud y, luego, en un acto terriblemente impulsivo, quiso aniquilar a su propio hijo. • 1 Samuel 15:9 Dios le dijo a Saúl que matara a todos los amalecitas y a su ganado. Saúl, el que había deseado matar a su propio hijo Jonatán cuando éste inocentemente desobedeció sus órdenes comiendo un poco de miel, él mismo desobedeció a Dios dejando vivos a Agag, rey de los amalecitas, y a todo el ganado. Dios le había dado instrucciones específicas a Saúl de que matase al rey Agag, pero él no obedeció. • 1 Samuel 15:21-31 Cuando el profeta Samuel reprendió a Saúl por no haber matado a Agag, su reacción fue pedir a Samuel que lo honrara ante todo el pueblo. Saúl era amador de la gloria de los hombres más que de la voluntad de Dios. “¿Cómo podéis vosotros creer, pues recibís gloria los unos de los otros y no buscáis la gloria que viene del Dios único?” (Jn. 5-44). 5. Saúl y David - La inestabilidad de Saúl también se manifestó en su forma de tratar a David. a. Posesivo: Al principio, Saúl amó a David. Después de la batalla con Goliat, le amó mucho, y le hizo su paje de armas (1 S. 16:21). Pero siendo el amor de Saúl posesivo, no le permitió a David regresar a la casa de su padre. b. Celoso: Más tarde, movido por los celos, el corazón de Saúl se volvió contra David cuando las mujeres de Israel empezaron a cantar: “Saúl hirió a sus miles, y David a sus diez miles”. Los celos son horrendos. Los celos constituyen uno 30 David y Salomón de los juicios y maldiciones de Dios. Dios atormenta con el espíritu de celos a los que no proceden con sinceridad. Acerca de Israel, dice: “Los provocaré a celos con una nación que no es nación”. Está diciendo: “Si no quieren andar en mis caminos, ¿cómo los castigaré? Levantaré otra nación (y esta nación aludida es especial, es la iglesia del Señor Jesucristo) para provocarlos a celos, y ustedes verán cumplirse en ella todas las bendiciones y las promesas, de modo que estén celosos de ella”. Este es uno de los juicios de Dios. Hubo veces en que Saúl intentó matar a David impulsado por los celos. En cada ocasión, vemos que Saúl simboliza al cristiano que no da frutos, el que ha sido ungido por el Espíritu Santo, pero no camina en la luz. Saúl simboliza al cristiano que no da frutos, el que ha sido ungido por el Espíritu Santo, pero no camina en la luz. B. DAVID—LA RAMA FRUCTÍFERA Ungido y con el carácter desarrollado A pesar de que Saúl se apartó de los caminos de Dios, el Señor lo usó para producir en David las cualidades que son necesarias en un verdadero líder. Durante los casi trece años que David sirvió fielmente a Saúl, Dios obró en su vida y desarrolló en él las cualidades de sumisión, servicio, sabiduría y fidelidad (1 S. 18:5). 1. Sumisión: David estuvo sujeto primero a su padre y luego a Saúl, a pesar de la forma malvada e injusta en que lo trató. Podemos comparar la actitud de David con la del centurión que al hablar con Jesús le dijo: “Yo también soy un hombre sujeto a autoridad”. La vida de David 31 2. Servicio: Pese a los desatinos de Saúl, David le sirvió, y al hacerlo, Dios le enseñó diversas cosas que desarrollaron en él importantes cualidades. David aprendió a tener la actitud de un verdadero siervo, y se mantuvo en ella aun sabiendo que él había sido ungido para rey. Mi esposa y yo hemos estado en situaciones en las que hemos tenido que servir “en casa de Saúl”. Hemos estado sujetos a personas que encajan en la descripción de Saúl y, a través de esas experiencias, Dios nos ha enseñado mucho. 3. Sabiduría: Saúl atacaba constantemente a David, pero a medida que aumentaban sus ataques, también aumentaba la sabiduría de David. ¿En qué momento necesitamos sabiduría? Cuando tenemos que caminar con mucho cuidado, como un gato sobre un muro cubierto de pedazos de vidrio; con tanto cuidado, que no podemos darnos el lujo de cometer un error porque seremos criticados de una forma u otra. Hacemos cuanto podemos para mantener el equilibrio. Entonces necesitamos la sabiduría de Dios. Es bajo estas circunstancias que Dios desarrolla la sabiduría. Así se encontraba David en la casa de Saúl, tenía que caminar como si estuviera en el filo de una navaja. Tuvo que comportarse con mucho cuidado, y fue a través de ello que Dios desarrolló en él la sabiduría. 4. Fidelidad: Para que David pudiera ser líder del pueblo de Dios, necesitó también de esta cualidad. Más que los otros, él tuvo que ser fiel a Saúl, el ungido de Dios, aun cuando Saúl trató de matarlo. Cuando David tuvo la oportunidad de matar a Saúl, el Espíritu de Dios se lo impidió. David siempre fue fiel. 32 David y Salomón Dios desarrolla sus cualidades por medio de la adversidad Juntamente con la sabiduría, la fidelidad es una de las cualidades exigidas en el líder. Ambas se desarrollan en circunstancias muy irritantes. La sabiduría se produce cuando caminamos “en el filo de la navaja”, y la fidelidad resulta de ser fieles y sinceros con alguien que nos trata con falsedad. Por medio de la adversidad, Dios desarrolla en nosotros sus cualidades. C. COMPARACIÓN ENTRE DAVID Y SAÚL La obediencia—Clave para ser fructífero 1. Obediencia a medias: el defecto fatal de Saúl. La vida infructuosa de Saúl se explica con su obediencia a medias. En 1 Samuel 15, vemos que cuando Saúl desobedeció a Dios perdonándoles la vida al rey de los amalecitas y a sus ovejas y bueyes, Samuel le preguntó en el versículo 19: “¿Por qué no obedeciste a la voz del Señor?”, a lo que Saúl respondió diciendo que sí había obedecido, pero... En otras palabras, su obediencia había sido parcial, no completa. La obediencia a medias es probablemente la forma de desobediencia más astuta y peligrosa. Obedeciendo a medias podemos justificar nuestros propios actos. Puede ser que Dios nos diga: “Avancen con los dos pies”, y que nosotros adelantemos el pie derecho diciendo: “Señor, te estamos obedeciendo”. Sin embargo, Dios pide una obediencia completa. La respuesta de Samuel a Saúl es muy importante: “¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas como La vida de David 33 en que se obedezca a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios” (15:22). La obediencia completa es de vital importancia incluso más importante que los sacrificios de nuestra parte. Saúl estaba preparado para ofrecer a Dios toda clase de sacrificios, y asimismo nosotros en nuestras vidas, a veces le daríamos a Dios lo que fuera, con tal de no hacer lo que Él indica. En los días de Jesús, los escribas y los fariseos escudriñaban esmeradamente la ley del Señor. Al pagar los diezmos, pesaban hasta la semilla más diminuta de sus huertos, para estar seguros de estar dando a Dios la décima parte. Sin embargo, a pesar de ser tan minuciosos en sus sacrificios, sus corazones estaban muy lejos de obedecer a Dios. Podemos sacrificarnos. Podemos obedecer a Dios en ciertos aspectos. Podemos recibir las bendiciones de Dios, pero lo que Dios exige ahora son corazones que le obedezcan completamente. “Ciertamente, el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los carneros”. “Prestar atención” significa oír y escuchar con diligencia lo que Dios está diciendo, y hacerlo. a. La obediencia a medias es rebelión. Samuel le dijo a Saúl, “Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos e idolatría la obstinación” (1 S. 15:23). La vida de Saúl fue una mezcla terrible. En algunas ocasiones profetizaba bajo la unción de Dios, pero en otras, bajo un mal espíritu. Por no haber obedecido totalmente a Dios, su rebelión le abrió la puerta a la hechicería y su obstinación fue como idolatría a los ojos del Señor. 34 David y Salomón b. La obediencia a medias acarrea juicio. Samuel le dijo a Saúl: “Por cuanto tú desechaste la palabra de Jehová, él también te ha desechado para que no seas rey” (1 S. 15:23). Saúl no había rechazado a Dios; sin embargo, rechazó Su Palabra, y rechazar la palabra de Dios acarrea juicio. Al morir Saúl, David escribió una endecha: “¡Ha perecido la gloria de Israel sobre tus alturas! ¡Cómo han caído los valientes!” (2 S. 1:19). 2. Obediencia completa: Lo que Dios busca en Su pueblo. Hoy en día hay cristianos que, como Saúl, no producen frutos para el Señor. No son decididos ni están tomando las decisiones correctas y su entrega no es total. Conocen lo que dice la Biblia pero no obedecen lo que Dios habla a sus corazones. A pesar de que están unidos a una iglesia y a Cristo, la vida de Cristo ya no está fluyendo a través de ellos como fluyó una vez. El Señor se está moviendo otra vez para traerle una nueva vida a Su Iglesia. La primavera está llegando de nuevo al reino espiritual. Como los árboles de pino y de ciprés pasan a través del ciclo de las cuatro estaciones: primavera, verano, otoño e invierno; así también sucede en lo espiritual. Al llegar el invierno, a menudo vemos en esos árboles las hojas del año anterior, que de alguna forma permanecieron durante todo el año. Pero cuando el fluir de una nueva vida llega en la primavera, esas hojas viejas se caen. Hay una hermosa verdad espiritual escondida detrás de este ejemplo de la naturaleza. Cuando la vida nueva de Dios llega a nosotros, la antigua vida, como la hoja de un árbol, cae. Cuando en nosotros entra la vida nueva en Dios, la antigua vida se desprende como la hoja de un árbol La vida de David 35 Pero existe una segunda interpretación de esta preciosa verdad. Una nueva vida, junto a un nuevo mover, está por llegar a la Iglesia. Con este nuevo mover, las hojas muertas se desprenderán. El nuevo mover nos llevará a una gloria, plano y dimensión del Espíritu, que no hemos conocido antes. El nuevo mover del Espíritu será bienvenido y traerá inmensa gloria a la mayoría de personas. Será la vida misma la que desprenda las hojas muertas y haga que muchos que quizá han caminado con insinceridad por mucho tiempo, sean arrojados. El Espíritu de Dios nos ruega, como Samuel le rogó a Saúl, que nos conduzcamos con rectitud, que nos volvamos a Él, y andemos con Él de todo corazón. El mensaje del Señor es: “Hijo mío, hija mía, dame tu corazón; déjame hacer de ti un David y quitarte el corazón de Saúl”. Dios no desea que ninguno de nosotros perezca o quede descalificado para alcanzar los propósitos divinos. Por el contrario, quiere cambiarnos, poner Su mano sobre nosotros para que nueva vida empiece a fluir por nuestras ramas y seamos de nuevo fructíferos. Dios puede tomar nuestros corazones y tornarlos firmes y sinceros. Dios puede hacer de nosotros hombres y mujeres conforme a Su corazón, sacando la naturaleza de Saúl y reemplazándola con un corazón semejante al de David. Pero Dios ha establecido un tiempo límite. Hoy es el día de responder, porque un nuevo mover de Dios esta por empezar y Él nos está diciendo que cuando se produzca, las hojas muertas serán desechadas. ¿Por qué ser una hoja muerta? ¿Por qué ser una rama que no produce fruto? 36 David y Salomón Digámosle al Señor: “¡No quiero ser como Saúl; no quiero ser débil! ¡Señor, transfórmame! Quiero producir fruto. Quiero liberarme de los celos y de la envidia que me esclaviza. Señor Jesús, quiero ser solo para ti; ¡quiero ser como David y no como Saúl!”. El final de la vida de Saúl fue infeliz. Dios ya no le hablaba más, ni por sueños ni por urim (señales), ni por medio de los profetas. En lugar de ello, Saúl era asesorado por la bruja de Endor. Así ha sido mi propia experiencia con los “Saúles” que he conocido. Se va la unción y ellos se vuelven a la brujería, ya sea en forma consciente o inconsciente. Por eso, en vez de bendecir al pueblo, lo maldicen, al grado de hacer sufrir a la gente emocional, espiritual y físicamente. David, por el contrario, el dulce cantor de Israel, era un hombre conforme al corazón de Dios, el cual hacía todo lo que Dios quería. Aun cuando cayó en pecado, buscó con vehemencia al Señor en arrepentimiento, y fue gloriosamente rehabilitado. Gobernó con justicia en el temor del Señor (2 S. 23:3), con un corazón sincero. Lo único que David deseaba era la presencia del Señor y agradarle en todo momento. La vida de David Capítulo 3 LA FORMACIÓN DE UN REY Preparación para el milenio I. LA FORMACIÓN DE UN REY A. FIDELIDAD 1. Importancia bíblica de la fidelidad 2. El desarrollo de la fidelidad a. La fidelidad en lo poco b. La fidelidad y la compasión c. La fidelidad y los adversarios B. SABIDURÍA 1. Importancia bíblica de la sabiduría 2. El desarrollo de la sabiduría a. Sabiduría en el comportamiento el propósito de los provocadores. b. Sabiduría en el discernimiento el estudio de la palabra y la oración. C. JUSTICIA 1. Importancia bíblica de la justicia 2. El desarrollo de la justicia a. Forjada por muchos quebrantamientos b. Forjada por el temor de Jehová D. CONCLUSIÓN 37 38 David y Salomón Esta maravillosa promesa del reino está al alcance de todos los cristianos nacidos de nuevo, que estén dispuestos a rendir sus vidas totalmente a Dios para que les prepare para reinar con Cristo en el milenio. Con el fin de entender los principios de la preparación que Dios da al hombre para ser rey, este estudio contempla los primeros años de David, rey de Israel. El rey David es símbolo o representación de los vencedores que reinarán con Cristo en la tierra durante mil años. A medida que veamos las cualidades desarrolladas en la vida de David, preparándole para reinar sobre Israel, obtendremos una mayor comprensión de lo que Dios quiere hacer en nuestras vidas para equiparnos para gobernar en el milenio. Fidelidad, sabiduría y justicia son las tres cualidades principales que las Escrituras consideran esenciales para el reino, y que Dios desea que se manifiesten en nuestras vidas, tal como se manifestaron en la vida de David. A. FIDELIDAD 1. Importancia bíblica de la fidelidad En 1 Corintios 4:1, 2 el apóstol Pablo dice: “Así pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios. Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel”. Asimismo, Hebreos 3:2 hace hincapié en la importancia de la fidelidad cuando menciona a Jesús como nuestro Apóstol y Sumo Sacerdote y dice: “el cual es fiel a quien le constituyó, como también lo fue Moisés en toda la casa de Dios”. En el versículo 5 del capítulo 3 de Hebreos, dice sobre La vida de David 39 Moisés, el cual mandó sobre Israel: “Y Moisés, a la verdad fue fiel en toda la casa de Dios, como siervo, para testimonio de todo lo que se iba a decir”. Apocalipsis 19:11 nos muestra a Jesús, el Señor de la Gloria, cabalgando en un caballo blanco. Los dos nombres que se le dan aquí son: “Fiel y Verdadero”. Además, en Apocalipsis 17:14, los que siguen al Cordero adondequiera que va, son los “llamados, escogidos y fieles”. (Notemos la secuencia: Primero llamados, después escogidos y luego fieles). 2. El desarrollo de la fidelidad a. La fidelidad en lo poco. El primer trabajo de David fue de pastor (1 S. 17). Es interesante notar que David solo cuidaba unas pocas ovejas. A menudo la gente se imagina a David, el muchacho pastor, como responsable de muchas ovejas. Pero Eliab, su hermano mayor, lo rebajó como suelen hacer los hermanos, hablando de las “pocas ovejas” que David apacentaba en el desierto (1 S. 17:28). Muchas veces pensamos que nuestra labor es pequeña, pero la palabra de Dios dice: “El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel” (Lc. 16:10). Dios nos prueba en lo poco, para ver si podemos ser promovidos a mayores responsabilidades en su reino. b. La fidelidad y la compasión. Existe además otra lección que podemos aprender de lo que la Palabra dice acerca del rebaño que David cuidaba. En el Salmo 78:71 tenemos una descripción de esas ovejas. Se nos dice que Dios trajo a David de tras las ovejas paridas. La Palabra de Dios menciona 40 David y Salomón esto porque hay otra cualidad que debe acompañar a la fidelidad perfecta: la compasión. Es muy importante que los líderes entiendan y acepten las limitaciones de los demás. Deben dedicarle tiempo a los débiles y a los incapacitados; al hacerlo, se irá desarrollando la compasión y la nobleza de carácter. Los líderes deben aprender a adecuar su paso a las necesidades de los que están alrededor de ellos. El apóstol Pablo desarrolla este pensamiento en Romanos 15:1: “Así que, los que somos fuertes debemos soportar las flaquezas de los débiles y no agradarnos a nosotros mismos”. Es importante notar que David seguía a las ovejas; él no caminaba adelante, sino en pos de ellas. En otras palabras, dejaba que fueran las más débiles las que marcaran el paso. Si usted está guiando un rebaño, es muy importante que le permita a las ovejas débiles marcar el paso, con el objeto de poder cuidarlas a todas. Si tenemos esta actitud, nuestra fidelidad no será endurecida. Muchas veces la fidelidad puede ser improvisada, dura e insensible y puede adoptarse una actitud equivocada. Podemos decir: “esta es la voluntad de Dios, así que debemos apresurarnos a actuar de tal forma”; pero, si las demás personas no actúan de igual forma, los reprochamos o los dejamos atrás y nos separamos de ellos, ya sean parientes o miembros de nuestro grupo. Los líderes deben aprender a adecuar su paso al de los que están cerca de ellos. La vida de David 41 Hace algunos años estuve en un campamento en Derbyshire, Inglaterra, y dediqué los días miércoles a llevar grupos de personas a un bonito lugar llamado “la cueva azul”. Éste se encontraba en la cumbre de una montaña. En una de esas ocasiones, tuve un grupo de personas ancianas, algunas de más de setenta años. Y yo, irreflexivamente, corrí hasta llegar a la cúspide, (como líderes debemos ser cuidadosos, porque las personas imitarán lo que hagamos). Una apreciable señora, ya entrada en años, trató de imitarme; abandonó el sendero y corrió cuesta arriba sobre el césped. Cerca de la cima se resbaló y yo, por supuesto, traté de sostenerla; al hacerlo puse mis pies sobre algunas piedras que empezaron a rodar y provocaron una avalancha que hubiera podido golpear seriamente a los que venían subiendo detrás de nosotros. Mi espíritu clamó en ese instante: “¡Señor, Tú me has enviado aquí a salvar y no a matar a las personas!” En ese preciso momento el Señor abrió mis ojos y pude ver un ángel detrás de cada santo. Fue hermoso verlos; los ángeles son espíritus ministradores que tienen como misión velar por cada uno de los herederos de la salvación. La Palabra de Dios dice que cada santo tiene un ángel cuidándolo y que hay ocasiones en que los ángeles se manifiestan físicamente cuando tenemos una necesidad. Vi como esos ángeles, que eran bellos, majestuosos y regios, estaban colocados detrás de estos amados, cuyas edades ya eran avanzadas. Los ángeles estaban muy preocupados por lo que se les había encomendado; en lugar de guiar su camino, los seguían, caminando detrás de cada uno de ellos y, por supuesto, ninguna piedra tocó a estos amados hermanos. Dios quiere desarrollar en cada uno de nosotros un genuino 42 David y Salomón interés por los demás. David, el joven pastor de ovejas, desde muy temprana edad seguía a las ovejas y a sus crías, demostrando que, en su vida, la preocupación por los demás y la compasión, estuvieron ligadas a su fidelidad. Como pastores nunca debemos ser insensibles y decir: “He oído palabra de Dios, así que sigamos adelante”, sin que nos importe que las ovejas débiles se queden atrás. ¡Un pastor nunca debe hacer esto! Un pastor debe adecuar el paso de acuerdo a las ovejas más débiles, porque así lo desea Dios. La fidelidad también se desarrolla al enfrentar a poderosos adversarios. c. La fidelidad y los adversarios. La fidelidad se desarrolló en la vida de David en el redil cuando iba en pos de las ovejas y de sus crías. Pero la fidelidad también se desarrolla al enfrentar a poderosos adversarios. La fidelidad de David se reforzó en la casa de Saúl. Mientras estuvo en la casa de Saúl (1 S. 18), David ocupó un puesto de autoridad sobre el pueblo y el ejército de Israel. David fue su capitán en batalla, y esto en una época de gran angustia. Vemos aquí a David velando por personas, no por ovejas, y en sus entradas y en sus salidas es el líder que va a la vanguardia ¡Cuánto amaba Israel a David! (v.16). Ahimelec, el sacerdote, dijo a Saúl: “¿Y quién entre todos tus siervos es tan fiel como David, yerno también del rey, que sirve a tus órdenes y es ilustre en tu casa?” Aun en la casa de su adversario, David fue conocido por su fidelidad. En 1 Samuel 24:7, David le manifestó su fidelidad a Saúl, perdonándole la vida pese a que Saúl procuraba matarle. La vida de David 43 Dios arregla las circunstancias para desarrollar fidelidad en nosotros. Al principio quizá nos haga ocupar puestos insignificantes y sin importancia para ver si podemos ser fieles en asuntos menores; porque si lo somos, nos pondrá en puestos de mayor responsabilidad. También puede llevarnos a la casa de nuestros adversarios, porque necesitamos aprender a ser fieles tanto a los que nos hacen bien como a los que nos hacen mal. Eso es verdadera fidelidad. B. SABIDURÍA 1. Importancia bíblica de la sabiduría La sabiduría es una cualidad esencial para reinar. Hablando de la sabiduría, Proverbios 8:15, 16 dice: “Por mí reinan los reyes, y los príncipes determinan justicia. Por mí dominan los príncipes, y todos los gobernadores juzgan la tierra”. Por eso Salomón, rey de Israel, dijo acerca de la sabiduría: “Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; y sobre todas tus posesiones, adquiere inteligencia. Engrandécela y ella te engrandecerá; ella te honrará, cuando tú la hayas abrazado. Adorno de gracia dará a tu cabeza; corona de hermosura te entregará” (Pr. 4:7-9). 2. El desarrollo de la sabiduría La sabiduría es la habilidad de separar mentalmente los asuntos para distinguir, discernir y tomar decisiones correctas en el liderazgo. Fue desarrollada excepcionalmente en David; y el pueblo sobre el que gobernó dio testimonio de su sabio comportamiento cuando fue rey. Encontramos un ejemplo en 2 Samuel 14:17, 20: “Pues mi señor el rey, es como un ángel de Dios para discernir lo bueno y lo malo... mi señor es sabio conforme a la sabiduría de un ángel de Dios, para conocer lo 44 David y Salomón que hay en la tierra”. Durante todo su reinado, David fue conocido no solo por su fidelidad, sino también por su sabiduría. a. Sabiduría en el comportamiento—El propósito de que exista gente que nos irrite. La sabiduría comenzó a desarrollarse en David cuando estuvo en el aprisco. Él aprendió sabiduría guiando a su rebaño (Sal. 78:72), “y los apacentó conforme a la integridad de su corazón, los pastoreó con la pericia de sus manos”. Esta particularidad de tener un sabio comportamiento se desarrolló todavía más en casa de Saúl, en la que David “se conducía prudentemente en todos sus asuntos; y Jehová estaba con él”, (ver 1 Samuel 18:14). Por esta conducta prudente, Saúl le temía (1 S. 18:15). Así sucede con nosotros: la manifestación de sabiduría por medio de un proceder decoroso, hace que aun nuestros enemigos nos teman. A veces Dios nos pone al lado de Saúles, o “inspectores de frutos”. En cierta ocasión, una dama cristiana fue invitada a alojarse en una casa ocupada por otra señora visitante. Esta última aprovechaba cada oportunidad para irritarla intencionadamente. El resultado fue que la primera se vio obligada a clamar constantemente a Dios pidiendo sabiduría para saber cómo proceder de palabra y de obra. Cuando habían transcurrido varios días, la provocadora dijo: “¿Se da usted cuenta de lo difícil que le estoy haciendo la vida? Y antes de que la dama cristiana pudiera contestar, ella solamente añadió: “Solo quería saber si usted era auténtica o no”. Y después le dijo: “Usted ha pasado la prueba, querida”. La vida de David 45 Dios desarrolla en nosotros un carácter prudente, al colocar a nuestro lado un “Saúl” o “inspector de frutos”, ya sea en la oficina o en cualquier área de trabajo. A veces Dios nos pone en situaciones en las que la gente nos provoca adrede, solo para ver si somos auténticos o no. Por eso recordemos clamar a Dios por misericordia si estamos soportando personas “provocadoras” o “inspectoras de frutos”. Esto es de suma importancia porque Dios desarrolla en nuestras vidas un carácter prudente al colocar a nuestro lado un “Saúl” o “inspector de frutos”, en la oficina o en el lugar en que nos desenvolvemos. Esto con el fin de que alcancemos una conducta irreprensible de palabra y de obra. Tenemos que vigilar permanentemente nuestro proceder, sabiendo que el “inspector de frutos” nos observa con atención. Así es como Dios desarrolla en nuestras vidas carácter y sabiduría en el área del comportamiento. b. Sabiduría en el discernimiento—La oración y el estudio de la Palabra. Otro aspecto de la sabiduría que debe ser desarrollado en nuestras vidas, es la capacidad de tomar las decisiones correctas. Este aspecto de la sabiduría se desarrolla por medio de la oración y del estudio de la Palabra de Dios. El libro de Proverbios dice mucho acerca de la sabiduría. “Y me hallan los que temprano me buscan” (Pr. 8:17). “Hijo mío, si recibieres mis palabras, y mis pensamientos guardares dentro de ti, haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; si inclinares tu corazón a la prudencia, si clamares a la inteligencia, y a la prudencia dieres tu voz; si como a la plata la buscares, y la escudriñares como a tesoros” (Pr. 2:1-4). “Porque Jehová 46 David y Salomón da la sabiduría” (Pr. 2:6). “Cuando la sabiduría entre en tu corazón...la discreción te guardará...para librarte del mal camino” (Pr. 2:10-12). Estas escrituras ponen de relieve que la sabiduría también es un don de Dios; un regalo que obtenemos cuando lo buscamos a Él con sinceridad. Además, en el área del discernimiento la sabiduría se recibe o desarrolla por medio de la oración y del alimento sólido de la Palabra de Dios. Cuando profundizamos en la Palabra de Dios más allá de las doctrinas elementales y empezamos a recibir de ella el alimento sólido, nuestros sentidos se ejercitan en el discernimiento de lo bueno y lo malo (He. 5:14). Es absolutamente esencial que comamos el alimento sólido de la Palabra de Dios para adquirir discernimiento. Así lo dice Pablo: “Sin embargo, hablamos sabiduría entre los que han alcanzado la madurez; y sabiduría no de este siglo, ni de los príncipes de este siglo que perecen” (1 Co. 2:6). El Señor revela Su sabiduría a los que han alcanzado la madurez. David se saturó de proverbios, lo cual era una fuente de sabiduría para él. Al contemplar la vida de David, es indiscutible que él estaba saturado de proverbios, porque los citaba (y no del libro de Proverbios dados por Dios a Salomón, hijo de David). Después de perdonarle la vida a Saúl, dijo: “Como dice el libro de los antiguos, de los impíos saldrá la impiedad; así que mi mano no será contra ti” (1 S. 24:13). El conocimiento de proverbios que David tenía, fue lo que le guardó de matar a Saúl en las cuevas de En-gadi. David estaba saturado de proverbios, lo cual era una fuente de sabiduría para él. La vida de David 47 A diferencia de David, nosotros tenemos todos los treinta y un capítulos del libro de Proverbios para meditar en ellos. Dios nos los ha dado para que podamos “entender sabiduría e instrucción... palabras de sabios y sus dichos profundos” (Pr. 1:2-6). Este libro está diseñado especialmente para enseñar sabiduría a jóvenes y a viejos. C. JUSTICIA 1. Importancia bíblica de la justicia Las Escrituras nos muestran la importancia que tiene la justicia en la vida de un rey. Al final de su vida el rey David dijo: “Habrá un justo que gobierne entre los hombres. Que gobierne en el temor de Dios” (2 S. 23:3). También en el Salmo 45:37, al describir al Rey Jesús, se hace énfasis en su justicia: “Ciñe tu espada sobre tu muslo, oh valiente, con tu gloria y tu majestad. En tu gloria sé prosperado; cabalga sobre palabra de verdad, de humildad y de justicia... Tu trono, oh Dios, es eterno y para siempre; cetro de justicia es el cetro de tu reino. Has amado la justicia y aborrecido la maldad”. 2. El desarrollo de la justicia Un rey debe tener fidelidad, estar lleno de sabiduría y ser justo. Ser justo significa hacer lo que es correcto, puro y honesto. Parecerá extraño, pero una persona puede ser sabia sin ser justa. Es posible discernir los asuntos y tener capacidad para tomar decisiones correctas y, sin embargo, no ser justo. Salomón es un buen ejemplo de una persona sabia pero no justa. Él sabía lo que era correcto, pero no lo practicaba. 48 David y Salomón Es extraño, pero cierto, que se puede ser sabio y aún así no ser justo. La justicia es necesaria para poder llevar a la práctica la sabiduría que tengamos. Satanás, por ejemplo, se corrompió a través de su sabiduría porque la empleó para obtener sus propios fines (Ez. 28). La sabiduría por sí sola no es suficiente; también es necesaria la justicia en nuestras vidas, porque si usamos la sabiduría para satisfacer nuestros propios fines, caminaremos hacia la destrucción. La justicia también es importante porque el trono de un rey es afirmado en justicia (Pr. 25:5). A medida que vayamos caminando en el Señor, debemos comprender que nuestras vidas y nuestros derechos al trono están afirmados o establecidos en justicia. a. Forjada a través de muchos quebrantamientos. Con base en Apocalipsis 21:18 “la ciudad era de oro puro, semejante al vidrio limpio”, el Señor me dio una analogía en cuanto a la justicia, y me habló de manera impresionante respecto a su significado. El cristal claro o puro tiene un precio muy alto porque no refracta ni distorsiona la luz de ninguna manera. Un cristal claro o puro permite que se vea a través de él una imagen pura. Sentí que el Señor me hablaba muy claramente respecto a esto: “Quiero que mi pueblo sea como el cristal de la ciudad, tan puro que Mi justicia no sea distorsionada en forma alguna cuando brille a través de él”. Para que se forme este cristal, que es una imagen de la justicia, se necesita constante pulverización y quebrantamiento. Así también, un hombre justo, es producto de muchos La vida de David 49 quebrantamientos y tribulaciones. “Y a causa de su desfallecimiento hacen por purificarse” (Job 41:25). Yo sentí que el Señor me decía: “Los justos pasarán por mucho quebranto y trituración para que sus partes constituyentes sean del todo molidas. Entonces, cuando Yo los junte de nuevo y los meta en el fuego, saldrán como vidrio limpio y Mi justicia brillará a través de ellos, no distorsionada ni refractada”. Yo deseo que mi pueblo sea como el cristal de la ciudad: tan puro que Mi justicia no se distorsione cuando resplandezca a través de él. b. Forjada en el temor del Señor. La justicia se desarrolla también mediante la revelación del temor de Dios—el poder convincente del Señor que nos golpea el corazón. Cuando David estuvo en la cueva de En-Gadi, alargó su mano y cortó el borde de la vestidura de Saúl, pero su corazón le golpeó; el temor del Señor hizo que se arrepintiera de esto y que se volviera a la justicia (1 S. 24:5). El apóstol Pablo habló de “conocer el temor del Señor”. Este poder convincente de Dios, endereza al hombre y le hace justo (2 Co. 5:11). c. Es necesario pagar un precio muy alto. La justicia tiene un alto costo. Por ejemplo, el Salmo 15:4 describe al hombre justo como el que “aun jurando en daño suyo, no por eso cambia”. A veces cuesta mucho honrar una promesa que hemos hecho, pero el hombre justo mantendrá su palabra, a toda costa. Un cántico infantil dice: “Atrévete a ser un Daniel; atrévete a mantenerte firme tú solo”. A veces, declararse a favor de la justicia cuesta muchos años de sufrimiento. Como 50 David y Salomón Daniel, quizá tengamos que mantenernos firmes nosotros solos. Quizá signifique que nos expulsen de nuestra propia iglesia, del círculo de amigos o de la familia, porque no están dispuestos a caminar de lleno por las sendas de la justicia y de la verdad. Hay que pagar un precio por la justicia. La firme postura de David le significó muchos años de vagar por el desierto; pero fue allí que la justicia se forjó plenamente en su interior. En ocasiones tendremos que declararnos firmes contra un amigo. Yo he tenido que enfrentarme a otras personas; algunas del ministerio y otras que son incluso mis amistades personales, para decirles: “Eso no está bien. Dios me ha dicho que debes dejar el ministerio por un tiempo”. Por lo tanto, hay cierta soledad cuando caminamos por los senderos de la justicia. Cualquiera que ingrese a un ministerio o a una puesto que Dios le ha ordenado, conocerá momentos en que tendrá que declararse completamente solo a favor de la justicia. El mismo Jesús vio a muchos de sus seguidores darle la espalda cuando se sintieron perturbados por la verdad (Jn. 6:66). También Josué tuvo que mantenerse firme en una postura cuando dijo: “pero yo y mi casa serviremos a Jehová”. Si escogemos la senda de la justicia, a veces la caminata se tornará sumamente solitaria. Pero hay Alguien más en el camino—el Señor de la Gloria. ¡Y eso hace que todo valga la pena! D. CONCLUSIÓN La fidelidad, la sabiduría y la justicia son verdaderamente esenciales para poder, por la gracia de Dios, tener parte en la primera resurrección, entrar en el reino milenial y reinar y La vida de David 51 gobernar con Cristo sobre la tierra. Esa era la meta del apóstol Pablo y también la esperanza del rey David, quien será resucitado para ser rey en Jerusalén. Estas cualidades deben ser forjadas en nosotros si deseamos calificar, por la gracia de Dios, para ser reyes y sacerdotes. Entonces, resumamos nuestra responsabilidad: Mantengamos frente a nosotros la visión de lo que el Señor ha dispuesto para nuestras vidas: ser reyes y sacerdotes para Él. Caminemos y vivamos con realeza y majestad, en fe, sabiduría y justicia, como conviene a nuestro llamamiento celestial. Daniel 12:3 nos dice que “los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad”. Una estrella tiene luz, y Dios quiere que Su pueblo esté lleno de Su justicia, de modo que ésta resplandezca en nosotros como lo hace la luz de una estrella. Además, una estrella mantiene su curso (ver Prov. 4:26-27). No se vuelve ni a la derecha ni a la izquierda. Dejemos que el Espíritu Santo tome nuestros corazones, y entendamos que Dios, en su infinita paciencia y amor, está preparándonos para el trono. Pero, para sentarnos en el trono como vencedores con Jesucristo, estas cualidades deben forjarse en nuestras vidas, por Su gracia. Dejemos que el Señor tome nuestras vidas de tal manera, que nos sometamos al Espíritu Santo que nos induce a la fidelidad, a la sabiduría y a la justicia. Al hacerlo, permitiremos que Dios forje en nuestras vidas estas cualidades, y nos prepare para el trono. 52 David y Salomón La vida de David 53 Capítulo 4 LA EXPERIENCIA EN SICLAG I. LA EXPERIENCIA EN SICLAG A. EL CAMINO A SICLAG LAS PRUEBAS EN EL DESIERTO 1. 2. 3. 4. La necesidad del consuelo de un líder espiritual La necesidad del consuelo de un amigo La incapacidad de entenderla guía de Dios Sus colaboradores son atacados—asesinato de Ahimelec 5. Encarcelado por Aquis 6. Errante 7. Aventando el grano 8. Compañeros poco comunes—la cueva de Adulam 9. Advertencias proféticas 10. Traición—El desierto de Zif 11. Una vasija rota 12. Jonatán—El mensajero de Dios 13. La oportunidad de “Ayudar a Dios” 14. Dios habla a través del enemigo 15. La muerte de Samuel 16. David y Abigail 17. La segunda oportunidad 54 David y Salomón B. LOS EVENTOS DE SICLAG– DE LA DERROTA A LA VICTORIA 1. El reinado después de tres días 2. Siclag y la cruz a. El rechazo b. La pérdida de todo c. La recuperación y la victoria C. EL HOMBRE DE SICLAG—UN SÍMBOLO DE CRISTO 1. 2. 3. 4. 5. 6. El Pastor La Tribu de Judá El Pan de vida El Profeta El Rechazo El Reinado D. LA LECCIÓN DE SICLAG—ESPERANZA La vida de David 55 INTRODUCCIÓN “Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, que estando en la condición de hombre se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra” (Fil. 2:5, 8-10). El camino para subir es hacia abajo. Para alcanzar las montañas de la victoria espiritual, debemos caminar primero en el valle de la prueba. Siclag fue uno de los periodos más sombríos de la vida de David, quien estaba por convertirse en rey de Israel. Pero una vez que lo hubo atravesado, Dios lo exaltó. En la experiencia de Siclag, que fue la culminación de una serie de pruebas puestas a David, hay una ilustración y prefigura de la cruz de Jesucristo. De esta experiencia, podemos aprender una valiosa lección que nos ayudará individualmente en nuestras vidas cristianas. A. EL CAMINO A SICLAG—PRUEBAS EN EL DESIERTO David empezó como pastor. Fue ungido por Samuel para convertirse en rey después de que Dios rechazara a Saúl por causa de desobediencia. Mas tarde, tras haber derrotado a Goliat, se convirtió en capitán del ejército de Saúl. En diversas ocasiones un espíritu de celos indujo a Saúl a intentar asesinar a David, hasta que finalmente éste se vio obligado a abandonar la casa de Saúl para salvar su vida. Luego siguieron para David, casi diez años de viajes por el desierto. 56 David y Salomón 1. La necesidad del consuelo de un líder espiritual. Al principio del periodo de David en el desierto, Samuel aún vivía. David fue a él y le refirió todo lo que Saúl le había hecho. Acudir al profeta fue de mucho aliento para David, porque Samuel comprendía tanto a David como a Saúl. Muy poca gente hubiera tenido la aptitud de comprender la situación que David atravesaba, porque Saúl, para el resto de Israel, era un hombre nombrado por Dios para ser rey. Lo más probable es que muchos vieran a Saúl con sumo respeto. Quizá le consideraban un gran libertador, no tomando en cuenta el lado traicionero de su vida. No se hubiera nadie imaginado lo que David estaba viviendo a manos de Saúl. Por lo tanto, David, en su angustia, acudió a Samuel, el cual podía verdaderamente comprender. Cuando estamos experimentando pruebas, necesitamos tener la posibilidad de acudir a alguien que pueda ver más allá del velo, y que comprenda lo que nos pasa. Esto es porque necesitamos el consuelo de alguien que pueda entender nuestra situación. El camino para subir es hacia abajo. Para alcanzar los montes del triunfo espiritual, debemos primero atravesar el valle de la prueba. Todos sentimos la necesidad de ser aceptados por los que están en autoridad. Para David era muy difícil entender lo que Saúl hacía, afligiéndolo y desechándolo. David en verdad no entendía que Dios permitía tales actitudes para poder, finalmente, ascenderle. En cierto modo, se nos dificulta ver del otro lado del velo para comprender que Dios está detrás de todas las pruebas. La vida de David 57 2. La necesidad del consuelo de un amigo. Por otro lado, el corazón humano no clama solo pidiendo la fortaleza que da un Samuel (uno que está en autoridad espiritual), sino que pide consuelo y comprensión de un compañero o amigo. Por eso David buscó aliento en Jonatán (1 S. 20:1). Cuando al igual que David, somos perseguidos por alguien, hay una constante lucha por la reconciliación y por justificar nuestro propio esfuerzo y existencia. ¡Cuánto clamó e imploró David a Jonatán! Jonatán comprendió que David realmente estaba diciendo: “Si tu padre tan solo entendiera que no procuro causarle ningún mal”. 3. La incapacidad de entender la guía de Dios. Luego David huyó buscando a Ahimelec, el sacerdote ungido, (ver 1 Samuel 21). En todo nuestro vagar como gente desechada, Dios está dirigiendo nuestras sendas. A menudo no vemos la mano de Dios, y pensamos que solo deambulamos sin destino. Una de las fases más difíciles de una prueba, es aquella en la que no podemos entender ni la prueba ni la intención que Dios tuvo para disponerla. Al no haber revelación, simplemente no comprendemos lo que está pasando. Pero en esto necesitamos ver una verdad importante. El hecho mismo de que no entendamos, ciertamente le añade un nuevo matiz y riqueza a nuestro carácter, porque intensifica nuestra confianza en Dios. 4. Sus colaboradores reciben daño—asesinato de Ahimelec. Ahimelec apoyó a David a costa de su propia vida. Es evidente que David sufrió angustia sobre angustia, porque no solo temía por su propia vida, sino que sus actos le producían daño y muerte a otras personas. Aunque la muerte de Ahimelec había sido profetizada con anterioridad, siendo 58 David y Salomón consecuencia del juicio de Dios sobre la casa de Elí (1 S. 2:31-35), David no lo entendió así en ese momento y se sintió responsable. 5. Encarcelado por Aquis. Después de esto, David no podía permanecer en Judá y huyó a un país pagano en donde fue puesto en prisión por el rey Aquis. Durante su encarcelamiento, David escribió dos salmos maravillosos: los Salmos 34 y 56. Cuando leemos los Salmos y descubrimos la bella unción que tienen, tendemos a asumir que fueron dados cuando David se encontraba adorando al Señor en medio de la congregación. Pero no, David recibió estos dos en prisión. Por lo tanto, si queremos ser dulces salmistas, ¡puede ser que a veces nos encontremos en prisión! El tema principal del Salmo 34 es el cuidado que Dios da al afligido. Pero en el Salmo 56, escrito al mismo tiempo, David clamó: “Mis huidas tú has contado; pon mis lágrimas en tu redoma [vasija]; ¿no están ellas en tu libro?”. 6. Errante. ¿Alguna vez ha llorado usted, diciendo: “Señor, qué sucede?”. Uno de los aspectos más difíciles de una prueba es que no podemos entender la prueba ni el propósito por el cual Dios la ha ordenado; ni podemos ver a Dios en ella. Si usted todavía no ha pasado por esa experiencia, ¡la tendrá en el futuro! Durante tal experiencia de vagar por el desierto, no podemos entender a dónde vamos, a pesar de tratar de seguir a Dios de todo corazón. Nos encontramos yendo en una dirección y luego en otra y nada parece funcionar. Sin embargo, podemos declarar sinceramente que sentimos que Dios nos ha estado dirigiendo. Eso es exactamente lo que le ocurrió a David. Todo santo se La vida de David 59 encuentra errante en una determinada época de su vida. Abraham tuvo esta experiencia y dijo: “Dios me hizo salir errante...” (Gn. 20:13). En este periodo, cuando parece que no hay sentido de dirección en nuestras vidas y que no podemos explicárnoslo, empeoran las cosas cuando se acercan amigos a decirnos: “¿Qué te ha dicho Dios? ¿Hacia dónde vas?” Contestamos: “No puedo explicarlo”. Y ellos se van meneando la cabeza y diciendo: “¡Qué terribles son los reincidentes! Pierden todo sentido de dirección”. Pero eso no tiene por qué ser así. Quizá usted haya avanzado más en Dios que otros que parecen tener una clara dirección. 7. Aventando. Esto sucede cuando el trigo es sacudido de abajo para arriba, para quitarle la paja. Por eso, si estamos experimentando altibajos, es porque parte de la paja está siendo separada del trigo. Es tiempo de quebrantamiento de corazón; es tiempo de llorar. Pero es para nuestro máximo beneficio. 8. Compañeros poco comunes—la cueva de Adulam. El siguiente paso de David fue a la cueva de Adulam (1 S. 22), en donde otros se juntaron a su alrededor: los endeudados, los afligidos y los que se hallaban en amargura de espíritu. A veces Dios nos une a compañeros muy poco comunes. A menudo no escogemos nosotros a la gente que nos rodea; y hay épocas de nuestras vidas, en que en vez de estar rodeados por personas de clara visión, nos rodean otros que están en el mismo hoyo con nosotros. Es entonces cuando podemos obtener mucha lástima, pero poca orientación. 9. Advertencia profética. Entonces el profeta Gad fue enviado por Dios para prevenir a David. En un momento en 60 David y Salomón que parecía que el enemigo lo atraparía con seguridad, Dios envió un profeta. Porque mientras David estuvo en el desierto, Dios lo cuidó con esmerada atención. Si usted está pasando por una de estas experiencias de desierto, tenga la seguridad que Dios no permitirá que usted sucumba allí. Porque en el momento en que parezca que el enemigo va a triunfar, habrá una voz de advertencia de parte de Dios. 10. Traición—El desierto de Zif. Después, David se trasladó al desierto de Zif (1 S. 23:13-29). Sin embargo, los habitantes de Zif lo traicionaron. Esta es una experiencia difícil de entender. Parecía que nada le salía bien a David, y que hasta la gente que él trataba de socorrer, lo traicionaba. Se vio obligado a huir de nuevo. David escribió otro Salmo en este momento, el Salmo 31. A pesar de que había sido forzado a huir hacia la rocosa fortaleza de Maon, es interesante que aun en esta situación, él constantemente se refería a Dios como su “roca y su fortaleza” (Sal. 31:3). Cuando contemplaba los entornos de la sólida y rocosa fortaleza en que se hallaba, David no consideraba a esas rocas como su protección, sino que reconocía a Dios como su fortaleza y su roca. Él continúa en el Salmo 31:10, diciendo: “Porque mi vida se va gastando de dolor”. David observaba además, que Dios había conocido su alma en las angustias (vs. 7b). Dios conoció y tomó nota de la congoja de su vida. El mismo concepto es puesto de relieve en el Cantar de los Cantares: “¿Quién es ésta que sube del desierto recostada sobre su amado?”. Es La vida de David 61 en el desierto donde aprendemos y conocemos la presencia de Dios más que en cualquier otro lugar. Juntamente con su marido, una tía de mi esposa, mujer sumamente devota, estaba viviendo un duro percance. Mientras clamaba a Dios, el Señor le dijo: “Sabes, me agradecerás por estos días, y haciendo memoria dirás: Oh Señor, cuán precioso fuiste en aquellos momentos de negrura”. Por alguna razón, llegamos a conocer la belleza del Señor en estos tiempos de oscuridad. 11. Una vasija rota. David continuó diciendo: “Soy como una vasija rota”. Se sentía como un recipiente que alguien hubiera quebrado y descartado; aparentemente inservible— rechazado por el hombre, así como Jesús fue rechazado por el hombre. En momentos determinados de nuestras vidas, nosotros experimentamos esta misma sensación—como una vasija que ha sido descartada y que ya no tiene utilidad ni para Dios ni para el hombre. De esta manera se sentía el rey David. 12. Jonatán—el mensajero de Dios. Siempre, en momentos así, llega el mensajero de Dios o el ángel de Dios. En esta ocasión, fue Jonatán quien vino a fortalecer a David (1 S. 23:16). Jonatán era un personaje hermoso. En realidad él tenía más que perder al ayudar a David, pues no solo se arriesgaba a desagradar a su padre, sino a perder el trono. Sin embargo, puso la amistad de David por encima de sus propios intereses. Jonatán y David compartieron una de las amistades más bellas de toda la historia y, ciertamente, de las Escrituras. Jonatán 62 David y Salomón amó tanto a David, que se extralimitó poniendo en peligro su propia vida, con el fin de confortar el alma de David en sus momentos de angustia. 13. Oportunidad de “ayudar a Dios” con esfuerzos propios. El siguiente episodio del vagar de David por el desierto, ocurrió en las montañas de las cabras monteses (1 S. 24). Allí en el desierto de En-Gadi, David tuvo la oportunidad de matar a Saúl, su adversario. De hecho, sus hombres le instaron a hacerlo, diciendo que sería el cumplimiento de la profecía (24:4). Después de todo, Dios le había prometido a David la cabeza de sus enemigos, y he aquí Saúl. Eso significaba indudablemente que debían levantarse y matarlo. El cautiverio de David pudo haber terminado en ese momento, pero después de cortar el borde del manto de Saúl, se turbó su corazón. 14. Dios habla a través del enemigo. Es interesante notar que Dios puede hablarnos a través de los labios de nuestros enemigos. Cuando Saúl se dio cuenta de que era David el que lo llamaba, la palabra profética salió de los labios de Saúl, confirmando el hecho de que David le sucedería como rey. De esta manera, David fue fortalecido por su enemigo (1 S. 24:20). 15. Muerte de Samuel. Poco después, falleció el profeta Samuel, quien había ungido a David para ser rey, y quien le dio también un inmenso respaldo al principio de sus pruebas como fugitivo (1 S. 25:1). Esto significaba que no había en Israel, ninguna persona con autoridad que estuviera del lado de David. Él era un joven de menos de treinta años, y su soledad aumentó. La vida de David 63 16. David y Abigail—Una manifestación de majestad. A pesar de ser joven, de andar como fugitivo, de tener el corazón muy herido a causa de las continuas traiciones, y de ser perseguido por su propio suegro que deseaba matarlo, David se comportaba como un rey. 1 Samuel 25:2-17 nos da un ejemplo de esto al relatar la historia de Nabal, un hombre a quien David protegía. Es importante notar que hasta en nuestros momentos de angustia, Dios tiene un ministerio para nosotros y espera que lo llevemos a cabo. Él espera que cuidemos de los demás aun cuando estemos pasando por momentos difíciles. Nabal era un necio, un “hijo de Belial”; y Dios le quitó la vida. Sin embargo, su esposa Abigail es un personaje muy interesante. Abigail, una de las mujeres más distinguidas de toda la Palabra de Dios, estaba casada con un hombre conocido por su necedad. Cualquier mujer en semejante situación de yugo desigual, puede ser usada por Dios así como Abigail, a pesar de su cónyuge. Abigail era de mucha revelación y alentó a David con estas palabras: “Jehová de cierto hará casa estable a mi señor, por cuanto mi señor pelea las batallas de Jehová” (1 S. 25:28). En ese entonces, las personas de buena moral tenían el testimonio en sus espíritus de que David, y no Saúl, estaba en lo correcto. Pero, a pesar del criterio de la muchedumbre, los que caminaban con Dios, como Abigail, eran usados por Él para reanimar y vigorizar las manos de David. Vendrán periodos de abatimiento. Mas siempre existirán personas que podrán ver con claridad, personas de discernimiento; esas que Dios a veces trae a nuestro lado para fortalecernos en los 64 David y Salomón propósitos que tiene para nuestras vidas. De esta clase era Abigail. 17. Segunda oportunidad de “ayudar a Dios”. En 1 Samuel 26, David nuevamente le perdona la vida a Saúl. Dios mismo dio lugar a esta segunda oportunidad, porque hizo que Saúl acampara en las cercanías del refugio de David, y fue Dios quien puso a Saúl a dormir profundamente. Detrás de ello estaba el propósito de dar a David la victoria total. ¡Y la obtuvo! Aunque pudo fácilmente haber matado a Saúl esta vez, no tocó ninguna de sus pertenencias. Fue capaz de declarar: “Aquí estoy, y te he perdonado otra vez la vida”. Hay pruebas en las cuales no salimos victoriosos a la primera vez. A veces la prueba se repite con el fin de que tengamos un triunfo total la segunda vez. Por supuesto, es mejor salir triunfantes la primera vez, para que la prueba no vuelva. Saúl profetizó nuevamente acerca de David: “Sin duda emprenderás cosas grandes y prevalecerás” (26:25). Y ésta fue la última vez que ambos se encontraron. B. LOS SUCESOS DE SICLAG A LA VICTORIA A TRAVÉS DE LA DERROTA Tras dejar a Saúl, David regresó a Aquis, el rey pagano, quien le dio una ciudad. Hasta ese momento, David había andado errante. ¿Alguna vez se ha encontrado usted en una situación en la que no tiene morada fija, quizá mudándose de apartamento en apartamento, o de casa en casa? Cada vez que se muda, usted declara que Dios le ha provisto ese nuevo domicilio, y dice: “aquí descansaré para siempre”. Pero luego, hay un temblor, y tiene que moverse de nuevo. La vida de David 65 Esa fue la experiencia de David. Finalmente, después de pasar años sin radicarse, un rey pagano le da por fin la ciudad de Siclag para sus hombres y las familias de ellos. ¡Podrían residir allí! Durante un año y cuatro meses, David se estableció cómodamente, en Siclag como base. Aunque salía a combatir al enemigo, regresaba a su base para descansar. Pero un día, al retornar a Siclag con sus hombres después de una rotunda victoria sobre los filisteos, se encontró con que otro enemigo había invadido la tierra desde atrás, destruyendo a Siclag, y llevando cautivos a hijos, mujeres y pertenencias. David estaba agobiado. Tras diez largos años como fugitivo, Dios, al fin, le había concedido a Siclag como refugio, y hasta eso había quedado en humo. Sus esposas e hijos, cautivos. En esos instantes David estaba tan afligido que lloró hasta que le faltaron las fuerzas para llorar (1 S. 30:4). Su angustia se acrecentó cuando los hombres que le rodeaban, sus amigos y compañeros de lid, hablaron de apedrearlo. ¡Esta fue la experiencia de Siclag! Después de haber vivido errante por diez años, parecía que el enemigo por fin tenía la victoria, habiendo destruido todo lo que era valioso para David. Hay una sorprendente semejanza entre la cruz de Cristo y la experiencia de Siclag. 1. Después de tres días, él reinó. Tres días después de recuperar todo lo que le había sido quitado en Siclag, llegó la palabra de Dios: “Saúl ha muerto, David es el rey”. En solo tres días, David emergió del hoyo de una aparente derrota absoluta; no solo para recuperar todas las cosas, ¡sino para ser rey de Judá! 66 David y Salomón Así ocurrió exactamente cuando Jesucristo colgaba de la cruz entre la multitud que con escarnio decía: “Si eres el Hijo de Dios, baja y te creeremos”. Pero el Hijo de Dios permaneció en la cruz aparentemente rechazado y del todo vencido. Luego descendió hasta las entrañas de la tierra y se levantó llevando cautiva la cautividad. Cristo liberó a todos los santos de generaciones pasadas. Él rescató a cada persona que el enemigo, príncipe de la muerte, tenía prisionera. Porque al entregar Cristo Su vida en la cruz, diciendo: “Consumado es”, ganó las llaves del infierno y de la muerte. Así como David descendió a la fortaleza de los amalecitas, Jesús descendió y rescató a todo Su pueblo. Descendió al infierno, y todas las potestades del infierno y de la muerte no pudieron prevalecer contra un guerrero tan valiente, ¡el Hijo de Dios! Con un imponente grito de triunfo, levantó a los santos hacia el cielo, y se convirtió en Rey de reyes y Señor de señores. 2. Siclag y la cruz. Vale la pena reiterar que existe una impresionante semejanza entre la cruz de Cristo y la experiencia de David en Siclag. a. Rechazo. Así como la propia gente de David lo rechazó y quiso apedrearlo, Cristo vino a los suyos, y los suyos no le recibieron (Jn. 1:11). Fue el propio pueblo de Jesús el que gritó: “¡Crucifícale, crucifícale!”. La Biblia dice que los enemigos del hombre serán los de su propia casa. b. Pérdida de todo. Aparentemente, los dos lo habían perdido todo; Cristo en la cruz, y David en las ruinas de Siclag. Todo parecía estar listo para la victoria más colosal lograda por Satanás contra David y contra el hijo más admirable de David. La vida de David 67 c. Recuperación y victoria. Pero las derrotas se tornaron en espléndidas victorias. David se fortaleció en Jehová (1 S. 30:6). Quizá usted esté en un hoyo muy profundo. Si es así, el Señor le está diciendo: “Vuélvete a Mí y fortalécete en Mí”. Luego, la Palabra de Jehová vino de nuevo a David: “Síguelos, porque ciertamente los alcanzarás, y de cierto librarás a los cautivos” (1 S. 30:8). Entonces David se armó de valor y persiguió al enemigo. En eso, un muchacho egipcio indicó en dónde se encontraban los amalecitas; David y sus hombres los encontraron, los mataron y recuperaron todo. Quizá usted esté en un hoyo muy profundo. Si así es, el Señor le está diciendo:“Vuélvete a Mí y fortalécete en Mí”. C. EL HOMBRE DE SICLAG—SÍMBOLO DE CRISTO Como hemos visto, el carácter de David era como Dios y era como rey. Existen hermosas semejanzas entre David y el Señor Jesucristo. Tan parecidos eran algunos aspectos de sus vidas, que la gente de la época de Cristo, se refería a él como “el hijo de David”. Estas personas distinguían las similitudes, y la forma en que las dos vidas estaban vinculadas. He aquí algunas semejanzas: 1. Pastor. Tanto David como Jesús eran pastores. Jesús fue llamado “el Buen Pastor” (Jn. 10) y el “Príncipe de los Pastores” (1 P. 5:4). 2. Tribu de Judá. Tanto David como Cristo eran de la tribu de Judá, y ambos heredaron las promesas que pertenecían a esa tribu. Ambos fueron legisladores y reyes. 68 David y Salomón 3. Pan de vida. Tanto David como Cristo nacieron en Belén que significa “casa de pan”. Ellos dos alimentaron a su pueblo con el pan de vida. Jesús es el Pan de Vida. 4. Profeta. En Hechos 2:30, Pedro se refiere al hecho de que David era profeta. Cuando el Señor se puso de pie en la fiesta de los Tabernáculos, haciendo la solemne declaración: “Si alguno tiene sed, venga a mí y beba... de su interior correrán ríos de agua viva”, los que le rodeaban dijeron: “Ciertamente, éste es el profeta” (Jn. 7:37-40). Ellos reconocieron en Jesús a Aquel de quien Moisés había dicho: “Profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo, te levantará Jehová tu Dios”. Por eso, David y Jesús fueron profetas. De hecho, David fue más que profeta, porque tipificó a Jesucristo y su vida entera fue una prefigura de la vida de Cristo. 5. Rechazo. David y Jesús fueron ungidos para desempeñar un ministerio, que fue seguido por un periodo de rechazo David en Siclag y Jesús en la cruz. 6. Reinado. Inmediatamente después de esta experiencia, los dos se convirtieron en reyes. David llegó a ser rey de Israel. Cristo, después de la cruz, llegó a ser Rey de reyes y Señor de señores, y hoy está sentado a la derecha de la Majestad, en lo Alto. D. LA ENSEÑANZA DE SICLAG ES ESPERANZA Para nosotros es importante entender cuál es el propósito de Siclag y del andar por el desierto. El profeta Jeremías nos da una clave en Lamentaciones 3:19-21: “Acuérdate de mi aflicción y de mi abatimiento, del ajenjo y de la hiel; lo tendré La vida de David 69 aún en memoria, porque mi alma está abatida dentro de mí... por lo tanto esperaré”. Al contemplar las experiencias de David en el desierto, vemos como deambuló de un lugar a otro; rechazado, infeliz y abandonado; siendo la experiencia de Siclag el punto culminante de su aflicción, cuando parecía que todo estaba perdido. Sin embargo, en tres días, Dios le dio un giro completo, liberó a todos los cautivos e hizo reinar a David. Dios desea sembrar esperanza en nuestros corazones. La palabra de Dios dice que “a través de las Escrituras, podemos tener esperanza”. Sabemos que el Siclag de David se convirtió en victoria, y que la crucifixión de Cristo se volvió un triunfo maravilloso. Por medio de la crucifixión Jesús despojó a los principados y a las potestades, y está ahora sentado a la diestra de la Majestad en lo alto. De la misma forma, Dios quiere confirmarnos que por muy profundo que sea nuestro abismo, ese cautiverio también terminará. Debemos ser prisioneros de esperanza, porque Dios le dará un giro a nuestras circunstancias, como lo hizo con David. Él nos sacará de la obscuridad, del hoyo, de detrás de las rejas. Nos sacará al lugar que ha reservado para nosotros: “lugares celestiales en Cristo Jesús” (Ef. 2:6). Reinaremos en donde una vez fuimos prisioneros. Dios nos levantará para gobernar y reinar sobre las circunstancias que una vez nos mantuvieron cautivos. Confiemos en Dios, y declaremos desde el fondo de nuestros corazones: “Mi Siclag se tornará en triunfo. Mi crucifixión 70 David y Salomón será gloriosa, porque aún he de ver cómo esta prueba mía se convierte en una posición de gloria, en la que Dios me levantará por encima de estas circunstancias. Gobernaré y reinaré sobre ellas. Quedarán bajo mis pies”. Así les ocurrió a David y a Cristo, y esa es la herencia que Dios tiene ahora para todos nosotros (Is. 54:17). La vida de David Capítulo 5 DAVID Y BETSABÉ I. DAVID Y BETSABÉ A. INTRODUCCIÓN 1. Los motivos de su caída B. LOS JUICIOS PRONUNCIADOS 1. Para David por medio de Natán 2. Ejecución de los juicios C. EL ARREPENTIMIENTO Y LA RECUPERACIÓN DE DAVID 1. Los pasos hacia el arrepentimiento y la restauración D. EXISTE UN REGRESO PARA EL PIADOSO 1. El poder protector de Dios 2. Dios se especializa en la restauración 71 72 David y Salomón E. DAVID EN EL MILENIO 1. El rey-pastor de Israel 2. Conclusión F. REFLEXIONES SOBRE LAS TRES BATALLAS DE DAVID 1. Contra los filisteos – La envidia 2. Contra los jebuseos – La división, desunión 3. Contra la concupiscencia y la avaricia G. UNA MIRADA A ABSALÓN La vida de David 73 A. INTRODUCCIÓN Pocos sucesos de la historia son tan famosos como la triste caída de David con Betsabé. Los hombres son conocidos y recordados por sus grandes hazañas, como David dándole muerte a Goliat. Pero también se les recuerda por sus grandes pecados, como el cometido por este hombre admirable—su adulterio y posterior acto de homicidio. Asimismo, Sansón es conocido en el mundo entero por su fuerza, pero también por su deshonra con Dalila. ¿CÓMO PUDO SUCEDER? Nos hacemos con frecuencia esta pregunta: ¿Cómo pudo un hombre de Dios cometer tan horrendo pecado? (Mayormente un santo de la talla de David, el hombre ungido de Dios, el dulce cantor de Israel, quien simboliza a Cristo como profeta, sacerdote y rey). Y más todavía, ya que Jesús de hecho fue llamado Hijo de David, tan alta puesto le adjudicaba Dios a David. Lamentablemente, este acto de adulterio no es un caso aislado ocurrido en la historia sobre un hombre de Dios que cayó en debilidad, sino que simboliza lo que, por generaciones, ha sido el hoyo en que muchos de los siervos más selectos del Señor han sucumbido a la tentación, enlazados por el diablo y la carne. Por la gracia de Dios, examinaremos ahora las razones y juicios resultantes de esta tragedia de tragedias. ¿POR QUÉ DIOS NO PREVINO NI PROTEGIÓ A DAVID? ¿Por qué no protegió ni defendió Dios a David en esta área de su vida? El Señor estuvo con David siempre que salió a la 74 David y Salomón guerra. “Y puso guarnición en Edom; por todo Edom puso guarnición, y todos los edomitas fueron siervos de David. Y Jehová dio la victoria a David por dondequiera que fue” (2 S. 8:14). David era protegido en batalla. ¿Por qué? Porque consultaba a Jehová en toda circunstancia. “Entonces consultó David a Jehová, diciendo: “¿Iré contra los filisteos? ¿Los entregarás en mi mano?” Y Jehová respondió a David: “Ve, porque ciertamente entregaré a los filisteos en tus manos” (2 S. 5:19). La confianza de David siempre estuvo puesta en el Señor; guardó las leyes sobre la guerra (ver Dt. 20), pero no guardó las leyes que regulaban la vida doméstica de los reyes. “Ni tomará para sí muchas mujeres, para que su corazón no se desvíe, ni plata ni oro amontonará para sí en abundancia” (Dt. 17:17). “Y tomó David más concubinas y mujeres de Jerusalén, después que vino de Hebrón, y le nacieron más hijos e hijas” (2 S. 5:13). Por lo tanto, el rey David no guardó las leyes para los reyes que se referían a tener varias esposas. Por eso, en esta área de su vida, no hubo protección del Señor. Dios nos ampara en toda área en que nos proponemos obedecerle, pero en los otros campos en que lo ignoramos y rechazamos, la muralla de protección a nuestro alrededor es derribada por Dios mismo. “¿Por qué aportillaste sus vallados, y la vendimian todos los que pasan por el camino? La destroza el puerco montés, y la bestia del campo la devora” (Sal. 80:12,13). También nosotros con nuestra desobediencia, hemos sido culpables de derribar nuestras propias murallas de defensa. La vida de David 75 De manera que aquella fatídica noche, fueron varias las causas de su trágica caída: RAZONES DE SU CAÍDA 1. Desobediencia en la vida de David con relación a esposas y concubinas (Dt. 17:17). 2. Se había relajado: Cuando le correspondía estar en la guerra, se quedó en casa. Separado de la voluntad de Dios, era ahora fácil presa para el enemigo, siendo vulnerable en su área de mayor debilidad (ver 2 S. 11:1, 2). Ni él, ni sus ojos, estaban en el lugar apropiado. 3. Cuando contempló a Betsabé desde la azotea, violó el mandamiento del Señor: “No desearás (o codiciarás) la mujer de tu prójimo” (Dt. 5:21). 4. El éxito desmedido y el exceso de confianza, le aturdieron. 5. Creía poder tener todo lo que deseaba. 6. Aunque David era un hombre conforme al corazón de Dios, había en él una debilidad innata en cuanto a la impureza moral, debilidad no vigilada con cuidado. En su árbol genealógico estaba la inmoralidad. (Judá fue inmoral - Gn. 38; Rahab fue prostituta - Jos. 2:1; y otros más). 7. En cuanto a mujeres, su corazón estaba dividido, y le faltaba sabiduría en el área moral. Después de su pecado, David le pidió a Dios que le hiciera comprender sabiduría en lo secreto, en vista de que antes había sido tan deficiente en ese sentido. También oró para que su corazón fuera afirmado (Sal. 51:6; 86:11). 76 David y Salomón 8. David consideraba estar por encima de la ley; lo cual es tentación para muchos cristianos. ¿Por qué no protegió Dios a David en esta área de su vida? Porque Dios nos protege solamente en las áreas que nos proponemos obedecerle. Pero en las demás, en las que lo ignoramos, desobedecemos o rechazamos, no recibimos protección. EL PECADO DE DAVID “Y sucedió un día, al caer de la tarde, que se levantó David de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real; y vio desde el terrado a una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa” (2 S. 11:2). David estaba desobedeciendo los siguientes mandatos de la Escrituras: • “No codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo” (Ex. 20:17). • “¿Y por qué, hijo mío, andarás ciego con la mujer ajena, y abrazarás el seno de la mujer extraña?” (Pr. 5:20). • “Así es el que se llega a la mujer de su prójimo; no quedará impune ninguno que la tocare” (Pr. 6:29), por lo tanto, cayeron sobre David los juicios de Dios. • “Mas el que comete adulterio es falto de entendimiento; corrompe su alma el que tal hace” (Pr. 6:32). • “Heridas y vergüenza hallará y su afrenta nunca será borrada” (Pr. 6:33). La vida de David 77 PERO DAVID PROCURÓ OCULTAR SU PECADO “¿Acaso he cubierto mis transgresiones como Adán, ocultando en mi seno mi iniquidad, porque temí a la gran multitud, o el desprecio de las familias me aterró, y guardé silencio y no salí de mi puerta?”. Job no escondió su pecado (Job 31:33-34 LBLA). A diferencia de Job, que reconoció su pecado, el rey David decidió ocultarlo (2 S. 11:6-27). Pero finalmente, David confesó su iniquidad, quebrantándose ante el profeta Natán después de meses de presión y convicción, (ver 2 S. 12:13; Sal. 32:1-5; 38:1-18). Durante esos meses David trató de ocultar su iniquidad de las siguientes maneras: 1. Transfiriendo al esposo de Betsabé, Urías heteo, del campo de batalla a la compañía de su esposa. Pero Urías se negó porque el Arca, Israel, Judá, Joab y el resto de los siervos de David, se encontraban acampando en campo abierto. Ni siquiera emborrachándolo, pudo David lograr que Urías se fuera a su casa. David quería que el embarazo no deseado, pareciera ser de Urías. 2. Entonces, David le escribió a Joab una carta que envió por mano del mismo Urías, ordenándole ponerle en lo más recio de la batalla para que muriera. Antes de observar los juicios que siguieron, examinemos de nuevo el carácter y personalidad de Betsabé, ya que con este estudio deseamos ayudar a quienes puedan ser tentados de esta manera. 78 David y Salomón BETSABÉ Betsabé era nieta de Ahitofel gilonita, consejero de David. “Y el consejo que daba Ahitofel en aquellos días era como si se consultase la Palabra de Dios. Así era el consejo de Ahitofel, tanto con David como con Absalón” (2 S. 16:23). Por derecho propio, Betsabé era como diríamos hoy: una “mujer bíblica”, alguien a quien David respetaba, obviamente por su sabiduría. David mencionó a Betsabé, al amonestar a su hijo Salomón en sus postrimerías, diciendo: “Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre, y no desprecies la dirección de tu madre” (Pr. 1:8). “Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre, y no dejes la enseñanza de tu madre” ((Pr. 6:20). “Átalos siempre en tu corazón, enlázalos a tu cuello”, (Pr. 6:21). Betsabé era una mujer de singular belleza. Pero David quebrantó la advertencia bíblica: “No codicies su hermosura en tu corazón, ni ella te prenda con sus ojos” (Pr. 6:25). “Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; la mujer que teme a Jehová, esa será alabada” (Pr. 31:30). Aunque David y Betsabé eran espirituales y muy versados en la ley, lamentablemente creyeron estar por encima de la ley— un peligro para muchos ministros y cristianos espirituales. Ellos creyeron ser las excepciones. Los que caen en este pecado, a menudo reaccionan diciendo: • Que no pensaron que se les descubriría. • Que el Señor nunca les castigaría. • Que pueden seguir impunemente con su relación adúltera, (o sea, exentos de castigo y consecuencias). ¡Ay de ellos, porque no conocen los caminos del Señor! La vida de David 79 Dios advierte que Él no hace excepciones—“No hagáis distinción de persona en el juicio; así al pequeño como al grande oiréis; no tendréis temor de ninguno porque el juicio es de Dios” (Dt. 1:17). “Porque no hay acepción de personas para con Dios” (Ro. 2:11). “Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también perecerán; y todos los que bajo la ley han pecado, por la ley serán juzgados” (Ro. 2:12). “Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas, sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que para Él no hay acepción de personas” (Ef. 6:9). Entonces cayeron sobre David alrededor de diecisiete juicios y, en cierto modo, sobre Betsabé. B. JUICIOS PRONUNCIADOS POR DIOS 1. Para David por medio de Natán a) “Por lo cual, ahora, no se apartará de tu casa la espada...” (2 S. 12:10) b) “He aquí Yo haré levantar el mal sobre ti de tu misma casa...” (2 S. 12:11) c) “Tomaré tus mujeres delante de tus ojos, y las daré a tu prójimo, el cual yacerá con tus mujeres a la vista del sol” (2 S. 12:11) d) “El hijo que te ha nacido ciertamente morirá” (2 S. 12:14) 2. Ejecución de estos juicios sobre David 80 David y Salomón a) La muerte de su hijo, el cual Betsabé dio a luz (2 S. 12:15-18) b) La violación de Tamar (2 S. 13:2-14) c) La muerte de Amnón (2 S. 13:29-32) d) Absalón roba el corazón de los hombres de Israel (2 S. 15:6) e) Absalón conspira con Ahitofel (Sal. 55:13) Absalón reina en Hebrón (2 S. 15:10-12) f) Diez de sus concubinas son violadas (2 S. 16:22) g) David es exiliado (2 S. 15:14) h) Las maldiciones de Simei, quien arrojó piedras y polvo a David cuando éste estuvo abatido, (ver 2 S. 16:5-14). Nota: El Señor le había dicho: “Maldice a David”. Pero, entonces, David dijo en el versículo 12: “Quizá mirará Jehová mi aflicción, y me dará Jehová bien por sus maldiciones de hoy”. i) Absalón es asesinado (2 S. 18:14) j) La rebelión de Seba (2 S. 20) k) Las concubinas son encerradas en viudez perpetua (2 S. 20:3) l) La muerte de Amasa (2 S. 20:9,10) m) La enfermedad de David (Sal. 32:3-5) n) Su confesión pública y eterna (Sal. 51) o) Fue provocado para cometer el pecado de censar a Israel (2 S. 24:1; 1 Cr. 21:1) p) La rebelión de Adonías (1 R. 1:5) q) La inmoralidad de David y Betsabé pasó a Salomón, culminando en la destrucción del reino unificado. La vida de David 81 C. EL ARREPENTIMIENTO Y LA RECUPERACIÓN DE DAVID La ley exige que “si un hombre comete adulterio con la mujer de su prójimo, el adúltero y la adúltera indefectiblemente serán muertos” (Lv. 20:10). (Dada la magnitud del pecado de David—adulterio y homicidio—¿Cómo pudo el Señor no solo perdonar a David, sino también restituirle el trono y una relación todavía más íntima con Dios?). La razón fue que en el irrefutable conocimiento de Dios, Su Amado Hijo, el Señor Jesucristo, pagaría el precio supremo con Su muerte en el Calvario, por nuestros pecados. Por el derramamiento de Su sangre, quedarían expiados los pecados de David. Pero, ¿por qué concedió Dios a David arrepentimiento y perdón? Con Saúl y Esaú no hizo así, habiendo Esaú procurado esa oportunidad con lágrimas. “Porque ya sabéis que aun después, deseando heredar la bendición, fue desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas?” (He. 12:17). ¿Por qué encontró Pedro arrepentimiento y no Judas? ¿Por qué Jacob y no Esaú? ¿Por qué David y no Saúl? Dios ha declarado: “Tendré misericordia del que tendré misericordia, y seré clemente para con el que seré clemente” (Ex. 33:19). Dios no es caprichoso. Siempre hay una razón para que un individuo alcance misericordia y otro no. En mis numerosos años de ministerio, he conocido Davides y Saúles, Jacobs y Esaúes, y hay siempre una diferencia entre ellos. Los auténticos, tienen la característica de amar la rectitud, pero los falsos no la tienen. Observaremos esto en David, a 82 David y Salomón medida que contemplemos los pasos que dio para arrepentirse y recuperarse. Pasos de David hacia el arrepentimiento y la recuperación 1. Convicción. La convicción indiscutiblemente ocurrió por medio de Natán, cuando éste le relató la parábola del hombre rico que tomó la oveja amada del hombre pobre, con el fin de alimentar a un huésped. David reaccionó con ira, y ese fue el medio por el cual Dios pudo señalarle cuán abominable era su pecado (2 S. 12:1-13). 2. Reconocimiento. Era necesario reconocer y confesar la falta públicamente, ya que el pecado de un gobernante equivale al pecado de toda la congregación o nación de Israel. Sin embargo, esto según parece no fue fácil. De hecho, el Salmo 32 insinúa que solo a través de una grave enfermedad, David llegó a reconocer públicamente su pecado: “Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; se volvió mi verdor en sequedades de verano” (Sal. 32:4). “Mi pecado te declaré y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; y tu perdonaste la maldad de mi pecado” (Sal. 32:5). “Porque yo reconozco mis rebeliones, y mi pecado está siempre delante de mí” (Sal. 51:3). 3. Arrepentimiento. Esto significa: • Deseo de ser limpiado del pecado: “Purifícame con hisopo y seré limpio; lávame y seré más blanco que la nieve” (Sal. 51:7). • Deseo de ser cambiado: “Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí” (Sal. 51:10). La vida de David 83 4. Restitución. La ley exige restitución, pero eso no es siempre posible, como en este caso. “Pero si fuere de día, el autor de la muerte será reo de homicidio. El ladrón hará completa restitución; si no tuviere con qué, será vendido por su hurto” (Ex. 22:3). 5. Aceptación de los juicios de Dios. “Yo también habré andado en contra de ellos, y los habré hecho entrar en la tierra de sus enemigos; y entonces se humillará su corazón incircunciso, y reconocerán su pecado” (Lv. 26:41). David aceptó el castigo de Dios diciendo: “Contra ti, contra ti solo he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos; para que seas reconocido justo en tu palabra, y tenido por puro en tu juicio” (Sal. 51:4). Así lo demostró con las declaraciones que hizo cuando huía de Absalón: “Y él rey respondió: [refiriéndose a Simei] ¿Qué tengo yo con vosotros, hijos de Sarvia? Si él así maldice es porque Jehová le ha dicho que maldiga a David. ¿Quién, pues, le dirá: Por qué lo haces así?” (2 S. 16:10). 6. Esperar humildemente que Dios libere. David esperó en el Señor soportando el juicio divino en periodos de enfermedad, algunas tan severas, que parecían de muerte. “Mis enemigos dicen mal de mí, preguntando: ¿Cuándo morirá y perecerá su nombre?” (Sal. 41:5). En momentos de conspiración: “Y mientras Absalón ofrecía los sacrificios, llamó a Ahitofel gilonita, consejero de David, de su ciudad de Gilo. Y la 84 David y Salomón conspiración se hizo poderosa, y aumentaba el pueblo que seguía a Absalón” (2 S. 15:12). David manifestaba una serena esperanza en Dios: “Al músico principal. Salmo de David. Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor” (Sal. 40:1). David tenía la segura expectativa de que Dios le libraría de la prueba que había ordenado. Sin embargo, sus enemigos no le ofrecían esperanza alguna. “Muchos son los que dicen de mí: No hay para él salvación en Dios” (Sal. 3:2). Ni tampoco muchos de sus amigos: “Muchos son los que dicen: ¿Quién nos mostrará el bien? Alza sobre nosotros, oh Jehová, la luz de tu rostro” (Sal. 4:6). Pero la respuesta de David fue: “En paz me acostaré, y asimismo dormiré; porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado” (Sal. 4:8). “No temeré a diez millares de gente, que pusieren sitio contra mí” (Sal. 3:6). El Salmo 23 fue escrito en este tiempo, y es una clara demostración de la gran confianza de David, y de la conciencia que tenía de la presencia del Señor en esta época, aunque de hecho fue un tiempo ordenado por Dios por causa de sus pecados. “Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando” (Sal. 23:5). Ciertamente, el comportamiento de David en medio de las pruebas y juicios divinos, nos dejan con esperanza: La vida de David 85 • Si hemos cometido el mismo pecado de David. • Si estamos aconsejando a hermanos que han caído. C. EXISTE UNA VÍA DE REGRESO PARA LOS PIADOSOS “Porque siete veces cae el justo y vuelve a levantarse” (Pr. 24:16). 1. El poder protector de Dios Para terminar esta parte de la vida de David, me gustaría animar a los demás poniendo de relieve el poder protector de Dios que se menciona en los siguientes versículos: • “Y he hallado más amarga que la muerte a la mujer cuyo corazón es lazos y redes, y sus manos ligaduras. El que agrada a Dios escapará de ella; mas el pecador quedará en ella preso” (Ec. 7:26). • “No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar” (1 Co. 10:13). • “…que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría…” (Judas 1:24). Pedro dice que somos “guardados por el poder de Dios” (1 P. 1:5). 86 David y Salomón 2. Dios se especializa en la restauración ¡Dios se especializa en la restauración! Los que han caído no deben pensar nunca que han quedado descalificados para alcanzar las grandezas de Dios. Así lo declaró Isaías: “Tus cuerdas se aflojaron; no afirmaron su mástil, ni entesaron la vela; se repartirá, entonces, botín de muchos despojos; los cojos arrebatarán el botín” (Is. 33:23). Como dijimos al comienzo de este periodo de la vida de David, a él se le restituyó una intimidad con el Señor todavía más intensa que la anterior. Tras esta restitución, David escribió salmos como el 27, el 15 y el 24, en los cuales su vida de fe recibió una visión superior y enfocada a lo venidero. “Una cosa he demandado a Jehová, esta buscaré; que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová y para inquirir en su templo” (Sal. 27:4) Y en la época de David, ¿en dónde estaban el templo y el tabernáculo, la morada de Dios? En ninguna otra parte sino en el monte de Sion, esa santa montaña de Dios. En los salmos 15 y 24, él hace esta pregunta: “¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su Lugar Santo?” (Sal. 24:3). “¿Jehová, quién habitará en tu tabernáculo? ¿Quién morará en tu monte santo?” (Sal. 15:1), ¿Quién ascenderá, estará de pie, permanecerá y habitará en tu íntima presencia? Entonces llega la respuesta divina: “El limpio de manos y puro de corazón; el que no ha elevado su alma a cosas vanas, ni jurado con engaño”(Sal. 24:4). Imploremos al Señor juntos todos los rehabilitados y protegidos, que nazca esta misma La vida de David 87 visión de Sion en las vidas de todos nosotros. “Y de Sion se dirá: Este y aquél han nacido en ella, y el Altísimo la establecerá” (Sal. 87:5). E. DAVID EN EL MILENIO 1. El Rey-Pastor de Israel. Fue tan extraordinario el restablecimiento de David, que resucitará para ser rey en Jerusalén durante los mil años en que Cristo ha de reinar sobre la tierra. Varios versículos declaran claramente que el Señor levantará a David para ser el Rey-Pastor de Israel en el reino milenial de Cristo sobre la tierra. Especialmente los siguientes: • “Sino que servirán al Señor su Dios y a David su rey, a quien yo levantaré para ellos” (Jer. 30:9). • “Mi siervo David será rey sobre ellos, y todos ellos tendrán un solo pastor; andarán en mis ordenanzas y guardarán mis estatutos y los cumplirán. Y habitarán en la tierra que di a mi siervo Jacob, en la cual habitaron vuestros padres; en ella habitarán ellos y sus hijos, y los hijos de sus hijos para siempre; y mi siervo David será su príncipe para siempre” (Ez. 37:24, 25). • “Entonces pondré sobre ellas un solo pastor que las apacentará, mi siervo David; él las apacentará y será su pastor. Y yo, el Señor, seré su Dios, y mi siervo David será príncipe en medio de ellas” (Ez. 34: 23, 24). • “Después, los hijos de Israel volverán y buscarán al Señor su Dios y a David su rey; y acudirán temblorosos 88 David y Salomón al Señor y a su bondad en los últimos días” (Os. 3:5). David tendrá características únicas para ministrar a los hijos de Israel que se encuentren en la tierra durante la segunda venida de su Mesías. Incluso, se nos dicen de antemano las palabras que intercambiarán Cristo y los defensores de Sion cuando Él descienda en las nubes para liberarles de las naciones que acampen contra ellos. “Ved, ahora, que yo soy el Señor, y fuera de mí no hay Dios. Yo hago morir y yo hago vivir, yo hiero y yo sano y no hay quién pueda librar de mi mano... Y digo: Yo vivo para siempre” (Dt. 32:39-40). Los defensores responderán: “He aquí, éste es nuestro Dios, le hemos esperado, y nos salvara; éste es Jehová a quien hemos esperado, nos gozaremos y nos alegraremos en su salvación” (Is. 25:9). Pero después de regocijarse porque el Señor les ha liberado, le observarán más de cerca y exclamarán: “¿Qué heridas son estas en tus manos? Y Él responderá: “Con ellas fui herido en la casa de mis amigos” (Zac. 13:6). Entonces su gozo se tornará lamento: “Y derramaré sobre la casa de David y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito” (Zac. 12:10). Será en este momento en que el rey David tendrá todas las cualidades para restaurar a la nación compungida. El que dio muerte al inocente Urías para cubrir su pecado con Betsabé La vida de David 89 su esposa, será capaz de ministrar restauración y consuelo a una nación que reconoce con dolor, haber sido responsable de la muerte de su inocente Mesías en la cruz del Calvario. El pecado de David y de Israel como nación, es comparable, y ahora el rey que Dios les ha levantado, será el que les lleve a la reconciliación. Él, que conoció la recuperación tras haber pecado y que clamó: “Líbrame de homicidios, oh Dios, Dios de mi salvación; cantará mi lengua tu justicia” (Sal. 51:14), podrá consolar y guiar a la futura Israel arrepentida. La consolará a través del periodo de intenso pesar y lamento, hasta entrar en una relación correcta con Aquel de quien David después podrá decir: “Has cambiado mi lamento en baile; desataste mi cilicio, y me ceñiste de alegría” (Sal. 30:11). En esa forma llevará David a la nación abatida a una correcta relación con el Señor, y hará que sus habitantes se conviertan en los sacerdotes de Jehová y en los ministros de Dios mencionados en Isaías 61:6. Por fin llegarán a ser los árboles de justicia y el plantío de Jehová, para que Dios sea glorificado en Israel, una nación que dará frutos de justicia para Él. David también es símbolo de las personas de la era de la Iglesia que asimismo calificarán para tener parte en la primera resurrección y serán reyes y sacerdotes que gobernarán y reinarán con el Señor en todo el milenio (Ap. 20:6). 2. Conclusión Para concluir, repitamos las lecciones principales de la vida de David que pueden aportarnos beneficio: a) Primero, la necesidad de prepararnos aprendiendo los 90 David y Salomón caminos del Señor antes de ser lanzados de lleno al ministerio para el cual Dios nos ha ordenado. b) Segundo, mantener con el Señor de gloria, una correcta y progresiva relación personal para poder decir de corazón, como David: “Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo” (Sal. 27:4). F. REFLEXIONES SOBRE LAS BATALLAS DE DAVID TRES IMPORTANTES BATALLAS EN LA VIDA DE DAVID QUE NOS AYUDAN A SABER QUÉ CÓSAS VENCER PARAPODER REINAR 1. Contra los filisteos—La envidia Espiritualmente hablando, los filisteos representan la envidia. Lo podemos ver en Génesis 26:14. El pecado de la envidia es uno de los mayores enemigos que tenemos que combatir. Como líderes, debemos ganar una victoria personal sobre él en nuestras vidas. Esto solo puede lograrse mediante un encuentro personal con el Señor, en el cual Él bondadosamente nos concederá liberación para que de nuestras mentes y corazones sea quitado ese pecado. Sin esa victoria personal, no venceremos a quienes nos envidian, como se ve claramente en la vida de Saúl. A él le consumían los celos y la envidia que le tenía a David. Saúl fue atormentado por el Señor con un espíritu de celos por causa de su desobediencia, la cual le costó el trono y tener la certidumbre de que otro, más digno, La vida de David 91 ocuparía su sitio en vez de su propio hijo. Para ganar la victoria sobre un Saúl, no debemos tocarle, como hizo David, sino perdonarle, hacerle bien, y luego esperar la liberación y reivindicación de Dios. 2. Contra los jebuseos—La desunión, la división Estos son los que causan división entre hermanos. Esto se puede comprobar al comparar las siete naciones mencionadas en Dt. 7:1, con las siete cosas que Dios aborrece (Pr. 6:1619). Los jebuseos son aquellos que tuvieron que ser arrojados para que Israel tomase posesión de Sion. En mi opinión, solo les venceremos cuando Dios en primer lugar nos conceda lo que David pidió en el Salmo 86:11, “un corazón firme”, y luego produzca en nosotros la visión de Sion, que en resumen, son las pautas de Sion declaradas en el Salmo 15 y 24. 3. Contra los deseos de la carne: la lujuria o la codicia El método para vencer la lujuria se obtiene según lo expresó David en el Salmo 51:10, pidiendo a Dios crear en nosotros un corazón limpio. En cuanto a la codicia, la forma de vencerla es haciendo la oración de Proverbios 30:8, de modo que podamos llegar al nivel que Pablo obviamente había alcanzado cuando dijo: “Gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento” (1 Ti. 6:6). No obstante, esto tiene que aprenderse con pruebas y circunstancias a las que nos lleva la infinita sabiduría de Dios. Pablo lo explica así: “Sé vivir humildemente y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad (Fil. 4:12). 92 David y Salomón EN LAVIDA DE DAVID, SE VE CLARAMENTE LAVICTORIA EN EL SALMO 27:4 “Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; que esté yo en la casa de Jehová... para inquirir en su templo” (Sal. 27:4). David había alcanzado la verdadera grandeza—la grandeza de un corazón que ahora no deseaba para sí mismo ninguna de las posesiones de este mundo, ya fuesen bienes materiales, posiciones seculares o logros personales; sino un corazón que exclusivamente quería contemplar la belleza de Jesús y ser así transformado a su imagen, con el único propósito de agradar a Dios e inquirir de Él para hacer toda Su voluntad. Considero que estas tres victorias no deben ser únicamente la meta de los líderes, sino el victorioso lugar que todos, solo por la gracia, debemos alcanzar y en donde debemos permanecer. G. UN VISTAZO A ABSALÓN LA TRAICIÓN DE ABSALÓN Ningún estudio sobre la vida de David estaría completo si no profundizáramos en la traición de su hijo Absalón, el cual personifica la traición, la deslealtad y la conspiración contra un líder cercano. ¡Cuán despreciable es actuar de esta manera! Sin embargo, un Absalón por lo general es alguien con extraordinarias cualidades de líder. Es un hombre dotado por Dios de grandes talentos, es una persona distinguida por méritos propios. Si tales capacidades, estuvieran unidas a un carácter intachable que es fiel y genuino, ciertamente harían que un Absalón alcanzara notables alturas. La vida de David 93 Un Absalón tiene un enorme potencial, pero desgraciadamente sus aspiraciones van más allá del lugar que Dios le ha designado. Por eso, en vez de ser el vaso de honra para lo que fue creado, a Absalón le corrompe el deseo de posición y poder. ¡Cuánto se asemeja a la pauta dejada por Satanás, su antecesor! SIGUIENDO LA PAUTA DE LUCIFER Lucifer, el querubín ungido de quien leemos en Ezequiel 28:17, permitió que su corazón se exaltara con orgullo a causa de su deslumbrante belleza, corrompiendo así su sabiduría. Y por el deseo insaciable de mercancías y de controlar el comercio, se llenó de gran violencia (Ez. 28:16 NVI). “Puso su corazón como corazón de Dios” (Ez. 28:6), y dijo: “Seré como el Altísimo” (Is. 14:12-14). Literalmente, Lucifer es la pauta para un Absalón. Y ahora, en lugar de ser el “querubín protector ungido”, su nombre ha sido cambiado a Satanás, el adversario, el que odia, el engañador, el espíritu opositor. Así es un Absalón. Pero en este momento, queremos observar específicamente la vida de Absalón en las Sagradas Escrituras. Fue el tercer hijo de David nacido de Maaca, hija del rey de Gesur, la que no era israelita sino de origen sirio (2 S. 3:3, 15:8), siendo Siria un implacable enemigo de Israel, célebre por su odio. Absalón conservaba su odio hacia Amnón, el que había forzado a su hermana Tamar (2 S. 13:22), y al que luego mató. Semejante a éste fue el caso de Esaú, perseguidor de su hermano Jacob con espada y sin misericordia, cuyo enojo le desgarró perpetuamente como lo declara Amós 1:11. Por consiguiente, Esaú no halló lugar para arrepentirse (He.12:17; Mt. 6:14, 15). 94 David y Salomón Debido a la muerte de Amnón, la sentencia del rey David fue: “Váyase a su casa y no vea mi rostro”. (2 S. 14:24) Los falsos no pueden soportar el rechazo. Así como Satanás ansió en otro tiempo ser aceptado, Absalón ansió la aceptación del rey. Incluso quemó los plantíos de Joab para llamar la atención y ser llevado a la presencia de David. Pero después de que David le hubo aceptado y besado, Absalón comenzó a agitar los corazones de los israelitas, nombrándose juez para impartir justicia en lugar de David. Más tarde blasfemó diciéndole al rey que había hecho voto de servir a Jehová. Luego en Hebrón, se proclamó rey, usurpando de nuevo lo que el Señor había decretado para David (2 S. 15:1-11). Doscientos hombres de Jerusalén siguieron a Absalón con sencillez. ¡Sin lugar a dudas, son muchos los que no distinguen a los Absalones modernos! A los ojos de los hombres, los Absalones parecen intachables, hombres dignos, que se ganan el elogio de la gente. Los simples, carentes del genuino discernimiento espiritual, les siguen. (15:12) Ahora, otro hombre de gran influencia se le une. Este varón es Ahitofel, el consejero privado de David. El motivo que tuvo Ahitofel para traicionar a David, radica aparentemente en el hecho de que era abuelo de Betsabé (2 S. 23:34; 11:3), y de estar resentido porque David hizo pecar a su nieta. Es indiscutible que Ahitofel es aquel de quien David dice en el Salmo 55:12,13: “me enfrentó…el amigo íntimo mío, mi guía y mi familiar”. Después, David exclama en el Salmo 55:15: “¡Que la muerte les sorprenda!”, lo cual en efecto se cumplió. En aquellos La vida de David 95 días, el consejo que daba Ahitofel era como si se consultase la Palabra de Dios. Así era todo consejo de Ahitofel, tanto con David como con Absalón. David oró para que el consejo de Ahitofel se volviese necedad, lo cual Dios concedió, porque cuando Ahitofel daba un buen consejo era estimado como una tontería: “Porque Jehová había ordenado que el acertado consejo de Ahitofel se frustrara, para que Jehová hiciese venir el mal sobre Absalón” (2 S. 15:31; 17:14, 23). Ahitofel entonces se suicidó al comprender que el fin se acercaba y que Absalón estaba destinado a un inevitable fracaso y al juicio de la mano de David. Sin embargo, Absalón continuó, sin percatarse de este hecho. Persiguiendo a David con una fuerza superior, fue derrotado y él mismo fue suspendido del mulo en que iba, quedando atrapado por la cabeza en las ramas de una encina. A pesar de que no era la intención de David perjudicar a Absalón, Joab lo mató. ¿QUÉ LECCIONES APRENDEMOS DE UN “ABSALÓN”? ¿Qué podemos aprender del relato de Absalón? ¿Por qué existen individuos que aspiran a puestos que Dios no les ha dado? ¿Por qué se les permite parecer prósperos y engañar a tantos, al menos por un tiempo? Consideremos los propósitos de Dios. Él desea tener comunión con el hombre a quien hizo a Su imagen y semejanza. solo pueden tener comunión aquellos que han pasado por situaciones similares. Dios Padre pasó por la más profunda tristeza y humillación cuando Lucifer lo traicionó, encabezando una conspiración pre-terrenal en la que la tercera parte de las huestes angelicales se sublevó contra Dios. 96 David y Salomón Cuando Dios dictó la sentencia, creando el infierno y destinando a prisiones eternas de oscuridad a cierto número de ángeles hasta el juicio del gran día (Judas 1:6), es aparente que Lucifer acusó a Dios de no tener amor ni sabiduría. Por lo tanto, este mundo y la humanidad fueron creados fundamentalmente para exponer el amor y la sabiduría de Dios, en donde Satanás es usado para probar a Jesucristo hombre, y a otros varones y mujeres de fe, que al final ocuparán las puestos de supremacía en el reino de los cielos, gobernando como reyes y sacerdotes y convirtiéndose en coherederos con Cristo. LA TRAICIÓN ES NECESARIA Una parte indispensable de la comunión con Dios es conocer la participación de Sus sufrimientos, que incluye la traición. Así, vemos a Coré, Datán y Abiram, traicionando a Moisés. Vemos a Absalón traicionando a David. A Daniel lo traicionaron los príncipes del reinado de Darío. Y por supuesto, a Jesús lo traicionó Judas. Debemos conocer a Absalón, un hombre que para ser aceptado no se detendrá ante nada, pues lleno de orgullo y envidia, no tolera el rechazo. Él procuró ser aceptado por David, habiéndolo traicionado. El Absalón suyo se empeñará en una reconciliación, y preparará el terreno para traicionarlo y conspirar contra usted todavía más que antes. ¿CÓMO MANEJAMOS ESAS SITUACIONES? ¡El primer paso es entrar en el reposo de Dios! Permítale pelear por usted y frustrar el consejo de los muchos asesores de Absalón, porque sus compañeros son muchos y también La vida de David 97 lo odian a usted. En segundo lugar, no toque a Absalón, así como David no tocó a Saúl y así como Jesús no se vengó de Judas. En tercer lugar, conserve un espíritu recto, amoroso y limpio. El resultado será un corazón que conoce los sufrimientos de Jesús y del Padre de una manera nueva y más profunda. Una puerta se nos abrirá al tener comunión con Dios más íntimamente, cuando veamos a nuestro Absalón desde el ángulo correcto y agradezcamos a Dios el privilegio de permitirnos pasar por estas experiencias. EN DEFINITIVA, DIOS USA A ABSALÓN PARA BENDECIRNOS Una bendición más de tener un Absalón, es que él está siendo usado por Dios para eliminar a aquellos cuyo corazón no es sincero para con Dios y para con usted, el líder. Agradezcamos a Dios que Absalón depura a las personas que Dios nos confía. Sin Absalón, la mezcla no se notaría. Por eso, desde todos los ángulos, aunque nos duela la etapa de rebeldía de Absalón, recordemos esto—¡Todo valdrá la pena! Usted indudablemente tendrá severas batallas espirituales, y quizá se enferme porque Absalón se rebela, lo que Samuel califica de “pecado de hechicería” (1 S. 15:23). Él proferirá maldiciones contra usted y sus seguidores, porque se ha pasado de la raya y el Espíritu Santo le ha entregado al mal (2 Ts. 2:10, 11); y efectivamente practica la hechicería. Pero, alabado sea el Señor, el alboroto del periodo de obscuridad de Absalón tiene un final para los justos, quienes entran en una gloria todavía mayor. 98 David y Salomón CONCLUSIÓN Que este pequeño capítulo le ayude a comprender, amado lector, que la existencia de Absalón está dirigida a bendecirlo a usted, pues él es colocado en su vida por la sabiduría de Dios, por un periodo. Los Absalones nos acongojan a tal extremo, que llegamos a participar de los padecimientos de Cristo en nuevas formas. Pero, Absalón es también necesario para la depuración de la Iglesia. El hermano de Absalón, Adonías, otro usurpador, completó la remoción de la escoria, así como Joab, cuya deslealtad a David impedía un nuevo mover del Espíritu de Dios (ver 1 R.1:5-8). Espere que tanto Absalón como Adonías se manifiesten justo antes de un avivamiento o de un nuevo mover de Dios en su iglesia. Ellos son como los jebuseos que causan discordia entre hermanos y son indispensables para sacar a los descontentos, logrando así la verdadera unidad entre los hermanos, porque allí envía el Señor bendición y vida eterna (Sal. 133). Recuerde que no fue sino hasta que Judas abandonó el grupo, que el Señor rogó por unidad en Juan 17:21-22, en donde dijo: “Para que ellos sean uno... como el Padre y yo somos uno”. Cuando los Absalones, los Adonías y los Judas son quitados, llega la verdadera unidad y entonces la gloria se revela. ¡Bendito sea el nombre del Señor! Jesús no rogó por la unidad sino hasta que Judas hubo abandonado el grupo. La vida de David 99 Capítulo 6 EL CONSTRUCTOR DEL TEMPLO I. EL EDIFICADOR DEL TEMPLO A. LOS PREPARATIVOS PARA EL TEMPLO 1. La visión 2. Lo material y lo financiero 3. El modelo B. LOS SÍMBOLOS DENTRO DEL TEMPLO 1. El edificio físico 2. La iglesia universal 3. La iglesia local C. LAS PIEDRAS DENTRO DEL TEMPLO 1. 2. 3. 4. 5. La principal cabeza del ángulo Las piedras de fundamento Las piedras Las esquinas labradas (piedras angulares) El acabado a. Empleo secular b. La repetición. 100 David y Salomón D. LAS MEDIDAS DEL TEMPLO 1. 2. 3. 4. 5. 6. Fecha de inicio Longitud Anchura Altura Extensión de la parte frontal Dimensiones del Lugar Santo E. LOS MATERIALES DEL TEMPLO 1. 2. 3. 4. 5. Cedro Flores abiertas Querubines de madera de olivo Palmeras Dos columnas a. Fuerza b. Gobierno c. Gracia d. Pureza e. Las granadas F. EL PROPÓSITO DEL TEMPLO 1. Purificarnos 2. Pulirnos 3. Madurarnos G. APLICACIÓN PRÁCTICA La vida de David 101 Desde su niñez hasta su madurez, y desde el pastoreo hasta el reinado, Dios perfeccionó y usó a David en muchas formas asombrosas. Pero tal vez el logro más notable de Dios por medio de David, ocurrió en los últimos días de su vida, cuando Dios le dio el modelo del templo. (El templo fue construido después por Salomón). Este modelo contiene muchas enseñanzas maravillosas para nosotros, tanto en lo que se refiere a nuestras vidas cristianas individuales, como a la obra que Dios nos ha encomendado colectivamente. A. LOS PREPARATIVOS PARA EL TEMPLO 1. La visión. Antes de poder realizar cualquier cosa para Dios, necesitamos una visión. Antes de la construcción del templo, David le hizo un encargo a Salomón: “Guardad e inquirid todos los preceptos de Jehová vuestro Dios, para que poseáis la buena tierra, y la dejéis en herencia a vuestros hijos después de vosotros perpetuamente... Mira, pues, ahora, que Jehová te ha elegido para que edifiques casa para el santuario; esfuérzate y hazla” (1 Cr. 28:8, 10). Dios quiere que poseamos la herencia que Él nos ha ordenado poseer. 2. Los preparativos materiales y financieros. David compró la tierra sobre la cual Dios había ordenado que se construyera el templo (1 Cr. 21:24, 25). Es interesante que David pagó el precio total de la tierra; sin ningún descuento. Dios no quería que existiera ningún reproche ni que alguien pudiera venir después a decir: “¡Bueno, nosotros les ayudamos!” La tierra que Dios quiere para sí, ya está totalmente pagada. 102 David y Salomón David preparó también una gran cantidad de materiales para el templo (1 Cr. 22:2-4). Lo hizo porque, según dijo: “...La casa que se ha de edificar a Jehová ha de ser magnífica por excelencia, para renombre y honra en todas las tierras” (1 Cr. 22:5). Este no sería un edificio pequeño e insignificante. Cuando respondemos al llamado de Dios, nosotros también podemos ser usados para glorificar a Dios en muchas partes de la tierra, cuando la gente se maraville de las grandes cosas que Dios ha hecho. 3. El modelo. Otro preparativo muy importante para el templo era el modelo de la casa. David dio a Salomón el modelo o plano del: “pórtico del templo y sus casas, sus tesorerías, sus aposentos…y…el propiciatorio. Asimismo, el plano de todas las cosas que tenía por el Espíritu, de los atrios de la casa de Jehová, para todas las cámaras alrededor, para las tesorerías de la casa de Dios…Además para los grupos de sacerdotes y de los levitas, para toda la obra del ministerio de la casa de Jehová, y para todos los utensilios del ministerio de la casa de Jehová” (1 Cr. 28:11-13). El modelo vino de Dios. “Todas estas cosas, dijo David, me fueron trazadas por la mano de Jehová, que me hizo entender todas las obras del diseño” (1 Cr. 28:19). No era solo cuestión de prepararse material y económicamente para el templo, sino que el diseño del templo era muy importante porque este modelo en sí iba a revelar a Dios y a Su verdad. Dios incluso le dio a David los detalles de cómo se dividirían los levitas, de tal manera que los ministerios pudieran colocarse en orden. Porque todo simbolizaría a Dios y a Sus caminos. La vida de David 103 B. SÍMBOLOS EN EL TEMPLO Hay tres símbolos o figuras importantes en la construcción del templo: 1. El edificio físico—El templo era un edificio real y tangible, edificado para la gloria de Dios. A veces Dios exige que, bajo Su dirección, su pueblo construya literalmente edificios físicos para Su gloria. 2. La iglesia universal—El Templo de Salomón es un símbolo de la Iglesia de Jesucristo. 3. La iglesia local—El Templo de Salomón también se aplica a la iglesia local y contiene enseñanzas para ella. C. LAS PIEDRAS DENTRO DEL TEMPLO 1. La principal piedra angular—El Señor Jesucristo. Antes de iniciar la construcción de cualquier edificio, se debe colocar una piedra angular. La piedra angular es aquella a partir de la cual se toman todas las otras medidas del edificio. Por lo tanto, es la piedra más importante de cualquier edificación. Una piedra angular debe ser probada. Es una piedra preciosa, la más valiosa de todo el edificio, y tiene que ser de cimiento estable. Jesucristo es la principal piedra angular (Is. 28:16). “He aquí que yo he puesto en Sion por fundamento una piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable”. En el Nuevo Testamento, el apóstol Pablo hace eco de este concepto. Él se autodenomina el perito arquitecto que colocó el fundamento de la iglesia de Corinto. Pero el fundamento puesto fue 104 David y Salomón Jesucristo. “Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento... Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo” (1 Co. 3:10-11). 2. Las piedras de fundamento — Los dones ministeriales. En el libro de Efesios, el apóstol Pablo continúa con el mismo tema: “Porque por medio de Él [Cristo] los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre. Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo” (Ef. 2:18-20). Por lo tanto, los dones ministeriales son también piedras fundamentales. El Señor Jesucristo es el Príncipe de los pastores y la piedra del ángulo a partir de la cual todas las medidas son tomadas. Sin embargo, un edificio espiritual es construido también sobre los dones ministeriales de los apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros que Dios da a las iglesias locales. 3. Piedras— todos los creyentes. Cada uno de nosotros es comparado en las Escrituras con una piedra que Dios quiere colocar en la iglesia. “En quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu” (Ef. 2:21, 22). 4. Esquinas labradas (piedras angulares)—Las hijas. En el Salmo 144:12 David exclama: “...Nuestras hijas como La vida de David 105 esquinas labradas como las de un palacio”. El Señor le da esperanzas a todo padre cristiano. Él quiere que nuestras hijas sean esquinas labradas (piedras angulares). Un edificio grande consta de muchas piedras angulares. Jesús es la principal piedra angular, pero se necesitan además muchas otras piedras angulares que juntas deben encajar a la perfección, pues a partir de ellas se deben tomar otras medidas. El Señor quiere hijas cuyo simple caminar, comportamiento, actitud y vocabulario, sean de tal calidad, que los demás (niños o adultos), puedan tomar sus medidas a partir de ellas, vean la verdad y entiendan los caminos de Dios al observarlas. Las hijas pequeñas no vienen completamente pulidas. Debe impartírseles cierto refinamiento. ¡Pero qué gran estímulo! Las estamos puliendo y puliendo para que puedan ser esquinas labradas a partir de las cuales otros puedan calibrar sus vidas. Esta es la visión para nuestras hijas. El Salmo 144:12 dice: “hijas como esquinas labradas como las de un palacio”. Su conducta debe ser tal, que otros puedan ver cómo se desenvolvería Cristo en diversas situaciones. Esta es la esperanza que sentí que Dios implantaba en mi corazón, esperanza que Él desea transmitir a todo padre y madre— que Él quiere que sus hijas se conviertan en bellas esquinas labradas. 5. El acabado (1 R. 6:7). “Y cuando se edificó la casa, la fabricaron de piedras que traían ya acabadas, de tal manera que cuando la edificaban, ni martillos ni hachas se oyeron en la casa, ni ningún otro instrumento de hierro”. Las piedras para el Templo de Salomón eran labradas lejos de la ubicación del templo. Cada piedra 106 David y Salomón era preparada conforme a especificaciones exactas, y una vez pulida y con las medidas precisas, era marcada y llevada al sitio en donde era colocada. No hubo ni herramientas ni ruido en el templo. Dios está trabajando hoy en nosotros, Sus piedras vivas, para que llegada la hora, estemos listos para encajar juntos. Dios está construyendo un templo santo con Sus piedras vivas a. Empleo secular. ¿En dónde nos pule Dios? ¡En nuestro empleo secular! Por eso es de suma importancia estar en el trabajo correcto. En nuestro empleo secular, el Señor desarrolla en nosotros el carácter y la habilidad que nos equipan para ocupar directamente la posición que nos tiene asignada aquí y también en la eternidad. En nuestro empleo secular, Dios tiene los “pulidores” apropiados sentados a nuestro lado, los cuales tienen la bondad de pulirnos día tras día. A estos “pulidores” Él los ha escogido cuidadosamente, y ellos pueden limar nuestras asperezas. b. Repetición. Ciertas virtudes se desarrollan por repetición, y de ella está hecha la vida. En un hogar, las camas deben ser tendidas y la comida preparada a diario. Cuando trabajamos en una oficina, fábrica, etc., el trabajo generalmente implica rutina. Pero el trabajo repetitivo es importante porque desarrolla las cualidades de diligencia y fidelidad que son esenciales para el ministerio y para toda “piedra viva”. Por ello, en lugar de referirnos a nuestra labor diaria como monótona, alabemos a Dios por habernos enviado a la cantera en donde seremos “pulidos” y nuestras capacidades perfeccionadas. La vida de David 107 ¡No despreciemos nuestro empleo secular! Es posible que a menudo dejemos de entender lo que Dios quiere, por creer que el empleo secular y la iglesia son dos cosas separadas. Reconozcamos que Dios nos ha puesto en el lugar correcto para que Su santa obra se realice en nuestro interior. D. LAS MEDIDAS DEL TEMPLO En la Biblia, los números tienen un significado espiritual , y podemos aprender mucho de los números asociados con el templo. 1. 480 - El Año en que se comenzó el Templo (1 R. 6:1). Salomón comenzó a construir el templo 480 años después de que los hijos de Israel salieron de Egipto. Cuarenta y ocho es el número del sacerdocio (había cuarenta y ocho tablas en el Tabernáculo de Moisés), y diez es el número de la ley. Así que 480 (48 X 10) significa el desarrollo de un fiel sacerdocio. 2. 60 - Longitud del Templo (1 R. 6:2). El templo tenía sesenta codos de largo. Sesenta (6 X 10) representa al hombre (6) formado conforme a la ley (10). Ya que es una medida de longitud, se refiere a nuestra caminata. 3. 20 - Anchura del Templo (1 R. 6:2). La anchura se refiere al entendimiento, y 20 significa madurez, lo que quiere decir que la anchura del Templo de Salomón indica madurez de entendimiento. 4. 30 - Altura del Templo (1 R. 6:2). 108 David y Salomón Treinta era la edad en que un levita podía ingresar al ministerio. Por ser la medida vertical del templo, significa adoración. Por lo tanto, las dimensiones clave del templo son ilustrativas de una iglesia en donde los santos tienen las leyes de Dios escritas en las tablas de carne de sus corazones y caminan conforme a ellas, una iglesia en donde tienen madurez de entendimiento, y en donde Dios ha desarrollado en lo interno de su ser, una adoración en el Espíritu. 1 Reyes 6:12 lleva ligada una amonestación que no podemos ignorar, porque resume estos pequeños conceptos: “Con relación a esta casa que tú edificas, si anduvieres en mis estatutos e hicieres mis decretos, y guardares todos mis mandamientos andando en ellos, yo cumpliré contigo mi palabra que hablé a David tu padre”. Observemos los versículos en que incursiona David cuando las medidas están siendo registradas. Hay en ellos una pausa y una pequeña exhortación de parte de David, es una amonestación para Salomón para que recuerde que esta casa (que tiene la forma de un hombre que cumple la ley) solo sería bendecida si el hombre caminara en los estatutos de Dios, ejecutara Sus juicios, y guardara todos sus mandamientos. Luego en el versículo 13, sigue una promesa: “y habitaré en ella en medio de los hijos de Israel”. 5. 40 - Longitud de la sección frontal del templo (1 R. 6:17). El templo, que tenía 60 codos de largo, estaba dividido en dos secciones; una de ellas medía cuarenta codos de largo y la otra veinte. En primer lugar, se entraba por la parte del edificio que medía cuarenta codos; el número cuarenta significa La vida de David 109 probado o comprobado. Moisés estuvo cuarenta años en el desierto, y también los hijos de Israel. Así como Moisés fue una vasija probada, comprobada y fiel, así también a nosotros Dios nos ha estado probando y comprobando. Él desea que entremos en una nueva dimensión espiritual, de la cual el Lugar Santísimo del templo es una ilustración. 6. 20 X 20 X 20 - Dimensiones del Lugar Santísimo del templo. “Asimismo hizo al final de la casa un edificio de veinte codos, de tablas de cedro desde el suelo hasta lo más alto; así hizo en la casa un aposento que es el Lugar Santísimo” (1 R. 6:16). “El lugar santísimo [el santuario interior]... tenía veinte codos de largo, veinte de ancho y veinte de altura” (1 R. 6:20). El número clave es el veinte, que significa madurez. A un individuo que ha alcanzado la madurez se le trata como a un adulto. Por ejemplo, un joven adolescente y un hombre adulto que han cometido el mismo crimen, recibirán un castigo diferente. Cuando los adultos delinquen, son juzgados y penados de acuerdo con una ley de adultos, porque las personas maduras deben proceder de manera madura. Después de habernos probado y comprobado año tras año, Dios desea llevarnos al Lugar Santísimo, detrás del velo, en donde las medidas son 20 X 20 X 20 y en donde todo sobre nosotros habla de madurez. Esto tiene dos implicaciones principales: La primera es una enorme responsabilidad, y la segunda, que si desobedecemos cuando somos maduros, Dios nos trata como adultos y no como niños. Con mucha frecuencia, Dios casi cierra un ojo ante las cosas que hacemos, pero Él quiere que crezcamos. 110 David y Salomón Los hombres se dan cuenta de que ya no pueden pensar ni hacer lo que les da la gana, como antes. Es que Dios les está señalando estas cosas con Su dedo. Solamente las personas maduras pasarán detrás del velo al Lugar Santísimo. La longitud de veinte codos significa una caminata madura. ¿Y quiénes son los que tienen un caminar maduro en la vida cristiana? Todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos (maduros) de Dios (Ro. 8:14). Dios está diciendo: “Ahora que me preparo para hacerte cruzar el velo, requiero que seas guiado por mi Espíritu”. La anchura de veinte codos indica madurez de entendimiento. 1 Corintios 14:20 dice: “no seáis niños en el modo de pensar; sino sed niños en la malicia, pero maduros en el modo de pensar”. La altura de veinte codos muestra que Dios espera que nuestro ministerio y nuestra adoración sean maduros. E. LOS MATERIALES DEL TEMPLO 1. Cedro. “Y la casa estaba cubierta de cedro por dentro, y tenía entalladuras de calabazas silvestres y de botones de flores1. Todo era cedro; ninguna piedra se veía” (1 R. 6:18). El cedro significa fortaleza ya que para ser maduros necesitamos ser fuertes. A Josué se le dijo que se “esforzara y fuese valiente” para hacer todo lo que el Señor requería. Como hijos maduros de Dios y como Iglesia madura, debemos ser fuertes para hacer todo lo que Dios nos pide. El hecho de que las piedras no estaban a la vista era un detalle significativo, porque cuando traspasamos el velo, solamente La vida de David 111 vemos a Uno allí dentro, el Señor Jesucristo. Cristo desea habitar dentro de nosotros y morar con nosotros de tal manera que la gente ya no nos vea más a nosotros, sino a Jesús en nosotros. 2. Flores abiertas. Las flores abiertas también hablan de madurez. 3. Querubines de madera de olivo. En el Lugar Santísimo había dos querubines de madera de olivo, que medían diez codos de alto cada uno. Estos querubines significaban la presencia misma de Dios como paz, porque el olivo significa paz y el diez habla de la ley. “Mucha paz tienen los que aman tu ley” (Sal. 119:165). Una de las cosas que Dios hará en estos últimos días es poner sobre nosotros la cobertura de Su presencia. Cosas aterradoras sucederán en este mundo, pero la cobertura de la paz de Dios sobre Su pueblo será nuestra salvación y defensa. Hace algún tiempo, estábamos en cierta ciudad una noche, cuando el Señor me dio esta palabra: “Vienen momentos inquietantes”. Eso concordaba con mi escatología (doctrina de lo venidero), así que dije: “Gracias Señor”. Pero no le pregunté por qué me había dado esa palabra específica en aquella noche particular. Al día siguiente, alrededor de las ocho de la mañana, la ventana del motel comenzó a sacudirse de dentro a fuera; el piso a moverse de arriba a abajo; y yo le pregunté a mi esposa: ¿Qué está pasando? Ella respondió: “¡Es un terremoto!” Ella sabía, porque ya había estado 112 David y Salomón anteriormente en uno. Antes de que pudiéramos gritar, fue como si una carpa cayera sobre nosotros, y fuimos cubiertos por la paz de Dios. Debido a que la paz de Dios era tan grande, contemplamos las paredes agrietarse, el piso saltar y las ventanas sacudirse, con la misma actitud con que se observa la pantalla del televisor. En el Lugar Santísimo, Dios hará que Su paz nos envuelva. Por esto, muchos se maravillarán. 4. Las palmeras. Las palmeras estaban esculpidas en las paredes del templo (1 R. 6:29), representan la justicia (rectitud) de Cristo (Sal. 92:12). 5. Las dos columnas. Había dos columnas fuera del templo (1 R. 7:15). Estas columnas simbolizan o representan a los vencedores, (ver Apocalipsis 3:12): “Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios”. Hay una cantidad de templos en el cielo, y dentro de ellos hay columnas. La columna simboliza también a un anciano, y las medidas dadas para la columna son muy importantes. a. Fortaleza. En el versículo 15 se nos dice que la altura de la columna era de dieciocho codos, indicando fortaleza. b. Gobierno. La circunferencia de doce codos se refiere al gobierno, el cual descansa sobre los hombros de un anciano. c. Gracia. El versículo 16 nos dice que la altura de los capiteles sobre las columnas era de cinco codos, lo que indica gracia. Los ancianos necesitan estar llenos de gracia. La vida de David 113 d. Pureza. Los lirios (versículo 19) se refieren a la pureza que un anciano debe tener forjada en su corazón. e. Granadas. En los versículos 18 y 20 se mencionan las granadas. Éstas significan el fruto del amor, que debe desarrollarse en un anciano. El número de las granadas (200) es importante; porque 200 indica la recompensa de un siervo fiel. La fidelidad es un atributo muy importante en un anciano. F. EL PROPÓSITO DEL TEMPLO Tanto el Tabernáculo de Moisés como el Templo de Salomón tenían el mismo propósito subyacente. En Éxodo 25:8, Dios dijo a Moisés: “Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de ellos”. El Templo de Salomón fue construido por la misma razón: “Y habitaré en ella en medio de los hijos de Israel” (1 R. 6:13). En 1 R. 8:1-4, cuando fue edificado el templo, trajeron el arca del pacto (en donde estaba la presencia del Señor), desde la Ciudad de David, que es Sion, en el séptimo mes (que significa la fiesta de los Tabernáculos) hasta el Templo de Salomón. Cuando depositaron el arca del pacto en el Lugar Santísimo, la nube de la presencia de Dios llenó la casa de Jehová “y los sacerdotes no pudieron permanecer para ministrar por causa de la nube; porque la gloria de Jehová había llenado la casa de Jehová”. Dios está construyendo en el ámbito del Espíritu. Con Sus piedras vivas está construyendo un templo santo. Su intención es llenar este templo de Su gloria visible. He visto en el Espíritu que en la fiesta de los Tabernáculos, se manifestará la gloria visible de Dios. 114 David y Salomón Nadie tendrá que preguntar: “¿Está Dios entre ustedes?” Pues verán la nube de gloria y sentirán la asombrosa presencia de Dios. La gloria de Dios se moverá entre nosotros haciendo milagros. Cuando la gente ocupe su asiento, será sanada y liberada. Dios hará cosas extraordinarias. Mientras nosotros construimos edificios físicos en la tierra, que solo durarán poco tiempo, Dios trabaja en nuestras vidas para la eternidad. Él es el Maestro Constructor que nos labra y moldea para que “encajemos” en Su edificio, la Nueva Jerusalén. Dios desea forjar lo siguiente en nuestras vidas: 1. Purificarnos. El llamado de Dios para nosotros es a dejar todo pecado e inmundicia y ser puros. Amados, lo que Dios está haciendo en cada una de nuestras vidas es eterno. Se nos está dando la forma de la Nueva Jerusalén, la que está arriba en los cielos. “Salid de entre ellos, no toquéis lo inmundo”. ¡Oh, purifíquense las vasijas del Señor! Ese es el clamor de Dios para nosotros. ¡Oh, sed puros! 2. Pulirnos. Como ya lo dijimos, en el templo del Señor habrá muchas piedras angulares. Dios quiere que tengamos la visión de estar tan conformados a la imagen de Jesús, que otros al vernos puedan calibrarse y orientar su vida y conducta. Reconozcamos que Dios nos ha colocado en nuestros empleos seculares específicos, para poder pulirnos y darnos la forma de piedras angulares. La vida de David 115 3. Madurarnos. Al prepararnos para entrar en el Lugar Santísimo en nuestra experiencia espiritual, comprendamos que esta madurez acarrea responsabilidades adicionales y un patrón de conducta que quizá sea más alto del que antes se nos exigió. ¡Prosigamos por la gloria de Dios! G. APLICACIÓN PRÁCTICA Somos piedras vivas que Dios está preparando y tallando, para colocarnos en Su templo eterno, “...vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré entre ellos, y seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo inmundo; y yo os recibiré, y seré para vosotros por Padre, y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso” (2 Co. 6:16-18). SEGUNDA PARTE 118 La vida de Salomón La vida de Salomón 119 ESTUDIO SOBRE LA VIDA DE SALOMÓN Capítulo 7 Los años formativos de Salomón Capítulo 8 La ascensión de Salomón al trono Capítulo 9 La construcción del templo Capítulo 10 El apogeo de su reinado y gloria Capítulo 11 Sus años finales y decadentes Capítulo 12 Comparación entre David y Salomón 120 La vida de Salomón INTRODUCCIÓN Me gustaría comenzar esta serie con algunas observaciones basadas en hechos, acerca de los reyes de Israel. Solamente fueron tres los que gobernaron sobre el reino unido de Israel— Saúl, David y Salomón. Éstos representan cierta clase de líderes de la era de la Iglesia. EL REY SAÚL • Ungido dos veces – por Samuel, y luego por los ancianos de Israel cuando fue instalado en el cargo. Comenzó bien, pero fracasó por su desobediencia. • Fue atormentado por el Señor con un espíritu de celos. • Simboliza a la Israel física, que desobedeció los mandamientos de Dios, y que por haber pecado, fue movida a celos por una nación que no es nación—la iglesia gentil (ver Romanos 10:19). • Simboliza a un dirigente de la iglesia, que por desobedecer al Señor, ha perdido la unción y es reemplazado por otro varón conforme al corazón de Dios. EL REY DAVID • Siguió al Señor por completo. • Peleó las batallas de Jehová y llevó a Israel a poseer la herencia que Dios había prometido. • Simboliza la iglesia de los primeros días (ver Amós 9:11; Hechos 15:16). La vida de Salomón 121 • Su tabernáculo estaba en el monte de Sion. Sion representa la santidad de Jehová. • Él personifica a Cristo como profeta, sacerdote y rey. • Él es como la Iglesia de los primeros días, la cual avanzó como ese real sacerdocio, a combatir y conquistar el mundo para Cristo. • David ilustra la iglesia de nuestros días, contendiendo contra las potestades del enemigo y ganando las naciones para Jesús. a. Una etapa en que la iglesia llega a poseer la herencia y la posición en el Espíritu, que Dios le ha designado. b. La iglesia en ese periodo de guerra espiritual. • David, en el acto final de su vida, recibió el modelo para el templo. Hoy en día, vemos al Señor hablar en tantos lugares acerca de avivamiento, multitudes y la gran cosecha. Dios está hablando de la necesidad de edificios muy espaciosos. ¿Por qué? En mi opinión, la era de Salomón como Baal Hamón, “el Señor de la Cosecha”, “el Señor de Multitudes”, “El Príncipe de Paz”, está haciendo Su entrada. EL REY SALOMÓN • Así como la vida y ministerio de David están representados en la llenura del Pentecostés de la iglesia de los primeros días, o lluvia temprana; la vida de Salomón está regida por la lluvia tardía, o fiesta de los Tabernáculos, que se 122 La vida de Salomón celebró después de que el templo estuvo terminado. Es un lugar en que la gloria de Dios se manifiesta. • Es de suma importancia que captemos la idea en torno al reinado de Salomón. Su reinado simboliza la Iglesia de los últimos días en toda su plenitud, antes de la venida del Señor. A este templo vendrá súbitamente el Señor (Mal. 3:1). “¿Quién podrá permanecer en Su presencia? Porque vendrá como refinador a purificar a los hijos de Leví, de modo que traigan a Jehová ofrenda en justicia”. (Paráfrasis). • En las vidas de estos tres reyes está la iglesia de nuestros días. Saúl—desobediente, eliminado; David—que introduce a la iglesia en su herencia; y, Salomón—que introduce a la Iglesia en el templo, su verdadero lugar de reposo, y en la gloria de la fiesta de los Tabernáculos. La vida de Salomón 123 Capítulo 7 LOS PRIMEROS AÑOS DE FORMACIÓN DE SALOMÓN I. LOS PRIMEROS AÑOS DE FORMACIÓN DE SALOMÓN A. GENEALOGÍA B. INSTRUCCIÓN PARA EL TRONO 1. La fidelidad a los padres a. La sumisión b. El hijo de la vejez c. La obediencia d. La diligencia 2. La maldición de las malas compañías 3. Los lazos de la lujuria 4. La contienda y sus frutos 5. Los errores de la codicia 124 La vida de Salomón A. GENEALOGÍA Dios puede transformar las situaciones más inmorales y con ello producir algo que le glorifique. Salomón nació de una relación adúltera entre David y Betsabé. Hoy en día, el adulterio está arrasando no solo el mundo sino la Iglesia. Sin embargo, éste que nació de tal relación, fue amado por Dios. Dios puede transformar las situaciones más inmorales, y con ello producir algo que le glorifique. Considero que esta verdad debería ser esperanzadora para muchos. En la vida de Salomón hubo debilidad carnal. Nosotros heredamos la naturaleza de nuestros padres y abuelos. Por lo tanto, cuando hay un grave pecado como el de David y Betsabé, éste se transmite a los hijos. De ahí que Salomón naciera con esa misma debilidad de la carne. David, e incluso Betsabé, se esmeraron en preparar a Salomón para el trono. Ellos se empeñaron en reforzar, mediante la instrucción, esa área frágil y vulnerable de su naturaleza que lo había expuesto a esos apetitos carnales. En los primeros nueve capítulos del libro de Proverbios, quedaron registradas para nosotros sus enseñanzas. B. INSTRUCCIÓN PARA EL TRONO Estos capítulos de Proverbios fueron preparatorios para que un hombre se sentara en el trono de David. Constituyen la instrucción impartida por un rey a otro rey. Son un excelente adiestramiento para nosotros, ya que todos estamos designados para ocupar el trono. (1 S. 2:8; Ap. 1:6; 5:10). Por lo tanto, estamos contemplando instrucciones para reyes. La vida de Salomón 125 En los primeros nueve capítulos de Proverbios, se cubre lo fundamental de los temas siguientes: 1. La fidelidad a los padres 2. La maldición de las malas compañías 3. Evitar los lazos de la sensualidad y la lujuria 4. La contienda y sus frutos 5. Los errores de la codicia Todos estos temas pueden resumirse en una sola frase: Instruirse en sabiduría. Proverbios 1:1-9 es un prólogo en que se muestra el propósito de estos capítulos: 1:4—“Para dar sagacidad a los simples, y a los jóvenes inteligencia y cordura” [Para dar sabiduría a los simples, y a los jóvenes conocimiento y discreción—(parafraseado). Ese es el propósito de esta instrucción. Dondequiera que leamos la expresión: “jóvenes”, se refiere también a una joven mujer. 1:7—“El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza”. 1:22—“¿Hasta cuando, oh simples, amaréis la simpleza?” No hay ningún galardón por ser ignorantes en el día y generación presentes. Isaías 33:6 dice (hablando de los últimos días), “...y reinarán en tus tiempos la sabiduría y la ciencia...?” Como es en lo secular, así es en lo espiritual. Para cada uno de nosotros, sea cual sea el área en que estemos, hay un 126 La vida de Salomón llamado a estudiar y mejorar nuestras capacidades y conocimientos, porque nos salvarán. En el prólogo hay un ruego que se repite a menudo: “Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre, y no desprecies la dirección de tu madre”. Es interesante notar que Betsabé también era una maestra. 1. La fidelidad a los padres a. La sumisión. Proverbios 3:1 empieza con: “Hijo mío”. David le está hablando a Salomón; “Hijo mío, no te olvides de mi ley, y tu corazón guarde mis mandamientos”. “Y hallarás gracia y buena opinión ante los ojos de Dios y de los hombres” (vs. 4). Esto nos recuerda a Lucas 2:51, en donde Jesús, después de estar en el templo respondiendo y haciendo preguntas a los doctores de la ley, se sometió a Su madre y a Su padre. Entonces, por esa sumisión, dice el versículo 52 que “Jesús crecía en sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y con los hombres”. Proverbios 4:1 continúa con ese mismo pensamiento: “Oíd, hijos, la enseñanza de un padre, y estad atentos, para que conozcáis cordura”. b. El “hijo de la vejez”. “Porque yo también fui hijo de mi padre” (Pr. 4:3). Aquí Salomón empieza a recordar y a transmitir a su generación, las enseñanzas de David. Salomón fue en Israel tanto el predicador como el rey. La vida de Salomón 127 “Porque yo también fui hijo de mi padre, delicado y único delante de mi madre”. Salomón fue el hijo de la “vejez de David”. Hay algo especial en los hijos de la vejez de un hombre. José, el hijo escogido de Jacob, fue también hijo de la vejez de su padre. Yo creo además que este es un símbolo espiritual de la Iglesia de los últimos días. Un hijo de la vejez, tiene el privilegio de la madurez y experiencia de su progenitor. Yo creo que la Iglesia de los últimos días tendrá toda la riqueza y experiencia de la Iglesia de todas las épocas. Será singularmente bendecida por el Señor, porque es el “hijo de Su vejez”. Así como José y Salomón, la Iglesia de los últimos días será llena de la sabiduría y conocimiento de Dios, como lo estuvieron estos hijos de la vejez, y será amada particularmente por el Padre. Asimismo, en Juan 2:10, acerca del milagro del vino, dice que Jesús guardó el mejor para el final. Hay muchos privilegios extraordinarios para los miembros de la iglesia de los últimos días antes de la venida del Señor Jesús. Algo especial está programado para cada uno de nosotros. c. La obediencia. Este concepto de obediencia a los padres continúa y se repite una y otra vez. En Proverbios 4:10 dice que como resultado de esa obediencia, “se te multiplicarán años de vida”. (Ver Efesios 6:2, que habla del primer mandamiento con promesa). Es algo que debemos hacer incluso en la vejez. Yo todavía obedezco y respeto a mis padres. Mi esposa, cuyos padres ya fallecieron, atesora sin embargo su recuerdo, sus vidas y sus dichos. Ella todavía los recuerda. En esto hay una bendición especial: “Y se te multiplicarán años de vida sobre la tierra”. Es muy importante tener una larga vida que nos sirva para 128 La vida de Salomón prepararnos para la eternidad. Efesios 5:16 habla de “redimir el tiempo”. El Salmo 90:12 dice: “Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría”. Atesoremos cada día que Dios nos da. La clave para la longevidad es honrar a nuestros padres sea cual sea nuestra edad. d. La diligencia. “Hijo mío, está atento a mis palabras...guárdalas en medio de tu corazón...sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón, porque de él mana la vida” (Pr. 4:20-23). “No te desvíes a la derecha ni a la izquierda” (vs. 27). Aquí hay algo muy importante: Isaías 30:21 dice: “Tus oídos oirán a tus espaldas palabra que diga: Este es el camino, andad por él”. En nuestra época existe la tendencia a no ser diligentes ni comprometidos. Esto se aplica a todo aspecto de nuestras vidas. Es necesario que nos comprometamos a seguir los caminos y sendas de Dios. Dios promete que si nos desviamos, oiremos una voz decir: “No. El camino es este, síguelo”. Pero si hacemos caso omiso, negándonos y endureciendo nuestros corazones contra Dios cuando nos alerta, Él nos dejará andar por otro camino. Él incluso llega al extremo de endurecernos de manera que no podamos retroceder. Estas instrucciones son muy importantes no nos desviemos a la izquierda ni a la derecha. 2. La maldición de las malas compañías Hay muchas advertencias en Proverbios 2:12-22 contra las malas compañías, inclusive dentro de la iglesia. “No entres por la vereda de los impíos, ni vayas por el camino de los malos. Déjala, no pases por ella; apártate de ella, pasa” (Pr. La vida de Salomón 129 4:14, 15). Luego, en el capítulo 6: 12,13, aparece nuevamente la solemne advertencia: “El hombre malo, el hombre depravado, es el que anda en perversidad de boca; que guiña los ojos, que habla con los pies, que hace señas con los dedos”. El apóstol Pablo toma ese refrán en 1 Corintios 15:33: “...las malas conversaciones [compañías] corrompen las buenas costumbres”. Después, en el transcurso de su vida, el rey David comienza el Salmo 1 exactamente con esas observaciones: “Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado” (Sal. 1:1). 3. Evitar los lazos de la sensualidad y la lujuria David comienza a advertir contra la sensualidad (vea los capítulos 5:3-23; 6:24-35; 7:1-5). Al guardar los mandamientos de un padre, podemos ser librados de las mujeres extrañas. Estas mujeres se encuentran en la casa del Señor, al igual que los hombres malos. El capítulo 5:14 dice: “Casi en todo mal he estado, en medio de la sociedad y de la congregación”. John Wesley dijo que nunca debemos subestimar el pecado dentro de la iglesia. El problema tanto de jóvenes como de adultos, no son las compañías fuera de la iglesia, sino las de dentro que ya no escuchan a los maestros y se desvían. Proverbios 2:12, 13 es una advertencia para las muchachas: “Para librarte del mal camino, de los hombres que hablan perversidades, que dejan los caminos derechos”. Si alguien ha dejado el camino derecho, es porque una vez estuvo allí. Los versículos 16 y 17 son para los muchachos en su trato con las muchachas: “Serás librado de la mujer extraña, 130 La vida de Salomón de la ajena que halaga con sus palabras, la cual abandona al compañero de su juventud, y se olvida del pacto de su Dios”. Solamente podemos olvidar aquello que una vez supimos. 4. La contienda y sus frutos David dice: “No tengas pleito sin razón” (Pr. 3:30). ¡Cuántas cosas se pierden por medio de pleitos innecesarios! Las palabras de Pablo a Timoteo son muy importantes en este sentido: “Porque el siervo del Señor no debe ser contencioso, sino amable para con todos, apto para enseñar, sufrido” (2 Ti. 2:24). Hebreos 12:14 dice: “Seguid la paz con todos”. Todas estas instrucciones producen un rey, si las obedecemos. 5. Los errores de la codicia (Proverbios 1:10-19, codiciosos de ganancias). En 1 Timoteo 6:10 Pablo dice: “Porque raíz de todos los males es el amor al dinero”. Hay un antídoto contra la codicia en Proverbios 3:9, 10: “Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia”. Esta es la promesa. El Señor Jesús dijo: “Dad y se os dará” (Lc. 6:38). La codicia es muy peligrosa. Hace algún tiempo, mi esposa y yo conversábamos con la esposa de un pastor, la cual hizo este comentario: “La codicia conduce a la lujuria e inmoralidad [o la genera]”. Continuó diciendo que el codicioso comienza por ir tras cosas: carros, casas, terrenos, dinero, etc., y luego mujeres. Luego explicó el peligro de la codicia, diciendo: “He notado una y otra vez, que la codicia genera inmoralidad”. Es necesario que combatamos la codicia de inmediato, porque puede conducirnos a toda clase de otros pecados. La vida de Salomón 131 La amonestación de David puede resumirse en estas palabras del capítulo 4:5: “Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; no te olvides ni te apartes de las razones de mi boca”. Los versículos 7 y 8 dicen: “Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría, y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia. Engrandécela, y ella te engrandecerá; ella te honrará, cuando tú la hayas abrazado”. Esas son unas pocas recomendaciones que tienen que ver con la formación de un rey. A través de sus primeros diecinueve años de vida, Salomón fue instruido esmeradamente por David y Betsabé. La mayor parte de sus enseñanzas, registradas en los primeros nueve capítulos de Proverbios, recomiendo que se estudien con empeño. “Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia”. Proverbios 3:9, 10 132 La vida de Salomón La vida de Salomón 133 Capítulo 8 LA ASCENSIÓN DE SALOMÓN AL TRONO I. LA ASCENSIÓN DE SALOMÓN A. ACONTECIMIENTOS CIRCUNDANTES 1. 2. 3. 4. Adonías se exalta a sí mismo Adonías nunca fue disciplinado Adonías es ayudado por compañeros Adonías se precipitó a. Sus derechos al trono b. Su autoproclamación como rey c. Ayudado por impíos 5. A sus seguidores les falta carácter a. No tienen discernimiento b. No tienen un corazón entregado B. SALOMÓN ES HECHO REY 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. Nombrado por David Ungido con aceite Autoridad Protección de ángeles Ungido en Gihón Adhesión Abundancia 134 La vida de Salomón 8. Aparición 9. Cielos abiertos 10. Súplica C. CONCLUSIÓN La vida de Salomón 135 A. ACONTECIMIENTOS CIRCUNDANTES He aquí un principio que necesitamos aprender para el día y época en que vivimos. Los personajes principales de este episodio de la vida de Salomón, son: Salomón Adonías David Betsabé Abisag Además de ser personajes históricos, también son símbolos. Hay una razón para que este suceso sea descrito con tanto esmero en la historia de Israel. He sentido una inmensa agitación en mi espíritu, para incluir este particular episodio, ya que un individuo puede estar preparado para el trono y no alcanzarlo. 1. Adonías se exalta a sí mismo. Nuestra referencia es 1 Reyes capítulo 1. En el versículo 3 está una de las cinco personas que tuvieron una participación preponderante—Abisag sunamita, la cual sirvió al rey David en sus últimos días. En el versículo 5 se nos presenta Adonías, el que se exaltó a sí mismo. ¿Por qué Adonías? Su hermano mayor, Amnón, había sido asesinado; Quileab murió; Absalón también había muerto. Por lo tanto, el trono le correspondía a Adonías por herencia, porque era el cuarto hijo varón. Entonces, Adonías se enalteció a sí mismo. Mateo 23:12 136 La vida de Salomón dice:. “El que se enaltece será humillado”. Adonías dijo: “Yo seré rey”. ¡Seré!. Eso nos recuerda los cinco “serés” de Isaías 14:13, l4 pronunciados por Lucifer en los cielos y que también fueron su ruina. He aquí la férrea voluntad de Adonías. “El que se enaltece será humillado” 2. Adonías nunca fue disciplinado. ¿Cuál era la actitud de David hacia Adonías? David era el padre de Adonías y de Salomón, aunque tenían diferente madre. 1 Reyes 1:6 dice acerca de Adonías: “Y su padre [David] nunca le había entristecido en todos sus días con decirle: ¿Por qué haces así?”. La idea aquí es que David nunca disciplinó a Adonías; éste nunca tuvo que soportar la reprensión de un padre, y no hubo absolutamente nada que frenara su vida. Es que Adonías no estaba destinado al trono como Salomón. Salomón sí tuvo que soportar el castigo de su padre. A él se le corregía constantemente, recordándole las enseñanzas y dichos de sus padres. Adonías, por el contrario, podía hacer lo que quisiese. Su padre nunca le entristeció ni lo reprendió. Nunca fue enseñado ni formado, porque nunca se ordenó que él fuera rey. 3. Adonías es ayudado por compañeros impíos. En el versículo 7 Adonías consultó con Joab. Joab anduvo con David, sin embargo había matado a hombres más honorables que él mismo. Existía pecado en la vida de Joab, pecado que no había sido combatido, ni rectificado. Luego estaba Abiatar, un sacerdote que también había seguido a La vida de Salomón 137 David. Abiatar procedía de la casa de Elí, conocido también por no disciplinar a sus hijos. 4. Adonías se precipitó. Las lecciones que quiero observar en Adonías para nuestros tiempos, son estas: a. A los ojos de los hombres, parecía tener el legítimo derecho al trono. b. Se enalteció; se autoproclamó rey. c. Fue ayudado por aquellos cuya vida no era totalmente recta. En este tiempo existe en la iglesia un vacío. Hay personas que se apresuran a entrar en este vacío antes del nuevo mover de Dios, porque una ola tiene que irse para que otra llegue. Cuando contemplamos las olas en la playa, hay casi una ausencia de agua antes de que la nueva ola haga su entrada. Hoy, en la Iglesia alrededor del mundo, hay un vacío porque una ola se va antes de que entre la nueva. Eso era exactamente lo que pasaba en los días de Adonías. La salud de David decaía rápidamente. En el trono de Israel no había un gobernante propiamente dicho, y Adonías se precipitó a entrar en ese vacío. Hoy, existen líderes autodesignados que se precipitan al vacío. Son seguidos por personas aparentemente sinceras—tal como los otros hijos del rey siguieron a Adonías. Hoy en día, existe en la iglesia alrededor del mundo un vacío porque una ola se va antes de que entre otra nueva. Hoy, existen líderes autodesignados que se precipitan al vacío. 138 La vida de Salomón Los seguidores de Adonías carecían de lo siguiente: a. No tenían discernimiento. No oyeron lo que Dios decía. Dios había dicho con claridad que Salomón sería el gobernante. b. No vivían enteramente para el Señor. Tenían pecados no confesados en algunas áreas de sus vidas, los cuales no habían rendido a Dios. c. Ellos se autodesignaron para el puesto. Adonías es una clase de líder que estamos viendo en muchos lugares en la Iglesia contemporánea. Líderes que se autodesignan para el puesto, y extravían a las personas con mensajes de fe extrema y otros errores. Ellos son los Adonías modernos, y sus seguidores son gente de motivos torcidos, en cuyas vidas hay áreas que Dios no ha tratado. 5. Adonías conquistaba a la gente. 1 Reyes 1:6 dice que también él era de “muy hermoso parecer”. Se parecía mucho a su hermano Absalón y procuraba ganarse a la gente. Joab y Abiatar intentaban hacer rey a Adonías para sacar provecho para sí mismos. Joab sabía que iba a perder su puesto de general del ejército de David. Abiatar se consideraba desplazado por otro sacerdote—Sadoc. Por consiguiente, querían hacer rey a Adonías para conservar sus posiciones. Pero Adonías nunca se acercó a Sadoc, el fiel sacerdote, ni a Natán el profeta. Nunca se acercó a los grandes de David. Ninguno de éstos fue convidado. La gente busca a los de su clase. Es por eso que necesitamos exclamar: “Oh, Dios, dame un corazón limpio”. La vida de Salomón 139 B. SALOMÓN ES HECHO REY Betsabé y el profeta Natán se presentaron delante de David, y le informaron sobre la autoproclamación de Adonías como rey. David, en cierto sentido, simboliza al Señor Jesucristo. Cuando el impostor se instaló, David declaró poco después quién era verdaderamente el escogido de Dios—Salomón. SALOMÓN: 1. Designado - por David, símbolo del Señor Jesucristo. 2. Ungido - con aceite del tabernáculo. La unción verdadera. 3. Autoridad - Cabalgó sobre la mula real. 4. Protección de ángeles - Le rodeaban los guardaespaldas del rey. Esto se aplica a los ángeles. ¿Por qué lo interpreto así? A veces Dios me abre los ojos para ver dentro del ámbito espiritual, y veo quiénes rodean a los impostores—los rodean los ángeles caídos, y éstos son los que realizan los milagros. Por lo tanto, Salomón estaba rodeado por la escolta del rey, los ángeles de Dios. 5. Ungido - en Gihón, el lugar del tabernáculo : la iglesia verdadera. Adonías fue ungido en Rogel que significa “colina del consejo malo”. 6. Adhesión - Salomón, al principio, anduvo en los estatutos de David. Él amaba al Señor. 7. Abundancia - En Gabaón ofreció mil holocaustos, símbolo de su reino, el reino milenial. Un reino ilimitadamente fructífero Baal Hamón, “El Señor de la cosecha”. 140 La vida de Salomón 8. Aparición - Entonces el Señor se apareció a Salomón en un sueño. Otros habían querido capturar el reino por medio de la unción falsa, pero cuando el legítimo rey fue ungido, Dios se le apareció y le dijo: “Pide lo que quieras que yo te dé”. Los Adonías del mensaje de la fe extrema, dicen: “Dile a Dios lo que quieres”. Sin embargo, a los auténticos, Dios les dice: “¿Qué quieres que haga por ti?” La diferencia es grande. Hace algún tiempo, el Señor trató conmigo acerca de los Adonías, y de cómo debemos estar prevenidos en cuanto a ellos. 9. Cielos abiertos - Comprendamos el día en que estamos viviendo. Vamos a entrar en la era espiritual de Salomón. Es de suma importancia conocer las lecciones de su vida, y el hecho de que recibió una formación y una disciplina tan esmeradas, que lo capacitaron para llegar a ver a Dios cara a cara. A este hombre Dios podía darle un cielo abierto. Eso es lo que Dios quiere dar a la Iglesia y a cada uno de nosotros en los últimos días. Jesús tuvo esa bellísima comunión con el Padre. Incluso en el camino a la crucifixión, dijo: “Si yo lo deseara, podría pedir a mi Padre que me enviara doce legiones de ángeles” (Mt. 26:53, paráfrasis). Lo que Jesús pedía, lo recibía. Dios quiere llevarnos a un nivel en que pueda confiarnos un cielo abierto así como se lo confió a Jesús, para que podamos pedir, y Él, dar. Pero sería para Su gloria y en Su voluntad. Los cielos están abiertos para todo hombre o mujer que pida en la voluntad de Dios. Dios quiere llevarnos a un nivel en el que pueda confiarnos un cielo abierto. La vida de Salomón 141 Dios ciertamente desea darnos más gloria. En Gales, en la década de 1850, se llevó a cabo una reunión de avivamiento en la que estaba un hermano cuyo rostro brillaba con la gloria de Dios. Alguien hizo un comentario acerca de la maravillosa reunión y de la gloria de Dios que se manifestaba. Este hermano contestó: “Y Dios quiere darnos más y más gloria, ¡si tan solo nos la pudiera confiar!” Salomón es la muestra del hombre a quien Dios se aparece, diciéndole: “Pide lo que quieras que te dé”. Dios desea llevar a la Iglesia a este nivel. Es a los Salomones a quienes Dios se aparece, no a los Adonías, porque éstos seguramente le pedirían mal. 10. Súplica - ¡Qué invitación! Cuando Salomón estuvo cara a cara con Dios, y Dios le dijo: “Pide lo que quieras que yo te dé”, aquel que había sido enseñado y disciplinado respondió: “Señor, dadme sabiduría”. ¿Cómo hubiera contestado una persona no adiestrada? Dios se le apareció al disciplinado, al que podía participar de esa relación. Dios sabía, como lo mencionó Jesús más tarde en el evangelio de Juan, que era cuestión de pedir según la voluntad de Dios. Para los hombres y mujeres que piden según la voluntad de Dios, los cielos están abiertos. Fue a un hombre adiestrado y disciplinado, a quien Dios se le apareció, diciendo: “Pide lo que quieras que te dé”. Salomón dijo: “Dadme sabiduría” porque quien es auténtico conoce los verdaderos valores. Él no desperdició esa oportunidad pidiendo riquezas; pidió lo más importante—la sabiduría. C. CONCLUSIÓN ¿Qué podemos aprender de la vida de Salomón? 1) Fue disciplinado; 2) Fue adiestrado; 3) Su orientación era hacia 142 La vida de Salomón Cristo y 4) Era un hombre de compromiso. Debemos confiar en que los “cielos abiertos” venideros, nos encontrarán aprobados, designados, ungidos y pidiendo según la voluntad de Dios, para Su gloria. Es en ese lugar que Dios desea que estemos. ¿Estaremos bajo los cielos abiertos? Lo estaremos, si nos hacemos como Salomón, permitiéndole al Padre disciplinarnos de tal manera que nos inculque verdaderos valores, y pidamos las cosas según la voluntad de Dios. En este día en que vivimos no habrá límite, ¡así como no lo hubo en el reinado de Salomón! La vida de Salomón Capítulo 9 LA CONSTRUCCIÓN DEL TEMPLO I. LA EDIFICACIÓN DEL TEMPLO A. INTRODUCCIÓN B. LA EDIFICACIÓN DEL TEMPLO 1. Construcción a. El modelo b. La ubicación c. El tiempo d. El propósito e. Las piedras f. Las dimensiones g. Un estímulo C. COMPOSICIÓN 1. Pureza 2. Perfección 3. Columnas 143 144 La vida de Salomón II. DEDICACIÓN DEL TEMPLO A. LIMPIEZA B. TÉRMINO C. CONSAGRACIÓN D. EL ARCA DEL PACTO 1. Llevada al reposo 2. Un nuevo pacto 3. Los cantores a. Vestidos de justicia b. Crucificados con Cristo c. Combinados como uno solo 4. La gloria y el fuego a. Llegando al templo b. Vista claramente en la Iglesia c. Acerca de los últimos días E. CONCLUSIÓN—MENSAJE Y VISIÓN 1. Sacrificio y adoración 2. Llenos de Su gloria 3. Símbolo de pureza La vida de Salomón 145 A. INTRODUCCIÓN En nuestros estudios, hemos visto que Salomón representa a la Iglesia de los últimos días. De la vida de Salomón se pueden derivar enseñanzas que influyen de manera significativa en nuestras vidas en estos tiempos. Consideraremos el edificio del templo en dos partes: I. La edificación del templo II. La dedicación del templo B. LA EDIFICACIÓN DEL TEMPLO 1. Construcción a. El modelo. El modelo del templo le fue dado por el Espíritu al rey David, así como todas las obras del modelo. La mano de Dios vino sobre David, quien por inspiración divina, escribió cada detalle y diseño del templo (1 Cr. 28:19). b. La ubicación. Dios escogió el monte Moriah en Jerusalén como el lugar para edificar el templo, (ver 2 Cr. 3:1). Fue allí que el Señor se le apareció a David en la era de Ornán jebuseo, cuando se detuvo la plaga enviada por Dios en juicio por el pecado de levantar un censo del pueblo, (ver 1 Cr. 21:1427; 2 S. 24). Hoy se recalca mucho el crecimiento de la Iglesia Hoy se recalca mucho el crecimiento de la Iglesia. Es casi una “manía de crecimiento” en la que los números parecen haberse vuelto un objeto de idolatría. Debemos poner mucho cuidado en no caer en el mismo lazo del rey David. 146 La vida de Salomón El monte Moriah no fue solo el lugar en que David vio al ángel que llegaba a matar a los habitantes de Jerusalén, sino que el profeta Gad habló con David en ese lugar, y le dijo que comprara esa tierra. Anteriormente, el monte Moriah había sido escenario de otro episodio heroico —la ofrenda que Abraham hizo de Isaac, quien es símbolo de Cristo. Así, pues, David compró la tierra por la totalidad del precio, y algunos años después, hizo preparativos para la construcción del templo, antes de morir. Lo que estamos analizando ahora, es el periodo de tiempo en que Salomón ascendió al trono y comenzó a edificar el templo en el cuarto año de su reinado. c. El tiempo. Los detalles relativos al inicio de la construcción del Templo de Salomón son muy importantes. 1 Reyes 6:1 nos dice que la construcción comenzó en el mes de Zif, que significa “esplendor”. También se habla de este mes como de “la apertura de la belleza”. Sería una obra esplendorosa y magnífica. Se inició durante el cuarto año del reinado de Salomón, indicando que el templo sería de bendición universal, para toda la humanidad. (El número cuatro significa universal). Estamos analizando ahora el periodo de tiempo en que Salomón ascendió al trono y empezó a edificar el templo en el cuarto año de su reinado. d. El propósito. “En el año cuatrocientos ochenta después que los hijos de Israel salieron de la tierra de Egipto...comenzó él a edificar la casa del Señor” (1 R. 6:1) ¿Por qué se nos proporciona el año con tanta exactitud? Cuarenta y ocho significa que en el templo se intensificaría la adoración. El número diez es el cumplimiento de la ley. De manera que sería una adoración según la ley, ejecutada por sacerdotes fieles (48 x 10 = 480). La vida de Salomón 147 2 Crónicas 2:5, 6 recalca esta idea del ministerio sacerdotal del templo: “Y la casa que voy a edificar será grande; porque nuestro Dios es grande, más que todos los dioses. ¿Pero quién será capaz de edificarle una casa cuando los cielos de los cielos no pueden contenerle? ¿Quién soy yo para edificarle una casa aunque sea solo para quemar incienso delante de Él?” Aquí tenemos uno de los propósitos de la edificación de la casa. Juan 4:23, 24: “Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que le adoren”. En el Templo de Salomón se ponía el énfasis en la adoración. De igual manera, en la Iglesia de los últimos días, el Padre está buscando personas que le adoren en espíritu y en verdad. Luego, en 1 Pedro 2:5, acerca de nuestras propias vidas, dice: “Vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo”. e. Las piedras. 1 Pedro 2:5 resalta la idea de que somos “piedras vivas”. Hablando de las piedras usadas para el templo, 1 Reyes 7:10 dice: “El cimiento era de piedras costosas, piedras grandes, piedras de diez codos y piedras de ocho codos”. El número diez se refiere al cumplimiento de la ley y el número ocho lleva la idea de vida nueva. 1 Reyes 6:7 dice: “Y cuando se edificó la casa, la fabricaron de piedras que traían ya acabadas”. Todo era preparado antes de ser traído al sitio. Hoy, hay muchas personas comprometidas en un proyecto de construcción de iglesia. 148 La vida de Salomón Dios quiere preparar a cada uno de nosotros antes de que se complete ese edificio. Él quiere darnos forma y cortar nuestros bordes de modo que cumplamos toda la Palabra de Dios. Además, la idea de vida nueva (el número ocho) indica que en nosotros debe nacer una unción fresca, así como la visión de lo que Dios se propone hacer con la casa que nos ha pedido construirle. Dios está haciendo una obra profunda en muchas vidas, preparándonos de antemano para que nos traslademos a ese nuevo edificio. f. Las dimensiones. 1 Reyes 6:2 dice: “La casa que el Rey Salomón edificó a Jehová tenía sesenta codos de largo y veinte de ancho, y treinta codos de alto”. El Tabernáculo de Moisés fue el primer santuario que Dios ordenó que el hombre le construyera. Hasta cierto punto, el primer tabernáculo (así como el Tabernáculo de David) refleja la Iglesia de los primeros días; y sus medidas eran exactamente la mitad de las del Templo de Salomón. He aquí una verdad muy bella. El Tabernáculo de Moisés medía treinta codos por diez codos, mientras que el Templo de Salomón medía sesenta codos por veinte codos; de manera que las medidas del Templo de Salomón duplicaban exactamente las del tabernáculo de Moisés. Esto se refiere a la “doble porción” del Espíritu Santo que será concedida a la iglesia en los últimos días. Habrá un cumplimiento de las palabras de Jesús en Juan 14:12 “De cierto, de cierto os digo: el que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre”. También se cumplirán las palabras del profeta Hageo: “La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera” (2:9). En la Iglesia de los últimos días habrá un mayor derramamiento del Espíritu Santo y una gloria mayor que la que experimentó la iglesia de los primeros días. La vida de Salomón 149 La altura del Templo de Salomón triplicaba exactamente la del Tabernáculo de Moisés, que era de diez codos. El Templo de Salomón tenía treinta codos de altura. El número treinta indica servicio; era la edad en que un levita podía iniciar las labores sacerdotales. También el arca de Noé tenía una altura de treinta codos (Gn. 6:15). El arca estaba dividida en tres secciones distintas— inferior, segunda y tercera. La interpretación que le damos es que en los últimos días habrá un ministerio en el Espíritu, que influirá tanto sobre la tierra como sobre el segundo y tercer cielo. g. Un estímulo. La Escritura en 1 Reyes 6:11, 12 apremia a los que están comprometidos en un proyecto de construcción: “Y vino palabra de Jehová a Salomón, diciendo: Con relación a esta casa que tú edificas...”. El Señor no solamente visitó a Salomón antes de empezar la obra del templo y después de que la hubo terminado, sino que le dio claramente una palabra de estímulo durante el proceso de construcción. El versículo 15 da la impresión de que Dios efectivamente hablaba mientras las paredes se levantaban. Dios desea dar palabras de estímulo a medida que las paredes comienzan a construirse. “No nos cansemos de hacer el bien, porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos”. ¿Segar qué? Las bendiciones asociadas con la vida y Templo de Salomón. El Señor desea cumplir en nosotros y hacer que ardan en nuestros corazones como una visión clara y refulgente, las bendiciones específicas del reino de Salomón, de modo que podamos animarnos con el gozo puesto delante de nosotros, y soportemos y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante ahora mismo. “No nos cansemos de hacer el bien, porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos” 150 La vida de Salomón C. COMPOSICIÓN 1. Pureza. El Templo de Salomón se caracterizaba por su gran extensión. El Lugar Santo medía cuarenta codos de largo (1 R.6:17). El número cuarenta indica “purificación por medio de pruebas de fuego”. Muchos de ustedes están pasando por candentes pruebas que les purificarán y equiparán para entrar en su nuevo edificio con la bendición de Dios. He aquí el concepto de purgar para producir santidad. Eso es lo que está ocurriendo en este momento, porque las piedras eran preparadas lejos, para que al ser llevadas a su sitio, encajaran a la perfección. Muchos de ustedes están pasando por pruebas de fuego que les purificarán y equiparán para entrar en su nuevo edificio con la bendición de Dios. 2. Perfección. El número veinte dominaba en el Lugar Santísimo, el cual estaba detrás del Lugar Santo, indicando “la madurez de la perfección” (1 R.6:20). Efesios 4:12 nos dice que el propósito del ministerio es perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del Cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto. El Templo de Salomón indica perfección. El Señor viene por una Iglesia sin mancha ni arruga. Por consiguiente, todas las medidas del Templo de Salomón señalan la perfección. ¿Quién es perfecto? Efesios 4:13 dice: “A la medida de la estatura de la plenitud de Cristo”. 3. Columnas. 1 Reyes 7:21 dice: “Estas columnas erigió en el pórtico del templo; y cuando hubo alzado la columna del lado derecho, le puso por nombre Jaquín, y alzando la columna La vida de Salomón 151 del lado izquierdo, llamó su nombre Boaz”. Jaquín significa “Él sostiene”, y Boaz “en Él hay fuerza”. La idea es que la obra está sostenida por el Dios Todopoderoso, “y debajo están los brazos eternos” (Dt. 33:27). El edificio no se construyó de tierra o de concreto, sino de Dios mismo. Hay una preciosa promesa en Isaías 40:31 relacionada con el nuevo mover de Dios que se avecina: “Los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas”. Se trata de intercambiar nuestra fuerza por la Suya, aunque seamos muy vigorosos. El versículo 30 la compara con la fuerza de los jóvenes: “Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen”. Sin embargo, los que esperan a Jehová intercambiarán la fuerza humana—que no podrá sostenerlos en los días venideros, por la fuerza misma de Dios. “Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen”, Sin embargo, los que esperan a Jehová intercambiarán la fuerza humana por la de Dios. Las cabezas de las columnas tenían lirios bellamente tallados. Esto da la idea de fuerza que se basa en pureza. Tenían también los capiteles de las dos columnas, 200 granadas. Las granadas indican los “frutos del Espíritu”, y 200 es “la recompensa del siervo fiel”. A mi criterio esas columnas significan la fidelidad de una incesante labor para el Señor. Su belleza era indescriptible. 4. Oro puro. El Templo de Salomón costó billones de dólares. Estaba cubierto de oro puro por dentro y por fuera. Esto simbolizaba las hijas de Sion—los adoradores de estos días. En el Salmo 45:13 tenemos una ilustración de estas hijas: 152 La vida de Salomón “Toda gloriosa es la hija del rey en su morada”. El templo tenía por dentro una capa de oro, indicando la “vida interior”. Luego dice: “de brocado de oro es su vestido”. La vida exterior es también enteramente gloriosa—el ministerio. Está lleno de la presencia y naturaleza de Dios. II. LA DEDICACIÓN DEL TEMPLO A. LIMPIEZA El templo fue terminado en el onceavo año del reinado de Salomón. El número once simboliza “limpieza”. Hubo doce tribus de Israel, pero Génesis 49:17 describe una de ellas, la de Dan, como “una víbora junto al sendero” (el anticristo, o el engañador). En el Nuevo Testamento, tras la eliminación de Judas, los apóstoles eran once en número. De nuevo percibimos aquí la idea de limpieza. B. TÉRMINO El templo se construyó en un periodo de siete años, lo cual simboliza término. Israel había ahora alcanzado un lugar estable y seguro en cuanto a la vida secular y espiritual, porque habitaba en la heredad que Dios había señalado. David peleó todas las guerras. Salomón fue el príncipe de paz. Él entró en posesión de la herencia obtenida por las victorias de David. C. CONSAGRACIÓN Los servicios de consagración comenzaron con el traslado del arca del pacto, de todos los utensilios sagrados del monte de Sion, y de los que estaban en el Tabernáculo de Moisés en La vida de Salomón 153 Gabaón, al glorioso Templo de Salomón. El holocausto ofrecido fue tan grande, que por su multitud no se podían contar ni numerar las ovejas y bueyes (1 R. 8:5). Aquéllos que están comprometidos en proyectos de construcción de iglesias, han hecho grandes sacrificios que por su gran número, no se pueden numerar. Múltiples sacrificios han sido necesarios. D. EL ARCA DEL PACTO 1. Llevada al reposo. El arca del pacto fue colocada con reverencia en el Lugar Santísimo del Templo de Salomón, debajo de las alas de los querubines. Entonces sacaron las varas que se usaban para transportar el arca. Antes, las varas permanecían siempre con el arca, para poder llevarla de un lugar a otro. Pero ahora, éstas fueron quitadas y podían verse en el Lugar Santo. Ya Israel no andaría más de viaje, había entrado en su reposo. 2. Un nuevo pacto. El arca contenía solamente las dos tablas de piedra que Moisés había colocado en su interior. Sobre ellas estaban escritos los diez mandamientos—el símbolo del pacto que el Señor había hecho con los hijos de Israel cuando los sacó de Egipto. También es un símbolo del nuevo pacto que Dios haría con Su pueblo. Nosotros tenemos las mismas dos tablas de piedra, la misma arca del pacto, solo que están colocadas en un templo diferente. ¿Cuál es el nuevo pacto? Son las leyes escritas en las “tablas de carne” de nuestros corazones (He. 8:10). Este es el pacto que Dios quiere hacer con cada uno de nosotros. Dios dice en Ezequiel 36:27: “Y haré que andéis en mis estatutos”. En estos últimos días, existirá un pueblo de Dios que habrá entrado en el nuevo pacto, y en 154 La vida de Salomón los corazones de ellos estarán escritas las leyes divinas. El Espíritu de Dios cubrirá a estas personas de tal manera, que Dios mismo las hará caminar por Sus veredas. ¡Dios tendrá un pueblo santo! 3. Los cantores a. Vestidos de Justicia. 2 Crónicas 5:12 menciona que los cantores estaban “vestidos de lino fino”, el cual simboliza la justicia de Dios (ver Ap. 19:8). Cierta vez visitamos una iglesia en la cual la congregación y los cantores comenzaron a alabar al Señor con las manos en alto. El Señor abrió los ojos de mi esposa al ámbito espiritual, y ella vio que solo unas pocas manos estaban blancas, todas las demás estaban sucias. Algunos de los cantores no estaban ataviados de lino fino. No estaban vestidos de justicia. b. Crucificados con Cristo. Había 120 cantores (vs. 12), símbolo de “el fin de toda carne” (Gn. 6:3). Los cantores no solo estaban vestidos de la justicia de Cristo, sino que con Él estaban juntamente crucificados. La carne estaba en la cruz. c. Eran como uno solo. “Cuando sonaban, pues, las trompetas, y cantaban todos a una...” (2 Cr. 5:13). Aquí tenemos la bella reflexión de los hermanos viviendo en unidad. El Salmo 133 habla de esta concordia y dice: “Porque allí envía Jehová bendición, y vida eterna”. Dios produce esa bella unidad, no solo en el espíritu, sino que hace que nuestro hablar tenga una sola voz. En el Templo de Salomón cantaban todos a una para que se escuchara un sonido único al alabar y al dar gracias a Dios. Además de estar unidos en corazón, espíritu y fe, ellos hablaban como uno solo. ¿Por qué? Porque estaban vestidos de la justicia del Señor y crucificados para la carne. La vida de Salomón 155 4. La gloria y el fuego a. Llegan al templo. Cuando los que estaban en el templo empezaron a alabar al Señor por Su bondad y misericordia, el templo se llenó de una nube y no podían los sacerdotes estar allí para ministrar, por causa de la gloria del Señor (2 Cr. 5:13,14). En los postreros días veremos la misma gloria. Sin embargo, debemos fijarnos con atención en las particularidades que condujeron a la manifestación de aquella gloria. En el capítulo 6 se encuentra la plegaria que hizo Salomón en la ceremonia de dedicación del templo. Y cuando Salomón acabó de orar, descendió fuego de los cielos, y consumió el holocausto y las víctimas (7:1). Cuando los hijos de Israel vieron esto, se postraron sobre sus rostros en el pavimento y adoraron, y alabaron a Jehová, diciendo: “Porque Él es bueno, y su misericordia es para siempre”. En el desierto, Israel fue guiado de día por la nube de gloria, y de noche por la columna de fuego. Estos símbolos se manifestaron de nuevo por medio de la presencia de Dios, cuando el Señor retornó a ellos en la dedicación del Templo de Salomón. b. Claramente vistos en la iglesia de los primeros días. En el día de Pentecostés, descendió otra vez el fuego y la gloria de Dios se manifestó. Al contemplar muchas pinturas de los santos de la iglesia primitiva, notamos la gloria de Dios en sus reuniones y el fuego divino sobre sus santos. c. Acerca de los postreros días. El Templo de Salomón es un cuadro de la Iglesia de los postreros días. Isaías 4:4,5 156 La vida de Salomón es una promesa acerca de la Iglesia del fin, porque nos dice que habrá manifestaciones de gloria y de fuego divinos, semejantes a las del Templo de Salomón. “Cuando el Señor lave las inmundicias de las hijas de Sion, y limpie la sangre de Jerusalén de en medio de ella, con espíritu de juicio y con espíritu de devastación”. En estos días Dios está hablando por doquier acerca de santidad a Jehová. El versículo 3 dice: “Y acontecerá que el que quedare en Sion, y el que fuere dejado en Jerusalén, será llamado santo”. Entonces, debido a esa purificación y limpieza, y porque la santidad de Dios será evidente en las personas, el versículo cinco dice: “Y creará Jehová sobre toda la morada del monte de Sion, y sobre los lugares de sus convocaciones, nube y oscuridad de día, y de noche resplandor de fuego que eche llamas; porque sobre toda gloria habrá un dosel”. E. CONCLUSIÓN ¿Qué mensaje y visión tiene el Templo de Salomón? 1. 2 Crónicas 2:6 dice: “Será construido para ofrecer y quemar holocaustos delante de Dios” (parafraseado). Uno de los grandes propósitos de la Iglesia que Dios nos ha guiado a construir, es ofrecer al Señor un continuo sacrificio de nuestras vidas y labios. El propósito es que la iglesia sea un lugar de adoración. 2. 2 Corintios 3:17, 18 dice: “Donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad”. Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen [la imagen de Jesús], como por el Espíritu del Señor”. ¿De qué manera La vida de Salomón 157 somos transformados a la semejanza de Jesús? ¡Contemplando la gloria de Dios! El Templo de Salomón estaba lleno de su gloria. Allí se encontraba la presencia manifiesta y el fuego de Dios. El fuego para limpiar, purificar y hacer aceptables las ofrendas. 3. 1 Reyes 8:60 dice: “A fin de que todos los pueblos de la tierra sepan que Jehová es Dios, y que no hay otro”. El Templo de Salomón simboliza pureza y santidad; allí tuvo lugar un gran derramamiento del Espíritu de Dios. Dios quiere que seamos partícipes de las bendiciones de Salomón. En el Templo de Salomón tuvo lugar un gran derramamiento del Espíritu de Dios. Es un cuadro de la Iglesia de los postreros días. 158 La vida de Salomón La vida de Salomón 159 Capítulo 10 EL APOGEO DEL REINADO Y DE LA GLORIA DE SALOMÓN I. EL APOGEO DEL REINADO Y DE LA GLORIA DE SALOMÓN A. INTRODUCCIÓN B. EL TEMPLO DE SALOMÓN 1. La parábola de las diez vírgenes a. Todas eran vírgenes b. Todas tenían lámparas c. Todas iban en la misma dirección d. Todas tenían entendimiento e. Juntas lo hacían todo 2. Ríos de agua 3. Ríos de sangre C. LA SABIDURÍA DE SALOMÓN 1. La petición de Salomón 2. La respuesta de Dios 3. Los requisitos para el discernimiento a. Reverencia a Dios b. Consejo confiable 160 La vida de Salomón c. Entrega Total d. Distinguir lo que es falso 4. El alimento espiritual correcto 5. Recibir sabiduría e instrucción 6. Vivir rectamente a. El ámbito de la creación b. Los resultados D. LAS BENDICIONES DE SALOMÓN 1. La revelación de la gloria de Dios 2. Riquezas y honra 3. El papel de un padre espiritual a. La fiesta de la Pascua b. La fiesta de Pentecostés c. La fiesta de los Tabernáculos d. Avanzando para alcanzar la paternidad e. La parábola de las diez vírgenes E. CONCLUSIÓN 1. Los ríos de vida 2. El candelero de la sabiduría 3. Provisión amplia. La vida de Salomón 161 A. INTRODUCCIÓN En esta serie hemos estado asociando la vida y época de Salomón con la vida y época de la iglesia de los últimos días. Fue un periodo de bendición y de reposo espiritual en que se manifestó la gloria de Dios (ver Is. 4:5, 6). Cuando Salomón construía las paredes del templo, el Señor lo animaba. También el Señor animará a los que estemos comprometidos hoy en un proyecto de construcción de iglesias, para que acabemos la obra encomendada por Él (Zac. 4:9). B. EL TEMPLO DE SALOMÓN Los que están preparados. En el Tabernáculo de Moisés (símbolo de la Iglesia de los primeros días), había un candelero con siete lámparas en su parte superior. Esto simboliza los siete espíritus de Jehová (Is. 11:2). En el Atrio del tabernáculo, entre su puerta y el altar de la ofrenda quemada, había una fuente de medidas no especificadas, usada para lavarse. Sin embargo, el Templo de Salomón tenía diez candeleros sencillos, representando las manifestaciones del Espíritu de Dios. Y había además diez fuentes que contenían agua para la limpieza, cinco estaban a la derecha y cinco a la izquierda de la casa. Cada fuente contenía cuarenta batos y su base medía cuarenta codos. Esto es símbolo de “una limpieza universal a través de la prueba”, que se menciona en 1 P. 1:22: “Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu”. Acerca de estos diez candeleros, el Espíritu Santo desea exponer una verdad en particular. No digo que sea la única interpretación, mas pienso que Dios quiere que los usemos 162 La vida de Salomón para ilustrar la parábola de las diez vírgenes. Dios quiere hacer hincapié sobre ciertos temas de instrucción y advertencia. Toda la enseñanza de Jesús es de suma importancia, pero la expresión más pura de ella, se dio en los últimos días de Su vida terrenal. Una de las parábolas que Jesús relató en esa época, fue la de “las diez vírgenes”, a solo dos o tres días de Su crucifixión. Por lo tanto, es de enorme importancia. La vida del Señor Jesucristo es un modelo para la Iglesia, por eso esta parábola se aplica particularmente a la Iglesia de los postreros días. 1. Parábola de las diez vírgenes. “Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al esposo” (Mt. 25:1). a. Todas eran vírgenes. En la palabra de Dios, una virgen representa a “los limpios y puros de espíritu”. En 2 Corintios 11:2, el apóstol Pablo, dirigiéndose a la iglesia de Corinto dice: “...para presentaros como una virgen pura a Cristo”. Una persona virgen es alguien que está limpia y purificada; es alguien que ha experimentado el “lavamiento de agua por la Palabra” (Ef. 5:26), y que a sí mismo se ha depurado obedeciendo la palabra de Dios. b. Cada una de las vírgenes tenía una lámpara. “Cinco de ellas eran prudentes y cinco insensatas. Las insensatas, tomando sus lámparas no tomaron consigo el aceite; mas las prudentes tomaron aceite en sus vasijas, juntamente con sus lámparas. Y tardándose el esposo, cabecearon todas y se durmieron” (ver Mt. 25:2-5). La vida de Salomón 163 c. Todas iban en la misma dirección. d. Todas entendían los tiempos y sabían que el esposo aparecería pronto. e. Juntas lo hacían todo - en este momento dormían. Pero, a la media noche se oyó un clamor: “¡Aquí viene el esposo; salid a recibirle! Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron, y arreglaron sus lámparas. Y las insensatas dijeron a las prudentes: dadnos de vuestro aceite; porque nuestras lámparas se apagan. Mas las prudentes respondieron diciendo: Para que no nos falte a nosotras y a vosotras, id más bien a los que venden, y comprad para vosotras mismas. Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta”. Y no participaron de aquello que habían estado esperando (Mt. 25:6-10). El apóstol Pablo dice que las cinco vírgenes prudentes estaban constantemente “llenándose del Espíritu de Dios”, (paráfrasis de Ef. 5:18). Eran semejantes a la sabia mujer de Proverbios 31:18 cuya “lámpara no se apaga de noche”, porque tiene suficiente provisión de aceite. Siendo así, no basta con ser purificados ni con ser entendidos en los tiempos actuales, ni con proseguir a la meta, sino que es sumamente indispensable que nos llenemos más y más del Espíritu Santo, y que nuestras lámparas estén ardiendo. 2. Los ríos de agua En el octavo mes del onceavo año se terminó la obra del templo (1 R. 6:38). El número once denota “limpieza de lo que es impuro” y el número ocho indica “vida nueva”. Por 164 La vida de Salomón eso, tenemos aquí un edificio limpio y preparado para avanzar a una experiencia nueva. La ceremonia inaugural no se llevó a cabo ese mismo año, sino en el séptimo mes del doceavo año (1 R. 8:2). El número doce denota gobierno y autoridad. La Iglesia de los postreros días desempeñará un papel importante con Dios y con el hombre. Luego, 1 Reyes 8:2 dice: “Y se reunieron con el rey Salomón todos los varones de Israel en el mes de Etanim, que es el mes séptimo, en el día de la fiesta solemne”. Etanim significa “arroyos que fluyen”, y en este mes estaba incluida la fiesta de los Tabernáculos. Podemos también relacionar esto con lo dicho por Jesús durante la fiesta de los Tabernáculos en Juan 7:37, 38: “En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva”, (ver Jn. 7:2). Entonces, por medio de esa promesa, entendemos que la consagración de este templo en la fiesta de los Tabernáculos, era también exponente de un gran derramamiento del Espíritu y de una liberación del Espíritu desde lo más íntimo del creyente. 3. Los ríos de sangre Hubo asimismo en el templo una multitud de holocaustos. No solo estuvo presente la sensación de “agua fluyente” (el Espíritu), sino que corrió la sangre. Literalmente corrieron ríos de sangre debido a los numerosos holocaustos. Esto indica que en los postreros días, en muchos países fluirán ríos de sangre de los mártires de la Iglesia final. A algunos se les llamará para ofrecer el supremo holocausto—poner la vida por la causa y el amor de Cristo. La vida de Salomón 165 C. LA SABIDURÍA DE SALOMÓN 1. La petición de Salomón. Habiendo ascendido al trono a los diecinueve años de edad, Salomón empezó las obras de edificación del templo en el cuarto año de su reinado. Esto le tomó siete años y medio, y luego dedicó trece años a edificar su propia casa y todos los demás edificios y lugares de almacenamiento. Al final de esta época, “Jehová se le apareció la segunda vez” (1 R. 9:2). Sin embargo, para entender el apogeo del poder y gloria de Salomón, debemos retroceder a la primera vez que Dios se le apareció, después de la ofrenda quemada de 1.000 víctimas en Gabaón (1 R. 3). En el versículo 5, Jehová le dijo a Salomón: “Pide lo que quieras que yo te dé”. Salomón respondió: “Tú hiciste gran misericordia a tu siervo David mi padre, porque él anduvo delante de ti en verdad, en justicia, y con rectitud de corazón para contigo; y tú le has reservado esta tu gran misericordia, en que le diste hijo que se sentase en su trono... Y yo soy joven, y no sé como entrar ni salir...Y tu pueblo al cual tú escogiste; un pueblo grande…no se puede numerar ni contar por su multitud” (vs. 6-8). Después, en el versículo 9 dice: “Da, pues, a tu siervo corazón entendido para juzgar a tu pueblo, y para discernir entre lo bueno y lo malo”. El clamor del corazón de Salomón era éste: “Dadme un corazón oidor, que oiga Tus palabras en toda ocasión en que tenga que distinguir entre el bien y el mal, de modo que sepa lo que es bueno y lo que es malo”. Dame un corazón oidor. . .He aquí lo he hecho conforme a tus palabras. 166 La vida de Salomón 2. La respuesta de Dios. El Señor respondió en 1 Reyes 3:12,14: “He aquí lo he hecho conforme a tus palabras; he aquí que te he dado corazón sabio y entendido, tanto que no ha habido antes de ti otro como tú, ni después de ti se levantará otro como tú. Y aun también te he dado las cosas que no pediste, riquezas y gloria... Y si anduvieres en mis caminos, guardando mis estatutos y mis mandamientos...yo alargaré tus días”. Salomón recibió lo que pidió—un corazón sabio y entendido. Esto pronto salió a la luz. En este mismo capítulo leemos sobre las dos rameras que comparecieron ante Salomón. Las dos tenían un hijo, y uno de ellos falleció. Una ramera acusaba a la otra de haberle quitado a su hijo vivo, y de haber puesto en su lugar al occiso. Por eso fueron llevadas a la presencia de Salomón, para que él determinara a quién pertenecía el niño vivo. Fue cuando Salomón ordenó que el niño fuese partido en dos, que la verdadera madre se descubrió. Ella estuvo dispuesta a sacrificar su derecho de maternidad, con tal de que el bebé viviera. Por lo tanto Salomón, viendo que ella era la madre genuina, le adjudicó el bebé. Luego leemos en 1 Reyes 3:28: “Y todo Israel oyó aquel juicio que había dado el rey; y temieron al rey, porque vieron que había en él sabiduría de Dios para juzgar”. 3. Requisitos para el discernimiento. Quizá la cualidad que más se necesita hoy, es ser capaces de determinar lo que es correcto y saber qué dirección tomar. Estamos viviendo en los postreros días, días que, en símbolo, son gobernados por el Templo de Salomón y sus bendiciones. La vida de Salomón 167 Una bendición clave que poseía Salomón, era su habilidad para discernir entre el bien y el mal. ¿Cuáles son los requisitos del discernimiento? a. Reverenciar a Dios. Malaquías 3:16 dice: “Entonces los que temían a Jehová.” El temor de Jehová es un requisito clave para tener discernimiento (ver Is. 11:3). b. Consejo fiable. “Hablaron cada uno [frecuentemente] a su compañero” (Mal. 3:16). Nosotros hemos notado que a menudo conversando se establece el criterio del Señor. Proverbios 11:14 dice: “...en la multitud de consejeros hay seguridad”. Al conversar con las personas apropiadas, se obtiene la mente del Señor y se recibe discernimiento. c. Compromiso firme. (Mal. 3:18) “Entonces os volveréis”. Es muy importante que nos volvamos al Señor de todo corazón. Hoy en día hay mucho deambular. Hay gente que le pertenece al Señor, deambulando muchas veces fuera de Sus sendas. Dios quiere que estemos totalmente comprometidos con Él. Entonces, la promesa de Dios es: “Y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve”. d. Reconociendo lo falso. Quizá ahora usted diga que discernir entre el justo y el malo debe ser fácil. Sin embargo, en Mateo 13 está la parábola del trigo y la cizaña. Esta es una de las siete parábolas del Señor que ayuda a entender la era de la Iglesia y las fiestas de Jehová. “Les refirió otra parábola diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue” (Mt. 13:24, 25). Tal incidente no es extraño en ciertos 168 La vida de Salomón países. Un buen hombre prepara con el arado su campo y siembra buena semilla. Su enemigo, que quiere perjudicarlo, ataca su más preciada pertenencia, el campo. En el debido momento, cuando se siembra el trigo, viene él y siembra la mala hierba, conocida mejor como cizaña, usada en el Medio Oriente. Es una planta que no se distingue del trigo. solo cuando está madura, se puede determinar si es trigo o cizaña. Versículos 26-30: “Y cuando salió la hierba y dio fruto, entonces apareció también la cizaña. Vinieron entonces los siervos del padre de familia y le dijeron: Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene cizaña? Él les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron: Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos? Él les dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con ella el trigo. Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero” (vs. 26-30). En Mateo 13 Jesús les relató cuatro parábolas a las multitudes, y luego, despedida la gente, entró en la casa con los discípulos (vs. 36). Entonces, acercándose, le dijeron: “Explícanos la parábola de la cizaña del campo”. No pidieron explicación de las otras parábolas; era ésta la que les interesaba. Y sucedió que a los discípulos, a los que estaban totalmente comprometidos con el Señor, les fue dada la interpretación. “El que siembra la buena semilla es el Hijo del hombre” [El Señor Jesucristo (vs. 37)]. “El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del La vida de Salomón 169 malo. El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del mundo; y los segadores son los ángeles” (vs. 38, 39). Para entender esta interpretación en su totalidad, vea de nuevo el versículo 25: “Pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo”. Cuando Dios hace algo en un lugar determinado del mundo, el diablo lo ve y siembra lo falso en el mismo lugar de lo verdadero. Cada vez que Dios opera en poder, gloria y sanidad, lo falso se manifiesta en forma idéntica. Aparentemente habrá poder y sanidad porque el diablo también puede sanar. Satanás está tratando de ‘trastornar’ el campo de Dios, y nada podemos hacer nosotros al respecto pues si extraemos la cizaña podríamos arrancar el trigo. A los neófitos, les es imposible determinar entre lo bueno y lo malo. Con relación a los últimos días Mateo 24:24 dice: “Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos”. Lo falsificado será tan parecido a lo verdadero, que solo un discípulo podrá reconocer la diferencia. Esta parábola no fue explicada a las multitudes porque ellos no eran capaces de ver la diferencia. Necesitamos clamar a Dios para que nos dé discernimiento. Porque aparecerán falsos Cristos y falsos profetas...Mis ovejas reconocen mi voz y a ningún otro seguirán... Satanás puede transformarse (disfrazarse) en ángel de luz (2 Co. 11:14). Cuando venga el anticristo no tendrá “cuernos” ni “tridente”; porque hasta un niño lo reconocería de ese modo. Por el contrario, vendrá como lo verdadero. El impostor anhela aceptación. Si usted tuviera un billete de diez dólares, 170 La vida de Salomón no le sería necesario persuadir a nadie de que es genuino, pero un falsificador sí intentaría convencernos de que el billete falso es auténtico. ¿Qué desea el falsificador? Ser aceptado por bancos, comerciantes, y gente común y buena. Eso es exactamente lo que Satanás quiere en estos últimos días. Quiere ser aceptado por el pueblo de Dios, y por eso se presentará como lo genuino. Tenemos que clamar: “Oh Dios, dadnos discernimiento”. 4. Comida espiritual correcta. “Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de la palabra de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido. Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño” (He. 5:12, 13). ¿Quién conoce la voz de Jesús? Jesús dijo: “Mis ovejas oyen mi voz y a otro no seguirán” [(Jn. 10), parafraseado]. Él no dijo “mis corderos” sino “mis ovejas”. Hebreos 5:14 dice: “Pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal”. Esto depende mayormente de la clase de alimento espiritual que ingiramos. La comida que el Señor Jesús ingería se describe en Isaías 7:15: “Comerá mantequilla y miel hasta que sepa desechar lo malo y escoger lo bueno”. La mantequilla simboliza la abundancia de la palabra de Dios, y aquí, la miel simboliza la vida del Espíritu. A medida que alimentemos aun a los bebés con “mantequilla” y “miel”, sabrán escoger lo bueno y desechar lo malo. La vida de Salomón 171 5. Recibiendo sabiduría e instrucción. En Proverbios 1:2, 3 está el propósito del libro de Proverbios: juicio y equidad”. Proverbios es uno de los libros clave para aprender sabiduría. La sabiduría no solo se adquiere a través del estudio, es también un don. Proverbios 1:23 da esta promesa: “Volveos a mi reprensión; he aquí yo derramaré mi Espíritu sobre vosotros, y os haré saber mis palabras”. Hay un espíritu de sabiduría, y nosotros debemos clamar a Dios que la sabiduría nos haga conocer Sus caminos. Santiago 1:5 dice: “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada”. Proverbios 2:1-4 dice: “Hijo mío, si recibieres mis palabras, y mis mandamientos guardares dentro de ti, haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; y si inclinares tu corazón a la prudencia; si clamares a la inteligencia... Si como a plata la buscares, y la escudriñares como a tesoros”. Recibe sabiduría el que tiene un corazón indagador. En el versículo 11 se da una promesa: “La discreción [el discernimiento] te guardará”. La necesidad de sabiduría es tan importante ya que si tomamos la senda equivocada, las consecuencias serán pavorosas. ¿Cómo distinguir el camino correcto? Mi esposa recibió una visión en la que vio a un pastor, conocido nuestro, viendo dos sendas. Ambas parecían iguales y su blancura resplandecía. Ella le preguntó al Señor cuál era el camino correcto. Él la orientó hacia el de la derecha, y su fulgor se volvió como el de la luz fluorescente, y titilaba. Finalmente, se oscureció y condujo a un bosque. El otro camino era muy puro y ascendente. Mi esposa dijo: ¿Cómo 172 La vida de Salomón sabrá él cuál es el correcto? El Señor contestó: “Si me lo pregunta, se lo mostraré”. Una de las claves es preguntarle al Señor cada vez que tenemos que tomar una decisión. Lo que mata al simple es su renuencia a preguntar y a escuchar (Pr. 1:32 LBLA). 6. Vida recta. Proverbios 9:10 dice: “...El conocimiento del Santísimo es la inteligencia”. El Salmo 36:9 dice: “En tu luz veremos la luz”. Cuando por la gracia de Dios andamos en la luz que hemos recibido, y obedientes a lo que Dios nos ha mostrado, en esa luz recibiremos todavía más luz. a. El ámbito de la creación. La sabiduría de Salomón se manifestó en otras áreas y esferas del discernimiento. 1 Reyes 4:33 dice: “También disertó sobre los árboles, los animales, las aves, los reptiles y los peces”. ¿Por qué? Romanos 1:19, 20 dice: “Porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó. Porque las cosas invisibles de Él, Su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa”. Toda cosa creada contiene una verdad divina que revela al Creador y Sus caminos. b. Los resultados. 1 Reyes 4:34 dice: “Y para oír la sabiduría de Salomón venían de todos los pueblos y de todos los reyes de la tierra, adonde había llegado la fama de su sabiduría”. Entre los visitantes más notables estuvo la reina de Sabá. 1 Reyes 10:1-3 dice: “...vino a probarle con preguntas difíciles...ella le expuso todo lo que en su corazón tenía...Salomón le contestó todas sus preguntas, y nada hubo La vida de Salomón 173 que el rey no le contestase”. Isaías 33:6 promete que: “Y reinarán en tus tiempos la sabiduría y la ciencia, y abundancia de salvación”. Los reyes y los gobernantes valoran la sabiduría. El rey Nabucodonosor acudió a los sabios de su reino para que le revelaran sus sueños (Dn. 2:2). También Faraón buscó quien le interpretara un sueño (Gn. 41:8). Tanto el uno como el otro eran mandatarios que tenían por costumbre consultar a agoreros, a magos y a los sabios de este mundo. Sin embargo, no pudieron obtener respuestas, porque estos sueños provenían de Dios. A Daniel y a José, ambos célebres por su sabiduría, les dio Dios las respuestas. En el presente, algunos gobiernos buscan la orientación de pitonisas, de brujos y de foros de pensamiento integrados por los eruditos de este mundo. Pero el día viene en que todos estos recursos fallarán, y los líderes se volverán a la Iglesia. La reina de Sabá se maravilló ante la sabiduría de Salomón y dijo: “Mis ojos han visto que ni aun se me dijo la mitad; es mayor tu sabiduría y bien, que la fama que yo había oído” (1 R.10:7). Ella dio al rey Salomón un obsequio de 120 talentos de oro (vs. 10), que indica “el fin de toda carne”. La sabiduría de Salomón no era la terrenal, animal y diabólica mencionada en Santiago 3:15, sino la sabiduría pura de Dios venida del cielo (ver Santiago 3:17). En estos últimos días, Dios dará esta sabiduría a la Iglesia. 174 La vida de Salomón D. BENDICIONES DE SALOMÓN 1. La revelación de la gloria de Dios. Uno de los aspectos del Templo de Salomón fue la gloria de Dios evidente el día de su dedicación. Una manifestación de la gloria llega por medio de la sabiduría. A medida que busquemos la sabiduría, se nos dará una corona o cobertura de gloria (Pr. 4:9). 2. Las riquezas y honra. El reino de Salomón se destacó por el cumplimiento de las promesas que Dios le había hecho. No solo le había prometido sabiduría y entendimiento sino también riquezas y honra. A mi parecer, en los últimos días los que participen de estas bendiciones de Salomón, habrá abundante riqueza para llevar a cabo toda la voluntad de Dios y para respaldar toda Su palabra. El reino de Salomón se destacó por el cumplimiento de las promesas del Señor. 3. El papel de un padre espiritual. 1 Reyes 9:25 dice: “Y ofrecía Salomón tres veces cada año holocaustos y sacrificios de paz sobre el altar que él edificó a Jehová, y quemaba incienso sobre el que estaba delante de Jehová, después que la casa fue terminada”. Esto cumplía las palabras de Deuteronomio 16:16, donde Dios dijo que tres veces al año aparecería todo varón delante de Jehová, mas no con las manos vacías. Tenían que presentarse en: a. LA FIESTA DE LA PASCUA—que simboliza la La vida de Salomón 175 salvación. En sentido espiritual, nosotros tenemos que presentarnos delante del Señor con las almas que hemos vuelto al Señor para salvación. b. LA FIESTA DE PENTECOSTÉS—que simboliza el bautismo del Espíritu Santo. También debemos comparecer ante el Señor con las almas que hemos conducido al bautismo del Espíritu Santo. c. LA FIESTA DE LOS TABERNÁCULOS—que simboliza perfección cristiana o rectitud, y las almas que hemos vuelto a las sendas de la madurez. 1 Juan 2:12-14 muestra otra manera de medir el crecimiento espiritual, en grupos de tres: • “Hijitos”—aquéllos cuyos pecados están perdonados • “Jóvenes”—los que han vencido al maligno. • “Padres”—los que conocen a Dios (Fil. 3:10). Los padres son los que conocen a Dios, y otro aspecto del reinado de Salomón es la paternidad. 1 Reyes 4:29 dice: “Y Dios dio a Salomón sabiduría y prudencia muy grandes, y anchura de corazón como la arena que está a la orilla del mar”. Esa anchura significa también generosidad, que es propia de la paternidad. Mateo 13:52 describe el corazón de un padre en sentido espiritual: “...Por eso, todo escriba [la interpretación del idioma original podría asociarse con amo, indicando padre] docto en el reino de los cielos es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas”. Un padre 176 La vida de Salomón espiritual es como una “tesorería” de sabiduría y conocimiento. También hay otro aspecto de la paternidad que puede verse en la vida de Abraham. La tierra prometida estaba delante de Abraham y de Lot, pero no había suficiente espacio para todos sus rebaños, y hubo contienda entre los pastores de ambos. Abraham adoptó una actitud muy generosa hacia Lot. Le permitió ser el primero en escoger su parte de la tierra. No había codicia en Abraham. Él estaba mucho más interesado en el bienestar del joven que en sí mismo. Esa es una característica de un padre espiritual. En Génesis 22:17 el Señor dio a Abraham una promesa: “Multiplicaré tu simiente como las estrellas del cielo”. Entendemos que se refiere a una simiente espiritual. Pero después, Dios añadió: “y como la arena que está a la orilla del mar”. De manera que tenemos aquí el concepto de anchura de corazón, como la misma arena de la playa. Espiritualmente, todo verdadero hijo o hija de Abraham es como un grano de arena. Un padre en Cristo tiene un corazón lo suficientemente grande como para contener cada grano. En el corazón, tiene un sitio especial para cada persona que Dios le ha confiado. d. Avanzando hacia la paternidad Habrá multitudes en el valle de la decisión. Dios ansía crear en cada uno de nosotros, ese corazón de padre o de madre, para que a medida que nazcan bebés cristianos en el reino de los cielos y se incorporen a la Iglesia, sean como granos de arena que tienen un lugar en nuestros corazones. Con amorosa ternura podemos cuidarlos, nutrirlos y fortalecerlos. Podemos sacar palabras que los alienten, del La vida de Salomón 177 abundante almacén de tesoros de la sabiduría y del conocimiento de los caminos de Dios. e. La Parábola de las Diez Vírgenes. Ellas eran puras, tenían la meta correcta y entendían los tiempos. Ellas estaban bien acompañadas. Sin embargo, cinco de ellas no tenían suficiente aceite. Es indispensable que nuestras “lámparas” estén llenas de aceite—que la unción esté sobre nuestras vidas. Todas las vírgenes eran puras. Eran creyentes que se habían lavado en la sangre. Todas estaban conscientes de la venida del Señor, de lo cual no se percatan los incrédulos. Esta parábola no es acerca de salvos o perdidos, sino de quiénes serán dignos de estar presentes en las bodas y de reinar con Cristo. E. CONCLUSIÓN Las bendiciones de Salomón son para nosotros si no desmayamos. Es importante tener una visión progresiva para ver más allá de donde nos encontramos, ver lo que Dios le ha deparado a su iglesia y a toda persona que prosiga hasta alcanzar las bendiciones de Salomón. 1. El Templo de Salomón estuvo gobernado por la fiesta de los Tabernáculos en el mes de Etanim (“arroyos que fluyen”). Dios quiere liberar ríos de vida desde lo más profundo de nuestro ser. La vida debe manar constantemente de nosotros, de modo que cuando hablemos, las palabras que pronunciemos ministren vida. Que al conversar, por estar ungidos por Dios, hasta los comentarios más insignificantes puedan ser dadores y transformadores de vida. 178 La vida de Salomón 2. La brillante luz del candelero de la sabiduría en medio de nosotros, simboliza discernimiento, y es una de las bendiciones que Dios nos da. Esta luz brillante es discernimiento, conocimiento, entendimiento y la solución de preguntas y decisiones difíciles. 3. Habrá provisión. Salomón no careció de nada. Hubo un abundante abastecimiento de bienes para llevar a cabo todas las obras. Cuando Dios nos pide realizar algo que requiere esfuerzo físico y dinero, Él puede proveer, dentro de esas bendiciones de Salomón, la riqueza para que haya un vasto suministro. La tragedia es que una gran cantidad de creyentes no camina cerca del Señor, ni mantiene una vida ungida. En la venida de Cristo, muchos creyentes no tendrán suficiente aceite para estar en las bodas. Clame a Dios para que éste no sea su caso. La vida de Salomón 179 Capítulo 11 LOS ÚLTIMOS Y DECADENTES AÑOS DE SALOMÓN I. LOS ÚLTIMOS Y DECADENTES AÑOS DE SALOMÓN A. INTRODUCCIÓN B. LAS BENDICIONES CONDICIONADAS DE SALOMÓN 1. Longevidad 2. Derechos eternos al trono C. LA CORRUPCIÓN DE SALOMÓN 1. Estadísticas de su reino a.Símbolo de Cristo b. Símbolo de Lucifer 2. Satisfizo sus propios deseos 3. Obstinado 4. Egocéntrico 5. Voluntarioso a.Con relación a los caballos b. Con relación a las esposas c.Con relación al dinero 180 La vida de Salomón D. CONCLUSIONES DE SALOMÓN 1. Las bendiciones 2. Las advertencias E. CONCLUSIÓN La vida de Salomón 181 A. INTRODUCCIÓN Este periodo de la vida de Salomón comienza en el vigésimo año de su proyecto de construcción, en el vigésimo cuarto año de su reinado. Salomón tenía aproximadamente cuarenta y tres años de edad y se encontraba en el pináculo de su gloria. El reino estaba establecido en sus manos, su fama era internacional y por su sabiduría y por la gloria de su reino, multitudes acudían en masa a Jerusalén. Como ya mencionamos, la reina de Sabá fue una de las personas que vinieron a escuchar su sabiduría y a ver su gloria. En 2 Crónicas 9, algunas de sus observaciones están registradas. Versículos 3 y 4: “Y viendo la reina de Sabá la sabiduría de Salomón, y la casa que había edificado, y las viandas de su mesa, las habitaciones de sus oficiales, el estado de sus criados y los vestidos de ellos, sus maestresalas y sus vestidos, y la escalinata por donde subía a la casa de Jehová, se quedó asombrada”. Versículos 5-6: “Y dijo al rey: Verdad es lo que había oído en mi tierra acerca de tus cosas y de tu sabiduría; pero yo no creía las palabras de ellos, hasta que he venido, y mis ojos han visto; y he aquí que ni aún la mitad de la grandeza de tu sabiduría me había sido dicha; porque tu superas la fama que yo había oído”. Yo pienso que esas mismas palabras estarán en los labios de cada santo que vea las glorias del cielo y del Señor Jesucristo. Esta será también la exclamación de muchos de nosotros cuando veamos la gloria de Dios sobre Su Iglesia en estos últimos días Entonces la reina de Sabá dijo: “Bienaventurados tus hombres, y dichosos estos siervos tuyos que están siempre delante de ti, y oyen tu sabiduría” (vs. 7). 182 La vida de Salomón B. LAS BENDICIONES CONDICIONADAS DE SALOMÓN ¿Qué hicieron Salomón e Israel con todas las bendiciones que Dios les deparó? Para responder esta pregunta necesitamos contemplar las promesas que el Señor le hizo al rey Salomón en dos diferentes ocasiones. Por lo general, las promesas de Dios son condicionadas. 1. Longevidad. En 1 Reyes 3 aparece Dios por primera vez a Salomón y le otorga sabiduría, entendimiento, riquezas y honra. Luego le dijo: “Y si anduvieres en mis caminos, guardando mis estatutos y mis mandamientos, como anduvo David tu padre, yo alargaré tus días” (vs. 14). Pero Salomón no guardó los mandamientos de Dios, por eso Dios redujo de setenta a sesenta los años de vida de Salomón. 2. Derechos eternos al trono. Cuando Salomón hubo terminado todas sus edificaciones, el Señor se le apareció por segunda vez. En 1 Reyes 9:4 el Señor dijo: “Y si tú anduvieres delante de mí como anduvo David tu padre, en integridad de corazón y en equidad, haciendo todas las cosas que yo te he mandado, y guardando mis estatutos y mis decretos…”. Luego, en el versículo 5, Dios da una promesa que tiene esas mismas condiciones: — “Yo afirmaré el trono de tu reino sobre Israel para siempre, como hablé a David tu padre”. Esta promesa nos atañe también a nosotros en lo que tiene que ver con el milenio y con toda la eternidad. Eso es lo que Dios le deparaba a Salomón. El reino de Salomón comenzó La vida de Salomón 183 con la ofrenda de mil holocaustos (1 R. 3:4). El número 1000 simboliza o domina su reinado (ver Cantar de los Cantares 8:12). También simboliza el reino milenial de Cristo en la tierra. Por lo tanto, el reinado y las bendiciones de Salomón fueron símbolo de las bendiciones que llevarán a la Iglesia al milenio. La misma idea se expresa en el Salmo 72:17, donde se habla de un nombre y un reino perpetuos. Dios tiene muchas promesas preciosas para nosotros en lo que se refiere a la eternidad. El Salmo 110:4 dice: “Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec”. En Apocalipsis 20:4 está la promesa explícita de que los que califiquen y sean benditos y santos, gobernarán y reinarán con Jesucristo durante mil años. Esas promesas no se cumplieron en Salomón por su desobediencia. Cuando su hijo Roboam ascendió al trono, reinó solamente sobre una porción de Israel, tres tribus— Judá, Benjamín y Leví. C. LA CORRUPCIÓN DE SALOMÓN ¿Cuáles fueron los pecados que privaron a Salomón de las promesas? ¿Cuál fue el estilo de vida que hizo que alguien tan bendecido fuese destituido del plan y designio de Dios para su vida? Nadie fue tan sabio como Salomón, sin embargo, esta misma sabiduría se convirtió en la base de su corrupción. 1. Estadísticas de su reinado: a. Símbolo de Cristo. Salomón debió haber sido el símbolo perfecto del reinado de Cristo en el milenio; época en que la creación será restaurada a su estado original, y en que se 184 La vida de Salomón honrará la ley. La Palabra del Señor fluirá desde Jerusalén, y todas las naciones vendrán a adorar al Señor en ese lugar, como lo hacían en los tiempos de Salomón. Otro número que gobernó el reinado de Salomón fue el 120, que simboliza el fin de toda carne (Gn. 6:3). Ese número es usado en 2 Crónicas 5:12 en donde la ofrenda de los cantores se hacía en justicia; y en 2 Crónicas 9:9, representa sabiduría divina pues la ofrenda era de oro. Esta es otra característica del milenio. Hebreos 8:11 dice con relación a los últimos días: “Y ninguno enseñará a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: “Conoce al Señor; porque todos me conocerán, desde el menor hasta el mayor de ellos”. Pero en 1 Reyes 10:14 se encuentra otro número de las estadísticas del reinado de Salomón, que indica el peso del oro que Salomón recibía como renta anual, que era de 666 talentos de oro (ver también 2 Cr. 9:13). La interpretación de este impresionante número nos la da Apocalipsis 13:18: “Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su numero es 666”. Esto es indicativo de la marca y nombre de la bestia, o del número de su nombre. Es el número de Satanás; el número del Hombre de Pecado—el anticristo. Salomón usó su sabiduría para exaltarse adquiriendo riquezas mediante el comercio, como lo hiciera Lucifer a través del rey de Tiro, y como también lo hará a través del anticristo venidero. b. Símbolo de Lucifer. Salomón, siendo el símbolo de Cristo, también se convierte en el símbolo de Lucifer, el querubín protector que cayó y se convirtió en Satanás, el cual La vida de Salomón 185 hará morada en el anticristo venidero. ¿Cuál fue la razón de la caída de Lucifer y de Salomón? Ezequiel 28 habla del rey de Tiro, el cual es un símbolo de Lucifer. El versículo 12 dice: “Tú eras el sello de la perfección, lleno de sabiduría, y acabado de hermosura”. Esa era una descripción de Lucifer. Versículos 13-15: “...de toda piedra preciosa era tu vestidura; de cornerina, topacio, jaspe, crisólito, berilio y ónice; de zafiro, carbunclo, esmeralda y oro; los primores de tus tamboriles y flautas estuvieron preparados para ti en el día de tu creación. Tú, querubín grande, protector, yo te puse en el santo monte de Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te paseabas. Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad”. Luego, el versículo 16 demuestra por qué cayó Lucifer, y también la causa de la caída de Salomón. Esta es una aterradora advertencia para cada uno de nosotros: “A causa de la multitud de tus contrataciones”. 2. Satisfizo sus propios deseos. 1 Reyes 10:22 dice con relación al gobierno de Salomón: “Porque el rey tenía en el mar una flota de naves de Tarsis”. El propósito de esa flota era transportar hacia Jerusalén: oro, plata, marfil, monos y pavos reales. Tenía el objetivo de enriquecer el reino. Salomón usó su sabiduría para comerciar, y el rey y todo Israel se enriquecían. Este es un peligro y nos lo demuestra la propia geografía de Israel. Hay dos mares en Israel. Primero, el mar de Galilea, en el cual desemboca y vuelve a salir el río Jordán. Este mar rebosa de vida y de bendición y está lleno de peces. En segundo lugar está el mar Muerto, en el cual también desemboca el río Jordán pero sin volver a salir. Por lo tanto, no hay vida en el mar Muerto. El 186 La vida de Salomón rey Salomón estaba usando su sabiduría en el área de las mercaderías y del comercio. Todo estaba “desembocando” en Jerusalén e Israel, pero no “salía”. ¡Observe el cargamento! Oro, plata, marfil, monos—que simbolizan sensualidad, y pavos reales—que simbolizan orgullo. 3. Obstinado. Isaías 14:12 denomina a Lucifer “hijo de la mañana”. En los versículos 13 y 14 se ve lo que entró en su corazón: “Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante alAltísimo”. Estas eran las cinco intenciones de Lucifer. 4. Egocéntrico. Ezequiel 28:17 dice: “Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura”. Lucifer se contempló. Quedó abrumado por la belleza que Dios le había dado. “Corrompiste tu sabiduría a causa de tu esplendor”. Eso es exactamente lo que hizo el rey Salomón; se embelleció a sí mismo. Usó su sabiduría para aumentar la riqueza y el esplendor de su reino. Sobrepasó los límites que Dios había determinado. Salomón fue exaltado por Dios para edificarle un santuario, pero él continuó construyendo para sí mismo. Corrompió su sabiduría con la riqueza que acumuló. 5. Voluntarioso. Salomón desobedeció abiertamente las leyes para los reyes. En Deuteronomio 17:16, Dios dio a través del legislador Moisés, las leyes pertinentes a los reyes. La vida de Salomón 187 a. Con relación a los caballos. “Él no aumentará para sí caballos...”. Salomón había juntado carros y gente de a caballo. Había traído caballos de Egipto (1 R.10:26, 28), los cuales llenaban el reino de Israel. Dios no prohibía a los reyes tener caballos, sino multiplicarlos. No hay error alguno en suplir nuestras necesidades básicas, pero la multiplicación de esos bienes produce idolatría. David, su padre, no confió ni en carros ni en caballos (Sal. 20:7). b. Con relación a las esposas (Dt.17:17). “Ni tomará para sí muchas mujeres para que su corazón no se desvíe”. Proverbios 18:22 dice: “El que halla esposa halla el bien”. Dios dijo, en Génesis 2:18: “No es bueno que el hombre esté solo”. Es bueno tener una esposa. Pero Dios dice: “¡No multipliques las esposas!”—que es lo que Salomón hizo. 1 Reyes 11:1 dice: “Pero el rey Salomón amó, además de la hija de Faraón, a muchas mujeres extranjeras; a las de Moab, a las de Amón, a las de Edom, a las de Sidón, y a las heteas”. El versículo 3 dice: “Y tuvo setecientas mujeres reinas y trescientas concubinas; y sus mujeres desviaron su corazón”. Hay hombres en África que tienen más de trescientas esposas, lo cual es común. Un príncipe que conocimos era considerado sumamente pobre porque solo tenía trescientas esposas. A nosotros pueden parecernos muy improbables estos pecados de Salomón, pero el Señor Jesús dijo que se puede cometer adulterio en el corazón (ver Mt. 5:28). En el Nuevo Testamento, pueden ser en verdad muy probables. 2 Pedro 2:14 dice: “Tienen los ojos llenos de adulterio, no se sacian de pecar”. Por esta conducta podemos ser descalificados y no recibir las promesas y bendiciones de Salomón. 188 La vida de Salomón c. Con relación al dinero. Deuteronomio 17:17 advierte: “...ni plata ni oro amontonará para sí en abundancia”. Ya vimos que eso fue exactamente lo que hizo Salomón. No hay error alguno en el dinero. Pero el amor al dinero es la raíz de todos los males. Dios no le prohibió a los reyes el oro o la plata. Lo que sí les prohibió es que los multiplicaran y amontonaran. Lo que a Dios le preocupa es que no multipliquemos nuestros haberes. Es la multiplicación y la adoración de esos bienes lo que puede destruirnos, como sucedió con el rey Salomón y con Lucifer. D. CONCLUSIONES DE SALOMÓN Salomón escribió la biografía de su vida. La autobiografía del hombre más rico que jamás ha existido, se encuentra en la Palabra de Dios—en el Libro de Eclesiastés. ¡El rey Salomón era un predicador y de verdad sabía predicar! Pero resumió su vida en una frase muy recurrente en Eclesiastés: “Vanidad de vanidades, todo es vanidad”. El capítulo 1:4 comienza: “Generación va y generación viene, mas la tierra permanece”. He visto a través de los años a muchos predicadores alcanzar considerables alturas, para luego desvanecerse. Hemos visto obras “enaltecidas” que luego pasan. Pero hay una obra perdurable y resistente que el Señor está realizando en muchos lugares. Dios, a través de la vida de Salomón, está ilustrando dos verdades principales. 1. Todas las bendiciones de su reinado. La gloria y sabiduría salomónicas que Dios nos está ofreciendo a todos. ¡Dios quiere llevarnos a poseer la gloria y las bendiciones del reinado de Salomón ahora! La vida de Salomón 189 2. Las advertencias. Debemos proseguir hasta alcanzar todo lo que Dios nos ha deparado, y no volvernos como Salomón, el cual dejó de obedecer todos los estatutos de su padre David. Salomón fue sabio, pero no tuvo un corazón sincero y se ocupó en una diversidad de asuntos. Él da testimonio de ello en Eclesiastés 2:3: “...y que anduviese mi corazón en sabiduría, con retención de la necedad...”. Más tarde enumera todas esas necedades, mencionando la plata y el oro. Sin embargo, en el capítulo 5:10, afirma: “El que ama el dinero, no se saciará de dinero; y el que ama el mucho tener, no sacará fruto. También esto es vanidad”. Precisamente las cosas a que Salomón entregó su corazón, (el acumular posesiones mundanas), no le produjeron ninguna satisfacción, tal como lo declaró al final de su vida. Luego menciona a las mujeres. Un pecado general hoy en día es la multiplicidad de matrimonios, divorcio y nuevo matrimonio; o bien, estar casado y desear a otra persona. En estos términos, dice Salomón para concluir en Eclesiastés 7:26: “Y he hallado más amarga que la muerte a la mujer cuyo corazón es lazos y redes, y sus manos ligaduras. El que agrada a Dios escapará de ella; mas el pecador quedará en ella preso”. Si dirigimos hacia Dios nuestro corazón, Él nos librará de los lazos del adulterio y de la lujuria. E. CONCLUSIÓN ¿Cómo resume su propia vida el rey Salomón? Eclesiastés 4:13 dice: “Mejor es el muchacho pobre y sabio, que el rey viejo y necio que no admite consejos”. En ese estado murió 190 La vida de Salomón el rey Salomón. Dios se le había aparecido dos veces. Le había hablado quizá tres veces y le había hecho solemnes advertencias para que obedeciera sus estatutos; para que obedeciera las leyes de Dios, y las leyes pertinentes a los reyes. Pero a pesar de ser amonestado por Dios mismo e indudablemente por los profetas de su época, Salomón no quiso recibir más consejo. ¿Por qué? Porque su voluntad ya estaba definida. ¿Cómo resume Dios la vida y reinado de Salomón? — “Su corazón no era perfecto con Jehová su Dios, como el corazón de su padre David” (1 R. 11:4b). No negó a sus ojos ninguna cosa que desearan. ¡La voluntad propia fue un factor dominante en su vida! (Ec. 2:10). Lo que Salomón quería, lo hacía. Pero, vale más tener un corazón como el descrito en Proverbios 21:1. Ése sí es un rey, ese sí calificará para entrar. “Como los repartimientos de las aguas, así está el corazón del rey en la mano de Jehová; a todo lo que quiere lo inclina”. Ese es el corazón que nosotros debemos tener; no el de Salomón que era tan terco, duro y empecinado, que desestimó todo lo que estaba en la ley de Dios. Nosotros necesitamos un corazón tierno y semejante al agua, que Dios pueda “inclinarlo a todo lo que Él quiera”. ¿Cuál es la conclusión de todo esto? Nos la da Salomón en Eclesiastés 12:13: “El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre”. Tener ese reverente temor de Dios— manejar con prudencia cada detalle de nuestras vidas y hacer lo que agrada a Dios, debe ser nuestro objetivo central. Seamos incondicionales al desempeñar el trabajo que Dios nos ha encomendado. La vida de Salomón 191 Capítulo 12 COMPARACIÓN ENTRE DAVID Y SALOMÓN I. COMPARACIÓN ENTRE DAVID Y SALOMÓN A. INTRODUCCIÓN B. VIDA DE DAVID—LOS FUNDAMENTOS 1. Con relación al Templo a. Concepción b. Patrón c. Ubicación d. Dedicación 2. Con relación a las promesas a. Trono establecido b. Longevidad 3. Con relación al juicio a. Una vara de medir b. Un juicio benigno 4. Con relación a la Iglesia a. Tomar posesión de sus bendiciones b. Permanecer en las bendiciones 192 La vida de Salomón C. LA VIDA DE DAVID—EL PRINCIPIO 1. Un corazón definido 2. Un corazón entregado 3. Un corazón contrito D. EXPLICACIÓN DEL SALMO 51 1. Sal. 51:1 - La misericordia 2. Sal. 51:1 - Pecados son borrados 3. Sal. 51:2 - El lavamiento 4. Sal. 51:3 - La confesión 5. Sal. 51:4 - La justificación 6. Sal. 51:5 - El reconocimiento del pecado 7. Sal. 51:6 - La transformación 8. Sal. 51:8 – La restitución del gozo 9. Sal. 51:10 – La limpieza 10. Sal. 51:13 - El restablecimiento a. De David b. De Israel E. UN CORAZÓN CON UNA VISIÓN F. CONCLUSIÓN La vida de Salomón 193 A. INTRODUCCIÓN Esta serie ha demostrado que la Iglesia está pasando espiritualmente, de la época davídica a la salomónica. Salomón, un reinado de sabiduría y gloria, representa la Iglesia de los postreros días. Su vida puede ser comparada con el templo que él construyó, en cuanto a fastuosidad, esplendor y gloria. El reinado de David se asemeja a los fundamentos pues las bendiciones de Salomón fueron el resultado de la vida de David. Por lo tanto, la vida de David es la clave para poseer y conservar las bendiciones de Salomón. B. LA VIDA DE DAVID—LOS FUNDAMENTOS 1. Con relación al templo. a. La concepción. El templo en sí fue concebido por David. Esto lo reconoció Salomón en repetidas ocasiones. En 1 Reyes 8:17 dijo: “Y David mi padre tuvo en su corazón edificar casa al nombre de Jehová Dios de Israel”. b. El patrón. El patrón fue dado por Dios a David, y éste lo dio a Salomón. 1 Crónicas 28:6 testifica: “Y me ha dicho: Salomón tu hijo, él edificará mi casa y mis atrios; porque a éste he escogido por hijo, y yo le seré a él por padre”. “Y David dio a Salomón su hijo el plano del pórtico del templo y sus casas, sus tesorerías, sus aposentos, sus cámaras y la casa del propiciatorio. Asimismo, el plano de todas las cosas que [David] tenía en mente para los atrios de la casa de Jehová, para todas las cámaras alrededor, para las tesorerías de la casa de Dios, y para las tesorerías de las cosas santificadas” (1 Cr. 28:11, 12). 194 La vida de Salomón c. La ubicación. David escogió la ubicación del templo. 2 Crónicas 3:1 dice: “Comenzó Salomón a edificar la casa de Jehová en Jerusalén, en el monte Moriah, que había sido mostrado a David su padre, en el lugar que David había preparado en la era de Ornan jebuseo”. d. Dedicación. 1 Reyes 8:66 dice: “Y al octavo día [Salomón] despidió al pueblo; y ellos, bendiciendo al rey, se fueron a sus moradas alegres y gozosos de corazón, por todos los beneficios que Jehová había hecho a David su siervo y a su pueblo Israel”. En la ceremonia de dedicación del templo, la gente le agradeció a Dios Su generosidad para con David. 2. Con relación a las promesas. a. Trono establecido. Salomón ocupó el trono gracias a las promesas de Dios a David. En la oración que elevó durante la ceremonia de dedicación del templo, Salomón dijo: “que has cumplido a tu siervo David mi padre lo que le prometiste; lo dijiste con tu boca, y con tu mano lo has cumplido, como sucede en este día” (1 R. 8:24). De esta manera, Salomón reconoció que era el heredero como consecuencia de las promesas hechas a David. b. Longevidad. Las promesas relacionadas con Salomón dependían de que él fuese obediente como David su padre. Cuando Dios se apareció a Salomón por primera vez, le dijo: “Y si anduvieres en mis caminos, guardando mis estatutos y mis mandamientos, como anduvo David tu padre, yo alargaré tus días” (1 R. 3:14). En una segunda ocasión, Dios de nuevo le mencionó a David: “Y si tú anduvieres delante de mí como anduvo David tu padre, en integridad de corazón y en equidad, haciendo todas las cosas que yo te he mandado, y La vida de Salomón 195 guardando mis estatutos y mis decretos, yo afirmaré el trono de tu reino sobre Israel para siempre, como hablé a David tu padre” (1 R. 9:4, 5). 3. Con relación al juicio. a. Una caña de medir. La vida de David fue usada por Dios como medida para evaluar el testimonio de la vida de Salomón. 1 Reyes 11:6 dice: “E hizo Salomón lo malo ante los ojos de Jehová, y no siguió cumplidamente a Jehová como David su padre”. La vida de casi todos los reyes de Judá que sucedieron a Salomón, fue medida según la vida de David; hayan andado cumplidamente como David o no. b. Un juicio más benigno. Gracias a la vida de David, el juicio de Dios sobre Salomón se redujo. 1 Reyes Salomón. 11:9-12 dice: “Y se enojó Jehová contra Salomón, por cuanto su corazón se había apartado de Jehová Dios de Israel, que se le había aparecido dos veces, y le había mandado acerca de esto, que no siguiese a dioses ajenos; mas él no guardó lo que le mandó Jehová. Y dijo Jehová a Salomón: Por cuanto ha habido esto en ti, y no has guardado mi pacto y mis estatutos que yo te mandé, romperé de ti el reino, y lo entregaré a tu siervo. Sin embargo, no lo haré en tus días, por amor a David tu padre”. De modo que la vida entera de Salomón estuvo basada en la de David. 4. Con relación a la Iglesia. Dios pone la vida de David como Su norma: a. Que nos capacita para poseer las bendiciones del reinado de Salomón. 196 La vida de Salomón b. Que nos hace residir, establecernos, o permanecer en la sabiduría y gloria de esas promesas. Este es un periodo muy trascendental para la Iglesia, porque estamos siendo preparados y calificados para ingresar en las glorias del reino de Salomón. Ahora es cuando tenemos que estar seguros, por la gracia de Dios, de que los principios de la vida de David se han forjado en nuestras vidas, ya que las bendiciones de Salomón y su vida entera, se basaron en la vida de David. C. LA VIDA DE DAVID—LOS PRINCIPIOS Las bendiciones de Salomón deben ser como una visión, pero la vida de David debe ser la caña de medir y la clave para “poseerlas”. Vamos a contemplar algunos principios del reinado y vida de David, y veremos si Salomón estuvo a la altura de ellos. Por lo cual tenemos ante nosotros las normas de la vida de David, así como las aterradoras advertencias de la propia vida de Salomón, que no calificó. 1. Un corazón definido Aunque no tuvo la gloria ni el esplendor del reino de Salomón, David fue un poderoso rey y un recio guerrero. Pero observemos su corazón. A pesar de tener una infinidad de cosas a su disposición, dijo: “Una cosa he demandado a Jehová” (Sal. 27:4). Nada hay tan fuerte y poderoso, como el individuo que con corazón definido toma un rumbo bueno o malo. David dijo: “Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo”. La vida de Salomón 197 ¿Cuál fue la actitud de Salomón? En Eclesiastés 2:10 él dijo: “No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, ni aparté mi corazón de placer alguno”. Los ojos de David veían en una sola dirección, mientras que los de Salomón eran “vagabundos”. Lo que veía, lo deseaba y tomaba. 2. Un corazón entregado El Salmo 9:1 dice: “Te alabaré, oh Jehová, con todo mi corazón” (ver también Sal. 111:1). En el Salmo 86:11 vemos por qué David pudo hablar así. Esta es una plegaria muy significativa que David formuló varias veces. Él dijo: “Enséñame, oh Jehová, tu camino; caminaré yo en tu verdad; afirma mi corazón para que tema tu nombre”. David tenía un corazón entregado porque oraba de esta manera. 3. Un corazón contrito David tenía un corazón contrito. Ello se revela en siete salmos penitenciales: 6, 32, 38, 51, 102, 130 y 143. En este estudio veremos solamente el Salmo 51. Uno de los rasgos más sobresalientes del carácter de David fue su gran docilidad de corazón. Con esto se hizo querer por Dios inmensamente. Sin embargo, esa cualidad estuvo completamente ausente en la vida de Salomón. El amor a los placeres endureció por completo el corazón de Salomón, el cual era impenitente e incapaz de recibir censura. Por el contrario David, al ser amonestado por el profeta, se quebrantó a fondo. Muchos salmos surgieron de esta etapa de su vida, durante la cual David permaneció sumamente arrepentido y compungido delante de Dios. David vivía con la unción del arrepentimiento. ¡Pidámosla al Señor! 198 La vida de Salomón Creo que estamos mudándonos a una nueva época de ganar almas, y que la Iglesia recibirá una fresca afluencia de personas. ¿Qué clase de personas ingresará? Habrá de toda procedencia, pero algunos vendrán de lo que Jesús llamó: “esta generación adúltera”. Ellos tendrán que experimentar un corazón contrito o penitencial y la aceptación de Dios. Nosotros necesitamos darles esa seguridad. D. EXPLICACIÓN DEL SALMO 51 1. Salmo 51:1—La misericordia de Dios. David dice en el Salmo 51:1: “Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia...”. Necesitamos tener una revelación de la misericordia de Dios. En Éxodo 34:6, el Señor se le apareció a Moisés y le habló con estas palabras: “Yo soy misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad”. El Señor Jesús recalcó esto en Mateo 9:10-12: “Y aconteció que estando él sentado a la mesa en la casa, he aquí muchos publicanos y pecadores, que habían venido, se sentaron juntamente a la mesa con Jesús y sus discípulos. Cuando vieron esto los fariseos, dijeron a los discípulos: ¿Por qué come vuestro Maestro con los publicanos y pecadores? Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos”. ¿Qué personas acuden al médico? ¡Los enfermos! Es muy raro que un médico ausculte a una persona saludable. En cierta ocasión alguien me dijo: “¿No tiene usted algo que comunicarnos sino problemas?” Yo le contesté: “Bueno, la verdad es que la gente llama al pastor solo cuando hay problemas”. Esto es lo que el Señor Jesús está diciendo: “Los enfermos son los que necesitan un médico”. La vida de Salomón 199 En el versículo 13 dice: “Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento”. Necesitamos una revelación personal de la misericordia de Dios, la cual es capaz de descender muy abajo para recoger al individuo que ha caído en el hoyo profundo. David clamó en el Salmo 40:1: “Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor”. Dios quiere que nosotros seamos Su brazo extendido para sacar a otros de ese horrendo hoyo. solo se requiere una persona para caer en un hoyo, pero se requieren alrededor de seis para sacarlo de ahí. Hay individuos que son hábiles para caer en hoyos. Son sacados de uno, y cuando menos se espera, han caído en otro. Debemos tener misericordia de ellos. La misericordia simplemente significa que les hemos advertido, diciéndoles: “Si toman ese rumbo, resbalarán”. Y seguimos alertándolos una y otra vez, pero caen en ese hoyo, habiéndoles nosotros prevenido. Es misericordia rescatar a éstos voluntariamente y con amor, y no reñir diciéndoles: “¡Yo te lo dije!”. La misericordia siempre está asociada con las buenas obras. “Me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo” (Sal. 40:2, 3). Tenemos la tendencia a perder la esperanza con la gente, pero Dios no. ¡Nuestra misericordia debe ser tan duradera como la de Dios, porque Él es misericordioso! 2. Salmo 51:1—Los pecados son borrados. “Borra mis rebeliones”. Antiguamente, se escribía sobre pergamino y cuero. Mas, por no tener la tinta ningún ácido, 200 La vida de Salomón no “mordía” el pergamino. Todo lo que había que hacer para eliminar lo escrito, era frotar el pergamino con un paño húmedo y no quedaba rastro de tinta. A esto se refería el rey David aquí. David estaba evidentemente escribiendo este Salmo en profecía, pues es lo que Dios hace. Dios sencillamente borra nuestras transgresiones. No queda registro de ellas. 3. Salmo 51:2—Lavando la maldad. “Lávame más y más de mi maldad”. Oseas 14:2 dice: “Quita toda iniquidad”. En el versículo 8, Efraín (la tribu idólatra) dice: “¿Qué más tendré yo con los ídolos?”. El lavar la maldad implica eliminar todo deseo de pecado. A algunas personas les agrada ser libradas del poder del pecado pero siguen amando el pecar. La verdadera contrición es desear un lavamiento minucioso de la iniquidad, y una limpieza del pecado. 4. Salmo 51:3—Confesión de pecado. “Porque yo reconozco mis rebeliones, y mi pecado está siempre delante de mí”. También Oseas 14:2: “Llevad con vosotros palabras de súplica, y volved a Jehová, y decidle: Quita toda iniquidad y acepta el bien”. Debe haber un rotundo reconocimiento de las transgresiones y una confesión ante Dios. Ver también Jeremías 3:13. 5. Salmo 51:4—Justificación. David dice: “Contra ti, contra ti solo he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos; para que seas reconocido justo en tu palabra, y tenido por puro en tu juicio”. El rey David sabía que sería juzgado. Por eso reconoció su pecado en público, de La vida de Salomón 201 manera que cuando Dios lo juzgara, nadie acusara a Dios de ser injusto. A David le preocupaba el nombre de Dios y Su justicia. 6. Salmo 51:5—Reconocimiento del pecado original. “He aquí, en maldad he sido formado, y en pecado me concibió mi madre”. Ahora David reconocía el pecado original. Cierta vez oí a un hombre dar testimonio después de haber procedido mal. Lo que dijo fue: “¡Oh, qué raro que yo haya hecho algo así!”. Dios respondió al instante y dijo: “Tan capaz eras de hacerlo, que lo hiciste”. El detalle aquí es este: pecamos porque somos pecadores. Por lo general conocemos las debilidades de nuestros padres y abuelos, y quizá fue Dios quien nos hizo ver esas tendencias. Sin embargo, no las hemos combatido en nuestras propias vidas. Es de suma importancia que cuando Dios nos muestre algo en nuestras vidas, lo enfrentemos, si ya sabemos que esas flaquezas existen en nosotros y en nuestros parientes. Dios espera que acudamos a Él para combatirlas y que no quede manifestación de ellas en nuestras vidas. La Palabra de Dios dice: “Cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia” (Ro. 5:20). La gracia de Dios nos capacita para vencer y quedar libres de las tendencias heredadas al pecado. 7. Salmo 51:6—Transformación interior. “He aquí, tú amas la verdad en lo íntimo, y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría”. Tiene que haber una transformación en nuestras vidas, y no tan solo una liberación y limpieza, porque Dios desea reemplazar esa maldad, esa iniquidad, y ese engaño, con verdad y sabiduría. David dice: “y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría”. 202 La vida de Salomón Necesitamos ayudar a los demás a entender que sus puntos de debilidad deben ser edificados, de modo que desarrollen fortaleza. A veces nuestras áreas más raquíticas se pueden convertir en las de mayor firmeza, porque les prestamos más atención y reciben más gracia. 8. Salmo 51:8—Restitución del gozo. “Hazme oír gozo y alegría, y se recrearán los huesos que has abatido”. David había pecado muy penosamente, pero en el Salmo 4:7 vemos la transformación completa que Dios le concedió. Él dice: “Tú diste alegría a mi corazón, mayor que la de ellos cuando abundaba su grano y su mosto”. Después de haber pecado, el rey David pudo decir: “Puedo ver al granjero con su abundante cosecha y el gozo que ella le produce; sin embargo, Dios ha puesto una mayor alegría en mi corazón”. En el Salmo 51:12 dice: “Vuélveme el gozo de tu salvación, y espíritu noble me sustente”. Dios puede poner tal gozo en el corazón humano. Es por fe que afrontamos la necesidad que hay en nuestras propias vidas y en las ajenas. 9. Salmo 51:10—Limpieza. “Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí”. Dios puede limpiar y transformar a una persona. Dios me mostró una visión de dos jarrones: uno limpio y otro completamente sucio. El Señor dijo: “Todo lo que el jarrón sucio necesita, es ser lavado, limpiado y secado; y los dos serán idénticos. Valen lo mismo”. Y añadió: “Alguien puede caer en el fango del pecado, pero cuando yo lo levanto y limpio, es tan valioso como los demás”. Dios puede hacer una obra creadora en nuestros corazones, y si tenemos corazones limpios, es como si nunca hubiéramos pecado. La vida de Salomón 203 10. Salmo 51:13—Completo restablecimiento. David dice: “Entonces enseñaré a los transgresores tus caminos, y los pecadores se convertirán a ti”. A partir de un completo restablecimiento, surge el bello ministerio del maestro y el del evangelista. Así ocurrió en la vida de David. En los avivamientos venideros, Dios quiere socorrer a los que están en el abismo, y usarnos a nosotros para producir un hermoso restablecimiento en sus vidas, de manera que ellos puedan tener un corazón limpio y un ministerio que a su vez alcance a miles de personas más. a. Completo restablecimiento—DAVID. El rey David es el hombre que Dios levantará en el milenio. Jeremías 30:9, refiriéndose a la restauración de Israel, dice que ellos “servirán a Jehová su Dios y a David su rey, a quien yo les levantaré”. Esto alude además la restauración de Judá e Israel en el milenio y segunda venida del Señor. Ezequiel 37:19-23 dice que ellos ya no se contaminarán con ídolos sino que llegarán a ser un palo (nación) en la mano de Dios, y que un rey reinará sobre ellos. El versículo 24 nombra ese rey: “Mi siervo David será rey sobre ellos, y todos ellos tendrán un solo pastor; y andarán en mis preceptos, y mis estatutos guardarán, y los pondrán por obra”. David fue preparado para dirigir una nación particularmente bendecida por Dios, y que con todo, no había calificado para alcanzar los propósitos de Dios. b. Completo restablecimiento—ISRAEL. En Zacarías 12:10, 11, vemos el corazón contrito de la nación de Israel cuando sea restaurada al regreso del Señor. Dice así: “Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a 204 La vida de Salomón quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito. En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén” (ver también Ro. 11:26). En Oseas 4:11 y 5:4, se muestra el pecado que predominaba en Israel: “Fornicación, vino y mosto quitan el juicio”. “No piensan en convertirse a su Dios, porque espíritu de fornicación está en medio de ellos, y no conocen a Jehová”. Israel fue entregado a un espíritu de prostitución y adulterio, y acabó por asesinar a Cristo. Ellos eran adúlteros y asesinos como nación. El rey que gobernará sobre ellos durante el milenio, es uno que también adulteró con Betsabé y que luego asesinó a Urías, el esposo. ¡Qué bien se entenderán mutuamente el rey David y su pueblo! Pero, Dios lo rehabilitó de esos dos pecados cardinales y lo colocará sobre un pueblo que ha pecado de manera similar contra el Señor. A veces la persona que mejor alcanza a los demás, es aquella que ha estado en el mismo abismo de ellos. E. UN CORAZÓN CON UNA VISIÓN David tenía un corazón visionario. Era un hombre de mucha visión. En el Salmo 40:6, vemos este aspecto del corazón de David: “Sacrificio y ofrenda no te agrada; has abierto mis oídos”. David vivió durante la época de la ley, cuando Dios ordenaba sacrificios y ofrendas quemadas. Sin embargo, David, por revelación divina, entendía lo que estaba por venir. Él tuvo una revelación del sacerdocio que vendría con la era de la Iglesia. La vida de Salomón 205 “Entonces dije: He aquí, vengo; en el rollo del libro está escrito de mí. El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, y tu ley está en medio de mi corazón” (Sal. 40:7, 8). David tuvo una revelación de la dispensación de los últimos días (la era de la Iglesia), en que Dios le confirmará a la Iglesia el nuevo pacto, y escribirá Sus leyes en las tablas de carne de nuestros corazones. Además, David tuvo una revelación del sacerdocio de los creyentes, porque en el Salmo 110:4 lo encontramos diciendo: “Tú eres sacerdote para siempre según el orden de Melquisedec”. Salomón y su pueblo solo pudieron vivir para el presente porque anduvieron “tras las bendiciones” y usaron los dones y llamamientos de Dios para enriquecerse y satisfacerse ellos mismos. Sin embargo, David vio más allá, pues anduvo “tras Cristo”. Hechos 2:25 dice: “Porque David dice de Él: Veía al Señor siempre delante de mí; porque está a mi diestra no seré conmovido”. El Salmo 16:8, que está traducido de manera levemente diferente, dice: “A Jehová he puesto siempre delante de mí; porque está a mi diestra, no seré conmovido”. En el Salmo 42:1, 2 David exclama: “Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía. Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo; ¿cuándo vendré, y me presentaré delante de Dios?” También el Salmo 63:1,2 dice: “Dios, Dios mío eres tú; de madrugada te buscaré; mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, en tierra seca y árida, donde no hay aguas, para ver tu poder y tu gloria, así como te he mirado en el santuario”. David tuvo siempre al Señor delante de sí, y anduvo “tras Cristo”. Por eso, su visión trascendía la de sus contemporáneos. Yo creo que Dios quiere que seamos como David, con una 206 La vida de Salomón visión progresiva y un anhelo de encontrarnos con el Señor con más intensidad que nunca. David era un hombre conforme al corazón de Dios porque tenía esa visión progresiva, esa hambre y sed de Dios que lo llevó a la era venidera. Dios desea darnos una visión, un deseo y avidez por lo que está más allá, y llevarnos a un nuevo ámbito en Él. F. CONCLUSIÓN Vemos que la manera de recibir las bendiciones y la gloria de Salomón, es identificándonos con la vida de David. El reinado de Salomón se basó en la vida de David. Es por la vida de David que Salomón pudo poseer todo lo que tuvo. Las claves para apropiarnos de lo que Dios nos ha deparado, se basan en la vida de David, en que se forje en nosotros su carácter. Que Dios nos ayude a aprender Sus caminos, para que recibamos todo lo que nos ha deparado y lleguemos a ser Su luz. ¿Cuáles son las claves? 1. Ser un hombre o mujer conforme al corazón de Dios—De corazón sincero, recto, contrito y dócil al Espíritu Santo. Seamos personas que con prontitud piden perdón y se arrepienten cuando Dios toca sus vidas. Como David, tengamos un corazón de carne (Hch.13:22). 2. Ser un hombre o mujer de visión—que veamos más allá del velo de este periodo de la historia de la Iglesia, a la gloria y manifestación del Espíritu y el poder que está por venir. La vida de Salomón 207 El propósito de Dios es multiplicarnos. ¿Cómo puede haber multiplicación si no nos damos de lleno a los demás? La idea de tener un pastor no es que las ovejas acudan a él, sino que él salga a buscar a las perdidas. Estando nosotros en el umbral de un nuevo ministerio, que es una nueva acometida evangelizadora, Dios está diciendo: “Quiero que mediten en el corazón de David para que Yo pueda crear en ustedes ese mismo corazón”. David, el hombre conforme al corazón de Dios, es quien ha puesto a los demás en situación de obtener las bendiciones. Animémonos, porque David es la clave para poseer las bendiciones, la gloria y la sabiduría de todo lo que Dios tiene. A medida que se desarrolle en nosotros el corazón de David, poseeremos todo lo que Dios nos ha deparado. El reino de Salomón es la visión—la vida de David es el camino a la realidad. Debemos clamar: “Oh, Dios, dame un corazón como el de David”. Descubriremos entonces que se forja en nosotros un corazón de pastor y que nos convertimos en la mano extendida del Príncipe de los Pastores. Veremos el avivamiento en una nueva ola de personas que ingresan a la Iglesia, las cuales serán bendecidas, limpiadas, y enaltecidas, para convertirse ellas mismas en evangelistas que salen a ganar otras vidas. ¡El reino de Salomón es la visión, la vida de David es el camino a la realidad! Otros libros escritos por por el Dr. Brian J. Bailey Comentarios sobre los libros de la Biblia Génesis: El libro de los orígenes El Viaje de Israel El Tabernáculo de Moisés Rut: La novia gentil de Cristo Estudios sobre las vidas de David y Salomón Las tres casas de Esther Salmos I: Capítulos 1-50 El libro de lamentaciones El carro del trono de Dios: Una exposición del libro de Ezequiel Daniel Profetas Menores I: La restauración de los caídos (Oseas) El Evangelio de Juan Romanos: Más que vencedores Soldados de Cristo: Una exposición de la epístola de Pablo a los Efesios Dando en el blanco: Una exposición de la epístola a los Filipenses Colosenses y Filemón: La Senda de la Santidad Hebreos: Detrás del velo Las dos Sabidurías: La epístola de Santiago Las Epístolas de Juan Apocalipsis Otros libros Pilares de la fe El Espíritu Santo La vida de Cristo La Segunda Venida: Una exposición de la segunda venida del Señor Para mayor información o copias adicionales diríjase a esta dirección: Zion Christian Publishers PO Box 70 Waverly, NY 14892 Sin cargo: 1-877-768-7466 Fax: (607) 565- 3329 www.zionfellowship.org/zcpublishers/ Correo electrónico: [email protected]