2009_SI Women_Dang Kilduff_ES

Anuncio
Diabetes y embarazo
Tras un embarazo con
diabetes: una ventana
a la oportunidad
Leona Dang-Kilduff
El período que sigue al parto de una mujer abre una ventana a la oportunidad de influir
sobre su salud futura a corto y largo plazo. El final de un embarazo supone una transición
tanto física como mental, así como en términos de autocuidado. Tras el parto, la mayoría
de las hormonas que hacen que una mujer con diabetes gestacional sea insensible a la
acción de la insulina dejan de estar presentes. En mujeres con diabetes preexistente, la
insulina debe reducirse drásticamente; algunas mujeres que necesitan tratamiento de
insulina para sobrevivir podrían no necesitar insulina durante las siguientes 72 horas.
Los ajustes de las dosis de insulina o de las medicaciones hipoglucemiantes deberían
basarse en las necesidades de cada mujer, en sus niveles de glucemia y su historial médico. Leona Dang-Kilduff describe los factores clave que afectan a la salud de la mujer
tras un embarazo con diabetes.
Mientras que las mujeres con diabetes están amamantando, la
sobre el lactante y la literatura científica sigue animando a que
insulina sigue siendo la medicación más común para el control
sean utilizados durante la lactancia materna.1
glucémico. Pero muchas mujeres con diabetes tipo 2 utilizan
medicamentos hipoglucemiantes orales, ya sea en combinación
Problemas durante la lactancia
con o en sustitución de la insulina. Algunos aspectos importantes,
Antes del parto, las mujeres deben tomar una importante decisión
como la lactancia materna, deben tenerse en cuenta antes de
en relación a su estilo de vida: lactancia materna o artificial.
que la mujer y sus proveedores sanitarios escojan una opción de
La lactancia materna está altamente recomendada; ayuda a la
tratamiento hipoglucemiante. Se cree que la gliburida, la glipizida,
madre a perder peso y tiene efectos protectores sobre la madre
la metformina y la acarbosa pasan a la leche materna, aunque
durante el período que dure la lactancia. Si una mujer no consume
aún no se han estudiado en profundidad sus efectos a largo plazo
calorías extra mientras amamanta, perderá peso. La lactancia
Mayo 2009 | Volumen 54 | Número especial
33
34
Diabetes y embarazo
La lactancia materna ayuda a la madre a perder peso y tiene efectos protectores.
materna exige unas 200 kcal diarias adicionales en relación a
tipo 1 en sus hijos.3 Dichos estudios aún están en proceso y a
las necesidades durante el embarazo. También reduce de manera
veces se contradicen, pero podrían resultar interesantes para las
importante el riesgo futuro del bebé de obesidad y diabetes. En
mujeres con la afección.
estudios basados en 2 meses de alimentación exclusiva mediante
la lactancia materna, el riesgo de diabetes a lo largo de toda la
vida del hijo se ha visto reducido en un 13%.2 La alimentación
combinada también es beneficiosa tanto para la madre como para
el bebé. En mujeres que prefieren no amamantar, la ingesta caló-
“
El uso de progestina como único
método anticonceptivo va asociado a
un aumento del triple de los casos de
”
diabetes materna en 12 meses.
rica deberá reducirse a fin de perder o evitar el aumento de peso.
Control de embarazos
Las mujeres con diabetes previa podrían encontrar dificultosa
La lactancia materna suele utilizarse con frecuencia como método
la lactancia materna. La posibilidad de sufrir una hipoglucemia
anticonceptivo. Sin embargo, no se considera que sea el enfoque
aumenta la necesidad de picar entre horas o modificar la me-
apropiado para este grupo de mujeres de posible alto riesgo.
dicación. Las madres corren un mayor riesgo de hipoglucemia
Cualquier mujer que decida utilizar la lactancia materna como
durante ciertos momentos del crecimiento de su bebé, que suelen
método anticonceptivo debería mantener los niveles de glucemia
darse a las dos semanas, a las seis semanas y a los tres meses.
dentro del intervalo aceptado durante el embarazo, con el fin
Cuando una mujer inicia el proceso de acostumbrar a su hijo
de evitar defectos en el feto en caso de que se produjese un
a otros alimentos distintos a la leche materna, es necesario au-
embarazo no planificado.
mentar la medicación y reducir la ingesta calórica. Los hallazgos
de investigaciones en mujeres con diabetes tipo 1 sugieren que
Las mujeres con antecedentes de diabetes gestacional que estén
retrasar el proceso de destete reduciría el riesgo de diabetes
amamantando a su bebé no deberían utilizar la progestina
Mayo 2009 | Volumen 54 | Número especial
Diabetes y embarazo
como único método anticonceptivo. Estos métodos hormonales
anomalías en su tolerancia a la glucosa, deben ser enviadas al
van asociados a un aumento de casi el triple de los casos de
especialista, y todas las mujeres con antecedentes de diabetes
diabetes materna en los siguientes 12 meses.4,5 El uso de un dis-
gestacional deben ser examinadas antes de planificar un embara-
positivo intrauterino con progestina no parece tener los mismos
zo con el fin de prevenir posibles defectos del feto como resultado
efectos. Ya que cuando se producen embarazos no planificados
de un alto nivel de glucemia. Las mujeres que ya no presenten
separados por un corto intervalo de tiempo también se provoca
diabetes tras el embarazo deberían ser examinadas desde el
un deterioro del control glucémico, utilizar la progestina como
inicio durante su siguiente embarazo. El índice de reincidencia
método anticonceptivo podría ser una opción aceptable en algunas
de la diabetes gestacional se encuentra en torno al 67%. Los
mujeres si compensa al sopesarla con la posibilidad de que se
embarazos posteriores a un primer embarazo con diabetes ges-
produzcan múltiples embarazos muy seguidos.
tacional hacen que el riesgo de la mujer de desarrollar diabetes
“
tipo 2 aumente durante los siguientes 5 años.9
La glucemia elevada tras el parto afecta a la
curación, aumenta el riesgo de infecciones
”
Las recomendaciones relativas a la revisión de las mujeres con
diabetes son las mismas que las de la población diabética
y reduce la producción de leche.
general. Sin embargo, si una mujer está planeando quedarse
En la mayoría de mujeres con diabetes gestacional, la tolerancia
embarazada, debería iniciar un programa de atención previa,
la glucosa vuelve a su nivel normal tras el parto. Sin embargo,
o mantener su glucemia y su estado de salud (incluida la medi-
en algunas mujeres persiste un alto nivel de glucemia. Muchos
cación y el tratamiento) dentro de los intervalos recomendables
proveedores sanitarios, por lo tanto, hacen que las mujeres se
para la preparación al embarazo.
midan sus niveles de glucemia en ayunas y tras las comidas varias
veces tras el parto. Un elevado nivel de glucemia influye sobre la
Determinar los factores de riesgo
curación, aumenta el riesgo de infecciones y reduce la producción
Otras revisiones recomendadas son la evaluación de los nive-
de leche. Cualquier mujer con trastornos de la tolerancia a la
les de lípidos y triglicéridos. Las mujeres con antecedentes de
glucosa debería tener un plan de tratamiento individualizado y
diabetes (gestacional o de otro tipo) tienen un mayor índice de
someterse a seguimiento desde el principio.
trastornos del perfil de lípidos y triglicéridos. Nótese que muchas
medicaciones liporreductoras no están recomendadas durante
A las cinco semanas o más tras el parto, se recomienda una
la lactancia. Se recomienda revisar la tensión arterial, ya que
prueba oral de tolerancia a la glucosa de 75 g.
Se ha detec-
muchas mujeres con diabetes gestacional o diabetes preexistente
tado intolerancia a la glucosa continuada en muchas mujeres
desarrollarán hipertensión. La mayoría de los inhibidores IECA
que han tenido diabetes gestacional. De no intervenir, se calcula
se consideran compatibles con la lactancia materna, aunque
que alrededor del 10% de dichas mujeres desarrollará diabetes
pequeñas cantidades pasen a la leche materna.
6,7
tipo 2 cada año; el índice de mujeres en estado prediabético (la
zona gris entre la tolerancia normal a la glucosa y la diabetes)
El síndrome metabólico, una constelación de factores de ries-
es del 17% anual. Es de destacar que investigaciones recientes
go, como la insensibilidad a la insulina, la hiperglucemia, la
han demostrado que la diabetes gestacional es una advertencia
hipertensión, los niveles anormales de lípidos y triglicéridos y la
y no una sentencia: una mujer puede reducir su riesgo mediante
obesidad central, va asociado tanto a la diabetes gestacional
su estilo de vida y sus elecciones personales.8
como a la diabetes tipo 2. El síndrome metabólico está específicamente relacionado con un aumento del riesgo cardiovascular
Seguimiento y rastreo
y de diabetes.
El seguimiento de las mujeres que han tenido diabetes gestacional
es de máxima importancia. En mujeres con tolerancia normal a
Prevenir los riesgos
la glucosa tras el parto se recomienda repetir la prueba oral de
Estudios recientes han demostrado que entre 30 y 60 minutos
tolerancia a la glucosa de 75 g cada 3 años, y una vez al año
de actividad física al día, 5 días a la semana, representan la
si se detecta un estado de prediabetes. Las mujeres que hayan
modificación más eficaz de estilo de vida para combatir el sín-
tenido diabetes gestacional, independientemente del grado de
drome metabólico. En mujeres con prediabetes y antecedentes
Mayo 2009 | Volumen 54 | Número especial
35
36
Diabetes y embarazo
de diabetes gestacional en los EE UU, se demostró una reducción
también interfiere con la unión emocional de una mujer con su
del 49% del índice de diabetes gracias a la actividad física, y
bebé recién nacido. Deberían promoverse medidas saludables
una reducción de tan sólo el 14% mediante la metformina.10 Se
de afrontamiento que se adapten al estilo de vida de la mujer,
han demostrado resultados similares en todo el mundo. El ejer-
como la actividad física o las técnicas de relajación, además
cicio también es importante para las mujeres con diabetes, ya
de utilizar el apoyo social. Los grupos de madres (formales o
que aumenta la sensibilidad a la insulina, mejora la circulación
informales) pueden ampliar el sistema de apoyo de una mujer e
y reduce los riesgos cardiovasculares, además de ayudar en la
impulsarla a desarrollar técnicas saludables de cuidado personal.
pérdida de peso.
“
Realizar actividad física con regularidad es
la modificación más eficaz del estilo de vida
”
para combatir el síndrome metabólico.
Leona Dang-Kilduff
Leona Dang-Kilduff es coordinadora de embarazos con
diabetes en la región de la Costa Central de California, en la
Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford (EE UU).
El exceso de peso corporal perece tener un impacto notable
sobre el riesgo de diabetes, síndrome metabólico y enfermedad
cardiovascular, así como de la mayoría de las complicaciones de
origen diabético. Cuanto más se aproxime el peso corporal de
una mujer al intervalo normal, más bajo será el riesgo a lo largo
de su vida. Sin embargo, las mujeres no tienen que conseguir
un peso corporal normal para mejorar su salud a largo plazo.
Deberían promoverse medidas saludables de afrontamiento, como
la actividad física o las técnicas de relajación.
Educación nutricional
La educación diabética nutricional debería centrarse principalmente a lo largo del embarazo en promover una alimentación
sana. La información para elegir bien los alimentos también
influirá sobre la salud familiar. En ella, se anima a las mujeres a
que escojan fruta y verduras (y no zumos de fruta), a que limiten
la ingesta de grasas trans, grasas saturadas y colesterol y a que
minimicen el consumo de grasas parcialmente hidrogenadas.
Deberían intentar reducir el consumo de refrescos y alimentos
densos en azúcar, así como escoger alimentos integrales con un
alto contenido en fibra.
Atención psicosocial
Es importante reconocer y tratar la depresión. Se dan altos
índices de depresión tras un embarazo de alto riesgo, y éstos
aumentan con la diabetes. La depresión por sí sola aumenta el
desarrollo de diabetes, incluso ante la ausencia de otros factores
de riesgo, e influye sobre la salud al multiplicar las hormonas del
estrés. Esto incrementa la insensibilidad a la insulina, reduciendo
los niveles de energía e influyendo sobre la actividad física.
Aumenta el riesgo de comportamientos autodestructivos, como
una alimentación poco saludable o el tabaquismo. La depresión
Mayo 2009 | Volumen 54 | Número especial
Bibliografía
1 B
riggs GG, Freeman RK, Yaffe, SJ. Drugs in Pregnancy and Lactation
(7th edition). Williams and Wilkins. Philadelphia, 2005.
2 P
ettitt DJ, Forman MR, Hanson RL, et al. Breastfeeding and incidence of
non-insulin-dependent diabetes in Pima Indians. Lancet 1997; 350: 166-8.
3 W
ahlberg J, Vaarala O, Ludvigsson J; ABIS study group. Dietary risk
factors for the emergence of type 1 diabetes-related autoantibodies
in 21/2 year-old Swedish children. Br J Nutr 2006; 95: 603-8.
4 K
jos Sl, Peters RK, Xiang A, et al. Contraception and the risk of type 2
diabetes mellitus in latina women with prior gestational diabetes mellitus.
JAMA 1998; 280: 533-8.
5 X
iang AH, Kjos S, Kawakubo M, Buchanan TA. Long-acting injectable
progestin contraception and risk of type 2 diabetes in latino women with
prior gestational diabetes mellitus. Diabetes Care 2006; 29: 613-7.
6 K
itzmiller JL, Dang-Kilduff LJ, Taslimi MM. Gestational Diabetes after
delivery. Diabetes Care 2007; 30(Suppl 2): S225-S235.
7 W
orld Health Organization. Definition, diagnosis and classification of
diabetes mellitus and its complications. Part 1: diagnosis and classification
of diabetes mellitus. Report of a WHO Consultation. World Health
Organization. Geneva, 1999.
8 R
atner RE. Prevention of type 2 diabetes in women with previous
gestational diabetes. Diabetes Care 2007; 30(Suppl 2): S242-S245.
9 G
underson EP, Lewis CE, Chiang V, et al. A 20-year prospective study
of childbearing and incidence of diabetes in young women, controlling
for glycemia before conception: the coronary artery risk development
in young adult women (CARDIA) study. Diabetes 2007; 56: 2990-6.
10 R
atner RE, Christophi CA, Metzger BE, et al. The Diabetes Prevention
Program Research Group. Prevention of diabetes in women with
a history of gestational diabetes: Effects of metformin and lifestyle
interventions. J Clin Endocrin Metab 2008; 93: 4774-9.
Descargar