II Encuentro Nacional de Docentes Universitarios Católicos-Comisión N° 207 “Universidad y Voluntariado” Comunicación Lic. Emma Chomiak Conclusiones de la Primera Jornada de Voluntariado Social realizada en la Pontificia Universidad Católica Argentina el 13 de octubre de 2000 1 II Encuentro Nacional de Docentes Universitarios Católicos-Comisión N° 207 “Universidad y Voluntariado” Comunicación Lic. Emma Chomiak Resumen El pasado 13 de octubre se llevó a cabo la Primera Jornada de Voluntariado Social en la Universidad Católica Argentina; La misma fue organizada por el Centro Coordinador Universitario de Apoyo al Tercer Sector de la UCA y estaba dirigida a organizaciones no gubernamentales tanto eclesiales como civiles, centros académicos, profesionales vinculados con el trabajo social, estudiantes universitarios y público en general. La misma contó con la presencia de unas 300 personas aproximadamente y durante la misma se alternó entre momentos de exposición magistral y talleres . A lo largo de la jornada se desarrollaron tres grandes bloques de temas, tanto en las disertaciones de los panelistas como en los diferentes talleres. Uno de ellos es el relacionado con los valores, otro vinculado a la realidad en la que nos insertamos y los actores que en ella permanentemente redefinen sus roles y por último el tema específico de la jornada pero con diferentes matices según el modo de abordar la problemática y las características propias de cada organización. Datos del Autor Nombre y Apellido: Emma Chomiak Título Académico: Lic. en Ciencias Políticas Cargo: Coordinadora de Capacitación Institución: Servicio UNCION de la Escuela de Ciencias Políticas de la UCA Dirección: Av. Alicia Moreau de Justo 1400 (1107) Buenos Aires Teléfono: 4349-0201/0214 E-mail: [email protected] 2 II Encuentro Nacional de Docentes Universitarios Católicos-Comisión N° 207 “Universidad y Voluntariado” Comunicación Lic. Emma Chomiak Voluntariado y Valores Como toda realidad humana vinculada con la visión altruista de mejorar la condición de vida de otro ser humano, el voluntariado parte de una identificación con determinados valores. Y de todos los que podrían rescatarse los expositores coincidieron en mencionar sucesivamente tres: solidaridad, justicia social y equidad. Si partimos del concepto de que valores son todos aquellos bienes que el hombre considera necesarios para alcanzar su perfección, comprendemos porqué estos tres en particular hacen a la esencia misma de toda acción dirigida a consolidar el bien común. Tanto la justicia social como la equidad son dos caras de una misma moneda que debería ser de uso corriente y legal: la solidaridad. No hay secretos ni necesidad de revelaciones sobrenaturales para darse cuenta de la agobiante miseria en la que cientos de miles de personas se ahogan a diario no muy alejados de nuestra, muchas veces, sorda comodidad. Y tampoco es misión de algunos “seres especiales” o “elegidos” dar respuestas concretas y comprometidas al desafío de hacer que todo hombre descubra que merece un lugar en el mundo. Valores son bienes y hemos sido creados para reconocer, ejercitar y gozar esos bienes; el ejercicio de la solidaridad nos hace sentir una comunidad de destino, nos hace participar de una realidad que nos trasciende y nos eleva por encima de nuestras mezquindades y ataduras, supera en nosotros y hacia afuera las fronteras que construyen el individualismo, la apatía y la indiferencia. El hombre solidario está dispuesto a mirar la realidad desde la óptica del otro, a calzar sus sandalias, a asumir desde su lugar en la sociedad un compromiso fruto de una convicción: donde hay una necesidad existe un derecho. Por último hablar de solidaridad es hablar de amor al prójimo, es decir de actitudes que me acercan al otro en tanto que otro; y es esta la dimensión más profunda de los valores que detallamos anteriormente. La caridad (amor más perfecto) implica una actitud interior de apertura y gestos externos que manifiesten esa adhesión al bien común. El Estado, las organizaciones: realidad, actores y roles 3 II Encuentro Nacional de Docentes Universitarios Católicos-Comisión N° 207 “Universidad y Voluntariado” Comunicación Lic. Emma Chomiak “El hombre es él y su circunstancia” decía Ortega, y parafraseándolo podríamos afirmar que la circunstancia es consecuencia de los hombres que la generaron... El tejido social en el que nuestra sociedad está asentada, se encuentra seriamente deteriorado; los actores: Estado, partidos políticos, empresas, organizaciones atraviesan una dura crisis de funcionalidad e identidad; los roles de dichos actores se desdibujan a la sombra de sospechas de corrupción, de carencia de objetivos, de insensibilidad social frente a la crisis. Decíamos en la apertura de la jornada que “el Estado no debe dejar librado, al mercado ni a la buena voluntad de quienes entregan generosamente sus vidas como voluntarios, el desarrollo económico y social de la nación en un marco de justicia y equidad. El Estado debe intervenir como componedor y distribuidor del crecimiento, no queriendo controlar absolutamente todo, sino operando profesionalmente, y respetando el sano principio de subsidiariedad, en el complejo sistema político-económico en el que actúa.” El rol del Estado conlleva un importante valor social, porque puede potenciar las fuerzas sociales que existen en la misma comunidad y darles vuelo propio consolidando estructuras generadoras de crecimiento. Los demás actores detentan funciones diferentes pero complementarias. Una dirigencia política comprometida socialmente promueve acciones solidarias naturalmente. Pero los intereses en ese caso trascienden lo partidario, porque hacen a la función primaria que es velar por el bien común. Las organizaciones, por su parte, son fuente y garantía de participación activa de la sociedad en el día a día. Poseen un rol específico, nacido de la motivación natural de los hombres que las componen; y en ellas se plasma la diversidad de necesidades e intereses que nos identifican y a través de ellas la acción solidaria se concreta, se fortalece y crece. Por todo lo expuesto a lo largo de la jornada podemos afirmar que es necesario afianzar las instituciones y recrear un marco referencial cimentado en los valores sociales ya mencionados; las estrategias de restitución del tejido social se construyen con la participación de todos los actores para no generar nuevamente modelos de exclusión. Voluntarios: sujetos y actores de una nueva cultura En toda acción solidaria hay varios sujetos hacia quienes se orienta o debería 4 II Encuentro Nacional de Docentes Universitarios Católicos-Comisión N° 207 “Universidad y Voluntariado” Comunicación Lic. Emma Chomiak orientarse la atención. Uno de ellos es la población asistida, la cuál tiene una idiosincrasia propia, y características específicas según la realidad en la que se inserta. Las necesidades de este sujeto pueden ser urgentes, pero es fundamental ejercitar la prudencia a la hora de tomar decisiones. Así como cada tarea tiene una especificidad, cada organización también la tiene, y la acción debe estar acompañada por la reflexión, por una lectura profunda y crítica de la realidad, y por una capacitación adecuada con la tarea y los fines. El voluntario por su lado, también es un sujeto a ser considerado no solo por su actividad dentro de la institución sino como integrado en la misma finalidad de ella. Desde esta óptica nos permitimos ver que su deseo de participación surge de una búsqueda profunda y un motivación natural a ser solidario. Y desde ese lugar debe identificarse con una finalidad, con un proyecto y con una tarea. La pedagogía del voluntariado está dada por el aporte de sentido a la propia existencia, que recibe aquel que se ofrece gratuita y generosamente para dar su tiempo y su persona a quienes necesitan. La nueva cultura solidaria es fruto de la conciencia individual que cada uno debe desarrollar, para sentir una comunidad de destino y de pertenencia con lo que denominamos bien común. Afianzarla entre nosotros dependerá de la elocuencia y contundencia de las palabras y los gestos de los protagonistas, que motiven a otros a ponerse en movimiento. En esta línea fue la realización de esta jornada en el ámbito de la UCA, como primer paso a asumir un compromiso con la comunidad de la que forma parte. 5