l británico Ronnie Biggs, quien murió ayer en Londres a los 84 años

JUEVES 19 DE DICIEMBRE DE 2013
Por C.M.C.
l británico Ronnie
Biggs, quien murió ayer
en Londres a los 84 años,
se hizo famoso gracias al “robo del
siglo XX”, aunque también por los
36 años que pasó fugitivo, buena
parte de ellos en Brasil, jugando
“al gato y al ratón” con las autoridades de su país.
Biggs nació en Londres en
1929 y su leyenda comenzó la
madrugada del 8 de agosto de
1963. Aquel día, en el que cumplía 34 años, protagonizó con 14
cómplices el audaz asalto al tren
postal Glasgow-Londres, que
pasó a la historia como el “robo
del siglo XX”.
Los ladrones se apoderaron
de 120 bolsas de billetes de banco y se repartieron un botín, sin
precedentes, de 2,6 millones de
libras, que hoy equivaldrían a
US$75 millones.
Detenido un mes más tarde y
condenado a 30 años de cárcel,
Biggs se fugó 15 meses después
colgándose por una cuerda y
saltando sobre un camión.
Tras una primera etapa en
Francia, donde se sometió a una
cirugía estética, estuvo una temporada en España y otra en Australia, antes de llegar a Brasil en
1970, pasando por Panamá, Argentina y Bolivia.
Como Brasil no tenía tratado
de extradición con Gran Bretaña,
Biggs se instaló con su primera esposa y sus dos hijos en Rio de Janeiro, donde vivió con lo que le
quedaba del botín y lo que ganó
gracias a su astucia.
A juzgar por su autobiografía,
The odd man out, publicada en
1994, sus declaraciones y las fotos
en las que aparecía a menudo
acompañado de bellas mujeres,
disfrutó la vida.
Sin embargo, también tuvo sobresaltos. Cuatro años después de
su llegada a Rio, en 1974, un policía halló su rastro y amenazó con
poner fin a su exilio dorado.
La operación, sin embargo, se
frustró cuando se descubrió que
su novia, una reina del striptease
llamada Raimunda, con la que
años después -en una cárcel británica en 2002- se casaría en segundas nupcias, estaba embarazada
de su tercer hijo, Michael. Este feliz acontecimiento le garantizó a
Biggs la inmunidad y evitó que
E
Último
tiempo.
En marzo pasado
se burló de la
prensa en el
funeral de su
cómplice
Bruce
Reynolds.
MUNDO
fuera extraditado al Reino Unido.
Su casa en el céntrico barrio de
Santa Teresa se convirtió rápidamente en una atracción turística.
En 1981, Biggs fue secuestrado por un grupo de mercenarios
y apareció en un yate en Barbados, pero sus abogados consiguieron que la Justicia de la isla
Negocios. Biggs nunca
ocultó su condición de
ladrón y hasta lucró con ella.
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caribeña lo devolviera a Brasil
alegando un fallo en el proceso.
Cuando los británicos volvieron a la carga, en 1997, tras la firma de un tratado entre ambos
países, la Suprema Corte Brasileña decidió, entonces, que para
ellos el caso había prescrito.
ESCRITOR Y CANTANTE
Durante sus años en Rio,
Biggs fue muy activo: montó un
restorán y una página de Internet, donde vendía fotos, camisetas y otros recuerdos.
También escribió su autobiografía y una novela, participó en
anuncios publicitarios -uno de ropa interior femenina, en el que
aparecía envuelto en una bandera
británica rodeado de bellas jóvenes- y hasta cantó con los Sex Pistols el tema Nadie es inocente.
Aunque en 2001, arruinado,
cansado y enfermo, solicitó voluntariamente regresar a Gran
Bretaña para purgar su pena, e ingresó a la prisión. En 2009, aquejado de una grave neumonía, recuperó la libertad.