Milia en placa: a propósito de un caso

Anuncio
Dermatología Pediátrica Latinoamericana
Volumen 11 • Número 1. Enero/Abril 2013
comunicación de casos
Milia en placa: a propósito de un caso
25
Ruth Alperovich
Paula Boggio
Sector Dermatología Pediátrica del Servicio de Dermatología del Hospital J.M. Ramos Mejía
María Eugenia Abad
Margarita Larralde
Sector Dermatología Pediátrica del Servicio de Dermatología del Hospital J.M. Ramos Mejía
y Servicio de Dermatología del Hospital Alemán
Buenos Aires, Argentina
Resumen
Los quistes de milium (QM) son pápulas blanquecino-amarillentas de pocos milímetros de
diámetro. Se clasifican en primarios y secundarios, e histológicamente se presentan como
pequeños quistes de queratina localizados en la dermis. El término “milia en placa” se refiere
a una forma rara de QM primarios, caracterizada clínicamente por múltiples QM que coalescen sobre una base eritemosa formando una placa. La aparición de la milia en placa durante la
infancia o adolescencia es extremadamente infrecuente. Presentamos el caso de un varón de 8
años de edad con milia en placa a nivel del mentón y revisamos la bibliografía relacionada con
el tema.
Palabras clave: milia; milia en placa; quistes de milium
Abstract
Milium cysts (MC) are white to yellow papules of few millimeters of diameter that are classified into primary and secondary types. Histologically they consist on small keratin cysts
located in the dermis. Milia en plaque refers to an uncommon variant of MC, clinically characterized by grouped milia on an erythematous background. The occurrence of milia en
plaque in childhood or adolescence is extremely rare. We herein present a boy of 8 years with
a milia in plaque located on his chin and review related literature.
Key words: milia; milia en plaque; milium cyst
Dermatol Pediatr Latinoam (En línea). 2013; 11 (1): 25-7.
INTRODUCCIÓN
La milia en placa (MP) constituye una variante rara
de quiste de milium (QM) primario. Afecta principalmente a las mujeres en edades medias de la
vida y, con menor frecuencia, puede presentarse en
1,2
niños y adolescentes.
CASO CLÍNICO
Paciente de sexo masculino, de 8 años de edad, sin
antecedentes personales ni familiares de relevancia, consulta por una lesión cutánea asintomática,
a nivel del rostro, de dos meses de evolución.
Durante el interrogatorio dirigido niega traumatismo local, uso de cosméticos o tratamientos tópicos en la zona.
En el examen físico se constata la presencia de
múltiples pápulas amarillentas, de 1 a 3 mm de
diámetro, que asientan sobre una base discretaCorrespondencia:
Paula Boggio
Agüero 2015, piso 6, CABA, Buenos Aires, Argentina
CP: 1425
Email: [email protected]
mente eritematosa y confluyen formando una
placa, localizada a nivel de la región del mentón
(Figuras 1 y 2). El resto del examen cutáneo es
normal.
En base a las características clínicas de la lesión
arribamos al diagnóstico de MP. Se le indica la
aplicación diaria de tretinoína en crema al 0,05% y
evoluciona con desaparición de las lesiones al año
de iniciado el tratamiento.
Dermatología Pediátrica Latinoamericana
Volumen 11 • Número 1. Enero/Abril 2013
comunicación de casos
Milia en placa
Ruth Alperovich et al.
1
2
Figura 1. Milia en placa a nivel del mentón.
Figura 2. Detalle de la lesión: múltiples pápulas blanco-amarillentas, de 1 a 3 mm, que confluyen en una
placa.
COMENTARIO
Los QM son pápulas blanquecinas o amarillentas,
de 1-3 mm de diámetro, que histológicamente corresponden a pequeños quistes epidérmicos localizados en la dermis.1-4
Se clasifican en QM primarios, cuando son de origen desconocido (este grupo engloba al milium
congénito, milia en placa, QM eruptivo y los asociados con determinadas genodermatosis); o secundarios, cuando aparecen luego de un traumatismo,
quemadura, uso de cosméticos o corticoides tópicos, radioterapia o enfermedad cutánea subyacente
(como por ejemplo: porfiria cutánea tarda, penfigoide ampollar, herpes zoster y dermatitis de
contacto, entre otras).1,2
La MP es considerada una variante rara de QM
primario y consiste en múltiples QM que se agrupan sobre una base eritematosa constituyendo una
placa.1-4 La primera descripción de esta entidad fue
hecha por Balzer y Bouquet en 1903, mientras que
la denominación actual fue propuesta por Hubler
en 1978.4
Afecta con mayor frecuencia a mujeres de edad
media y a todas las razas por igual.2-4 Suele comprometer la región periauricular (especialmente la
zona retroauricular), seguida de los párpados, el
puente nasal y las regiones supraclavicular y submandibular; con una distribución uni o bilateral.4,5
La aparición de la MP en la infancia o adolescencia
es extremadamente infrecuente, con aproximadamente solo 9 casos comunicados en la literatura.3,4,6-9
En la clínica se caracteriza por la presencia de una
placa asintomática, ligeramente eritematosa y tachonada por múltiples pápulas blanco-amarillentas
de 1 a 3 mm de diámetro.4
Histológicamente las lesiones se corresponden
con quistes epidérmicos, localizados a nivel de la
dermis, que contienen queratina laminar ortoqueratósica. Su pared está revestida por un epitelio
plano estratificado 2 ó 3 capas.2,4 Un hallazgo
común en la MP es la presencia de un infiltrado
inflamatorio periquístico, compuesto predominantemente por linfocitos, que posiblemente se correlacione con la presencia de eritema.1,4,10
Los diagnósticos diferenciales a tener en cuenta
dependen de la localización de las lesiones, pero se
pueden mencionar al xantelasma, al nevo comedoniano y a la mucinosis folicular, entre otras afecciones.2,11
Su evolución suele ser crónica y ocasionalmente
remite de manera espontánea.2,12
No existe una modalidad terapéutica óptima para
la MP.10,11 La elección del tratamiento está condicionada, en parte, por la profundidad del QM en la
dermis y por la presencia o no de infiltrado inflamatorio.11 Cuando los quistes se disponen superficialmente, en general, responden a la extracción
mecánica o al uso de tretinoína tópica, aunque si
su profundidad es mayor, las opciones terapéuticas
abarcan electrocoagulación, cirugía, criocirugía, terapia fotodinámica, dermoabrasión y láser de
CO2.4,11 Cuando el infiltrado inflamatorio es denso,
se aconseja la administración de minociclina vía
oral.1,5,11
Presentamos un caso pediátrico de MP a nivel del
rostro con buena respuesta al tratamiento con
retinoide tópico. Consideramos que, si bien se trata
de un proceso benigno y asintomático, puede
26
Dermatología Pediátrica Latinoamericana
Volumen 11 • Número 1. Enero/Abril 2013
comunicación de casos
Milia en placa
Ruth Alperovich et al.
provocar un trastorno estético, que motiva la con-
sulta y demanda un adecuado tratamiento.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Muñoz-Martínez R, Santamarina-Albertos A, Sanz-Muñoz C, Miranda-Romero A. Milia en plaque. Actas Dermosifiliogr. 2013; 104:63840.
2. Berck DR, Bayliss SJ. Milia: a review and classification. J Am Acad Dermatol. 2008; 59:1050-63.
3. Cota C, Sinagra J, Donati P, Amantea A. Milia en plaque: three new pediatric cases. Pediatr Dermatol. 2009; 26:717-20.
4. Boggio P, Alperovich R, Spiner RE, Schroh R, Hassan M. Periorbital bilateral milia en plaque in a female teenager. Dermatol Online J.
2012; 18:11.
5. Hallaji Z, Akhyani M, Jamshidi S, Modabbernia A, Kamyab K. Bilateral retro-auricular milia en plaque: a case report and review of the
literature. Dermatol Online J. 2010; 16:12.
6. Bridges AG, Lucky AW, Haney G, Mutasim DF. Milia en plaque of the eyelids in childhood: case report and review of the literature.
Pediatr Dermatol. 1998; 15:282-4.
7. Lee DW, Choi SW, Cho BK. Milia en plaque. J Am Acad Dermatol. 1994; 31:107.
8. Bouassida S, Meziou TJ, Mlik H, Fourati M, Boudaya S, Turki H, et al. Childhood plaque milia of the inner canthus. Ann Dermatol
Venereol. 1998; 125:906-8.
9. Dogra S, Kanwar AJ. Milia en plaque. J Eur Acad Dermatol Venereol. 2005; 19:263-4.
10. Fujita H, Iguchi M, Kenmochi Y, Fukunaga Y, Asahina A. Milia en plaque on the forehead. J Dermatol. 2008; 35:39-41.
11. van Lynden-nan Nes AM, der Kinderen DJ. Milia en plaque successfully treated by dermabrasion. Dermatol Surg. 2005; 31:1359-62.
12. Zhang RZ, Zhu WY. Bilateral milia en plaque in a 6-year-old Chinese boy. Pediatr Dermatol. 2012; 29:504-6.
27
Descargar