Don Tito...El líder de la selva

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Don Tito...El líder de la selva
En un mágico paraíso llamado Amazonas, exuberante en animales y plantas, de
extensos y caudalosos ríos, reinaba la tranquilidad y armonía; allí vivía Don Tito, el jaguar
americano de amarillenta piel, anillos negros, pecho y abdomen blanquecino. Un ser de alma
pura que sólo se interesaba por el bienestar de sus amigos, era la máxima autoridad de esta
selva húmeda tropical. A su lado siempre estaba katu, su más fiel amigo, un garzón soldado,
que impresionaba con su metro treinta de altura, su cuello de botella, su largo y grueso pico;
se encargaba de la vigilancia y seguridad de los demás animales.
Juntos regían el orden dentro de los territorios, pero en los últimos meses surgió un
grave problema: "El hombre". Este era conocido por ellos como el ser de dos patas, de figura
y actitud muy diferente al de todos los demás animales que habitaban allí. Un ser destructor e
invasor que sólo pensaba en su bienestar, en abastecer sus necesidades arruinando el medio
con la tala de bosques, tráfico de animales extraordinarios, contaminación atmosférica y caza
de especies con trampas diseñadas para capturar, herir o matar.
Don tito no podía permitir que esta destrucción continuara, alguien estaba acabando con
su hábitat y el de sus amigos. Por eso, decidieron visitar diariamente a sus vecinos para
cerciorarse de que estuvieran fuera de peligro, y que el hombre no hubiese llegado a terminar
con todo. Pero como el lugar era tan grande, de muchos miles de kilómetros, se dividieron por
zonas. El primer lugar que visitaron fue la isla Santa Sofía, donde habitaban los "peludos" de
la selva, un inmenso grupo de micos acróbatas que se encargaban de distraer a su público con
piruetas que realizaban en árboles gigantes, los cuales llegaban a medir entre 30 a 40 metros
de altura.
Su travesía continuó por los ríos Negro y Branco, ricos en nutrientes, donde visitaron al
gigante piraracú, perseguido siempre por la piraña mordelona; también saludaron al perezoso
y al tragón manatí, a cuica la zarigüeya acuática, consentida por los pobladores, por ser una
especie que sólo vive en el amazonas; la anguila bromista, que los asustó con sus sorpresivas
descargas eléctricas. Por último, saludaron a charapa la tortuga arraú, famosa y conocida por
ganarle la carrera a una liebre en otro cuento.
Finalizaron su recorrido en el mar amazonas, como Don Tito suele llamar a este
inmenso y caudaloso río, habitación de los gruñones caimanes yacarás, las hambrienta
babillas y las astutas serpientes, que nunca faltaban a los espléndidos espectáculos que ofrecía
el delfín rosado todos los viernes. Todos eran amigos, incluso la enorme y tranquila anaconda
Salvana de 8 metros.
En cada sitio que visitaron, don tito y katu, alertaron a sus amigos sobre el peligro que
ellos corrían por culpa del ser de dos patas. Katu envió con la tortuga veloz una carta a todos
los animales de la selva para que conocieran el plan que Don Tito muy cuidadosamente había
diseñado. Todos los animales asistieron a la reunión, sólo quedaba esperar que llegara el
jueves de caza, día en que el ser de dos patas atacaba indiscriminadamente a los animales de
la selva. " Y así fue", el tan esperado día llegó.
Los animales atacaron todos unidos: las serpientes lo sujetaron a los árboles; los pumas
lo rodearon; los monos sujetaban su cabeza, y al menor movimiento, la anguila, descargaba
sus 550 voltios. El hombre por primera vez sintió miedo de morir, estaba amenazado y sin
derecho a defenderse, su impotencia era tan grande que empezaron a brotar lágrimas de sus
ojos, su llanto era incontrolable. Don Tito, con voz serena pero fuerte, le dijo:
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¿No se da cuenta que nosotros necesitamos vivir en paz?, y no en función suya. Debe
saber que si acaba con nosotros usted también morirá de hambre. Sí#puede comer y producir,
pero tome lo necesario, no nos explote, sea conciente del daño que nos causa, cada vez hay
más especies en extinción.
Cuando fue dejado en libertad, el ser de dos patas había reflexionado de su error, pidió
perdón a los animales y prometió cuidarlos, tomando lo necesario, cultivando más árboles y
respetando el territorio de cada especie.
El ser de dos patas sabe que entre la selva siempre habrá unos ojos que lo vigilan. Por
eso, sus actos e intenciones son de amor y conciencia, por una tierra rica y majestuosa que es
llamada el pulmón del mundo.
Institución
Educativa
Seudónimo
Nombre
estudiante
Docentes
Ciudad
o municipio
Manuel Elkin
Patarroyo
Yunavi
Ingrid Yurani
Avila
Miryan Ríos,
Lyda Nuñez,
Edwin Trujillo y
Marlene Enciso
Girardot
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