Poder Judicial de la Nación CONTRABANDO DE IMPORTACIÓN AGRAVADO. ARTS.864 INC. B y .865 INC. F EN FUNCIÓN DEL ART. 863 del CÓDIGO ADUANERO. SOBRESEIMIENTO. FALTA DE ACREDITACIÓN DE LOS TÉRMINOS DE LA DENUNCIA. EN EL CASO: primeramente es preciso definir al delito de contrabando como aquella “…acción u omisión que a través de la actuación con intención expresa del autor, evita o dificulta el cumplimiento de la función que obligatoriamente debe realizar el servicio aduanero en cuanto al ingreso y egreso de mercaderías al territorio…” (Código USO OFICIAL Aduanero. Comentado y anotado. Jorge Luis Tosi. Ed. Universidad. Buenos Aires, 1997).Más precisamente, el artículo 864 en su inciso B de Código Aduanero, se refiere a los casos en que se intenta lograr, para la mercadería a ingresar, un tratamiento aduanero o fiscal distinto de aquel que corresponde. Abarca tanto la conducta desplegada como acción como aquella que es omisiva, la cual busca impedir o dificultar la actuación del servicio aduanero. Esta acción u omisión delictiva debe efectuarse a través de una diferente declaración sobre la calidad, cantidad y posición arancelaria, lo que solo acarreará un perjuicio fiscal al abonar menos tributos, todo ello con la clara intención del autor de lograr el sometimiento diverso de la mercadería en el control aduanero.Que el artículo 865 inc. F del mismo cuerpo legal, tipifica los agravantes del delito de contrabando en cuestión, señalando que la conducta delictiva debe realizarse mediante la presentación a la autoridad aduanera de documentos adulterados o falsos. En este caso el dolo se ostenta al momento de la presentación ante la autoridad de los mencionados documentos, y se refleja, no en la adulteración o falsificación misma, sino en el conocimiento que posee el autor, de la ilicitud de los instrumentos a presentar.Que aclarado todo lo precedente, corresponde ingresar al tratamiento de la cuestión planteada, y para ello es preciso aclarar que en la presente causa se investiga si la conducta de los responsables de la empresa (…), constituyó delito aduanero. Se pretende dilucidar si se trata de un supuesto de incorrecta descripción de las mercaderías ingresadas, y si dicha maniobra tendría por objeto impedir o dificultar el debido control aduanero con el propósito de obtener un tratamiento fiscal distinto al que correspondiere. Que la investigación iniciada por los funcionarios de la Aduana, a posteriori del despacho a plaza y comercialización de la mercadería que ingresara al país la empresa imputada, se produce a consecuencia de la investigación llevada a cabo por la Aduana (…)por la cual se toma conocimiento de la aparente presentación de declaraciones falsas en las facturas y documentos necesarios para verificar la carga. Que la mercadería cuestionada ya había ingresado al país conforme surge de los términos de la denuncia (…). Todo ello demuestra que a la mercadería en cuestión le correspondió “canal verde de selectividad”, lo que implica que dicha carga no estaría sujeta a controles de calidad por parte de los funcionarios aduaneros. Que el hecho de que el organismo aduanero de control no haya realizado en el momento oportuno todos aquellos procedimientos necesarios a efectos de identificar la mercadería ingresada al país, dificulta la realización de medidas probatorias que permitan individualizar la mercadería en cuestión, sin perjuicio de definir ‘prima facie’ que la conducta de los imputados no tuvo por objeto eludir los controles aduaneros.Asimismo, de la declaración testimonial del(…), agente verificador que intervino en el control de la destinación(…) de la firma (…), surge el relato pormenorizado del procedimiento que se debe llevar adelante en caso de que haya “canal rojo de selectividad”. El funcionario explicó que “…abrió selectivamente las cajas y tomó mercadería de cada una para determinar que se tratara de los productos declarados. Esto consistió en extraer una de las mercaderías, de las diferentes cajas y retirando su tapa, observar el interior ya que así se comprobó que es una cobertura de hierro en cuyo interior hay un plástico, que cubre la botella metálica…”. Agregó que “…en el caso de diferir la mercadería con lo declarado, su obligación era denunciar el hecho porque se trataría de una declaración inexacta…”. Que…lucen las copias certificadas de las actuaciones administrativas labradas por la Aduana (…), ratificadas por la Dirección General de Aduanas, por las que se dispone el sobreseimiento de la empresa (…), respecto a la infracción aduanera investigada.Que teniendo en cuenta lo precedente, las medidas de prueba que fueran ordenadas y producidas, es que esta Sala entiende que no es posible tener por acreditados los términos esgrimidos en la denuncia, ni constatar las supuestas discrepancias entre los recipientes contenedores realmente importados y los declarados, con la consecuente diferencia en la tributación; todo lo cual habilita a confirmar el auto de sobreseimiento dictado por SALA PRIMERA.Expte.5634/I,“S, H.. el magistrado a quo.”Dres.COMPAIRED y REBOREDO. 9/2/2012. S.A.I.C. s/ Pto. Contrabando”. Juzgado Federal N° 1 de La Plata. PODER JUDICIAL DE LA NACIÓN //Plata, 9 de febrero de 2.012. R.S. I T74 f*14 Y VISTOS: Para resolver en la presente causa registrada bajo el nro. 5634/I caratulada “S. H. S.A.I.C. s/ Pto. Contrabando” procedente del Juzgado Federal N° 1 de La Plata y; -------------------------------------------------CONSIDERANDO: I. Que llegan las presentes actuaciones a este Tribunal de Alzada, en virtud de encontrarse apelada la resolución (…), por la cual se Poder Judicial de la Nación decreta el sobreseimiento C. E. S., M. R. S. y D. H. P., en orden a los delitos de contrabando de importación agravado, previsto en los artículos 864 inc. B y 865 inc. F en función del artículo 863 del Código Aduanero. Los recursos de apelación son: I. A) El interpuesto (…) por el señor Fiscal Federal, (…), mantenido e informado en esta instancia por el señor Fiscal General (…). Que a través de los agravios esgrimidos el titular de la vindicta pública señala que del análisis de las pruebas colectadas se “…advierte…la insuficiencia de las mismas en orden a tener por acreditados, con el grado de certeza negativo exigible en este estadio procesal, la inexistencia de delito o infracción aduanera alguna, en la cual se sustentara el sobreseimiento dictado…”. Manifiesta que “…si bien se han realizado algunas USO OFICIAL de las diligencias instructorias de las que fueran señaladas por este Ministerio Público Fiscal en oportunidad de recurrir el dictado del anterior sobreseimiento…no han sido efectuadas otras que revisten suma importancia, como…solicitar a las distintas empresas adquirentes del producto, la remisión de copias de las facturas de adquisición del producto a S. H. …, ordenar la intervención de las facturas de compra por parte de ésta última, a los fines de efectuar el correspondiente cotejo tendiente a determinar la identidad del producto y su real posición arancelaria, que es lo que, en definitiva resulta ser el objeto procesal de estos actuados…”. Por último entiende que “…el fundamento medular del señor Juez de Instrucción a efectos de desincriminar a los imputados, es el testimonio de un funcionario de la aduana, que a modo de apreciación personal, -toda vez que no fue sustentado en documento o norma alguna- manifestó que a su juicio no existía infracción o delito alguno, lo que resulta claramente, harto insuficiente…”, todo lo cual demuestra que el sobreseimiento dictado resulta prematuro. Que en la oportunidad prevista por el artículo 454 del C.P.P.N. el señor Fiscal General ante esta Alzada, doctor (…) manifiesta que comparte en su totalidad los argumentos esgrimidos por su par de primera instancia, sin perjuicio de agregar que “…no se han agotado las posibilidades de investigación en estos actuados, y prevalecen incertidumbres cuyo despeje será sumamente relevante para la determinación de la eventual responsabilidad penal de los encartados…”; razón por la cual solicita se “…revoque el auto en crisis, en punto al sobreseimiento decretado…por ser prematuro, disponiendo que el Juez de grado complete la investigación, ordenando nuevas diligencias tendientes a la verificación del hecho que se investiga…”. I. B) El recurso interpuesto (…), por los doctores J. L. V. C. y A. C. en representación de la parte querellante, Administración Federal de Ingresos Públicos, Dirección General de Aduanas, recurso que es informado en esta instancia (…). Que a través de los argumentos esgrimidos la querellante manifiesta que “…el dictado del sobreseimiento respecto de todas las personas imputadas en el delito de contrabando torna imposible continuar con la instrucción, no obstante no haber profundizado la pesquisa tendiente a averiguar la verdad y haber valorado parcialmente los elementos probados en la causa…”. Señala que en “…la resolución que se apela … se repiten literalmente los argumentos oportunamente esgrimidos para el sobreseimiento, considerados insuficientes por parte de la Cámara Federal de Apelaciones, y no analiza en ningún momento las nuevas pruebas aportadas, limitándose a decir que ‘no ha hecho variar el temperamento que había adoptado’…”. Pone de manifiesto que el resolutorio dictado “…debe revocarse en tanto sigue sin arribarse a un estado de certidumbre negativa que permita concluir, como hace el juez de grado, en que no se ha verificado el accionar típico de contrabando…”. Puntualiza que se omiten valorar elementos probatorios “…como son las facturas en las cuales S. H. S.A.I.C. vende la mercadería, declarada en la Aduana como botella metálica, como termos de acero. Esta prueba, elocuente a efectos de dilucidar la maniobra denunciada, continúa siendo desmerecida infundadamente por el juez de grado…”. Agrega, que también “…se omite analizar la cuestión del valor de la mercadería, en tanto el valor de compra de la mercadería en cuestión al exportador difiere notoriamente al valor de venta en el mercado interno al punto de ser considerado irrisorio en la denuncia…(agregando que el a quo ha rechazado)…el allanamiento solicitado por el fiscal…(descartando)…toda pesquisa tendiente a recolectar pruebas, como las que puedan surgir de los asientos contable de la firma…”. Por otra parte, advierte que “…la resolución del Sumario Contencioso de la Aduana de Gualeguaychú en nada desvirtúa la posterior denuncia penal que se realiza tras la investigación en sede Poder Judicial de la Nación aduanera… Por el contrario, en la mencionada resolución se condena a la empresa transportista (no a S. H. S.A.I.C. por los alcances de la responsabilidad en el régimen de transito…) por cuanto de la verificación efectuada surgió que la mercadería transportada eran termos de acero y no botellas metálicas, lo que hace al fondo del asunto llevado a investigación y por tanto debería considerarse en el acervo probatorio para llegar a la verdad de los hechos y no utilizarse erróneamente para desincriminar a los imputados…”. Agrega que “…el juez de grado insiste en entender que la diferencia entre las mercaderías en cuestión –botellas metálicas y termos de acero- es ‘tan sutil’ que el servicio aduanero no la advirtió…”. Señala que “…es el servicio aduanero el que realiza la denuncia penal precisamente por advertir esta diferencia entre las mercaderías, cuando el antecedente de la USO OFICIAL Aduana de Gualeguaychú …se basa en esta diferencia y cuando la tributación divergente de ambas mercaderías denota una diferencia entre ellas palmaria…”. Por último, sostiene que “…las circunstancias de hecho y derecho no se han modificado, la fundamentación de la resolución apelada es solo aparente toda vez que se aparta de las constancias acreditadas centrándose tan solo en un prueba y no se realiza el más mínimo análisis de los argumentos vertidos por el servicio aduanero…clausurando toda la investigación mediante un razonamiento ilógico e incompleto…”. II. Que (…) se presenta el doctor O. R. L. V. en representación de C. S., R. S. y D. H. P., e informa conforme el artículo 454 del C.P.P.N., solicitando se confirme la decisión adoptada en primera instancia. Entre sus argumentos manifiesta que “…la denunciante sostiene que mis defendidos son responsables del delito de contrabando previsto y penado por el artículo 864 inc. b) del Código Aduanero…delito éste calificado por el inc. f) del artículo 865 del mismo Cuerpo Legal...”. Señala que tanto en el requerimiento fiscal como el denuncia que se presentara “…se omite señalar en que forma se eludió el control aduanero si la mercadería importada a consumo fue puesta a disposición de la aduana acompañando la documentación correspondiente, lo que es sencillo demostrar recurriendo a los despachos de importación mencionados en la denuncia, y así comprobar que a los mismos les correspondió canal verde de selectividad, lo que significa que no tuvieron control aduanero en lo que hace a la calidad declarada, porque la aduana declino realizar el control que le corresponde al momento de la importación y exportación de mercadería, lo que no significa que se eludió el control…”. Agrega que “…no solo no existe el delito denunciado sino que tampoco concurre la …agravante, toda vez que las facturas comerciales, a las que muy ligeramente se tildo de falsas, circunstancia ésta que nunca el señor fiscal intento demostrar…”. Por último destaca que por indicación de V.E. “…se realizaron una serie de gestiones tendientes a relacionar la mercadería secuestrada y ofrecida como prueba de un supuesto hecho ilegal que culminaron con el informe del señor Jefe de verificación de la aduana La Plata, quien con el elemento secuestrado a la vista y el requerido a la aduana de Gualeguaychú, se expidió sobre que el objeto presentado como prueba al momento de la denuncia corresponde a la mercadería documentada en la aduana La Plata por mi defendida y que la que se remitiera por la aduana de Gualeguaychú no es similar a la secuestrada…”. III. Que mencionados los agravios, es preciso señalar que las presentes actuaciones se inician en virtud de la denuncia formulada por el Jefe de la División Control y Procedimientos Externos de la región aduanera La Plata, por el presunto ingreso en forma irregular de termos, a través de importaciones que la firma “S. H.” habría documentado ante la aduana de La Plata con la intervención del despachante D. P. Que la denuncia se fundó en que la aduana de Gualeguaychú había comprobado en una operación de tránsito de importaciones provenientes de Uruguay, que la empresa de referencia habría declarado botellas metálicas, cuando en realidad se trataba de termos con ampollas de acero inoxidable, todo lo cual se habría realizado con la única finalidad de eludir el pago de los derechos antidumping que existen sobre este tipo de mercaderías. Que por ello, se presenta en el domicilio de la empresa un representante de la delegación aduanera solicitando la mercadería importada, la cual, conforme informara el contador de “S. H. S.A.I.C.”, ya había sido comercializada, aportando los duplicados de las facturas emitidas a efectos de convalidar sus dichos. Que la Administración Nacional de Aduanas al advertir que las mercaderías comercializadas provenían de las operaciones de importación que fueran cuestionadas, formula denuncia penal por la presunta comisión del delito de contrabando agravado, previsto en los artículos 864 inc. B y 865 inc. F del Código Aduanero. Poder Judicial de la Nación Que (…) obra el requerimiento de instrucción fiscal que impulsa la acción penal, sobre la base de que existe una discordancia entre lo declarado en las destinaciones con lo que realmente fue importado y vendido en el comercio interno; agregando que dicha maniobra tuvo por objeto eludir la aplicación de la Resolución 16/2004 del Ministerio de Economía y Producción de la Nación (correspondiente al pago de derechos antidumpig y compensatorios), y con ello darle a la mercadería ingresada (con facturas aparentemente falsas) un tratamiento fiscal diferente y así evitar o dificultar el debido control aduanero sobre la importación. IV. Que primeramente es preciso definir al delito de contrabando como aquella “…acción u omisión que a través de la actuación con intención expresa del autor, evita o dificulta el cumplimiento de la función USO OFICIAL que obligatoriamente debe realizar el servicio aduanero en cuanto al ingreso y egreso de mercaderías al territorio…” (Código Aduanero. Comentado y anotado. Jorge Luis Tosi. Ed. Universidad. Buenos Aires, 1997). Más precisamente, el artículo 864 en su inciso B de Código Aduanero, se refiere a los casos en que se intenta lograr, para la mercadería a ingresar, un tratamiento aduanero o fiscal distinto de aquel que corresponde. Abarca tanto la conducta desplegada como acción como aquella que es omisiva, la cual busca impedir o dificultar la actuación del servicio aduanero. Esta acción u omisión delictiva debe efectuarse a través de una diferente declaración sobre la calidad, cantidad y posición arancelaria, lo que solo acarreará un perjuicio fiscal al abonar menos tributos, todo ello con la clara intención del autor de lograr el sometimiento diverso de la mercadería en el control aduanero. Que el artículo 865 inc. F del mismo cuerpo legal, tipifica los agravantes del delito de contrabando en cuestión, señalando que la conducta delictiva debe realizarse mediante la presentación a la autoridad aduanera de documentos adulterados o falsos. En este caso el dolo se ostenta al momento de la presentación ante la autoridad de los mencionados documentos, y se refleja, no en la adulteración o falsificación misma, sino en el conocimiento que posee el autor, de la ilicitud de los instrumentos a presentar. V. Que aclarado todo lo precedente, corresponde ingresar al tratamiento de la cuestión planteada, y para ello es preciso aclarar que en la presente causa se investiga si la conducta de los responsables de la empresa “S. H.”, constituyó delito aduanero. Se pretende dilucidar si se trata de un supuesto de incorrecta descripción de las mercaderías ingresadas, y si dicha maniobra tendría por objeto impedir o dificultar el debido control aduanero con el propósito de obtener un tratamiento fiscal distinto al que correspondiere. Que la investigación iniciada por los funcionarios de la Aduana, a posteriori del despacho a plaza y comercialización de la mercadería que ingresara al país la empresa imputada, se produce a consecuencia de la investigación llevada a cabo por la Aduana de Gualeguaychú por la cual se toma conocimiento de la aparente presentación de declaraciones falsas en las facturas y documentos necesarios para verificar la carga. Que la mercadería cuestionada ya había ingresado al país conforme surge de los términos de la denuncia (…). Todo ello demuestra que a la mercadería en cuestión le correspondió “canal verde de selectividad”, lo que implica que dicha carga no estaría sujeta a controles de calidad por parte de los funcionarios aduaneros. Que el hecho de que el organismo aduanero de control no haya realizado en el momento oportuno todos aquellos procedimientos necesarios a efectos de identificar la mercadería ingresada al país, dificulta la realización de medidas probatorias que permitan individualizar la mercadería en cuestión, sin perjuicio de definir ‘prima facie’ que la conducta de los imputados no tuvo por objeto eludir los controles aduaneros. Asimismo, de la declaración testimonial del señor A. A.R. H., agente verificador que intervino en el control de la destinación (…)de la firma “S. H.” (…), surge el relato pormenorizado del procedimiento que se debe llevar adelante en caso de que haya “canal rojo de selectividad”. El funcionario explicó que “…abrió selectivamente las cajas y tomó mercadería de cada una para determinar que se tratara de los productos declarados. Esto consistió en extraer una de las mercaderías, de las diferentes cajas y retirando su tapa, observar el interior ya que así se comprobó que es una cobertura de hierro en cuyo interior hay un plástico, que cubre la botella metálica…”. Agregó que “…en el caso de diferir la mercadería con lo declarado, su Poder Judicial de la Nación obligación era denunciar el hecho porque se trataría de una declaración inexacta…”. Que (…) lucen las copias certificadas de las actuaciones administrativas labradas por la Aduana de Gualeguaychú, ratificadas por la Dirección General de Aduanas, por las que se dispone el sobreseimiento de la empresa “S. H.”, respecto a la infracción aduanera investigada. Que teniendo en cuenta lo precedente, las medidas de prueba que fueran ordenadas y producidas, es que esta Sala entiende que no es posible tener por acreditados los términos esgrimidos en la denuncia, ni constatar las supuestas discrepancias entre los recipientes contenedores realmente importados y los declarados, con la consecuente diferencia en la tributación; todo lo cual habilita a confirmar el auto de sobreseimiento dictado USO OFICIAL por el magistrado a quo. POR ELLO ES QUE SE RESUELVE: Confirmar la resolución (…), por la cual se dispone el sobreseimiento de C. E. S., M. R. S. y D. H. P. en orden al delito de contrabando de importación agravado, previsto y reprimido en los artículos 864 inc. B y 865 inc. F del Código Aduanero. Regístrese, notifíquese y devuélvase.Fdo.Jueces Sala I Dres. Carlos Román Compaired.Julio Víctor Reboredo. Ante mí. Dr.R. A. Lemos Arias.Secretario..